Salvatore Ferragamo
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Salvatore Ferragamo
06Mr05_106-109 FERRAGAMO 26/4/05 A B S O L U T E 12:48 Página 106 R E P O R T A J E La zapatería ha ido transformándose poco a poco de oficio artesanal con fuerte tradición familiar a negocio industrial y, por tanto, con trato más impersonal. Pero siempre, aunque se puedan hacer miles de pares iguales, existe tras ellos el trabajo de un ideólogo que realiza el prototipo. Si ha habido un zapatero que haya destacado por el talento de sus diseños ése es Salvatore Ferragamo, un italiano que brilló tan fuerte como las estrellas de Hollywood que lucieron sus piezas. Marilyn Monroe, 1962. Massimo Ferragamo, líder actual del emporio, pagó en una subasta 48.300 dólares por un par de zapatos diseñados por Salvatore Ferragamo y que Marilyn Monroe llegó a utilizar en varias ocasiones. El par pasó así a formar parte de la recopilación del museo florentino dedicado plenamente a su padre. 106 ABSOLUTE MARBELLA 06Mr05_106-109 FERRAGAMO 26/4/05 12:49 Página 107 A B S O L U T E R E P O R T A J E Zapatos de salón, 1956. Creados para Marilyn Monroe en la película Bus Stop. Salvatore Ferragamo Zapatero de estrellas fama con la que sus hijos han montado todo un imperio de la moda – en el que ya no se realizan únicamente zapatos sino corbatas, joyas, maletines… y un sin fin de complementos –, cuando desembarcó en Estados Unidos con sólo 16 años no era más que un humilde emigrante que había aprendido en Nápoles el oficio. Con esfuerzo y altas dosis de talento montó su propio negocio y consiguió el tantas veces mencionado “sueño americano”. Sus originales diseños atraparon la atención de las estrellas del incipiente Hollywood y éstas acabaron siendo, no sólo sus mejores clientas sino sus más valiosas promotoras. Su colaboración con el cine comenzó con la confección de botas para películas de vaqueros así como sandalias para las producciones épicas de griegos y romanos. Cuando en 1923 se decidió a abrir su primera tienda para modelos hechos a mano comenzó a recibir visitas de actores y actrices que rápidamente se enamoraron de la belleza y comodidad de su trabajo. Así es como acabó siendo bautizado “el zapatero de las estrellas”. Salvatore Ferragamo, 1955. Foto de Locchi REPORTAJE ROSA B. CASTAÑO IMÁGENES CORTESÍA DE MUSEO DEL PALACIO DE BELLAS ARTES DE MÉXICO U no de los elementos del vestir que ha acompañado al hombre en su desarrollo hacia una vida civilizada es el calzado. Sean zapatos, botas, escarpines, zuecos o sandalias, los pies han necesitado de una base sobre la que apoyarse para poder atravesar mil y un caminos. Cuanto más conocimientos atesoraban los pueblos que los llevaban puestos, más sofisticados se volvían los modelos ideados. Y cuanto más podían pagar sus futuros usuarios, más lujosos eran los materiales empleados en su manufactura. Algo que no ha variado un ápice en la industria de la actualidad. Pero, si hay algo que el calzado ha ganado en su devenir es el sello de identidad de su creador. De artesanía totalmente anónima, inserta en lo gremial, los zapatos han pasado a tener una marca o una firma individual a la que atribuir su éxito. Es decir, los valores funcionales y estéticos de este producto específico para pies tienen como añadida etiqueta de garantía el nombre y apellidos de su autor. Ejemplo de ello son Manolo Blahnik, el creador canario que puede presumir de ser aclamado por Madonna, Kate Moss o Claudia Cardinale; John Lobb, el virtuoso inglés conocido como “el zapatero de los reyes”, cuyos herederos han vestido los pies del príncipe Carlos de Inglaterra o del emperador de Etiopía; o la sevillana Pilar Burgos, que hace furor entre las señoras pudientes que lucen con orgullo sus colecciones en fiestas y bodas. EL TALENTO DE LA ADAPTACIÓN Su éxito le llevó a tener más demanda de la que podía satisfacer por lo que, en 1927, decidió retornar a su querida Italia donde, además, pensó que podría encontrar mano de obra más cualificada para el volumen de pedidos comprometidos. Sus talleres florenti- DE LA CABEZA A LOS PIES De todos los artesanos del calzado hay uno que ha pasado indiscutiblemente a la posteridad con mayúsculas: Salvatore Ferragamo. Aunque hoy día es reconocido mundialmente como uno de los grandes talentos de la zapatería del siglo XX, Sandalia, 1935-36. Modelo creado para Carmen Miranda. ABSOLUTE MARBELLA 107 06Mr05_106-109 FERRAGAMO 26/4/05 A B S O L U T E 12:49 Página 108 R E P O R T A J E Sueños que caminan Sandalia 1936-1939. Mimbre filipino tejido y teñido en varios colores Sandalia 1955-1956. Satín bordado con diseños florales en hilos de seda multicolor. Modelo creado para Sophia Loren Sandalia invisible, 1947 Con esta sandalia Ferragamo recibió el premio Neiman Marcus lorencia acoge en el Museo Salvatore Ferragamo, ubicado en el Palazzo Spini Feroni – una de sus antiguas tiendas –, una colección permanente dedicada a su trabajo, así como piezas del vestir antiguas de los siglos XVIII y XIX. Este museo atesora más de diez mil modelos del artista, entre los que se encuentran su memorable tacón stiletto, que hiciera famoso Marilyn Monroe, o sus sandalias invisibles realizadas con tiras de hilo de nylon, por las que recibió el afamado premio Neiman Marcus de la moda. Parte de esta colección ha cruzado el Atlántico, gracias a sus gestores, y se encontrará expuesta hasta el día 5 de mayo en la Sala Internacional del Palacio de Bellas Artes de México. Con el sugerente título de Sueños que caminan. Salvatore Ferragamo 1898-1960, así como con un catálogo ilustrado de la vida y obra del homenajeado, se rinde de nuevo culto a un verdadero genio del arte de la zapatería. F Sandalia, 1938-1939. Parte superior en terciopelo negro y bordes en piel de becerro plateado y dorado. Suela de madera y plataforma de corcho. 108 ABSOLUTE MARBELLA 06Mr05_106-109 FERRAGAMO 26/4/05 12:49 Página 109 A B S O L U T E R E P O R T A J E Lo ret ta Yo un g, co ns an da lia sd eF err ag am o epburn udrey H o, con A Ferragam nos funcionaron muy bien, entre otros aspectos, porque consiguió adaptar su línea de producción a técnicas especializadas (sin renunciar a la vertiente manual de su calzado). Pronto comenzó a exportar a los Estados Unidos al tiempo que capturaba nueva clientela selecta entre la nobleza internacional, las esposas de los magnates industriales y las figuras del mundo político. Cuando el crac de 1929 asoló la economía norteamericana el inteligente artesano sobrevivió reforzando su producción nacional. Incluso, aún sufriendo a mediados de los años treinta las sanciones económicas contra el gobierno de Mussolini, el zapatero supo salir airoso aplicando a sus creaciones materiales que seguía teniendo disponibles en Italia, tales como el corcho, la ma- dera, el hilo de metal, la rafia, el fieltro o las resinas. Con su sabia combinación consiguió sustituir el cuero y el acero que el embargo le impedía obtener. Su tesón e imaginación le llevaron a convertirse en un icono de la reconstrucción italiana en la época de la posguerra. Recorrido el trayecto de la distancia histórica, Ferragamo ha pasado a ser también un maestro en la difícil combinación del arte y la empresa y, por supuesto, un ejemplo a estudiar en el modelado creativo de la zapatería. ❚ M od el o Sandalia 1938. Modelo creado para la princesa india, la Maharani de Cooch Beahr. cr Zap ea do ato pa s de ra S M aló ar n ily , 1 9 n M 59on 60 ro . e. Ferrag amo, c on Sop hia Lo ren ABSOLUTE MARBELLA 109