El viaje interno

Transcripción

El viaje interno
das analogías para hacerlo. Ya que la
mente física, astral y causal han quedado
atrás en los mundos inferiores, ya no nos
sirven aquí. Esta es una experiencia del
alma. El plano supra causal también tiene su propia Luz y Sonido característicos para ayudar al alma a reconocer dónde está. En este plano, despojándose del
anterior olvido de su verdadera naturaleza, el alma siente verdaderamente: “Soy
de la misma esencia de Dios”.
Sin embargo, el alma comprende,
que aún queda un velo que la separa del
Señor. Surge en el alma un fuerte deseo
de reunirse con su Amado. No quiere
demorarse en la región supra causal. El
llamado del Señor es intenso. El alma
desea aventurarse más lejos, para llegar
a los brazos de su amado Señor que la
espera. Siguiendo adelante, finalmente,
ella entra en la región puramente espiritual de Sach Khand o Sat Lok (La Verdadera Región), su Hogar Eterno. Con
una intensidad mucho mayor que la que
siente un amante mundano por su amada, el alma se lanza en los brazos del
Señor. Como las limaduras de hierro son
atraídas hacia un imán, así mismo, el
alma es atraída a la reunión con Dios. La
bienaventuranza del Hogar Eterno alcanza una intensidad más allá de la concepción humana. El alma entra en un estado
de éxtasis eterno cuando se funde con
Dios en esta región. Aquí, el alma experimenta su verdadera naturaleza con regocijo y alborozo. La invade una sensación de libertad y queda maravillada, en
un estado de puro deleite. Aunque ésta
es una analogía pálida, imagínense la
sensación que se siente de libertad y paz
cuando uno sale de vacaciones. Podemos
apagar las alarmas de nuestros relojes,
esconder nuestras agendas y simplemente gozar de un estado de relajación y de
placer sin límite de tiempo. Aquí el alma
encuentra su descanso eterno de los dolores, sufrimientos, tentaciones y desilusiones de las regiones inferiores. Aquí
no existe el dolor, ni la tristeza, ni la
muerte. Todo es regocijo, amor y felicidad perpetua. Las almas gozan eternamente de su unión con el Señor. El alma
ha sido dotada de poder. Entramos en un
estado de sabiduría divina sin límites, de
amor sin condiciones, de éxtasis, de comunión, de valentía absoluta y de inmortalidad. Aquí existimos como almas
completamente realizadas. §
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Hablemos del Músico Supremo
y del Vino Divino, y no ahondemos
en los secretos del mundo;
Nadie jamás ha podido revelarlos,
y nadie a través de la filosofía lo hará
El viaje interno
El viaje interno comienza cuando separamos el alma del cuerpo físico y entramos
internamente en la meditación. Allí, en el umbral del primer plano espiritual, somos saludados por la forma radiante interna de nuestro Maestro, quien nos protege y nos guía en el camino hacia nuestra reunión con Dios. En este extracto conmovedor, Maharaj Ji nos da un vislumbre de lo que le aguarda al alma cuando
avanza en ese viaje divino, guiada por la forma espiritual interna de su Maestro.
Un viaje de indescriptible éxtasis
por Sant Rajinder Singh
E
l viaje interior
es un viaje de
indescriptible éxtasis. El alma siendo una gota de
Dios, está hecha de
su misma esencia. Su
estado original es el
amor, la bienaventuranza, y la total conciencia. Cuando
separamos nuestra
alma del cuerpo y
la mente, y nos damos cuenta de
Satsang Semanal, Semana # 19
nuestro verdadero ser,
experimentamos este
estado embriaguez
pura. El Maestro
está en sintonía con
este poder de amor y
dicha eterna. Cuando
nos sentamos en su presencia experimentamos
el néctar del amor
divino que emana
de él. Esto nos da
una prueba de la
dicha constante,
aún más grande,
que nos aguarda en los reinos espirituales. Esta energía gozosa que
irradia de él, no se parece a ninguna alegría que hayamos tenido en
este mundo. Es para nosotros un
faro de luz que nos dice, que hay
más en la creación de lo que se
puede captar con la simple mirada.
Nuestra alma es atraída hacia esta
irradiación magnética divina porque
es de su misma esencia. Ella desea
regresar de nuevo al océano del
amor de donde vino. De esta mane-
ra, somos motivados para seguir
adelante en el sendero espiritual,
buscando cada vez más esta delicia
interior.
Encontramos alegría al contactar la Luz y el Sonido internos en
la meditación y queremos estar
más y más absortos en este estado. Este deseo continuo es la causa
de que nuestra alma quiera ir más y
más hacia lo profundo, internamente. A cada paso encontramos cada
vez más dicha eterna. §
“Los Santos y los fundadores de las diversas
religiones viajaron ellos mismos, a los reinos superiores y enseñaron el método de viajar
internamente a sus seguidores. Con el tiempo,
las enseñanzas internas, transmitidas, por lo
general, del profesor al estudiante a través de
la palabra, se han perdido. Solo quedan las
enseñanzas externas, que contienen referencias
alegóricas al lado interno. A través de las
edades, existieron siempre almas iluminadas
que revivieron e impartieron las enseñanzas
esotéricas. Cada uno de ellos describió el viaje
interno. No obstante que el lenguaje en el que
hablaron fue distinto, las experiencias descritas
son idénticas".
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Volumen 11
mogonía desde el punto de vista de un
alma que se eleva por encima de la conciencia del cuerpo en la meditación.
Cuando enfocamos nuestra atención
en el tercer ojo, podemos captar la corriente de Luz y Sonido. El alma, absorta en esa corriente, comienza a trascender la conciencia del cuerpo y del mundo. A medida que nos absorbemos en la
luz interna, atravesamos un panorama de
estrellas, la luna y el sol internos y llegamos al portal del reino astral, de donde
fluye la corriente de Luz y Sonido.
Nuestra alma, habiéndose desprendido
de su cuerpo físico, viaja en un cuerpo
más etéreo y liviano, conocido como el
cuerpo astral. La región astral, aunque
no es tan sólida como el plano físico,
tiene muchas características en común
con este mundo, pero en una forma más
sutil y más fina. La luz es más brillante
allí y la maravillosa corriente de Sonido
impregna esta región con su propio sonido característico. Infortunadamente, es
muy fácil que el alma viajera, quede
cautivada y atrapada en esta región. Ya
que está llena de numerosas tentaciones
que son mucho más fáciles de satisfacer
que en el plano físico, porque allí no
estamos sobrecargados con el obstáculo
del cuerpo físico. A la velocidad del
pensamiento, podemos movernos de una
a otra área de la región astral, gratificando un deseo tras otro. De ninguna manera ésta se puede considerar como una
región espiritual y el alma puede perderse en una interminable fuente de placeres. Los santos y místicos tratan de evitar que los discípulos se pierdan en esta
región y prefieren guiar al alma más
allá, hacia los planos superiores, protegiéndolos de estas distracciones.
El alma viaja de la región astral a la
causal. Este plano tiene su propia Luz y
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Sonido característicos, más brillantes y
más melodiosos que los del plano astral.
En esta región el alma funciona con un
cuerpo causal y una mente causal, mucho más etéreos que el cuerpo y la mente astral y allí se unifica con la Mente
Universal. Aunque esta es una perspectiva fascinante, lograr el conocimiento del
funcionamiento de los tres planos inferiores, también conlleva un gran peligro
para el alma. El poder de la mente es tan
grande, que podemos llegar a perdernos
en su conocimiento. Podemos quedar
atrapados en un estado de interminable
creatividad, diseñando nuevos inventos,
creando obras en los campos de la música, la poesía, las bellas artes, la danza, la
escultura y la literatura.
***
Un guía espiritual es necesario para asegurar que el alma no quede prisionera en
esta región. La Mente Universal hace
todos los esfuerzos posibles para mantener al alma entre sus garras, porque la
región siguiente es el reino espiritual, en
el cual el alma recupera la conciencia de
su verdadera naturaleza. Es sólo con la
guía de un viajero interno experimentado como podemos evitar las trampas que
enfrentamos en las regiones astral y causal. El explorador interno que conoce el
camino, nos llevará a una región llamada supra causal en vez de dejar que nos
perdamos en la región causal. En la región supra causal encontramos un lago
de néctar llamado el Mansarovar, en el
cual el alma se sumerge y se desprende
de su cuerpo causal. El alma ahora sólo
está cubierta con su cuerpo supra causal,
que es apenas un tenue velo que la viste.
Esta región está más allá de la mente y
los sentidos. No hay absolutamente ningún lenguaje físico que pueda describir
el reino supra causal. Tenemos sólo páliPag. 7
Sant Darshan Singh Ji Maharaj
Sant Rajinder Singh Ji Maharaj
Descripción de las regiones internas
Sant Rajinder Singh proporciona una descripción de las diversas regiones
espirituales que existen interiormente. Él nos dice: R
" egiones de luz que envuelven a las almas con un amor poderoso nos aguardan dentro de cada uno
de nosotros. Paisajes y sonidos más allá de cualquier cosa que pudiéramos
imaginar residen dentro de nosotros." Estos reinos internos mencionados por
Sant Rajinder Singh, aparecen también registrados en los recuentos de los
grandes santos y místicos que se han invertido y los han experimentado. Estos
exploradores del espacio interno vinieron en diversas épocas y culturas, provenientes de diversos trasfondos religiosos e incluso, describieron lo que experimentaron en diversos idiomas; pero las etapas que encontraron y su relación con lo divino, fueron idénticas. No necesitamos confiar en los recuentos
del pasado para satisfacer nuestra curiosidad. Podemos experimentar también el viaje interno por nosotros mismos mediante el proceso de la meditación.
H
ay una cosmogonía detallada de
las regiones internas de diferentes fuentes. Si comparamos los Puranas
hindúes, los escritos místicos del judaísmo y del cristianismo y los escritos de
los santos del oriente de diversas tradiciones, obtenemos una descripción de
las regiones internas más allá del plano
físico. Aunque los relatos de algunas
religiones tal vez no sean tan detallados,
hay descripciones de partes de los reinos
internos que coinciden con estos escritos. Infortunadamente, muchos de los
santos, místicos, profetas y fundadores
de religiones, no registraron completamente sus experiencias internas, o no las
registraron en absoluto. Algunos santos
y místicos no dejaron ningún escrito.
Por lo tanto, si una religión es fundada
después de que estos santos han abandonado al mundo y si el santo no dejó ningún registro de las regiones internas, los
seguidores bien pueden asumir que ya
que él no dijo nada, estas regiones no
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existen. Otra posibilidad es que los seguidores crean que los
reinos internos sólo
existen según los términos descritos por su religión. Por
ejemplo, en algunas religiones hay descripciones del cielo, pero como sólo se
menciona el cielo y no otro reino espiritual, los seguidores pueden pensar que
la única región que existe es ese plano
celestial en particular.
***
Una recopilación de las regiones internas, tomada de varias fuentes, muestra
una progresión de las regiones descritas
en orden ascendente desde el reino físico hasta el espiritual o descendente desde el reino espiritual hasta el reino físico. En la Biblia, Jesús dice:
En la casa de mi Padre
muchas moradas hay.
(Juan 14:2-3)
A continuación se describe la cosVolumen 11
Lanzamiento al
espacio interior
D
esde que el Sputnik entró en órbita y luego, el ser humano colocó
su pie en la luna, el espacio exterior ha cautivado nuestra imaginación.
Cada año trae nuevos logros en este campo y abre nuevos panoramas en la exploEn esta edad moderna no es sorprenden- ración del espacio. Los astronautas amerite oír hablar de naves espaciales o saté- canos y cosmonautas soviéticos son, sinceramente, los héroes y heroínas de nueslites que son lanzados al espacio.
Sin embargo, aunque los santos y profe- tro tiempo. Aunque hemos hecho un protas desde siempre han estado hablándo- greso notable y alcanzado los planetas
distantes, tristemente, no estamos más
nos sobre sus exploraciones en los
reinos espirituales internos, y aunque los cerca del corazón de nuestro vecino. En
recuentos de las experiencias cercanas a verdad, nos encontramos hoy en la orilla
la muerte se han vuelto comunes, la ma- de un precipicio; un paso en falso, y este
yoría de nosotros creemos que la entra- nuestro hermoso planeta, con sus formas
da a los reinos espirituales internos está innumerables de vida, será destruido. Hay
sólo una manera de lograr la paz y la felicerrada para personas como nosotros.
Sant Darshan Singh nos dice en la lectu- cidad duradera; tenemos que afrontar el
ra siguiente, que aventurarse en el espa- desafío de lo que denomino "el espacio
cio interior es una posibilidad para cada interior." Para viajar en él tenemos que
uno de nosotros. Él nos dice que esta no aprender el arte de cómo elevarnos por
es sólo una posibilidad, sino una necesi- sobre la conciencia del cuerpo físico. Este
cuerpo humano nuestro es la plataforma
dad, si deseamos la paz y la felicidad
duradera. Todo lo que necesitamos es la de lanzamiento; el Naam o Shabd o el
sagrado Verbo es el vehículo espacial; el
plataforma de lanzamiento apropiada,
Satgurú o Maestro es el piloto y el sistema
que no es más que el cuerpo humano.
Necesitamos también, un vehículo apro- de navegación; y el amor es el combustible especial que necesitamos para este
piado, la luz y el sonido internos de
Dios. Finalmente, requerimos del piloto viaje interior. Dados estos cuatro elementos, no hay razón por la cual no podamos,
y el sistema de dirección apropiados y
para eso necesitamos al Maestro espiri- en esta vida misma, regresar a nuestra
Fuente, el Creador. Este es el mensaje
tual viviente perfecto. Y el combustible
eterno de los místicos.
que nos impulsa, por supuesto, es el
Los santos y profetas desde tiempos
combustible del amor.
inmemoriales nos han estado diciendo que
así como tenemos mundos y universos
Satsang Semanal, Semana # 19
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afuera, tenemos mundos y universos internos. Ellos han hablado del viaje a estos
reinos interiores y las escrituras de las
grandes religiones contienen referencias de
tales viajes místicos y a la meta final, que
es la comunión del alma con su Creador.
Por unos pocos siglos, la humanidad en
nombre de la ciencia, especialmente en el
Occidente, ha ignorado esta realidad interior. Pero la ciencia misma ha vuelto ha
descubrir esta sabiduría antigua. Comenzando con el libro del Dr. Raymond
Moody, Vida después de la Vida, investigadores médicos han registrado las experiencias cercanas a la muerte de muchas personas que fueron declaradas clínicamente
muertas y después revividas. Debido a esta
evidencia, los doctores están comenzando a
tomar conciencia de la existencia de una
vida después de la muerte, o de una vida
antes de esta vida. Ellos advierten una conciencia individual que no muere con la
muerte del cuerpo, la cual mientras está en
el cuerpo y puede identificarse con él, no es
parte suya. Es una conciencia que, en una
crisis inesperada, es capaz de separarse del
cuerpo y de ver y oír sin el uso de los órganos corporales.
Esta verdad es, de hecho, el centro de
las tradiciones esotéricas y religiosas que
han llegado a nosotros desde el amanecer
de los tiempos. Tales tradiciones no sólo
afirman que el ser humano es una entidad
espiritual, una entidad que sobrevive la
muerte física sino que pasan a afirmar, que
es posible para esta entidad o alma elevarse
por sobre la conciencia del cuerpo físico
mientras lo habita y entrar a voluntad a los
reinos que están más allá del mundo físico.
El viaje al espacio interior puede ser un
concepto nuevo para la ciencia, pero este
ha sido una parte integral del misticismo
desde el comienzo de la historia. ***
El cuerpo humano, entonces, es la plaPag. 4
taforma de lanzamiento para elevarnos al
espacio interior. Para eso, tenemos que
invertir nuestra atención del mundo exterior e ir hacia adentro. La atención o surat
es el atributo del alma. En el presente,
nuestra atención va al exterior a través de
nuestros sentidos. Tenemos nueves aberturas corporales: dos ojos, dos oídos, dos
fosas nasales, la boca, y dos aberturas inferiores. Nuestra atención está atrapada en
los placeres sensuales. Idealmente, nuestra
alma debería tener el control de la mente, y
nuestra mente debería tener el control de
los sentidos. Pero la situación es bastante
contraria. Somos almas encarnadas; y tanto
el alma como la mente viven juntas en este
marco humano. Nuestros sentidos arrastran
a nuestra mente, y al estar nuestra mente y
alma atadas, el alma es arrastrada también
hacia abajo por los placeres sensuales. Así,
somos impotentes para zafarnos de los encantos del mundo exterior, e incapaces de
invertir nuestra atención hacia los mundos
internos. ¿No es extraño que por un lado,
Dios haya ordenado que llevemos una vida
ética y espiritual, pero por el otro, haya
adornado cada paso de nuestro sendero con
tentaciones? Nuestra condición ha sido
descrita apropiadamente por el gran Sufí
Persa, Khwaja Hafiz. Él dice: "El hombre
ha sido atado a una balsa en medio de mares turbulentos con la advertencia, Ten cuidado de que tu ropa no se moje." El hombre está en tal apuro que se da cuenta de su
impotencia. Entonces, un llanto brota del
fondo de su corazón y de su alma, y le ora
a Dios para que venga a su rescate. Gurú
Gobind Singh, el décimo Gurú de los Sikhs
ha dicho, que Dios escucha el llanto que
sale del corazón de una hormiga más pronto de lo que oye el estruendo de un elefante. Uno de mis versos en Urdú dice:
Él está obligado a escucharte.
Sólo eleva tu espíritu.
Volumen 11
Está tan cerca de ti, llámalo,
con seguridad responderá.
Dios escucha el llanto que sale de los
corazones y las almas de los buscadores
sinceros. Él manda a la tierra, desde el
cielo más alto, a los Santos o Maestros
para rescatarnos de las garras de los deseos y enredos materiales. Él nos ayuda a
invertir nuestra atención del mundo externo al mundo interno y nos lleva de
regreso al Hogar a través de una experiencia directa, de primera mano, con el Verbo o Sagrado Naam. Así como tenemos el
vehículo de una nave espacial para entrar
al espacio exterior, nosotros usamos el
vehículo del sagrado Verbo o Naam, como es llamado, para viajar por el espacio
interior.
El gurú Nanak dice:
El Naam trajo a la existencia todos
los mundos y los universos;
El Naam sostiene toda la vida
y la creación.
La Luz de Dios y la Música de las
Esferas son las primeras manifestaciones
del Poder Creador que trajo a la existencia las regiones internas, todos los universos, la humanidad, y todas las demás especies vivientes. Desde el comienzo de
los tiempos ha sido la ley de Dios que
aquel que haya alcanzado la comunión del
alma con el Creador lo haya logrado a
través del contacto directo con la Luz de
Dios y la Música de las Esferas. Puesto
que necesitamos el vehículo del Naam o
el Verbo, para viajar en el espacio interior, surge la siguiente pregunta: "¿Cómo
podemos abordar este vehículo?" Según
el yoga del Surat Shabd, el método más
natural para hacer eso es unir nuestra
atención o surat con el Poder del Naam o
el Verbo. Es por esta unión con la corriente de sonido, que podemos reunirnos
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con su Fuente.
El proceso de la meditación comienza
cuando nos concentramos en el asiento
alma, que se conoce como el ojo único o
tercer ojo. Cuando nuestra atención se
absorbe en el tercer ojo, la oscuridad que
vemos inicialmente se disipa, y percibimos directamente la Luz de Dios.
Además de los cuadros internos, uno
comienza a escuchar el Verbo de Dios, el
Shabd o la Música Celestial. Esta práctica
se conoce como bhajan, o escuchar la
Corriente Sonora. A medida que nuestra
conciencia se concentra en el tercer ojo
sentimos que nuestro cuerpo se va entumeciendo. Las corrientes motrices que
mantienen las diferentes funciones corporales, se dejan intactas; pero las corrientes
sensorias comienzan a retirarse hacia arriba. Este proceso de retiro es semejante al
que se experimenta en el momento de la
muerte. Sin embargo, al ser dominado
bajo la guía de un Experto, es libre de
dolor y rebosante de alegría. El proceso
comienza con el simran o “ver internamente” y es acelerado, enormemente,
durante el bhajan o la audición interna,
cuando nos concentramos en la Música
interior.
Al trascender, completamente, el cuerpo percibimos la forma resplandeciente
interna de nuestro Maestro. A diferencia
de cualquier otro profesor o amigo, el
Maestro esta siempre con nosotros y, en
cierto sentido, está más cerca de nosotros
de lo que estamos con respecto a nosotros
mismos. Al darnos cuenta de que él nos
protege constantemente y nos guía, nos
colocamos, conscientemente, bajo su dirección y él directamente nos indica el
camino, etapa por etapa, por el resto de
nuestro viaje y no descansa hasta que
seamos uno con el Creador. §
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