BOLETÍN MENSUAL Boletín número 160. Julio 2014

BOLETÍN MENSUAL Boletín número 160. Julio 2014

BOLETÍN MENSUAL
Boletín número 160. Julio 2014
1.- Artículo del mes:
CUESTAS A CABALLO
2.- Producto recomendado:
SILLA DE SALTO ZALDI SARAT-CHANGE ¡Con sistema de puentes intercambiables!
3.- El Rincón del cuidador
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–
PASEOS A CABALLO POR LA PLAYA ¿QUÉ DEBO TENER EN CUENTA?
RECETA CASERA PARA CONSEGUIR CRINES BRILLANTES
4.- Razas:
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Ficha nº 319: LIPPIT MORGAN
Ficha nº 320: MANGALARGA MARCHADOR
1.- ARTÍCULO DEL MES:
CUESTAS A CABALLO
E
l entrenamiento en cuestas permite formar al
caballo y al jinete de una forma equilibrada
fomentando la confianza mutua, el equilibrio y el
fortalecimiento general de los músculos.
Lo cierto es que las colinas con sus desniveles son
un excelente gimnasio para tu caballo. Montar
cuesta arriba y cuesta abajo permite mejorar la
fuerza, la sumisión y la confianza de su caballo e
incluso en caballos jóvenes favorece la motricidad.
Este tipo de entrenamientos no está reservado sólo
para caballos de competición, también los caballos
de ocio sin pretensiones de competir pueden sacar
mucho provecho de las cuestas. Por ello a
continuación recogemos algunas pautas a tener en
cuenta para dominar las cuestas tanto al trote como
al galope.
ENTRENAMIENTO COMPLETO
Las cuestas no sólo son un excelente entrenamiento para caballos de concurso completo o salto, montando hacia arriba
y hacia abajo también trabajamos correctamente la formación de caballos de Doma Clásica. Hay entrenadores que
sostienen que en cuesta se puede mejorar casi cada punto de la escala de formación de un caballo.
Cada caballo se vuelve más receptivo y más obediente si se le prepara paso a paso, por ello no se debería empezar por
cuestas demasiado inclinadas que exijan demasiado físicamente a nuestro caballo. Iremos acercándonos paulatinamente
a las cuestas ya que a algunos caballos les cuesta más que a otros.
Los desniveles entrenan partes muy diversas del cuerpo y de las capacidades de un caballo. Las cuestas arriba refuerzan
principalmente los músculos del cuarto trasero. Algo que necesitan por ejemplo los caballos de salto para darse el
impulso o los caballos de doma para cargar peso.
Además como el caballo automáticamente estira su cuello subiendo una cuesta, si el jinete le da rienda suficiente, se
extiende la musculatura del dorso.
Cuesta abajo el caballo trabaja también el cuarto trasero que va cambiando entre fuerza de empuje y fuerza de carga. La
cuesta abajo también es buena prueba para evaluar la capacidad de manejo de las patas del caballo
Además en estas situaciones el caballo tiene que tensar los músculos del cuarto delantero. Es un entrenamiento muy
completo sobre todo para caballos de salto que necesitan estos músculos para la fase de recepción..
ANTES DE EMPEZAR
Antes de plantar este tipo de sesiones tanto el caballo como el jinete deben de cumplir algunos requisitos:
El jinete: Antes de montar cuesta arriba y abajo el jinete debería tener la suficiente seguridad para ser capaz de
controlar la velocidad en cada aire. Poder guiar a tu caballo en la pista a cualquier punto, montar con el asiento
equilibrado y tener experiencia suficiente en terreno plano. Además debe ser capaz de dominar el asiento elevado en los
tres aires.
El caballo: debe tener la formación básica completada y avanzar en todos los aires con seguridad por debajo del
asiento. Lo deseable incluso es que el caballo ya tuviera nivel en Doma Clásica y andar con seguridad por terreno fácil.
LA POSICIÓN CORRECTA
Es fundamental que el jinete quede por encima del centro de gravedad del equino,
para que no esté sentado en contra del movimiento.
Para el entrenamiento en cuesta debemos subir los estribos un par de puntos. Monta
en asiento elevado: para ello es necesario levantar el trasero del asiento y amortiguar
el peso hacia abajo con la articulación del tobillo. Con esta técnica de asiento, el
jinete se puede adaptar mejor a un cambio de centro de gravedad del caballo. Cuanto
más inclinada sea la cuesta, más habrá que levantarse del asiento, inclinándose hacia
delante.
El tronco debe quedar casi en paralelo con la cuesta. Si subimos una cuesta muy
inclinada (de más de 45º) una correa en el cuello es un elemento de gran utilidad para
poder agarrarnos. De esta forma el caballo nos da automáticamente el ritmo del
movimiento.
También cuesta abajo debemos quedarnos en asiento elevado, inclinando el cuerpo
ligeramente hacia delante. Probablemente de forma instintiva nos inclinamos hacia
atrás pero de esta forma estamos bloqueando el dorso del caballo y el cuarto trasero
no puede remeterse lo suficiente.
Si la inclinación hacia abajo es alta (más de 45º) entonces le debemos dar más
estabilidad al cuarto delantero si está inclinado hacia adelante, evitando que resbale.
Nuestras pantorrillas deben envolver al caballo para que se quede recto. No agarres las riendas montando hacia abajo,
ya que el caballo podría perder el equilibrio.
Un puente de riendas puede ayudar a que las manos estén más tranquilas. Es recomendable llevar las riendas cruzadas y
apoyar las manos en los dos lados del cuello del caballo. El apoyo de las manos debe ser constante y suave.
EL TERRENO
Prado, tierra, grava... ¿Cuál es el mejor terreno para un
entrenamiento en cuesta? Debemos tener muy claro que el terreno
marca la velocidad. Cuanto menos deslizante sea, con más
velocidad podremos montar a caballo.
Prado: El firme ideal para este tipo de entrenamientos es sin duda
el prado seco, ya que los cascos del caballo no se deslizan en
ningún aire. Otro cantar sería con el prado mojado pues el caballo
puede resbalar con cierta facilidad, algo que deberemos tener en
cuenta para ajustar la velocidad ideal.
Grava: La grava fina, presente en caminos forestales y pistas es
apta también para entrenar pero sólo si el caballo lleva herraduras
o una protección de cascos. Para caballos sin herraduras, la grava
tiene un contraproducente efecto lija. Si el casco se desgasta las
consecuencias en forma de enfermedades de la dermis no tardarán
en llegar.
Grava gruesa y tierra suelta: Estos terrenos no son apropiados para principiantes y sólo son recomendables para
caballos montañeros con experiencia, o aquellos que han crecido bajo estas condiciones de forma habitual.
Las pendientes con piedras sueltas exigen mucha habilidad, porque la grava se desplaza muy fácilmente por debajo de
los cascos siendo algo peligroso.
OJO A LAS RODILLAS
Los caballos, como los seres humanos, necesitan muslos fuertes y bien
entrenados para trepar sin dificultades y proteger correctamente las rodillas.
Lo cierto es que el entrenamiento en cuesta exige mucho a los muslos por lo que
debe estar correctamente dosificado. En cuanto notemos que el caballo se cansa
debemos descansar en seguida.
¿Pero como detectamos este aspecto? Las primeras señales de cansancio que nos
ofrecerá nuestro caballo son las siguientes: El caballo debe normalizar su
respiración dentro de los diez minutos siguientes al esfuerzo, si no lo hace se
debe terminar ahí el entrenamiento.
También hay que vigilar el movimiento de asentir de la cabeza y del cuello al
paso: en cuanto el caballo deja de asentir se ha llegado al límite de la resistencia
con el entrenamiento.
En el entrenamiento cuesta abajo sobre todo debemos vigilar que se descansa
suficientemente. Cuanto más inclinada es la pendiente, más rápido se cansan los músculos de las patas.
Los músculos extensores de la rodilla trabajan duro en la cuesta abajo. Junto con los tendones, forman una especie de
lona de saltos para la rodilla.
CLAVES A TENER EN CUENTA
Debemos empezar el entrenamiento al paso, en llano el paso medio es
ideal. Subiendo una pendiente aumentamos la velocidad mientras que
cuesta abajo debemos disminuir el ritmo para que el caballo pueda
buscar el equilibrio.
Es normal que al principio aumente la velocidad automáticamente
porque cansa más bajar las cuestas lentamente pero los caballos
aprenden muy rápido que los pasos más cortos les facilitan mantener el
equilibrio. Y la confianza entre caballo y jinete aumenta.
Los caballos experimentados dominan las pendientes cuesta abajo
hasta los 50º de inclinación. En terreno blando se sientan sobre sus
posteriores y resbalan hacia abajo. Si el caballo domina las pequeñas
colinas hacia arriba y hacia abajo al paso ya podemos atrevernos con el
trote.
El jinete debe quedarse en asiento elevado, manteniendo continuamente la conexión con la boca del caballo, pero al
mismo tiempo ofreciendo la suficiente libertad para poder utilizar su cuello como medio de equilibrio.
Es importante las primeras sesiones empezar el trote cuesta abajo con distancias cortas. En las primeras fases de
entrenamiento 50 o 60 metros son más que suficientes. Posteriormente dejar descansar al caballo un momento, en un
par de semanas el caballo será capaz de hacer hasta 500 metros.
El galope sólo es apto para los caballos más experimentados, es el ejercicio más difícil pero también el más eficaz. Los
caballos necesitan gran habilidad para bajar una cuesta al galope. Los músculos y las articulaciones trabajan duro, porque
las patas traseras se tienen que meter profundamente por debajo de la masa.
2.- PRODUCTO RECOMENDADO:
SILLA DE SALTO ZALDI SARAT-CHANGE ¡Con sistema de puentes intercambiables!
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Hecho en España, Calidad superior.
Fabricada en cuero europeo de primera calidad, especialmente
seleccionado.
Puentes intercambiables para poder adaptar la silla a cualquier tipo
de caballo. Esta silla ofrece la posibilidad de modificar la anchura
de la armadura por medio de puentes intercambiables. Estos
puentes están codificados por colores según el tamaño - rojo:
estrecho (28 cm) - azul: medio estrecho (30 cm ) - negro: medio
(32cm ) - verde: ancho (33 cm) - amarillo: muy ancho (34 cm). En
la parte delantera de la silla de montar encontraremos dos tornillos,
una vez desatornillados abrimos el velcro para llegar a la parte
delantera de la armadura donde está el puente. Procedemos a
desatornillar el puente y cambiarlo por el nuevo. Una vez
atornillado el nuevo puente observamos que la armadura se
ajustará al nuevo ancho del puente. Cerramos el velcro y
atornillamos los tornillos exteriores. Se sirve con un puente de 32
cm.
Medidas: 16”, 16,5”, 17”, 17,5” y 18”.
Colores: negro, marrón, habana, tostado.
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3.- EL RINCÓN DEL CUIDADOR
PASEOS A CABALLO POR LA PLAYA ¿QUÉ DEBO TENER EN CUENTA?
Por mucho que nos guste la estampa, debemos tener en cuenta que el paseo por la playa puede suponer algunos
problemas para nuestro caballo, que conviene conocer y valorar...Tome buena nota:
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Calentar antes de caminar: nunca debemos olvidar que el caballo debe hacer unos ejercicios de
calentamiento suaves antes de ponerlo al galope... esto es especialmente importante si vamos a andar sobre la
arena de la playa.
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Sobreesfuerzo muscular: si obligamos a nuestro caballo a caminar por la arena seca, estará realizando un
sobreesfuerzo físico considerable. Por eso no conviene que la caminata por este tipo de terreno sea larga; en
todo caso deberemos alternarla con terrenos más firmes.
Por supuesto si camina por la arena mojada, recién bajada la marea, el esfuerzo a realizar disminuye, por lo
que siempre que sea posible lo recomendable es caminar por esas zonas (las cuales suelen estar, además, más
limpias de suciedad).
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Cascos: especial atención debemos tener con los cascos del caballo que, tras el paseo, deberán ser limpiados a
fondo para evitar que los restos de arena puedan dañarlos.
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Las olas: muchos cuidadores no lo saben, pero lo cierto es que los caballos se marean con las olas. Por
supuesto la intensidad del mareo dependerá de cada individuo en particular (y de lo que se mueva el mar,
claro), pero no sería la primera ocasión en la que el animal se ha caído, con el consiguiente peligro que supone
tanto para el caballo como para el jinete (eso sin contar el remojón). Por lo tanto, siempre que el mar esté
movido, ponga precaución y considere seriamente la opción de dejar el paseo para otro día.
RECETA CASERA PARA CONSEGUIR CRINES BRILLANTES
Una crin limpia y brillante puede modificar casi al cien por cien el aspecto de nuestro caballo, mejorándolo totalmente.
A continuación le mostramos una sencilla receta casera que podrá ser le de gran ayuda para este fin.
Mezcle en un recipiente:
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Una cucharada sopera de aceite de hígado de bacalao.
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Una cucharada sopera y media de flor de azufre.
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Diez cucharadas soperas de aceite de oliva.
Proceda a lavar las crines y después aplique esta mezcla con un cepillo. Deje secar correctamente, podrá comprobar
como las crines brillan, incluso con abundantes reflejos.
4.- RAZAS
Conozca dos nuevas razas de caballos.
Porque conocerlos es amarlos.

FICHA 319: LIPPIT MORGAN

FICHA 320: MANGALARGA MARCHADOR
FICHA 319:
LIPPIT MORGAN
ORIGEN: La raza Lippit Morgan desciende de los caballos
Morgan, una de las primeras razas de caballo desarrolladas en
Estados Unidos. La raza ha influido en muchas otras razas
americanas, incluyendo el Quarter horse, Tennessee Walking Horse
y Standardbred Horse. Fueron utilizados como caballos de la
caballería durante la Guerra Civil estadounidense en ambos lados
del conflicto. Durante los siglos XIX y XX se exportó a muchos
países, incluyendo Inglaterra, en el que influyó en el mejoramiento
de la Hackney.
En 1910 Fullarton Phillips un acaudalado hombre de negocios de
Pennsylvania se estableció en Vermont con la idea de mejorar la
raza Morgan ya que consideraba que no cumplían con los
estándares de flexibilidad, resistencia y belleza que estaba
buscando.
Tras varios cruces con otras razas consiguió un caballo más versátil
y resistente en general que la raza previa pero conservando las
mejores características de los caballos Morgan.
CARACTERÍSTICAS FÍSICAS:
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Altura de la cruz: de 140 a 150 cm.
Cabeza ancha y corta, con quijadas pronunciadas.
Cuello grueso y musculoso.
Crines abundantes y pobladas.
Grupa musculosa y potente.
Dorso corto y robusto.
Extremidades bien estructuradas y muy robustas.
Capas principales: bayo, alazán y negro.
APTITUDES MÁS DESTACABLES:
Gran resistencia, gracias a su robustez.
Es una raza óptima como caballo de silla.
Muy buenos trabajadores tanto en el campo como en el trabajo ligero.
Por su andadura desenvuelta suele utilizarse también como caballo de tiro de vehículos.
CARÁCTER:
Por lo general son caballos de temperamento sensible y dócil normalmente muy fácil de llevar y dispuesto siempre a
colaborar.
FICHA 320:
MANGALARGA
MARCHADOR
ORIGEN: Como todas las razas de América, desciende de
los caballos europeos importados por los conquistadores que
se criaron con caballos criollos nativos.
En 1808, el príncipe Regente de Portugal, Don Joao IV,
espantado por la invasión napoleónica en la península ibérica,
se refugia en Brasil. Lleva consigo toda su caballería. Sus
caballos son de raza Alter, Garrano.
La familia brasileña Junqueira adquiere algunos machos , los
cruza con yeguas locales de origen ibérico ( muy
probablemente descendientes de la raza Sorraia) y se dedica a
obtener un caballo adaptado para el trabajo ganadero, pero
también para la caza de montería, para el polo y para los
desplazamientos.
La raza actual es producto de la próspera industria agrícola
brasileña y fue establecida y desarrollada durante el siglo XIX
por las personas nativas de Brasil. Ahora, la raza que es muy
popular en Brasil se cría en todo el mundo.
CARACTERÍSTICAS FÍSICAS:
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Los caballos miden de 148 a 152 cm a la cruz.
Peso medio: 450 kg
La cabeza es triangular con un perfil recto.
Los ojos son grandes y oscuros.
Las orejas están erguidas y bien colocadas con las puntas dobladas hacia adentro.
El cuello es musculoso y arqueado.
El pecho es amplio y musculoso.
El dorso es de mediana longitud, recto y bien musculado.
Las patas son musculosas, largas y rectas.
Cepas: color alazán, bayo, blanco, castaño, castaño gris, champán, cremello, grullo, isabelo, moro, negro,
palomino, perlino, y ruano.
APTITUDES MÁS DESTACABLES:
El mangalarga tiene un quinto paso llamado la "marcha", que es un paso rápido, rodante, a medio camino entre el trote
y medio galope, que hace a la raza útil para el trabajo con ganado. Es muy utilizado para trabajos con ganado en
ranchos de Brasil.
CARÁCTER:
Dócil y dispuesto. Listo para complacer. Activo, hermoso e inteligente. Muy valorado por su resistencia y versatilidad.