Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana
Transcripción
Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana
23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Navigation Temas de Cultura Clásica Aurelio Bermejo Fernández Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. DIOSES, SEMIDIOSES Y HÉROES DE LA MITOLOGÍA GRECORROMANA 1. INTRODUCCIÓN El mito es un relato fantástico y ejemplar en el que intervienen, en un pasado prestigioso y lejano, personajes extraordinarios -dioses y héroes, sobre todo-, y con el que el ser humano pretende dar respuesta a los muchos interrogantes que le asaltan: Origen del mundo, de los dioses y del suyo propio, y el del bien y del mal; significado de los fenómenos atmosféricos y el de los ciclos de la vegetación; etc. En la antigua Grecia, los mitos se transmitieron al principio oralmente, lo que hizo que se cambiaran y ampliaran con el paso de los siglos. El primer intento de clasificación o estructuración de los mismos, tras la creación de la escritura en el siglo VIII a.C., se produjo en el siglo VIII-VII a.C. con Homero, en la Ilíada y la Odisea y en los Himnos homéricos, atribuidos a él, y, sobre todo, con Hesíodo, en la Teogonía y en Los trabajos y los días. Otras fuentes literarias también importantes para conocer la religión griega son los Epinicios, de Píndaro, y las tragedias de Esquilo, Sófocles y Eurípides. De las obras romanas de este género, hay que citar especialmente las Metamorfosis de Ovidio, que fueron, a partir sobre todo del Renacimiento, la principal fuente de inspiración, en este campo, de muchos artistas y literatos hasta nuestros días. El panteón griego de la segunda generación de dioses se configuró básicamente con divinidades pertenecientes a la cultura mediterránea, de carácter matriarcal y agrícola, relacionadas con la fertilidad, como Deméter, diosa de los cereales, Afrodita, diosa del amor, o Perséfone, a quien se atribuían los ciclos estacionales de la vegetación; y con dioses de la sociedad indoeuropea – patriarcal, guerrera y muy jerarquizada-, como Zeus, el cual, tras repartirse con sus hermanos el gobierno del universo, después de destronar a su padre Crono, ostentó un poder superior al de http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 1/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica todos los demás dioses. Los dioses griegos fueron representados con figura humana, y la mayoría de ellos vivían en las cumbres del monte Olimpo (2.917 m.), en Tesalia, alimentándose con néctar y ambrosía, que proporciona la inmortalidad. Aunque inmortales y todopoderosos, estaban sometidos al Destino (fatum, hado). Sus relaciones entre ellos no siempre fueron amistosas, y sus vicios y sentimientos eran similares a los de los humanos. La superioridad del panteón griego hizo que los romanos, al entrar en contacto con la cultura griega, asimilaran muchas de sus divinidades a los dioses griegos, surgiendo así el Panteón grecorromano 2. PRIMERAGENERACIÓN DIVINA Al principio, existió el Caos, del cual surgieron Gea, la Tierra, el Tártaro, o Infierno, y Eros, dios del amor. Gea, sin intervención masculina, engendró a Urano, las Montañas y el Mar. Luego se unió con Urano y tuvo a los tres Cíclopes, que tenían un solo ojo en la frente; a los tres Hecatonquiros, dotados de cien brazos y cincuenta cabezas; y a seis Titanes y seis Titánides, los cuales se emparejaron entre ellos. Urano, que odiaba y temía especialmente a los Cíclopes y a los Hecatonquiros, los mantenía confinados en el Tártaro. Debido a esto, la Tierra pidió ayuda a los Titanes contra Urano, obteniendo respuesta positiva sólo de Crono, el más joven de ellos, quien cortó, con la hoz que le había entregado su madre, los genitales de Urano, los cuales, arrojados al mar, fecundaron la espuma donde cayeron, naciendo de ella Afrodita, y de las gotas de sangre que cayeron en la Tierra, los Gigantes. Tras derrocar a Urano, Crono volvió a encerrar a los Cíclopes y a los Hecatonquiros en el Tártaro. Dueño del mundo, Crono se casó con su hermana Rea, con la que engendró a Hestia, Deméter, http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 2/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Hera, Hades y Poseidón, dioses ya de la segunda generación divina, a los cuales devoraba al nacer para evitar que ninguno de ellos lo destronara después, según le habían vaticinado Gea y Urano. Sólo Zeus evitó ser engullido por Crono, pues Rea lo tuvo en secreto, de noche, en la isla de Creta, entregándole por la mañana a su marido una roca envuelta en pañales, en lugar del niño, la cual se tragó aquél sin advertir el engaño. Durante algunos años, Zeus permaneció oculto allí, en la cueva de Dicte, siendo alimentado con miel y con la leche de la cabra Amaltea, a la que un día, jugando, rompió uno de sus cuernos. Disgustado por ello, Zeus otorgó a éste poderes mágicos, de forma que el poseedor del mismo obtenía con él todo lo que deseaba. De ahí, la denominación de Cuerno de la abundancia o Cornucopia, el cual se ha venido representando, generalmente, desde el siglo V a. C. como un cuerno de cabra lleno de frutas y de flores. Saturno devorando a uno de sus hijos. Goya. Museo del Prado. Cuando Zeus llegó a la edad adulta, se propuso destronar a Crono y, aconsejado por Metis, dio a beber a éste una pócima, que le hizo vomitar a todos sus hermanos por el orden en que se los había tragado. Luego, con la ayuda de éstos y la de los Cíclopes, a los que había sacado del Tártaro, consiguió derrotar a Crono y a los Titanes en una guerra que duró diez años (Titanomaquia). Derrocado Crono, Zeus y sus hermanos se repartieron, por sorteo, el poder, obteniendo Neptuno el dominio del mar, Plutón, el del mundo subterráneo, y Zeus, el poder celeste y sobre la tierra, así como la suprema autoridad sobre los demás dioses y sobre los hombres. 3. SEGUNDA GENERACIÓN DIVINA. LOS DIOSES OLÍMPICOS Asamblea de los dioses en el monte Olimp http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 3/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica ZEUS / JÚPITER (Los Dioses Olímpicos figuran con el nombre griego, primero, y con el romano, a continuación) Zeus es la personificación del cielo luminoso (Zeus < *dyews, día/luz del día) y quien promueve los grandes fenómenos atmosféricos -la lluvia, el granizo, el rayo, el relámpago, etc.-, con los que se manifiesta especialmente a los humanos. Tras destronar a su padre Crono, se convierte en el dios más poderoso en el Olimpo; y, como soberano de los dioses y de los hombres, se encarga de administrar justicia, resolviendo las querellas y desavenencias surgidas entre ellos, y de mantener el orden en el mundo y el cumplimiento de los juramentos. También es dispensador de bienes y de males. Zeus tuvo una amplia descendencia con diferentes diosas y ninfas. De la titánide Metis, que fue su primera esposa, tuvo a Atenea; de Leto (Latona), tuvo a Artemis y a Apolo; de su hermana Zeus con sus principales atributos: el Deméter (Ceres), a Perséfone (Proserpina); y de Hera (Juno), cetro, un haz de rayos y el águila. su tercera esposa, a Ares (Marte) y a Hefesto (Vulcano); y de la ninfa Maya, a Hermes (Mercurio). También engendró numerosos hijos con bellas mortales, los cuales no eran dioses sino héroes. En muchas de esas seducciones, para conseguir mejor su objetivo y ocultar su traición a su esposa Hera, Zeus adoptó diversas apariencias (metamorfosis), de las cuales las más conocidas son éstas: Transformado en lluvia de oro, sedujo a Danae, hija de Acriso, rey de Argos, a la que éste había encerrado en una torre de bronce cuando el oráculo de Delfos le anunció que un hijo de ésta lo mataría. De esa unión nació Perseo. Y, convertido en cisne, engendró con Leda, hija de Testio, rey de Etolia, que se había convertido en oca para escapar de él, a la bella Helena, como recoge Homero. A su vez, a Alcmena, esposa de Anfitrión, rey de Tirinto, la poseyó, mientras éste se encontraba en la guerra, adoptando su apariencia. Con ella tuvo a Heracles (Hércules). Este es el argumento de la conocida comedia de Plauto Anfitrión. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 4/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Dánae recibiendo a Júpiter en forma de lluvia de oro, de Tiziano. Museo del Prado Por último, sedujo a Europa, que era hija de Agenor, rey de Fenicia, y poseía una belleza extraordinaria. Un día en que la joven princesa se encontraba en la playa solazándose con sus sirvientas, Zeus, para poder acceder a ella, se metamorfoseó en el más hermoso toro de la manada que pacía en una pradera que había cerca de donde ellas estaban. Al verlo Europa de lejos, prendada de su belleza, se acercó a él y, tras perderle el miedo, pues observó que era manso, se sentó en su lomo, lo que aprovechó éste para salir nadando velozmente por el mar, con la joven encima, hacia la isla de Creta. Cuando llegaron allí, Zeus reveló su identidad a Europa y la poseyó cerca de una fuente en Gortina (al sur de Cnoso) debajo de un plátano, árboles que, desde entonces, tienen el privilegio de no perder nunca sus hojas. Después Zeus casó a Europa con Asterión, rey de dicha isla, quien adoptó a los hijos de ambos, Minos, Radamantis y Sarpedón, pues no los tenía propios. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 5/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Rapto de Europa, de Rubens. Museo del Prado. Pero la pasión de Zeus por la belleza no se limitó sólo a las mujeres. Raptó también, transformado en águila, según una versión, al joven Ganimedes, hijo de Troo, rey de Troya, y de Calírroe, que pasaba por ser el más bello de los mortales, cuando pastoreaba, en una de las montañas próximas a la ciudad de Troya, el rebaño de su padre, y lo hizo copero de los dioses en el Olimpo, encargado de escanciar el néctar en sus copas. Rapto de Ganimedes. Mosaico romano de principios del s. III d.C. procedente de Susa. Museo del Bardo (Túnez) A Zeus se lo suele representar con abundante y rizada barba y caballera, igual que a sus hermanos http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 6/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Poseidón y Hades, y sus principales atributos son: el cetro, el rayo, con el que fulmina a los mortales, el águila y la encina. HERA / JUNO Hera, hermana de Zeus, fue la tercera esposa de éste, después de Metis y de Temis. El matrimonio se celebró, según la tradición más antigua, en el Jardín de las Espérides, situado al pie del monte Atlas (al norte de la actual Marruecos), en donde Hera plantó las manzanas de oro, símbolo mítico de la fertilidad, que le había entregado Gea (la Tierra) como regalo de boda. Esta diosa protege el matrimonio y a las mujeres casadas, a las que asiste su hija Ilitía en el momento del parto. Celosa y vengativa, acosó y persiguió con rencorosa saña a todas las mujeres seducidas por su esposo e incluso a los hijos engendrados por éste con ellas, como le sucedió, por ejemplo, a Heracles, que tuvo que superar doce durísimos trabajos, que le impuso Euristeo, rey de Micenas, instigado por ella. Otra de las víctimas de sus celos fue Sémele, la cual, hallándose encinta de Dioniso, engendrado con ella por Zeus, murió fulminada cuando éste se le acercó, por indicación dolosa de Hera, en todo su esplendor, armado con sus rayos y rodeado de llamas. También Leto sufrió los celos de Hera, pues, estando encinta de los gemelos Ártemis y Apolo, fruto igualmente de su unión con Zeus, durante algún tiempo no pudo dar a luz a éstos, ya que Hera había prohibido que se le diera asilo en lugar alguno de la tierra.Finalmente, fue acogida en la isla de Delos, en donde dio a luz asistida por Ilitía. Hera retrasó por celos, igualmente, el nacimiento de Heracles, al que había engendrado Zeus con Alcmena adoptando la figura de su marido Anfitrión, que había partido para la guerra. Por último, Io, otra de las conquistas de Zeus, a la que éste había transformado en ternera para salvarla de las iras de su esposa, fue confiada, a petición de ésta, al gigante Argos, que la vigilaba en todo momento, pues estaba dotado de cien ojos, de los que sólo cerraba la mitad cuando dormía, librándose de él cuando Heracles lo mató, a instancias de Zeus. El acoso de Hera, sin embargo, no terminó para Io, pues entonces le envió un tábano, que le producía continuas picaduras, las cuales la hicieron enloquecer. Su sufrimiento acabó cuando Zeus hizo que recobrara su forma humana en Egipto, después de haber recorrido muchos lugares de la tierra huyendo de aquél. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 7/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Hera de Éfeso-Viena. Copia romana de un original griego de hacia 400 a.C. Tampoco Hera aceptó de buen grado no haber sido la elegida en el juicio en el que Paris hubo de decidir cuál de las tres diosas -Afrodita, Palas Atenea y ella misma-, era la destinataria de la manzana de oro que la diosa Eris (la Discordia) había dejado caer en la mesa de los comensales, al final del banquete, el día en que se celebraban las bodas de Tetis y de Peleo, la cual llevaba la inscripción: “Para la más bella” (Ver Afrodita). Por esto, en la Guerra de Troya, tanto ella como Palas Atenea apoyaron a los griegos. A Hera se la representa, generalmente, con diadema y, a veces, con cetro, por ser esposa de Zeus, y sus atributos principales son: el pavo real, cuyo plumaje pasaba por ser la imagen de los ojos de Argos; el cuclillo, pregonero del buen tiempo y de las vivificantes lluvias primaverales; la granada, símbolo del amor conyugal y de la fecundidad; y el lirio. En Roma fue asimilada a la diosa Juno, y ella, Júpiter y Minerva formaron la Tríada Capitolina, cuyo templo se encontraba en la colina del Capitolio, en donde terminaban los desfiles triunfales con las ofrendas de parte del botín conseguido en las guerras victoriosas para Roma. POSEIDÓN o POSIDÓN/ NEPTUNO En tiempos muy antiguos, Poseidón fue venerado, al parecer, como dios de la fertilidad de la tierra en muchos lugares del interior, función que seguiría ejerciendo también cuando pasó a convertirse en dios del mar, lo cual explicaría que en Beocia, por ejemplo, fuera relacionado con Deméter, la diosa de la tierra fértil. En la Ilíada, de Homero, es presentado como señor del mar, de http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 8/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica los ríos, de las fuentes y de los lagos. Su palacio, de oro, de coral y de gemas, está en las profundidades del mar, del que emerge cada día para recorrer su superficie en un carro arrastrado por cuatro caballos con cola de pez, rodeado por un cortejo de delfines, nereidas y tritones y llevando en su mano su arma distintiva, el tridente o arpón de tres puntas -arma por excelencia de los pescadores de atún desde la Antigüedad-, con el que provoca las tempestades en el mar y los terremotos, cuando se enoja con los mortales. Como dios del mar, Poseidón era el protector de los marineros y pescadores, que debían a él la navegación fácil y la pesca segura y abundante, por lo que recibió culto en muchos lugares de la costa, en la que se le erigieron templos -como el de cabo Sounion, a 65 km de Atenas-, que era lo primero que avistaban aquéllos, emocionados, cuando regresaban a sus ciudades de origen. También otorgaba sus dones en la tierra como dios de las fuentes y de las aguas, en general. Templo de Poseidón en Cabo Sounion (Grecia), ca. 449 a.C., desde el que se contemplan bellas puestas de sol. En una de sus columnas, figura la firma de Lord Byron. Poseidón se casó con la nereida Anfitrite, con la que engendró al gigantesco Tritón; pero tuvo también muchas amantes, diosas o mortales, y una progenie igualmente numerosa. Así mismo, sedujo a las ninfas de las fuentes y de los ríos, engendrando con ellas hijos dañinos y monstruosos, la mayoría de ellos, como el gigante Polifemo, lo que se explicaría por ser Poseidón la personificación de las fuerzas violentas del mar y de la tierra. Ël fue, también, el padre de muchos héroes y el antepasado mítico de diferentes familias reales. A Poseidón se le relacionó con el delfín, símbolo del mar navegable, con el toro, quizá por ser las olas violentas y ruidosas imagen de sus bramidos, y, sobre todo, con el caballo. Los antiguos griegos, en estrecho contacto con el mar, debieron de ver imaginativamente en las olas espumosas del mismo caballos de largas crines onduladas persiguiéndose en su superficie. Esto explica que Poseidón ofreciera a Minos – que se http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 9/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica había dirigido a él para que le mostrara su apoyo en la disputa que mantenía con sus hermanos por el trono de Creta-, un bello toro blanco para que se lo sacrificara después, el cual surgió del mar; y, metamorfoseado en caballo, poseyó a su hermana Deméter y a la Gorgona Medusa, con la que tuvo al caballo alado Pegaso. Como creador y domador del caballo, Poseidón presidía en Grecia y también en Roma, después, las carreras de caballos y de carros. En sus disputas con varios dioses por conseguir el patronazgo de alguna ciudad, casi siempre salió mal parado. Así, en el caso de la ciudad de Atenas, fue vencido por Palas Atenea, y, en el de Argos, Corinto y Egina, por Hera, Helio (el Sol) y Apolo, respectivamente, lo cual podría deberse a que, al convertirse en dios del mar, poco a poco fue sustituido, en su calidad de dios primigenio de la fertilidad, por otras divinidades en la veneración de los lugareños de tierra adentro. En Roma, fue asociado con Neptuno, el cual, en un principio, sólo era una divinidad del agua, en general; pero, a comienzos del siglo IV a. C., fue identificado ya con Poseidón, especialmente en su función de protector de los caballos y de las carreras en las que éstos participaban, como evidencian los siete delfines de bronce colocados sobre la espina del circo, que eran girados, uno en cada vuelta, en las carreras de carros, indicando a los espectadores cuál de ellas se estaba corriendo, y, especialmente, el ara y el templo que se erigieron en su honor, por ejemplo, en el circo Flaminio. Sus principales atributos son el tridente, el delfín, el caballo y el toro. Poseidón recorriendo el mar en su cuadriga. Mosaico romano de finales del s. II d.C. originario de Susa. Museo del Bardo (Túnez) http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 10/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica ATENEA / MINERVA Hija de Zeus y de su primera esposa, Metis -la sabiduría personificada-, hija, a su vez, de los titanes Océano y Tetis, su gestación y nacimiento fueron excepcionales. Estando Metis encinta de Atenea, Zeus se la tragó, pues Urano y Gea le habían vaticinado que, si Metis volvía a engendrar con él un nuevo hijo, éste lo destronaría. Atenea se acabó de gestar en la cabeza de Zeus y, cuando le llegó el momento del parto, pidió a Prometeo (según otros, a Hefesto) que se la hendiera de un golpe de hacha, saliendo entonces de ella la joven Palas Atenea provista de casco, lanza y coraza y dotada de la inteligencia de su madre: Atenea es, por tanto, diosa de la guerra y de las artes, de las letras y de la sabiduría, en general. Como diosa de la guerra, a diferencia de su hermano Ares, dios también de los conflictos bélicos, que se complace con las matanzas cruentas, Atenea no ama la guerra por sí misma, sino en cuanto que puede arrojar resultados favorables a la polis que ella defiende y siempre que sea hecha conforme a la equidad y la razón. Así, ayudó a los héroes que se distinguán por su prudencia y buenos consejos, y por su fuerza y valor, como Heracles, el cual, agradecido, le ofreció las manzanas de oro de las Hesperides cuando Euristeo se las devolvió; Perseo, quien, después de matar a la gorgona Medusa, le dio su cabeza, que ella fijó sobre su escudo redondo y tenía el poder de petrificar a todo el que osaba mirarla; Jasón, Belerofonte, etc. En la guerra de Troya, Atenea luchó a favor de los aqueos (por lo del Juicio de Paris), favoreciendo a Diomedes, a Menelao y, especialmente, a Ulises y a Aquiles. En las disputas o enfrentamientos que tuvo con otros dioses o héroes, Atenea siempre salió victoriosa, no así Ares, que perdió en algunos de ellos, uno, con ella misma. Como diosa de la razón, protegía las asambleas populares y velaba por el cumplimiento de la ley, la justicia y el orden. También se le atribuía la institución del antiguo Tribunal del Areópago en Atenas, en el que ella misma participaba otorgando su voto favorable al acusado, cuando se producía empate en los votos de los jueces que lo integraban, tal como sucedió con Orestes, según se recoge en las Euménides, de Esquilo. Atenea fue, así mismo, la inventora del arado y del rastrillo y enseñó a los hombres la cría y la doma de los caballos y a uncir los bueyes en el arado para labrar la tierra. Otra invención suya fue el arte de bordar y de tejer, en los que ella misma destacó, protegiendo, por ello, a las hilanderas y bordadoras. En la fábula de Aracne, una adición romana del poeta Ovidio en sus Metamorfosis, posterior al mito griego clásico, la joven lidia Aracne, que había adquirido gran reputación en el los citados artes, desafió a la diosa a bordar sendos tapices. Atenea representó en el suyo la escena de su victoria sobre Poseidón, por la que obtuvo el patronazgo de Atenas, y Aracne, a su vez, veintiún episodios de los amoríos de los dioses. El trabajo de Aracne fue perfecto, como reconoció la propia Atenea, a pesar de lo cual se http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 11/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica enfureció con ella por la irrespetuosa elección que había hecho mostrando los devaneos y transgresiones de los dioses. Aracne reconoció su error y se suicidó; pero Atenea, apiadada de ella, la convirtió en araña, que pasa la vida tejiendo. Este mito aparece esbozado en el cuadro Las Hilanderas, de Velázquez. Atenea permaneció siempre virgen -es la Partenos, por excelencia-, como su hermanastra Ártemis, y guardó celosamente su castidad. Fue venerada en muchas ciudades del mundo griego, pero, de manera especial, en la ciudad de Atenas, cuyo patronazgo le fue otorgado por los dioses, en el concurso que se celebró para elegir a la divinidad tutelar de la misma, al hacer surgir de la tierra, tras golpearla con su lanza, un olivo, don mejor, a juicio de ellos, que el de Poseidón, que había hecho brotar de la roca de la Acrópolis, con un golpe de su tridente, una fuente de agua salada o un caballo, según otra versión. Ella fue, pues, según el mito, la introductora del olivo y del aceite en el Ática. A mediados del siglo V a. C., se le erigió en la Acrópolis de Atenas, por iniciativa de Pericles, el Partenón, obra cumbre de la arquitectura griega, llamado así por el apelativo partenos (virgen) de la diosa, que eclipsó el Hecatompedón, mandado construir en el mismo lugar por Pisístrato en honor también de Atenea, el cual fue destruido por los persas en la segunda Guerra Médica. Las obras fueron supervisadas por Fidias, responsable, además, de su decoración escultórica y autor de la bellísima estatua crisoelefantina (de oro y de marfil) de Atenea Partenos, que se guardaba en la naos o cella del templo, la cual vino a sustituir en él la vetusta imagen de Palas Polias. La Atenea Partenos medía más de doce metros y se la representó con yelmo ático, adornado con una testa de esfinge y dos grifos; con coraza, en la que figuraba la cara de la Medusa; con una Victoria en la mano derecha; y con escudo y lanza, sujetos con la mano izquierda. Dados los ricos materiales de que estaba hecha, no se ha conservado. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 12/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Atenea Partenos, copia romana en mármol, la más fiel a la original, según algunos autoes, s. II d. C.. Museo Arqueológico Nacional de Atenas. Para testimoniar su profunda gratitud a Atenea, divinidad protectora de la polis y dispensadora de toda clase de bienes, los atenienses celebraban cada año, a finales de julio, las Panateneas y, a partir de Pisístraro (siglo Vl a.C.), cada cuatro años, las Grandes Panateneas, las cuales duraban cinco días y, en ellas, participaban sólo los ciudadanos del Ática. Consistían en concursos poéticos y musicales y en juegos atléticos y competiciones ecuestres, similares a los de los Juegos Panhelénicos, de Olimpia, Delfos, etc. La celebración principal de estas fiestas era la gran Procesión del peplo -manto de lana de 2 x 1.5 m, destinado a la estatua de madera de Atenea Políada, que era venerada en el Erecteion, el cual había sido tejido por jóvenes elegidas del Ática (arréforas) en los nueve meses anteriores -, la cual partía al amanecer de la puerta Dípylon, atravesaba el Ágora y, ascendiendo por la vía Panatenaica, llegaba a los Propíleos, traspasados los cuales, alcanzaba la cumbre de la Acrópolis. Allí, la procesión pasaba por delante del Partenon y se dirigía hacia el altar de Atenea, que había delante del Erecteion, en donde las arréforas entregaban el peplo a las ergastinas, que lo introducían en el Erecteion y se lo ponían a la estatua de Atenea Políada. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 13/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Acrópolis de Atenas, s. V. a. C. (reconstrucción). Esta procesión la encabezaban la Gran Sacerdotisa de Atenea, las arréforas con el peplo y las canéforas -jóvenes vírgenes de clase alta, también, que residían en el templo de Atenea y, en esta procesión, llevaban cestas con flores-, y mujeres con ofrendas; detrás iban los sacerdotes con los útiles del sacrificio y los animales destinados al mismo; a continuación, los metecos y los músicos, seguidos de los ancianos y los jefes del ejército, todos ellos con ramas de olivo; y, por último, jóvenes con armadura hoplita, a pie, a caballo o en carro, seguidos de los embajadores de las colonias atenienses y de los vencedores de los juegos y la masa popular. El festejo terminaba con el sacrifico de cien bueyes (hecatombe), en las Grandes Panateneas, al menos, cuya carne era consumida en un gran banquete que cerraba, por la noche, el festival. Dicha procesión fue representada por Fidias y sus discípulos en el largo friso, excepcional en un templo dórico, de 160 m, de la galería del Partenón, gran parte del cual puede admirarse en el British Museum, de Londres. Los romanos identificaron a Atenea con la diosa Minerva, de origen, al parecer, etrusco, que integró, junto con Júpiter y Juno, la Tríada capitolina. En Roma, por tanto, fue protectora de la ciudad, pero, sobre todo, de los artesanos. Posteriormente, patrocinó la actividad intelectual, principalmente la escolar. Sus atributos son: el casco, la lanza, el escudo redondo, el olivo y la lechuza, símbolo de la sabiduría, ya que ve todo en la oscuridad, la cual figuró, por ejemplo, en las http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 14/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica famosas monedas de plata atenienses, que fueron de uso general en la Hélade en las operaciones comerciales realizadas durante el Imperio marítimo ateniense (477-431 a. C.). Algunos autores creen que en tiempos antiguos, la propia Atenea era un mochuelo o una diosa pájaro, en general. Moneda ateniense de plata, anterior al año 403 a.C., como acredita la E de la palabra ’ΑΘЄ(ναι), la cual fue sustituida, a partir de ese año, por la H, su vocal larga correspondiente. HADES / PLUTÓN Hades es hijo de Crono y de Rea y hermano, entre otros, de Zeus y de Poseidón. En el reparto que éstos hicieron del mundo después de la guerra que sostuvieron los Olímpicos y los Cíclopes contra los Titanes (Titanomaquia) para destronar a Crono, le correspondió el dominio de los Infiernos, o inframundo, conocido también como Hades o Tártaro, adonde llegaban las almas de los muertos que hubieran obtenido sepultura en la tierra. Hades es un dios despiadado, aunque justo, que no permite a nadie que haya entrado en su reino volver a la tierra. Sólo lo consiguieron Orfeo, Heracles y Ulises. Él mismo sólo salió de él para raptar, en Sicilia, a su sobrina Perséfone (Proserpina), a la cual convirtió en su esposa y fue no menos cruel que él. Los Cíclopes le regalaron un casco, que lo hacía invisible. Era aborrecido por todos, incluso por los otros dioses, y pronunciar su nombre podía traer malas consecuencias, por lo que, al referirse a él, se utilizaban eufemismos, como el de Plutón (“el Rico”), con el que se alude a las riquezas terrenas y del subsuelo de las que era dueño. En los mitos griegos, figura casi exclusivamente en el de Deméter, madre de su esposa Perséfone. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 15/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Hades y Perséfone con el Can Cerbero, Museo de Heraklion (Creta) Respecto a las almas de los muertos, éstas eran acompañadas hasta el reino de Hades por Hermes, quien las dejaba en la puerta del mismo (Erebo), la cual era guardada por el feroz Can (perro) Cerbero, que tenía tres cabezas (o cincuenta, según Hesíodo) e impedía que ninguno de los que la hubieran traspasado volviera a la tierra,). Franqueada ésta, las almas cruzaban el río Flegetonte o, según otra versión, el Estigia en la barca de Caronte, previo pago de un óbolo, que los familiares del difunto le habían puesto, después de expirar, debajo de la lengua para asegurarle dicha travesía (Según la arqueóloga Alicia Arévalo, dicha moneda, la cual aparece, en sepulturas del mundo romano, fundamentalmente, en diferentes partes del cuerpo del muerto: bajo la lengua, sobre el tórax o la pelvis, en la mano, etc., podía ser, más bien, un amuleto o talismán protector del difunto en la otra vida). Quienes no cruzaban el río vagaban por la orilla de acá del río durante cien años. Por su parte, las que sí lo conseguían se dirigían al tribunal de Hades, ubicado en el trivio consagrado a su esposa Perséfone, que se levantaba delante de su palacio, en el que eran juzgadas por Éaco, Minos y Radamantis, y, según hubieran sido sus acciones en vida, eran enviadas, por uno de los tres caminos que confluían allí, a los Campos Asfódelos, especie de Limbo de los cristianos, o al Tártaro, lugar donde los que en vida habían cometido acciones impías y actos reprobables sufrían males terribles, o a los Campos Elíseos, llanuras verdes y floridas, en donde las personas virtuosas y justas y los guerreros heroicos tenían una existencia regalada. Los romanos veneraron a Hades con el nombre de Plutón Sus atributos son el Can Cerbero, el ciprés y el narciso; se le sacrificaban ovejas negras. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 16/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica José Benlliure. La barca de Caronte (1919). Valencia, Museo de Bellas Artes DEMÉTER / CERES Deméter, hija de Crono y de Rea y hermana de Zeus, del que tuvo a Perséfone o Core (Proserpina, entre los romanos), es la Diosa Madre, principio femenino, por tanto, de la fertilidad universal en toda su extensión. Así, es diosa de la tierra productiva (a diferencia de Gea, que lo es de la tierra en sentido genérico), la cual, además de hacer crecer en ella las plantas, enseñó a los humanos las diferentes técnicas y tareas que entraña el cultivo de las mismas. Como diosa de la agricultura, los campesinos le ofrecían cada año las primicias de sus cosechas y la honraban con fiestas anuales, asociándola, muchas veces, con Dionysos, dios también agrario, introductor de la vid y del vino en el Ática. Vinculada a los cultos agrarios, de carácter popular, aunque Deméter fue incluida en el Panteón olímpico, no figura en los poemas de Homero, como tampoco Dionisos (Baco), quizá por no ser divinidades de la aristocracia. Deméter es, también, la creadora y protectora del orden social, al haber propiciado que los humanos abandonaran su primitiva vida salvaje, enseñándoles el aprendizaje y la práctica de la agricultura, y organizaran su vida en común regida por las leyes que se fueron dando. Como diosa Madre, Deméter es igualmente protectora de la infancia y del matrimonio, cuya fecundidad propicia (en sentido genérico, la diosa del matrimonio es Hera). Debido a esto, en Atenas, las jóvenes pedían a ella un esposo y las mujeres casadas celebraban en su honor la fiesta de las Tesmoforias, del 5 al 13 del mes Pyanepsion (nov.), de la que estaban excluidos los hombres y en la que se alternaban ritos de carácter serio con celebraciones nocturnas de tipo orgiástico. La leyenda y el culto de Deméter están estrechamente ligados a los de su hija Perséfone, a la cual raptó su tío Hades, rey de los Infiernos, para hacerla su esposa, formando en el mito una pareja inseparable, a la que se le suelen aplicar los mismos epítetos: las Dos Diosas, las Grandes Diosas, etc. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 17/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Deméter y Perséfone. Relieve en mármol, principios del siglo V a.C. Museo de Eleusis (Grecia). Deméter y Perséfone fueron veneradas en todo el mundo griego, pero, de manera muy especial en Eleusis, a unos 25 km. al nordeste de Atenas. El culto allí de Deméter y Perséfone se remonta, según algunos autores, al siglo XV a. C., en época micénica. Entonces el rapto de Perséfone debió de ser ya el tema central del citado mito, creado, sin duda, para explicar la alternancia de las estaciones y el misterio de la germinación y el ciclo de la vegetación, vinculándolos con la bajada de aquélla a los Infiernos, en invierno, para reunirse con Hades, su marido, y con su vuelta al Olimpo, en primavera, para estar con su madre. Al principio, sin embargo, no debió de tener la importancia que adquirió siglos después, cuando se incorporó en los Misterios de Eleusis en un momento en que éstos se habían transformado ya en su espíritu y en su forma, por influencia del orfismo, para adaptarse al nuevo carácter que se le imprimió a la religión mistérica de Eleusis, en la que la desaparición del cereal y de la vegetación, en general, en invierno y su germinación en primavera, se interpretaron, principalmente, como una metáfora de la desaparición de los humanos del mundo de los vivos, al morir, y de su resurgimiento posterior a otra forma de vida. Hesíodo menciona el rapto de Perséfone en su Teogonía, pero donde se desarrolla en extenso es en el Himno a Deméter, atribuido falsamente a Homero, el cual debió de ser compuesto no antes del siglo VI a. C. y representa la forma más antigua conocida de los Misterios eleusinos. Según el citado himno, la conversión de Perséfone en reina del Inframundo se debió a un plan trazado previamente por su padre Zeus. Un día en que Perséfone se encontraba con otras muchachas cortando flores en la llanura de Nysa (de localización incierta), o, según la tradición romana, en http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 18/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica un prado cerca de la ciudad de Henna, en la isla de Sicilia, se abrió la tierra de repente y surgió de ella su tío Hades en un carro tirado por corceles negros, quien la raptó, con la anuencia de Zeus, y se la llevó después a los Infiernos para hacerla su esposa. Rapto de Perséfone, Christoph Schwarz, 1545-1599, Fitzwilliam Museum, Cambridge. Alertada Deméter por los gritos de su hija acudió a socorrerla y, como no la encontró, recorrió afligida la tierra en su busca durante nueve días y nueve noches alumbrándose con una antorcha en cada mano, hasta que Helios (el Sol), que ve todo, le reveló lo que había sucedido. Deméter entonces abandonó, irritada, el Olimpo y marchó, disfrazada de anciana, a Eleusis, en donde fue admitida en el palacio de Céleo, quien la nombró nodriza de su hijo pequeño Demofonte, al que pretendió convertir en dios, paro la imprudente intervención de su madre lo impidió. Revelada después su identidad, pidió a los habitantes de Eleusis que le erigieran un templo, cosa que hicieron de inmediato. Después Deméter se encerró en el templo que se le había erigido y dejó de cumplir sus funciones divinas. La tierra, entonces, se volvió estéril y no producía frutos, por lo que los hombres y los animales corrían peligro de morir de inanición. También los dioses sufrían las consecuencias de ello, ya que, debido a la carestía general, se vieron interrumpidos los sacrificios que los humanos hacían en su honor. Zeus, alarmado por todo esto, pidió a Hades que devolviera a Perséfone a su madre. Pero aquélla había comido unos granos de granada que le había dado su marido, lo cual le impedía salir del Infierno. Al final, llegaron al acuerdo de que una tercera parte del año -los meses del invierno en los que la tierra es improductiva- los pasara Perséfone con su marido en el Hades y el resto -los meses en los que la tierra es fértil- los pasara con su madre. Satisfecha con esta decisión, Deméter volvió al Olimpo, después de instaurar los Misterios Eleusinos y de entregar, según otra tradición, a Triptólemo, hijo también de Céleo, un carro tirado por serpientes aladas y unas espigas con el encargo de extender su cultivo por todo el http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 19/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica mundo. Triptólemo en el carro tirado por serpientes aladas con las espigas que le entrega Deméter. Cerámica griega de figuras rojas, ca. 470 a. C. Museo Getty (California) En los Misterios de Eleusis, podían participar personas adultas, incluidas las mujeres, los esclavos y los extranjeros, que estuvieran libres de crímenes de sangre y hablaran la lengua griega, los cuales estaban obligados a mantener en secreto las revelaciones recibidas y las experiencias vividas en ellos, so pena de caer en el deshonor e, incluso, de ser condenados a muerte, lo que explica que nos haya llegado escasa información de los mismos, y se celebraban en dos fechas del año: en el mes Anthesterión (mar.-abr.), cada año, los “Misterios menores”, los cuales se organizaban en Atenas y tenían por objeto preparar a los mistas (iniciandos) admitidos por el Gran sacerdote (Hierofante), de entre los miles que habían solicitado participar en ellos, para poder celebrar después los grandes Misterios, y consistían en ayunos, baños en el río Ilisos, cantos y sacrificios; y, en el mes Boedromión (sep.-oct.), del 14 al 23, cada cuatro años, los “Misterios mayores”, los cuales se celebraban en Eleusis y en Atenas y comprendían, de forma sumaria, los festejos siguientes: El día 14, eran llevados los Hiera (objetos sagrados) desde el Anaktoron del Telesterion de Eleusis hasta el templo Eleusinion de Atenas, erigido al pie de la Acrópolis, recorriendo el llamado “Camino Sagrado”. El 15, los mistas se concentraban en el Pórtico pintado (Stoa Poikilé), en donde un heraldo hacía, por indicación del Gran sacerdote (hierofante), la proclamación de los Misterios (prórrhesis), luego se celebraba el sacrificio de unos cerditos, con cuya sangre se rociaba a los que iban a ser iniciados y después éstos, sentados sobre una piel de carnero y en silencio, eran purificados por el fuego (acercándoles una antorcha encendida) y pasándoles por http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 20/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica encima de su cabeza la cesta mística con los objetos sagrados. El 16, los mistas efectuaban un baño ritual en las aguas de la bahía de Falero. El 17, se incorporaban al grupo de mistas los que habían llegado tarde y se conmemoraba, desde 420 a. C., la participación de Asclepio (Esculapio) en los Misterio eleusinos, en cuyo honor se hacía un sacrificio y una procesión nocturna. El 18 se tomaba como día de descanso. Telesterion. Era el más importante de los edificios sagrados de Eleusis, el cual, en su momento de mayor extensión, tenía unas dimensiones de 44 X 42 m. En cada uno de sus cuatro lados, había ocho filas de gradas talladas en la roca o hechas con piedra caliza y podía albergar 3000 personas. En su interior se encontraba el Anaktoron, primer templo del periodo micénico, custodiado y habitado por las Sacerdotisas de las Dos Diosas. en el que se guardaban los Hiera y al que tenía acceso .únicamente el Gran sacerdote (Hierofante) El 19, se volvían a llevar los Hiera al Anaktoron de Eleusis en otra gran procesión, más solemne, si cabe, que la anterior, la cual partía del Cerámico de Atenas y en la que sus integrantes llevaban ropas festivas y ramas de mirto con hilos de lana en sus manos, que balanceaban por el suelo. Cruzado el puente sobre el río Cefiso, se hacía un alto y hombres de Eleusis con la cabeza cubierta insultaban a los que participaban en la misma y mujeres desnudas gritaban obscenidades en recuerdo de las que le contó a Deméter la vieja que le hizo sonreír con ellas en el palacio de Céleo. Una vez en el santuario, los iniciandos realizaban, por la noche, cánticos y bailes en honor de la diosa. El día 20 se dedicaba enteramente al ayuno y la purificación, los cuales predisponían a los mistas, sensibilizados ya por el agotamiento que había producido en ellos el largo recorrido hecho a pie desde Eleuis a Atenas y viceversa y los demás ayunos, purificaciones y las emociones vividas http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 21/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica los días anteriores, para alcanzar simultáneamente, al final de ese día, la visión iluminadora, que habían esperado con ansiedad y temor, y el encuentro con la divinidad bajo los efectos, según algunos investigadores, del kykeon, bebida alucinógena elaborada y suministrada previamente a aquéllos por los sacerdotes del santuario, y, según otros, por el fuerte shock que experimentaban en aquel momento los iniciandos. Los días 21 y 22, por la tarde, los ya iniciados recibían en el interior del Telesterion, mediante la escenificación de los momentos más relevantes o significativos del mito de Deméter, revelaciones sobre la unión de ésta con Zeus, la bajada de Perséfone a los Infiernos y su reencuentro con ella y el viaje allí de las almas de los muertos y la manera de realizarlo con éxito, etc. Esta era la parte más importante y reservada de los Misterios. Las celebraciones del día 22 terminaban con la presentación de las espigas por parte de los iniciados. Finalmente, se sacrificaban toros y cerdos pequeños en honor de Deméter y Perséfone y se organizaba un festín acompañado de danzas, que podían prolongarse hasta la mañana del día siguiente. El regreso de los iniciados a sus lugares de origen se hacía el día 23. Los Misterios de Eleusis fueron, pues, por encima de todo, una experiencia colectiva de carácter místico, que vivían una sola vez en su vida quienes conseguían ser incluidos en ellos, a los que debía de marcar muy positivamente el resto de sus días, especialmente porque los liberaba de incertidumbres y zozobras respecto a su destino final, como señala, por ejemplo, Cicerón, uno de los iniciados en ellos: “Mediante los Misterios hemos aprendido no sólo a vivir con alegría sino a morir con una mayor esperanza.” (De legibus, 2, 14). Anexionada Eleusis por Atenas, el control de los mismos (que no la dirección, que siempre correspondió a aquélla) fue ejercido por ella, lo que explica, junto con lo indicado antes, el gran prestigio que adquirieron dichas celebraciones, el cual se conservó intacto prácticamente hasta la destrucción del santuario de Eleusis por Alarico en 394 d. C., unos años después de que Teodosio hubiera prohibido dicho culto, por ser incompatible con el cristianismo, declarado por él religión oficial del Imperio. Santuario de Eleusis. Reconstrucción Aparte de los Misterios de Eleusis, otra fiesta importante celebrada en honor de Deméter y de su http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 22/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica hija Perséfone en muchas de las ciudades de la antigua Grecia, en especial en Atenas, fueron las Tesmoforias, en las cuales sólo podían participar mujeres casadas con un ciudadano de la polis respectiva. Dichas fiestas tenían lugar los días 11-13 del mes pianepsión (septiembre-octubre) y, aunque en ellas se debió de buscar favorecer la fertilidad de las participantes, en los días previos éstas se abstenían de mantener relaciones sexuales con sus maridos. Respecto a los ritos o celebraciones concretas que tenían lugar en las Tesmoforias, no se sabe apenas nada, pues, como vimos en el caso de los misterios eleusinos, eran celosamente guardados por quienes los celebraban. El culto de Deméter, asociada a Dionisos, fue también muy importante en Sicilia, adonde fue llevado por los colonos griegos, especialmente en la ciudad de Enna, cuyo santuario se convirtió en el centro de dicha religión, rivalizando con el de Eleusis. De Sicilia pasó a la Campania, colonizada también por los griegos, y de ésta a Roma, tras una consulta de los Libros Sibilinos realizada por el dictador A. Postumio en 496 a. C., con motivo de una gran carestía que sufrió la ciudad tras la expulsión de los reyes etruscos, en donde se erigió, en el monte Aventino, un templo (Aedes Caereris), dedicado a Ceres, Liber (Baco) y Libera (Proserpina), agrupación correspondiente a la griega Deméter, Dionisos y Perséfone, respectivamente. Por el mismo tiempo se creó también en Roma la edilidad plebeya, vinculada estrechamente al nuevo culto y al templo de Ceres, cuyo principal cometido era asegurar el reparto gratuito de trigo y aceite (annona) a los miles de plebeyos empobrecidos que vivían en ella. Las Cerealia, fiestas en honor de Ceres, se celebraban del 12 al 18 de abril, y el reencuentro de Ceres y Proserpina se conmemoraba en otra fiesta que tenía lugar en agosto. Los atributos de Deméter/Ceres son: la espiga, el narciso, flor fúnebre, con la que se hacían a menudo las coronas ofrecidas a las Dos Diosas, y la adormidera; en cambio, no figuran entre ellos la granada y las habas, excluidas de las ofrendas que se les hacían. De los animales, se les sacrifican bueyes y cerdos pequeños, empleados casi siempre en los ritos de purificación, y, a veces, una cabra. El gallo y la grulla también les estaban consagrados; pero el verdadero emblema de los Dos Diosas es la serpiente, animal ctónico por excelencia. A Deméter/Ceres se la representa de pie o sentada, con una corona de espigas o con un ramo de éstas o una antorcha en la mano y, a veces, con una serpiente. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 23/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Cabeza de Deméter, con dos de sus principales atributos: ramo de espigas con adormideras y serpientes. Relieve en tierra cocida. Museo de las Termas, Roma. APOLO Apolo es una deidad de origen oriental presumiblemente, quizás un dios de los rebaños, como se recoge en el Himno a Hermes. Así se desprendería del hecho de que el arco con el que se suele representar tanto a él como a su hermana, Ártemis, fuera un arma utilizada por los asirios, los partos y los escitas, entre otros, y no así por los griegos, y, por otra parte, del apelativo Licio que se le aplica a Apolo, el cual, si se toma como gentilicio, informaría de la procedencia de este dios de Licia, región de Asia Menor, y si es un apelativo derivado de lycos (λύκος, en griego, lobo), aludiría a él como protector de los ganados matando a los lobos, grandes depredadores de los mismos. En la mitología griega, Apolo figura como hijo de Zeus y de Leto (Latona), y hermano gemelo de Ártemis. Antes de dar a luz a éstos, Leto tuvo que recorrer diversos lugares de la tierra, hostigada por la celosa Hera, hasta que llegó a Delos, isla flotante entonces del mar Egeo, que la acogió. Después del nacimiento de Apolo, en el que Ártemis, que había nacido antes, ayudó a su madre a dar a luz a éste, la isla quedó fija y le fue consagrada a él, no estándole permitido a nadie, a partir de entonces, nacer ni morir en ella. Cuando Apolo llegó a la adolescencia, se dirigió, por orden de Zeus, a Delfos, en donde, después de matar a la serpiente Pitón, que guardaba el antiguo oráculo de Gea y causaba graves daños en la región, instauró otro oráculo, que llegó a ser el más importantes del mundo antiguo. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 24/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Apolo atribuido a Leocares, siglo IV a.C. Museos Vaticanos, Roma. Apolo es una de las divinidades olímpicas más multifacéticas. Además de dios oracular, es el dios de la juventud y de la belleza, de la poesía y de la música -atribuyéndosele el invento de la lira y del arpa-, y de las artes, en general, y director del coro de las nueve Musas, que forman parte de su séquito y habitan en el cercano monte Parnaso, con el cual participa en las fiestas de los dioses. A pesar de ser muy bello, muchas de sus aventuras amorosas resultaron fallidas para él. Así, por ejemplo, cuando estaba a punto de dar alcance, tras una frenética persecución, a la ninfa Dafne, hija del dios-río Peneo, de la que se había enamorado, ésta, por intercesión de su padre, se convirtió en laurel, el cual fue consagrado a Apolo, confeccionándose después con sus ramas las coronas que se imponían a los vencedores de los Juegos Píticos. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 25/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Apolo y Dafne de Gian Lorenzo Bernini, 1625. Galería Borghese, Roma. Apolo es, también, el dios de la luz, y, como tal, terminó por desplazar a Helios (el Sol), igual que hizo Ártemis con Selene al convertirse en diosa de la Luna. Él es, así mismo, el dios de la armonía, del orden y la moderación, de la racionalidad y la perfección, conceptos que aparecen comprendidos en el término apolíneo, opuesto a dionisíaco (ver Dioniso/Baco). Esto explica que, en el frontón del lado este del templo de Apolo, figuraran, como señala Pausanias, los aforismos o máximas Γνῶθι σαυτόν (“Conócete a ti mismo”), a la izquierda, y Μηδέν άγαν (“Nada en demasía”), a la derecha; y, en las paredes del pronaos y en las columnas, incluso, del exterior, otros aforismos, hasta 147, como Σοφίαν ζήτει (“Busca la sabiduría”), Πράττε δίκαια (“Actúa de forma justa”), Ομόνοιαν δίωκε (“Busca la concordia”), Μη άρχε υβρίζων (“No gobiernes con arrogancia”), etc. Apolo es, además, el dios de las purificaciones, las cuales tuvo que hacer él mismo por sus crímenes, y posee el arte de sanar, en el que le superaría su hijo Asclepio, dios de la Medicina; y, en alguno de los mitos griegos, figura incluso pastoreando bueyes, lo cual se explicaría si, como parece, en tiempos antiguos fue un dios de los rebaños en la región de Asia Menor. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 26/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Apolo conduciendo el carro solar, crátera ática, s. V a. C. British Museum, Londres. Apolo suele ser representado como un joven imberbe, de cuerpo esbelto y atlético, con larga caballera y de una gran belleza, y sus principales atributos son el laurel, la lira, el arco, las flechas y el carcaj, y también el cuervo u otros pájaros portadores de presagios, que aluden a su poder adivinatorio. Apolo representado en un Kylix griego del s. V a.C. Museo Arqueológico de Delfos. SANTUARIO DE DELFOS. Erigido al pie del monte Parnaso en un paraje escarpado de una belleza impresionante, a 700 m sobre el nivel del mar y a 9,5 km de distancia del actual puerto de Itea, en el golfo de Corinto, el santuario de Delfos llegó a ser el más importante, rico e influyente de cuantos se levantaron en todo el mundo griego gracias a su famoso oráculo, al que iban a http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 27/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica consultar todos los años delegaciones de las diferentes polis del mundo helénico e incluso reyes de pueblos bárbaros y muchos particulares. Dicho oráculo se venía consultando, según se cree, desde mediados del segundo milenio a. C., en época micénica, estando dedicado al principio a Gea (la tierra), una vieja divinidad ctónica, la cual, según otra tradición, delegó después sus funciones proféticas a su hija Temis, y, desde finales del siglo IX a. C., pasó a ser regido por Apolo tras matar al monstruo Pitón, que lo custodiaba, engendro de la propia Gea; pero el despegue y prosperidad del santuario se produjo después de la primera Guerra sagrada (595-585 a.C.), librada entre Delfos, que fue apoyada en ella por la Anfictionía de Antala (organización supraestatal de carácter religioso basada en un pacto de no agresión, que unía 12 pueblos del nordeste griego y estaba vinculada al santuario de Deméter en Antela, junto a las Termópilas), y la vecina ciudad de Crisa, la cual cobraba una exacción a todos los peregrinos que acudían por mar al Santuario, debiendo, para esto, utilizar su puerto de Cirra (hoy, de Itea). La guerra terminó con la derrota y destrucción de Crisa, cuyas tierras pasaron a pertenecer, como terreno sagrado, al santuario de Delfos, que, a partir de entonces, fue administrado por la citada Anfictionía, la cual, aunque siguió manteniendo la administración del santuario de Deméter de Antala, fijó su sede en Delfos y adquirió poco a poco un carácter también político, diferente del puramente religioso que tenía en sus orígenes. El gran enriquecimiento, poder e influencia que alcanzó el oráculo de Delfos tras la citada guerra provocaría después tres guerras sagradas más, desencadenadas, en cierto modo, por los miembros de la Anfictionía, en las cuales algunas ciudades griegas (Atenas, Tebas y Esparta, principalmente) compitieron por obtener el control del santuario, lo cual conllevaba un reconocimiento de supremacía y prestigio sobre las demás. En la cuarta Guerra sagrada, intervinieron, por un lado, Atenas y Esparta, que habían formado una coalición para conseguir el control sobre Santuario de Delfos, y, por otro, Macedonia, la cual había entrado a formar parte del Consejo de la Anfictionía, en lugar de Fócide, tras obligar a ésta, en la tercera Guerra sagrada (356-346 a. C.), a devolver al santuario los tesoros de los que se había apoderado. La guerra terminó con el triunfo de Filipo II en Queronea (338 a. C.), pasando entonces Macedonia a ejercer la hegemonía sobre Grecia. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 28/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Perspectiva del Santuario de Delfos desde el Teatro. Otro hecho que contribuyó también a dar prestigio y a enriquecer el Santuario de Delfos fue la institución, en 582 a. C., con carácter panhelénico, de los Juegos Píticos, consagrados a Apolo, que llegaron a durar ocho días y comprendían agones atléticos y luctatorios y agones hípicos (carreras de carros y de caballos), similares a los que tenían lugar en Olimpia, Corinto y Nemea, sedes igualmente de Juegos panhelénicos, y en Atenas (en las Panateneas), y concursos de cítara, flauta y de oboe doble (αὐλός, aulós) -los cuales se venían organizando en él, junto con recitaciones rapsódicas, acompañadas o no por alguno de dichos instrumentos, desde el siglo VII a. C., al menos-, y posteriormente concursos dramáticos y poéticos. Las agones hípicos debieron de realizarse en el hipódromo, situado en la llanura, del cual no se han hallado restos, como tampoco del primer estadio, en el que se harían los agones atléticos y luctatorios. Sí se conserva, en cambio, el estadio que se construyó o remodeló, al menos, en el siglo III a. C., a unos doscientos metros del teatro, por la parte de atrás del mismo, el cual, a su vez, había sido levantado en el siglo IV a. C. cerca del templo de Apolo. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 29/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Vista aérea del Santuario de Delfos. En la parte superior derecha, el Estadio. En la parte inferior, Teatro y Templo de Apolo. Fuente: Origenes del hombre, tomo 74. Grecia emergente (I), A. Johnston, 1996. El recinto donde estaba ubicado el templo de Apolo fue rodeado en el siglo VI a. C. con un muro con varias puertas y su pendiente alojaba diversas terrazas, en la más alta de las cuales se levantaba aquél. Los que acudían a Delfos para consultar el Oráculo entraban, después de purificarse en la fuente Castalia, por la puerta principal, situada en la esquina suroriental del recinto. Franqueada ésta, recorrían la Vía sacra -trayecto serpenteante de unos centenares de metros por el que se accedía al templo-, la cual estaba flanqueada a un lado y a otro por los tesoros o pequeñas capillas levantadas por las polis griegas más ricas, donde guardaban los exvotos y las donaciones hechas al Santuario. Plano del Santuario de Delfos. El camino marcado http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 En dicho recorrido, se podía admirar también las numerosas estatuas de mármol o de bronce erigidas en honor de Apolo y de otros dioses olímpicos y semidioses o héroes, así como Auriga de Delfos, en bronce, 475 a.C., que 30/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica de generales, formaba parte de una cuádriga. Museo Arqueológico de Delfos almirantes y personajes famosos del mundo griego, fundamentalmente, que aparecían salpicadas por todo el recinto, y también esculturas de gran valor, regalos de reyes o de ciudades en agradecimiento a los servicios prestados por el oráculo, como el león de oro sobre una base de lingotes del mismo mineral de un cuarto de tonelada de peso, que donó Creso, último rey de Lidia, en el siglo V a. C.; o el trípode con una niké (victoria), también de oro, que regaló al Santuario Gelón, tirano de Siracusa, por el triunfo obtenido sobre los cartagineses en la Primera guerra de Himera (480 a. C.); o la cuádriga de bronce, de la que se conserva sólo el famoso auriga, costeada por el príncipe siciliano Polizalos, primo de Gelón, ganador de la carrera de cuadrigas de los Juegos Píticos en el año 475 a.C. Con tales donaciones, las polis y los reyes que las hacían querían manifestar la piedad y el agradecimiento a Apolo por las ayudas recibidas, pero, sobre todo, su poderío y su riqueza. en blanco es la Vía Sacra. guiadegrecia.comgreciacentraldelfos.html Fuente: Tras llegar el consultante al templo de Apolo, hacía la ofrenda del pélamo (torta de cebada) y pagaba las tasas correspondientes, lo cual le daba derecho a ofrecer, en el altar que había delante de aquél, un sacrificio, generalmente de una cabra, que abundaban en la zona, parte de cuya carne se quemaba en honor del dios y la otra se distribuía entre los asistentes, como sucedía en los sacrificios de animales en honor de cualquier otro dios. Los sacerdotes deducían, por los movimientos del animal al ser sacrificado, si el dios estaba dispuesto o no a dar su respuesta. En caso afirmativo, el consultante era conducido a la sala de espera, subterránea, contigua al ádyton, el cual contenía el ónfalo (ὀμφαλός, ‘ombligo’), de piedra y con forma de medio huevo, el trípode de la Pitia o Pitonisa y demás instrumentos proféticos y, posiblemente, una estatua de Apolo. El citado ónfalo fue erigido en Delfos por ser el lugar donde se encontraron, según la leyenda, las dos águilas que Zeus había soltado en los extremos de la tierra, para saber cuál era el centro de la misma, haciendo que volaran una en la dirección de la otra. Por ello, Delfos era considerada el centro (el ombligo) de la Tierra. Teniendo en cuenta, sin embargo, que piedras cónicas de este tipo se hallaron también en otros centros oraculares de Egipto, Nubia, Fenicia, etc., a través de las cuales los dioses daban sus respuestas a los consultantes, cabe pensar que la de Delfos se usó con tal fin en el oráculo primitivo y, posteriormente, se debió de colocar en el ádyton del templo de Apolo, en el que la Pitia emitía sus oráculos. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 31/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Ónfalo de Delfos, réplica en piedra de época de los romanos. Museo Arqueológico de Delfos. Respecto al nombre de Pitia, deriva de Pitón -serpiente a la que, como dijimos arriba, mató Apolo antes de fundar en Delfos su oráculo, quien, por lo mismo, fue invocado también como Apolo Pitio-, el cual debió de imponerse pronto allí frente al de Sibila, que fue, según una tradición, el nombre de pila de la joven que gozó allí, primero, de dotes adivinatorias y que terminó generalizándose en otros centros oraculares, como el de Cumas, en Italia. Cuando había que nombrar Pitonisa, los sacerdotes del templo elegían a una muchacha de Delfos, independientemente de su clase social, de vida intachable y que evidenciara, “se supone”, tener una buena aptitud para entrar en trance en el momento de la consulta a Apolo. Su nombramiento era vitalicio y se comprometía a vivir en el Santuario y a guardar una continencia absoluta. Posteriormente, se decidió nombrar pitonisas, después, quizá, de que alguna de ellas hubiera quebrantado su compromiso al respecto, a mujeres maduras, tres, incluso, en la época de mayor apogeo del Santuario. Al principio, las consultas al oráculo se hacían, una sola vez al año, el día 7 del mes Bisio (marzo-abril), en el que, según la tradición délfica, nació Apolo; más tarde, en ese día se realizaba, presumiblemente, la consulta pública delante del templo, a la que se refiere Eurípides (Ion, 420) y que bien pudiera tener carácter gratuito, mientras que las “de pago” se efectuaban, en el interior del mismo, el día 7 de los restantes meses, excepto los de invierno, que Apolo los pasaba en el país de los hiperbóreos, al norte de Tracia, donde no se conocía la vejez, la enfermedad, ni la guerra. En esos meses, le sustituía en Delfos el dios Dioniso, el cual volvía a la vida en forma de niño mediante un sacrificio y una serie de ritos secretos efectuados en el templo de Apolo por los Hosioi (sacerdotes ayudantes), ejecutando las ménades sus danzas frenéticas en la altiplanicie del monte Parnaso a la luz de antorchas. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 32/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Durante la consulta, la Pitia no era visible al consultante, como señala Plutarco -quien fue el sacerdote principal (sacerdote-profeta) del oráculo durante algunos años a finales del siglo I d. C., y hacía sus predicciones sentada en un trípode, colocado sobre una grieta de la que, según algunos autores de los siglos III y IV, en su mayoría cristianos, que pretendían desacreditar el oráculo y el paganismo, en general, salían vapores, los cuales, junto con la masticación previa de hojas de laurel, hacían que aquélla entrara en trance, durante el cual pronunciaba, entre contorsiones y gestos delirantes, palabras confusas e incoherentes, que le inspiraba Apolo. Estudios arqueológicos y geológicos recientes, sin embargo, realizados en el templo de Apolo no han demostrado fehacientemente aún que hubiera alguna vez allí falla o fisura del terreno por la que salieran dichos gases; y, por otra parte, masticar hojas de laurel se ha constatado que no produce efectos alucinógenos, por lo que la Pitia alcanzaría el citado estado de forma natural. El rey Egeo consulta a la Pitonisa de Delfos, cerámica griega del siglo V a. C. Museo de Antigüedades de Berlín. La repuesta dada por Apolo a través de la Pitia le era entregada luego al consultante -por escrito y generalmente, al principio, al menos, en verso (hexámetro)-, por un sacerdote del templo, teniendo la mayoría de las que se referían a un acontecimiento futuro, individual o colectivo, un sentido ambiguo, de forma que cualquier resultado pudiera justificarse. Una de estas respuestas, modelo de ambigüedad, recogida por Cicerón en De divinatione II, 115, 11, es la que dio el oráculo a Creso, rey de Lidia, gran benefactor del santuario. Decidido éste a invadir el territorio persa, recibió del oráculo de Delfos, al que había ido a consultar al respecto, esta respuesta: “Si cruzas el río Halys – éste señalaba el límite entre Lidia y Persia-, destruirás un gran imperio”. Considerando que éste era el de los persas, lo invadió, siendo destruido el suyo, lo cual se atribuyó a que Creso había interpretado erróneamente el oráculo, dado que el “gran imperio” al que se http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 33/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica refería éste era el suyo y no el de los persas. En situaciones conflictivas, el oráculo (mejor, los sacerdotes del templo) solió decantarse por la opción política que, a priori, favorecía sus intereses. En las Guerras Médicas, por ejemplo, se decantó por los persas, sin duda, para granjearse su apoyo y evitar posibles represalias, en el caso de que éstos vencieran a los griegos, lo cual era de esperar, dada su gran superioridad militar y la inveterada rivalidad de las polis griegas, si bien dicho triunfo no se produjo. Menos “problemáticas” debieron de resultar al oráculo las consultas en las que se le pedían buenos consejos y las que se referían a la creación de una nueva colonia, dado que, en este último caso, el Santuario poseería abundante documentación sobre la mayoría de los lugares de interés, a este respecto, de la costa mediterránea y del Mar Negro, proporcionada por los fundadores (οἰκισται, oikistés) de una colonia, los cuales volverían siempre al Santuario para agradecer a Apolo su patrocinio, proporcionando entonces a aquéllos amplia y rica información sobre el lugar en el que la hubieran creado, de la que ellos tomarían buena nota para hacerla servir en esa ocasión. Conquistada Grecia por los romanos (s. II a. C.), el Santuario de Delfos mantuvo largo tiempo su anterior prestigio, siendo el emperador Adriano, gran admirador del mundo clásico, el que más lo favoreció. Su decadencia se inició con las incursiones de los hérulos, godos y bastarnos en el siglo III d. C., los cuales lo saquearon y destruyeron la mayoría de las estatuas que aún quedaban en pie. La actividad en él cesó, por fin, en tiempos de Teodosio I tras proclamarse el Edicto de Tesalónica (380 d. C.), en el que el cristianismo pasó a ser la religión oficial del Estado, siendo prohibidos, en consecuencia, todos los cultos y celebraciones paganas. ÁRTEMIS o ARTEMISA / DIANA También Ártemis debió de ser una divinidad de origen oriental; pero, a diferencia de la Ártemis griega o la Diana romana, en Asia Menor fue una diosa de la tierra y la fertilidad, asimilada a la prehelénica “Señora de los animales”, venerada en Creta, por ejemplo, y a la frigia Cibeles. En la antigüedad, se le llegaron a ofrecer, incluso, sacrificios humanos. Su principal lugar de culto en dicha región fue Éfeso, ciudad fundada en la costa occidental de la Península de Anatolia cerca de la actual Izmir, en Turquía, por colonos jonios que emigraron del Ática y de la isla de Eubea, fundamentalmente, en los siglos XII y XI a. C., huyendo de los dorios invasores de la Grecia continental, y se establecieron en antiguas factorías micénicas de las islas del Egeo y en toda la zona central de la citada costa, denominada, por lo mismo, Jonia. Su excelente ubicación hizo que Éfeso se convirtiera después en un centro comercial importante, al confluir en ella comerciantes y viajeros procedentes de los pueblos y ciudades más ricos y avanzados de entonces. El culto a la Gran Madre o Cibeles, al que, como dijimos antes, se asimilaría después el de Artemisa, debió de practicarse en Éfeso desde el Neolítico, primero, en algún altar al aire libre y, más tarde, en http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 34/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica templos de reducidas dimensiones. Pero, cuando ésta habría alcanzado un alto nivel de prosperidad, se le erigió ya, a principios del siglo VII a. C., un gran templo de piedra (Artemision), el cual fue destruido por los cimerios, así como la ciudad, alrededor de 650 a. C. Artemision de Éfeso. Reconstrucción. Sometidas en 560 a. C. las polis griegas de Anatolia por Creso, último rey de Lidia, a quien se le atribuyó una fabulosa riqueza, éste decidió construir en Éfeso otro Artemision, más grande y suntuoso que el anterior, que emulara la Sala hipóstila de los templos egipcios, el cual se hizo de mármol lujoso y fue decorado espléndidamente. Según Plinio el Viejo, era de 115 m de largo y 55 m de ancho y tenía 127 columnas de 18 m de alto, todo lo cual lo convirtió en una de las Siete Maravillas de la Antigüedad, del que se conservan escasos restos. Los efesios se sentían muy orgullosos de él así como de su patrona, Artemisa, a quien estaba dedicado, en cuyas estatuas se la suele representar con una corona amurallada, símbolo de Cibeles, y con múltiples nódulos en el pecho, los cuales algunos autores los han interpretado como senos de mujer, y otros (más acertadamente, a mi modesto entender), como testículos de toro, animal que, en la civilización minoica y en las del Mediterráneo oriental, en general, tuvo carácter sagrado y fue considerado símbolo de fecundidad. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 35/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Artemisa de Éfeso, copia romana del siglo I d. C. Museo de Efeso (Turquía) En la mitología griega, Ártemis es hija de Zeus y de Leto y hermana gemela de Apolo, al que precedió al nacer. Por ello, hizo de comadrona de su madre cuando daba a luz a éste, en lugar de Ilitia, la diosa de los partos, ya que Hera, esposa de Zeus, la había secuestrado, por celos, para evitar que Leto, encinta de aquél, diera a luz a los gemelos, lo que explica que Ártemis fuera invocada también por las parturientas. También Artemisa acabó siendo identificada con la Luna, desplazando a Selene, así como su hermano Apolo lo fue con el Sol, haciendo lo mismo con Helios.Pero Ártemis es, ante todo, una diosa de la caza, honrada en las regiones montañosas y agrestes, a la que invocaban los cazadores antes de iniciar sus cacerías. Orgullosa y arisca, se complace sólo en recorrer, vestida con una ligera túnica hasta las rodillas y provista de un carcaj, las montañas y los bosques con un séquito de ninfas y una jauría de perros, persiguiendo a los ciervos y a los jabalíes. Ella es también diosa de la virginidad y, como tal, protege a las doncellas y a los jóvenes castos, como las Amazonas o Hipólito, frente a Afrodita, que lo es del amor. Así, Afrodita planeó castigar al joven Hipólito por desdeñar el amor -tema que aparece desarrollado en la tragedia homónima de Eurípides-, suscitando en su madrastra Fedra una intensa pasión hacia él. Enterado Hipólito de esto por la Nodriza, recriminó duramente a Fedra su loco desvarío y le dijo que jamás traicionaría a su padre, Teseo, con ella. Perdida la esperanza de conquistar a su http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 36/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica hijastro, Fedra escribe, despechada, una tablilla dirigida a su marido, en la que le indicaba que Hipólito la había deshonrado y, después, se ahorca. Leída ésta, Teseo hace venir inmediatamente a su hijo y lo increpa, enfurecido, por la grave afrenta que le había causado, y, al no creer en las respuestas que le da con las que intentó demostrar su inocencia al respecto, lo maldice y expulsa del palacio. Emprendido el camino del destierro, Hipólito es arrollado por las ruedas de su carro, quedando malherido. Entonces Ártemis, venerada por aquél, revela la verdad de lo sucedido a Teseo, quien mantiene con su hijo moribundo, cuyo cuerpo le había sido traído, un emotivo diálogo hasta que expira en sus brazos. Otro mito relacionado con Artemisa es el de Níobe. Ésta era hija de Tántalo y se casó con Anfión, rey de Tebas, con quien engendró siete hijos varones y siete hembras. Envanecida por su numerosa prole, echó un día en cara a las mujeres tebanas que tributaran culto a Leto (Latona), la cual había tenido sólo dos hijos, Artemisa y Apolo, y no a ella, que había alumbrado catorce. Tamaña impiedad de Níobe fue duramente castigada por Leto, que se sirvió, para ello, de sus dos hijos, cada uno de los cuales mató a los Nióbidas de su mismo género con sus certeras flechas. Cuando se enteraron del trágico final de sus hijos, Anfión se suicidó y Níobe fue a encontrarse con ellos y, al ver sus cadáveres, quedó profundamente abatida y hecha un mar de lágrimas. Conmovido Zeus de ella, la transformó en una roca, la cual fue trasladada por el viento hasta la cima del monte Sípilo (situado cerca de la actual ciudad urca de Manisa), donde quedó fijada, brotando de su base desde entonces una fuente de agua, que son las lágrimas que Niobe sigue derramando por sus hijos muertos de forma tan violenta. Apolo y Ártemis asaetean a los hijos de Níobe. Cerámica ateniense, http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 37/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica 460-450 a.C. Museo del Louvre, París. Acteón fue otra de las víctimas de Ártemis. Era nieto de Cadmo, rey de Tebas, y había sido educado por el centauro Quirón, quien le enseñó el arte de la caza. Un día, mientras recorría con su jauría de cincuenta perros el monte Citerón, sorprendió a Ártemis desnuda bañándose en la fuente Partenia acompañada de sus ninfas. Cuando la diosa se percató de la presencia de Acteón por los gritos que dieron aquéllas al verlo, avergonzada de ser contemplada así por un mortal, como no tenía cerca el arco y las flechas, le arrojó agua de la fuente a la cara transformándolo en un ciervo, y, luego, azuzó a sus propios perros para que lo persiguieran y lo despedazaran cuando le dieran caza. Los perros buscaron, después, en vano a su amo por todo el paraje, y, cuando llegaron a la caverna de Quirón, éste, enternecido por sus aullidos lastimeros, modeló una estatua a imagen de aquél. Tampoco Agamenón, rey de Micenas, se libró de la ira de Artemisa. Nombrado jefe supremo del ejército griego que iría a Troya para vengar la afrenta sufrida por Menelao, rey de Esparta, por el rapto de su esposa Helena por el troyano Paris, salió un día de caza y mató a una cierva alardeando, entonces, de que él era mejor cazador que Artemisa. A raíz de esto, el viento dejó de soplar por obra de aquélla, con lo que las naves que estaban atracadas en Áulide e iban a transportar al ejército a Troya no podían zarpar. Consultado al respecto el adivino Calcante, dijo que, para aplacar a la diosa y conseguir vientos favorables, Agamenón debía permitir que le fuera sacrificada a ella su hija Ifigenia. Sin embargo, cuando el sacerdote se disponía a inmolar a Ifigenia, Artemisa la sustituyó por una cierva y se llevó a la joven por el aire hasta Táuride (Crimea), en donde la hizo sacerdotisa del templo que se había levantado allí en su honor. Este tema aparece desarrollado en las tragedias Ifigenia en Áulide e Ifigenia en Táuride, de Eurípides. Los romanos debieron de asimilar, en torno al siglo VI a. C., Artemisa a Diana, antigua divinidad itálica de la naturaleza salvaje y de los bosques, a través de las colonias griegas del sur de Italia -de Cumas, en especial-, con las cuales los etruscos establecieron pronto relaciones comerciales. En Roma, Diana era adorada en un templo del monte Aventino, principalmente por los ciudadanos de clase baja y por los esclavos, los cuales podían recibir asilo en él. Su fiesta allí tenía lugar el 13 de agosto. Los atributos de Ártemis o Artemisa / Diana son: el arco, el carcaj y las flechas, y la media luna en su frente, y sus animales preferidos, la cierva y los perros de caza. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 38/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Diana cazadora. Copia romana de un original griego del s. IV a.C. Museo del Louvre, París. AFRODITA Según Homero, Afrodita es hija de Zeus y de Díone. Hesíodo, en cambio, recoge, en su Teogonía, que nació de la espuma del mar fecundada por los genitales de Urano, al caer en él, tras amputárselos su hijo Crono. Afrodita es la diosa del amor. Seductora por excelencia, ningún dios ni mortal escapa a sus hechizos, contando para ello muchas veces con el concurso de su hijo Eros. Casada con Hefesto, le fue infiel con Ares, dios de la guerra, y con otros dioses, héroes y mortales, como el príncipe troyano Anquises, con quien engendró a Eneas, que sería el fundador de Roma. Su descendencia fue, pues, muy numerosa. Como diosa del mar, su culto va frecuentemente asociado al de Poseidón. Fue venerada especialmente en la isla de Chipre, a donde llegó al poco de nacer, y le fueron construidos templos en numerosos puertos y promontorios del mundo griego. Sus atributos son la concha, la manzana, la rosa y el mirto, los delfines y las palomas, que tiran de su carro. ARES / MARTE Ares, hijo de Zeus y de Hera, es el dios de la guerra. A pesar de su condición de olímpico, no gozó de la consideración de otros dioses. En la Ilíada, Homero lo presenta como un dios zafio y http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 39/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica brutal, que se complace con los combates sangrientos, frente a su hermana Hera, que, como diosa también de la guerra, muestra siempre un valor sereno y reflexivo. Tuvo numerosos hijos, la mayoría violentos y crueles como él. En Roma, en cambio, identificado con Marte, gozó de una alta consideración, quizá por ser padre de Rómulo y de Remo. Sus atributos son el casco crestado, la lanza y el lobo. HERMES / MERCURIO Hermes, hijo de Zeus y de la ninfa Maya, es el mensajero de los dioses, por lo que participa en numerosos mitos. Protege a los viajeros, a los ladrones, a los pastores y a los comerciantes, y acompaña las almas de los muertos al Hades. Se lo representa, generalmente, con sandalias y sombrero (petaso) alados y con bastón (caduceo) de caminante. 4. OTROS DIOSES, SEMIDIOSES Y HÉROES DIONISO / BACO Dioniso es el dios de la vid y del vino. En su origen, es probable que estuviera ligado al culto de la madre Tierra, a la fertilidad natural y a las plantas, en especial, a la vid. Por ser hijo de Zeus y de Sémele, hija, a su vez, de Cadmo, fundador de Tebas, fue per-seguido con saña por Hera, viéndose obligado a recorrer diversos lugares de Asia y de Grecia, en los cuales enseñó a sus habitantes el cultivo de la vid. Ya adolescente, regresó a Tebas, la ciudad de su madre, en donde exigió ser reconocido como un dios grande. El culto de Dioniso fue introducido en Grecia en época relativamente tardía, quizá por el carácter orgiástico del mismo y porque fuera considerado una innovación peligrosa para el orden aristocrático establecido. Dicho culto debió de penetrar por el norte, llegando primero a Tesalia y, más tarde, a Beocia -que fue uno de los principales centros del culto dionisíaco-, y al Ática, de donde irradió al resto de la Hélade, convirtiéndose pronto Dioniso en el más popular y más celebrado de los dioses griegos. En las fiestas orgiásticas de Beocia, que se celebraban cada dos años en las laderas del monte Citerón, participaban mujeres casadas, las cuales realizaban de noche danzas frenéticas, cual bacantes, en honor de Dioniso, agitando, al tiempo, el tirso y las antorchas que llevaban en sus manos y llamando a gritos al dios, y, al final de las mismas, comían la carne cruda de un animal salvaje capturado. En otras fiestas en las que se honraba a Dioniso como dios de la fertilidad y protector de la vid, se organizaban procesiones en las que se exhibía un gran falo, y los participantes en ellas, disfrazados de sátiros, silenos y ménades -habitual cortejo de Dioniso-, efectuaban danzas grotestas y http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 40/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica cruzaban con los espectadores frases picantes y gestos soeces. Este tipo de fiestas, originariamente rurales -precedentes de nuestros carnavales-, se celebraron tam- bién en las ciudades desde finales del s. VI a.C., como fue el caso de las Grandes Dionisias, las cuales, procedentes de Eleutheras (en el límite entre el Ática y Beocia), fueron introducidas en Atenas por el tirano Pisístrato, y rivalizaron en popularidad y espectaculari- dad con las Grandes Panateneas. El plato fuerte de las primeras eran las representaciones de tragedias y dramas satíricos y, posterior mente, también de comedias, las cuales se efectuaban en el teatro que había a los pies de la parte sur de la Acrópolis, cerca del santuario de Dioniso, cuya estatua, situada en el centro de la orchestra, presidía dichas representaciones. Los ritos dionisíacos se celebraban también en la Magna Grecia, y de allí pasarían a Etruria y, de ésta, a Roma, en donde Baco (segundo nombre de Dioniso) fue identificado con Liber, dios itálico de la fertilidad, en cuyo honor se celebraban las fiestas Liberalia. Las Bacanales en Roma se celebraban secretamente en el Aventino, y en ellas participaban, primero, sólo mujeres y, luego, también hombres. Aunque fueron prohibidas por el Senado en 186 a. C., por considerarlas obscenas y subversivas, continuaron celebrándose en Italia hasta bien entrado el Imperio. A Baco se lo ha representado coronado de pámpanos o de hiedra, joven, algo afeminado y de?? una belleza seductora, o gordinflón y risueño, acompañado de sátiros, silenos y bacantes PROMETEO, EPIMETEO Y PANDORA Prometeo es hijo del Titán Jápeto y primo, por tanto, de Zeus. Según una tradición, él y su hermano Epimeteo modelaron con arcilla a los primeros hombres, y, por amor a ellos, Prometeo les trajo desde el Olimpo el fue go -después de robarlo del disco solar o, según otros, de la fragua de Vulcano-, el cual les había negado Zeus. Irritado éste por ello, lo hizo encadenar a una roca de la cima del Cáucaso, y le envió un águila (o un buitre), que le devoraba el hígado de día y, de noche, le volvía a crecer para poder ser devorado de nuevo indefini- damente. Dicho suplicio terminó para Prometeo cuando Heracles, que pasaba por allí, mató al águila con una flecha y lo libró de sus cadenas. Zeus castigó también a los mortales por haber aceptado el fuego robado por Prometeo, enviándoles a Pandora, la primera mujer, a la que había moldeado, por orden suya, Hefesto y dotado de una gran belleza y atractivo, los cuales sevieron acrecentados con los dones que le otorgaron, a su vez, Atenea, Afrodita y Her mes. Cuando Pandora llegó a la tierra, Epi meteo se ena moró perdida mente de ella y la tomó por es posa, a pesar de haberle ad vertido Prometeo que debía desconfiar de Zeus y de sus regalos. Hesíodo indica en Los trabajos y los días que los http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 41/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica hombres habían vivido libres de fatigas y de enfermedades hasta el día en que Pandora abrió, llevada por la curiosidad, el ánfora (o la caja, a partir del Renacimiento, “caja de Pandora”) que había traído con ella y debía mantener cerrada, de la cual salieron al punto todos los males que aquejan a los mortales. Asustada por esto, la cerró al punto, quedando sólo en el fondo de aquélla la esperanza. Pandora sería, según la mitología clásica, la introductora en el mundo de todos los males que afligen a la humanidad. A su vez, Prometeo, fue considerado por Eurípides, por ejemplo, y en el Romanticismo como un filántropo rebelde, que sufre la ira de Zeus, por ayudar a los mortales; y, más modernamente, como el impulsor del progreso técnico. SÁTIROS, SILENOS Y FAUNOS Los Sátiros son unas divinidades menores de naturaleza rústica, cuya parte superior suele ser repre- sentada con figura de hombre con unos labios gruesos, pequeños cuernos en la frente y orejas puntiagudas; mientras que la inferior es de macho cabrío con una larga cola de caballo detrás. Suelen participar en los ritos báquicos, y su gran lascivia les impulsa a perseguir continuamente a las ninfas y a las ménades por las montañas y los bosques. Cuando se hacen viejos, reciben el nombre de Silenos, y se les representa, a menudo, ebrios y con un vientre prominente, subidos en un asno. Los Fauno romanos, en época clásica, fueron identificados con los sátiros helénicos. El cristianismo se inspiró, sin duda, en los sátiros para representar a los demonios. En la actualidad, se aplica el apelativo de sátiro a la persona lasciva y, a menudo, exhibicionista. ASCLEPIO / ESCULAPIO Según una tradición, recogida, entre otros, por Píndaro, Asclepio es hijo de Apolo y de Corónide, hija, a su vez, del rey de Tesalia Flegias. Educado por el centauro Quirón, adquirió grandes conocimientos de medicina, llegando incluso a devolver la vida a muchas personas después de morir. Pero esto no era del agrado de Zeus, ya que iba contra las leyes de la naturaleza, y por ello lo fulminó con un rayo. Recuperada la vida por intercesión de Apolo, fue incluido entre los inmortales como dios de la Medicina, después de perder su cuerpo mortal. Epidauro, en el noreste del Peloponeso, fue el centro más importante del culto a Asclepio, de donde se extendió a muchos lugares del mundo griego. Su Santuario lo integraban, en el s. IV a.C., el templo de Asclepio y diversas dependencias, las cuales fueron ampliadas y enriquecidas en los siglos siguientes para dar acogida a los numeroso peregrinos que acudían allí para curarse de sus dolencias y enfermedades, lo cual contrbuyó a hacer de aquél el centro terapéutico más visitado y http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 42/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica famoso de la antigüedad. Las Fiestas asclepieias, cele- bradas cada cuatro años en Epidauro (nueve días después de las Istmias, de Corinto), en las cuales había concursos musicales, representaciones dramáticas en su espléndido teatro y competiciones atléticas en el estadio, confirman esto mismo. Santuarios como el de Epidauro se construyeron también -generalmente en zonas boscosas y con fuentes de aguas termales-, en otros lugares de la Hélade. Pausanias (s. II d.C.) menciona, en su Ἑλλάδος περιήγησις (Descripción de la Hélade), 63 de ellos, pero debieron de ser muchos más. Los más importantes, aparte del de Epidauro, fueron los de Pérgamo, Atenas, Esmirna, Delfos, Cirene y el de la isla de Cos, en donde Hipócrates creó una escuela en la que el estudio y el remedio de las enfermedades se realizaba ya con métodos científicos (ver pág. ¿??). En Roma, donde se veneraba a Apolo como dios protector de la salud desde el s. V a.C., las prácticas curativas del santuario de Epidauro y el culto de Asclepio (Esculapio, para los romanos) fueron introducidas a raíz de la epidemia que se declaró en ella en 293 a.C., construyéndose entonces en la Isla tiberina un santuario en honor de Esculapio de características similares a las del de Epidauro. En 426, el emperador Teodosio mandó clausurar éste y todos los demás santuarios paganos del Imperio. Asclepio ha sido representado, generalmente, como un personaje venerable, con barba, de pie o sentado en su trono, con un bastón en la mano y una serpiente enrollada al mismo. La serpiente, el bastón y la copa, que contenía la pócima con la que Asclepio curaba a los enfermos, son actualmente el emblema de la Medicina EROS / CUPIDO Eros es el dios del deseo amoroso, hijo de Afrodita y, según la tradición más aceptada, de Hermes. Habitual acompañante de Afrodita, ésta recurre a él para que intervenga en las conquistas amorosas que ella secunda. Las flechas de Eros despiertan en el corazón de quienes las sufren una pasión irresistible, si son de oro, o un fuerte rechazo al enamorado acosador, si son de plomo. Nadie escapa a sus efectos, ya sea un dios o un mortal. Zeus, en efecto, Apolo y la propia Afrodita fueron alcanzados por ellas. Este Eros, seductor, fue considerado siempre como una divinidad menor y su culto en la Hélade fue también bastante reducido. En cambio, ha sido tema de especial inspiración para los poetas y los artistas de la Época clásica, que lo representaron como un bello joven, con alas o sin ellas, y, más frecuentemente, como un niño, con alas, armado con un arco y una aljaba llena de flechas y, a veces, con una antorcha en la mano. Y, en la Época helenística, difuminada un tanto su condición divina, se lo representa cabalgando un centauro o un delfín o rodeado de Amorcillos, juguetones y traviesos y con alas. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 43/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica 5. AGRUPACIONES MENORES Las Musas. Hijas de Zeus y, según la tradición común, de la titánide Mnemósine, las Musas se cuidan de amenizar en el Olimpo los banquetes de los dioses con sus danzas y sus cantos, bajo la dirección de Apolo. Ellas también inspiran a los artistas, en general, y, sobre todo, a los poetas. El número de las Musas, indeterminado al principio, fue fijado en nueve por Hesíodo en su Teogonía, en la que figuran también sus respectivos nombres. Los dominios de cada una de ellas, inconcretos durante mucho tiempo, salvo en el caso de Calíope, les fueron asignados en la Época helenística, quedando así: Calíope, de la poesía épica, Melpómene, de la tragedia, Talia, de la comedia; Polim- nia, de la pantomima, Euterpe de la música de flauta, Terpsícore, de la danza; Erato, de la lírica amorosa y coral; Clío, de la historia; y Urania, de la astronomía. A las Musas se las ha representado siempre como jóvenes muy bellas, y de rostro delicado. Las Ninfas. Para Homero, eran hijas de Zeus y de Metis; pero, en otras tradiciones, aparecen también como hijas de ríos de diferentes regiones. Las Ninfas son unas divinidades menores favorecedoras de las distintas manifestaciones de la Naturaleza. Habitan en las grutas, en los montes, en los valles, en las fuentes, en el mar, etc., y pasan el tiempo bailando o tejiendo, y, a veces, forman el séquito de algún dios, como Ártemis o Neptuno. Amadas por los dioses (Zeus, Apolo, Dioniso, Neptuno y Hermes), son especial objeto de deseo de los Sátiros. Por el lugar donde habitan las Ninfas, reciben nombres diversos: Las Náyades son las Ninfas de las fuentes y de los ríos, por lo que fueron consideradas también como divinidades sanadoras; las Nereidas lo son del mar; las Oréades, de las montañas; las Dríades o Hamadríades, de los árboles; etc. Como divinidades de orden inferior, al principio sólo se levantaron en su honor altares en las grutas y cerca de los manantiales, etc.; posteriormente, se les erigieron también templetes o “Ninfeos”, incluso en las ciudades, en los cuales se solían celebrar las bodas. Introducidas en Roma, especialmente por influencia de los poetas latinos, las Ninfas absorbieron pronto a las divinidades indígenas italianas de los manantiales y de los ríos, como Egeria, Carmenta, las Linfas, etc. Se las ha solido representar como jóvenes muy bellas y gráciles, con la cabeza adornada con flores, vestidas con túnicas ligeras y, a veces, desnudas o semidesnudas. 6. MONSTRUOS DE LA MITOLOGÍA CLÁSICA Las Sirenas. Son éstas unos monstruos marinos, con cabeza y torso de mujer, con alas y la parte inferior de su cuerpo de ave. Homero es el primero que las menciona en la Odisea y habla de dos. Los poetas posteriores, en cambio, hablan de tres o de cuatro. Viven en una isla de la Italia meridional, frente a Sorrento, hacia la que atraen, con sus cantos melodiosos, a los marineros que http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 44/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica pasan cerca, los cuales son devorados por ellas, después de estrellarse sus naves en los acantilados. Ulises consiguió librarse de ellas, porque, siguiendo el consejo de la maga Circe, tapó los oídos de sus compañeros con cera y él, que no quería privarse de oír su voz hechicera, se hizo atar al mástil de la nave. En algunas tradiciones se las relaciona con Perséfone, lo cual explicaría que figuren en tumbas antiguas. A partir de la Época helenística, se las representó ya sin alas y con el cuerpo de pez. Escila y Caribdis son también unos monstruos ma- rinos, creados quizá, como las Sirenas, por la imagina- ción del antiguo pueblo griego, marinero por excelencia, para explicar míticamente los peligros que entra- ña el mar para los navegantes sobre todo en algunos lugares, como el estrecho de Mesina. Escila tiene rostro de mujer y de su ingle surgen seis perros feroces. Habita en una gruta de uno de los acantilados de la parte italiana, en el citado estrecho, y devora a los marineros que llegan a su alcance. Los que consiguen escapar de ella se tropiezan con Caribdis (de ahí, la frase: Salir de Escila para dar en Caribdis), la cual, situada en otra gruta de los acantilados de Sicilia, se traga y vomita después, tres veces al día, gran cantidad de agua de su alrededor con todo lo que ella contiene: naves, marineros, etc. El Minotauro. Era un monstruo con cuerpo de hombre y cabeza de toro, que nació de los amores de Pasifae, esposa de Minos, rey de Creta, y de un toro. Al nacer, Minos lo encerró en el Laberinto que había construido Dédalo para aquél, y cada año le daba como alimento siete muchachos y siete muchachas, que era el tributo que debía pagar Egeo, rey de Atenas, por una guerra anterior entre ambos pueblos. Teseo, hijo de Egeo, dio muerte al monstruo y, con la ayuda del ovillo que le había entregado la hija de Minos, Ariadna, ena- morada de él, consiguió salir del Laberinto sin perderse en la maraña de salas y pasillos del mismo. La Esfinge. Es un monstruo alado con cuerpo de leona y rostro y pecho de mujer, el cual, instalado en una montaña de las afueras de Tebas, planteaba a los viajeros que pasaban por allí enigmas irresolubles, devorándolos después. Sólo Edipo consiguió resolver el suyo, cuando, al preguntarle: “¿Quién tiene voz, y cuatro, dos y tres pies?”, respondió: “El hombre”. La Esfinge entonces, vencida, se lanzó al vacío y pereció. 7. HÉROES MÁS CONOCIDOS Heracles / Hércules. Es hijo de la tebana Alcmena y de Zeus, que, aprovechando la ausencia de su esposo Anfitrión y tomando su apariencia, poseyó a ella. Al día siguiente volvió Anfitrión de la guerra, lo cual motivó que Alcmena concibiera mellizos: Hera- cles, dotado de una fuerza descomunal, de Zeus, e Ificles, de su marido. Hera, enfurecida por la nueva infidelidad de Zeus, http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 45/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica cuando Heracles cumplió ocho años, echó en la cuna donde dormía con su hermano dos enormes serpientes, las cuales aterrorizaron a éste, pero no así a Heracles, que las agarró con sus pequeñas pero vigorosas manos y las estranguló al instante. Posteriormente, en un ataque de locura, inspirado por Hera, mató a los tres hijos habidos con Mégara, hija del rey de Tebas, y, consultado el oráculo de Delfos al respecto, estableció que, para expiar su culpa, se pusie- ra al servicio de su primo Euristeo, rey de Micenas, quien le impuso doce durísimos trabajos, de los que resumimos, como más interesantes, los siguientes: -El león de Nemea. Era una bestia invencible, la cual causaba numerosos estragos en la región. Hércules, después de entrar en la gruta donde se refugiaba, lo estranguló, luego lo desolló y se puso su piel sobre los hombros e hizo de su cabeza una especie de casco. -La hidra de Lerna. Era una serpiente provista de muchas cabezas, que causaba grandes destrozos en los cultivos y en los rebaños de la zona. Para acabar con ella, Hércules empezó por cortarle las cabezas, pero éstas le volvían a salir al instante, por lo que decidió echarlas al fuego, y la cabeza central, que se consi- deraba inmortal, la sepultó, una vez cortada, y la cubrió con una enorme piedra, tras haber rociado sus flechas con su sangre, que era muy venenosa. -El toro de Creta. Minos, para asegurarse el trono de Creta, que se disputaba con otros pretendientes, pidió a Poseidón que le mostrara su apoyo frente a éstos, haciendo aparecer del mar un toro, que luego sacri- ficaría en su honor. Pero, cuando lo tuvo delante, lo encontró tan hermoso, que se olvidó de la promesa. Poseidón, entonces, lo castigó haciendo que su esposa se encaprichara y fuera poseída por el toro y, además, que éste se volviera furioso, echando fuego por la boca. Hércules consiguió apresarlo vivo y, montado en su lomo, regresó a Micenas. (Otra versión en pág. ¿??). -El cinturón de la reina Hipólita. Un día Admete, hija de Euristeo, mostró a éste su deseo de poseer el cinturón de Hipólita, reina de las Amazonas, que vivían en un país de Asia Menor, constituido sólo por mujeres, a orillas del río Termodonte. Para mantener su raza, capturaban hombres, a los que daban la libertad después de usarlos como esclavos para su trato sexual. De los hijos habidos con éstos dejaban con vida sólo a las niñas y, cuando éstas crecían, les cortaban un pecho para que no les estorbara en el manejo del arco. Las Amazonas eran jinetes excelentes, muy temibles y dominaban las artes de la guerra. Su reina, Hipólita, llevaba como distintivo de su poder un cinturón de oro y piedras preciosas, regalo de su padre, el dios Ares. Por orden de Euristeo, Hércules preparó una expedición al citado país y, después de muchas aventuras y luchas, consiguió arrebatarle el cinturón a Hipólita. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 46/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica -Las manzanas de oro del Jardín de las Hespérides. Cuando Hera se casó con Zeus, Gea, la Tierra, le entregó como regalo de bodas unas manzanas de oro, que aquélla, encontrándolas maravillosas, mandó sembrar en el Jardín de las Hespérides, situado, según una versión, al pie del monte Atlas, y, como las hijas de éste entraban en él para robar tan codiciado fruto, Hera confió su custodia a un dragón inmortal dotado de cien cabezas y a tres ninfas. Heracles, recibido el encargo de Euristeo de traerle algunas de las manzanas de oro que alimentaban a los dioses, en la expedición que organizó con tal motivo, liberó de sus cadenas a Prometeo, el cual, agradecido por ello, le indicó que no arrancara con sus manos las citadas manzanas. Cuando llegó, pues, allí, le propuso a Atlas que entrara en el jardín para cogerlas, mientras él lo sustituía en la dura tarea de sostener el mundo (el Cielo) sobre sus hombros. Al salir de allí con las manzanas, Atlas le dijo a Heracles que no quería volver a tomar su pesada carga. Éste, entonces, le pidió que la cogiera sólo mientras él se ponía unas almohadillas en los hombros para aguantar mejor el peso, y, agarrando las manzanas que el gigante había dejado en el suelo, salió corriendo con ellas. Cuando las recibió Euristeo, no supo qué hacer con ellas y se las devolvió a Heracles y éste, a su vez, a Hera, que las restituyó al Jardín de las Hespérides. -El can Cerbero. El perro (can) Cerbero era el guardián de la puerta de los Infiernos, que impedía la entrada en ellos de los vivos y, sobre todo, la salida a los muertos. Tenía tres cabezas y el cuerpo erizado de serpientes. Euristeo, deseando imponer a Heracles un trabajo más duro aún que los anteriores, le pidió que le trajera el perro Cerbero. Hades se lo permitió, a condición de que redujera al animal sin servirse de sus armas. Heracles luchó a brazo partido con el monstruo, consiguiendo al final someterlo. Luego lo llevó a Euristeo, que, al verlo, se escondió en una tinaja y ordenó a su captor que lo devolviera a su lugar de origen. Actualmente, se aplica el nombre de cancerbero a un portero de fútbol o a un vigilante inflexible. Heracles realizó otras muchas hazañas y diversas expediciones. En uno de esos viajes, él y su esposa Deyanira debían cruzar el río Eveno, y el encargado de pasar a los viajeros a la otra orilla era el centauro Neso. Éste, después de cruzar a Heracles, volvió a por Deyanira y, en el trayecto, intentó abusar de ella. Al oír el héroe sus gritos de socorro, disparó a Neso una flecha, que le atravesó el corazón. Neso, entonces, para vengarse de Heracles, dijo a Deyanira que, si recogía la sangre de su herida, ésta sería el filtro amoroso con el que conservaría siempre el amor de su marido. Así pues, un día en que Heracles, que había convertido a la hija del rey Eurito en su concubina, le pidió a su esposa una túnica nueva para la ceremonia en la que celebraría su victoria sobre éste. Deyanira, temerosa de perder el amor de Heracles, impregnó la misma con la sangre de Neso, y, nada más ponérsela aquél, su veneno empezó a hacer estragos en su cuerpo. Cuando Deyanira vio esto, se suicidó. Entonces Heracles, transportado al monte Eta, ordenó levantar una pira, sobre la cual se encaramó. El fuego destruía el cuerpo mortal del héroe, y, tras resonar un trueno, fue http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 47/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica transportado en una nube al Olimpo, en donde se casó con Hebe, diosa de la eterna juventud. Aquiles. Fue hijo de Peleo, rey de Ftía (pequeño país de Tesalia), y de la nereida Tetis. Recién nacido, su madre lo sumergió en las aguas del río Estigia, que volvían invulnerable la parte del cuerpo bañada en ellas, y, como, al hacerlo, sujetó al niño por el talón, éste quedó sin mojar, siendo su único punto vulnerable. Aquiles fue educado por el centauro Quirón, y, cuando llegó a la adolescencia, participó en la Guerra de Troya, en la que pronto se reveló como el más brillante de los jefes griegos. En el décimo año de la misma, se negó a combatir con ellos, irritado contra Agamenón (este es el tema de la Ilíada, de Homero) por haberle arrebatado a su esclava Briseida, después que éste se hubiera visto obligado a devolver la suya, Criseida, a su padre Crises, sacerdote de Apolo, el cual, a petición suya, había provocado una peste devastadora en el ejército griego. Debido a esto, se sucedieron las derrotas de los griegos, ante lo cual Patroclo, amigo de Aquiles, le pidió sus armas y los Mirmidones para luchar contra los troyanos, y, tras conseguir algunos éxitos sobre éstos, que lo confundieron con Aquiles, fue muerto por Héctor. Lleno de ira y de dolor por la muerte de su amigo entrañable, y sólo por esto, Aquiles volvió al combate, causando nuevamente grandes estragos en el ejército enemigo y la muerte, entre otros, de Héctor, cuyo cuerpo arrastró después, atado a su carro por los talones, alrededor de la pira funeraria de Patroclo y, algunos días más, por delante de las murallas de Troya. Recriminada su conducta por los dioses por su falta de respeto a los muertos, entregó, en una emotiva escena, el cuerpo de Héctor a su padre Príamo, rey de Troya, para que le rindiera las debidas honras fúnebres. Con ellas concluye la Ilíada. El final de Troya y la muerte de Aquiles, a manos de Paris, que le atravesó el talón con una flecha, se narran en otros poemas, algunos de ellos, perdidos. Perseo. Fue hijo de Zeus y de Dánae, hija, a su vez, de Acrisio, rey de Argos. Advertido éste por el oráculo de Delfos de que, si su hija tenía un niño, éste lo mataría después, la encerró en una cámara de paredes de bronce y la hizo vigilar día y noche. Esto, sin embargo, no fue un obstáculo para Zeus, que, enamorado de ella, la poseyó metamorfoseado en lluvia de oro, y nueve meses después Dánae dio a luz a Perseo, al cual crió en secreto. Enterado Acrisio de la existencia del niño al oír su llanto, fue a donde estaba Dánae y, no creyéndose su relato sobre la concepción del mismo, metió a ambos en un cofre y lo arrojó al mar. Llevado éste por las olas a la isla de Séfiros, lo recogió allí el pescador Dictis, hermano del tirano Polidectes, el cual, al ver a Dánae, quedó prenda- do al instante de su belleza. Pero ni ésta ni Perseo, ya adolescente, estaban dispuestos a secundar los deseos de Polidectes. Así las cosas, un día Perseo, en el curso de un banquete, prometió a aquél que le traería la cabeza de la gorgona Medusa. Las Gorgonas eran tres monstruos con cabellos de serpientes, que transformaban en piedra a todo aquel que las miraba de frente, de las cuales sólo Medusa era mortal. Convencido, pues, Polidectes de que Perseo no superaría la empresa, y deseando librarse de él, le pidió que cumpliera con lo prometido. http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 48/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Ayudado por Atenea y por Hermes, Perseo se dirigió a la mansión de las Ninfas, las cuales le entregaron unas sandalias aladas, un zurrón y el casco de Hades, que lo hacía invisible. Con estas armas y una afilada hoz de acero, que le proporcionó Hermes, llegó volando a la morada de las Gorgonas, las cuales dormían en aquel momento. Para evitar la mortífera mirada de Medusa, Teseo avanzó sigilosamente de espaldas guiándose por la imagen que reflejaba de ella su escudo, y, cuando llegó a la altura de la cabeza, se la cortó de un tajo, surgiendo de la sangre que brotaba de la herida el caballo alado Pegaso y Crisaor, el hombre de la espada de oro. Guardada la cabeza en su zurrón, Perseo se sirvió después de ella para petrificar a sus enemigos poniéndosela de frente, antes de dársela a Atenea, que la colocó en el centro de su escudo. En su camino de regreso a Argos, pasó por la costa de Etiopía, en donde vio, atada a una roca, dentro del mar, y a punto de ser devorada por un dragón, a Andrómeda, hija del rey Cefeo y de Casiopea, la cual se había jactado de ser más bella que las Nereidas, hijas de Poseidón, por lo que éste hizo salir del mar el citado dragón, que causaba graves daños en el país, los cuales terminarían, según indicó el adivino local, si se entregaba a Andrómeda al monstruo como alimento. Prendado Teseo de la belleza de ésta, prometió a sus padres que la libraría del dragón, si le otorgaban su mano después de salvarla. Concedida ésta, Teseo, cayendo desde lo alto, gracias a sus sandalias aladas, consiguió sorprender y matar al dragón, engañado por la sombra que el héroe proyectaba de sí mismo sobre las aguas. Muerto aquél, el héroe, antes de unirse a Andrómeda, tuvo que luchar contra el tío de ésta, Fineo, que también la pretendía en matrimonio, al cual petrificó mostrándole la cabeza de Medusa. Acompañado de Andrómeda, Perseo volvió a Sérifos y, al enterarse de que Polidectes había intentado conquistar a su madre por la fuerza, obligándola a refugiarse junto al altar del templo, tenido por asilo inviolable, entró donde el tirano se hallaba reunido con sus amigos, y petrificó a todos ellos con la cabeza de Medusa. Acto seguido, entregó el poder de la isla a Dictis, su padre adoptivo, y dio las alas, el zurrón y el casco de Hades a Hermes, que los devolvió, a su vez, a las Ninfas, y la cabeza de Medusa a Atenea. Des- pués se dirigió a Argos; pero, cuando Acrisio se enteró de la inminente llegada allí de su nieto Teseo, huyó al territorio de los Pelasgos para evitar que se cumpliera el oráculo. Un día, sin embargo, participan- do como espectador en los juegos que había orga- nizado el rey de Larisa en el aniversario de la muerte de su padre, Teseo, que competía en ellos en la prueba de pentatlón, al lanzar el disco golpeó con él, sin querer, uno de sus pies y lo mató. Apesadum- brado Teseo al conocer la identidad de la víctima, le tributó solemnes honras fúnebres y ordenó enterrarlo en las afueras de Larisa, y, considerándose indigno de ocupar el trono de Argos, cambió éste por el de Tirinto, donde reinaba su primo Metapentes. Ulises. Hijo de Laertes, rey de la isla de Ítaca, y de Anticlea, nieta de Hermes, llegado a la edad http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 49/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica adulta, su padre abdicó en favor de él, y, cuando se declaró la guerra de Troya, partió para ella al frente de doce naves, en la que realizó numerosas proezas guerreras y sobresalió como hábil consejero. Él fue quien sugirió construir el caballo de madera, con el que los griegos lograron, después de diez años de asedio, entrar en Troya y destruirla. (En la Eneida de Virgilio, libro II, se describe dicha conquista). Destruida Troya, en el viaje de regreso a Ítaca, Ulises tuvo que afrontar numerosas aventuras y peligros -provocados por Poseidón, enojado contra él por haber dejado ciego a su hijo Polifemo-, los cuales se narran en la Odisea, de Homero, de los que resaltaríamos: el episodio en la caverna del gigante Polifemo, al que, después de emborracharlo, quemó con un palo candente el único ojo que, como los otros Cíclopes, tenía en medio de la frente; el enfrentamiento con los Lestrigones, los cuales hundieron todas sus naves y la tripulación, excepto la suya; el paso de ésta, indemne, por la isla de las Sirenas y por el estrecho de Mesina, entre Escila y Caribdis (ver pág. ¿??); el naufragio sufrido tras zarpar de la isla de Trinacria, en el que perecieron los compañeros que le quedaban; y su estancia en la isla de Ogigia, cuyo único habitante era la ninfa Calipso, que, enamorada de él, lo retuvo allí siete años, y la posterior en la isla de los Feacios, los cuales le proporcionaron la nave con la que llegó, por fin, a Ítaca, después de una larga ausencia de ella de veinte años. En su palacio, a donde llegó disfrazado de mendigo, por consejo de Atenea, no lo reconoció nadie, salvo su viejo perro Argo, ni siquiera su esposa, Penélope, que, esperando regresara algún día, había dado largas a los numerosos pretendientes, ins- talados en él, diciéndoles que elegiría esposo cuando terminara el sudario de Laertes, el cual nunca se terminaba, pues lo que tejía de día lo destejía de noche. Descubierto por ellos el engaño, los invitó a la prueba del tiro con arco, que ninguno superó, excepto Ulises, que, en medio de las risas de todos, había pedido participar en ella. Al ver quién era éste, huyeron despavoridos, pero fueron muertos por sus fletas y las de los suyos. Así Ulises recuperó el trono de Ítaca y a su fiel esposa. Jasón y los Argonautas. Jasón fue hijo de Esón, rey de la ciudad tesalia de Yolco, al cual destronó su hermanastro Pelias, hijo de Poseidón. Educado por el centauro Quirón fuera de Yolcos, cuando llegó a la adolescencia, volvió allí para reclamar el poder a su tío. Éste le dijo que se lo entregaría, si le traía de la Cólquide, en los confines del mar Negro, el vellocino de oro, que estaba vigilado por un dragón. A tal objeto, Jasón, consultado el oráculo de Delfos, zarpó, en la nave Argo, construida por el héroe del mismo nombre, del puerto tesalio de Págasas, acompañado de unos cincuenta héroes griegos, y, tras un viaje lleno de peligros y dificultades, como fuera el de Ulises, llega- ron a la Cólquide. Al día siguiente, Jasón se presentó al rey Eetes y le expuso el motivo de su misión. Eetes le prometió que le entregaría el vellocino, si ponía el yugo a unos bueyes de pezuñas de bronce que arrojaban fuego por la nariz, y sembraba en el campo arado por éstos unos dientes de dragón que él le entregaría. Preguntándose Jasón cómo realizaría esto, http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 50/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Medea, hija del rey, que era maga y se había enamorado de él, le dijo que le ayudaría a conseguirlo, si le prometía hacerla su esposa, cosa que hizo. Medea, entonces, le dio un bálsamo, que lo hacía invulnerable al fuego y al hierro, y le enseñó la forma de deshacerse de los guerreros que nacerían de los dientes del dragón sembrados. Jasón, así, superó todas las pruebas, pero Eetes no cumplió su promesa. Jasón, entones, ayudado por Medea, se apoderó del vellocino de oro y huyó con ella, su herma- no pequeño Apsyrtos y sus compañeros en la nave Argo. Cuando Eetes supo esto, salió en su persecución, pero hubo de suspenderla pronto, al ver, esparcidos por el mar, los trozos del cuerpo del niño, descuartizado por Medea, que él tuvo que recoger. Llegados a Yolco, Jasón llevó el vellocino a Pelias, que se negó a cederle el reino. Debido a esto, Medea, convenció a las hijas de Pelias para que trocearan e hirvieran el cuerpo de su padre, ya que ello lo rejuvenecería. No fue así, y Jasón y Medea tuvieron que refugiarse en Corinto. Años después, repudiada por Jasón, se vengó de él matando a los hijos que tuvo con él y a su prometida. Jasón volvió a Yolcos y, tras matar al hijo de Pelias, reinó allí. [1] De los dos nombres que figuran, en adelante, en la relación de los dioses grecorromanos, el primero es el nombre con el que fue invocado entre los griegos, y el segundo, con el que lo invocaron los romanos. No comments yet. Deja un comentario http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 51/52 23/7/2015 Dioses, semidioses y héroes de la Mitología Grecorromana. | Temas de Cultura Clásica Name (required) Email (will not be published) (required) Website SUBMIT COMMENT © 2015 Temas de Cultura Clásica. All Rights Reserved. Powered by WordPress. Designed by http://temasdeculturaclasica.com/?page_id=950 52/52