abrazando mi libertad de ser

Diversidad Sexual
Incluyente AC
abrazando
mi libertad
de ser
GUÍA PARA JÓVENES
QUE SE DIERON CUENTA
DE SU DIVERSIDAD SEXUAL
generalmente se asocia diversidad sexual a un grupo de la población:
el formado por gays , lesbianas , bisexuales y transexuales , sin embargo,
la sexualidad es en sí diversa en cada una de las personas que habitamos
el mundo. la sexualidad está en todo lo que hacemos, desde como nos
vestimos , hablamos y caminamos , hasta como nos percibimos y pensamos
en el amor ; es una característica humana que podemos construirla
de maneras que nos permitan un mayor bienestar . desafortunadamente
se ha visto a la diversidad sexual como algo anormal o perjudicial ,
una idea errónea surgida de la incapacidad de ver que la vida , todo lo
que hay en la naturaleza , goza de diversidad. eso conduce a la exigencia
sociocultural de ser de una forma u otra , de dividir la experiencia
«hombre » o ser «mujer», y de tener prácticas sexuales
bajo el paradigma heterosexual . como querer y pedir que las flores , para
ser flores , tuvieran que ser de una forma específica , de un color único,
¿parece absurdo, no lo crees? pues así se nos ha enseñado a ser personas.
por ello es importante conocer más sobre sexualidad, o al menos
humana entre ser
entender la nuestra y saber que cada quien puede vivirla de diferentes
formas , así como cuestionar las ideas impuestas y vistas como normales ,
para identificar otras que nos aporten bienestar y permitan nuestro
crecimiento personal .
abrazando
mi libertad
de ser
Cuando mi mejor amigo tenía novia,
me encelaba mucho de ella. No sé por
qué me pasó eso, creo que él me gusta.
–Héctor, 20 años
Creo que me gustan las mujeres.
O no sé. Sólo me atraen sus senos.
¿Seré lesbiana?
–Alejandra, 19 años
Mis amigos me decían que estaba
confundido porque no me decidía si
me gustaban los hombres o las mujeres.
Sí me llegué a sentir mal por eso, pero
un día me pregunté si estaba indefinido
y dije «no, no me tiene que gustar sólo
una cosa». A mi me gustan y me atraen
hombres y mujeres, y esa es una parte
mía que no quiero cambiar. Actualmente
tengo una novia, llevamos dos años y ella
sabe que también me gustan los chicos.
Cuando vamos por la calle y voltea a ver
algún chico, le digo «ya te vi, eh, ¿verdad
que está guapo?». Los dos estamos muy
bien juntos y así seguiremos hasta que
dure. Un amigo alguna vez me dijo «pero,
para que seas bi, tienes que ponerle el
cuerno a tu novia», y le respondí «eso
no es ser bi, eso es cómo estableces tus
relaciones de pareja».
–Joaquín, 23 años
La orientación sexual es la atracción erótico y afectiva
hacia ciertas personas dependiendo de su género.
Hasta ahora, aunque existen algunas teorías en torno a
lo genético, los cromosomas, las hormonas o lo social.
no se tiene una explicación compartida y definitiva
sobre el origen de esa diversidad y lo que nos causa
deseo, amor y placer. Lo que sí sabemos es que es un
error mirar la heterosexualidad como la orientación
normal y a las demás, que son una amplia gama, como
antinaturales. enfermedades o desviaciones.
En general, los tres tipos de orientación que se han
descrito hasta ahora son:
Homosexualidad o la atracción erótico y afectiva
hacia personas del mismo género. Los términos gay
y lesbiana están generadas desde la reivindicación,
el orgullo y la libertad de esta orientación frente a la
estigmatización social.
Heterosexualidad o la atracción erótico y afectiva hacia
personas del género diferente al mío. Al parecer,
fue hasta después de 1930 que el término comenzó
a validarse en los medios de comunicación como
sinónimo de “sexualidad normal”.
Bisexualidad o la atracción erótico y afectiva hacia
cualquier género, y también puede servir como
categoría para describir una gama de posibilidades y
experiencias de vínculos, hechos de forma libre, más
allá del género de la persona.
Dado que la experiencia humana es compleja, éstas
categorías no deben verse como fijas: es muy probable
que en un futuro sean descritas de otra forma o
incluso ampliadas; en cada persona, pueden variar a
lo largo de la vida. Incluso, hay quienes deciden no
ubicarse dentro de ninguna. Así, podemos decir que,
más que una identidad, tenemos prácticas sexuales
con personas de cierto género. Dentro o fuera de estas
categorías, lo importante es que reconozcas qué te
viene bien y te gusta en cada momento de tu vida.
¿Cuándo fue la primera
vez que sentiste atracción
o deseo por alguna
persona?
¿Qué sentiste?
¿Qué emociones
experimentaste?
¿En qué partes de
tu cuerpo lo viviste?
¿Decidiste vivir eso?
¿Compartiste con
alguien lo que estabas
experimentando?
cuándo te diste cuenta
Los recuerdos sobre nuestra orientación suelen
ubicarse en la primera infancia, pueden pasar varios
años para reconocerla y darle un nombre, y otros
tantos más para hablar sobre el tema de forma abierta
en cada uno de nuestros círculos sociales o intentar
una relación.
políticamente correcto
Como en todas las esferas de la vida, te encontrarás
con muchas formas de vivir tu sexualidad, es decir,
tus gustos, tus relaciones, tus amistades, tus roles,
tu vestimenta, tus pasiones, tu erotismo y tu placer.
Para que las puedas vivir con mayor bienestar es
importante que te escuches y sientas, identifiques
qué está bien para ti y qué te funciona. Eso será tu
brújula para poder apropiarte de tu sexualidad y de
la diversidad que hay en ella.
No existe una forma correcta de ser persona, pero sí
una forma de construirte que te cause satisfacción, la
tuya propia. Encontrarla es una tarea cotidiana.
En nuestro entorno existen muchas formas de vivir
la orientación sexual, incluso desde la decisión de
comentarlo de forma abierta en todos los ámbitos
o sólo decirlo a las personas más cercanas.
Aunque los medios de comunicación generan
representaciones y estereotipos sobre la
heterosexualdidad, la homosexualidad, la bisexualidad
y la transexualidad, cada quien ha de decidir cómo
vivir su orientación sexual, buscando su bienestar.
Estoy aprendiendo a
conocerme, a saber por
qué siento lo que siento,
a diferenciar que no todo
tiene que ser como pienso
o me han dicho que debe
ser. Ahora sé que hay otras
alternativas de vivir mi vida.
Independientemente de mi
cuerpo, de mi condición
física, yo quiero crear mi
propia cultura, mi propia
forma de ser, no como
debería de ser.
–Antonio, 18 años
piensa
¿Qué estereotipos
conoces sobre
la homosexualidad
y la bisexualidad?
¿Te han etiquetado
con alguno? ¿Cómo
te sientes con eso?
¿Qué es para ti ser gay,
lesbiana o bisexual?
¿Qué ocultas para
parecerte a lo que
esperan de ti?
desenredando
el cuerpo
Yo sé que soy mujer, pero no
me gusta ser como las otras,
ni ser tímida o miedosa, me
gusta ser aventada y atreverme
a hacer cosas, creo que así
pueden lograrse muchos
éxitos en la vida. Lucho por
lo que quiero, y eso no es de
hombres o mujeres, de gustos
u orientaciones sexuales, sino
de personas que quieren ser
mejores. Yo me enamoro y me
gustan las chicas, similares o
diferentes a mí, pero que sean
sencillas, bonitas, y que sepan
lo que quieren.
–Ivonne, 18 años
Los estudios de género permiten revisar algo que, hasta hace
unos años, no era tan evidente: que nos conformamos como
personas a partir del cruce entre biología y cultura, y esto
incluye nuestro plano sexual y cómo lo vivimos. Al distinguir
entre lo biológico y lo cultural se ha podido hacer una crítica a
lo que significa ser «mujer» y «hombre»: no somos de una u otra
forma «por naturaleza» a partir de nuestros genitales, sino que
internalizamos identidades creadas en nuestro contexto. Por ello,
ninguna característica debería estar asociada, de forma exclusiva, a
lo «femenino» o a lo «masculino». Si logramos romper ese modelo
binario, dejaremos de exigir y castigar que se cumplan esos
estereotipos, en lo personal y lo social.
piensa
¿Qué te decían,
en la infancia,
sobre qué era
un niño y qué
era una niña?
Para entender de mejor forma este planteamiento y tener un
vocabulario en común es necesario revisar algunos conceptos:
Sexo, es la categoría donde agrupamos las características
genéticas y biológicas –cromosomas, genitales externos e
internos, hormonas–. Es sólo uno de los elementos de la
sexualidad humana e incluso ahí existe diversidad: aunque solía
dividirse en dos, hembra y macho, hoy se entiende que hay una
amplitud de variaciones, por lo que algunos cuerpos, a los que
se define como intersexuales, presentan ambas características
en grados variables. Con ello, se pone en duda la idea de que el
cuerpo debe tener un sexo u otro para facilitar la reproducción.
Género es la identificación con la categoría «mujer» o «hombre»
y con las conductas, valores y actitudes “apropiadas” para cada
caso; en lo general, representa la construcción cultural que hemos
hecho en torno a esas categorías. El género es aprendido, por ello
puede ser revisado y modificado a lo largo de la vida. Así, aunque
hay quienes prefieren identificarse con el género que les fue
inculcado, hay quienes construyen su identidad de manera más
libre, incluyendo elementos asociados a otros géneros. Creer en
la división binaria, en tener que estar de un lado u otro, limita la
creación de nuestra identidad.
Orientación sexual es la atracción erótica y afectiva, los deseos,
los sentimientos y las prácticas, que tiene cada persona hacia uno
o varios géneros. Hay quienes ponen un nombre a su orientación
a partir de la catalogación actual (hetero, homo, bi) y quienes
prefieren no hacerlo. Como sea, éstas deberían ser valoradas como
parte de la gama de la diversidad de la vida.
¿Qué te gustaría
modificar en
tu forma de ser
«hombre» o de
ser «mujer»?
Une con una línea
los elementos que
conforman tu
identidad actual,
y con una línea
punteada la que te
gustaría o ya estás
constuyendo
macho
pangénero
vulva
mujer
homosexualidad
poliamor
soltería
bisexualidad
hombre
estrógenos
agénero
rol pasivo
heterosexualidad
relación cerrada
placer genital
hembra
pene
intersexual
feminidad
masculinidad
rol inter
asexualidad
androginia
relación abierta
rol activo
testosterona
placer integral
flexisexualidad
Siempre creí que ser hombre era ser
peleonero, jugar futbol, no ser cuidadoso
y ser muy valiente. Por mucho tiempo
no quería ser hombre ni tampoco mujer.
Pero un día descubrí que hay muchas
formas de ser hombre y no sólo la que
la mayoría ubica. Descubrí que podía
cuidarme, practicar deportes no rudos,
ser pacífico, tener miedo y a la vez ser
aventado. Ese fue el día que con orgullo
dije «soy hombre» y me sentí muy bien.
–Santiago, 24 años
obra en construcción
Ser «hombre» o ser «mujer» no implica
seguir un manual desde el nacimiento. Con
el tiempo puede ser una carga muy grande
¿O no? Ambas deben ser construidas desde
nuestros gustos e intereses, buscando el
bienestar y reconociendo que nuestras
decisiones no nos hacen peores o mejores
personas que el resto.
Hay una característica que se agrega al
género y que nos limita como personas:
lo «masculino» es más valorado que lo
«femenino». ¿Encuentras esa relación en
frases como «pareces niñita» y «vieja el
último»? Creer que existe esa diferencia
tiene consecuencias muy graves:
A los hombres se les pide, o exige, entre
otras cosas difíciles de cumplir, que
sean fuertes y valientes, que limiten sus
emociones y lleven una vida sexual activa.
En tratar de hacerlo se les va la vida, la
felicidad y la salud.
De las siguientes características,
elije las que te parecen mejor
para tu vida:
Fortaleza
Inteligencia
Independencia
Placer
Fidelidad
Paciencia
Agradecimiento
Compasión
Protección
Autocontrol
Disciplina
Iniciativa
Conocimiento
Sensibilidad
Constancia
Valentía
Firmeza
Honestidad
Asertividad
Puntualidad
A las mujeres, en cambio, se les limita y
educa como débiles y sensibles, y a que
dependan de alguien más, de preferencia
un hombre. Si se ve mal que lleven una
vida independiente, no se les perdona que
compartan su vida con alguien inferior a un
hombre, es decir, con otra mujer.
Debemos dejar de exigirnos y exigir que
se cumplan estas ideas. Tú puedes hacer
el cambio. Decide qué está bien para ti
y ayuda a que las personas sean como
quieran ser. La discriminación, el estigma,
la homofobia, la misoginia y el machismo
son producto de una división en los
géneros y de darle mayor valor a ciertas
características.
rojo pasión
El erotismo es la capacidad humana de dar
y recibir placer, de provocar y experimentar
sensaciones que involucran al cuerpo y
las emociones. Cualquier persona tiene la
capacidad de recrear el placer sexual en
su forma de deseo, excitación y orgasmo.
Sin embargo, el placer está mal valorado,
castigado y rodeado de ideas falsas; se ha
prohibido tanto a lo largo de la historia
que por nuestra cuenta nos prohibimos los
propios placeres. El placer está en todo lo
que hacemos –al comer, dar un abrazo
o reír, cuando leemos o festejamos– y es
un motor para la vida.
Al desconectarnos del placer, lo hacemos
también de la vida, de nuestro cuerpo
y nuestras emociones. Al conectarnos,
tenemos la posibilidad de decidir sobre
cómo nos apropiaremos de él y lo
viviremos; esa es una vía hacia la sabiduría
interna, esa que nos permite aprender
a tomar decisiones, a reconocer lo que
nos gusta, a asumir responsabilidades y
manejar mejor las emociones.
todo esto es tuyo
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La sexualidad, entonces, es la suma de
elementos, entre los que se encuentran la
reproductividad, el género, el erotismo y
la vinculación afectiva. También se habla de
la sexualidad como una construcción social,
es decir, que cada uno de esos elementos
los integramos y vivimos a partir de cómo
los aprendimos en nuestro contexto. En
cada uno de ellos, incluso, existe diversidad,
por ello está en ti revisar cómo vives tu
sexualidad y decidir con el tiempo qué
cambios quieres hacer.
¿Qué tanto conoces
tu cuerpo y tus placeres?
Explora tu cuerpo: recorre tu piel,
reconoce tus sensaciones y tus
olores, las reacciones y placeres
que experimentas. Todo eso es
parte de tu sexualidad.
Después, continúa explorando tus
placeres cuando camines por la
calle o tomes un paseo, reconoce
qué te seduce de la vida, qué te
agrada y satisface, qué otras cosas
te gusta ver, sentir y disfrutar.
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todo queda
en familia
Nadie me dijo cómo sería el momento
en que mi mamá se enteraría de que
su hijo era homosexual o maricón,
como ella lo conocía. Pasó un año para
que mi mamá y yo mejoráramos la
comunicación y yo comenzara a buscar
información y compartírsela. Ahora
mi hermano Alejandro, de 8 años,
no sólo comparte la familia biológica
sino también la familia que decidí
formar con mi compañero de vida.
–Armando, 28 años
Pensar cuándo y cómo trataremos el tema
de nuestra orientación sexual dentro de
nuestra familia puede causarnos pánico.
Más si sabemos que tienen una opinión
desfavorable y de rechazo al tema.
Aunque son más comunes las reacciones
de desconcierto y rechazo, ese panorama
está cambiando y la gente tiene inquietud
por entender la diversidad sexual.
Por ello, es importante ponernos en su
lugar y aprovechar sus momentos de
apertura para compartirles nuestros
conocimientos sobre el tema y recordarles
que somos las mismas personas, pero ahora
compartiéndoles otro aspecto de nuestra
vida. Además, puedes sugerirles que visiten
algún grupo de apoyo, como el que existe
en Cuenta Conmigo.
Generalmente, cuando queremos hablar
sobre nuestra orientación no heterosexual
dentro de la familia, ya hemos pasado por
algunas vivencias, encontrado información,
generado amistades, entablado relaciones
afectivas y sexuales y, resuelto dudas sobre
nuestra sexualidad.
Deseamos que la reacción inmediata a
nuestra noticia sea de apertura, aceptación
y respeto, pero será en ese momentos que
la familia inicie ese mismo proceso que
tú pasaste por varios meses o años. Así
que también necesitarán de tiempo para
acomodar sus ideas y sentimientos.
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La paciencia es una gran aliada. Además de
compartirles información que desconocen,
puedes acompañarles en este proceso,
nada sencillo, donde deberán revisar las
expectativas que tenían sobre ti, quitarse
prejuicios y miedos relacionados al tipo
de vida que llevarás.
Las respuestas que tienen las personas
cercanas al tema de la diversidad sexual
suelen variar: hay quienes prefieren no
tocar el tema aunque lo sepan o que
sobreprotegen y restringen permisos, hay
quienes buscar alguna terapia e incluso,
equivocadamente, una cura.
Al saber de la orientación sexual de mi
hijo, me culpé. Pensaba que era así
porque me había dedicado mucho tiempo
al trabajo. Después pensé que mi esposa
había tenido la culpa, porque era posesiva
y dominante. Estaba seguro que esto
había influido. La relación y el ambiente
familiar se deterioraron mucho y, aunque
me quité algunas culpas, no recuperé la
tranquilidad. Se volvió una obsesión que
me hacia reflexionar noche y día, y llorar.
Pensaba en el sufrimiento que implicaba
para una persona gay vivir en un mundo
homofóbico y no quería que eso le pasara
a mi hijo. –José, 48 años
Nunca pensé hablar de mi orientación con
mi mamá. En ningún momento pensé
que fuera a darse cuenta. Pero lo que yo
no sabía es que las mamás siempre nos
llevan la delantera. –Juan, 23 años
Salir del clóset es una experiencia que puede
planearse y llevarse de mejor forma si tomas
en cuenta algunos puntos:
ANTES
pregúntate por qué es importante, para ti, que lo sepan
piensa con quién o quiénes quieres hablar
ten a la mano teléfonos de personas y organizaciones
que puedan apoyarte
busca un momento de tranquilidad, de preferencia en
la mañana, así, si necesitas apoyo tendrás el resto del día
evita hacerlo cuando notes tensión o enojo, y tampoco
en reuniones familiares
inicia la conversación cuando sientas seguridad
ármate de paciencia
DURANTE
decide qué y cuánto compartir
recuerda que las reacciones pueden ser diversas
responde las preguntas que te hagan tan breve o extensamente
como quieras, pero siempre de forma clara
relájate si la situación es tensa, no pelees ni intentes convencer
muestra disposición a apoyarles para resolver sus dudas
DESPUÉS acuerda el grado de confidencialidad de tu plática y si te
gustaría que te consulten antes de compartirla
sugiéreles que reciban asesoría sobre el tema en espacios
especializados en diversidad sexual
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Hablar sobre tu orientación sexual es una
decisión personal. Es importante que escuches
tu interior, tengas información y una red de
apoyo que, además de familiares y amistades,
puede estar sustentada en colectivos y
organizaciones especializadas en el tema.
Tú sabrás cuándo es el mejor momento y eso,
a veces, es el menos pensado.
nada que
temer
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Caminando en la calle con mi novia,
agarradas de la mano, nos aventaron un
hielo y nos gritaron «pinches tortilleras».
Me sentí impotente, no pude hacer algo.
–Sandra, 21 años
Yo agredo a los homosexuales en la
escuela. Los insulto a pesar de que yo
también lo soy, pero tengo que aparentar
con mis amigos que soy como ellos para
no quedarme solo. –Javier, 20 años
No me gusta juntarme con
homosexuales femeninos. Pienso que
en un futuro me veré así y eso me causa
repulsión. –Rubén, 29 años
Por homofobia se entiende, más que el miedo,
el rechazo hacia personas homosexuales o a
aquellas que se aparten del modelo tradicional de
masculinidad y feminidad, y se expresa generalmente
a través de agresiones físicas o verbales (incluso en
comentarios sutiles como «les respeto, pero que no
se metan conmigo»). Se reconoce, además, que cada
orientación sexual o expresión de género enfrenta
formas de violencia y por ello también se habla de
lesbofobia, bifobia y transfobia.
Estas manifestaciones no son naturales ni universales,
cambian de acuerdo a la época y la cultura. Mientras
en algunas sociedades está garantizado el derecho a
la no discriminación por orientación sexual, en otras
siguen penalizadas con cárcel o muerte.
La homofobia es parte de una educación que divide
el mundo en dos géneros, «mujer» y «hombre», un
binomio donde, además, se valoran de mejor forma
las características masculinas mientras se devalúan
las femeninas; y todo esto se ha establedico como
una norma incuestionable. Así, a cada persona se nos
enseña a cumplir ese sistema y a reprimir cualquier
cambio que lo altere. Por lo general, es dentro de
la familia donde se viven las primeras reprimendas
por comportarnos de una forma que no parece
corresponder con nuestro género.
15
Al mismo tiempo, es importante hablar sobre
homofobia institucional, es decir, la ejercida desde
instituciones, de cualquier tipo, que no reconocen las
relaciones entre personas del mismo género y cuyas
ideas erróneas sobre la sexualidad limita el acceso
a los derechos de todas las personas.
homofobia internalizada
Una vez que reconocemos nuestra orientación sexual,
deberíamos revisar cómo ha sido nuestra educación,
generalmente vinculada al modelo heterosexual, para
empezar a identificar nuestros prejuicios interiorizados
e inconscientes hacia la diversidad. Entre ellos,
piensa
¿Cuántos insultos
conoces para señalar
a gays y lesbianas?
¿Cuántos de esos
has utilizado?
¿Has dañado a alguien
con tus palabras?
A pesar de que me acepto
como gay, todavía hay algo
que me incomoda.
–Héctor, 21 años
Tengo miedo de quedarme
solo, que me rechacen por mi
preferencia sexual, que me
rechacen por ser quien soy.
–Alfredo, 19 años
Me siento muy solo. Cuando
me veo en el espejo, veo todos
mis defectos. Mi mundo es
un desorden. Dejo que me
pisoteen, me siento muy abajo.
–Jorge, 22 años.
16
catalogar el comportamiento de ciertas personas
como «femenino» o «masculino», o cómo debemos
vincularnos con personas de nuestro mismo género
y en una relación afectiva.
La Primera Encuesta
Nacional sobre Bullying
Homofóbico, realizada en
2012, arrojó que:
La homofobia influye en la autoestima de las personas:
gays, lesbianas, bisexuales y transexuales podemos
sentir que no tenemos derecho a exigir respeto o
un buen trato, llevarnos a una depresión, sentir que
tenemos menos posibilidades de desarrollo y éxito,
a aislarnos y a no tomar nuestras propias decisiones.
En ocasiones, representa una espiral de violencia y
maltrato que se decide callar por los propios prejuicios
y la desinformación, pero también llega a ser ejercida
desde cualquier orientación para devaluar y juzgar
las forma en que otras personas llevan su vida.
75% de los gays
encuestados sufrieron
bullying homofóbico en la
escuela, principalmente
en forma de burlas e
insultos, pero también de
golpes y abuso sexual
La homofobia es un problema que afecta a toda la
sociedad: limita el desarrollo de las personas, genera
estereotipos y castiga la diversidad.
48% de las autoridades
escolares no hicieron
nada ante esas agresiones
El 17 de mayo de 1990 la Organización Mundial de la
Salud (oms) suprimió la homosexualidad de la lista de
enfermedades mentales. Por ello, cada año, en esa
fecha, diversas ciudades celebran el Día Internacional
de Lucha Contra la Homofobia con marchas y
actividades para visibilizar el tema, exigir leyes al
respecto a los gobiernos y recordar a las personas que
han fallecido por crìmenes de odio.
85% de los familiares no
sabían que sus hijos e
hijas estaban viviendo
bulliyng
Aceptando que la orientación sexual no se elige y
que el modelo heterosexual no es el único ni el más
valioso, la homofobia y la homofobia internalizada
pueden erradicarse.
piensa
Cuando veía a gays y lesbianas sentía feo porque
podían ser así y yo no. Si alguien quería acercarse a
mí lo rechazaba y le decía «¿por qué te comportas
así? o me gustas, pero no seas tan niña». Ahora soy
más tolerante y me permito ser menos masculino.
–César, 18 años
La secundaria es el
espacio donde se vive
más bulliyng homofóbico
¿Qué te pasa cuando ves
a otras personas diversas?
El asunto no es cómo
actúan las personas, sino
cómo eso te afecta. Evitar
juicios y respetar su
forma de ser te ayudará
a llevar relaciones más
equitativas donde nadie
está por encima de nadie.
17
A los 15 años empecé a
conocer chicos, pero tenían
otros conocimientos sobre la
homosexualidad. En ese tiempo
no sabía de ese término.
En ocasiones me sentía como
extraterrestre. Pensaba: ‘soy el
único en mi especie’ y eso me
preocupaba, porque creía que
no tenía con quien compartir
lo que sentía. Eso fue una
experiencia con cosas buenas
y malas. Entre las malas hubo
algunas relaciones de pareja
en las que me vi presionado
para no usar condón, para
demostrar que yo era fiel y no
tenía relaciones sexuales con
otra persona.
Jamás pensé que llegaría
a tener una relación tan
duradera y con amor, pero la
encontré y estoy dispuesto a
dar de mi parte para que siga
funcionando. Ahora estamos
viendo la posibilidad de tener
un hijo, además de nuestro
perro “Greñas”.
—Armando, 28 años
amar y querer
Las relaciones de novios que
tuve cuando todavía no me
aceptaba fueron muy difíciles.
Pensaba mucho: «híjole, ¿qué
pensarán si vamos en la calle
agarrados de la mano o si lo
beso en público?»
—Miguel, 25 años
Con el amor descubrí que en relaciones de pareja entre
hombres y entre mujeres también podemos ser muy afectivos
y coquetearnos. A pesar de que lo hacíamos a escondidas, sin
abrazarnos y besarnos en la calle o cuidando que no nos vieran,
me gustaba porque pensaba que era andar como cualquier
pareja de novios, aunque en realidad no es igual. ¿Por qué
tenemos que mantener nuestras relaciones en la clandestinidad,
como si nuestra sexualidad nos convirtiera en delincuentes?
—Armando, 28 años
Tengo miedo a no
tener una relación
duradera, a sufrir
infidelidad, a
no encontrar la
pareja perfecta.
—Enrique, 19 años
Tener una orientación no heterosexual nos hace creer,
erróneamente, que estamos en un mundo donde somos la
excepción y que existe poca gente con la cual vincularnos de
forma afectiva y erótica. Si no has compartido tu orientación
de forma abierta, es posible que prefieras buscar espacios y
situaciones que incluyan cierto grado de peligro.
Dar y recibir afecto es otra dimensión de nuestra sexualidad.
La forma en que construimos vínculos afectivos también es
aprendida y, generalmente bajo dos mitos: «porque me gusta, le
debo gustar» y «como nos queremos, debemos juntarnos». Esto
no tiene que ser así, habría que valorar nuestro enamoramiento
como una experiencia individual de enriquecimiento que tiene
valor no importando la respuesta y saber que, en ocasiones, es
mejor no emprender una relación de pareja.
18
Vivimos en una cultura que idealiza la vida en pareja, que insta a
ver esa experiencia como algo natural y necesario, como un paso
para formar vínculos sólidos y duraderos que permitan formar una
familia, pero cada quien deberá valorar si quiere hacerlo y de qué
forma, cuándo y bajo qué características, de los muchas posibles.
No necesariamente las mejores relaciones se viven dentro del
modelo de pareja, sino con nosotros, incluso hay veces que
la mejor relación es la que no establecemos, aunque ambas
personas estén interesadas y dispuestas. Amor no es sinónimo de
pareja, ni pareja de complemento.
Es bueno recordar que no existen personas perfectas y tampoco
relaciones perfectas. Éstas son producto de compartir y, sobre
todo, de construir algo en común con una o más personas.
piensa
¿Para qué
quieres tener
una pareja?
¿En qué basas
tus relaciones
afectivas?
¿Te has
sacrificado
por amor?
¿Has intentando
otros tipos de
vínculos?
¿Cómo procuras
tu bienestar y el
de tu pareja?
Saber qué nos gusta y qué no es una forma de autoconocimiento
y de construir nuestra individualidad. Con ello, podremos decidir
cuáles partes de nuetra persona queremos compartir con
otras personas, haremos vínculos desde el disfrute y el placer,
estableceremos límites claros y disfrutaremos más la forma en
que llevamos cada relación.
He aprendido que nadie me
pertenece ni le pertenezco a
nadie. No soy dueño de nadie.
—Alonso, 16 años
Creo que debo encontrarme
a mí misma para poder
encontrar una relación.
—Alicia, 19 años
familias de chile , mole y pozole
19
Si haces un recuento de las familias que conoces, te darás cuenta
que todas son diferentes. Tú tienes la posibilidad elegir cómo
quieres que sea la tuya. Una familia puede estar basada en el
respeto, el apoyo y la confianza para buscar el bienestar de sus
integrantes, pero por lo general no traen de fábrica todas estas
características, sino que deben construirse entre quienes la
conforman. Ese es el trabajo a realizar. Tu familia serán tu pareja,
o parejas, hijas e hijos, pero también tus amistades y todas
las personas que quieras que integren ese espacio de afecto,
superación y buen trato.
En cuanto a la posibilidad de constituir una familia tradicional
entre parejas no heterosexuales todavía no existe una política
nacional que permita y reconozca abiertamente la figura del
matriominio y la posibilidad adopción. Habrá que seguir luchando
por ese reconocimiento como una forma de exigir igualdad de
derechos para toda la ciudadanía, no importando su orientación y
de combatir los prejuicios desde el ámbito moral.
Si entras en una
relación afectiva,
puedes decidir
de qué forma
será: no hay un
modelo ideal, así
que desde lo más
tradicional hasta
el poliamor, lo
importante son
el diálogo y los
acuerdos.
Tengo una hija y
ella tiene dos papás,
uno biológico y el
otro legal, entre
los tres decidimos
formar una familia.
No ha sido sencillo,
hay críticas,
tenemos miedo de
cuando nuestra hija
crezca y diga que
tiene dos papás,
pero también es
muy bonito ver
que mi hija está
protegida, es
querida y deseada.
—Ursula, 26 años
sexo sin pudor
ni lágrimas
20
Un día empezó a darme
mucha comezón en el
vello púbico. Mi mamá se
dio cuenta que en mi ropa
interior había puntos de
sangre, me preguntó qué me
estaba pasando y le dije que
tenía mucha comezón y una
especie de piojitos. Me pidió
que me aseará bien. Nunca
supe por qué, ni cómo me
salieron, supongo que mi
mamá tampoco.
—Ana, 24 años
Poniéndome más atención, sabiendo que el cuidado
no es de hombres o mujeres sino de querer estar bien,
he ido desarrollando herramientas para apropiarme
de mi cuerpo, mi sexualidad, mis emociones. Ahora
tengo la facilidad para decir que, sin condón, no.
O de decir que no quiero tener relaciones sexuales.
También puedo identificar si estoy a gusto en una
relación de pareja o en un lugar con mis amigos
o en un trabajo. He logrado identificar mi bienestar.
Todo esto es cuidarme, cuidar mi salud sexual.
—Raúl, 26 años
Sabemos de formas de prevenir infecciones de transmisión sexual,
pero muy poco sobre el concepto de salud sexual y cómo está
vinculado con el bienestar de todo nuestro cuerpo, incluidos
los sentimientos, la forma de vinculamos afectivamente y, un
elemento muy importante y poco discutido, el placer. Éste es
un factor a partir del cual tomamos decisiones que tienen que
ver con nuestras prácticas sexuales: pensar que al placer sólo
se llega a partir de relaciones penetrativas y que se disminuye
esa sensación si usamos condón, son dos puntos centrales que
nos pueden poner en riesgo de adquirir alguna de las muchas
infecciones de transmisión sexual (its).
piensa
¿Qué es lo que te
produce placer?
déjese ahí , agárrese allá
¿Qué cuidados
tienes cuando
te enfermas?
¿Recuerdas frases como «te van a salir pelos en la mano», «qué
puerco eres», «cuánta depravación», «gente desviada»?
¿Qué haces
para quererte?
El placer está, ante todo, castigado. Y no sólo nos referimos al
sexual, también se nos prohíbe bostezar, reír a carcajadas o
rascarnos por puro gozo. Aunque la sanción es generalizada,
y la sufren más las mujeres, el placer es permitido sólo cuando
lo hacemos de forma moderada y con prácticas específicas
relacionadas al modelo heterosexual, es decir, al coito penevagina. Esto impide el desarrollo de una sexualidad placentera.
21
La masturbación es, todavía, un tema del que preferimos no
hablar y tener relaciones sexuales sin fines reproductivos es
criticado; peor es visto tener una pareja sexual sin que exista un
vínculo formal o tener varias de ellas, formar un trío o participar
en una orgía. Las orientaciones no heterosexuales enfrentan,
paradójicamente, la misma censura incluso para formalizar sus
relaciones: el matrimonio entre personas del mismo género es
rechazado en la mayoría de los estados del país.
Si nos han dicho que el placer es malo y genera tanto vicio como
locura, nos parecerá extraño que vivirlo produzca bienestar, y de
ahí suele surgir un conflicto interno donde las sensaciones dan el
sí y la mente, el no. Y bajo ese conflicto llevamos nuestra vida y,
por tanto, nuestras relaciones afectivas y eróticas.
El placer es una capacidad que nos permite descubrir el mundo,
conectarnos con la vida y encontrar bienestar. La búsqueda del
Con chavas sí puedo
tener relaciones
sexuales y todo bien.
También las tengo
con chavos, pero al
final siento culpa, me
siento sucio, y eso
no me gusta sentirlo,
porque los hombres
también me gustan.
—Antonio, 30 años
placer está presente desde los primeros años: lloramos
y nos alejamos de aquello que nos desagrada, y
aprendemos a sonreír y pedir lo que nos gusta.
Conectarnos nuevamente con el placer es una
tarea posible que implica reconocerlo como parte
fundamental de nuestra vida y como un derecho que
permite desarrollarnos. Por ello, en Cuenta Conmigo
procuramos actividades y espacios donde la gente
pueda vincular el placer, a los derechos y a la salud.
la primera , la segunda ,
la tercera y las que faltan
Cuándo, cómo y con quién empezar tu vida sexual es
tu decisión. Hacerlo de forma consciente seguramente
te traerá disfrute, aprendizaje y autoconocimiento.
Un factor que te ayudará a disfrutar cada encuentro
es saber que estás teniendo prácticas sexuales
protegidas: tanto para la prevención del vih e
infecciones de transmisión sexual, como de tus
emociones e integridad personal.
Dentro de la comunidad gay, la población joven es
donde actualmente hay más casos de vih debido a
prácticas sexuales de alto riesgo y al no uso de condón.
22
Si bien, vivir con vih no es sentencia de muerte ni de
una disminución en la calidad de vida, puede evitarse
aprendiendo y conociendo cuáles son prácticas
sexuales seguras, protegidas y de reducción de daño.
Las infecciones de transmisión sexual pueden
adquirirse sin importar la edad, la situación económica
o educativa ni por la orientación sexual. Para
detectarlas a tiempo es esencial que te informes
sobre temas de salud sexual, pero principalmente que
conozcas tu cuerpo y lo explores regularmente para
identificar cambios que deberían ser revisados por
un especialista. Como en otros casos, una atención
oportuna te ayudará a aclarar tus dudas y será mucho
mejor que probar remedios caseros o automedicarte.
Cuando tenía unos 13 años,
los hombres de más edad me
seguían mucho. La mayoría
me abordaba en la calle o
en centros comerciales.
Algunos fueron mis parejas
de unos meses. Cuando salía
a fiestas o tocadas de música
electrónica de todo un fin de
semana, entre la desvelada y el
alcohol, terminaba en la cama
de algún desconocido.
Ya me había hecho una
prueba de vih pero sin
pensar en la angustia que
viví, regresé a tener relaciones
sin condón. Cuando quería
usarlo, mi pareja decía que
era porque yo tenía alguna
infección. Muchas veces me
cuestionaron y decidí no
usarlo, sin pensar en lo que
podía pasar y lo que ya había
vivido en la prueba.
—Diego, 25 años
Al no poder comprar los
condones por pena y miedo,
terminaba teniendo relaciones
sin protección, sin saber
lo que me podía pasar. Así
fue durante mucho tiempo.
—José, 23 años
Yo tenia relaciones
sexuales sólo para no
quedar mal, muchas
veces no las disfrute,
muchas ni las quería
tener, pero con tal de
que no quedara como
un «calienta huevos»
pues me aventaba.
—Javier, 29 años
qué nos pone en riesgo
estereotipos Vivir en el estereotipo de ser «hombres»
o ser «mujeres», independientemente
de la orientación sexual, es un factor de
riesgo ante el vih . Si ser hombre implica
demostrar potencia sexual, no importará
con quién sea sino el número de veces:
por ello es común que los hombres
tengan encuentros ocasionales, incluso sin
preguntarse si lo desean. En cambio, ser
mujer implica depender de otras personas
y estar a disposición de sus deseos para no
ser catalogadas como «malas».
mitos sobre Cuando decimos que «hormona mata
el placer neurona» asumimos que el placer es un
impulso incontrolable, tanto que nos hace
alejarnos de la realidad. Pero sí podemos
manejar nuestros deseos, apropiarnos de
nuestro placer y tomar decisiones que nos
lleven al autocuidado y, así, recordemos
nuestras experiencias con gozo.
23
Cuando los chicos
que conocía me
invitaban a tener
relaciones sexuales,
pero me pedían
que comprara los
condones, para mí era
un infierno, porque
pensaba que al
momento de pedirlos
se darían cuenta y
nos tacharían de
maricones.
—Pablo, 22 años
homofobia Por temor a que se les señale, las personas
no heterosexuales suelen preocuparse,
principalmente, por cuidar su anonimato.
alcohol Asociado a lo masculino, estas conductas
y drogas entran en una doble moral que a ratos
las valora y a ratos las condena. Su abuso
puede indicar un autocuidado deficiente
y evidenciar una falta de herramientas
para saber buscar el bienestar. Al igual que
cuando comemos, reconocer qué cantidad
y platillo nos satisface, nos permite disfrutar
de mejor manera. Qué mejor que gozar de
una comida sin indigestiones.
sobrevalorar
la apariencia
Al creer que existe un modelo de cuerpo
para ser aceptado y querido, y no tenerlo,
es común que se viva una situación de
vulnerabilidad para aceptar encuentros
sexuales de riesgo, tanto por la falta de
protección como por la dependencia
emocional hacia la otra persona.
no En ocasiones sentimos emociones que
escucharnos no logramos identificar con claridad y se
convierten en implusos que desahogamos
con cierto riesgo. Por ello es fundamental
escuchar internamente lo que nos pasa,
reconocerlo y decidir sobre lo que
queremos hacer con conciencia. Hacer
caso a nuestras emociones es algo
fundamental. Lo primero es reconocerlas
sin juicios, no calificarlas como buenas o
malas, comprender qué nos quieren decir
y reconocer de dónde vienen. De esta
manera se hilará lo que sientes, lo que
dices y lo que haces. Eso permite tener
asertividad en tus decisiones y conducirte
a una experiencia placentera.
24
roles La idea de dividir una relación sexual en
sexuales masculino y femenino, o de hacerlo en rol
activo y rol pasivo, genera una vínculo de
poder en la que las dos partes pierden,
puesto que limitan su experiencia erótica
y la reducen a una cuestión penetrativa
dentro de una variedad de posibilidades.
Tenía tantas ganas,
él era tan guapo e
insistió tanto que
accedí. Me fui con él
y olvidé usar condón.
—Héctor, 18 años
Con una pareja que
tuve hice de todo,
de verdad la pasaba
muy bien y me sentía
seguro. A veces sólo
nos la jalábamos
o cogíamos, pero
haciéndolo entre
las piernas, como si
estuviera dentro de
él o usábamos dildos
y juguetes sexuales, o
nos untamos comida.
Hasta un masaje
y puros besos era
muy rico y excitante.
No teníamos roles,
teníamos campo
abierto para disfrutar.
—Javier, 24 años
piensa
figuras de acción
¿Cómo proteges
tu sexualidad?
¿Tu placer lo vives
de forma protegida?
No basta la información para protegernos,
es indispensable pasar del conocimiento
a los cambios concretos en las prácticas
eróticas, revisando y modificando aquellas
que por ignorancia o descuido nos ponen
en riesgo.
El intercambio de fluidos es uno de los
mayores riesgos para adquirir una infección
de transmisión sexual y vih , por ello:
Busca asesoría y educación sobre salud
sexual en organizaciones y colectivos
especializados.
¿Sabes a qué huelen las
personas con las que
tienes interacción sexual?
¿Cuáles son las diferentes
texturas que tiene su piel?
25
¿Todas las partes de su
cuerpo saben igual?
¿Puedes disfrutar el
encuentro sin tener
prácticas penetrativas?
Realiza una autoexploración física y
emocional para que decidas cuál será
el camino para cuidar tu cuerpo y tus
sentimientos.
Antes de un encuentro erótico detecta
si en verdad lo deseas. En periodos de
depresión solemos descuidar aspectos
como la protección sexual.
Aprende sobre el uso adecuado del
condón y del lubricante. Úsalos en cada
relación sexual penetrativa.
¿Qué tan excitante te
resulta que tú y tu pareja
tarden lo más posible
en desnudarse?
Ten siempre a la mano algunos condones.
Llévalos contigo en una condonera o algún
recipiente rígido donde no se maltraten,
como en una cajita o una cajetilla vacía. Las
relaciones sexuales pueden presentarse en
el momento menos pensado.
¿Has escuchado y sentido
su respiración?
Protégete también cuando practiques
sexo oral en pene, vagina o ano. Utiliza
condones de sabores o plástico kleen
pack. Sobre estas barreras puedes agregar
algunos productos, como chocolate o
crema batida, para hacerlo más divertido.
El sexo anal representa un riesgo mayor
porque la mucosa de esa zona es delicada
y con la fricción pueden generarse heridas
que, al contacto con los fluidos, faciliten la
entrada del vih en el torrente sanguíneo.
Para evitar irritación y desgaste de la
mucosa es necesario, además del condón,
usar lubricante a base de agua o silicón.
El coito vaginal es la segunda vía de riesgo,
pero si en cada encuentro usas condón
masculino o femenino, de manera correcta,
la posibilidad se reduce casi a cero.
Para reducir al máximo las prácticas de
riesgo puedes usar guantes y dedales de
látex dentro de la estimulación del ano o
vagina de tu pareja.
26
Si usas juguetes sexuales, evita
compartirlos o, si es posible, colócales un
condón antes de usarlos. Límpialos bien al
terminar con agua con un poco de cloro.
Aprende a comunicarte con tus parejas
sexuales tanto verbalmente como con el
cuerpo: expresa tus sentimientos y deseos,
manifiesta tus necesidades, establece
límites claros y procura un respeto mútuo.
Incorpora otros placeres sexuales en tu
vida, el límite es tu creatividad. El placer es
algo que siempre está por descubrirse.
Cogí y hasta el otro día,
en el baño, me di cuenta
que el condón se me quedó
adentro. Sabía que existía una
posibilidad para reducir el
riesgo de contraer VIH. Fui
a la Clínica Condensa para
pedir asesoría. Después de
entrar a consejería y hacerme
una prueba rápida, empecé
un tratamiento de profilaxis
post-exposición. Aunque me
sentí mejor y más seguro, no
fue sencillo, los efectos son
fuertes. Después del susto, sé
que debo tener más cuidado
en mi encuentros sexuales,
no sólo saber poner el condón
sino saber relacionarme con él.
Lee con atención este ejercicio y, después,
realízalo:
Detente un momento. Deja lo que estás
haciendo. Mantén tu cuerpo quieto y date
cuenta en qué posición estás.
Hasta que escuché sobre el
sida, rompí el miedo hacia
mi orientación sexual y
lo que pensaría la gente.
Acudí a hacerme una prueba
rápida de detección de
vih. Nunca olvidaré esa
experiencia, la viví con miedo,
soledad, incertidumbre.
Tenía miedo a las críticas,
a cómo lo hablaría con mi
mamá. Afortunadamente la
pruebasalió negativa. Pero
la de otros amigos no.
—Diego, 25 años
Estírate un poco. Haz lo necesario para
tener mayor comodidad.
Conecta con tu respiración: hazlo
profundamente, tres veces, mientras
percibes cómo el aire entra, recorre
tu cuerpo y sale.
27
Cierra tus ojos y nuevamente respira tres
veces, ahora identificando las sensaciones
de tu cuerpo.
Abre los ojos, te sentirás diferente; eso tiene
que ver con el placer.
Cada quien puede proveerse placer, es una
condición interna con la que podemos
conectar con nuestros sentidos, emociones,
incluso en un descanso y las cosas sencillas
y valiosas, como respirar.
No olvides que el placer conecta con la vida.
No te olvides de tu placer.
piensa
¿Has visto tu cuerpo
desnudo en otro
momento que no
sea al bañarte?
¿Revisas periódicamente
tus genitales?
¿Conoces espacios donde
puedes atender tu salud
sexual?
cuidadito con
mis derechos
28
Como gay he vivido discriminación,
miradas feas, insultos, agresiones, que
no me hayan dejado entrar a lugares y
me hayan sacado de otros por besarme
con mi pareja. Como ciudadano debí
haberme quejado, levantar una denuncia.
No lo hice. ¿Será que yo mismo me estoy
negando mis derechos?
—Alfredo, 23 años
Ahora estoy recuperando mis derechos,
ejerciéndolos. Junto con mi compañero
quiero tener una familia y creo que ahí
vamos. Llevamos nueve años y vamos
por más, o al menos hasta donde ambos
estemos dispuestos a compartir.
—Julio, 29 años
En materia de derechos a la diversidad sexual, el
país vive una época de contrastes: mientras que
en los últimos años se logró que el gobierno del
df reconociera la legalidad de las sociedades de
convivencia, del matrimonio igualitario y de la
adopción monoparental, en la mayoría de los estados,
desde hace décadas, las personas no heterosexuales
están expuestas a la discriminación, el acoso policial y
los asesinatos violentos.
705 crímenes de odio por
homofobia
contabilizados en México
de 1995 a 2009
Nayarit fue considerado
en 2012 el país con mayor
número de muertes
asociadas a homofobia
Algunos otros avances son el pacto civil de solidaridad,
los juicios que garantizan la seguridad social a parejas
del mismo género, la ley de identidad de género,
los programas de atención integral a personas que
viven con vih y las sanciones por discriminación.
Con todo, en lo cotidiano, la población sexualmente
diversa sigue sometida al prejuicio, el estigma y la
discriminación, factores que disminuyen el ejercicio de
sus derechos.
gente de sociedad
29
Gracias a la sociedad civil organizada se han tenido
avances imporantes en materia de derechos humanos,
y generado documentos que permiten difundir los
derechos que nos son inherentes. Por ejemplo, la
Cartilla de los derechos sexuales y reproductivos de las y
los jóvenes, comparte información sobre los derechos a:
expresar públicamente los afectos, recibir información
verídica sobre sexualidad, decidir libremente sobre
el cuerpo y la sexualidad, y decidir con quién vivir y
compartir la sexualidad.
Aunque estos derechos están avalados por la
Comisión Nacional de Derechos Humanos, buena
parte de la población y las autoridades los deconocen.
Todavía es motivo de sanción, en algunos lugures,
que dos personas del mismo género que se besen en
vía pública. Aunque hoy nos parece lejana la época
donde los «homosexuales» eran arrestados sin más
explicación y las «lesbianas» llevadas a los hospitales
psiquiátricos, la discriminación y el abuso están
presentes de otras formas.
Puse una queja ante la
Comisión de Derechos
Humanos porque un policía
nos arrestó sin justificación
a mí y a otro chavo, porque
nos estábamos besando en
el parque. La queja procedió
porque aquí no está estipulado
que besarse en la calle sea una
falta administrativa, ni mucho
menos un delito. Me enteré
que sí sancionaron al policía,
pero lo más importante es que
lo mandaron a un curso de
no discriminación.
—Alonso 25 años
De ahí la importancia de conocer los tratados
internacionales firmados por México, nuestras
leyes, reglamentos y difundir la información fungir
como observadores y vigilantes garantizar que esas
leyes no violen los derechos, que los tratados y las
leyes no impliquen un retroceso y que se ejecuten
adecuadamente los reglamentos y con ellos garantizar
una vida digna para todas y todos.
emprender la marcha
El cambio puede empezar con acciones sencillas,
por ejemplo, saber cuáles son nuestros derechos y si
son violentados a qué instancias acudir, saber quién
gobierna mi localidad o me representa en mi distrito
y cuáles son sus acciones a favor de la diversidad, y las
problemáticas de los y las jóvenes.
Me expulsaron de la escuela
por besarme con una
chica. Ya los profesores la
traían conmigo porque me
visto con ropa de hombre.
Me sacaban de sus clases
o permitían que otros
compañeros me agredieran.
Yo sé que la Constitución
me garantiza el derecho a
vivir sin discriminación y.
estoy haciendo todo para
que respeten mis derechos.
—Susana, 18 años
También podemos acercarnos a colectivos y grupos
trabajando el tema de diversidad sexual en nuestra
ciudad o escuela, socializar la información que nos
llega, pedir audiencia para tratar el tema con algunas
autoridades y apoyar acciones en las que creamos o
simplemente reflexionar sobre la realidad que estamos
viviendo como comunidad. Desde cualquier trinchera
podemos generar nuevas ideas, alianzas y redes que
den seguimiento a nuestras exigencias.
30
Luchar contra el estigma y la discriminación hacia la
diversidad de la sexualidad es de gran importancia,
esa es la principal barrera para poder generar una
nueva visión sobre el tema y acciones que surjan
desde toda la sociedad.
En ti está el inicio de estos avances, empezando
por desentrañar tus prejuicios hacia la sexualidad
Reconocer a la diversidad como un valor que no
sólo está en la sexualidad, permite quitarnos algunas
ideas negativas al respecto y buscar que la diversidad
sea respetada en cada persona y en todo lo que nos
rodea.
Recuerda tener los
datos de personas e
instituciones que puedan
ayudarte en
una emergencia
Puedes realizar una
queja por discriminación
o abuso de autoridad
tanto en la Comisión
de Derechos Humanos
de tu estado como en el
conapred. Acércate
a estas instituciones
y conoces cuáles más
existen en tu localidad.
cuenta con
nuestro apoyo
Esperamos que esta guía te haya servido como
una brújula para llegar a temas importantes para
reflexionar y tomar decisiones para tu bienestar. El
camino por seguir es muy amplio, y puede incluir la
exploración de espacios especializados en salud, vih e
its, género, diversidad sexual y derechos humanos,
como los que aquí te compartimos.
instituciones de gobierno
censida
Centro Nacional para la
Prevención y el Control
del vih /sida
censida.salud.gob.mx
Herschel 119, Anzures,
Miguel Hidalgo, df
cndh
Comisión Nacional
de Derechos Humanos
cndh.org.mx
Periférico Sur 3469,
San Jerónimo Lídice,
Magdalena Contreras, df
5681 8125, 01800 715 2000
capasits
Centros Ambulatorios de
Prevención y Atención
en sida e its
censida.salud.gob.mx/
interior/capasits.html
Varias ciudades del país
Telsida
5207 4077, 01800 712 0886
Lunes a viernes de 8:30 a 21:30
Programa de vih /sida
y Derechos Humanos
[email protected]
conapred
Consejo Nacional para
Prevenir la Discriminación
conapred.org.mx
Dante 14, Anzures,
Miguel Hidalgo, df
Clínica Especializada Condesa
condesadf.mx
Benjamin Hill 24, Hipódromo
Condesa, Cuauhtémoc, df
cdhdf
Comisión de Derechos
Humanos del Distrito Federal
cdhdf.org.mx
Avenida Universidad 1449,
Florida, Álvaro Obregón, df
5229 5600
Centro Comunitario de Atención
a la Diversidad Sexual del df
centrocomunitariolgbtdf@
gmail.com
Génova 30-h , Zona Rosa,
Juárez, Cuauhtémoc, df
organizaciones de la sociedad civil
El Armario Abierto
Libros, juegos y asesorías
en sexualidad
elarmarioabierto.com
Agustín Melgar 25, Condesa,
Cuauhtémoc, df
cecash
Centro de Capacitación
y Apoyo Sexológico
Humanista ac
cecash.org.mx
Niza 74, interior 201, Juárez,
Cuauhtémoc, df
Equidad
Equidad de género,
ciudadanía, trabajo
y familia ac
equidad.org.mx
Abasolo 201, Del Carmen,
Coyoacán, df
asilegal
Asistencia Legal por los
Derechos Humanos
asilegal.org.mx
Palenque 269, Narvarte,
Benito Juárez, df
cojess
Coalición de Jóvenes
por la Educación
y la Salud Sexual
facebook.com/cojess
Asociación Internacional de
Familias por la Diversidad Sexual
familiasporladiversidad.org
Contacto en México:
Miriam Ángel
5211 8250
Ave de México
Acciones Voluntarias sobre
Educación en México ac
avedemexico.org.mx
Querétaro 246, piso 3, Roma,
Cuauhtémoc, df
32
cappsida
Centro de Atención
Profesional a Personas
con sida ac
cappsida.org.mx
Gumersindo Esquer 34,
Asturias, Cuauhtémoc, df
Colectivo Sol ac
colectivosol.org
Cuauhnochtli 11, Pueblo
Quieto, Tlalpan, df
Gente Joven
Programa de Mexfam
gentejoven.orm.mx
Juárez 208, Centro de Tlalpan,
Tlalpan, df
Elige
Red de Jóvenes por
los Derechos Sexuales
Católicas por el Derecho a Decidir
y Reproductivos
catolicasmexico.org.mx
elige.net
Londres 234, Del Carmen,
Calzada de Tlalpan 751-7,
Coyoacán, df
Álamos, Benito Juárez, df
Hombres por la Equidad ac
hombresporlaequidad.org.mx
Nicolás San Juan 525-9,
Del Valle, Cuauhtémoc, df
Letra S
Sida, Cultura y Vida Cotidiana ac
letraese.org.mx
Canarias 45, San Simón
Ticumac, Benito Juárez, df
NotieSe: Agencia de noticias
notiese.org
5532 2751
pueg
Programa Universitario de
Estudios de Género, unam
pueg.unam.mx
Torre II de Humanidades,
piso 7, Ciudad Univeritaria, df
Red Mexicana de Personas
que Viven con vih /sida ac
[email protected]
Francisco Ayala 59,
Vista Alegre, Cuauhtémoc, df
Voces en Tinta Foro Cultural
vocesentinta.com
Niza 23-a , Zona Rosa, Juárez,
Cuauhtémoc, df
Cuenta Conmigo
Diversidad Sexual Incluyente ac
Somos una asociación civil sin fines de lucro que trabaja a favor
del desarrollo psicoafectivo y sexual de adolescentes y jóvenes
lesbianas, gays, bisexuales y transgénero, y de los familiares que
quieran acompañarles en este proceso.
Consideramos que la diversidad es un valor a reivindicar:
nutre y enriquece a las sociedades y a los individuos; para vivirla
plenamente la entendemos y promovemos desde la equidad de
género, la educación sin prejuicios, la información verídica sobre la
sexualidad y la promoción del autocuidado.
Somos un espacio para personas que buscan aumentar sus
conocimientos sobre sexualidad y su autoconocimiento, integrado
por terapeutas sexuales, psicólogas, investigadores, jóvenes,
madres y padres.
Contamos con una experiencia de más de 10 años, que
inició en 1999 con el grupo Jóvenes Gays y Familias por una
Comunicación Asertiva, creado por Arturo Díaz Betancourt dentro
de la organización civil Letra S: Sida, Vida y Cultura Cotidiana.
En 2008 decidimos conformarnos como asociación civil para
continuar la atención a jóvenes y familias con interés en promover
una sexualidad diversa, libre de estigma y discriminación.
con tacto
A través de nuestros diferentes servicios:
Promovemos el respeto a la diversidad sexual como parte
importante del reconocimiento de los derechos humanos,
sexuales y reproductivos.
Brindamos herramientas para el autocuidado y el crecimiento
personal a lo largo de la vida en el marco de una cultura del
cuidado de la salud sexual, el bienestar emocional y relaciones
de buen trato.
Proporcionamos una educación sexual libre de prejuicios, basada
en información confiable y actualizada.
Fomentamos prácticas sexuales responsables, placenteras, seguras
y protegidas para prevenir el VIH y otras infecciones de
transmisión sexual.
Capacitamos en temas de educación sexual, diversidad,
perspectiva de género, prevención de VIH e ITS, a
profesionales y promotores de salud, servidores públicos,
líderes comunitarios y personas interesadas.
Pláticas de sensibilización
cuentaconmigo.org.mx
[email protected]
T: 5601 5695
f /diversidadconmigo
t @Cuenta_Conmigo
Y CuentaConmigodiversi
.
servicios
Grupo de apoyo para jóvenes
gays, lesbianas y bisexuales
Grupo de apoyo para madres, padres
y familiares de jóvenes gays, lesbianas
y bisexuales
Talleres para el crecimiento personal
Capacitación, seminarios
y cursos
Terapia individual y de pareja
Asesorías en sexualidad
De esta guía
Realización
Cuenta Conmigo
Edición y diseño
Enrique César
Ilustraciones
Ismael Villafranco
Agradecemos la colaboración
de todas las personas que
compartieron su testimonio
para formar esta guía