HORIZONTE PARA SEGUIR CAMINANDO

EUSTASIO COBREROS VIME
HORIZONTE
PARA SEGUIR
CAMINANDO
S
iete años consecutivos son los que el Instituto Internacional San Telmo lleva colaborando con SUR para
hacer posible la publicación que tenéis entre vuestras manos: “Quien es Quien en Málaga”. Un número especial en el que los lectores pueden hacerse una idea de la
realidad empresarial de esta provincia y de cómo se está haciendo frente a la coyuntura que llevamos años atravesando.
Es cierto que la economía española sigue mostrando síntomas de reactivación en este 2015 aunque el camino hacia la recuperación se perfila todavía largo y plagado de obstáculos. Sin
embargo, veo el futuro de España con optimismo a pesar la incertidumbre a la que continuamente estamos expuestos. El escenario de crecimiento y creación de empleo, previsto por los
Presupuestos Generales del Estado, son bastante halagüeños.
No obstante, el verdadero camino de la recuperación radica en
la ejecución de buenas políticas, tanto del Gobierno como de
las empresas. La rigidez, coherencia, constancia, transparencia, honestidad y la lucha contra la corrupción son las palancas
de la recuperación de la confianza de los consumidores y em-
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QUIÉN ES QUIÉN EN MÁLAGA 2015
presarios, y la garantía de una férrea recuperación y de un bienestar sostenible y solidario.
En Málaga las previsiones son aún mejores. Recientes estudios mantiene que la economía malagueña sigue al alza. El empleo crece a un ritmo del 4,5%, por encima de la media nacional y andaluza, debido al carácter “procíclico” de la provincia.
A pesar de estos datos esperanzadores, quedan aún aspectos
por pulir. Los expertos afirman que las dificultades de acceso
al crédito siguen siendo uno de los lastres en esta provincia, lo
que está impidiendo un mayor crecimiento que permita facilitar de forma más rápida la salida de la crisis.
Una de las principales dificultades no es la falta de espíritu
emprendedor, siempre existente en la provincia, sino precisamente este aspecto que acabo de comentar, que radica en la dificultad de conseguir el capital necesario para poder lanzar nuevas iniciativas que tengan cierta envergadura. Mientras las entidades financieras sigan restringiendo la concesión de préstamos, será difícil que surjan nuevas empresas.
A esto hay que sumarle que una de las principales causas
para no emprender es la falta de confianza en uno mismo, el
miedo al fracaso y la excesiva búsqueda de estabilidad y seguridad.
Si consiguiéramos educar a los
jóvenes para dotarles de una mayor confianza, enseñándoles que
no hay que temer a los fracasos
(aunque sí tratar de evitarlos) y
que un exceso de estabilidad conduce al conformismo y a la mediocridad, seguramente se podría
incidir en el carácter emprendedor que tanta falta hace.
Tengo claro que lo que queda
por venir no es fácil de acometer
pero confío en que Málaga, al igual que en época de bonanza,
crezca por encima de la media española, en gran medida por el
sector inmobiliario y turístico tan potente que tiene. En este
periodo de recesión ha sabido reinventarse y prepararse para
afrontar el futuro. Muestra de ello es la existencia de muchas
empresas malagueñas que cuentan con productos diferenciales, tecnología que les permite costes de producción y logísticos competitivos, oferta comercial que saben satisfacer a sus
clientes no sólo nacionales, sino del resto del mundo y que
cuentan con un modelo financiero prudente y una propiedad,
gobierno y estructura directiva bien formada.
En este número especial podemos ver muchas de esas empresas, orgullo para los malagueños y ejemplo a seguir. Espero
finalmente, que esta publicación sea considerada como un guía
útil y práctica, que ayude a los lectores a desarrollar sus negocios en nuestra comunidad en general y en Málaga en particular y que aporte un granito de arena para continuar ese camino
a la recuperación que ya hemos iniciado. Creo que hay un horizonte esperanzador hacia donde hay que seguir caminando.
Ilustración: GRG
PRESIDENTE DE LA FUNDACIÓN SAN TELMO