Revista Argentina de Reumatología
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Año 18 • Nº 1 • 2007 Año 18 • Nº 1 • 2007 Revista Argentina de REUMATOLOGIA Sociedad Argentina de Reumatología SOCIEDAD ARGENTINA DE REUMATOLOGIA Revista Argentina de REUMATOLOGIA Fundada por el Dr. Armando Maccagno SOCIEDAD ARGENTINA DE REUMATOLOGÍA Presidente Dr. Alfredo S. Arturi Directores José Maldonado Cocco Julio Hofman Vicepresidente Dr. Horacio O. Venarotti Presidente anterior inmediato Dr. Julio Hofman Secretario Dr. Gustavo Citera Tesorero Dr. Osvaldo D. Messina Vocales Titulares Dr. Luis F. Somma Dr. Sergio Paira Dr. Bernardo Pons Estel Dr. Marcelo Sánchez Freytes Dr. Oscar L. Rillo Dr. Eduardo J. Scheines Vocales Suplentes Dr. Enrique Soriano Dr. Juan Carlos Babini Dr. Federico Ruíz de los Llanos Comité de Revisión Cristina Amitrano Daniela Battaglia Rafael Chaparro Susana Metta Virginia Ortiz Mariano Rivero Comité de Honor Roberto Arana Carlos Battagliotti María L. Sormani de Fonseca Carlos Onetti Simón Palatnik Ana A. Porrini Luis Seijo Alberto Strusberg Comité Científico Nacional Alfredo Arturi Alberto Berman Luis J. Catoggio Gustavo Citera Diana Dubinsky Ernesto Gutfraind Juan Caros Marcos Silvia Martins Osvaldo D. Messina Sergio Paira Adriana Pérez Dávila Oscar Rillo Horacio Venarotti Diana Zoruba Comité Científico Internacional Graciela S. Alarcón Mary Carmen Amigo Juan Canoso Ricard Cervera Luis R. Espinoza Emilio Martín Mola Yehuda Shoenfeld María E. Suárez Almazor Revisores de Cuentas Dra. María E. Gallo de Sprazatto Dr. Gustavo Casado Publicación trimestral Copyright 2007 © MV Comunicación & Marketing® La Revista Argentina de Reumatología se distribuye exclusivamente entre los profesionales de la medicina. Reservado todos los derechos. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida en ninguna forma o medio alguno, electrónico o mecánico, incluyendo las fotocopias, grabaciones u otro sistema de información sin la autorización por escrito del titular del copyright. La Revista Argentina de Reumatología es una publicación de la Sociedad Argentina de Reumatología (SAR). Austria 2467, piso 7, of. A, (1425) Buenos Aires. ISSN 0327-4411 Fotos de tapa: corresponden al artículo del Dr. Fourcade Editada por © MV Comunicación & Marketing® Director: Máximo Oberländer Álvarez Condarco 2550. Beccar. Tel.: (54.11) 4719-6399 E-mail: mvmv@fibertel.com.ar [ sumario ] 7 13 20 26 32 35 Editorial Embarazo y enfermedades autoinmunes sistémicas Articulo original Cambios en la expresión inmunohistoquímica del protooncogen bcl2 y apoptosis por acción de estimulación colinergica en pacientes con síndrome de Sjögren primario (SSp) Articulo original Compromiso cardíaco en hijos de madres con Lupus Eritematoso Sistémico (LES) Caso clínico Oligoartritis como forma de presentación temprana de sarcoma granulocítico Diagnóstico por imágenes Poliartropatía Ocronótica Actualización Lupus eritematosos sistémico y embarazo Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 3 [ contents ] 7 13 20 26 32 35 Editorial Pregnancy and systemic autoimmune diseases Articles Changes in Bcl2 immunochemical expression and apoptosis due to cholinergic stimulation in primary Sjögren Syndrome patients (SSp). Articles Cardiac compromise in children born from mothers suffering from Systemic Lupus Erythematosus (SLE). Case Reports Oligoarthritis as initial manifestation of granulocytic sarcoma. Radiologic Vignettes Ochronotic Polyarthropathy Review Systemic Lupus Erythematosus and pregnancy Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 5 [ editorial ] Embarazo y enfermedades autoinmunes sistémicas Ricard Cervera y Francico Carmona* Servicio de Enfermedades Autoinmunes. Instituto Clínico de Medicina y Dermatología *Servicio de Ginecología. Instituto Clínico de Ginecología, Obstetricia y Neonatología. Hospital Clínic, Barcelona, Cataluña, España. La mayoría de las enfermedades autoinmunes sistémicas afectan preferentemente a mujeres y, por lo general, en el período de edades que abarca la etapa fértil de la vida. Por ello, no es infrecuente la coexistencia de embarazo y enfermedad autoinmune sistémica, con todas las implicaciones (diagnósticas, terapéuticas y pronósticas) que ello conlleva, tanto para la gestación como para la enfermedad de base. Si bien hace tan sólo tres o cuatro décadas la existencia de estas afecciones era considerada una contraindicación para el embarazo y a las pacientes se las solía informar en el momento del diagnóstico que no podrían tener hijos, este pronóstico tan sombrío ha cambiado drásticamente en los últimos años y el concepto actual es que la mayoría de las pacientes podrán tener el número de hijos deseado, es decir, tendrán una fertilidad similar a la de la población general, aunque se precisará una monitorización estricta de cada caso, dada la mayor morbilidad, e incluso mortalidad, que puede existir tanto para el feto como para la madre1. La creación de unidades clínicas interdisciplinarias, formadas principalmente por clínicos expertos en enfermedades autoinmunes sistémicas, obstetras experimentados en el cuidado de embarazos de alto riesgo y pediatras especializados en perinatología, ha constituido el pilar básico de esta mejoría en el pronóstico acaecida en los últimos años. Sin embargo, Correspondencia Dr. Ricard Cervera, Servicio de Enfermedades Autoinmunes Hospital Clínic, Villarroel, 170, 08036 - Barcelona Tel./Fax: +34.93.227 5774 e-mail: [email protected] Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 es preciso diferenciar las problemáticas de las gestaciones en cada enfermedad y aun en cada paciente en particular. El lupus eritematoso sistémico (LES) es la más representativa de las enfermedades autoinmunes sistémicas y donde la relación embarazo-enfermedad es más conocida. Casi el 90% de los pacientes con esta afección son mujeres y, de ellas, aproximadamente el 70% se encuentran en la edad fértil2. Asimismo, diversos estudios demuestran el papel favorecedor de las hormonas sexuales femeninas en el desarrollo y la activación de la enfermedad3. En este mismo número de la Revista Argentina de Reumatología, María Carolina Auad4 efectúa una extensa y completa revisión sobre esta relación embarazo-LES. Uno de los mayores riesgos maternos en la gestación de la paciente con LES es la reactivación de la enfermedad, principalmente la aparición de nefropatía o la posibilidad de que empeore una nefropatía previa. En pacientes con enfermedad bien controlada al inicio de la gestación, el riesgo de exacerbación oscila entre el 5% y el 10%, porcentajes que son similares a los observados en las pacientes no embarazadas5. En la mayoría de estos casos, se trata de brotes leves o moderados de lesiones cutáneas, trombocitopenia, pericarditis o artritis, que suelen aparecer en la segunda mitad del embarazo o en el puerperio5. En cambio, aquellas pacientes cuyo embarazo coincide con un período de actividad del LES presentan empeoramiento en un 50%-60% de los casos. La exacerbación de la nefropatía en la gestación y el puerperio puede ser muy grave, con el desarrollo de síndrome nefrótico e insuficiencia renal6. Las pacientes con nefropatía lúpica tienen mayor tendencia a presentar preeclampsia (hasta un 30%) que las mujeres sanas. La presencia de nefropatía activa desaconseja, por tanto, la gestación. Sin embargo, la nefropatía lúpica en remisión no comporta un mayor riesgo de reactivación durante el embarazo7, por lo que éste puede planificarse si han transcurrido al menos 7 6 meses tras la normalización de los parámetros de afectación renal. También es motivo de contraindicación del embarazo la utilización de diversos tratamientos inmunodepresores, principalmente ciclofosfamida, micofenolato de mofetilo y metotrexato, por sus efectos teratogénicos. Cuando resulte necesaria la administración de un fármaco inmunodepresor, sobre todo en los casos de nefropatía, el que ha demostrado una mayor seguridad es la azatioprina, aunque su empleo se ha asociado a prematuridad y retraso del crecimiento intrauterino. También resulta segura la administración de ciclosporina. Por otra parte, la aparición de complicaciones fetales en las gestaciones de pacientes con LES es superior a la observada en la población general. Se han descrito mayores incidencias de abortos y pérdidas fetales, retraso en el crecimiento intrauterino, prematuridad y mortalidad perinatal5-8. La aparición de estas complicaciones se relaciona principalmente con la presencia de anticuerpos antifosfolipídicos (AAF)9, aunque también pueden influir otros factores de la enfermedad, como la existencia de nefropatía. La prevalencia de abortos espontáneos (pérdidas fetales antes de la semana 20) en las gestantes lúpicas sin AAF se sitúa en torno al 20% (cifra similar a la observada en la población general), mientras que en las gestantes con AAF alcanza el 80%-90% y la de muertes fetales (después de la semana 20) es de alrededor del 7%. El retraso del crecimiento intrauterino aparece en el 10%-23% de los embarazos y la prevalencia de prematuridad oscila entre el 20% y el 50% en las pacientes con LES. Entre las causas predisponentes a estas complicaciones están también los AAF, la actividad de la enfermedad, el tratamiento inmunodepresor, la rotura prematura de membranas o la aparición de preeclampsia. Mención especial requiere el desarrollo de lupus neonatal en el recién nacido, que es una complicación asociada al paso transplacentario de anticuerpos anti-Ro (SS-A) y anti-La (SS-B), que se caracteriza por la aparición de erupciones cutáneas generalizadas, visceromegalias y citopenias de carácter reversible, así como, ocasionalmente, trastornos del sistema de conducción cardíaco que pueden requerir la colocación de marcapasos. Mayor gravedad reviste, en cambio, el desarrollo de bloqueos cardíacos congénitos en el feto, los cuales son poco frecuentes (aparecen sólo en el 1%-2% de los embarazos de pacientes portadoras de estos anticuerpos) pero conducen muchas veces a insuficiencia cardíaca y muerte fetal10. 8 El síndrome antifosfolipídico es una de las entidades que más interés ha suscitado en los últimos años y entre sus principales manifestaciones clínicas están el desarrollo de abortos y muertes fetales de repetición, así como la aparición de otras complicaciones obstétricas (preeclampsia, eclampsia, síndrome HELLP, retraso del crecimiento intrauterino y prematuridad)11. Aunque muchas pacientes afectadas de este síndrome padecen también LES, algunas se hayan afectadas de un síndrome antifosfolipídico primario. La prevalencia de AAF en la población obstétrica se ha cifrado en un 2%-3%12. La incidencia de pérdidas fetales en las pacientes con AAF sin tratamiento puede llegar a ser de hasta el 80%-90%. Estas pérdidas fetales pueden ocurrir en cualquier momento del embarazo, aunque hasta un 50% de los casos se presentan durante el segundo y tercer trimestre, a diferencia de lo que sucede en la población general, en la que aparecen mayoritariamente en el primer trimestre y son por causas no inmunológicas, como alteraciones morfológicas y cromosómicas. La administración de tratamiento, principalmente aspirina y heparina, evita en más del 80% de los casos las pérdidas fetales, aunque la incidencia de retraso en el crecimiento intrauterino y prematuridad es muy elevada13. El síndrome de Sjögren es poco frecuente antes de los 40 años, pero las mujeres jóvenes que lo padecen pueden sufrir en el embarazo el paso transplacentario de anticuerpos anti-Ro (SS-A) y anti-La (SS-B) que pueden desencadenar también la aparición de bloqueos cardíacos congénitos en el feto y lupus neonatal en el recién nacido14. La artritis reumatoidea tampoco suele presentar serios problemas cuando coexiste con el embarazo, ya que las formas con manifestaciones sistémicas suelen aparecer fuera de edades fértiles. Es una observación clínica frecuente que los síntomas articulares suelen remitir durante el embarazo, aunque el curso de la enfermedad no se modifica básicamente y las recurrencias en el puerperio son frecuentes15. Por lo que respecta a los efectos de la enfermedad sobre el embarazo, el índice de fertilidad es normal, pero se ha descrito un ligero aumento en la frecuencia de abortos espontáneos y de muerte perinatal, atribuible a la terapéutica empleada para el control de la enfermedad más que a la propia artritis reumatoidea16. La coexistencia de embarazo y esclerosis sistémica ha sido escasamente estudiada. Aunque la esclerosis sistémica suele diagnosticarse en mujeres que ya han cumplido los 40 años, no es extraña la existencia en los años previos de manifestaciones clínicas sugestivas de la enfermedad. Por otra parte, en nuestros días es cada vez más frecuente que las mujeres planifiquen sus embarazos a edades más avanzadas. Por estos motivos, los estudios recientes de las gestaciones en pacientes con esclerosis sistémica no se limitan a los embarazos tras el diagnóstico de la enfermedad, que suelen ser una minoría, sino también incluyen el análisis retrospectivo de los embarazos previos17. Las pacientes con esclerosis sistémica presentan un mayor número de complicaciones obstétricas (abortos, muertes fetales, recién nacidos con bajo peso y prematuridad), tanto antes como después del diagnóstico de la enfermedad, por lo que requieren un estricto control médico-obstétrico-perinatológico. En cambio, el efecto del embarazo sobre la esclerosis sistémica parece poco significativo, describiéndose tanto ocasionales mejorías (11%) como empeoramientos (8%) de la enfermedad17,18. Sin embargo, la existencia de afectación visceral grave, como alveolitis o fibrosis pulmonar, contraindica el embarazo. Existe todavía menos experiencia en la literatura sobre vasculitis sistémicas y gestación1. De todas formas, el riesgo vendrá determinado por la gravedad de la afectación sistémica, fundamentalmente renal, por lo que muchas consideraciones clínicas pueden extrapolarse de la experiencia obtenida en pacientes con nefropatía lúpica. La panarteritis nudosa coincide raramente con la gestación, aunque en tal caso debe considerarse una situación de alto riesgo para el feto. No existen datos que sugieran que la enfermedad se reactive durante el embarazo, aunque sí se han descrito reactivaciones durante el puerperio. También la experiencia en las vasculitis granulomatosas (granulomatosis de Wegener, vasculitis de Churg-Strauss) es anecdótica, pero hay algunos casos descritos en los que se reactivó la enfermedad al final del embarazo. La coexistencia de embarazo y vasculitis por hipersensibilidad no es excepcional, aunque por Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 tratarse de cuadros con afectación fundamentalmente cutánea y curso benigno no suelen tener apenas repercusión en el embarazo. Dentro de este grupo, únicamente la crioglobulinemia mixta y la púrpura de Schönlein-Henoch pueden considerarse de riesgo, ya que suelen presentar, además de la afectación cutánea, manifestaciones renales. Las vasculitis de células gigantes suelen aparecer en edades avanzadas (arteritis de Horton) o son muy raras en nuestros países (enfermedad de Takayasu) por lo que la coexistencia con la gestación es nula o desconocida. La enfermedad de Behçet es relativamente frecuente en nuestro medio y suele coincidir con la edad fértil de las mujeres, pero su repercusión sobre el embarazo parece ser prácticamente nula, así como la influencia de éste sobre la enfermedad19. Las miopatías inflamatorias idiopáticas suelen aparecer en mujeres de edad más avanzada y cursar con una grave afectación sistémica, por lo que la coexistencia con el embarazo no suele ser frecuente. Sin embargo, cuando ello ocurre suele haber una grave repercusión sobre el feto (aumento de abortos, muertes fetales, prematuridad y muerte neonatal) y sobre la enfermedad20. En los próximos años esperamos asistir a un aumento de embarazos en mujeres afectadas de enfermedades autoinmunes sistémicas. El mejor control de estas enfermedades y el conocimiento más extendido de que su índice de fertilidad no parece estar disminuido motivará un mayor interés por parte de las pacientes en buscar el embarazo. Será preciso, por tanto, considerar adecuadamente la planificación de estos embarazos para que se produzcan en los momentos más adecuados de la evolución de la enfermedad y, por otra parte, una vez iniciada la gestación, deberá insistirse en la necesidad de una acción coordinada entre clínicos expertos en estas enfermedades, obstetras experimentados en el cuidado de embarazos de alto riesgo y, posteriormente, pediatras perinatólogos. 9 Bibliografía 1. Jiménez S, Ramos M, Cervera R, Carmona F, Ingelmo M. Embarazo y enfermedades autoinmunes sistémicas. En: Font J, Cervera R, Ingelmo M (ed.). Enfermedades autoinmunes sistémicas. MRA, Barcelona, 1998; pp. 403-421. 2. Cervera R, Khamashta MA, Font J, Sebastiani GD, Gil A, Lavilla P, et al. Systemic lupus erythematosus: Clinical and immunological patterns of disease expression in a cohort of 1000 patients. Medicine (Baltimore) 1993; 72: 113-124. 3. Lahita RG. Sex steroids and the rheumatic diseases. Arthritis Rheum 1985; 28: 121-126. 4. Auad MC. Lupus eritematoso sistémico y embarazo. Rev Arg Reumatol (en prensa). 5. Carmona F, Font J, Cervera R, Muñoz F, Cararach V, Balasch J. Obstetrical outcome of pregnancy in patients with systemic lupus erythematosus. A study of 60 cases. Eur J Obst Gynecol Reprod Biol 1999; 83: 137-142. 6. Ruiz-Irastorza G, Lima F, Alves J, Khamashta MA, Simpson J, Hughes GRV, et al. Increased rate of lupus flare during pregnancy and the puerperium: a prospective study of 78 pregnancies. Br J Rheumatol 1996; 35: 133-138. 7. Carmona F, Font J, Moga I, Lázaro I, Cervera R, Pac V, et al. Class III-IV proliferative lupus nephritis and pregnancy: A study of 42 cases. Am J Reprod Immunol 2005; 53: 182-188. 8. Petri M, Allbritton J. Fetal outcome of lupus pregnancy: a retrospective case-control study of the Hopkins Lupus Cohort. J Rheumatol 1993; 20: 650-656. 9. Cervera R, Khamashta MA, Font J, Sebastiani GD, Gil A, Lavilla P, et al. Morbidity and mortality in systemic lupus erythematosus during a 10-year period. A comparison of early and late manifestations in a cohort of 1,000 patients. Medicine (Baltimore) 2003; 82: 299-308. 10. Brucato A, Franceschini F, Buyon JP. Neonatal lupus: long term outcome of mothers and children and recurrence rate. Clin Exp Rheumatol 1997; 15: 467-473. 10 11. Asherson RA, Cervera R, Piette JC, Shoenfeld Y. Milestones in the antiphospholipid syndrome. A: Asherson RA, Cervera R, Piette JC, Shoenfeld Y (eds.) The antiphospholipid syndrome II-Autoimmune Thrombosis. Elsevier, Amsterdam, 2002; pp. 3-9. 12. Khamashta MA, Hughes GRV. Pregnancy in systemic lupus erythematosus. Curr Opin Rheumatol 1996; 8: 424-429. 13. Carmona F, Font J, Azulay M, Creus M, Fàbregues F, Cervera R, et al. Risk factors associated with fetal losses in treated antiphospholipid syndrome pregnancies: A multivariate analysis. Am J Reprod Immunol 2001; 46: 274-279. 14. Julkunen H, Kaaja R, Kurki P, Palosno T, Friman C. Fetal outcome in women with primary Sjögren´s syndrome. A retrospective case-control study. Clin Exp Rheumatol 1995; 13: 65-71. 15. Barrett JH, Brennan P, Fiddler M, Silman AJ. Does rheumatoid arthritis remit during pregnancy and relapse postpartum? Results from a Nationwide Study in the United Kingdom performed prspectively from late pregnancy. Arthritis Rheum 1999; 42: 1219-1227. 16. Ostensen M. Sex hormones and pregnancy in rheumatoid arthritis and systemic lupus erythematosus. Ann N Y Acad Sci 1999; 876: 131-143. 17. Jiménez FX, Simeón CP, Fonollosa V, Espinach J, Solans R, Lima J, et al. Esclerodermia y embarazo: Complicaciones obstétricas y repercusión del embarazo en el curso de la enfermedad. Med Clin (Barc) 1999; 113: 777-778. 18. Steen VD, Medsger TA. Fertility and pregnancy outcome in women with systemic sclerosis. Arthritis Rheum 1999; 42:763-768. 19. Marsal S, Falgá C, Simeón CP, Vilardell M, Bosch JA. Behçet´s disease and pregnancy relationship study. Br J Rheumatol 1997; 36: 234-238. 20. Solomon JE, D´Alton ME. Dermatomyositis in pregnancy. Curr Opin Obstet Gynecol 1996; 8: 83-86. [ artículo original ] Cambios en la expresión inmunohistoquímica del protooncogen Bcl2 y apoptosis por acción de estimulación colinérgica en pacientes con síndrome de Sjögren primario (SSp) M. Fourcade1,2,3, C. Auad1, E. Romanini1, M. Mamani1, A. Mónaco, A. Bedoya3, A. Secco1, M. L. Fonseca1, L. Villalón2, A. Berra2, A. Catalán Pellet1 Servicio de Reumatología, Hospital Rivadavia; 2Laboratorio de Microbiología e Inmunología Ocular, Departamento de Patología, Facultad de Medicina, UBA; 3Departamento de Biología, CBC – UBA. 1 RESUMEN SUMMARY El síndrome de Sjögren es una enfermedad reumática autoinmune, sistémica, que supone la destrucción de la glándula exocrina y órganos internos por medio de grandes infiltraciones mononucleares asociadas con los anticuerpos Ro/SSA, La/SSB y factores reumáticos, ambos síntomas principales de los factores celulares y humorales de la xeroftalmia y la xerostomía. Los infiltrados mononucleares más comunes son los linfocitos CD4, CD8 y B. Los pacientes que sufren de síndrome de Sjögren corren el riesgo de desarrollar linfoma no Hodgkin. El linfoma folicular es el resultado de una traslocación no homóloga cromosómica 14; 18 produciendo la desregulación de la transcripción y síntesis de la proteína Bcl2. Las proteínas de la familia Bcl2 son reguladores clave de la apoptosis, que estimulan la supervivencia de la célula. Otros grupos de la familia Bcl2 son estimuladores pro-apoptóticos. El comportamiento de las células dependerá de la concentración de los dos miembros de la familia. Objetivos: Los niveles de expresión y apoptosis de Bcl2 en la glándula salival menor pre y pos-tratamiento con agonistas colinérgicos. Pacientes y métodos: Diagnóstico del síndrome de Sjögren según los criterios europeos. Se reclutaron 10 pacientes, a quienes se estudió durante 5 meses y se los trató con 15 mg de clorhidrato de pilocarpina en cápsulas orales de 5 mg cada 8 horas. Se llevaron a cabo biopsias pre-tratamiento y pos-tratamiento desde el día cero (antes del tratamiento) hasta el quinto mes (después del tratamiento). Antes de ingresar al estudio clínico, los pacientes SSp voluntarios firmaron el consentimiento informado y el estudio se realizó según las normas de buenas prácticas clínicas. Se evaluó la expresión Bcl2 mediante técnicas de inmunohistoquímica y la apoptosis nucleotidil transferasa-peroxidasa mediante técnicas in situ. Diseño del estudio: Abierto, longitudinal, autocontrolado. Sjögren syndrome is a sistemic autoimmune rheumatic disease that involves exocrine gland destrucción and internal organs by means large mononuclear infiltrates in association with autoantibodies Ro/SSA, La/SSB and Rheumatoid factor; both celular and humoral factors leading symptoms of xerophtalmia and xerostomia. Classical mononuclear infiltrates consist in CD4, CD8 and B lymphocytes. Patients suffering from Sjögren syndrome have a risk to develop lymphoma no Hodgkin. Folicular lymphoma results from non homologous cromosomic traslocation 14 :18 disrregulating transcription and syntesis of Bcl2 protein. Bcl2 family proteins are apoptotic key regulators, promoting cell survival, other Bcl2 family group are pro-apoptotic promoters. The cell behavior shall depend of the concentration of two family members. Objetives: Bcl2 expression and apoptosis level in minor salivary gland pre and post-treatment with cholinergic agonists. Patients and Methods: Sjögren syndrome diagnosis according to european criteria. 10 patients were recruited, studied during 5 months, treated with 15 mg/day oral Pilocarpine Clorhidrate capsules, 5 mg/8h. Pre and post-treatment biopsies were performed during day cero (pre-treatment) to fitht month (post-treatment). Previously enter to clinical study, voluntary SSp patients signed informed consent and conducted under GCP guidelines. Bcl2 expression was evaluated by immunochemistry and apoptosis by means nucleotidil tranferase-peroxidase in situ technique. Study design: Open, longitudinal, autocontrolled. Results: Pre-treatment showed intense mononuclear infiltrates in interstitial and periductal glandular tissue with high Bcl2 expression (4 ++++). Post-treatment showed a decrease of mononuclear infiltrates from scores 4 to 2 and some cases 4 to 1. Presence of Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 13 Resultados: El pre-tratamiento mostró un intenso infiltrado mononuclear en el tejido intersticial y periductal con una alta expresión de Bcl2 (4++++). El estudio pos-tratamiento mostró una disminución de infiltrado mononuclear de 4 a 2 y en algunos casos de 4 a 1. Presencia de cuerpos apoptóticos en la fase previa al tratamiento, principalmente en áreas periductales e intersticiales con infiltrado mononuclear (4++++). El estudio pos-tratamiento mostró una disminución de 4 a 2 en las áreas mencionadas, 70% p <0,05, a pesar de que el ducto mantuvo marcadas expresiones de cuerpos apoptóticos. Conclusión: La estimulación colinérgica no sólo afecta a las glándulas exocrinas sino que también podemos suponer una actividad parasimpaticomimética en las células linfoides mononucleares por medio de señales de transducción de apoptosis no esclarecida aún. El tratamiento con agonistas colinérgicos como la Pilocarpina evidencian una mejoría de la histopatología y de aspectos clínicos en los pacientes SSp. apoptotic bodies in pre-treatment phase meanly in mononuclear infiltrates, periductal and interstitial areas (4++++), Post-treatment decreased from 4 to 2 mentioned areas, 70% p <0.05, despite ductus, kept strong apoptotic bodies expression. Conclusion: Cholinergic stimulation affects not only exocrine glands but also we can speculate parasimpatomimetic activity on mononuclear lymphoid cells througout apoptosis signal transduction pathways no yet cleared. Cholinergic agonist treatment as Pilocarpine evidencied histopatological and clinical improvement in SSp patients. Introducción es equivalente tanto para SSp o SSs, fue estimado 44 veces mayor comparado con la población normal8. Estudios de cohortes han demostrado una fuerte asociación (Odds Ratio=13) de aparición de linfoma no Hodgkin en pacientes con SSp9. Ignoramos si este mismo porcentaje se cumple en nuestro país. Algunos investigadores han propuesto que la linfomagenesis es un proceso que involucra pasos secuenciales de activación de protooncogenes, mediante traslocaciones o mutaciones que alteran el funcionamiento regulatorio celular10,11. El linfoma folicular resulta de la traslocación no homóloga cromosómica 14; 1811 produciendo la desregulación de la transcripción y síntesis del protooncogen Bcl2. Dicha traslocación confiere ventajas adaptativas de supervivencia celular previniendo la apoptosis. A pesar de la desregulación de Bcl2 parece ser ésta no suficiente para producir el fenotipo linfomatoso12. Los miembros de la familia de proteínas Bcl2 son reguladores clave de la apoptosis, programa de suicidio celular, crítico durante el desarrollo, balance homeostático de tejidos y protección contra patógenos. Bcl2 promueve la sobrevida celular inhibiendo ciertos tipos de adaptadores necesarios para la activación de proteasas (Caspasas), llevando estas últimas al desmantelamiento de la célula13. Por lo menos fueron identificados 15 miembros de la familia Bcl2 en células de mamífero y otros tantos en virus14. El síndrome de Sjögren (SS) es una afección reumática autoinmune, sistémica, se caracteriza por infiltrados mononucleares en asociación con la producción de autoanticuerpos mediando la destrucción de glándulas exocrinas y endocrinas, se puede clasificar en primario (SSp) cuando se presenta solo o secundario cuando acompaña a una enfermedad del tejido conectivo (SSs)1. La infiltración progresiva linfoplasmocitaria de glándulas salivales y lacrimales resultante conlleva a la destrucción glandular disminuyendo el flujo salival (xeroftomía) y lacrimal (xeroftalmia), siendo estos los aspectos más prevalentes del SS2. Síntomas adicionales del SS representan manifestaciones glandulares y extraglandulares, hipergammaglobulinemia, producción de autoanticuerpos como anti Ro/SSA, La/SSB y factor reumatoideo, normalmente detectados en el suero, saliva y en glándulas salivales in situ3. Los linfocitos infiltrantes de glándulas salivales y lacrimales en el SS, consiste predominantemente en linfocitos T CD4 45-50%, 20% linfocitos T CD8, 20% linfocitos B4. Los pacientes con síndrome de Sjögren tienen un marcado aumento del riesgo en desarrollar linfoma B no Hodgkin a nivel de glándulas salivales y lacrimales respecto de otras enfermedades autoinmunes5,7. El linfoma B no Hodgkin representa la mayor complicación en la evolución de los pacientes con SS. El riesgo de desarrollar linfoma 14 Dentro de la familia Bcl2 existen miembros con actividad pro-apoptótica y anti-apoptótica, la promoción a apoptosis o sobrevida celular dependerá de la relativa concentración de los mismos, funcionando a modo de reostato en el mecanismo de muerte celular programada15,16, (Figura 1Ref 17). El Bcl2 reside en la cara citoplasmática de la membrana externa mitocondrial, retículo endoplásmico y membrana nuclear, registrando posibles daños hacia esos compartimentos celulares. Afecta de este modo el comportamiento celular, mediante la modificación del flujo en la membrana mitocondrial de pequeñas moléculas o proteínas18. Apoptosis o muerte celular programada es un importante mecanismo fisiológico para eliminar clones de linfocitos T autorreactivos así como defectos en la secuencia apoptótica podría ser un factor clave en el desarrollo de autoinmunidad19,20,21. El Fas es una proteína de superficie de la super familia de los receptores de TNF y factores de crecimiento expresados constitutivamente o inducidos después de la activación de diferentes tipos celulares incluyendo linfocitos T.22 La apoptosis mediada por Fas y en adición la vía mediada por perforinas constituyen los mecanismos asesinos de linfocitos T CD8 citotóxicos.21 En modelos murinos, defectos en las señales por mutaciones en la vía Fas o FasL, produce inactivación de la apoptosis desencadenando autoinmunidad como también linfoadenopatía.22 La destruccion del tejido glandular y la pérdida de la función secretoria en el SS es dependiente de la activación de la apoptosis23. La interacción de diferentes factores inhibitorios o inductores pueden llevar a la célula a la activacion de la apoptosis o la sobrevida; la comprensión de la interacción de estos factores contribuye en una mejor comprensión sobre la gran variedad de diferentes estímulos que pueden alterar este delicado equilibrio, que contribuyen en la patogénesis autoinmune y en otras enfermedades donde la sobrevida celular se encuentra alterada como cáncer, infecciones virales, desórdenes neurodegenerativos, etc.24,25 En el SSp se observa una marcada expresión de FAS y su ligando FASL y aumento de la tasa de apoptosis en el tejido epitelial de glándulas salivales. Dicha observación ha llevado a proponer que dicho mecanismo podría jugar un rol importante en la destrucción glandular exocrina en el SSp26,27. En trabajos previos, hemos demostrado la posible acción inmunomoduladora de los agonistas colinérgicos en Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 pacientes con síndrome de Sjögren28 (Resúmenes SAR 2002,2003,2005,2006). Investigadores han demostrado la presencia de receptores muscarínicos colinérgicos en células mononucleares29,30,31. Los receptores colinérgicos muscarínicos median funciones vitales, los eferentes nerviosos vagales periféricos están relacionados con el in-put inhibitorio de secreción de TNF en modelos animales de endotoxemia32. Los eferentes vagales distribuidos a través del sistema retículoendotelial, y otros órganos periféricos, transmiten las señales a células inmunocompetentes; sin embargo algunos trabajos no demostraron la acción de la muscarina intravenosa para inhibir la secreción de TNF en modelos de toxemia. Estos datos sugerirían que los receptores colinérgicos muscarínicos periféricos no tendrían un rol esencial durante el shock endotoxémico. La subunidad alfa 7 del receptor nicotínico es el único receptor colinérgico reconocido de mediar efectos antiinflamatorios a nivel periférico33. Estudios de eficacia y seguridad de Clorhidrato de Pilocarpina oral han demostrado su efectividad en el tratamiento del complejo SICA en pacientes con SS.34,35 El presente trabajo se propuso investigar la expresión diferencial de la proteína Bcl2 y nivel de apoptosis con agonistas colinérgico-muscarínicos en pacientes con síndrome de Sjögren primario. Objetivo Evaluar la expresión de Bcl2 y el grado de apoptosis en glándulas salivales pre y pos-tratamiento con agonistas colinérgicos. Pacientes y métodos El diagnóstico de SSp se efectuó según criterios europeos1. Se estudiaron 10 pacientes de sexo femenino 61 ± 5 años, tiempo de evolución de la enfermedad: 10 años. Los pacientes SSp recibieron Clorhidrato de Pilocarpina 15 mg/día en comprimidos, repartidos en tres tomas de 5 mg/ cada 8 hs, y se evaluaron los efectos del tratamiento durante 5 meses. Previo al estudio, los pacientes voluntarios firmaron el consentimiento informado. El estudio fue conducido según las normas de buenas prácticas clínicas. Se efectuaron biopsias de glándulas salivares menores pre-tratamiento y pos-tratamiento; a los cinco meses éstas 15 Figura 1. Acción del Bcl2. El Bcl2 inhibe el goteo de Citocromo C que permite la formación del apoptosoma y la consecuente inducción de apoptosis. Imagen modificada por Fourcade, MG. Ref.(17). fueron congeladas a -80ºC. Se realizó el score Chisholm6 para determinar el grado de infiltrado mononuclear en glándulas salivales menores en el SSp. Por inmunohistoquímica se evaluó la expresión de Bcl2 y por la técnica de TUNEL se determinó la apoptosis según fabricante (ApopTag® Peroxidase In Situ Apoptosis Detection Kit). Diseño del estudio Abierto, autocontrolado, longitudinal. Se aplicó test de rangos señalados de Wilcoxon para evaluar los datos, con una significancia p <0,05, IC 95%; Programa Prisma GraphPad versión IV. Marcación in situ de células apoptóticas La fragmentación de DNA durante la apoptosis fue detectada in situ mediante TUNEL. Secciones de 5 mm de tejido glandular salival fueron cortadas por crióstato, deshidratadas y fijadas con 10% paraformalaldehído/PBS por 30 minutos y lavados con TBS. La actividad endógena de la peroxidasa fue inactivada con 0,1% de H2O2 en TBS 2 veces de 15 minutos, seguido de lavado con TBS. Las secciones fueron equilibradas con buffer de thymidine-dioxynucleotidyl tranferasa terminal (TdT) (0,5 M cacodylate, pH 6,8, 1 mM CoCl2, 0,5 mM dithiothreitol (DTT), 0,05% BSA and 0,15M NaCl) a 37°C plus buffer TdT con 0,1 U/ml TdT y 8 nmol/ml de digoxigenina conjugada con dUTP, se 16 incubó en cámara húmeda por una hora a 37°C. La reacción fue bloqueada con lavado de TBS suplementado con 2% de suero fetal bovino seguido de antidigoxigenina IgG diluida en 5 mg/ml del suero de bloqueo en incubación de 1 hora. Después del lavado en TBS y 10% de un pool de suero humano en 2% de suero fetal bovino y TBS, las secciones fueron incubadas con anticuerpo conjugado HRP de conejo anti-cabra diluido 1:100 (DAKO A/S, Glostrup, Denmark) en suero de bloqueo durante 1 hora. Después del lavado con TBS, las células fueron visualizadas con buffer AEC conteniendo H2O2 durante 15 minutos. Todos los pasos, excepto la incubación con TdT, se realizaron a temperatura ambiente. Las secciones fueron incubadas con hematoxilina para recuento celular. Para evaluar la expresión de Bcl2 se puntuó el Score de 0 a 4 cruces y se analizó dichas muestras por medio de tres anatomopatólogos independientes entre sí. Resultados La inmunohistoquímica pre-tratamiento mostró un intenso infiltrado mononuclear intersticial y periductal con fuerte marcación para el protooncogen Bcl2 con un Score de 4 (++++); no se evidenció expresión Bcl2 en acinos. Postratamiento se observó una significativa disminución de la expresión Bcl2 en el infiltrado mononuclear inflamatorio que cambió de 4 a 2 cruces y en algunos casos a 1 cruz. El epitelio ductal sostuvo la expresión de Bcl2. La presencia de cuerpos apoptóticos se evidenció en núcleos de infiltrados mononucleares, epitelio periductal e intersticial con score de 4 (++++), también a nivel del epitelio ductal y acinar pre-tratamiento. Pos-tratamiento descendió la expresión de grado 4 (++++) a grado 2 (++) o 1 (+) tanto de Bcl2 como la presencia de cuerpos apoptóticos en el infiltrado inflamatorio e intersticio, 70% (p <0,05), sin embargo Bcl2 mantuvo su nivel de expresión a nivel ductal. Los pacientes tuvieron mejoría significativa de la lesión histológica y de parámetros clínicos tanto objetivos como subjetivos post-tratamiento, clínica, test oculares y lagrimales. Expresión inmunohistoquímica de Bcl2 en glándulas salivales menores SSp (40x) Izquierda: infiltrado mononuclear con alto grado de expresión Bcl2 en epitelio de glándula salival, correspondiente a SSp Grado 4, previo al tratamiento. Derecha: epitelio de la glándula salival tras cinco meses del tratamiento descripto en Materiales y métodos. La expresión Bcl2 ha disminuido notablemente. La condición corresponde a SSp Grado 1. A C B D Figura 2. A. Glándula salival SSp, pre-tratamiento. Expresión periductal e intersticial de Bcl2. B. Expresion Bcl2 en infiltrado mononuclear. C. Glándula salival SSp. Expresión Bcl2 pos-tratamiento. D. Descenso de la expresión Bcl2 tantos en ductos e infiltrado mononuclear. Apoptosis en glándulas salivales menores de pacientes SSp (40x) Izquierda: intenso infiltrado mononuclear y marcado grado de apoptosis en epitelio de glándula salival, pre-tratamiento de SSp grado IV. Derecha: tras el tratamiento, no se evidencian signos de apoptosis. La condición corresponde a SSp Grado 1. Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 C A B D Figura 3. A. Nivel de apoptosis en glándulas salivales SSp. Pre-tratamiento. B. Infiltrado mononuclear en franca apoptosis. C. Nivel de apoptosis en glándulas salivales SSp. Pos-tratamiento. D. Descenso del nivel de apoptosis. Discusión Los reportes de M. Ohlsson y col.27 indican por un lado una baja frecuencia de apoptosis a nivel ductal como también a nivel de infiltrados inflamatorios. Nuestros estudios, realizados en glándulas salivales de pacientes SSp, muestran claramente una elevada presencia de cuerpos apoptóticos a nivel ductal y a nivel de infiltrados inflamatorios, también se observó expresión concomitante de Bcl2 a nivel ductal, intersticial y de infiltrados inflamatorios, no evidenciándose la presencia de ambos marcadores en el epitelio acinar. En trabajos anteriores, demostramos que durante la estimulación colinérgica se encontró asociación de linfocitos T CD8 a nivel ductal y marcado descenso infiltrante de linfocitos T CD4 en glándulas salivales de pacientes SSp, ello podría sugerir una posible acción colinérgica pro-apoptótica sobre ciertos subtipos linfocitarios; dicho modelo podría explicar la mejoría histopatológica evidenciada por el descenso de grados Chisholm6 de grado 4 a 1 o cero en biopsias de glándulas salivales en pacientes SSp y mejoría en los parámetros de flujo salival. Durante el tratamiento de los pacientes SSp con Pilocarpina, ciertos infiltrados inflamatorios son más susceptibles a la apoptosis a pesar de la expresión Bcl2, a diferencia del epitelio ductal, el mismo contrarresta la apoptosis a través de la expresión de Bcl2 como regulador anti-apoptótico. El balance de moléculas pro y anti-apoptóticas jugaría un rol importante en la sobrevida o muerte celular programada16,23,24 y su incidencia en el desarrollo de neoplasias linfomatosas5 en el SSp. El tratamiento con agonistas colinérgicos muscarínicos como la Pilocarpina ha evidenciado mejorar la histopatología y aspectos clínicos en pacientes SSp28,34,35. 17 Conclusiones Bibliografía 1. En el SSp, la estimulación colinérgica muscarínica no sólo ejerce su acción parasimpaticomimética sobre las glándulas salivales menores sino también a nivel de infiltrados inflamatorios mononucleares. Si bien el mecanismo de acción colinérgica en estos últimos aún no está esclarecido, podría tener efectos en las señales de transducción pro y anti-apoptóticas. 2. El estudio actual y trabajos precedentes nos llevarían a especular en una posible doble acción parasimpaticomimética del Clorhidrato de Pilocarpina oral: A. A nivel del tejido exocrino glandular salival, lacrimal, etc. B. A nivel de poblaciones mononucleares linfocitarias específicas con expresión de receptores colinérgico-muscarínicos funcionales ejerciendo acciones antiinflamatorias, demostrado por el descenso del infiltrado mononuclear. 3. El tratamiento con agonistas colinérgicos muscarínicos como la Pilocarpina ha evidenciado mejoría de la histopatología y de aspectos clínicos en pacientes con SSp. 4. Nuestros resultados nos sugeriría una posible acción inmunomoduladora colinérgico-muscarínica. Es necesario llevar a cabo estudios clínicos de mayor envergadura para verificar dicha hipótesis. 1. Frederick B. Vivino, Ibtisam Al-Hashimi, Zafrulla Khan, Francis G. LeVeque, Paul L, Salisbury III, Tram K. TranJohnson, Charles C. Muscoplat, Madhu Trivedi, Barry Goldlust, Susan C. Gallagher, for the P92-01 Study Group. Pilocarpine Tablets for the Treatment of Dry Mouth and Dry Eye Symptoms in Patients With Sjögren Syndrome. A Randomized, Placebo Controlled, Fixed-Dose, Multicenter Trial. Arch Intern Med 1999;159:174-181. 2. Norman Talal, Robert A. Sylvester, Troy E. Daniels, John S. Greenspan, Ralph C. Williams, Jr. T and B Lymphocytes in Peripheral Blood and Tissue Lesions in Sjögren’s Syndrome 3. Halse A-K, Harley JB, Kroneld U, Jonsson R. Ro/SS-A-reactive B lymphocytes in salivary glands and peripheral blood of patients with Sjögren’s syndrome. Clin Exp Immunol 1999a; 115: 203–207. 4. Skopouli FN, Fox PC, Galanopoulou V, Atkinson JC, Jaffe ES, Moutsopoulos HM. T cell subpopulations in the labial minor salivary gland histopathologic lesion of Sjögren’s syndrome. 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Convención Nacional de Reumatología, Buenos Aires, 24 de Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 29. 30. 31. 32. 33. 34. 35. septiembre de 2005.La estimulación colinérgica M1-M2 disminuye la expresión de moléculas presentadoras de autoantígenos (HLA DR), mejorando parámetros clínicos en pacientes con síndrome de Sjögren primario. (Póster).Convención Nacional de Reumatología, Buenos Aires, 24 de septiembre de 2005.Síndrome de Sjögren primario: Autoanticuerpos antirreceptores muscarínicos colinérgicos son en parte responsables de la ausencia de células caliciformes conjuntivales. (Póster). 39 Congreso Argentino de Reumatología-Mar del Plata del 5 al 8 de octubre de 2006 Los anticuerpos Anti M3 fijadores de complemento son marcadores de valor diagnóstico en el síndrome de Sjögren primario. La traslocación nuclear de NFkB se asocia con una marcada apoptosis en las células ductales y acinares de glándulas de salivales menores de pacientes con síndrome de Sjögren primario (ssp). Cambios en la expresión inmunohistoquímica del protooncogen Bcl2 por acción de estimulación colinérgica en pacientes con síndrome de Sjögren primario (ssp). Ignaz Wessler, Heinz Kilbinger, Fernando Bittinger, Charles James Kirkpatrick. The Non-neuronal Cholinergic System. The Biological Role of Non-neuronal Acetylcholine in Plants and Humans. The Japanese Journal of Pharmacology 2001; 85(1): 2-10. Wessler I, Kilbinger H, Bittinger F, Unger R, Kirkpatrick CJ. The non-neuronal cholinergic system in humans:expression, function and pathophysiology. LifeSci.2003 Mar 28; 72(1819): 2055-61. Fujii T, Kawashima K. An independent non-neuronal cholinergic system in lymphocytes. Jpn J Pharmacol. 2001 Jan; 85(1): 11-5. Pavlov VA, Ochani M, Gallowitsch Puerta M, Ochani K, Huston JM, Czura CJ, Al-Abed Y, Tracey KJ. Central muscarinic cholinergic regulation of the systemic inflammatory response during endotoxemia. Proc Natl Acad Sci USA. 2006 Mar 28; 103(13): 5219-23. 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Padilla *Servicio de Cardiología, Hospital de Niños, Tucumán RESUMEN SUMMARY Objetivo: Analizar la presencia de trastornos de la conducción tempranos y tardíos en hijos de madres lúpicas y su asociación con anti-Ro/SSA. Material y método: Se estudiaron 41 hijos de 29 madres con LES (criterios ACR), a quienes se les realizó evaluación cardiovascular, ECG y serología para anti-Ro/SSA a los neonatos y a las madres. Se analizaron variables relacionadas al embarazo, puerperio y al LES. Resultados: La edad X de los hijos al momento de la evaluación fue 9.6 años (DS 8.8). En 29 embarazos (71%), las madres tenían diagnóstico previo de LES, tiempo de evolución de la enfermedad X 7.4 años (DS 6). Once de ellas (27%) reactivaron su enfermedad durante el embarazo. El 31% de las madres (9) fueron anti-Ro positivas. Sólo 2 niños fueron anti-Ro positivos, ninguno de ellos con lupus neonatal. Tres niños (7%) presentaron patología cardíaca al nacer: 1) Niña con bloqueo cardíaco congénito (BCC) que requirió marcapasos y falleció a los 3 años de edad por insuficiencia cardíaca secundaria a miocardiopatía dilatada; 2) Niño con bradicardia transitoria; 3) Niña con malformación cardíaca severa. Ninguno de ellos fue anti-Ro positivo. La presencia de anti-Ro en madres con LES no se asoció a complicaciones del embarazo, enfermedades neonatales, patología cardíaca ni reactivación del LES (p=NS) Conclusión: En esta población de madres lúpicas, la presencia de anti-Ro/SSA no se asoció a compromiso cardíaco en sus hijos. Cardiac involvement in children of mothers with Systemic Lupus Erythematosus (SLE) Palabras clave: Bloqueo cardíaco congénito; anti-Ro/SSA; cardiopatía LES. Objective: To analyze the occurrence of conducting system pathology, early or late, in children of mothers with SLE and the association with anti-Ro/SSA antibodies. Material and Methods: We studied 41 children of 29 mothers with SLE (ACR criteria), whom did cardiovascular evaluation, EKG and anti-Ro/SSA antibodies for newborns and the mothers. We analyze variables related with pregnant, puerperal period and SLE. Results: At moment of cardiovascular evaluation, mean age of children was 9.6 years (SD 8.8). In 29 pregnants (71%), the mothers had previous diagnosis of SLE, evolution time of SLE x 7.4 years (SD 6). Eleven of these mothers (27%) activated her SLE ; 9 mothers (31%) were anti-Ro/SSA possitive. Only 2 children were anti-Ro/SSA positive, nobody with neonatal lupus. Three children (7%) showed cardiac involvement at birth: 1) A girl with congenital heart block (CHB), she required a pacemarker and death at three years-old by cardiac failure derived of dilated cardiomyopathy; 2) A boy with transient bradycardia; 3) A girl with severe cardiac malformation. None of them with anti-Ro/SSA antibodies. The presence of anti-Ro antibodies was not associated with pregnant complications, neonatal diseases, cardiac involvement or SLE reactivation (p=NS). Conclusion: In these population, Anti-Ro/SSA was not associated with cardiac involvement in children of mothers with SLE. Key Words: Congenital heart block; anti-Ro/SSA; SLE cardiopathy. 20 Introducción La prevalencia de bloqueo cardíaco congénito (BCC) en hijos de madres anti-Ro/SSA positivas oscila entre el 0– 5%1,2. Algunas series describen un alto requerimiento de marcapasos (hasta 66%) y una mortalidad de hasta el 19% en el período intrauterino o en las primeras semanas de vida3,6. Los anticuerpos anti-Ro/SSA maternos atraviesan la barrera placentaria a partir de la semana 16 de gestación7 y pueden inducir miocarditis en el corazón fetal (depósitos de IgG, C1q, C4, C3d, C6, C9 y fibrina) resultando en la subsecuente fibrosis del sistema de conducción manifestado clínicamente como bloqueo aurículoventricular permanente. Estos anticuerpos pueden ser además arritmogénicos por acción directa sobre los canales de calcio o por interferir en la apoptosis del miocardiocito8. Durante el seguimiento de niños con BCC, algunos de ellos fueron positivos para autoanticuerpos o desarrollaron enfermedades del tejido conectivo en forma tardía9,10. Por otro lado, se han descripto pacientes con diagnóstico tardío de trastornos de la conducción, cuyas madres desarrollaron posteriormente LES o Síndrome de Sjögren11-13. Michaelson y col.14 siguieron prospectivamente 102 pacientes con BCC, pero libres de síntomas hasta los 15 años de edad. De ellos, sólo el 50% había sido diagnosticado en el período intrauterino o neonatal. En este grupo fallecieron 11 pacientes, 5 sin síntomas previos (muerte súbita). Esto sugiere la posibilidad de que hijos de madres con LES y anti-Ro/SSA puedan ser subdiagnosticados al nacer, y presentar tardíamente complicaciones cardíacas asociadas al sistema de conducción. Se conoce además, que entre un 4-20% de casos de BCC detectados al nacer, no están asociados a malformaciones cardíacas macroscópicas y las madres no presentan anticuerpos anti-Ro/SSA detectables8. El propósito de nuestro estudio fue analizar la presencia de trastornos de la conducción (tempranos y tardíos) en hijos de madres con LES y establecer su asociación con anticuerpos anti-Ro/SSA. Material y métodos Se estudiaron en forma consecutiva a 41 hijos de 29 madres con LES (criterios ACR15), de cualquier edad al momento de la evaluación, a quienes se les realizó ECG y examen clínico cardiovascular. Los neonatos (hasta 28 días de nacidos) y los niños fueron evaluados por cardiólogos pediaRevista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 tras. A aquellos hijos que presentaban patología cardíaca se les realizó ecocardiograma doppler. Se recolectaron datos del embarazo y puerperio. En todas las madres y en los niños de hasta 60 días edad al momento del examen cardiovascular se analizaron anticuerpos anti-Ro/SSA por ELISA (Kit INOVA). Las variables evaluadas en las madres con LES fueron: diagnóstico de LES (4 criterios ACR) previo o posterior al embarazo; tiempo de evolución del LES al momento del parto; reactivación del LES durante el embarazo (cuando un cambio clínico o de laboratorio de la paciente hubiera requerido modificación del tratamiento); embarazo complicado (diabetes gestacional, hipertensión arterial, internación). Las variables estudiadas en los hijos fueron: edad, sexo, peso al nacer (adecuado o no para edad gestacional), nacimiento a término (>37 semanas de gestación), patología cardíaca y antecedente de otras enfermedades neonatales. Se consideraron trastornos tempranos de la conducción a aquellos diagnosticados intraútero o en el período neonatal, y tardíos a los posteriores a esta fecha. Para el análisis estadístico se aplicó test x2 y test exacto de Fisher . El nivel de significancia establecido fue de 0,05. Resultados Las características de las 29 madres se describen en la Tabla 1. El 31% de ellas fueron anti-Ro/SSA positivas. De los 41 hijos estudiados (Tabla 2), seis fueron neonatos al momento de la evaluación. Dos de ellos fueron anti-Ro/SSA positivos (33,3%) pero ninguno presentó lupus neonatal. Tres niños (7%) presentaron patología cardíaca al nacer. El caso 1: Niña con BCC, anti-Ro/SSA negativa al igual que su madre, quien requirió marcapasos a los 7 días de vida. Falleció a los 3 años de edad por insuficiencia cardíaca secundaria a miocardiopatía dilatada. Caso 2: Niño anti-Ro/ SSA negativo, con bradicardia sinusal durante las primeras 24 hs de vida, autolimitada. Sin complicaciones posteriores. Caso 3: Niña anti-Ro/SSA negativa, con malformación cardíaca severa (Ductus Arterioso Persistente-Hipertensión pulmonar-CIV), diagnosticada a los 10 días de vida, con resolución quirúrgica a los 45 días y buena evolución. Su madre había presentado SLEDAI estable durante el embarazo y no había recibido drogas inmunosupresoras o teratogénicas durante el mismo. Ninguno de los hijos estudiados presentó trastornos 21 tardíos de la conducción. La presencia de anti-Ro/SSA materno no se asoció a embarazo complicado, enfermedad neonatal o reactivación del LES durante el embarazo (p=NS). Nº hijos (embarazos) n=41 Diag. LES previo embarazo 29/41 (71%) Edad X 25 años (DS 4.7) Tiempo de evolución LES X 7.4 años (DS 6) Reactivación LES en embarazo 11 (27%) Internación 6 (15%) Enfermedades del embarazo 2 (DBT gestacional-HIE*) Anti-Ro/SSA (+) 9 (31%) Tabla 1. Descripción de la población de madres LES (n=29). DBT: diabetes - HIE: Hipertensión inducida por el embarazo. Edad X (años) 9,6 (DS 8,8) Recién nacidos 6 Anti-Ro (+) 2/6 (33,3%) Pretérmino 10 Bajo peso al nacer 8 Enfermedades neonatales 5 Ictericia Estenosis subglótica Enf. Membrana Hialina Patología Cardíaca BCC* 3 1 1 3 (7%; IC 95% 1,5-19) 1 (2%; IC 95% 0,06-12)) Tabla 2. Descripción de la población de hijos (n=41). *BCC: Bloqueo Cardíaco Congénito. 22 Discusión La frecuencia de BCC está estimada en 1/11.000 a 1/22.000 nacidos vivos. En esta población, la prevalencia de BCC fue similar a la descripta en otras series de hijos de madres con enfermedades del tejido conectivo1,2,16. Al igual que descripciones previas de Schmidt17, Groves18 y Hubscher19, nuestra paciente con BCC y su madre fueron anti-Ro/SSA negativas. Estos autores describieron que esta población de niños se caracterizaban por ser diagnosticados tardíamente (más de 17 meses de edad), en contraste con nuestra paciente de diagnóstico neonatal. Otros mecanismos fisiopatogénicos, además del anti-Ro/SSA estarían implicados en el desarrollo del BCC: la presencia de anti-La/SSB (no estudiado en esta serie) o la falta de detección del anti-Ro 52kD, el más fuertemente asociado a BCC16,20. McCauliffe21 sostiene que, si bien la serología convencional puede detectar la mayoría de los anticuerpos anti-Ro, existe un pequeño grupo de pacientes con ausencia del anti-Ro 60 kD en quienes no se pueden determinar los anticuerpos anti-Ro 52 kD con los métodos habituales. En este grupo de niños negativos para anti-Ro, la presencia de malformaciones cardíacas microscópicas podrían afectar el sistema de conducción aurículoventricular8. Recientemente, Cimaz y col.22 estudiaron en 2 familias el polimorfismo genético para el TNF α y TGF β1, encontrando que la respuesta fetal profibrótica (genotipo profibrótico) sería un factor contribuyente al desarrollo de BCC en hijos de madres anti-Ro positivas. Es decir, que no bastaría la sola presencia del anticuerpo para desencadenar daño en el sistema de conducción, sino que requeriría de otros mecanismos adyuvantes. En el 2001, el primer estudio prospectivo de 100 madres anti-Ro positivas2 mostró una prevalencia de BCC del 2% en 2 madres con SS primario y Enfermedad Indiferenciada del Tejido Conectivo y en ninguna de las 53 mujeres con LES. Este trabajo detectó otras anormalidades electrocardiográficas: bradicardia sinusal (resueltas espontáneamente) y prolongación del intervalo QT. En nuestra serie, tuvimos un niño con bradicardia sinusal autolimitada, pero con serología negativa para anti-Ro/SSA. Con respecto al pronóstico de niños con BCC diagnosticado en forma temprana, fallecen por insuficiencia cardíaca secundaria a miocardiopatía dilatada, complicación también observada en nuestra paciente con BCC23,24. Existen publicaciones de pacientes que evolucionaron de bloqueos incompletos a completos en el transcurso de los meses posteriores al nacimiento4,25,26. Esos bloqueos in- completos podían no ser detectados en el período neonatal. Además se han descripto muertes súbitas tardías en pacientes mayores de 15 años con BCC pero libres de síntomas por años14. Hasta el momento, el pronóstico de los pacientes con BCC está influenciado por la edad, con mayor morbimortalidad cuando el diagnóstico es más temprano27. En nuestra serie, no detectamos trastornos de la conducción tardíos ni otras manifestaciones de lupus neonatal, y ninguno de los hijos evaluados presentaron enfermedades del tejido conectivo. Si bien la prevalencia de BCC es baja, su morbimortalidad es elevada3-5. Los anticuerpos anti-Ro/SSA maternos atraviesan la barrera placentaria a partir de la semana 16 de gestación y es allí donde se debe iniciar la detección precoz de los trastornos de la conducción. Este monitoreo cardíaco fetal debería realizarse en todas las madres con LES, independientemente de la presencia de anti-Ro/SSA, ya que no es el único mecanismo implicado en la etiopatogenia del BCC. En conclusión, anti-Ro/SSA no se asoció a compromiso cardíaco en hijos de madres con LES; la prevalencia de BCC fue del 2% y no detectamos patología cardíaca tardía. Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 Bibliografía 1. Lockshin MD, Bonfa E, Elkon K, Druzin ML. Neonatal lupus risk to newborns of mothers with systemic lupus erythematosus. Arthritis Rheum 1988; 31: 697-701. 2. Brucato A, Frassi M, Francechini F, et al. Risk of congenital complete heart block in newborns of mothers with Anti-Ro/SSA antibodies detected by counterimmunoelectrophoresis. A prospective study of 100 women. Arthritis Rheum 2001; 44: 1832-35. 3. Costedoat-Chalumeau N, Georgin-Lavialle S, Amoura Z, Piette JC. Anti-SSA/Ro and anti-SSB/La antibody-mediated congenital heart block. Lupus 2005; 14, 660–664. 4. 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Neoplasmas sólidos, linfomas, mielomas y leucemias pueden causar enfermedad reumática por infiltración o por mecanismos inmunológicos, pero en la mayoría de los casos es difícil demostrar causalidad.1 Numerosos autores debaten este tema, existen muchas publicaciones internacionales al respecto citándose diferentes tipos de cáncer en el contexto de varios síndromes de naturaleza autoinmune.2,3 Síndromes autoinmunes paraneoplásicos se observan también en pacientes con enfermedad mielodisplásica. Una revisión de casos individuales y pequeñas series sugieren que alrededor del 10% de estos pacientes puede experimentar varios síndromes autoinmunes, incluyendo como manifestaciones clínicas más frecuentes vasculitis cutáneas y sistémicas, fiebre, artritis, infiltrados pulmonares, polineuropatía periférica, enfermedad intestinal inflamatoria y glomerulonefritis que habitualmente responden también al tratamiento inmunosupresor o esteroideo.4 Medical literature vastly refers association between neoplasia and rheumatic disease but generally in a little consistent way. Solid neoplasms, lymphomas, mielomas and leukemias can cause rheumatic disease by tissue infiltration or by immunological mechanisms but in most of them is very difficult to demonstrate causality. Many authors debate this subject, through international publications, describing different types of cancer in the context of several syndromes of autoinmune nature. Autoinmune paraneoplastic syndromes are also seen in patients with myelodisplastic disease. Revision of individual cases and small series suggest that around 10% of these patients can experience several autoinmune syndromes like cutaneous and systemic vasculitis, fever, arthritis, pulmonary infiltrates, peripheral neuropathies, inflammatory bowell disease and glomerulonephritis as frequent clinical manifestations responding to inmunosupresor and/or corticosteroid therapy. Caso clínico Correspondencia Dr. V. Caputo Servicio de Reumatología, Hospital Militar Central, Buenos Aires, Argentina. Tel.: 15-4060-5032 E-mail: [email protected] 26 Se presenta el caso de una paciente de 18 años de edad, derivada por el Servicio de Clínica Médica de nuestro Hospital, sin antecedentes patológicos relevantes, sólo amigdalectomía, alergia a la penicilina y enfermedades comunes de la infancia, presentando coxodinia bilateral y derrame articular alternante de rodillas, a predominio derecho. Presentó episodios de gonalgia y derrame bilateral, sin compromiso del estado general, en tres o cuatro oportunidades en el último año previo a la consulta reumatológica que en todos los casos remitieron con tratamiento sintomático, requiriendo en dos oportunidades esteroides de liberación lenta y en los otros casos sólo AINES VO. No presentó alteraciones de la fuerza muscular ni de la movilidad articular en general, sin antecedentes de uretritis y trastornos genitourinarios, tampoco alteraciones compatibles con síndrome seco, fenómeno de Raynaud ni alteraciones vasomotoras. Se realizó estudio de capilaroscopia en los cuatro últimos dedos de ambas manos con resultado normal. Laboratorio Los resultados de laboratorio no mostraron alteraciones significativas, excepto una discreta pero persistente elevación de la velocidad de sedimentación globular. El factor reumatoideo, FAN, PCR, los anticuerpos anti DNA, Sm, RNP, Ro, La y Jo1 fueron negativos, la complementemia fue normal y el hisopado y cultivo de fauces mostró flora habitual en tres oportunidades, los anticuerpos antiestreptolisina no superaron las 190 UT. Las radiografías de pies, manos, panorámica de pelvis y sacroilíacas en posición de Ferguson no mostraron alteraciones patológicas y la TC de articulaciones sacroilíacas fue normal. En febrero de 2006 la paciente es traída a la consulta en mal estado general, con un síndrome de impregnación, astenia, adinamia, síndrome febril (38-39,5 ºC) de 72 hs de evolución, hepatoesplenomegalia, abdomen levemente distendido, oliguria, derrame articular rodilla derecha 6/6 y lo que preocupó y motivó su internación fue la presencia de una paraparesia fláccida, hipoestesia difusa en miembros inferiores, y parestesias en miembro inferior derecho con signo de Babinsky (+) bilateral. El laboratorio de ingreso mostró un hemograma alterado: hematocrito 33%, leucopenia 1100 x mm3, plaquetas 38.000 x mm3, VSG 88 mm en la primer hora, función renal conservada (urea 0,43 g/l, creatininina 0,85 g/l), coagulograma normal, GOT 57 U/L, GPT 40 U/L, y LDH 1888 (aproximadamente cuatro veces por encima del límite superior). Se observó aumento de alfa 2 globulina 0,95 g/dl y discreta hipergammaglobulinemia (1,53 g/dl) de tipo policlonal en el proteinograma electroforético. Se pancultivó a la paciente (hemocultivos x 3, urocultivo y cultivo de líquido sinovial de rodilla derecha negativos). La serología para virus VIH, CMV, EB, hepatitis A, B y C, toxoplasmosis, Chagas y VDRL fueron negativos. Nuevamente el FAN, Látex, Rose Ragan y antígenos extraíbles del núcleo fueron negativos. Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 El dosaje de factores de la coagulación y complementemia fueron normales. Se realizó TC de cerebro y de cuello que no arrojaron alteraciones patológicas y la TC de tórax evidenció un moderado derrame pleural bilateral. Se observó el bazo levemente aumentado de tamaño, litiasis vesicular, pequeños ganglios de rango no adenomegálico a nivel intercavo y lateroaórtico y una pequeña colección líquida en pelvis menor en la tomografía de abdomen y pelvis. Se ordenó biopsia de médula ósea cuyo resultado fue infiltración por leucemia mieloide aguda M3 (promielocítica); ésta constituye el 10-15% de las leucemias agudas mieloblásticas y su mecanismo patogénico está determinado por una translocación de material genético entre cromosomas 15 y 17 (t 15-17) y cuyas manifestaciones más importantes son fiebre, pancitopenia y trastornos hemorrágicos, que justificaban en parte la signo-sintomatología presente en la paciente. Se realizó análisis citogenético en sangre periférica y médula ósea donde se constató la presencia de esta translocación (t 15-17)(q 11-12). Se solicitó seguidamente RM de columna dorsolumbar en la cual se observó tejido de señal isointensa en T2 e hiperintensa en T1 respecto a la médula espinal, ocupando el espacio epidural posterior entre D5 y D10 que determinaba obliteración de los espacios subaracnoideos perimedulares, extendiéndose a través de los forámenes de conjugación y canales radiculares en sentido bilateral hacia los planos perivertebrales, a predominio derecho en D8, con menor compromiso en D 9-10 y con importante refuerzo en el contraste. La médula espinal se encontraba desplazada desde su borde posterior, entre D6 y D8, observándose tejido similar obliterando el espacio epidural desde L5 en sentido caudal y lateral comprometiendo forámenes de conjugación y canales radiculares con sus raíces emergentes (Figura 1). Basados en las manifestaciones clínicas, el diagnóstico hematológico (leucemia promielocítica) y las imágenes de resonancia magnética, se diagnosticó sarcoma granulocítico: tumor mieloide extramedular que puede desarrollarse en el marco de una leucemia mieloide aguda previa, en procesos mieloproliferativos crónicos o mielodisplásicos y en algunos pacientes sin historia previa hasta el momento de la enfermedad hematológica. El tratamiento en estos casos debe orientarse hacia la profilaxis antibiótica, exéresis por neurocirugía, corticote27 Figura 1. rapia, soporte transfusional, quimio y radioterapia, y está consistentemente documentado, en las publicaciones referidas al caso, que el diagnóstico precoz y un enfoque multidisciplinario resultan en una alta probabilidad de curación, tal como lo muestra la RM de columna dorsolumbar postratamiento (Figura 2). Discusión Existen muy pocas publicaciones acerca de esta infrecuente presentación. Ya en 1984 Carneiro y col. citan un sarcoma granulocítico provocando compresión de la médula espinal en asociación con compromiso testicular5. En 1986 Marra y col.6 hacen lo propio con dos casos de leucemia mieloide aguda, sarcoma granulocítico de ovario y compromiso del sistema nervioso central. Spiegelman7 comunica un caso de presentación como 28 Figura 2. síndrome de la cola de caballo secundario a una masa extradural y retroperitoneal cuyo diagnóstico final fue leucemia monocítica aguda. Sandhu y col. recomiendan biopsia a cielo abierto de este tipo de tumor, dado que esta forma de presentación aleucémica es comúnmente subdiagnosticada y representa un retraso para el inicio temprano del tratamiento, determinante de su posterior evolución11. La infrecuencia de esta forma de presentación para este tipo de tumores es subrayada por Auckland8, más aún en ausencia de enfermedad hematológica, presentando el caso de una mujer joven de 35 años con triplejía rápidamente progresiva causada por una masa paraespinal, extradural sin compromiso de médula ósea ni manifestaciones en sangre periférica. Hacen mención sobre la conveniencia en la utilización de técnicas inmunohistoquímicas para arribar a un rápido y adecuado diagnóstico dado que de esto depende su pronóstico. Kalayci y un grupo de neurocirujanos turcos9 citan el caso de un paciente joven con una masa extradural en columna dorsal, posteriormente confirmada por histopatología como sarcoma granulocítico, remarcando nuevamente la rareza de este tumor en un paciente sin enfermedad hematológica previa ni compromiso de médula ósea al momento del diagnóstico. Recientemente otro caso de sarcoma granulocítico, esta vez de localización testicular en un paciente sin leucemia sistémica, es publicado por Largeveld en junio de 200510. Cabe destacar que este tipo de tumores son más comunes en el contexto de una leucemia mieloide aguda o crónica, de lo contrario son muy poco frecuentes y pueden aparecer en cualquier localización, habiéndose descripto casos en región ocular, mama, cerebro, páncreas (10 casos) y vías biliares (3 casos). Una revisión de la literatura reveló sólo 14 casos no leucémicos con sarcoma granulocítico provocando compresión de la médula espinal11, 12, 13. Conclusiones Nuestra paciente presentó como único signo de su enfermedad una monoartritis alternante de rodillas (paraneoplásica) durante un período prolongado de tiempo, sin ninguna otra manifestación que orientara a un probable diagnóstico, coincidiendo la primer alteración del hemograma con la paraplejía fláccida que motivó su internación, un año después del inicio de sus síntomas. Consideramos de vital importancia la revisión sistemática de absolutamente todas las causas posibles de mono u oligoartritis y el seguimiento periódico de dichos pacientes, dado que, en raras ocasiones, y éste es un ejemplo claro, pueden ser la manifestación inicial de enfermedades sistémicas severas cuyo pronóstico y evolución final dependen de la celeridad con la que se pueda arribar a un correcto diagnóstico etiológico. Bibliografía 1. Maldonado Cocco JA, Citera G, Paira S. Reumatología. Buenos Aires: AP Americana de Publicaciones, 2000. 2. Leandro MJ, Isemberg DA. 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Otol Neurotol. 2006 Jan; 27(1): 106-9. 29 [ diagnóstico por imágenes ] Poliartropatía ocronótica R. Barousse, J. López Moras, G. Aguilar Departamento de Diagnóstico por Imágenes. Centro de Diagnóstico Dr. Enrique Rossi Servicio de Radiología. Hospital de Clínicas “José de San Martín”. Buenos Aires. Introducción Conclusión diagnóstica La Alcaptonuria es una rara enfermedad hereditaria del metabolismo de la tirosina y fenilalanina, 1-4/1.000.000, autosómica recesiva, caracterizada por la acumulación de ácido homogentísico en orina y su depósito en diversos tejidos del organismo ricos en colágeno, llamando a esta alteración Ocronosis (ocre: amarillo, noso: enfermedad). Las zonas de cartílago articular son las más afectadas, siendo la columna típicamente comprometida desarrollando espondilosis con calcificación y osificación de discos intervertebrales. Menos comúnmente se asocian artropatías periféricas de rodilla, hombro y cadera. Poliartropatía ocronótica. Caso clínico Paciente masculino de 35 años de edad remitido al centro para realización de estudios radiológicos de control de su enfermedad de base ya conocida. Clínicamente el paciente se encontraba asintomático. De la anamnesis surge la historia de episodios repetidos de lumbalgia, gonalgia y pubalgia crónica de hace 7 años tratados en forma sintomática. El examen físico demuestra sutil coloración oscura de escleróticas. Su análisis de ácido homogentísico en orina de 24 horas demostraba niveles elevados, por encima del valor normal de referencia (menor de 10 mg/24h). Se le realizaron estudios radiológicos de columna dorsolumbar y ambas rodillas en incidencias frente – perfil y pelvis frente. 32 Discusión La Ocronosis es una rara metabolopatía hereditaria definida como el conjunto de las manifestaciones musculoesqueléticas de la Alcaptonuria. Los pacientes con Alcaptonuria se caracterizan por la ausencia parcial o completa de la oxidasa del ácido homogentísico, enzima presente en hígado y riñón, responsable del catabolismo de la tirosina y fenilalanina. La misma transforma el ácido homogentísico (ACH) en ácido maleilacetoacético lo que conlleva a valores séricos elevados de ACH con la consiguiente eliminación en orina. Así mismo el ACH se acumula en tejidos del organismo ricos en colágeno, produciendo coloración negro-azulada de los mismos dando por esto el nombre de Ocronosis. La artropatía ocronótica resulta del depósito de pigmentos en las articulaciones del esqueleto axial y periférico. Siempre existe una historia familiar de la enfermedad, dos veces más frecuente en mujeres y generalmente asintomático hasta la vida adulta, aunque la detección de la enfermedad en la niñez puede ocurrir por la identificación de la coloración de orina. Si bien su etiología es desconocida, en la actualidad se han identificado hasta 16 tipos de mutaciones en el gen HGO humano (cromosoma 3), que pueden dar lugar a una pérdida de función de la enzima. También se ha relacionado con la presencia de HLA B-27 positivo. La Alcaptonuria presenta característicamente la aparición de orina que se torna de color oscuro al contacto con el aire debido a la oxidación del ACH, hecho similar que ocurre con la pérdida de líquido por sudor. El hallazgo significativo y patognomónico a nivel del laboratorio es el aumento del ACH en orina de 24h. La acumulación de ACH en los tejidos se presenta clínicamente alrededor de los 20-30 años con pigmentación marrón azulada de la piel, esclera, córnea, nariz y pabellón auricular. A menudo el cerumen del conducto auditivo externo es negro y la periferia de la membrana timpánica es gris oscura. La artropatía ocronótica es una manifestación de la Alcaptonuria de larga evolución. La sintomatología aparece alrededor de la cuarta década con dolor y limitación de la movilidad en caderas, rodillas y hombros. Puede haber derrame articular. Las manifestaciones espinales incluyen rigidez y dolor lumbar, rectificación de la lordosis fisiológica, hipercifosis torácica y limitación funcional. El depósito del pigmento ocronótico puede ocurrir en otros sistemas como el cardiovascular, el genitourinario o respiratorio, dando origen a calcificaciones valvulares, renales, prostáticas y bronquiales. El pigmento se acumula en el cartílago hialino y el fibrocartílago, produciendo fragilidad y fragmentación de la superficie, a continuación aparecen fisuras y el hueso subcondral queda expuesto conllevando a eburnización y esclerosis. Luego se desarrolla formación de vellosidades sinoviales con posterior desprendimiento y origen de cuerpos libres osteocondrales. 1 2 Figura 1. Rx columna dorsal perfil. Se observan calcificaciones discales, pérdida del espacio discal, osteopenia de cuerpos vertebrales con esclerosis marginal y mínima osteofitosis. Figura 2. Rx columna lumbar frente. Escoliosis dextro-levoconvexa, reducción del espacio discal, calcificación de los discos intervertebrales con marcada osteofitosis y osificación de discos L1-L2 y L3-L4 (flechas negras). Calcificación litiásica en grupo calicilar de sombra renal izquierda (flecha blanca). Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 En la columna principalmente lumbar afecta el cartílago articular de platillos y el anillo fibroso y ligamentos vertebrales llevando a calcificación. Las manifestaciones radiológicas predominan en el esqueleto axial, especialmente en segmentos toracolumbar. La anomalía más distintiva es la alteración en el disco intervertebral, dado por la disminución de su altura con fenómeno de vacío y calcificaciones horizontales finas similando a las “hostias”, representado por las fibras internas del anillo fibroso. También puede extenderse en placa a todo el disco intervertebral. Estas alteraciones discales son visibles en múltiples niveles simultáneamente. Es notable el bajo grado de proliferación ósea marginal del cuerpo vertebral con sólo pequeños osteofitos visibles. La calcificación puede progresar eventualmente cruzando el espacio discal dando aspecto similar a los sindesmofitos de la espondilitis anquilosante. Los cambios severos incluyen osteoporosis, hipercifosis, pérdida de los espacios discales intervertebrales por osificación y formación de puentes óseos “columna en caña de bambú” (Figuras 1, 2, 3 y 4). A nivel extraespinal, los hallazgos radiológicos son similares a la enfermedad articular degenerativa. La sínfisis 3 4 Figura 3. Rx de columna lumbar perfil. Calcificación de discos intervertebrales, osificación de discos L1-L2 y en sector anterior de L3-L4 (flechas). Osteopenia difusa y rectificación de la lordosis fisiológica. Figura 4. Rx de columna lumbar perfil. Reducción del espacio discal con calcificación del disco y fenómeno del vacío. 33 del pubis puede mostrar disminución del espacio articular, calcificación y esclerosis ósea (Figura 5). La rodilla es uno de los lugares más comúnmente comprometido con disminución del espacio articular y esclerosis ósea, salvo que la Ocronosis afecte aisladamente el compartimento femorotibial lateral, existe calcificación y fragmentación meniscal con múltiples cuerpos intraarticulares radiopacos, osteofitos y calcificación tendinosa (Figuras 6 y 7). La excepción es la cadera donde tiene hallazgos simila- 5 res a la artritis reumatoidea con pérdida uniforme del espacio articular y relativamente pequeña osteofitosis. Conclusión Las claves para el diagnóstico radiológico son los cambios característicos del disco intervertebral y la temprana edad de inicio del cuadro de artropatía degenerativa avanzada en localizaciones no esperadas. 6 7 Bibliografía 1. Terry R Yochum, Lindsay J Rowe. Essentials of skeletal Radiology. Second E. Vol Two. Pag. 954-957. Williams&Wilkins. 2. Donald Resnick. Bone and Joint Imaging. Second Edition. Marban - 2001. T-I, Pag. 444-448. 3. O’Brien WM, La Du BN, Bunim JJ. Biochemical, pathologic and clinical aspects of alcaptonuria, ochronosis and ochronotic arthropathy: a review of world literature (1584-1962). Am J Med 1963;34:813-38 4. Daniel K, Thomas B: Ochronosis. In Klippel’s textbook of Rheumatology. Phyladelphia, Mosby 2: 28.1-28.4, 1998. 5. Cortina R, Moris C, Astudillo A, Gosalbez F, Cortina A. Familial Ochronosis. Eur Heart J. 1995; 16: 285-6. 6. Janocha S, Wolz W, Srsen S, et al: The human gene for alkaptonuria (AKU) maps to chromosome 3q. Genomics 1994; 19:5-8. 7. Phornphutkul C, Introne WJ, Perry MB, et al: Natural history of alkaptonuria. N Engl J 2002; 374:2111-21. 8. Kocyigit H, Gurgan A, Terzioglu R, Gurgan U. Clinical, Ra- 34 9. 10. 11. 12. 13. 14. Figura 5. Rx de sínfisis pubiana frente. Disminución del espacio articular con esclerosis osea yuxtaarticular inferior. Figura 6. Rx de rodilla derecha frente. Cambios degenerativos a nivel del compartimento femorotibial lateral con leve osteofitosis marginal y calcificación condral. Figura 7. Rx de rodilla derecha perfil. Se observan múltiples cuerpos libres óseos intraarticulares a nivel de compartimento anterior y posterior (flechas). diographic and Echocardiographic Finding In a patient with ochronosis. Clin Rheumatol. 1998; 17: 403-6. Balaban B, Taskaynatan M, Yasar E, et al: Ochronotic spondyloarthropathy: spinal involvement resembling ankylosing spondylitis. Clin Rheumatol 2006 Jul; 25(4): 598-601 Cervenansky J, Sitaj S, Urbanek T. Alkaptonuria and ochronosis. 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Introducción Bajo el término de conectivopatías se agrupan una serie de entidades clínicas entre las que se encuentran la Artritis Reumatoidea (AR), Lupus Eritematoso Sistémico (LES), Síndrome de Hughes o Síndrome Antifosfolipídico (SAF), Síndrome de Sjögren (SS), Esclerodermia o Esclerosis Sistémica Progresiva (ESP), Dermatopolimiositis (DM/PM) y Enfermedad Mixta del Tejido Conectivo. Estas enfermedades son multisistémicas, de etiología desconocida, con alteraciones en el sistema inmune y producción de anticuerpo. La mayoría de ellas afectan a las mujeres por lo que las hormonas sexuales jugarían un importante papel en su desarrollo. El embarazo trae consigo modificaciones en dichas hormonas y en el sistema inmune por lo que la evolución de estas enfermedades puede sufrir variaciones. A la vez es necesario plantearse la influencia de la propia enfermedad y del tratamiento sobre el desarrollo de la gestación. Las preguntas que nos plantean frecuentemente nuestras pacientes y nosotros mismos son: • ¿Tienen la misma posibilidad de embarazarse que una mujer normal? • ¿Puede el embarazo o el puerperio empeorar la enfermedad? • Si necesita tratamiento, ¿le hará daño al feto? • ¿Cómo afectará la enfermedad al desarrollo de la gestación y al feto? • ¿Qué controles debo realizar en este tipo de paciente? • ¿En caso de necesitar tratamiento qué drogas serían las indicadas? Correspondencia Dra. María Carolina Auad [email protected] Malabia 2455, 5º B, Cp. (1425), Capital Federal. Tel.: 4833-2605 Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 Estas preguntas se tratarán de contestar en esta monografía enfocando en esta oportunidad en el LES. Lupus eritematoso sistémico Es un trastorno inflamatorio multisistémico caracterizado por la producción de autoanticuerpos contra múltiples antígenos, cursa con sucesivas exacerbaciones y remisiones1,2. Es una de las colagenopatías más frecuentes, estando su incidencia y prevalencia influidas por la raza, sexo y edad; presenta una incidencia entre 2,4-4 casos anuales por 100.000 habitantes y una prevalencia estimada en 25,4 a 42 casos por 100.000 habitantes1,2. Se caracteriza por ser una enfermedad de personas jóvenes, estando el pico de incidencia entre los 15 y 40 años, siendo la edad media de comienzo alrededor de los 30 años; en todos los estudios se comprobó una mayor frecuencia de LES en mujeres, lo cual estaría relacionado con un predominio del efecto estrogénico durante la pubertad y años fértiles que aumentaría la susceptibilidad a padecer la enfermedad1,2. Índice de fertilidad en pacientes con LES La fertilidad normalmente no está comprometida en estas pacientes. Se ha descripto que el índice de embarazo es de 2-2,4 embarazos por paciente1,2,3. Ciertos factores contribuyen a disminuirlo; irregularidades menstruales con ciclos anovulatorios pueden presentarse durante episodios de actividad de la enfermedad tratadas con altas dosis de corticoides, la falla renal secundaria al LES lleva a la amenorrea. Otro importante factor que incide en la fertilidad es el tratamiento con ciclofosfamida, la incidencia de amenorrea es entre el 11-59% dependiendo de la edad de la paciente y de la dosis acumulativa administrada. En general, el riesgo de falla ovárica es mayor con la ciclofosfamida por vía oral que con pulsos endovenosos1,2,3,4. 35 En ausencia de: falla renal, actividad de la enfermedad y tratamiento con ciclofosfamida o con altas dosis de corticoides, las pacientes con LES tendrían una fertilidad igual a la de la población general. No se debe desalentar el embarazo, aunque deben ser informadas del aumento de riesgos para ellas y el feto1,2,3,4. Embarazo y actividad en el LES En el embarazo el LES plantea una serie de problemas tanto en la madre como en el feto; clásicamente se ha considerado que produce una exacerbación de la enfermedad. Numerosos estudios como los de Lockshin y col., Mintz y col. y Urowitz y col., no encontraron aumento de la incidencia de actividad de la enfermedad mientras que Wong y col., Petri y col. y Ruiz Irastorza y col., reportaron un aumento en la actividad. La causa de discrepancia puede ser multifactorial, probablemente se deba a diferencias en la definición de actividad. En conjunto parece más probable que la enfermedad se agrave si el lupus está activo al inicio del embarazo que si estuviera inactivo, por ello es razonable aconsejar a las pacientes que eviten el embarazo cuando la enfermedad está activa. En la mayoría de los trabajos se encontró que las exacerbaciones son más frecuentes durante el primer trimestre, aunque otros autores refieren que se producen indistintamente a lo largo de todo el embarazo y en el puerperio3,4, 5,6,7,8,9,10,11. Ciertos cambios físicos que ocurren durante el embarazo fueron interpretados como actividad (por ejemplo: eritema palmar, aumento de la proteinuria junto con aumento en la tasa de filtrado glomerular, eritema malar y alopecia posparto) lo que lleva a una sobreestimación de la frecuencia de exacerbación1,2,3,4. La actividad del lupus durante el embarazo tiende a ser mínima, con predominio de manifestaciones cutáneas y artritis; algunas pacientes experimentan fiebre, fatiga, serositis y trombocitopenia. Compromiso de otros órganos como el riñón y SNC pueden ocurrir en 46-5% respectivamente1,2,3,4, 5,6,7,8,9,10,11. El embarazo no está contraindicado en estas pacientes, pero se deben tener en cuenta las siguientes precauciones: a. la enfermedad debe estar inactiva en el momento de la gestación; b. es necesario un seguimiento estricto de la paciente para detectar precozmente indicios de actividad; c. vigilar la función renal, teniendo en cuenta que en el 36 embarazo normal puede haber proteinuria pero nunca de carácter nefrótico; d. si presenta anticuerpos positivos como el anti-Ro, antiLa y/o antiU1RNP debe descartarse la presencia de bloqueo cardíaco congénito; e. si es positivo los anticuerpos antifosfolipídicos (aFL) o presenta historias previas de abortos es necesario establecer profilaxis con AAS y/o corticoides y anticoagulación; f. prescindir de fármacos teratogénicos (ciclofosfamida, anticoagulantes orales). Se pueden emplear corticoides, azatioprina, hidroxicloroquina y heparina subcutánea4,5,6,7,8,9,10,11. Nefritis lúpica y embarazo En general, las mujeres con LES presentan una fertilidad igual a la de otras mujeres. En la enfermedad activa y en la insuficiencia renal moderada, sin embargo, se asocia con oligoamenorrea y amenorrea, niveles mayores de 250 μmol/l de creatinina sérica usualmente indica infertilidad. Pacientes con diálisis peritoneal y hemodiálisis pueden quedar embarazadas, un 10% de estas pacientes presentan ciclos menstruales regulares. Luego del trasplante renal, las anormalidades endocrinas se regularizan al igual que las menstruaciones3,4, 5,6,7,8,9,10,11. Los anticonceptivos orales (ACO) contienen estrógeno sintético y son utilizados en mujeres jóvenes nulípara con buena aceptación y efectividad. En mujeres con LES tienen beneficios especiales como la prevención de la osteoporosis y previene la fertilidad, durante el tratamiento con ciclofosfamida. Sin embargo se considera que está contraindicado ya que induciría a la reactividad de la enfermedad, mayor riesgo de HTA y complicaciones tromboembólicas. Hay estudios en los que se encontró una frecuencia del 43% de actividad en pacientes con nefropatía lúpica a los 5-30 meses de comenzar con los ACO, mientras que en otros dos reportes no se encontró que incrementen el riesgo. Hipertensión maligna y complicaciones tromboembólicas se encontraron asociadas a antifosfolipídicos (aFL) y ACO3,4,5,6. Basados en estos datos, no se aconseja el uso de ACO en pacientes con nefritis activa, hipertensión incontrolada e historia de tromboembolismo con altos niveles de aFL. La progesterona pura sería un buen método anticonceptivo pero es poco tolerada. El dispositivo intrauterino (DIU) sería un método apropiado para estas pacientes pero está contraindicado por su alto riesgo de infecciones3,4,5,6,7,8,9,10,11. La incidencia de actividad en pacientes con nefritis lúpica y embarazo estaría entre 7,4-63%, presentando un curso agresivo el cual puede llevar a la falla renal aguda y a la muerte de la madre. Por lo tanto se aconseja la concepción durante los períodos quiescentes de la enfermedad y de la nefritis, por lo menos 6 meses de remisión previa a la concepción; no hay criterios uniformemente aceptados sobre definición de remisión. Boumpas y Balow propusieron: estabilización de la función renal, resolución de las anormalidades del sedimento urinario, proteinuria menor de 1 g por día y normalización de los niveles de C3 por lo menos durante 6 meses, por regla las pacientes que cumplen con esta definición tienen altas chances de completar el embarazo sin complicaciones3,4,5,6,7,8,9,10,11. Las contraindicaciones absolutas de embarazo en pacientes con nefritis lúpica son la actividad de la enfermedad principalmente si se trata de una glomerulonefritis proliferativa difusa, síndrome nefrótico, hipertensión severa e hipertensión pulmonar3,4,5,6,7,8,9,10,11 (Tabla 1). Monitoreo general Preferiblemente se debería contar con un perfil de anticuerpos que incluyan anti-DNA, anti-Ro, anti-La y aFL antes de la concepción o por lo menos lo más precoz posible. Durante el embarazo se debe chequear en forma regular los niveles de anti-DNA junto con el C3 y C4, los cuales nos sirven para monitorear actividad del LES. No debemos olvidarnos que la velocidad de sedimentación globular, el aclaramiento plasmático y los niveles serológicos de C3 y C4 aumentan durante el embarazo, por lo tanto si los niveles de estos últimos datos no se modifican o bajan deben alertarnos sobre una posible exacerbación de la enfermedad3,9. • Los controles se deberán realizar mensualmente en las primeras 32 semanas, luego en forma quincenal hasta la semana 36 y semanalmente hasta el parto; en cada visita se monitoreará la presión arterial y la presencia de proteína en orina. • Eco doppler fetal se solicitará entre las semanas 20–24 en los casos que la madre presente anti-Ro/La positivo, al igual que una ecografía obstétrica de rutina para evaluar el crecimiento fetal. Las mujeres deberán continuar con los controles por lo menos hasta 8 semanas después del parto por el riesgo de actividad3,9 (Tabla 2). • Otra forma de controlar a estas pacientes es a través de instrumentos que miden la actividad de la enfermedad, los cuales fueron modificados para aplicarlos en este grupo de pacientes. Ellos son: SELENA SLEDAI (evalúa la actividad de la enfermedad durante el embarazo), LAI (índice de actividad del lupus) adaptado al embarazo y SLAM7 (Tabla 3). Las consecuencias del embarazo en el LES Las pacientes con LES presentan un aumento del riesgo durante el embarazo, con una incidencia que va del 5 al 38%. Aparte de los factores de riesgo como primigesta, preexis- Anormalidades Preeclampsia Nefritis Lúpica Presión arterial Alta Normal o alta Plaquetas Bajas o normal Bajas o normal Complemento (C4,C3) Normal o bajo Normal o bajo Proteinuria Alta Alta Hematuria Puede estar presente, sin células Presente con células Anti-DNA Normal En ascenso o alto Otros síntomas de LES Ausente Presente Respuesta a los corticoides Ausente Presente Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 Tabla 1. Proteinuria durante el embarazo en pacientes con LES. Diferencias entre preeclampsia y nefritis lúpica activa. Julkunen H. Pregnancy and Lupus Nephritis.Scand J. Urol Nephrol. 2001; 35: 319-327. 37 Frecuencias Test de monitoreo Primera visita Hemograma completo- Análisis de OrinaClearance de Creatinina- Proteinuria de 24 hs.- Anticuerpo Anticardiolipinas-Anticoagulante Lúpico- Anti-Ro y Anti-La- Anti-DNA Complemento (C3 y C4) Mensualmente Hemograma completo Trimestral Clearance de Creatinina- Proteinuria de 24 hs. Anticuerpos Anticardiolipinas- ComplementoAnti-DNA. Semanal (último trimestre) Test de stress al feto- Perfil biofísico periódico De la 18 a las 24 semanas (en mujeres con Anti-Ro/La positivo) Ecocardiograma fetal Tabla 2. Monitoreo en embarazadas con LES. Lockshin MD, Sammaritano LR. Lupus pregnancy. Autoimmunity. 2003 Feb;36(1):33-40. Tabla 3. Guías modificadas para la medición de actividad en pacientes con LES embarazadas. SELENA-SLEDAI Descripción Puntaje Descripción Puntaje Convulsiones 8 Piuria 4 (descartar infección) Psicosis 8 Rash 2 (considerar el cloasma) Síndrome orgánico cerebral 8 Alopecia 2 (normal en el puerperio) Compromiso ocular 8 (excluir HTA) Úlceras mucosas 2 Compromiso SNC 8 Pleuritis Cefalea 8 (descartar preeclampsia y/o eclampsia 2 ( hiperventilación secundaria a la progesterona, o secundaria al tamaño del útero) CVA 8 Pericarditis 2 Vasculitis 8 (considerar el eritema palmar) Complemento bajo 2 (normalmente esta alto en el embarazo) Artritis 4 (considerar el edema) Aumento del Anti-DNA 2 Miositis 4 Fiebre 1 Presencia de células en la orina 4 Trombocitopenia Hematuria 4 (descartar cistitis y/o compromiso de placenta) 1 (descartar preeclampsia, síndrome Hellp y trombocitopenia del embarazo) Leucopenia 1 (normalmente se encuentran altos en el embarazo) Proteinuria 38 4 (descartar eclampsia) LAI-P. LAI-P score= a+b+c+d 4 GRUPO 1 GRUPO 2 Fiebre 0 Rash 0 2 Artritis 0 2 3 Serositis 0 2 3 Neurológico 0 Renal 0 Pulmonar 0 Hematológico 0 Vasculitis 0 Miositis 0 1 1 Prednisona-AINESGRUPO 3 3 2 GRUPO 4 3 0 1 2 3 HCQ Inmunosupresores 0 3 Proteinuria 0 1 2 Anti-DNA 0 1 2 C3-C4 0 1 2 3 3 1 2 3 3 2 3 SLAM-R. Buyon J., Kenneth C., Goldman-Ramsey R., Petri M. Assessing disease activity in SLE patients during pregnancy. Lupus. 1999; 8: 677-684 SÍNTOMAS-SIGNOS SCORE Constitucional SÍNTOMAS-SIGNOS Cardiovascular 1. Bajo peso 0,1,3,U 14. Raynaud 2. Fatiga 0,1,3,U 15. Hipertensión 3. Fiebre 0,1,3,U 16. Pericarditis / carditis 0,1,U lupus profundo o lesiones bullosas 0,2,3,U 17. Dolor abdominal 0,1,2,3,U Neuromotor rash malar, fotosensibilidad 18. STROKE 5. Alopecia 6. Rash eritematoso maculopapular, lupus discoide, 0,1,U 0,1,2,3,U Gastrointestinal Mucocutáneos 4. Úlceras nasales y/o orales, eritema periungueal, SCORE 0,1,2,U 19. Convulsiones 0,1,2,U 20. Disfunción cortical 7. Vasculitis (leucocitoclástica, urticaria, púrpura palpable, livedo o panniculitis) 0,1,2,3,U Ojos 8. Cuerpos cytoid 0,1,3,U 9. Hemorragia o epiescleritis 0,1,3,U 10. Papilitis o seudotumor cerebral 0,1,3,U 11. Linfoadenopatía 0,1,2,U 12. Hepatoesplenomegalia 0,1,2,U 0,2,3,U 0,1,2,3,U 21. Cefalea 0,1,2,U 22. Mialgia 0,1,2,3,U Articulaciones 23. Artralgia, artritis 0,1,2,3,U 24. Otros parámetros 0,1,2,3,U Laboratorio 25. Hematocrito Retículoendotelial 0,2,3,U 26. Eritrosedimentación 0,1,2,3 0,1,2,3,U 27. Recuento de linfocitos 0,1,2,3 28. Recuento de plaquetas 0,1,2,3 Pulmón 29. Glóbulos blancos 13. Pleuritis 30. Creatinina plasmática 0,1,2,3,U 31. Sedimento urinario 0,1,2,3,U Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 0,1,2,3,U 0,1,2,3 39 tencia de HT sistólica, tabaquismo, obesidad, historias previas de preeclampsia, aborto, la presencia de aFL sería un factor adicional para desarrollar preeclampsia3,4,5,6,7,8,9,10. Diferenciar preeclampsia de compromiso renal en lúpicas embarazadas es difícil ya que ambas cursan con hipertensión, proteinuria, edemas y empeoramiento de la función renal, a la vez que pueden coexistir. Es importante diferenciarlas ya que su manejo es diferente3,4,5,6,7,8,9,11. La preeclampsia es una enfermedad de causa desconocida con incidencia del 5 al 7% que afecta a mujeres jóvenes primigestas y la hipertensión aparece en las últimas semanas de embarazo, siendo la regla su resolución en el posparto, se caracteriza por presentar isquemia en la placenta y daño en las células endoteliales los cuales explicarían las características clínicas observadas como ser: edema, vasoconstricción, aumento de la reactividad vascular y en los casos severos activación del sistema de coagulación3,4,5,6,7,8,9,10,12. En las pacientes con LES en actividad, el C3 y C4 pueden normalizarse o estar en bajos títulos acompañados de elevación de anti-DNA, presencia de sedimento de actividad urinaria (glóbulos rojos, células y cilindros granulosos) con compromiso de otros órganos como artritis, vasculitis cutánea, úlceras orales y linfadenopatías. Por último, el tratamiento con corticoides empeora la preeclampsia, mientras que en el lupus hay buena respuesta al mismo3,4,5,6,7,8,9,10,12. Consecuencias del LES en el feto Las pacientes con LES se caracterizan por presentar un aumento en la incidencia de pérdida fetal (aborto y feto muerto), parto prematuro y retardo de crecimiento intrauterino. Las tasas de aborto y feto muerto varían del 6-35% y 022% respectivamente, siendo mayores que de la población general. La nefritis, historias previas de pérdidas fetales y la presencia de aFL son factores predictores3,4,5,6,7,8,9,10,11. Placenta y LES Redline y Abramowsky en 1985 y Labarrere y col. en 1986 reportaron un significativo aumento de vellosidades crónicas y lesiones vasculares uteroplacentarias. Describen infartos placentarios extensos, envejecimiento prematuro de las vellosidades, obliteración de los vasos fetales, necrosis fibrinoide uteroplacentaria y ateromas en placentas de pacientes con LES12,13. 40 Por inmunofluorescencia se demostró depósitos de inmunoglobulinas, principalmente IgM, productos del complemento, fibrina y albúmina que afectaban los vasos. Bernischke y Kaufmann reportaron similares cambios. Hanly y col. reportó ausencia de inflamación en la decidua de los vasos12,13. Lupus neonatal (LN) El lupus neonatal es el ejemplo inmunológico más dramático de transferencia de la enfermedad del sistema inmune materno al feto. Sólo una pequeña fracción de hijos de madres con lupus u otras enfermedades reumáticas desarrollan lupus neonatal. En el estudio de Buyon se encontró que de los chicos con bloqueo cardíaco congénito el 34% eran de madres con LES, el 16% con SS, el 22% con enfermedad autoinmune indiferenciada y el 28% con otras enfermedades autoinmunes.3,14,15,16,17,18,19,20,21,22 El síndrome se caracteriza por la presencia de bloqueo cardíaco congénito (BCC), lesiones cutáneas transitorias, citopenia, alteraciones hepáticas y otras manifestaciones sistémicas. Se lo puede definir con dos criterios: 1)-Presencia de anticuerpos maternos 52kD SSA/Ro, 60kD SSA/Ro o el 48kD SSA/La y ribonucleoproteínas 2)-Presencia de bloqueo cardíaco o rash cutáneo transitorio3,14,15,16,17,18,19,20,21,22. La patogénesis del BCC no está bien clara. Evidencias circunstanciales han mostrado transferencia a la placenta durante el 2º trimestre, provocando injurias inmunológicas en el sistema de conducción cardíaca en el feto. Se trata de prevenir esta transferencia administrando corticoides, gammaglobulinas endovenosa, plasmaféresis o su combinación durante el 2º trimestre; cuando el BCC es irreversible se debe colocar marcapaso al nacer.3,14,15,16,17,18,19,20,21,22. Hay estudios en los que se encuentra una significativa asociación y un mayor riesgo de BCC en madres y niños que presenten moléculas del antígeno mayor de histocompatibilidad clase II (HLA). Siendo los más frecuentes los HLA-DRB1/DQA1/DQB13,14,15,16,17,18,19,20,21,22 (Tabla 4). Tratamiento en embarazadas lúpicas Altas dosis de aspirina (> de 3 g/día) y los AINES deben evitarse en el embarazo ya que se asocian a un trabajo de parto prolongado, aumento del sangrado por su efecto sobre las contracciones uterinas, la función plaquetaria, provocando un cierre precoz del ductus arterial fetal. Altas Transitorios Permanente Rash Bloqueo cardíaco congénito Citopenias (anemia hemolítica, trombocitopenia, leucopenia) Hepatoesplenomegalia Miocarditis / pericarditis Neumonitis? Tabla 4. Lupus Neonatal (síntomas-signos). Tseng Chung-E. Neonatal lupus syndromes. Rheumatic Disease Clinics of North America, 1997. Philadelphia. Saunders company 1997. Pag 31-54. dosis de salicilatos se han asociado a oligoamnios e hipertensión arterial, no siendo ni la aspirina ni los AINES teratogénicas en humanos3,4,5,6,12,15,16,17,18,30,31. No hay evidencia de que los corticoides provoquen anormalidades congénitas en el embarazo; se sabe que prednisona, prednisolona y metilprednisolona prácticamente no pasan la placenta por lo cual se las puede utilizar durante la actividad de la enfermedad. En cambio, los corticoides fluorados como la dexametasona y la betametasona sí atraviesan la placenta3,6,9,10,11,12,22,23. Altas dosis de esteroides en el embarazo se asocian a ruptura prematura de membranas, retardo de crecimiento intrauterino y precipitan complicaciones maternas como diabetes gestacional, hipertensión, osteoporosis y necrosis ósea avascular3,6,9,10,11,12,22,23. La hidroxicloroquina es el antimalárico más usado en el lupus, no reportándose que induzca malformaciones congénitas fetales; al contrario, hay evidencia de que controla la actividad lúpica por lo que no debe suspendérselo3,6,9,10,11,12,22,23. La azatioprina y la ciclofosfamida son los citotóxicos más usados en el LES, ambos teratogénicos en animales. Con la azatioprina se reportó retardo del crecimiento intrauterino, parto prematuro y bajo peso al nacer, pero buena tolerancia materna. Por lo que sería razonable indicarla en los casos que se necesite inmunosupresión3,6,9,10,11,12,22,23. La ciclofosfamida es teratogénica en humanos por lo que está contraindicado su uso3,6,9,10,11,12,22,23. La ciclosporina A no es teratogénica en animales y hay Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 trabajos que demuestran que no aumenta el riesgo de anormalidades congénitas en humanos; se asocia a bajo peso al nacer y es nefrotóxica para la madre, por lo que se la puede considerar una droga alternativa en compromiso severo del lupus3,6,9,10,11,12,22,23. En resumen, en cuanto al tratamiento de lupus no existe acuerdo en la actitud a seguir; algunos autores recomiendan dosis profilácticas de 10 mg diarios de prednisona desde el inicio del embarazo y una dosis alta de corticoides (300 mg ev de cortisona) el día del parto y los dos días siguientes, continuando con las dosis previas durante al menos 2 meses para prevenir la reagudización del puerperio. Por el contrario, otros prefieren realizar un seguimiento cuidadoso evitando el tratamiento profiláctico y ajustando la terapia de acuerdo a las necesidades de cada paciente. El aborto terapéutico no está indicado ya que puede provocar una exacerbación del lupus; si es imprescindible se administrará tras el aborto, dosis altas de prednisona durante 3 a 6 semanas. En caso de que el feto presente bradicardia (por BCC) se ha comunicado una buena respuesta al tratamiento de la madre con dexametasona3,6,9,10,11,12,22,23. Lactancia Muchas de las drogas usadas en el lupus se excretan por la leche materna. La Academia Americana de Pediatría aconseja no usar altas dosis de aspirina ya que puede provocar intoxicación en los neonatos por su metabolismo inmaduro. Los AINES también están contraindicados ya que provocan ictericia; la alternativa analgésica es el paracetamol3,6,9,10,11,12,22,23. Dosis pequeñas de corticoides permiten la lactancia ya que no hay reportes de reacciones adversas, se recomienda a las madres que toman dosis mayores de 20 mg/día de prednisona, amamantar después de 4 horas de la última toma3,6,9,10,11,12,22,23. Bajas dosis de hidroxicloroquina son compatibles con la lactancia pero debe usarse con precaución por los posibles efectos adversos en el niño3,6,9,10,11,12,22,23. Otros agentes citotóxicos e inmunosupresores como la ciclofosfamida, la azatioprina, la ciclosporina A y el metrotexato, son excretados por la leche materna provocando riesgos potenciales de inmunosupresión, retardo del crecimiento y carcinogénesis en los neonatos por lo que no se recomienda su uso3,6,9,10,11,12,22,23 (Tabla 5). 41 Permitidas Contraindicadas Drogas Inmunosupresoras Azatioprina Ciclofosfamida Ciclosporina Metotrexato Corticoides Prednisona-Prednisolona Dexametasona (excepto que se Metilprednisolona use para tratamiento intraútero) Antimaláricos Hidroxicloroquina Cloroquina Drogas Antihipertensivas Metildopa IECA Nifedipina Diuréticos Drogas Anticoagulantes y Antiagregantes Heparina de bajo peso molecular Warfarina Aspirina OTRAS Vitamina D AINES Inmunoglobulinas Tabla 5. Drogas permitidas y contraindicadas durante el embarazo. Ruiz-Irastorza G., Khamashta MA., Grham R.V. Systemic lupus erytematosus and Antiphospholipid syndrome during pregnancy: maternal and fetal complications and their management. IMAJ. Vol. 2, June 2000. Bibliografía 1. Andrawes-Khamashta Shahin M. Tratado de Reumatología. 1998. España. Aran 1998. Pag. 819. 2. Rodriguez Valverde V. Tratado de Reumatología. 1998. España. Aran 1998. Pag. 509-510. 3. Ruiz-Irastorza G, Khamashta MA, Grham RV. Systemic lupus erytematosus and Antiphospholipid syndrome during pregnancy: maternal and fetal complications and their management. IMAJ 2000. Vol. 2. 4. Mintz G, Niz J, Gutierrez G, et al. Prospective study of pregnancy in systemic lupus erythematosus: Result of a multidisciplinary approach. J Rheumatol 1986; 13: 732-739. 42 5. Urowitz MB, Gladman DD, Farewell VT, et al. Lupus and pregnancy studies. Arthritis Rheum 1993; 36: 1392-1397. 6. Julkunen H. Pregnancy and Lupus Nephritis. 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Búsqueda en Bases de Datos: servicio arancelado. Permite obtener, en base a un tema determinado, un listado de citas bibliográficas con sus respectivos resúmenes a través del acceso a las bases Medline, Lilacs, Cochrane Library. Las búsquedas se solicitan personalmente, por fax o correo electrónico. Medline: versión electrónica del Index Medicus. Es la base de datos bibliográficos elaborada por la National Library of Medicine; abarca las áreas de medicina, enfermería, odontología, veterinaria y ciencias biológicas. Lilacs: versión electrónica del Index Medicus Latinoamericano (Literatura Latinoamericana de Información en Ciencias de la Salud), producto cooperativo de la Red Latinoamericana y del Caribe de Información en Ciencias de la Salud, coordinada por BIREME (Biblioteca Regional de Medicina). The Cochrane Library: es una colección actualizada de fuentes de información sobre medicina basada en evidencias, incluyendo la base de datos Cochrane de Revisiones Sistemáticas. Conmutación Bibliográfica: copias de documentos en fotocopias y formato electrónico que se localizan en otras bibliotecas o centros de información. Servicio arancelado. Digitalización de Imágenes: servicio arancelado. La biblioteca posee un scanner para diapositivas, negativos, opacos y textos. Pago de aranceles: se puede efectuar personalmente, por débito en tarjeta de crédito, cheque, giro postal o depósito bancario. Consultas y pedidos: e-mail: sar-biblioteca@fibertel.com.ar Catálogo de publicaciones periódicas a. b. c. d. e. f. Acta Rheumatologica Portuguesa American Journal of Medicine Annals of Internal Medicine Annals of Rheumatic Diseases Arthritis and Rheumatism Bailiere’s Best Practice & Research in Clinical Rheumatology g. Best Practice & Research Clinical Rheumatology h. Bone i. Bulletin on the Rheumatic Diseases j. Clinical and Experimental Immunology k. Clinical Orthopedics and Related Research l. Clinical Rheumatology m. Clinics in Rheumatic Diseases of North America n. Connective Tissue Research o. Journal of Bone and Joint Surgery A p. Journal of Bone and Joint Surgery B q. Journal of Clinical Rheumatology r. Journal of Rheumatology s. Medicina (Buenos Aires) t. Medicine u. v. w. x. y. z. aa. ab. ac. ad. Osteoarthritis and Cartilage Osteoporosis International Radiology Revista Brasileira de Rheumatologia Revue du Rhumatisme et des Maladies Osteo-Articulaires Rheumatology International Scandinavian Journal of Rheumatology Seminars in Arthritis and Rheumatism Skeletal Radiology Zeitschrift für Rheumatologie Actualización de las publicaciones que se reciben a. Annals of the Rheumatic Diseases b. Arthritis and Rheumatism c. Clinical and Experimental Rheumatology d. Clínicas de Reumatología Norteamérica e. Current Opinion in Rheumatology f. Journal of Rheumatology g. Lupus h. Seminars in Arthritis and Rheumatism cía Carrasco M, Cervera R. Autoinmunidad y enfermedad autoinmune. Medellín, 2005. d. Kelley’s: Reumatología. Ruddy S, Harris Jr. Ed., Sledge CB. 6ª ed. española. Madrid: Marbán, 2003. e. Complemento de Kelley’s Reumatología: Tratamientos de reumatología. Weisman MH, Winblatt ME, Louie JS. 2ª ed. española. Madrid: Marbán, 2003. f. Taylor & Resnick: Aparato locomotor. Diagnóstico radiológico. Taylor JAM, Resnick D. ed. española de: Skeletal imaging atlas of the spine and extremities. Madrid: Marbán, 2003. Libros adquiridos recientemente a. Arturi AS, Marcos JC, Babini JC. Enfermedades autoinmunes. Buenos Aires: Abbott, 2005. b. Manual SER de las enfermedades reumáticas. Sociedad Española de Reumatología. 4ª ed. Madrid: Panamericana, 2004. c. Anaya JM, Shœnfeld Y, Correo PA, Gar- Horario de atención Lunes a viernes de 14 a 19 hs. RevistaLILACS.doc 44 [ información ] La revista se encuentra indizada en LILACS Base de datos de LILACS La base de datos LILACS - Literatura Latinoamericana y del Caribe en Ciencias de la Salud es un producto cooperativo del Sistema Latinoamericano y del Caribe de Información en Ciencias de la Salud, y comprende la literatura científicotécnica en salud, producida por autores latinoamericanos y del Caribe y publicada en los países de América latina y Caribe, a partir de 1982. El principal propósito de la base de datos de LILACS es el control bibliográfico y la diseminación de la literatura científicotécnica latinoamericana y del Caribe en el área de la salud, ausentes de las bases de datos internacionales. En la base de datos LILACS son descriptos e indizados: libros, capítulos de libros, tesis, anales de congresos o conferencias, informes técnico-científicos, artículos de revistas, etc., relativos al área de la salud. El acceso a la base de datos LILACS puede ser realizado en disco compacto (CD ROM) y también en la Biblioteca Virtual en Salud en el ítem Literatura Científica, con conexiones a fuentes de información complementarias, particularmente con bases de datos de textos completos y servicios de suministro online de copias de documentos en papel. El disco LILACS/CD ROM tiene periodicidad cuatrimestral e incluye las bases de datos del sistema LILACS, bases de datos de Centros Especializados y de la Biblioteca de la Organización Panamericana de la Salud, y la base de datos SECS Publicaciones Periódicas en Ciencias de la Salud. Puede ser adquirido por suscripción por cualquier usuario o biblioteca. La política de distribución de LILACS/CD ROM a los Centros Cooperantes está basada en la contribución para la base de datos de LILACS. Centros cooperantes BIREME - Centro Latino Americano e do Caribe de Informação em Ciências da Saúde - Organização Panamericana da Saúde - OPAS Rua Botucatu 862 Vila Clementino São Paulo, 04023-901 Biblioteca Médica Nacional - Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas - INFOMED - MINSAP - Ministerio de Salud Pública. a/c: Bárbara C. Lazo Rodríguez Calle 23 Nº 162 Esq. N - El Vedado La Habana, CU BINAME –Biblioteca Nacional de Medicina– Centro Nacional de Documentación e Información en Medicina y Ciencias de la Salud - CENDIM - Facultad de Medicina General Flores 2125 Montevideo, UY 1800 46 Biblioteca Central Facultad de Medicina Universidad de Chile a/c: Carmen Lœwenstein Vega Dirección: Avenida Independencia 1027 Ciudad: Santiago Argentina: Biblioteca Academia Nacional de Medicina de Buenos Aires a/c: Patricia Boan Dirección: Andrés Pacheco de Melo 3081 - 1º Piso Ciudad: Buenos Aires Centro de Información Biomédica del Chaco –CIBCHACO– Ministerio de Salud Pública y Acción Social [ información ] a/c: Alberto Carisimo Mendoza Dirección: Marcelo T. de Alvear 20 - 2º Piso Ciudad: Resistencia, Chaco Biblioteca Central Hospital Italiano de Buenos Aires a/c: María del Rosario Revello Dirección: Gascón 450 - 2º Piso Ciudad: Buenos Aires Biblioteca Facultad de Ciencias Médicas Universidad Nacional de Córdoba - UNC a/c: María Graciela Cañete Dirección: Pabellón Argentina, 2º Piso, Ciudad Universitaria Ciudad: Córdoba Biblioteca A.A.O.T. Asociación Argentina de Ortopedia y Traumatología a/c: Silvina Dicranian Dirección: Vicente López 1878 Ciudad: Buenos Aires Biblioteca Centro de Investigaciones Endocrinológicas –CEDIE– Servicio de Endocrinología Hospital General de Niños Dr. Ricardo Gutiérrez a/c: Sra. María Susana Mancini Dirección: Gallo 1330 Ciudad: Buenos Aires Centro de Documentación Médica de La Plata a/c: Oscar Américo Barbieri Dirección: Calle 2 Nº 1519 (63 y 64) Ciudad: La Plata Biblioteca Facultad de Ciencias Médicas Facultad de Odontología Universidad Maimónides a/c: Inés Amor García Uranga Dirección: Hidalgo 775 - 5º Piso Ciudad: Buenos Aires Revista Argentina de Reumatología • Año 18 • Nº 1 Biblioteca Central Facultad de Ciencias Médicas Universidad Nacional de Rosario a/c: Elsa M. Biese de Christen Dirección: Santa Fe 3100 Ciudad: Rosario, Santa Fe Biblioteca de la Escuela de Enfermería Módulo de Farmacia y Bioquímica Universidad Nacional de Misiones a/c: Rosa Elena López Dirección: López Torres 3415 Ciudad: Posadas, Misiones Centro de Documentación Representación de la OPS/OMS Organización Panamericana de la Salud - OPS Organización Mundial de la Salud - OMS a/c: Susana Catalina Iannello Dirección: Marcelo Torcuato de Alvear 684 Ciudad: Buenos Aires Biblioteca Hospital Británico de Buenos Aires a/c: Norma Mabel Nunez Dirección: Perdriel 74 Ciudad: Buenos Aires Centro de Información Pediátrica Sociedad Argentina de Pediatría a/c: Inés Amor de García Uranga Dirección: Av. Coronel Díaz 1971 Ciudad: Buenos Aires Biblioteca Facultad de Ciencias Médicas FCM –UNCu– Universidad Nacional de Cuyo Parque Gral. San Martín - Centro Universitario Mendoza 47 [ información ] Reglamento de Publicaciones RAR Los artículos deberán remitirse en formato electrónico (diskette de 3 1/2 o CD) y 2 copias en papel a: Revista Argentina de Reumatología Austria 2469, (7º A), (1425) Ciudad de Buenos Aires, Argentina. En la primera página de las distintas colaboraciones deberá constar: título en castellano y en inglés, apellidos y nombres completos de los autores, centro donde se realizó el trabajo, dirección del mismo, y para la correspondencia y petición de separatas. Secciones de la revista: Editorial: contribución solicitada por el Comité a un experto, quien desde el punto de vista personal escribirá sobre temas de interés actual. Su extensión máxima será de 5 páginas. Artículos originales: presentación de una experiencia científica original, personal o grupal, que contribuya al progreso de la Especialidad. El texto tendrá una extensión máxima de 20 páginas. Los distintos ítems figurarán en el siguiente orden: resumen en castellano e inglés de hasta 200 palabras, palabras clave (3 a 10), introducción, material y métodos, resultados, discusión, conclusiones y bibliografía. Se admitirán hasta 6 figuras y 6 tablas. Actualizaciones: puesta al día sobre determinados temas de interés, expuestos en forma sintética. No deberá exceder las 10 páginas, pudiendo incluir 2 tablas y 2 figuras. Se deberán agregar “Lecturas recomendadas” en número no mayor a 10 citas. Casos clínicos: descripción de un caso de rara observación que suponga un aporte importante al conocimiento del tema. Su extensión máxima será de 10 páginas. Constará de resumen en castellano y en inglés, descripción y discusión del caso y bibliografía (no más de 15 citas). Se admitirán hasta 4 figuras y 4 tablas. Diagnóstico por imágenes: presentación de un caso problema en base al diagnóstico por imágenes, con datos clínicos imprescindibles y secuencia de estudios 48 realizados para llegar al diagnóstico definitivo. Se aceptarán hasta 6 figuras. Cartas de lectores: comentarios acerca de los artículos publicados previamente. No deberán superar las 4 páginas, pudiendo incluir una sola tabla o figura y hasta 6 citas bibliográficas. Material ilustrativo: • Tablas: debe presentarse una sola tabla por página. Se enviará en formato electrónico en archivo Excel o tabla inserta en Word en archivo aparte del texto. Cada tabla debe ir numerada con números romanos y encabezada por el enunciado o título. Las tablas deberán ir citadas en el texto por orden consecutivo. Todas las siglas y abreviaturas se acompañarán siempre de una nota explicativa al pie de la tabla. Asimismo, se identificarán de forma precisa las medidas estadísticas empleadas. Cuando se haya efectuado un estudio estadístico se indicará a pie de tabla el nivel de significación, si no se hubiera incluido en el texto de la tabla. El orden de los signos de llamada será el siguiente:* si hay una única llamada; letras minúsculas en orden alfabético (a, b, c…) si hay dos o más llamadas. Para su envío deberán estar realizadas en Microsoft Word o Excel no aceptándose tablas escaneadas. • Gráficos (figuras): podrán ser elaborados con computadora únicamente en programa vectorial (Corel Draw, Freehand, Adobe Illustrator) o en programa de planilla de cálculos (Excel). El tamaño será de 9 x 12 cm o 12 x 18 cm. Se enviarán como archivos externos al archivo principal de textos; deberán estar nombrados con el número de figura, enviando un archivo por gráfico. Si se envían escaneados, modalidad poco conveniente, se deberán seguir las pautas indicadas para fotografías. Si se incluyen dibujos especiales a mano alzada en papel, deberán estar dibujados en tinta negra sobre papel blanco que garantice un buen contraste. • Fotografías: se seleccionarán procurando que sean de buena calidad. Tendrán igual sistema de numeración que los gráficos. Es muy importante que las copias fotográficas papel sean de calidad inmejorable para poder obtener así buenas reproducciones; se presentarán de modo que los cuerpos opacos (huesos, sustancias de contraste) aparezcan en blanco. Las fotografías irán numeradas al dorso, con números arábigos, siguiendo la secuencia que tienen en el texto, mediante una etiqueta adhesiva, indicando además el nombre del primer autor, con una flecha que señalará la parte superior. Debe procurarse no escribir en el dorso, ya que se producen surcos en la fotografía. Si las fotos se envían en formato digital, éstas deberán encontrarse por lo menos a 250 dpi al tamaño solicitado anteriormente y guardadas en los formatos tiff, eps o Adobe Photoshop. No utilizar formatos bmp, pict, jpeg, pdf o swf, tampoco fotos o gráficos tomados de páginas web o cds interactivos. No se aceptarán fotos ni gráficos incluidos dentro de Power Point o Word debiendo ser enviados como archivos externos. El archivo deberá estar nombrado con el número de foto (en números arábigos) seguido del nombre del primer autor, enviando un archivo por foto. • Pies de figuras: deberán ir en el archivo aparte, numeradas según su secuencia correspondiente y a doble espacio. En ellas se explicará el contenido de la ilustración, así como el significado de los signos, flechas, números y abreviaturas que pueda haber. En las reproducciones histológicas se especificará el aumento y el método de tinción. • Citas bibliográficas: se redactarán según normas del International Committee of Medical Journal Editor. Las mismas pueden consultarse en: http://www.nlm.nih.gov.bsd/uniform_requirements.htlm El Comité de Redacción se reserva el derecho de rechazar aquellos artículos que juzgue inapropiados, así como de proponer o realizar modificaciones cuando lo considere necesario.