discernimiento - Misioneras JMJ
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discernimiento - Misioneras JMJ
DISCERNIMIENTO El DISCERNIMIENTO COMUNITARIO Objetivo: Clarificar que se entiende por “Discernimiento Comunitario” para buscar juntas la voluntad de Dios como Comunidad MJMJ, en relación a nuestro Carisma, Espiritualidad y Misión Nuestra realidad: Ante la renovación que hemos pedido de confrontar nuestras vidas con la Palabra de Dios, en estos momentos que constatamos la importancia de renovarnos y ponernos de manera especial a la escucha del Espíritu, merece especial mención el discernimiento comunitario. El discernimiento comunitario es fermento dinamizador para mejorar la calidad de vida de nuestras comunidades y dar respuesta carismática a los planteamientos que presenta nuestra realidad, en servicio a la Iglesia. En él se fraguan las respuestas evangélicas a la llamada que nos hace Dios desde la historia. El discernimiento abre puertas a la voluntad de Dios y nos permite adentrarnos con paso audaz, por los caminos del Espíritu, por insólitos que nos parezcan. Esto es alentador y estimulante La oración y el discernimiento ayudan a mejorar la dimensión profética de la comunidad, su calidad de vida, su esperanza escatológica, su entusiasmo apostólico, para no acomodarse a los distintos estilos que la sociedad nos presenta. Ayudará también a dar respuestas nuevos a problemas inéditos. Iluminación de la Palabra: Mc, 2, 21-22; Mt 16, 2-3; 1 Tes 5,19-21 Signo Usamos la alegoría de las vías del tren; el discernimiento es tomar la vía adecuada entre muchas vías posibles en la vida. PROFUNDIZACIÓN DEL TEMA 1. ¿Qué es Discernimiento?: Es un proceso de búsqueda orante para percibir, en un clima de libertad interior, hacia donde nos lleva el Espíritu, para así interpretar la llamada que Dios nos hace en una situación determinada, es pues un acto que permite captar la voz de Dios entre todas las demás voces. 2. Presupuestos básicos. Antes de iniciar un discernimiento es necesario crear unas actitudes previas para no dejarnos llevar por motivaciones meramente racionales o afectivas, derivadas de intereses, sino a la luz de la voluntad de Dios. Crear Actitudes Previas. a) La pasión de buscar y hacer la voluntad de Dios: (Siervo de Yahvé) Es la actitud más radical del creyente. A ella Jesús consagra toda su energía espiritual: búsqueda y encuentro con su Padre y capacidad de respuesta al plan de salvación de Dios sobre el mundo. Seguir a Jesús es apropiarse de esta misma pasión de su vida, que lleva a buscar y hacer voluntad de Dios. b) La des-centralización personal: “salir del propio amor, querer e interés”. (vaciarnos de nosotras mismas) Mientras estemos curvadas sobre nosotras mismas nuestros prejuicios, intereses, ideas, no hay posibilidad de encontrar nada que no sea nosotras mismas. Para encontrar hay que salir y: • Cuestionar nuestras formas de pensar para estar abiertas a la escucha de los/as demás. • Abrirnos con valentía a los hombres y mujeres de nuestro tiempo, especialmente a los más pobres. • Tener el coraje de sabernos auto-aceptar. 3. algunas Indicaciones para progresar en el discernimiento. 3.1. Exigencias Necesarias. Actitudes Positivas personales • Autenticidad de la relación,: por la que no sólo me manifiesto y expreso como soy, sino que respeto y permito “a la otra” ser y expresarse como ella es. Superar toda forma de individualismo, olvido de los demás y toda tentación de intolerancia. • Escucha: que no es pasividad, sino atención y paciencia; que busca captar comprensivamente y entender no sólo los argumentos y razones, sino los estados de ánimo de las demás. • Veracidad de la expresión, que responda a un sincero deseo de comunicarnos y comunicar lo que pensamos, conscientes de que nadie tenemos el monopolio de la verdad. • Sentido de pertenencia, por el que nos sabemos solidarias y corresponsables en la comunidad, abiertas a su influencia positiva y sujetos activos de su animación y de su enriquecimiento. Esforzarnos por vivir plenamente integradas en la Congregación. Actitudes positivas comunitarias. • Hacer valer y hacer crecer la amistad entre sus miembros. • Los tiempos de descanso y expansión ayudan para: la vida fraterna, el conocimiento mutuo, la confianza. • Darle más importancia a las personas que al trabajo. • Acostumbrase a compartir las alegrías y las penas en comunidad. • Ofrecer los medios para superar la inseguridad y agresividad que nos rodean. • Relativizar nuestros propios intereses, ideas o convicciones en el diálogo con las otras. 3.2. Exigencias necesarias de superar: Actitudes Negativas. • Incapacidad de escucha, de comunicación y de diálogo; el desinterés, la falta de autenticidad, de sentido de pertenencia y de identificación espiritual, vocacional o moral con el grupo. • Una comunidad que posee falsa imagen de sí misma y no intenta clarificarla. • Una comunidad psicológica o moralmente perturbada por tensiones, angustias y desequilibrios internos. • Una comunidad autosuficiente, superficial y permisiva, incapaz de interioridad para afrontarse a sí mismo con espíritu crítico y para tener una comunicación sincera en soledad con Dios. • Una comunidad despersonalizada con actitudes mediocres, contradictorias y perjudiciales a su identidad y a sus compromisos; inmaduras para la libre intercomunicación, para el pluralismo de las opiniones y para las que son diferentes. 4. Condiciones para poder discernir 4.1. Condiciones personales a) Una actitud de pobreza y libertad interior: Que crea un desprendimiento de todo apego, prejuicio y apasionamiento. El desprendimiento de la autosuficiencia, del ánimo de imponer y del temor de ser vencido; el desprendimiento de todo aquello que pudiera nublar la visión objetiva de la historia de la Salvación. Supone: La decisión de hacer efectivamente lo que se descubra. La certeza de que Dios no se esconde al que lo busca con un corazón sincero. Confianza en mis hermanas a través de los cuales Dios se me manifestará. Incluye, además, algo que transciende toda elección concreta, manteniéndonos eternamente jóvenes, dispuestas siempre a una elección mayor, más allá de la hecha. Es una disponibilidad total ante la llamada de Dios que en cualquier momento puede hacernos sentir sus exigencias. b) Un clima de oración que crea la libertad interior: Se ora para crecer progresivamente en pobreza y libertad interior, para ver con una mirada guiada por el Espíritu. Solo un espíritu de oración nos hará pobres y libres interiormente, condición para discernir de verdad. c) Situarse en una perspectiva de fe: Situarse en un clima de fe que nos haga capaces de rastrear y descubrir la presencia y la acción de Dios en la trama de los acontecimientos humanos, en la historia de nuestra propia vida y nos permita interpretar su Palabra y aceptar sus exigencias. El discernimiento sólo es posible en un contexto de fe personal y comunitaria que nos revela el designio de Dios encarnado en Jesucristo. ¿Cuáles fueron los criterios de “opción fundamental” del Señor? Jesús escoge el camino del siervo de Yahvé. Desde entonces, para nosotros los cristianos, y para la Iglesia de Cristo no podrá existir nunca otro camino d) Dios quiere la cooperación del hombre: Supone que por la asidua contemplación evangélica adquirimos la mentalidad humana de Cristo que nos familiariza con su manera de ver y obrar. 4.2 Condiciones para el Discernimiento Comunitario Es necesario un “umbral mínimo” de convivencia, de integración y de diálogo para que se desarrolle el proceso. Un rodaje previo a nivel de inter-comunión y de equilibrio. Se supone, pues, que hay cierta madurez psicológica personal y comunitaria; que el grupo es sano. 1. Autenticidad frente al otro: Es necesario que cada una tenga la valentía de ser ella misma, sin refugiarse, más o menos sutilmente, detrás de un personaje. Supone un clima de confianza; presentarme como soy y permitirle a la otra ser ella misma. 2. Veracidad en la expresión: Que todos los miembros digan libremente lo que piensan, lo que experimentan y lo que proyectan. 3. Escuchar pacientemente hasta los silencios: A veces los silencios pueden ser más expresivos que las palabras. Hay quien escucha mal porque está más preocupada en seguir su propio razonamiento que el de la otra o porque está ocupada continuamente en poner objeciones o defenderse. Es un escuchar activo, desde el punto de vista de la otra para comprenderla desde dentro, en un clima de amistad compartida. 4. Querer comunicar: Hay que aceptar exponerse al conocimiento de la otra y a la vulnerabilidad propia sin espantarse y mucho menos abatirse. La verdad de la otra, ilumina zonas de nuestro interior que no nos gusta ver descubiertas. 5 Estar persuadidas de que nadie debe monopolizar la verdad: Nuestra visión es casi siempre fragmentaria y pobre. Necesita completarse e incluso corregirse en la visión de los demás. Cualquier método fracasaría si no existe una adecuada ambientación a nivel personal o comunitario. Conclusión: Antes de iniciar un Discernimiento comunitario: − − − − Un consentimiento unánime en cuanto al fin que se deseaba alcanzar. Una decisión clara de querer discernir. Una diversidad de pareceres para conseguir el fin. Una decisión de discernir dentro de los fines específicos de esa comunidad. − Una determinación incuestionable de poner primordialmente la confianza en Dios. − Una persuasión de que el tiempo de Dios no es nuestro tiempo. El espíritu sopla donde quiere y cuando quiere. Las prisas y la precipitación hay que evitarlas. Documentación a consultar: - Instrucción El servicio de la autoridad y la obediencia 20e; 20f.