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Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios Vol. 14 - Número 3 - Julio-septiembre 2013 ISSN: 1577-3558 Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios - Volumen 14 - Número 3 - Julio-septiembre 2013 Monográfico Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología INTRODUCCIÓN EXPERIENCIAS EVALUACIÓN RESULTADOS Y FUTURO INDICACIONES GENERALES • Pueden optar a los Premios Profesor Barea todas las Instituciones públicas o privadas relacionadas con el sector sanitario. • Los Premios están destinados a proyectos inéditos, finalizados o en fase avanzada de desarrollo que supongan una mejora sustancial en la gestión y evaluación de costes sanitarios. • Además de los premios económicos, los trabajos finalistas serán publicados por la Fundación Signo. • El plazo para la presentación de trabajos finaliza el 28 de febrero de 2014 • La entrega de los Premios en todas sus modalidades se realizará en marzo de 2014. • En caso de cualquier duda contacte por favor con nosotros en www. fundacionsigno.com o en [email protected] MODALIDADES DE PARTICIPACIÓN 1.Los Centros Sanitarios como Empresas de Servicios: Gestión Global • Cada Entidad podrá presentar únicamente un proyecto • El premio está dotado con 2.000 euros 2.Proyectos multientidad • Cada Provecto debe venir presentado por más de dos entidades • El premio está dotado con 2.000 euros 3.Gestión de un Área de conocimiento • No existe límite en el número de trabajos • El premio está valorado en 1.500 euros 4.Innovación, desarrollo y nuevas tecnologías • No existe límite en el número de trabajos • El premio está valorado en 1.500 euros JURADO • D.ª Margarita Alfonsel Jaén • D.ª Ángeles Amador Millán • D. Josep María Capdevila i Miravert • D. José Ignacio Echániz Salgado • D. Luis Espadas Moncalvillo • D. Alfredo García Iglesias • D. Fernando Lamata Cotanda • D.ª Elena Miravalles González • D. Daniel Peña Sánchez de Rivera • D. José Manuel Romay Beccaría • D. José María Segovia de Arana • D. Jerónimo Saavedra Acevedo • D. Xavier Trías i Vidal de Llobatera • D. Juan Velarde Fuertes Directoras Técnicas • D.ª Carmen Pérez Mateos • D.ª Isabel Prieto Yerro Los éxitos de todos los días. Nuestro deseo de ofrecer el mejor cuidado al paciente nos ha obligado a descubrir una tecnología más sofisticada y que simplificara nuestras vidas. Hemos logrado una gran excelencia clínica, equilibrado nuestro presupuesto y disponemos de más tiempo para centrarnos en el paciente. Conseguir más con menos esfuerzo. Esto sí tiene sentido. Para más información www.fundacionsigno.com www.philips.es anu_corporat_F_SIGNO_14x20.indd 1 14/10/10 14:52:09 Premios Profesor Barea 12 edición mayo 2014 Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios 2013 Vol. 14 14 --Monográfico Monográfico3 -1Julio-septiembre - Enero-marzo 2013 Iniciativas de Evaluación Coste-Efectividad de pruebas y Coste Efectividad en Radiología de Diagnóstico in Vitro Patronato de la Fundación Signo Presidenta: Elena Miravalles González. Secretario General: Ángel J. Pérez Gómez. Vocales: Ignacio Ayerdi Salazar, José Barea Tejeiro, Javier Barreiro González, Diego Falcón Vizcaíno, Carlos Fernández Rodríguez, Alfredo García Iglesias, Eduardo García Prieto, Carmen Hernando de Larramendi Martínez, Jesús Hernández Díaz, Félix Mata Fuentes, Ginés Madrid García, Regina Múzquiz Vicente-Arche, Josep Pomar Reynés, Luis Rodríguez Padial, Pere Soley i Bach. Delegados autonómicos Félix Mata Fuentes y José L. Temes Montes (Andalucía) Miguel Carroquino Bazán (Aragón) Mario González González, Fernando Gallego Rodríguez y Juan Ortiz Fuentes (Asturias) Francisco Cárceles Guardia, Biel Fortuny Organs y Carles Ricci (Baleares) José Manuel Baltar Trabazo, Mercedes Cueto y José M. Sánchez Hernández (Canarias) Fidel Fernández Fernández (Cantabria) Eduardo García Prieto y Carlos Fernández Rodríguez (Castilla y León) Jesús Hernández Díaz, Luis Rodríguez Padial y José Luis de Sancho Martín, (Castilla-La Mancha) Javier Barreiro González, Xavier Corbella Virós, Jaume Raventós Monjo, Xavier Saball Bruells y Pere Soley i Bach (Cataluña) Isabel González Álvarez y Luis Rosado Bretón (Comunidad Valenciana) Francisco J. Rubio Blanco (Extremadura) y Alfredo García Iglesias (Galicia) Carmen Sáenz Pastor (La Rioja) Juan C. Alonso Punter, Rosa Bermejo Pareja, Javier Elviro Peña, Juan J. Muñoz González, Carlos Sangregorio Yáñez y Marisol Zuzuárregui Gironés (Madrid) Ginés Madrid García (Murcia) Maite Artazcoz Sanz (Navarra) Fernando Astorqui Zabala, Pablo López Arbeloa y Santiago Rabanal Retolaza (País Vasco) Consejo Editorial Diego Falcón Vizcaíno, Elena Miravalles González y Ángel J. Pérez Gómez (Director de Monográficos) Referees Cristóbal Aguilera Gamiz Julián Alcaraz Antonio Alemany López Juan Carlos Alonso Punter Beatriz Álvarez Cueto Ana Luisa Álvarez Falcón Victoria Álvarez Santullano Carmen Amado Aller Amalia Andrade Olivié Pablo Arbeloa López José Antonio Arranz Velasco Ernesto Barrera Linares Pedro Betancor León Óscar Blanco Ramos Ana Josefa Bordón Romero Eduardo Cabanas Moreno Ángeles Cabria Charo Cardenal de la Nuez Miguel Cardona Reyes Miguel Carroquino Bazán Felipe Casanueva Freijo José Castillo Sánchez María Jesús Cuesta Núñez Irune Echevarría San Juan Leopoldo Elvira Peña Javier Elviro Peña Diego Falcón Vizcaíno Xavier Feliu Román Fidel Fernández Fernández Juan J. Fernández Martínez Manuel F. Fernández Miera Tomás S. Fernández Pérez Jerónimo Forteza Vila Biel Fortuny Organs Jorge Frexenet Gilart Sebastián Fuentes Trajano Amparo María Fueyo García Alfredo García Díaz Alfredo García Iglesias Dulce García Lemos Montserrat García Minguillan José Ángel García Ruiz Joan Gaya Beltrán Alejandra Gil Redrado Josep María Giménez Pérez Juan Gómez Gerique Juan J. Gómez-Reino Carnota Isabel González Álvarez Carlos González Hermoso José R. González Juanatey Aurora González Manso José R. González-Escalada Castellón Carmen Guindeo Casasus Jesús Hernández Díaz Carmen Hernando de Larramendi Martínez Alberto José Ibarra Peláez Octavio Jiménez Ramos Alfonso Landin Trujillo Evelia Lemes Castellano Cristina Leube Jiménez Rafael López López Purificación López Martínez Raquel López Reneo Antonio López Urrutia Jesús López-Torres Hidalgo Ginés Madrid García Miguel A. Mañez Ortiz Begoña Martínez Arguelles Dora Medina Estévez Domingo Medina García Jesús Menéndez Fernández Carlos Modrego Alejandre Antonio Monreal Híjar Francisco Morado César Moris de la Tassa Juan José Muñoz González Andrés Muñoz Soto Manuel Nicolás Juan Francisco Nieto Pajares Ignacio Noguer Berta Ortiga Fontgivell Nuria Pau Llobera Angel J. Pérez Gómez Francisco Pérez Vega María A. Quintana Cortijo Santiago Rabanal Retolaza Carles Ricci Voltes Félix Rivera Sanz Luis Rodríguez Padial Pedro M. Rodríguez Suárez David Rojas Escalera Luis Rosado Bretón Francisco J. Rubio Blanco Álvaro Ruibal Morell Carmen Sáenz Pastor María Salinas La Casta Isabel Sampedro García José M. Sánchez Hernández José Luis Sánchez Plaza Carmelo Santana Iriarte Miguel A. Santana Rodríguez María Cruz Sanz González José María Solís Amino Francis Sosa Suárez José Juan Suárez Ramos Soledad Suárez Rancel María Luisa Tamayo Canillas Santiago Thovar Bermejo José M. Vázquez Rodríguez Alberto Vegas Miguel María S. Zuzuárregui Gironés Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios Vol. 13 - Número 4 - Octubre-diciembre 2012 Vol. 14 - Monográfico 3 - Julio-septiembre 2013 465 3 ©Fundación Signo Edición, suscripción y publicidad: Fundación Signo. C/ Infanta Mercedes 92, bajo 28020 Madrid. Tel.: 91 579 58 32 • www.fundacionsigno.com e-mail: [email protected] ISSN: 1577-3558 Depósito legal: M-30689-2000 Soporte válido: 312-R-CM Periodicidad trimestral Bases de datos: Publicación incluida en Índice XXI-Directorio Nacional de Publicaciones. Solicitada inclusión en el Índice Bibliográfico Español de Ciencias de la Salud (IBECS). Tarifa 2013 Suscripción individual (1 ejemplar): 45 € Suscripción institucional (5 ejemplares): 200 € Precio por ejemplar: 12 € Realización e impresión: Exlibris Ediciones, S.L. El objeto de la Fundación Signo es garantizar un espacio independiente, seguro y activo de libertad de pensamiento y acción, fundamentado en el respeto a los derechos y valores de las personas, que haga llegar a los profesionales y a la sociedad las herramientas necesarias para evaluar y mejorar la gestión sanitaria. La revista Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios sigue esa vocación con el afán de implicar a todos los agentes involucrados, haciendo llegar las soluciones desde donde se producen a donde se necesitan. La revista Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios es una revista abierta a todas las opiniones, pero no necesariamente se identifica con las de sus colaboradores. 4 Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios Vol. 14 - Monográfico 3 - Julio-septiembre 2013 Índice Introducción Presentación Elena Miravalles González 7 Introducción Ginés Madrid 9-12 Prólogo Ignacio Ayerdi Salazar 13-22 Retos y desafíos en la organización de un Servicio de Diagnóstico por Imagen Lluís Donoso Bach 23-8 Retos y desafíos tecnológicos de la Radiología Luis Martí-Bonmatí 28-36 Punto de encuentro. Algunas claves para la Radiología del futuro Luis Martí-Bonmatí, Miguel Ángel Trapero, Carmen Martínez, Eduardo Fraile, Mariano Guerrero, Ignacio Ayerdi, Pablo Valdés, Ginés Madrid 37-58 Experiencias Influencia del diagnóstico precoz con resonancia magnética del infarto cerebral agudo en la función global de salud y en los costes de la atención del paciente Elizabeth Parody Rúa, Salvador Pedraza Gutiérrez, Josefina Caminal Homar, Joaquín Serena Leal, Antoni Dávalos Errando 59-68 La importancia de la Radiología de Urgencias en el coste-efectividad de la evaluación del dolor torácico Juan Fernández Sánchez Coste-efectividad del radiodiagnóstico aplicado al screening e cáncer colorrectal: colonoscopia virtual Esther Uña Cidón 69-84 85-104 Innovación en Radiología. La experiencia de la colaboración público-privada en un hospital público universitario Luis Martí-Bonmatí, Ené Regos 105-16 Los Servicios de Radiología en Red: Unidad Central de Radiodiagnóstico de la Comunidad de Madrid Eduardo Fraile Moreno, Marisa García González, César López Velayos 117-24 Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios Vol. 14 - Monográfico 3 - Julio-septiembre 2013 5 Evaluación ¿Es posible consensuar las cargas de trabajo en los Servicios de Radiodiagnóstico? Carmen Martínez Serrano 125-8 Evaluación de la actividad individual del radiólogo Juan M. Vieito Fuentes 129-46 Evaluando competencias Pablo Valdés Solís, Francisco Galindo Sánchez 147-56 Evaluación de la planta física José Ángel García Ruiz, Beatriz García Medina 157-72 Evaluación de costes en Radiología Vicente García Medina 173-82 Evaluando la satisfacción de los pacientes Isabel González Álvarez 183-90 Resultados y futuro Estudios de coste-efectividad en Radiología José M.ª Artigas Martín Análisis coste-beneficio de las radiografías innecesarias realizadas en un Servicio de Radiodiagnóstico Javier Sánchez Hernández, Esther González de las Heras, Blanca Rosa Arenas García, Minerva García Fuentes, Rebeca de la Fuente Olmos, Mario Folgueral Pérez 191-8 199-212 Racionalización de la solicitud de radiografías de abdomen en el Servicio de Urgencias de un Hospital Comarcal Jordi Català Forteza 213-22 Aplicación y utilidad de los criterios de indicación clínica ACR en las exploraciones de resonancia magnética de cerebro y de base del cráneo Álvaro Paniagua Bravo, José C. Albillos Merino, Eduardo Fraile Moreno 223-34 Estudio de la variabilidad de la práctica médica entre servicios, de las pruebas radiológicas en el grupo relacionado con el diagnóstico 014 en un hospital de tercer nivel Rafael Sabatel Hernández 235-44 Adecuación de las solicitudes de la ecografía abdominal en los pacientes que acuden a la Unidad de Urgencia del Hospital de Fuenlabrada Judith Martínez González, María Teresa Hernández Meléndez, Dulce Gómez Santos, María José López-Pedraza Gómez, Juan Antonio Blasco Amaro 245-56 6 Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios Vol. 14 - Monográfico 3 - Julio-septiembre 2013 Presentación Miravalles González E Presidenta de la Fundación Signo. En nombre de la Fundación Signo es para mí un honor presentar este monográfico de “Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología”. Este nuevo trabajo se enmarca dentro de las líneas de actuación que sobre coste efectividad en servicios sanitarios y sociosanitarios se plantea específicamente la Fundación desde 2010 (ver líneas de trabajo en www.fundacionsigno.com) y que, al mismo tiempo, es una consecuencia más de lo que hemos venido proponiendo en nuestra línea editorial, parafraseando, por ejemplo, al científico Rush Holt, “la ciencia no es la única manera de conocer las cosas. A través de la religión, la literatura, la reflexión, la meditación, y de cualquier otro enfoque, obtenemos la comprensión y el conocimiento de nuestro mundo. Pero el conocimiento más fiable para aplicar socialmente a toda una comunidad es el conocimiento que se ha probado empíricamente, que se basa en el efecto de compensación de pruebas. La evidencia no debería depender de la situación socioeconómica o la afiliación política. La evidencia tiene un efecto democratizador que es saludable para todos. Por supuesto, los científicos no son menos arrogantes u obstinados que los demás seres humanos, pero el proceso científico los somete a una revisión pública que conduce al progreso, y eso es lo que necesitamos” (The Scientist). Quiero también felicitar en nombre del Patronato de la Fundación a dos patronos que han sido las piezas clave de este trabajo, Ignacio Ayerdi y Ginés Madrid, ellos ya se encargan de hacer lo propio con los excelentes profesionales que como autores han configurado esta publicación. Espero y deseo que los lectores disfruten, que puedan utilizar las herramientas que aquí se exponen y que en la próxima revisión de esta área de conocimiento puedan enriquecernos con nuevos avances. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):7-7 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Elena Miravalles González. 7 Introducción Madrid G Patrono de la Fundación Signo. “Mide lo que sea medible y haz medible lo que no lo sea.” (Galileo Galilei, 1564-1642) Han transcurrido más de cuatro siglos y la lúcida recomendación del genio del Renacimiento sigue vigente y continúa siendo una asignatura pendiente para nuestro Sistema Nacional de Salud. Tan injusto sería no reconocer las mejoras conseguidas a lo largo de los últimos años, como conformista pensar que hemos llegado a una situación aceptable. Se ha avanzado, no cabe duda, pero seguimos teniendo enormes lagunas en cuanto a la evaluación de resultados se refiere. Continuamos, en definitiva, sin poder comparar el impacto final de nuestras actuaciones, algo fundamental si pretendemos mejorar. Al margen de opiniones en uno u otro sentido, lo cierto y evidente es que hoy día seguimos sin poder medir, al menos de forma continuada, homogénea, normalizada y fiable, los resultados en el entorno de la actividad sanitaria. Y esto, que dicho así podría sonar a declaración poco relevante, nos impide algo tan fundamental como es evaluar las consecuencias de nuestras decisiones o, lo que es lo mismo, disponer de herramientas para garantizar la calidad de nuestras actuaciones. Y a esta carencia, que afecta no solo a los aspectos clínicos sino también de gestión y organizativos de nuestro Sistema Sanitario, no es en absoluto ajena la Radiología. La Imagen Médica en general y muy especialmente la Radiología han sufrido un cambio espectacular a lo largo de los últimos 15 años. Hemos pasado de lo que apenas era más que una “habilitad técnica” en la década de los 50, a una especialidad con una presencia e influencia total en la medicina moderna. La Organización Mundial de la Salud (OMS) nos recuerda que el 80% de las decisiones médicas relevantes, en el mundo desarrollado, se toman con el soporte y la ayuda de la Radiología. El “acto médico” tradicional, con una orientación fundamentalmente clínica, se está convirtiendo a pasos agigantados en un “acto tecnológico”, que fascina por igual a pacientes y a profesionales. Y este cambio, cuyas consecuencias aún es pronto para analizar en profundiGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):9-11 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Ginés Madrid. 9 Madrid G. Introducción dad y con suficiente perspectiva, nos está llevando hacia un nuevo paradigma en el ejercicio de la Medicina. Es evidente que somos capaces de diagnosticar, caracterizar y tratar procesos inabordables hace unos años pero, ¿qué está pasando con las habilidades clínicas de los profesionales? O ¿cómo están influyendo estos cambios en la relación médicoenfermo? Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Entrando de lleno en el objeto de este Monográfico, quizás sería pertinente continuar formulándonos una nueva pregunta e intentar contestarla. 10 ¿Por qué es imprescindible evaluar en el ámbito de las actuaciones radiológicas? Las listas de espera y las demoras, también en las pruebas diagnósticas, se han convertido en un asunto clave incluso a la hora de debatir sobre la sostenibilidad de nuestro sistema sanitario. Sin embargo, no somos capaces de abordar con decisión el fondo de la cuestión, que debería ser no cuánto más habría que hacer, sino cuánto de lo que hacemos es necesario. O lo que es lo mismo, cuánto valor añadido estamos generando con nuestras actividades. La demanda y la necesidad en el ámbito del Diagnóstico por Imagen, como también sucede en otras áreas del conocimiento, no están, en absoluto, equilibradas en nuestro medio. Conocemos con seguridad que el índice de utilización de los estudios radiológicos en España se encuentra en el entorno de las 800 pruebas/1000 habitantes/año (el rango en el resto de Europa oscila entre 1200 y 600). Podemos colegir, por tanto, que anualmente se realizan en nuestro país alrededor de 35 000 000 estudios. Y también conocemos, no solo porque así lo han demostrado las Escuelas de Evaluación de Tecnología de mayor influencia y prestigio en todo el mun- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):9-11 do, sino porque lo aceptan y suscriben nuestros propios compañeros prescriptores, que el 30% de las pruebas solicitadas son innecesarias o, dicho de una forma más académica, son Exploraciones de Bajo Rendimiento, término acuñado por la OMS para definir aquellas actuaciones con escasa rentabilidad, es decir, que no proporcionan valor alguno en beneficio del paciente. Además, el coste de estas pruebas innecesarias es muy relevante, no solo en términos económicos (entre 300 y 400 000 000 euros en España), sino también de salud pública (radiación, sobrediagnóstico, cascada clínica, etc.) y, por supuesto, organizativos (coste de oportunidad, demoras, etc.) Con todos estos datos, resulta evidente que el papel del radiólogo en el escenario de las nuevas organizaciones sanitarias no puede continuar siendo el de convidado de piedra, instalado cómodamente en su atalaya plomada. Muy al contrario, tiene reservado, si somos capaces de aprovecharlo, un papel protagonista clave en el contexto del proceso asistencial, contexto en el que los equipos multidisciplinares aportan sus conocimientos y habilidades en beneficio de los pacientes. El Monográfico de la Fundación Signo “Iniciativas de Evaluación y CosteEfectividad en Radiología” que hoy ve la luz, es uno más de la serie que se inició en el año 2010 con “Sostenibilidad del Sistema Sanitario” y que posteriormente continuó con dos números sobre “Coste Efectividad en Laboratorio” a lo largo de los años 2011 y 2013. Se ha orientado hacia una faceta menos conocida de nuestra actividad profesional, la evaluación de resultados, y ha sido posible gracias a la colaboración de un buen número de radió- Tras la lectura del contenido de “Iniciativas de Evaluación y Coste efectividad en Radiología” podremos comprobar que disponemos de herramientas y metodología suficiente para medir el resultado de nuestra actividad. Hagámoslo pues y seguro que mejoraremos. Aprovecho para agradecer, en nombre de la Fundación Signo, a todos los profesionales que han colaborado en esta iniciativa, por su generosidad, ri- Madrid G. Introducción gor y espíritu innovador al abordar asuntos complejos, con escasa raigambre en nuestro medio, pero de un indudable calado asistencial. Tengo la certeza de que será un nuevo acicate para mejorar la calidad de las actuaciones radiológicas en nuestro entorno. Nuestro reconocimiento a Philips Healthcare por contribuir, con su proverbial mecenazgo, a la edición de este número monográfico. Asimismo, felicito a la Fundación Signo que, con este nuevo hito, pone de manifiesto, una vez más, su decidido compromiso con uno de sus principios fundacionales “Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios”. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):9-11 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología logos con inquietud, no solo por hacer las cosas bien sino, además, por mejorar, midiendo y evaluando el impacto de sus actuaciones. Este es, sin duda, un paso imprescindible si queremos contribuir a elevar el prestigio de nuestra especialidad. 11 Prólogo Ayerdi Salazar I Director General. Philips Cuidado de la Salud. Madrid. Dirección para correspondencia: [email protected] Me produce una particular satisfacción prologar este Monográfico, tan deseado desde la Fundación Signo, o al menos por parte de algunos de sus patronos, que durante meses –casi años– nos lo han venido solicitando a Ginés Madrid y a mí, en calidad de patronos de la Fundación vinculados a la Radiología. Sírvanos de consuelo, por la demora, que la actualidad del tema es ahora más rabiosa que nunca y que, gracias al tesón de Ginés y a la generosa colaboración de los primeros espadas de la Radiología española (sin duda son todos los que están), tenemos un magnífico contenido. Los desafíos que plantea garantizar que el sistema sanitario español sea sostenible, manteniendo y mejorando sus características (alta calidad, universalidad, equidad, a un coste que se compara muy favorablemente con los países de nuestro entorno) exigen la colaboración de todos los agentes e indudablemente implicará cambios en el sistema. De hecho, el sistema se está transformando, y lo va a seguir haciendo; el quid de la cuestión es si desde el mundo de la Radiología queremos estar en el “driving seat” de esa transformación o si queremos ser meros pasajeros. En mi opinión, la Radio- logía es demasiado importante para la sanidad y sería una irresponsabilidad dejar su transformación en manos ajenas. No obstante, en lo que se refiere a la necesidad de contención en el gasto sanitario, conviene tener presente que: –El sector de la salud supone más del 9% del producto interior bruto europeo y emplea a más del 10% de la población activa europea. –No es el momento de descuidar la salud de los ciudadanos; una población con buena salud puede trabajar mejor y durante más tiempo. Un profesor de Harvard dijo: “Los que piensan que es cara la educación se van a enterar de lo que vale la ignorancia”. Análogamente, lo podemos extender a la Sanidad e incluso a la tecnología, asumiendo el buen uso de la misma. La Radiología es, sin duda, la especialidad médica más dependiente de la Tecnología y, al utilizar instrumentos de alto coste, está en el punto de mira como una de las especialidades que Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):13-21 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Ignacio Ayerdi Salazar. 13 Ayerdi Salazar I. Prólogo Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 14 contribuyen en exceso al incremento del gasto. Con frecuencia, se cuestiona si está o no sometida al “imperialismo de la tecnología”; algunos lo han reflejado de manera más radical: “The insidious progression of technology from Servant to Master”. En la actualidad, hay más presión que nunca para racionalizar el gasto sanitario, eliminar lo innecesario y utilizar la tecnología sanitaria de manera segura, efectiva y coste-eficiente para proporcionar mejoras concretas en la vida de los pacientes. La Radiología, dada su dependencia de la información revelada por los equipos de imagen, es muy vulnerable a las restricciones en el uso de estos equipos impuestas por cambios en las preferencias y prioridades motivadas por razones económicas y políticas. La industria de la tecnología sanitaria no puede ni quiere quedar al margen, acepta este reto y está comprometida a trabajar codo con codo con el resto de los agentes para orientar su investigación y desarrollo hacia innovaciones relevantes que tengan sentido. ¡¡¡Stop selling technology and start selling value!!! Escasean en la literatura los artículos que evalúan el coste-beneficio de las distintas pruebas; de ahí, el interés de un Monográfico de esta naturaleza donde términos como productividad, eficiencia, resultado en salud, contabilidad analítica, URV, adecuación de la petición, innovación, sostenibilidad, evaluación, procesos, lean management… tienen un gran protagonismo. Mi impresión es que han llegado para quedarse en la literatura radiológica y que van a convivir con los términos más clínicos: signos, patrones, biomarcadores, etc. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):13-21 También hay varios artículos que se centran en evaluar la adecuación de la petición. Es bien conocido que hay áreas de mejora en este proceso; hemos padecido y seguimos padeciendo una gran presión para medir únicamente la actividad como signo de “calidad y productividad” de un Servicio de Radiología. En mi opinión, ha llegado el momento de enfatizar más “valor frente a volumen”. El papel tradicional del radiólogo como un médico que “solo” añade valor al sistema generando e interpretando imágenes ha quedado obsoleto. El continuo avance en las tecnologías de imagen y en las tecnologías de la información y la comunicación (Figura 1) está provocando una eclosión en la demanda de estudios de imagen, y como consecuencia un incremento muy significativo en la utilización y consumo de recursos económicos, tecnológicos y humanos. Esta tendencia está demandando al radiólogo que juegue un papel más central y protagonista en la atención y el cuidado integral del paciente. No me resisto a comentar nuevos horizontes en la Radiología desde la perspectiva de la industria. La innovación en la Radiología va a continuar, la hibridación de la imagen, la resonancia magnética (RM) digital, la tomografía por emisión de positrones (PET) digital, la tomografía computarizada espectral, la PET-RM están listos o a la vuelta de la esquina. Ya es posible la fusión digital de la Radiología y la Patología (Figura 2). Poder combinar anatomía, función, posición, contexto… con la información celular, la patogénesis, etc., abre nuevos horizontes al radiólogo. ¿Qué decir de los avances en la Terapia guiada por la Imagen? Los avances en nuevos sensores, en sistemas de Molecular Specificity Dose reduction CT Hybrid imaging Radiologist Image acquisition “Read” images Ayerdi Salazar I. Prólogo Continuing developments in Radiologists’ “traditional space” Report Medical decision Data courtesy of Zahi Fayada, Mt. Sinani, NY Improved Visualization CEO Imaging Systems, November 2012 Fuente: Philips Healthcare. Figura 1. tracking electromagnéticos y en la robotización del manejo de los dispositivos van a hacer una realidad la espectroscopia fotónica, la biopsia óptica y, en definitiva, van a mejorar la precisión en las técnicas intervencionistas y, consecuentemente, es de esperar una gran expansión de los procedimientos intraoperativos (Figura 3). La nanotecnología, los nuevos agentes de contraste y las nuevas modalidades de imagen van a permitir expandir las terapias guiadas por la imagen sin incisión (no intervencionistas) (Figura 4). Veo un futuro donde la inteligencia anatómica esté integrada en los equipos de imagen, y donde podamos visualizar el cuerpo humano en cual- quier lugar y en cualquier momento comprendiéndolo a nivel molecular; donde consigamos, por fin, una visión holística del paciente al integrar toda la información contextual: la patofisiología de la enfermedad, la histopatología, con la aportación de la imagen (diagnóstico, localización, estadiaje, progresión, respuesta al tratamiento, expresión fenotípica de la enfermedad…) (Figura 5). Estoy convencido de que todas estas innovaciones tecnológicas no son avances superfluos motivados por un deseo compulsivo de innovación por parte de la industria, sino que son respuestas a la demanda de los radiólogos de avanzar inexorablemente hacia una imagen cuantitativa que permita aumentar la precisión del diagnóstico Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):13-21 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Confidential Advanced Signal Processing 15 Ayerdi Salazar I. Prólogo Digital Fusion Radiology/Pathology Radiology Pathology Anatomic Metabolic with Position and Context Cellular Chemistry Pathogenesis Morphologic Mutual understanding 16 Anatomic & Physiological Characteristics a) Highly Suspicious of Malignancy b) Presence of mass and micro calcifications c) Tumor is 2 mm from de inked margin d) No lymphatic invasion is appreciated Micro Characteristics a) Mitotic rate is less than 1 mitosis per 10 high power fields b) Carcinoma is grade II c) Adjacent to the carcinoma are areas of ductal carcinoma in situ CEO Imaging Systems, November 2012 Confidential Additional Focus: Expansion of the traditional space Radiologist Image acquisition “Read” images Image guided interventions Medical decision Report Image acquisition Image Image processing analysis Characterization Report Confidential Integration Radiologist Search Interpretation Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Integrated Diagnosis Reporting Imaging database NonImaging database Medical decision Contextual information integration CEO Imaging Systems, November 2012 Fuente: Philips Healthcare. Figura 2. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):13-21 Targeted therapies Precise delivery of the device anywhere in the body Electromagnetic tracking of rigid devices • Biopsy needle • Cryo-ablation devices Ayerdi Salazar I. Prólogo Intraoperative Guidance Knowing where you are, and where to go, in the body Device shape sensing • Flexible catheters and endoscopes • Registered to pre-procedural imaging CEO Imaging Systems, November 2012 Confidential Image Guided Therapies Planning Pre-operative Imaging Diagnosticquality imaging used to define targets for the procedure. Confidential Manual/machinegenerated roadmap to indicate point of entry, dose, placement, and other aspects of the intervention. Intraoperative guidance Collection of techniques which tells the physician where he/she is during the procedure relative to the plan and target. Therapy Therapy Therapy monitoring Real-time or post-procedure assessment of the accuracy and effectiveness of the therapy. CEO Imaging Systems, November 2012 Figura 3. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):13-21 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Robotic advancement of tools • Image-based guidance • Point-to-point auto navigation 17 Ayerdi Salazar I. Prólogo Integrated Procedural Diagnostics Recognizing when you’re “there” Providing realtime tissue characterization Photonic spectroscopy • Needle-based device • Real-time spectroscopic tissue characterization Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Ultra high-resolution u/s • Catheter-based u/s • Tissue differentiation and navigation 18 Optical biopsy • Endoscopic/catheter device • Multi-spectral characterization of tissue properties Confidential CEO Imaging Systems, November 2012 Therapy Assessment Knowing you’ve performed the intended therapy Knowing the therapy is truly complete before the patient goes home Real-time imaging • Real-time-3-D ultrasound fused with interventional x-ray to confirm valve placement Ablation depth monitoring • Heat/tissue interaction alters acoustic propagation • Used to assess extent of ablation MR Thermography • Tissue temperature changes seen as changes in relaxation properties Confidential CEO Imaging Systems, November 2012 Fuente: Philips Healthcare. Figura 3. (cont.) Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):13-21 Ayerdi Salazar I. Prólogo Targeted Therapies Effective therapies with no incision Ablative therapies • Focused acoustic energy used to ablate tissue Hyperthermic Chemo • Initial evidence that hyperthermic sensitization + chemotherapy improves survival Confidential CEO Imaging Systems, November 2012 Fuente: Philips Healthcare. Figura 4. por imagen, predecir mejor el riesgo de enfermedad, la detección precoz, la respuesta a una terapia específica y reforzar el papel de la imagen en procesos terapéuticos. Aunque la generación y la interpretación de imágenes seguirá siendo el “core business” del radiólogo, su papel –en un sistema de sanidad integrado– se ha y se seguirá expandiendo, proporcionando mucho más valor al sistema sanitario. La responsabilidad del radiólogo se ha expandido hasta abarcar áreas como: control de entrada al sistema (evitando ingresos innecesarios, con los consiguientes ahorros), seguridad del paciente (dosis), abogado de la política sanitaria en cuanto promotor de medi- das preventivas (chequeos), seleccionar la mejor estrategia de tratamiento, monitorizar la evolución del paciente, gestor de la tecnología de la información (distribución y archivo de las imágenes), etc. (Figura 6). En el actual entorno sanitario, de constantes cambios y medidas radicales de contención de gasto, hay un movimiento para identificar soluciones de imagen más eficientes y coste-efectivas que contribuyan a mejorar el resultado en la salud del paciente. Los radiólogos, como se ilustra en este monográfico, están reaccionando positivamente para liderar esta transición. Es evidente que debemos avanzar más en posicionar mejor las distintas alternativas de imagen a pesar de la dificultad de definir cuál es la Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):13-21 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Hyperthermic Rad Onc • Treatment of tissue elevated to ≈41 °C is 2-1/2 times more effective than nonhyperthermic tissue 19 Ayerdi Salazar I. Prólogo Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 20 Contextual Information Integration • Model of pathophysiology of disease • Patient information • Genomic and proteomic • Blood-based markers • Imaging - Phenotypic expression of disease (structure + function) - Diagnosis, localization, staging, progression - Drug distribution, treatment response • Histopathology Enabling a comprehensive view of the patient Confidential CEO Imaging Systems, November 2012 Fuente: Philips Healthcare. Figura 5. What is the role of the Radiologists? Yesterday’s View Today’s View • A physician who adds value to the health care system solely by generating and interpreting diagnostic images. • The radiologists’ roles have • Radiologists integrating the expanded to encompass economic diagnostic process, a key figure gate keeping, political advocacy, in the diagnosis, finding and public health delivery, patient interpreting complex patterns safety, quality of care improvement, in patient’s data. 1 • Radiologists and imaging and information technology. playing a bigger role in procedures. Tomorrow’s View Mapping the depth and complexity within the role of the radiologist 1. The Evolving Role of Radiologist within the Health Care System: Paul Martin Knechtges, MD and Ruth C Carlos, MD, MS Corresponding Author: Lecturer II Paul Martin Knechtges, MD Fuente: Philips Healthcare. Figura 6. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):13-21 des de colaboración entre todos los agentes con un nuevo espíritu. Más que nunca, necesitamos reinventar la Radiología para aumentar la calidad de la sanidad ahorrando dinero. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Estoy convencido de que esta profunda recesión abre enormes oportunida- Ayerdi Salazar I. Prólogo modalidad de imagen óptima para cada caso –dado que este sigue siendo un concepto dinámico y con una amplia variabilidad– para utilizar mejor los escasos recursos de que disponemos. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):13-21 21 Un objetivo común: implusar la innovación y el desarrollo del sector tecnológico sanitario Retos y desafíos en la organización de un Servicio de Diagnóstico por Imagen Introducción La imagen médica, con una creciente resolución morfológica y sensibilidad, actualmente es una herramienta diagnóstica clave en muchas enfermedades y tiene un rol importante en la monitorización de los tratamientos. Los últimos avances de estas técnicas están incrementando rápidamente la utilización de la imagen para los diagnósticos funcionales y cuantitativos, la guía de tratamientos mínimamente invasivos y el diagnóstico molecular. El formato digital de la mayoría de las modalidades, que permite archivar toda la información que contienen las imágenes para su análisis y posterior procesado, con la posibilidad de acceder a ellas desde cualquier lugar, está impulsando la utilización de la telemedicina. Los radiólogos, como especialistas en diagnóstico por imagen, estamos muy involucrados en estos desarrollos tecnológicos y tenemos la responsabilidad de evaluar los puntos fuertes y las debilidades de las distintas modalidades que empleamos. Conjuntamente con otros especialistas, tenemos que crear los algoritmos integrados para maximizar su efectividad clínica. Tene- mos también la responsabilidad de la implantación y la gestión eficientes de estas tecnologías en el entorno clínico. Las organizaciones sanitarias están inmersas en una transformación de su estructura actual, influidas por la modificación de las necesidades de los pacientes y la adaptación a las nuevas tecnologías. En el caso del diagnóstico por imagen, las transformaciones se centrarán en los siguientes aspectos: Transformación del análisis de costeefectividad de la precisión diagnóstica y terapéutica en un activo profesional y de valor añadido Necesidad de nuevas formas de organización sin la carga jerárquica de los modelos convencionales: evolución hacia modelos con una mayor transversalidad, con profesionales dedicados al diagnóstico y al tratamiento morfológico basado en técnicas de imagen, que faciliten la toma de decisiones y comprometidos con una opción de uso coste-efectivo de los recursos. Este modelo profesional tiene una doble vertiente: por un lado, requiere un desarrollo profesional sólido Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):23-8 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Lluís Donoso Bach. Donoso Bach L Director del Centro de Diagnóstico por imagen del Hospital Clínic de Barcelona. Director Ejecutivo, UDIAT Centro de Diagnóstico. Corporació Sanitària Parc Taulí. Sabadell. Barcelona. Dirección para correspondencia: [email protected] 23 Donoso Bach L. Retos y desafíos en la organización ... en su entorno de dedicación específica, con conocimientos más allá de la semiología tradicional y, por otro lado, capacidades de evaluación y reflexión de aspectos poblacionales, éticos, tecnológicos, etc. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Es en este contexto donde el diagnóstico por imagen está considerado actualmente como una parte esencial de la atención sanitaria. El crecimiento de las técnicas intervencionistas diagnósticas y terapéuticas y las imágenes con información funcional y molecular mantendrán “la imagen” al frente de los avances médicos. 24 En este artículo revisaremos los principales retos organizativos del diagnóstico por imagen: el modelo organizativo, el rol de las tecnologías de la información y la comunicación, la telerradiología, la relación con Atención Primaria y la gestión centralizada de la imagen médica. Modelo organizativo En línea con los aspectos anteriores, es básico considerar al especialista en diagnóstico por imagen miembro en pleno derecho de las sesiones de trabajo, dentro del concepto de medicina multidisciplinaria que suma sinergias entre los diferentes profesionales, para dar una respuesta más coherente a las necesidades del paciente o de la población atendida. La organización por órgano/sistema se sustenta en la competencia profesional, basada en la capacidad de integración de las diferentes modalidades de diagnóstico por imagen como pilar del proceso diagnóstico y terapéutico. Para que sea posible, es imperativo ser selectivo en el entorno profesional del especialista en diagnóstico por imagen, puesto que el volumen de información y la velocidad de actuación Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):23-8 no permiten un nivel adecuado de competencia en todos los campos. De hecho, la organización por órgano/sistema no es más que la evolución del modelo tradicional y precisa de la formación troncal con los conocimientos y habilidades de todas las técnicas de imagen. Si este modelo acabase en una mera distribución de tareas, quedaría parcialmente vacío de contenidos y sería solo una forma diferente de organizar el “trabajo”. La asignación a las distintas áreas lleva implícita la corresponsabilidad en la gestión y en el proceso de toma de decisiones en todos los ámbitos no asistenciales, desplazando el papel de la dirección del departamento hacia una función de coordinación, facilitación y liderazgo. De este modelo organizativo hemos aprendido que: –Aumenta la efectividad asistencial. –Aumenta la motivación, con la consecuencia inmediata de una mayor implicación. –El valor añadido de la competencia profesional selectiva se percibe como un punto fuerte que redunda en una mejora de la competitividad. –Mejora la gestión de los procesos asistenciales gracias a la corresponsabilidad de todos sus agentes. –Facilita la integración de la investigación en la práctica cotidiana. –La apuesta por las tecnologías de la información y la comunicación configura un nuevo modelo curricular y de desarrollo profesional con el que estar comprometidos como una evolución lógica de la organización por órgano/sistema. trabajo en los departamentos de diagnóstico por imagen. En los últimos tiempos, los ordenadores han tenido una presencia creciente en el ámbito clínico, especialmente en la adquisición y procesado de la imagen médica. En el futuro, el procesado de la imagen mejorará en rapidez y sobre todo en capacidad de análisis e interpretación de las imágenes. El diagnóstico por imagen está evolucionando rápidamente de la representación en película hacia el concepto de imagen como manifestación electrónica de un estudio cuyo resultado reside en los bits de un ordenador. La capacidad de los ordenadores se usa no solo para archivar pasivamente las imágenes, sino también para extraer de ellas más información y para cuantificar diferentes áreas de interés y estructuras. Probablemente será preciso disponer de una nueva categoría de técnicos especialmente entrenados en el procesado de la imagen para ayudar a los médicos nucleares y a los radiólogos a dar respuesta a la creciente demanda en este campo. También será imprescindible la contribución de físicos, matemáticos y estadísticos que constituyen la joven disciplina de la bioinformática. El efecto neto del procesado de imágenes en el proceso clínico no es marginal o incremental, sino transformador. Para aprovechar todo el potencial de estas aplicaciones son precisas nuevas estrategias y nuevas formas de La telerradiología tiene que implantarse con el acuerdo de los radiólogos de los centros conectados, que tienen que ver el servicio no como un sistema que funciona al margen de su actividad, sino como un elemento de soporte. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Con la proliferación de las modalidades de imagen multidimensionales (tomografía computada [TC], resonancia magnética [RM], tomografía por emisión de positrones [PET], ecografía) y la capacidad de obtener volúmenes de información con miles de imágenes por estudio, los ordenadores son esenciales, desde la simple visualización de las imágenes hasta las nuevas formas de representación de la información. En la actualidad se están desarrollando nuevas formas de visualización en tres dimensiones, fusión y extracción de datos de diferentes modalidades de adquisición, que permiten separar tejidos y órganos de interés de otras estructuras para facilitar la visualización y extraer la máxima información de cualquier bloque de datos contenido en las imágenes. Es difícil imaginar un servicio central de diagnóstico por imagen sin un entorno tecnológico en el que el sistema de información, no solo entendido como un generador de informes asociados a imágenes sino también como una herramienta de gestión y evaluación de las prácticas profesionales, no esté implantado y asumido por los propios profesionales como un elemento imprescindible para mantener un nivel de respuesta a la altura de las necesidades del interlocutor clínico y de la demanda del paciente. Donoso Bach L. Retos y desafíos en la organización ... Papel de los sistemas de información y la informática Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):23-8 25 Telemedicina. Telerradiología La evolución natural de las organizaciones con experiencia en la utilización de la imagen digital y de los sistemas de información es el uso de la telerradiología en nuevos escenarios de trabajo en red. La telerradiología permite el acceso a servicios de gran calidad a poblaciones que no los tenían previamente, debido a la distancia o a los costes, y permite mejorar la eficiencia de la práctica radiológica compartiendo atención especializada. Donoso Bach L. Retos y desafíos en la organización ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 26 La utilización de la telerradiología que se propone incluye el concepto de gestión de información médica más allá de la simple transmisión de imágenes. La telerradiología tiene que ser capaz de contribuir a la integración, en un entorno digital en el que la información médica se distribuye dentro y fuera del hospital, generando servicios de valor añadido para los pacientes, los profesionales y las instituciones. En este entorno aparecen nuevas responsabilidades profesionales para gestionar estas tecnologías y para preservar la confidencialidad y la integridad de los datos de los pacientes. la consulta médica en el momento de la atención al paciente es posible orientar al médico prescriptor en la correcta utilización de los estudios, en función del contexto clínico del paciente. Esto también permitirá avanzar en la necesaria estandarización y protocolización de la práctica clínica. Relación con Atención Primaria En los hospitales, distintas instalaciones se utilizan de forma compartida por distintos especialistas, como las áreas quirúrgicas, las Unidades de Cuidados Intensivos o los Servicios de Urgencias. Hasta ahora, los Servicios de Diagnóstico por Imagen son mayoritariamente responsabilidad de radiólogos y médicos nucleares, esta situación esta cambiando y no hay ninguna razón para impedir que estas instalaciones no puedan ser utilizadas por otros especialistas formados en alguna técnica de imagen. La Atención Primaria es el punto de acceso prioritario para los pacientes y ofrece un abordaje integral y coordinado a la población sin ninguna especialización por órganos o enfermedades. El médico de familia tiene acceso a una gran variedad de estudios de imagen para diagnosticar y tratar enfermedades prevalentes sin utilizar los recursos del hospital, aspecto que tendrá una prioridad política en nuestro sistema de salud. Parece evidente la oportunidad para los Servicios de Diagnóstico por Imagen de mejorar la capacidad resolutiva en Atención Primaria, colaborando directamente con los médicos de familia y estableciendo los protocolos de estudios diagnósticos para evitar visitas innecesarias a otros especialistas. No parece razonable en este contexto limitar la capacidad de utilizar técnicas de “alta tecnología” en Atención Primaria cuando su correcta utilización aumentaría su capacidad de resolución en los procesos menos complejos en los dispositivos de Atención Primaria. En este escenario serán especialmente útiles los “sistemas de soporte a la decisión clínica” en la prescripción de las exploraciones; con estos sistemas accesibles en Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):23-8 Esta relación con los médicos de familia y el compromiso con Atención Primaria es una oportunidad para los radiólogos de incrementar su visibilidad pública. Gestión integrada de la imagen Para seguir manteniendo el liderazgo en la gestión de los Servicios de Imagen, los radiólogos debemos ser conscientes de la importancia de conocer y gestionar adecuadamente los factores que influyen en el cumplimiento de las expectativas de los pacientes y los clínicos respecto a los servicios de un Departamento de Diagnóstico por Imagen; estos incluyen: la disponibilidad del mejor equipamiento, la garantía de calidad en los procedimientos, las instalaciones, la comunicación con el paciente, la puntualidad, la estandarización y protocolización de los estudios, la comunicación profesional, la calidad de los informes y la disponibilidad con servicios 24/7. La participa- Parece lógico suponer que, por experiencia y formación, los radiólogos y médicos nucleares deben ser los responsables de la gestión de departamento de imagen. De todas formas la colaboración en base de igualdad con otros especialistas clínicos debe valorarse desde la perspectiva de la mejor atención a los pacientes. Esta relación debe basarse en el conocimiento clínico de estos especialistas y en el aprendizaje de las técnicas de imagen, incluido actualmente los programas de formación de muchas especialidades. Esta formación debería realizarse en los Servicios de Diagnóstico por Imagen, de forma reglada y bajo la supervisión de los especialistas en imagen (mayoritariamente radiólogos y médicos nucleares). Conclusión El mundo del diagnóstico por imagen está cambiando muy rápidamente y los profesionales tenemos que ser proactivos en este proceso para sobrevivir. El alcance de los conocimien- En un futuro inmediato, los Departamentos de Diagnóstico por Imagen tendremos que interactuar más con los pacientes y con los médicos de Atención Primaria para proveerlos directamente de servicios de diagnóstico y sobre todo de consulta que les permitan una mejor indicación de las pruebas en el proceso de diagnóstico antes de remitir a los pacientes a la Atención Especializada. Esto tendrá que permitir aumentar la eficiencia y la efectividad clínica de los servicios y ahorrar pasos innecesarios en la atención de pacientes. Los profesionales de diagnóstico por imagen en los hospitales docentes tendremos la necesidad adicional de especializarnos en enfermedades específicas para participar en los grupos multidisciplinares que prestan servicios terciarios, en los que tenemos que actuar como consultores y liderar proyectos de investigación basados en técnicas de imagen. Donoso Bach L. Retos y desafíos en la organización ... Actualmente, para dar respuesta a estas demandas es necesaria una gestión centralizada de los Servicios de Imagen integrando organizativamente todas las técnicas de imagen en la organización (hospitalaria y/o otros dispositivos de atención). Esta organización integrada debe basarse en criterios de eficiencia y en el necesario acuerdo entre los distintos servicios implicados. tos en diagnóstico por imagen es actualmente demasiado amplio y complejo para que pueda ser abordado individualmente por un especialista. Los Departamentos de Diagnóstico por Imagen tenemos que agruparnos en áreas clínicas específicas basadas en la organización por órganos y sistemas, sin perder de vista la importancia de los conocimientos tecnológicos inherentes a esta área de especialización médica, para poder prestar unos servicios de alta calidad y eficiencia. Desde el punto de vista de la gestión y la organización, es recomendable agrupar en un solo dispositivo todos los servicios de imagen, que pueda garantizar un flujo de trabajo estandarizado incluyendo la gestión de la demanda, los protocolos de adquisición de las imágenes, el archivo y procesado de datos, la interpretación de los estudios y las interconsultas. Esta organización integrada debe también garantizar la mejor calidad de los equi- Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología ción en la gestión de este flujo de trabajo por parte de todos los profesionales del Servicio (administrativos, gestores, técnicos, diplomados universitarios en Enfermería, radiólogos, médicos nucleares, especialistas clínicos, informáticos, físicos, biólogos…) es fundamental para obtener los mejores resultados desde el punto de vista de la eficiencia. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):23-8 27 –Martí-Bonmatí L, Morales A, Donoso Bach L. Hacia un uso adecuado de la telerradiología. Radiología. 2012;2:115-23. Bibliografía recomendada –Donoso Bach L. Roles profesionales en los servicios de radiología. Radiología. 2007;49(6):375-6. –ESR Executive Council. The profesional and organizationalfuture of imaging. Insights Imaging. 2010; 1:12-20. – European Society of Radiology. Thefurure rol of radiology in healthcare. Insights Imaging. 2010;1:2-11. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Donoso Bach L. Retos y desafíos en la organización ... pos, así como su uso eficiente y de calidad con la participación activa multiprofesional. 28 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):23-8 –Donoso Bach L, Martínez Serrano C. Sistemas de Información en Radiología. En: SERAM Sociedad Española de Radiología Médica. Radiología Esencial, 2. Madrid: Editorial Médica Panamericana; 2009. p. 1825-33. Retos y desafíos tecnológicos de la Radiología Martí-Bonmatí L Director del Área Clínica de Imagen Médica. Hospital Universitario y Politécnico La Fe. Valencia. Jefe de Servicio de Radiología. Hospital Quirón. Valencia. Dirección para correspondencia: [email protected] Introducción “Quisiera que me dijeran con precisión qué puedo desarrollar, cómo están mis órganos y sistemas, qué tipo de lesión tengo, qué tratamiento es el más eficaz y cómo deben seguirse sus efectos.” Parece que no hay duda de este interés universal en una sociedad moderna, de calidad y centrada en los individuos. En Radiología, un servicio de calidad es aquel que dispone de radiólogos competentes y comprometidos, posee una oferta tecnológica actualizada, la utiliza adecuadamente y además participa de forma activa en todos los procesos sanitarios donde la imagen es relevante. Un servicio radiológico de calidad clínica innova, optimiza, simplifica e incorpora cualquier posible conocimiento que se considere mejora la salud de los pacientes y el trabajo de los profesionales. Innovar es implementar nuevos procedimientos, tanto diagnósticos como terapéuticos, para solucionar lo antes posible un problema de salud de un paciente concreto. Innovar también significa mejorar la organización de la atención para que esta sea más eficiente y satisfactoria para el enfermo. En Radiolo- gía, muchos de estos procedimientos innovadores tienen una base tecnológica. La tecnología sanitaria puede considerarse la consecuencia de una unión, en tiempo y espacio adecuados, entre las necesidades clínicas de base científica que permiten dar al paciente una sanidad más precoz y precisa, y la ingeniería que es capaz de diseñar y crear aquellos procedimientos que facilitan esta adaptación. En este proceso científico-tecnológico, la medicina está redefiniendo constantemente sus objetivos y estrategias, de tal forma que en la actualidad se acepta que para ser adecuada debe priorizar, ser personalizada, precisa, precoz y participativa. Por su parte, la ingeniería utiliza diferentes técnicas, diseños y modelos, para resolver problemas y generar soluciones orientadas a satisfacer las necesidades sanitarias de la población. A través de las necesidades identificadas y no cubiertas en la medicina clínica actual, el progreso científico-tecnológico da una respuesta que se basa en la inquietud de la profesión médica de no disponer de diagnósticos y tratamientos más precisos, mejor dirigidos y con menos efectos adversos. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):29-36 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Luis Martí-Bonmatí. 29 Martí-Bonmatí L. Retos y desafíos tecnológicos... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 30 En un entorno centrado en la satisfacción del paciente, el mapa de procesos de nuestra actividad incluye la definición de los criterios de adecuación de las solicitud de pruebas diagnósticas y terapéuticas, la recepción de las peticiones y la optimización de los algoritmos y pautas de realización, el informe estructurado del resultado y su integración aportando valor clínico, y el seguimiento adecuado del episodio por el que se evalúa al paciente. Este mapa de procesos es un instrumento muy útil para analizar y localizar las interacciones que sean susceptibles de mejora, redefiniendo las actuaciones (transformar el “cómo es” en “cómo debe ser”), eliminando las etapas innecesarias que no aportan valor, optimizando el proceso con actividades más eficientes (más precisas, rápidas y que generan información o resultados más favorables) y centrando todas las acciones en el beneficio final del paciente y la sostenibilidad del proceso. La tecnología tiene un peso muy importante en todas estas áreas, desde la adquisición de equipamiento, el procesado de la imagen, su distribución y la gestión de la información que asocia. ¿Por qué limitar pues su ampliación de uso? ¿Qué niveles de evidencia son necesarios para innovar y mejorar tanto el beneficio como la satisfacción del paciente? ¿Queremos influir en la innovación mediante las tecnologías de imagen? El uso adecuado de la mejor tecnología garantiza mantener la salud, prevenir la enfermedad, detectarla precozmente, gradar su agresividad y extensión, tratarla de manera más eficiente y seguir los efectos de la terapia. La definición de las dianas (los procesos biológicos y celulares responsables de la pérdida de salud) permite favorecer la utilización adecuada de la tecnología para analizarlas, asegurando la mayor seguridad, eficacia, efectividad, eficiencia y equidad. La Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):29-36 tecnología es un puente entre los niveles de decisión, las fuentes de conocimiento y los desarrollos ingenieriles. Pese a este conocimiento comúnmente aceptado, siguen existiendo ciertos condicionantes. ¿En qué medida afecta una mejor tecnología en la salud? ¿Quién define el impacto de las nuevas tecnología en la solución de la enfermedad? ¿Cómo afecta la obsolescencia de conceptos y tecnologías en el estado de salud de los pacientes? ¿Cuán eficiente es un sistema basado en tecnologías no actualizadas? ¿Qué nivel y características de evidencia científica son adecuados? ¿Qué coste es aceptable? ¿Qué coste se considera que puede limitar su utilización? ¿Cuál es y cómo se mide el beneficio de utilizar la tecnología más adecuada en imagen médica? Todas estas preguntas se responden con una simple observación: se cura mejor lo que se conoce y se conoce mejor lo que se observa. De ahí la relevancia de observar y dirigir mejor (la imagen), conocer mejor (las dianas) y centrar nuestro trabajo en el paciente (personalizar y precisar). Obsolescencia y coste-beneficio Criterios muy relevantes a la tecnología son aquellos relacionados con su valor. Podemos definir el ciclo de vida del equipamiento de imagen médica como el periodo de tiempo en el que una tecnología adquirida mantiene un nivel tecnológico similar sin actuaciones críticas. Al finalizar un ciclo de vida, el equipo debería ser sustituido o completamente actualizado. Los ciclos de vida dependen de la duración física de los componentes electrónicos y dispositivos (obsolescencia técnica), y de las mejoras, cambios y actualizaciones en la tecnología médica (obsolescencia tecnológica). Los ciclos de vida dependen de la edad del equipamien- Un Servicio de Radiología adecuado que genera información ajustada al conocimiento debe tener un equipamiento que no haya superado su ciclo de vida y que esté situado en un tramo tecnológico adecuado. El equilibrio entre su obsolescencia tecnológica y el uso clínico apropiado es siempre delicado y deben ser los radiólogos los que, sobre la base del conocimiento científico actualizado del entorno en el que trabajan, definan los balances más adecuados. Retos en adquisición de imágenes Muchas son las áreas en las que la imagen médica está implementando de- La Radiografía Digital con tamaños de píxel submilimétricos mejorará el análisis de texturas y formas; los detectores cada vez más eficientes minimizarán la dosis de radiación necesaria para obtener imágenes nítidas de pequeñas estructuras. La ecografía adquirirá imágenes tridimensionales para su estudio tomográfico en las estaciones diagnósticas, disminuyendo los tiempos de estudio al paciente; los medios de contraste intravasculares permitirán visualizar la perfusión de los tejidos y tumores; la elastografía evaluará la rigidez y presión de órganos y lesiones, y la fusión intermodal guiará mediante esta técnica la biopsia y el tratamiento local de lesiones que se ven únicamente con otras modalidades (como la tomografía por emisión de positrones) o parámetros (como los mapas de permeabilidad capilar). Martí-Bonmatí L. Retos y desafíos tecnológicos... De un modo general, se definen los ciclos de vida de la ecografía en cinco años, la radiografía convencional en siete años, los portátiles en diez años, y la tomografía computarizada (TC) y la resonancia magnética (RM) en siete años. La definición de tramo tecnológico es más compleja. Parece una propuesta acertada establecer el nivel tecnológico de una especialidad concreta de aparataje (por ejemplo, la TC), sobre la base de las características que mejor definen la calidad percibida por los usuarios (radiólogos principalmente). Así, si clasificamos esta distribución porcentual en cuartiles, tendremos cuatro niveles tecnológicos aceptados (bajo, medio, alto, muy alto). Un mismo equipo puede tener un nivel tecnológico alto y al poco tiempo pasar a medio si ha habido cambios en el número o tipo de variables que definen esta calidad. sarrollos tecnológicos con el objetivo de maximizar la calidad (mejor señal, más rápida, más definida) y su impacto sobre el proceso de la enfermedad que quiere evaluar. La TC multidetector (MDCT) usará toda la capacidad de la energía de los rayos X para obtener imágenes de diferentes energías (energía dual, multiespectral, contadores de fotones), con resoluciones espaciales muy altas (detectores planos) e incluso reconstruyendo con otras propiedades de las radiaciones (contraste de fase). Por su parte, la RM usará secuencias rápidas de mayor calidad empleando señales digitales en inicio, volumétricas y resueltas en potenciación. La imagen estructural y funcional de esta técnica será el puente entre los fenómenos celulares y fisiológicos y su modelado in vivo. Esta imagen será además cuantitativa, paramétrica, multivariante y de base celular-estructural. En este contexto se entienden los bio- Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología to y la intensidad de su uso, de la existencia de piezas de recambio, de la calidad de la imagen que genera, de la existencia de programas de mantenimiento, de las actualizaciones realizadas y de diversos parámetros de seguridad. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):29-36 31 Martí-Bonmatí L. Retos y desafíos tecnológicos... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 32 marcadores de imagen como la representación espacial de una característica extraída de las imágenes adquiridas de un paciente, medida de forma objetiva y relacionada con un proceso biológico normal, una enfermedad o una respuesta a una intervención terapéutica. La imagen ampliará su espectro a la Óptica, tanto en superficie combinada con otras modalidades como la ecografía, como en su uso endocavitario, como la tomografía óptica intravascular. Las imágenes son cada día más multidimensionales (expresan diferentes informaciones que pueden separarse como canales independientes) y multiparamétricas (representan procesos biológicos o fisiológicos de relevancia para la enfermedad). Que los especialistas en imagen médica seamos capaces de solventar la distancia entre posibilidades tecnológicas, innovación de procesos y relevancia clínica es nuestra principal tarea a corto plazo. Retos en terapia guiada por imagen La tecnología, su uso adecuado y la innovación clínica han sido los pilares de la radiología intervencionista. Este arquetipo de la terapia guiada por imagen debe asumir una serie de cambios fundamentales para que la Radiología se asiente como una especialidad clínica de base tecnológica donde la imagen es el centro del diagnóstico y la terapia. Desde el conocimiento biológico y fisiopatológico de la enfermedad y de las soluciones tecnológicas intervencionistas, la Radiología, como especialidad clínica centrada en el paciente, debe liderar la innovación y la investigación en la terapia guiada por imagen. El paciente, eje central de nuestro trabajo, debe recibir en todo momento el Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):29-36 mejor tratamiento disponible, en el mejor momento y con la mayor información posible. El equipo de radiólogos intervencionistas, como responsables de la realización del procedimiento, debe implicarse en que el paciente tenga acceso a los procedimientos que solucionen con la mayor eficacia y en el menor tiempo su proceso. La innovación y la investigación tecnológica debe pues focalizarse en mejorar los procedimientos actualmente disponibles y desarrollar otros aún menos invasivos y más resolutivos. La implantación precoz de técnicas con nuevos biomateriales, diferentes formas de vehiculización y administración de fármacos, guiado más seguro para disminuir al máximo la necesidad de usar radiación ionizante y/o de contraste, desarrollo de sistemas de imagen multimodalidad y de terapias combinadas, deben ser los pilares en los que se asienten nuestras expectativas de valor. Tanto el enorme desarrollo alcanzado como las grandes expectativas de futuro de la terapia guiada por imagen se centran en la utilización innovadora de las mejores soluciones tecnológicas y las mejores imágenes en un entorno de alto conocimiento radiológico. Estas unidades deben dedicar su máximo esfuerzo a crecer como servicio clínico y a liderar proyectos de investigación y gestión de la innovación, teniendo siempre como eje central el uso de la mejor tecnología en beneficio del paciente. Retos en sistemas de información asociados a la imagen La medicina está cambiando de una actividad reactiva ante la enfermedad (curar) a otra más proactiva en la que los conceptos de predecir, personalizar, participar y prevenir (4P) serán el La utilización y explotación de los datos de los nuevos sistemas de gestión e información hospitalarios, tanto clínica como económica, parece una exce- Martí-Bonmatí L. Retos y desafíos tecnológicos... La asistencia sanitaria no debe continuar focalizándose en conglomerar actos diagnósticos y terapéuticos aislados, sino en abordar al paciente y su particular condición clínica de manera individual e integrada. Existen amenazas que limitan la necesaria eficiencia y calidad asistencial y repercuten negativamente en la satisfacción del ciudadano, derivadas esencialmente del desconocimiento del gasto ajustado a actividad, la burocratización en los procesos, la falta de flexibilidad de sus estructuras y la insatisfacción de los profesionales. Para abordar estos conflictos, debemos utilizar todos los recursos y relaciones posibles, acercar la organización y la toma de decisiones a las necesidades de los pacientes, proponer modelos organizativos para visualizar las responsabilidades organizativas, orientarse hacia modelos de eficiencia en la toma de decisiones y en el consumo de los recursos, y hacer partícipe y centro de ello a los pacientes. lente herramienta para mejorar la rentabilidad global del sistema de salud y la satisfacción percibida. La explotación de los datos del sistema informático y el conocimiento de las necesidades de los pacientes (mediante los sistemas de clasificación de pacientes por morbilidad y riesgo clínico) permite además definir una reingeniería del sistema de prestaciones para minimizar el coste al analizar las variables poblacionales (aquellas que influyen en la frecuentación y complejidad de las pruebas), los prescriptores (utilización adecuada de los estándares basados en la evidencia) y los episodios (ajuste a algoritmos y redefinición de procesos en el Área de Imagen). Las iniciativas innovadoras deben ser estructurales (integración de los sistemas, localización de los servicios, uso adecuado de la historia clínica electrónica) y organizativas (citaciones, distribución del personal, proactividad). Muchas iniciativas deben además ser de actitud y de conducta, priorizando el aprendizaje de las necesidades de los pacientes, escuchándolos y tratándolos como iguales. El concepto de cuidado centrado en el paciente conlleva una oportunidad de innovación que debe centrarse en el conocimiento del escenario del cambio, la participación de pacientes y familiares, la incorporación de medidas precisas de la situación biológica de un sujeto en particular y la colaboración del entorno clínico para profundizar en el valor de las soluciones y descubrir las necesidades adecuadas en estos pacientes. Son para ello imprescindibles las herramientas tecnológicas que den soporte a la comprensión del escenario del cambio, el desarrollo de equipos multidisciplinarios de innovación y a la creación de plataformas de trabajo y comunicación que proporcionen la visión tecnológica, económica, clínica y contextual de Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología próximo paso estratégico en los centros más avanzados. La identificación de los diferentes flujos de trabajo en la compleja trama hospitalaria, necesaria para su optimización y la mejora de la eficiencia de los equipos humanos y técnicos que intervienen, requiere de herramientas de ayuda a la gestión y de soporte a la toma de decisiones. Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) permiten la innovación mediante nuevos desarrollos tecnológicos aplicados a la obtención y sistematización de los elementos que intervienen en los flujos de salud en un sistema hospitalario complejo, utilizando adecuadamente los datos disponibles en todos los sistemas de información hospitalarios. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):29-36 33 Martí-Bonmatí L. Retos y desafíos tecnológicos... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 34 este escenario de salud centrada en los pacientes. El desarrollo de sistemas de ayuda a la toma de decisiones retroalimentados basados en el conocimiento obtenido mediante ingeniería de procesos y pensamiento estructurado permitirá desbloquear la complejidad del diseño actual del sistema de salud y transformarlo en innovación centrada en el paciente. La traducción de toda esa información en proposiciones tangibles e interactivas basadas en la calidad y que mantenga la integridad respecto a las necesidades de los pacientes (participación, personalización, precisión) es nuestro objetivo principal. Tecnología, sostenibilidad e innovación Una mejor tecnología en los sistemas de salud permite alcanzar diagnósticos más precoces de la enfermedad, incluso diagnósticos preventivos; diagnósticos más precisos; proveyendo de una mayor información sobre el proceso patológico que sucede en el individuo acercándonos más a la medicina personalizada. Sin embargo, la tecnología y la inversión inicial que conlleva se consideran prescindibles en momentos de ajustes económicos. ¿Cómo puede limitarse el motor de la calidad asistencial? Veamos unas cuantas preguntas, respuestas y consideraciones. ¿Quién define el impacto de las nuevas tecnologías en la solución de la enfermedad? La valoración de su impacto debe partir de un análisis y evaluación que comienzan en los profesionales sanitarios, los médicos y el personal de Enfermería, y debe continuar con la incorporación al proceso de los supervisores, los gestores y los directores. También es fundamental la Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):29-36 participación de profesionales preparados para llevar a cabo un análisis crítico del estado de conocimiento científico sobre las bondades de la tecnología sanitaria. Todos ellos deben analizar en qué medida los avances tecnológicos pueden contribuir, y están promoviendo, a mejorar la salud de los pacientes en sus aspectos individuales, sociales y económicos. En la medida en que los recursos disponibles para la atención de la salud son limitados, los recursos consumidos deben ser, para un mismo resultado, los menores posibles en los servicios de salud. Hablaremos entonces de eficiencia, y garantizarla es otro aspecto fundamental de la innovación tecnológica y el desarrollo sanitario. ¿Cómo afecta la obsolescencia de conceptos y tecnologías en el estado de salud de los pacientes? Tanto la obsolescencia de conceptos como la de tecnologías influyen negativamente en el estado de salud de los pacientes, al derivarse de ambas un abordaje que no se corresponde con el que debe ofrecerse al paciente. Conceptos, ideas y tecnología deben ir siempre de la mano para lograr que el centro del sistema sanitario, el paciente, obtenga la mayor calidad asistencial (prevenir la enfermedad, diagnosticar el proceso, tratarlo adecuadamente, seguirlo convenientemente). Ahorrar en una parte aislada del proceso de forma injustificada y sin considerar el resultado y la validez final puede romper la cadena integral de la eficiencia y encarecer el resultado final. ¿Cuánto de eficiente es un sistema basado en tecnologías no actualizadas? Nuestro trabajo sanitario debe adaptarse al entorno, a sus posibilidades y sus necesidades. Nuestro trabajo debe también adaptarse a mejorarlo y adecuarlo al conocimiento más evolucionado. Una tecnología avanzada en un lugar en el que no se dispone de ¿Qué coste es aceptable? Un componente importante del aumento del gasto sanitario es la innovación tecnológica. Sin embargo, existe poca información relativa a sus costes, beneficios, uso apropiado y distribución adecuada. Es decir, a día de hoy, no se han estudiado en profundidad los costes económicos y de salud derivados de la infrautilización de métodos innovadores. La innovación tecnológica lleva una inversión inicial y unos resultados ajustados al beneficio que producen. Cualquier coste sufragable que genere beneficios finales (menos coste del proceso global, mayor salud final del ciudadano, menores complicaciones) y justifique su efectividad (acciones ajustadas en tiempo y forma a la enfermedad) debe aceptarse siempre que este análisis sea veraz y esté consensuado. ¿Cuál es y cómo se mide el beneficio de utilizar la tecnología más adecuada en imagen médica? Los resultados intermedios como la ayuda a decisión clínica precoz y certera, el cambio en el tratamiento o la terapia dirigida más eficiente son buenos marcadores de beneficio en imagen médica. El resultado final también debe objetivarse y medirse como calidad de vida ajustada Martí-Bonmatí L. Retos y desafíos tecnológicos... al nivel de salud obtenido en la población mediante la unidad de «años de vida ajustados por calidad» (QALY), calculado a partir del índice de Rosser (sobre el grado de discapacidad y el grado de distrés). De este modo, se podrá conocer qué efecto están teniendo nuestras acciones en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de la enfermedad. La imagen médica es la tecnología sanitaria que tiene un clarísimo impacto en estos aspectos. Si volvemos a la medicina sintomática, tardía y poco resolutiva de hace unas pocas décadas, reconoceremos la enorme importancia que la imagen del cuerpo humano y de los procesos que en él acontecen tiene en estos momentos, y tendrá a corto y medio plazo, si se sigue desarrollando una tecnología orientada e innovadora. En tecnología sanitaria, el desarrollo tecnológico garantiza la sostenibilidad bajo dos aspectos inherentes a la calidad del sistema sanitario. Por un lado, permite optimizar los procesos de atención a los pacientes en el tiempo Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología medios humanos, conocimientos ni materiales para obtener su máximo rendimiento tiene tan poco sentido como una tecnología obsoleta en un lugar en el que los profesionales están educados y motivados para actuar con los últimos diseños tecnológicos, en tiempo y forma adecuados. La adecuación de las acciones radiológicas al problema de salud y la disponibilidad de medios es un ejercicio constante en todos los Servicios de Radiología. Si una nueva tecnología no proporcionase al menos algún beneficio, y fueran eliminados los usos obsoletos que mejora, no sería recomendable su adopción. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):29-36 35 Como apunte final, recordemos que, según el Fondo Monetario Internacional, la «globalización» económica se entiende como el resultado de la innovación humana y el progreso tecnológico (personas + tecnología). Cualquier desarrollo tecnológico está siempre orientado hacia la mejora de la eficacia, la eficiencia y la productividad. Las personas definen los procesos donde estos desarrollos generan una información, en tiempo y espacio, inalcanzable de otra forma. De este modo, con un desarrollo tecnológico orientado es posible optimizar los recursos para asumir y controlar más procesos y generar una mayor cantidad de información en un menor tiempo con la finalidad de diagnosticar y tratar antes y mejor, de prevenir y predecir, de personalizar y hacer partícipe al paciente en el proceso de su salud. Martí-Bonmatí L. Retos y desafíos tecnológicos... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 36 y en la cantidad de recursos dedicados a los mismos, mediante la gestión de la información y la adecuación de la interacción humana. Por otro, el resultado de nuevos desarrollos metodológicos redunda en mejores diagnósticos, intervenciones y evaluaciones terapéuticas, garantizando la sostenibilidad del sistema de salud y de toda la población, al minimizar errores costosos (en tiempo y coste). La innovación tecnológica no es la causa del aumento en el gasto sanitario, sino muy probablemente la mejor herramienta que tenemos para su contención. Agradecimientos Quiero agradecer las contribuciones e ideas de mis compañeros Ángel Alberich, ingeniero biomédico del Hospital Quirón de Valencia; Fernando Gómez, radiólogo intervencionista del Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia; Carla Sancho, del Centro de Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):29-36 Investigación en Economía y Gestión de la Salud de la Universidad Politécnica de Valencia, y Laura SampietroColom, Subdirectora de Innovación del Hospital Clínic Barcelona. Bibliografía recomendada –FENIN. La aportación de las empresas de Tecnología Sanitaria a la sostenibilidad del sistema sanitario español [en línea]. Disponible en http://www.fenin.es/pdf/estudio_ sostenibilidad.pdf –International Monetary Fund. Globalization: Threat or Opportunity? 2000 [en línea]. Disponible en http://www.imf.org/external/np/ exr/ib/2000/041200to.htm –Martí-Bonmatí L, Alberich-Bayarri A, García-Martí G, Sanz Requena R, Pérez Castillo C, Carot Sierra JM, et al. Biomarcadores de imagen, imagen cuantitativa y bioingeniería. Radiología. 2012;54:269-78. Punto de encuentro. Algunas claves para la Radiología del futuro Participantes: D. Luis Martí-Bonmatí. Director del Departamento de Imagen. Hospital Universitario La Fe. Valencia. D. Miguel Ángel Trapero. Jefe de Servicio de Radiología. Fundación Hospital de Alcorcón. Alcorcón, Madrid. Dña. Carmen Martínez. Jefe de Servicio de Radiología. Hospital Son Llatzer. Palma de Mallorca. D. Eduardo Fraile. Director de la Unidad Central de Radiodiagnóstico de Madrid. D. Mariano Guerrero. Director de Planificación y Proyectos. Ribera Salud Grupo. D. Ignacio Ayerdi. Expresidente de Philips Ibérica. D. Pablo Valdés. Director del Departamento de Radiología. Hospital Costa del Sol. Marbella, Málaga. Moderador: D. Ginés Madrid. Responsable de Asuntos Profesionales de la Sociedad Española de Radiología Médica. Patrono de la Fundación Signo. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 Punto de encuentro De izquierda a derecha: Ginés Madrid, Pablo Valdés, Miguel Ángel Trapero, Diego Falcón, Elena Miravalles, Ignacio Ayerdi, Lluís Martí-Bonmatí, Mariano Guerrero, Carmen Martínez y Eduardo Fraile. 37 Algunas claves para la Radiología del futuro Cuestiones tratadas 1. ¿Cómo vamos a afrontar los nuevos escenarios organizativos (reales y virtuales) y los nuevos retos tecnológicos en el ámbito de la Radiología? 2. ¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes en la renovación/reposición de la tecnología radiológica en los “nuevos tiempos”? 3. ¿Cómo afecta la colaboración público-privada a la gestión radiológica? 4. ¿Cómo va a afectar la gestión clínica y la transferencia del riesgo hacia los profesionales a los procesos radiológicos (equipos multiprofesionales)? ¿Cómo se va a medir el producto final, la definición de estándares…? 5. ¿Cuál es el futuro de la investigación y la presencia de la Radiología en la Universidad? Punto de encuentro G. Madrid: Buenos días y bienvenidos a todos; me gustaría agradecer, en nombre de la Fundación Signo y en el mío propio, la presencia de todos los ponentes, por el gran esfuerzo realizado para estar en este Punto de Encuentro sobre “Algunas claves para la Radiología del futuro”. También quiero disculpar a la Dra. Carmen Ayuso, Presidenta de la Sociedad Española de Radiología Médica, que por causa de compromisos previos no nos ha podido acompañar en este evento. Como acaban de anunciar en la presentación del acto tanto la Dra. Elena 38 Ginés Madrid. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 Miravalles como el Dr. Diego Falcón, en representación de la Fundación Signo, este Punto de Encuentro es una actividad previa a la publicación de un nuevo monográfico de la revista de la Fundación, dedicado al ámbito de la Radiología y previsto para el segundo trimestre de 2013. La Fundación Signo tiene una vinculación antigua e intensa con la Radiología, ya que buena parte de las herramientas de gestión que utilizamos actualmente (manuales de gestión, catálogos de pruebas, UVR, modelos de acreditación y certificación, etc.) tienen su origen allá por el año 1992, en el proyecto Signo que, liderado desde el Ministerio de Sanidad y con la participación de un buen número de profesionales radiólogos, fue el precedente de la actual Fundación. Vamos a comenzar, por tanto, este Punto de Encuentro planteando una triple y genérica cuestión: ¿De dónde venimos? ¿Dónde estamos? ¿Hacia dónde vamos? Me parece relevante que hagamos un breve repaso sobre el estado de salud o diagnóstico integral de nuestra especialidad. Y aprovechando que está con nosotros el Dr. Miguel Ángel Trapero, que está participando en un proyecto de benchmarking a nivel nacional, le pedimos la primera opinión al respecto. Creo que todos coincidiremos en que la posición de los Servicios de Radiología y la Radiología en general ha sufrido una transformación espectacular desde hace bastante tiempo, pero más acentuada en los últimos años, de tal manera que creo que en España y en el resto de los países la Radiología ocupa una posición central en el diagnóstico mínimo Miguel Ángel Trapero Miguel Ángel Trapero. Pablo Valdés. Algunas claves para la Radiología del futuro M. Á. Trapero: Creo que todos coincidiremos en que la posición de los Servicios de Radiología y de la Radiología en general ha sufrido una transformación espectacular desde hace bastante tiempo, pero más acentuada en los últimos años, de tal manera que creo que en España y en el resto de los países la Radiología ocupa una posición central en el diagnóstico mínimo. Esto se prueba con datos y encuestas que se han realizado, como una que se hizo a un número importante de internistas norteamericanos, en la que se les preguntaba por los diez avances principales para el cuidado de sus enfermos en los últimos 25 años, en la que colocaron en primer lugar la tomografía axial computarizada (TAC) y la resonancia. Hay algún otro artículo europeo que reseña muy bien que la Radiología contribuye prácticamente al 70% de los diagnósticos que se hacen en un hospital. Además, en el plan estratégico que hemos elaborado para la comunidad se dice que al 70% de los pacientes que pasan por Urgencias se les hace una prueba de imagen y que a todo paciente hospitalizado se le hacen alrededor de 1,4 pruebas ra- diológicas. Por tanto, es innegable que los Servicios de Radiología ocupan una posición bastante central en el diagnóstico médico. Punto de encuentro P. Valdés: Incidiendo en el tema, la Radiología está valorada por la población en general. En Inglaterra se hizo una encuesta a los visitantes del Museo de la Ciencia, y la máquina de rayos x fue la mejor valorada, incluso por encima de la penicilina. En un instituto norteamericano se hizo también una encuesta de los hitos técnicos de todo el siglo XX y el puesto número 14 lo ocupó la imagen médica. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 39 Algunas claves para la Radiología del futuro A pesar de tener uno de los productos médicos mejor valorados por la población, los radiólogos somos los grandes desconocidos de la Medicina Pablo Valdés Por tanto, el público valora la Radiología, otra cosa es que luego valore al radiólogo. A pesar de tener uno de los productos médicos mejor valorados por la población, los radiólogos somos los grandes desconocidos de la Medicina. L. Martí-Bonmatí: Quería incidir en dos cosas. Una es la tecnología y la adquisición de imágenes, porque la importancia de las imágenes es indiscutible. La otra es que los especialistas en imagen son los interlocutores o los garantes de la calidad de ese proceso. No sabemos si será responsabilidad de los radiólogos encontrar nuestro futuro en este modelo sanitario. Punto de encuentro M. Guerrero: Hoy día los avances de la Medicina y de la práctica clínica no se pueden entender sin la Radiología. 40 Lluís Martí-Bonmatí. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 Si incorporamos la Radiología a la Neurorradiología, la Radiología intervencionista o la Radiología musculoesquelética, estamos poniendo fronteras en áreas de conocimiento clínico y rompiendo la transversalidad que nos hace eficaces a la hora de transmitir la información: sería un gran error Luis Martí-Bonmatí La Radiología es un servicio esencial para la prestación de los servicios sanitarios, pero los radiólogos no han sabido posicionar ese liderazgo de conocimiento frente al resto de la organización. Pero a la vez, en nuestro entorno estamos viviendo una seducción por la tecnología y la sociedad asocia la tecnología al éxito, y esto tiene una parte positiva y otra negativa. La parte positiva es el posicionamiento que ello supone para los radiólogos en el entorno hospitalario. La parte negativa es se identifique a los radiólogos como técnicos que hacen funcionar las máquinas, y este concepto está muy implantado en la sociedad, en los pacientes e incluso dentro del entorno sanitario. Todavía no está asumido ese cambio, por parte de algunos clínicos, para que no vean los Servicios de Radiología como los “servicios de las máquinas”. M. Á. Trapero: Creo que eso ha cambiado también en los últimos años. Es verdad que hace unos años el radiólogo estaba manejando máquinas y realizando informes, pero creo que esa situación ha cambiado de una forma sustancial, al menos en el entorno en el que yo me muevo. Cada vez se nos requiere más para fijar la indicación y para consultarnos cuál es la modalidad adecuada, porque la Radiología se ha convertido en algo muy complejo y es difícil saber cuál es la prueba que más puede ayudar en el diagnós- C. Martínez: En relación con lo que decía Luis, creo que tenemos dos retos en la actualidad. Lo cierto es que en los momentos más difíciles es en los que se ha innovado más en cuanto a la gestión y este es uno de ellos. Por tanto, tenemos dos retos. El primero es en la gestión administrativa de los Servicios de Radiología, que debe estar basada en la eficiencia, dándonos cuenta de las bolsas de ineficiencia que existen. El segundo está más encaminado a la Radiología clínica, porque probablemente el futuro no es del radiólogo; al menos toda la imagen no. Por tanto, si la imagen no va a ser Carmen Martínez. exclusivamente del radiólogo, de hecho ya no lo es, nosotros tenemos que posicionarnos en la figura del radiólogo clínico y ahí es donde entran los nuevos retos organizativos, basados más en áreas de gestión clínica. Quizás es el momento de que el radiólogo se posicione de nuevo en formar estas áreas de gestión clínica con las otras especialidades. Algunas claves para la Radiología del futuro En los últimos años se ha ido produciendo un acercamiento entre radiólogos y clínicos, y ya los radiólogos no aportamos meramente la imagen o el informe, sino que en muchas cosas se nos considera asesores o interlocutores en la globalidad del proceso. Si la imagen no va a ser exclusivamente del radiólogo, de hecho ya no lo es, nosotros nos tenemos que posicionar en la figura del radiólogo clínico y ahí es donde entran los nuevos retos organizativos, basados más en áreas de gestión clínica Carmen Martínez P. Valdés: Cuando nos conocen a los radiólogos, nos valoran, eso está claro; el problema es que seguimos siendo desconocidos. La mayoría de los pacientes todavía piensa que solo somos técnicos. Sigue habiendo un gran desconocimiento con respecto al tema. Tendríamos que buscar una manera de promocionar la Radiología, porque muchas veces en los medios ni aparecemos. Por tanto, cuando nos conocen, tanto clínicos como pacientes, nos valoran mucho, pero seguimos siendo los grandes desconocidos. I. Ayerdi: Quería señalar el impacto que puede tener el propio éxito de la especialidad. Hay voces que se están levantando, cada vez más críticas, sobre este tema. En Estados Unidos se hizo un estudio que hablaba del número de pruebas de imagen por habitante, que había alcanzado un 4,1, frente al uno y pico que hay en Europa, y hay gente que cuestiona si es necesario llegar a esos niveles. Como estamos en una situación de crisis, hay Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 Punto de encuentro tico. Por tanto, los radiólogos tenemos cada vez más consultas y más presencia en comités de todo tipo para analizar las patologías de los pacientes y para exprimir el diagnóstico. 41 Algunas claves para la Radiología del futuro Es importante saber que cada vez hacemos menos medicina sintomática y más presintomática, porque hay lesiones que tienen tratamiento eficaz cuando todavía no han mostrado síntomas, por lo que tenemos que utilizar aquellas técnicas que permiten el diagnóstico antes de los síntomas Luis Martí-Bonmatí Ignacio Ayerdi. Punto de encuentro gente que se pregunta si realmente la tecnología está aportando a la salud del paciente el coste que lleva asociado. 42 G. Madrid: Vamos a pasar al segundo bloque de cuestiones, aunque algunos asuntos ya se han venido apuntando en esta primera ronda. En cuanto a los retos organizativos, se ha hablado de la evolución que han experimentado los Servicios de Radiología a lo largo de los últimos años. No obstante, se barruntan nuevos y necesarios cambios, que unidos a una carencia crónica de profesionales radiólogos, que no entiende de fronteras, suscita las siguientes cuestiones: ¿Serán útiles las actuales organizaciones o se precisarán nuevas fórmulas? ¿Está en entredicho el papel actual de la Radiología? ¿Estamos preparados para afrontar nuevos retos organizativos? ¿Cómo podríamos conseguir el merecido reconocimiento a nuestro papel en la Medicina actual? M. Guerrero: Creo que en la Radiología y en el resto de las especialidades médicas hay una confusión al tratar de identificar la formación, la especialiGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 dad, el servicio médico y la prestación de la asistencia. Una cuestión es el conocimiento y la formación para tener ese conocimiento, que se hace a través de la vía MIR, y otra cuestión es la prestación de servicios; hemos asumido que ambas cuestiones están centradas y superpuestas o que incluso son lo mismo. Hoy día, la aparición de los pacientes con patologías crónicas y pluripatológicos nos enseña que el conocimiento y la prestación de los servicios sanitarios son dos cosas diferentes. Por tanto, el conocimiento se tiene que seguir haciendo como hasta ahora y mejorándolo, pero las especialidades no tienen por qué coincidir con los servicios clínicos en el modelo clásico. Otra cuestión es que en el futuro quizá no habrá Servicios de Radiología con la concepción actual, sino que habrá otras organizaciones, más inmersas y centradas en los procesos clínicos, y las necesidades de los pacientes. Serán equipos multidisciplinares y con ellos rompamos la estructura de prestación de servicios y trabajemos a través de grandes áreas clínicas, dependiendo de las necesidades de los pacientes. Creo que esa es la idea que ronda en cuanto a las reformas estructurales de los sistemas nacionales de salud. E. Fraile: Estoy solo parcialmente de acuerdo contigo. En las intervenciones anteriores ha quedado claro que to- dos sentimos que vivimos un buen momento en la Radiología y que su papel es cada vez más importante. Pienso que este puede ser uno de los motivos del riesgo de la desaparición de la profesión. El gran reto es si somos capaces de adaptarnos a lo que nos pide el paciente y la sociedad, y yo estoy convencido de que sí somos capaces, porque tenemos el conocimiento y prestamos el servicio, pero a lo mejor hay que reorientar cómo se presta ese servicio. No me cabe ninguna duda de que los radiólogos vamos a ser capaces de adaptarnos al futuro. Quería apuntar que probablemente la compra de la tecnología o la innovación de la tecnología no va a ir en función de la demanda ni de lo que quiera el paciente, sino en función de lo que es capaz de innovar la propia tecnología en sí; es decir, muchas veces se introducen tecnologías que no están suficientemente maduras o cuyas aportaciones al proceso clínico están en duda y eso tiene que cambiar Eduardo Fraile L. Martí-Bonmatí: Me gustaría hacer dos observaciones. Una es con respecto al número de exploraciones. Es importante saber que cada vez hacemos menos Medicina sintomática y más presintomática, porque hay lesiones que tienen tratamiento eficaz cuando todavía no han mostrado síntomas, Punto de encuentro Eduardo Fraile. M. Guerrero: Creo que estamos todos de acuerdo, aunque tú lo has expresado de una forma más concreta. Pienso que al modelo actual del Servicio de Radiología aislado o separado del servicio clínico le queda poco tiempo. Algunas claves para la Radiología del futuro Los Departamentos de Radiología están cambiando y cada vez se incorporan a ellos más profesionales de otras áreas de conocimiento, como físicos, informáticos, ingenieros, biólogos… Este es el Servicio de Radiología del futuro, sin duda, y tenemos que saber adaptarnos a él. Lo peor que nos puede pasar es que nos creamos que somos los únicos capaces de dar el servicio y el conocimiento, pero estoy convencido de que la gran mayoría de radiólogos no piensa así. Mariano Guerrero. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 43 Algunas claves para la Radiología del futuro Punto de encuentro 44 La cuestión es que en el futuro a lo mejor no habrá servicios de Radiología, sino que habrá otras organizaciones, inmersas en los procesos clínicos, cuando los hospitales ya no se organicen en servicios, sino en razón a las necesidades de los pacientes Mariano Guerrero por lo que tenemos que utilizar aquellas técnicas que permiten el diagnóstico antes de los síntomas. Por eso la imagen médica es tan importante. El segundo comentario es que el mismo miedo que tenemos los radiólogos hacia nuestra especialidad, lo tienen todos los médicos en la suya, y eso es así porque el paradigma de la Medicina está cambiando. Será responsabilidad nuestra adivinar hacia dónde cambian esos paradigmas y ajustarnos a ellos; creo que la gran mayoría de los servicios líderes de este país están haciendo esto. Ese ajuste pasa por reconocer que la imagen única no puede pasar por fragmentarse y, si se fragmenta en áreas de conocimiento, pierde su gran potencial, que es el conocimiento transversal de lo que la gestión, la calidad y la información de la imagen aportan. Si incorporamos la Radiología a la Neurorradiología, a la Radiología intervencionista o a la Radiología musculoesquelética, estamos poniendo fronteras en áreas de conocimiento clínico y rompiendo la transversalidad que nos hace eficaces a la hora de transmitir la información; sería un gran error. Afortunadamente, cada vez hacen falta más radiólogos, porque se hacen más exploraciones, y que estén más involucrados en el sujeto y no en el paciente, actuando antes de que la persona sea paciente. Además, cada vez es más importante que el conocimienGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 to de los radiólogos sea muy transversal, para integrar esa información con el resto de especialidades. M. Á. Trapero: Creo que todos los Servicios de Radiología, o la mayoría, están evolucionando al ritmo de Europa. Los radiólogos trabajan ya con cardiólogos, anestesistas, etc. En realidad, los servicios se han convertido en un sitio de encuentro de diferentes especialidades, donde manejamos la imagen en conjunto y nos acercamos mucho mejor a la patología y al diagnóstico del paciente. Lo que más me preocupa es la situación económica en la que nos encontramos y en la que nos vamos a encontrar. Creo que el motor de los cambios que van a sufrir los Servicios de Radiología está y va a estar en la contención del gasto sanitario. Hay datos que reflejan esto, como que de 2002 a 2009 el gasto sanitario por habitante creció un 62%, mientras que el producto interior bruto creció alrededor de un 15%, por lo que el gasto sanitario está creciendo muy por encima de la riqueza del país. Esto ha provocado que en la Comunidad de Madrid, a pesar de tener 20 hospitales, construyamos otros diez más en los últimos años a un ritmo difícil de sostener. Otro dato relevante es que en Madrid el número de resonancias al año se ha multiplicado por tres en los últimos años o que la TAC ha aumentado un 60%. Tenemos que pensar que al final la contención En los últimos años se ha ido produciendo un acercamiento entre radiólogos y clínicos, y ya los radiólogos no aportamos meramente la imagen o el informe, sino que en muchas cosas se nos considera asesores o interlocutores en la globalidad del proceso Miguel Ángel Trapero Me parece que también tenemos un papel muy importante que jugar en generar una mayor implicación del resto de los clínicos en la contención del gasto, con la responsabilidad a la hora de pedir exploraciones, porque al final somos los médicos los que generamos la mayoría del gasto sanitario. En este país, es imposible la reducción del gasto si no es con la colaboración de los médicos y con la conciencia de que hay muchas cosas innecesarias en toda la Medicina. Si hacemos caso al Fondo Monetario Internacional, que nos dice que en los próximos años nuestra economía solo va a crecer un 1,7% de media, sabemos que nuestro futuro no pasa por seguir aumentando el gasto sanitario. C. Martínez: En cuanto a lo que se refería Luis sobre evitar departamentos estancos, hay un concepto que me gusta mucho, que es el de sincronización de procesos. Los radiólogos estamos en una de las mejores posiciones para poder efectuar la sincronización de procesos, tanto en el propio hospital como en la integración con Atención Primaria. Otra cosa que quería comentar es que, a nivel de costes, parece que todas las Gerencias están muy orientadas últimamente a reducir costes directos, como la Radiología, cuando a P. Valdés: El problema de la Radiología, en toda Europa, es que los equipos se compran y cualquiera puede hacer, por ejemplo, una ecografía, pero no tiene los mismos conocimientos que un radiólogo, por lo que no temo competir con otro profesional. El tema está en que se definan competencias para la seguridad del paciente y todo el mundo debería implicarse en esto. Algunas claves para la Radiología del futuro Creo que es muy difícil que nos aumenten el número de radiólogos en el futuro, porque la demanda ya es muy importante. Tendremos que reevaluar los servicios, dedicando a los radiólogos a los temas de valor clínico añadido y delegando en técnicos y otro personal las labores repetitivas, como ya pasa mucho en Europa. lo mejor tendríamos que incidir en costes indirectos, como la adecuación de las pruebas que se indican. C. Martínez: Es verdad que no nos importa competir con otras especialidades, porque hay especialistas que pueden leer bien determinadas pruebas, pero creo que los que las gestionamos mejor somos los radiólogos y ahí está nuestro valor importante. P. Valdés: Lo importante del radiólogo no es hacer mejor informe o mejor imagen, sino gestionar bien todo el proceso. Las máquinas y los sistemas de acceso van a ser cada vez mejores, pero lo que nos hace imprescindibles es gestionar ese proceso de principio a fin para mejorar la calidad y la seguridad del paciente. I. Ayerdi: En cuanto al número de pruebas que se realizan, creo que es muy difícil saber qué es lo adecuado, pero siempre es recomendable manejar este dato con precaución. Por otro lado, creo que en las últimas décadas ha habido un énfasis en establecer indicadores de eficiencia equívocos, como por ejemplo la lista de espera, índices de actividad y no tanto resultados en salud. Con frecuencia se confunde la política sanitaria con hacer política con la sanidad, lo que induce a prioridades erróneas. Quizás haya que hacer menos pruebas, mejor indicadas, con más calidad y, al final, aunque aumente el coste por prueba, el beneficio para el sistema será mayor. Punto de encuentro de costes nos va a hacer reconsiderar muchas cosas que estábamos haciendo y nos va a marcar un escenario completamente diferente. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 45 Algunas claves para la Radiología del futuro En el tema de la transversalidad, los radiólogos tienen que agradecer a la industria un par de cosas: en una equivocación y en una enorme ineficiencia incluso como imperativo ético. – Los equipos de imagen, desde su origen, por su tamaño y requerimientos de instalación/protección, estimularon la creación de Servicios Centrales. Creo que no podemos seguir haciendo más y más exploraciones y pruebas y seguir con los actuales indicadores de producción. En el momento en que seamos capaces de hacer equipos multidisciplinares, en los que trabajen los radiólogos junto con otros expertos clínicos, se resolverá la discusión de quién lo hace mejor: lo hacen juntos. Todo especialista que tenga que participar en el proceso tiene que ser capaz de hacerle al paciente lo que necesita y solo lo que necesita. Los propios pacientes piden que les hagan lo que les tengan que hacer exclusivamente. Esa idea no la hemos tenido en la cabeza los especialistas, lo que ha provocado que gran parte de lo que se hace no aporte beneficio para la salud y haya importantes duplicidades de exploraciones en la cadena diagnóstica. – Las recientes innovaciones de la industria, promoviendo la imagen híbrida, van a favorecer todavía más la transversalidad, porque son innovaciones costosas y multidisciplinares que van a necesitar un colectivo de profesionales que las gestione de manera más eficiente. Punto de encuentro L. Martí-Bonmatí: Estoy de acuerdo en que la cantidad no es importante para nada, sino que lo que es relevante es el valor de lo que hacemos, y con lo que tenemos una responsabilidad los gestores de la imagen es con definir qué entendemos por valor, qué es lo que puede introducir diversidad y valores de calidad. Con esta definición nos vamos a olvidar de la cantidad, que no dice absolutamente nada. Hay que definir el valor de lo que hacemos y cuáles son los parámetros del valor que ofrecemos al sistema. M. Guerrero: Una de las perversidades del sector sanitario, durante los últimos 30 años, ha sido centrarse en la producción de servicios sanitarios como objetivo de mejora e incluso de una mal entendida eficiencia. Si somos capaces de reconducir esta situación y de que el valor esté en la producción de la satisfacción y la salud percibida o normativa que genera la intervención sanitaria y no en razón a la producción, tendremos otros los indicadores. No hay que hablar ya tanto de producción de servicios sanitarios, sino que hay que hablar más de salud. Si producimos muchos servicios sanitarios y no producimos salud, estamos 46 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 G. Madrid: Vamos a pasar al tercer grupo de cuestiones, relacionadas con los nuevos desafíos tecnológicos. Ya se ha apuntado algo de lo que podemos esperar en cuanto al desarrollo de nuevas tecnologías pero, quizás, convendría incidir más en ello. En relación con lo anterior hay un aspecto del que me gustaría conocer vuestra opinión, que es la financiación de la tecnología. Hasta ahora hemos dispuesto de la clásica fórmula del Plan de Necesidades, que ha cumplido adecuadamente su función pero que no es la solución actual para los nuevos requerimientos. Las cosas han cambiado y ahora disponemos de nuevas normativas que regulan los concursos de otra forma. También legislación específica sobre colaboración público-privada y, además de todo ello, existe otro condicionante cada vez más presente que es la rrollo: hay que trabajar juntos. Hay que promover la colaboración público-privada entre empresas del sector tecnológico y modelos sanitarios. Todos querríamos estar en un centro donde tuviéramos a los ingenieros y empresas con los que tuviéramos convenios tecnológicos a tres minutos. obsolescencia tecnológica. Con respecto a todo esto, ¿cuál es vuestra opinión? ¿Cómo pensáis que se va a orientar el reto de la actualización y adquisición de nueva tecnología en el futuro?, ¿cómo se percibe la adquisición de tecnología desde los grupos profesionales?, ¿quién debe ostentar el liderazgo tecnológico, el sector público, privado o compartido? C. Martínez: La cuestión es si nos quedamos en la colaboración sociotecnológica, o si ya hacemos el paso a la gestión de colaboración asistencial, y ahí es donde hay más problemas. En nuestro país esto es muy nuevo y hay que estar un poco a la expectativa. L. Martí-Bonmatí: Creo que el liderazgo tecnológico tiene que ejercerlo quiEn lo conoce, que son las empresas tecnológicas, probablemente con el apoyo y la colaboración de las universidades tecnológicas y politécnicas, porque ahí es donde está el conocimiento. Para que la medicina y los especialistas de imagen no tengamos una brecha en el conocimiento de lo que la tecnología puede ofrecer, no queda más remedio que hacer iniciativas conjuntas de colaboración y desa- I. Ayerdi: La colaboración públicoprivada, como se planteó en Inglaterra, es fundamentalmente una colaboración para la construcción de hospitales, y para gestionar los servicios no médicos, lo que se sale un poco del marco de este foro. Voy a referirme a la parte de incorporación a la tecnología porque, si no, hablamos de cosas diferentes. Estamos en una situación de crisis económica, la industria va a seguir innovando, porque es una de nuestras misiones y porque ahora mismo hay más gente trabajando en innovación tecnológica que en toda la historia de la humanidad. Ahora bien, la industria tiene también su responsabilidad, porque es un agente del sistema, en cómo orientar su innovación. Tiene que hacer innovación que tenga sentido para el sistema, no innovar por innovar. Hay que buscar innovaciones que aporten valor al sistema. El siguiente problema es cómo se incorporan estas innovaciones de manera que el sistema sea sostenible. Ante este reto, las fórmulas de contratación del concurso tradicional no me parecen adecuadas, porque son muy rígidas, sobre todo cuando se trata de proyectos de envergadura. Existe una alternativa, el diálogo competitivo, que es una figura a mi juicio Punto de encuentro C. Martínez: Creo que estas nuevas fórmulas de gestión compartida no son buenas ni malas, sino que hay que valorarlas y analizar los datos en su momento. Sin embargo, por las experiencias de otros países, creo que existen riesgos que habría que valorar. Por ejemplo, Inglaterra es de los países con más experiencia en colaboraciones y en un trabajo de 2011 concluía que estos contratos tipo CPP, o PPP, casi siempre se encarecían más de lo que un principio habían previsto las Administraciones públicas. Algunas claves para la Radiología del futuro En cuanto a la figura del socio tecnológico, es evidente que en nuestro medio no ha calado excesivamente, sigue siendo una relación de proveedor-cliente Ginés Madrid Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 47 Algunas claves para la Radiología del futuro Punto de encuentro 48 más adecuada. Sin embargo, en mi experiencia su puesta en marcha es mejorable, en la mayoría de los casos es prácticamente un monólogo. El diálogo tiene sentido si al final ambas partes se respetan y se hace una alianza entre iguales. Salvo excepciones, no ha funcionado todo lo bien que podía porque hay mucha desconfianza y falta transparencia. M. Guerrero: Creo que el diálogo competitivo es un paso hacia otro escenario, que cambia el sistema de compra y se comparten riesgos. Nosotros apostamos por la financiación capitativa como sistema más equitativo y justo, porque elimina los sesgos de la financiación por producción. Si las comunidades autónomas, que son las que tienen la responsabilidad de la prestación de los servicios sanitarios, se financian capitativamente, no entiendo por qué el resto de servicios no se financian así. El paso siguiente será la financiación capitativa de los subproductos que se pueden identificar dentro de la prestación sanitaria, por lo que habrá una cápita oncológica, neurológica, radiológica, etc. Creo que ese es el camino en el que nos tenemos que dirigir, pero hay que hacerlo con mucha prudencia y con la colaboración de los que más saben de esto. Tenemos que entender que, tal y como estamos, no se va a comprar más tecnología porque no hay dinero. En este momento, el endeudamiento de los que tienen que comprar tecnología es de tal calibre que no va a poder ocurrir; por tanto, hay que buscar la fórmula más adecuada. Aquellos que lo puedan resolver a través de un diálogo competitivo, tendrán suerte, pero en otros sitios habrá que buscar una colaboración de otro tipo, público-privada e inclusive compartir riesgos. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 Además, ahora mismo me parece que no hay que comprar tecnología, sino comprar servicios y establecer áreas ágiles con riesgos compartidos. Hay que empezar a mentalizarse de esto y cambiar los estereotipos de los concursos, que son un tema del pasado y que no van a volver a ocurrir. Ahí los radiólogos son los que tienen que dar las claves de cómo se va a adquirir esta tecnología. E. Fraile: Quería apuntar que probablemente la compra de la tecnología o la innovación de la tecnología no va a ir en función de la demanda ni de lo que quiera el paciente, sino en función de lo que es capaz de innovar la propia tecnología en sí; es decir, muchas veces se introducen tecnologías que no están suficientemente maduras o cuyas aportaciones al proceso clínico están en duda y eso tiene que cambiar. Deberíamos adquirir la tecnología en función de las patologías y qué tecnologías te las solucionan. Por eso, tenemos que cambiar el paradigma de la compra pública o privada, dependiendo de los equipos que se necesiten. Creo que la introducción de la tecnología será mayor a medida que aporte realmente valor al proceso patológico que estemos valorando. En cuanto a eso, también veremos cómo la innovación de una tecnología es capaz de suplementar a otra o añadirse a otra. Si hacemos varias pruebas innecesarias para la misma patología, no hay economía que lo soporte. Por eso, la tecnología tiene que ser capaz de suplementar o suprimir otras técnicas que no sean eficaces, lo que aporta valor tanto al paciente como a la economía. L. Martí-Bonmatí: No sé qué tipo de modelo será el que hay que poner, pero sí tengo claro que la situación “yo compro y tú vendes” ha desapare- M. Á. Trapero: Quería hacer referencia no solamente a la incorporación de nueva tecnología, sino al día a día, que es la reposición de lo que tenemos. En los últimos años no hay inversión y cada vez va a ser más difícil. Cada vez hay más equipos de más años y nos empezamos a encontrar equipos fuera de lo que consideramos óptimo, porque no hemos sabido encontrar una vida útil razonable para cada equipo que nos diera una seguridad jurídica. Creo que poder hacer planes de renovación razonables para cada equipo exige tener una cierta certeza de cuánto es el tiempo aproximado de reposición. En segundo lugar, soy consciente de que con el dinero que hay la incorporación de nueva tecnología se va a hacer cuando se haga la reposición de la máquina ya sin remedio, a no ser que aparezcan nuevas modalidades que ofrezcan cosas diferentes que yo no tenga, pero es raro. En los tiempos futuros, no creo que haya perspectiva de aumentar el equipamiento como ha ocurrido en los años anteriores; lo que me preocupa es asegurarme la renovación de aparatos en unas condiciones razonables, que permitan la incorporación de innovaciones. M. Guerrero: El tema del socio tecnológico se tiene que entender en un nuevo modelo de relación. Si pretendemos tener el socio tecnológico y seguir evaluando el modelo sanitario de una forma cuantitativa, basada fundamentalmente en la producción, nunca veremos a este socio como tal, sino como alguien que te vende bienes. Por tanto, para que se produzca la auténtica figura del socio tecnológico, que es el que asume riesgos contigo, no podemos basar la calidad del sistema sanitario en la producción, sino en el valor que aporta, que es la salud. Algunas claves para la Radiología del futuro Apuntando a lo que decía Eduardo, ahora mismo es muy difícil hacer una evaluación de la eficacia de la tecnología si queremos usar herramientas de Medicina basada en la Evidencia, porque no tenemos suficiente capacidad. Por tanto, podemos actuar desde el conservadurismo, en el que no vamos a dar un paso hasta que no tengamos suficientes datos, o desde la innovación y la estrategia, que es lo que yo creo y para eso la colaboración empresarial es crítica. G. Madrid: En cuanto a la figura del socio tecnológico, que, por cierto, es evidente que en nuestro medio no ha calado suficientemente, ya que aún a pesar de los diferentes proyectos de colaboración público-privado iniciados en nuestro país en los últimos años, seguimos manteniendo una relación tradicional proveedor-cliente, ¿cuál es vuestra opinión? No tenemos que inventarnos el indicador de valor, que es la salud, sino que tenemos que investigar cómo desarrollar este indicador, en términos de eficacia, de salud percibida y de seguridad de los pacientes. Ya hay herramientas buenas que no estamos usando. I. Ayerdi: Suscribo totalmente que hay una falta de documentación en cuanto a la innovación y su valor. Sin embargo, quiero resaltar que hay un estudio de Oeppen & Vaupen, publicado en Science en 2002, que constata que la longevidad ha aumentado en seis horas/día en los últimos 170 años y manifiesta que en los últimos 15 o 20 años, quien mantiene el crecimiento de la esperanza de vida es la tecnología. Respecto a la obsolescencia hay que distinguir entre obsolescencia técnica y tecnológica. La industria garantiza, Punto de encuentro cido si queremos que esto tenga continuidad. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 49 Algunas claves para la Radiología del futuro en términos generales, repuestos por un periodo mínimo de diez años, hoy en día la informática juega un papel clave como componente de muchos equipos, y en general, por su rápido ciclo de innovación, es el elemento limitador para extender ese periodo. Creo que diez años es una vida útil razonable. El problema está en la obsolescencia tecnológica, porque ahora en dos o tres años un equipo es tecnológicamente obsoleto. La fórmula que tenemos que explorar es cómo se pueden actualizar los equipos sin gastar una fortuna. P. Valdés: Creo que el problema es la rigidez de normativa y la visión de los gestores políticos, porque ahora mismo es muy difícil que convenzas a un gerente para que tenga una visión de socio tecnológico. Ahora mismo, lo que prima es el precio y al final coges la peor tecnología simplemente porque resulta más barato. Punto de encuentro Creo que no hay una adecuación real de la tecnología que necesita un centro a lo que se le da. Tristemente, pienso que eso irá ahora a más por la crisis, lo que es una pena, porque estamos invirtiendo mucho dinero en equipos que no son adecuados a lo que se necesita. 50 G. Madrid: El próximo bloque se refiere a formación, universidad e investigación. En cuanto a la formación, parece que los avances tecnológicos de los últimos años han puesto de manifiesto la necesidad de cambios en el perfil formativo de los profesionales. Por eso, os planteo: ¿Son suficientes los actuales programas de los médicos Lo importante del radiólogo no es hacer mejor informe o mejor imagen, sino gestionar bien todo el proceso Pablo Valdés Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 residentes en Radiología, tanto desde el punto de vista cualitativo como cuantitativo, para afrontar los retos tecnológicos del futuro? ¿Cómo puede afectar el previsible modelo de troncalidad, diseñado por el Ministerio de Sanidad y Consumo? La presencia e influencia de la Radiología en la Medicina moderna no tiene la correspondiente correlación con su actual papel en la Universidad, como asignatura estructurada e impartida por profesionales acreditados en la materia. ¿Qué pensáis acerca de las causas de este fenómeno? ¿Puede deberse a resistencias corporativas por parte de la Universidad o a la escasez de vocaciones para la carrera universitaria de los médicos radiólogos? En cuanto a la investigación, es evidente que la Radiología no está representada de manera merecida en nuestro país. ¿Creéis que es suficiente la formación profesional en metodología para la investigación que reciben los radiólogos? ¿O si quizás podría deberse a un excesivo aislamiento y a cierta reticencia para el trabajo en equipo? ¿Se percibe suficiente liderazgo en este aspecto por parte de la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM)? L. Martí-Bonmatí: Con respecto a investigación, creo que va a haber una reducción de recursos y de la gratificación de la investigación. Además, los radiólogos tienen dificultad para acceder a la investigación por exceso de trabajo clínico. Eso va a implicar que haya una concentración de centros donde se pueda hacer una investigación de calidad. Creo que todo el mundo debe hacer investigación clínica asistencial o investigación para cambiar modelos de flujos de trabajo. Esa investigación debería ser obligatoria. Los radiólogos estamos en una de las mejores posiciones para poder efectuar la sincronización de procesos, tanto en el propio hospital como en la integración con atención primaria Carmen Martínez C. Martínez: Creo que hay que cambiar la cultura, sobre todo los profesionales que están en los hospitales medios y pequeños. Parece que la investigación tiene que estar siempre relacionada con la tecnología y con la alta tecnología, pero hay una gran cantidad de investigación que se puede hacer orientada al paciente y que no es costosa. Hay que incidir en eso en las mentalidades de los profesionales, porque creen que eso no es investigación. M. Guerrero: Hay que revisar cómo se enseña la Radiología en las facultades de Medicina, porque ese es un problema sin resolver. Creo que uno de los mayores avances en nuestro país ha sido el crecimiento tecnológico y el conocimiento que han tenido los radiólogos. Sin embargo, queda sin resolver la cuestión de cómo explican la Radiología en las universidades. Las posibilidades de reforma que conocemos a día de hoy en relación con la troncalidad dicen que sería bueno entroncar la Radiología con la Medicina nuclear, pero igualmente con una Creo que, maliciosamente, tenemos unida la investigación a la alta tecnología. Creo que hay una investigación, que será el paradigma de la investigación en tiempo de crisis, que es la investigación sobre la indicación clínica, evaluando la gestión de la indicación clínica, y no hay ningún clínico que esté incapacitado para hacerla. El gran reto actual en el entorno europeo está en torno a la indicación clínica, porque muchos nos empeñamos en hacer eficientemente lo que hacemos y producimos, pero el paso previo a la producción es la indicación. Si fuéramos capaces de hacer solo lo que está indicado, probablemente no tendríamos que ser tan eficientes en lo que producimos. En referencia a las especialidades, creo que teóricamente debemos juntar muchas especialidades, porque Punto de encuentro E. Fraile: En cuanto a los planes de formación actuales de nuestro país, tienen un periodo de especialización de cuatro años, que es claramente insuficiente. Creo que somos uno de los pocos países europeos que contempla un periodo de especialización en diagnóstico por imagen de solo cuatro años. Desde las Unidades de Radiología, se ha insistido en que es imprescindible que la formación del radiólogo tenga una duración de cinco años como mínimo. duración mínima de cinco años. Dentro de la asociación, se ha llegado a plantear la creación de una nueva superespecialidad que una a ambas especialidades, porque son más los puntos que nos acercan a los que nos separan. Esto parece que será el futuro del diagnóstico por imagen. Algunas claves para la Radiología del futuro Con respecto a la Universidad, creo que cada vez hay más radiólogos y más carga docente relacionada con la Radiología. Las universidades son lentas en asumir los cambios en los procesos sociales, pero ahora mismo estamos en el proceso en el que la presencia de la Radiología está creciendo. Creo que es necesario que reconozcamos que eso requiere un esfuerzo, una modificación de las pautas, un trabajo extra y una voluntad por parte de los radiólogos para poner en práctica estas iniciativas. Pienso que tanto en investigación como en formación, nuestro reto es tomárnoslo en serio. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 51 Algunas claves para la Radiología del futuro probablemente estemos separando mucho los conocimientos. Pienso que hay que apostar claramente por las capacitaciones específicas, y es hacia donde tienen que ir los profesionales, porque están relacionadas con los conocimientos que van adquiriendo a lo largo de su propia carrera profesional. Lo veo como una especie de pasos que uno va realizando en razón al conocimiento, la capacidad, el esfuerzo, etc. M. Á. Trapero: Creo que la visibilidad del radiólogo se empieza a gestar en cómo tratemos las asignaturas en la universidad. Pienso que el tema ha cambiado, al menos en las nuevas universidades. En el examen MIR empiezan a aparecer muchas preguntas de imagen y eso moviliza a las nuevas universidades, que saben que tienen que manejarse con la Radiología. Punto de encuentro También hemos cambiado el sistema, que es un sistema de aprender casos fundamentalmente, con muchas prácticas y muchos seminarios, donde se implica mucho a los alumnos. Creo que eso cambia la percepción de todos los alumnos de Radiología, porque es una asignatura muy gráfica y práctica. Sin embargo, hay más cosas que hacer, como incentivar que prácticamente todos nuestros residentes acaben con el doctorado y que nuestros adjuntos den clases en la universidad y se impliquen en ella. 52 Con respecto a la investigación, al 90% de radiólogos nos toca la investigación de validez de pruebas diagnósticas, porque no hay suficiente evidencia muchas veces sobre la validez de una prueba. Hay mucho que hacer. Nosotros hemos propuesto que se constituya un organismo autónomo que permita a todos los hospitales de la comunidad estar interconectados para hacer esta investigación. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 P. Valdés: Los estudiantes que empiezan el MIR tienen claro que tienen que estudiar evidencia y que tienen que hacer una tesis doctoral. Para los radiólogos, faltan las herramientas básicas para hacerlo. Los radiólogos tienen que crecer en conocimientos, pero a veces en casi imposible porque cada vez ejercen más labor asistencial. Investigar es un esfuerzo añadido, en las horas libres que tienes. C. Martínez: Me gustaría introducir los sistemas de información. En relación sobre todo a la cuestión de la investigación, ahora mismo los sistemas de información nos dan una base muy buena, lo que pasa es que es una asignatura pendiente, porque todo está basado en indicadores de actividad y de productividad y no hay indicadores de calidad. I. Ayerdi: Desde el lado de la industria, a pesar de las dificultades, la industria va a seguir investigando, y además de forma más abierta a otros socios. Creo que España debería potenciar más la investigación en Imagen, se están haciendo cosas, pero no de manera estructurada. En cuanto a la comunicación, tendríamos que hacer pedagogía a la ciudadanía. La SERAM tiene que hacer más para que los ciudadanos conozcan del valor de la imagen y para estimular y establecer criterios de uso. G. Madrid: En el siguiente bloque, me gustaría conocer vuestra opinión sobre un asunto que tienen un impacto con- Como estamos en una situación de crisis, hay gente que cuestiona si realmente la tecnología está aportando a la salud del paciente el coste que lleva implícito Ignacio Ayerdi C. Martínez: La telerradiología no puede ser el fin, sino que debe ser el medio para solucionar carencias o para mejorar estrategias. E. Fraile: Creo que la telerradiología es una herramienta del futuro, que va a demostrar la capacidad de los radiólogos para saber organizarnos y para ser los líderes en su utilización. Uno de los puntos más importantes es la falta de legislación que hay en torno a este concepto. Si somos capaces de conseguir una legislación clara que diga quiénes son los responsables de todo el proceso tecnológico, todo irá a mejor. La telerradiología es una herramienta que será de gran utilidad y será de implantación generalizada en todos los departamentos de diagnóstico por imagen. Se ha comentado la escasez de radiólogos y de medios y cómo hay que innovar para dar respuesta a la demanda de la sociedad. L. Martí-Bonmatí: La telerradiología no es solo una herramienta, sino que también es un acto médico y es un punto del proceso de diagnóstico. Creo que no es solo telerradiología, sino que entra dentro de la telemedicina, donde sí hay una normativa que regula todas esas acciones, hay una G. Madrid: Pasamos entonces a otro tema también de actualidad, cual es la externalización. El proceso de externalización empezó hace ya unos años para tratar de neutralizar o solucionar el problema de las demoras, pero que poco a poco se ha ido convirtiendo casi en una solución estructural que, a veces, tiene un impacto no deseable sobre la integridad del proceso asistencial. ¿Pensáis que estamos ante un fenómeno creciente e irreversible? ¿Qué criterios deberían regular su práctica? ¿Es la externalización de pruebas diagnósticas compatible con una formación posgraduada de calidad? ¿Se pueden externalizar todas las pruebas? ¿Quién debería decidirlo y con qué criterio? M. Á. Trapero: Creo que hay que analizar un poco lo que ha pasado en estos años. La titularidad del servicio sanitario público la tienen las Administraciones y ellas pueden prestar directamente los servicios o prestarlos a través de terceras empresas o personas. Otro debate nos llevaría a ver qué es lo que ha pasado cuando se externaliza un hospital entero y compararlo con el sistema tradicional. Creo que ha habido dos fenómenos en Radiología que fragmentan el servicio radiológico y que creo que se ha demostrado que crean más problemas de los que resuelven, que son costosos y que crean una interferencia en el servicio en la concepción que tenemos de un Servicio de Radiología. Cuando se externaliza una modalidad del Servicio de Radiología sin externalizar el resto, trae problemas, porque los límites entre una modalidad y otra no existen. Algunas claves para la Radiología del futuro legislación sobre telemedicina y medicina transfronteriza. Al menos en el entorno europeo eso sí está regulado. Otro ejemplo es cuando se externaliza solo una parte del proceso radiológi- Punto de encuentro siderable en el ejercicio profesional de la Radiología. Se trata de la telerradiología; sus oportunidades y fortalezas son bien conocidas, pero tiene debilidades y amenazas, sobre todo por la forma en la que se ha implantado, por cómo se está extendiendo y, por supuesto, por la carencia de normativa clara que la controle. Me gustaría conocer vuestra opinión acerca de cómo se debería regular este fenómeno, ¿cuál debería ser el papel de la SERAM y de las Administraciones públicas? ¿Tienen algo que decir los pacientes? ¿Se tiene bien claro que la telerradiología ha de ser una reproducción fiel del proceso radiológico integral? Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 53 Algunas claves para la Radiología del futuro co. El proceso radiológico es un todo global: sentar las indicaciones, trabajar con los clínicos para la adecuación de ellas, controlar la calidad de las exploraciones, realizar un informe y las consultas posteriores. En algunos sitios, como en la Clínica de la Moncloa, se externaliza solo la realización de informes y creo que eso también es fragmentar el acto radiológico y no da buenos resultados. Por lo tanto, diría que las experiencias parciales que hemos vivido de externalización de una modalidad o de una parte del proceso radiológico no son positivas ni razonables. Punto de encuentro P. Valdés: Creo que la externalización es inevitable, porque no hay dinero y habrá que hacer alianzas para que funcione. Otro problema es que habrá que asegurar la calidad y las agencias de evaluación te exigen que un paciente que vaya a hacerse una prueba a un centro externalizado tenga la misma calidad y seguridad que si va al hospital. Esto es muy complicado, porque estos servicios quieren sacar el máximo beneficio y el precio que vamos a pagar no es rentable para que tengan la máxima calidad. Lo ideal es que aseguremos la calidad para el médico y para el paciente, que ninguno de los dos sepa si el servicio se hace dentro o fuera. Eso es lo ideal porque es a lo que vamos, ya que las inversiones son cada vez menores y hay que aprovechar lo que hay. M. Guerrero: Creo que hay que intentar buscar economías de escala, sobre todo para aquellos procesos que puedan ser externalizados. El problema de la externalización es que hay que evaluar el contrato con el que se produce. Sin ninguna duda, hay que mirar la calidad de la prestación, pero añadiría también la calidad de la indicación. Cuando se externaliza sujeto a la producción, se produce inmediatamente 54 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 una hiperindicación y una hiperproducción, lo que genera un efecto muy perverso desde el punto de vista de la calidad y de la economía. No hay que tenerle miedo al tema de la externalización, porque al fin y al cabo lo hacen también profesionales, residentes, adjuntos o jefes de servicio, pero hay que intentar que la externalización no tenga perversidades como la hiperproducción o la hiperindicación. P. Valdés: Si diseñas un sistema de externalización, tienes que controlar la hiperdemanda, porque si no controlas lo que se hace fuera, tampoco puedes controlar lo que se hace dentro. Por tanto, el problema que hay es la falta de control. Además, cuando hay externalización, el concurso se lo va a llevar casi seguro el que dé el producto más barato, sin tener en cuenta la calidad, porque ahora mismo el coste es la eficiencia principal. M. Guerrero: Hay muchos más problemas relacionados con la hiperproducción sanitaria que con la lista de espera y en consecuencia es uno de los elementos clave a tener en cuenta en la eficiencia, porque es uno de los elementos que más daño está haciendo a la calidad de los servicios y al impacto económico que tiene sobre el sistema. L. Martí-Bonmatí: Creo que la externalización tiene un secreto y es quién decide qué externalizar: si son los propios profesionales los que no pueden dar un servicio y deciden el coste y la mercancía que van a externalizar, está bien, pero si son los gestores los que deciden externalizar un producto, quitándole todo el valor añadido que tiene, mercantilizándolo y encareciéndolo, estoy en contra y se ha demostrado que es la medida más perversa que tiene el político para destrozar los Servicios de Radiología de este país. M. Á. Trapero: No tendría ningún inconveniente en que se externalizara un área sanitaria entera, toda la prestación, para controlar todas las herramientas de gestión. Lo que no se puede hacer es pensar nada más que en la producción. De esta manera, controlo las herramientas y puedo ver si son capaces de producir un nivel de salud y de satisfacción semejante a la pública con un menor gasto: ese sería un reto que estaría dispuesto a controlar. G. Madrid: A lo largo de los últimos 20 años se ha venido produciendo un creciente, incesante y a veces incontrolado éxodo de equipamiento radiológico, fuera de los confines del propio Servicio de Radiología. Me gustaría conocer vuestra opinión sobre cómo deberíamos actuar los profesionales, si con actitud de cierre corporativo o de apertura y colaboración para poder participar activamente en todas las etapas del proceso asistencial. Hay un desarrollo tecnológico espectacular: las imágenes son mejores cada vez, con mejor resolución, con diagnósticos más brillantes, pero es algo parejo a la pérdida de sensibilidad de la protección de radiación Ginés Madrid Algunas claves para la Radiología del futuro L. Martí-Bonmatí: Tal como lo veo yo, lo que debemos garantizar es el proceso médico en toda su extensión y eso debemos hacerlo con todas las herramientas que tenemos a mano, y dentro de esto están el resto de profesionales del hospital. Creo que hacer partícipes al resto de profesionales del proceso de la imagen médica es tener el control, la gestión y la supervisión del área de imagen. Mi visión es que si intentamos poner otra vez muros a las especialidades eso solo genera distanciamientos, roturas de comunicación, desconfianzas y fracaso. Nuestra capacidad es la gestión, el conocimiento y la información entendida como la capacidad de predecir el futuro. C. Martínez: Creo que hemos pasado de la descentralización absoluta que existía en los hospitales clínicos a todo lo contrario, al servicio unicentralizado, y ahora los profesionales tienen miedo de volver a lo antiguo, pero no tiene que ser así, sino que se trata de hacer un planteamiento de tú a tú con los profesionales de las distintas áreas. P. Valdés: Además, lo ideal sería que consiguiéramos que el paciente demandara que el proceso lo viera un radiólogo y creo que si trabajamos mucho puede ser real. Si el paciente demanda que el informe de una prueba de imagen lo haga un radiólogo, eso nos va a dar poder. M. Guerrero: La especialidad es conocimiento, pero lo que hay que hacer en la prestación de servicios sanitarios es crear equipos multidisciplinares. El radiólogo es fundamental en el equipo clínico y debe tener capacidad y liderazgo en él, pero la historia de los servicios clínicos separados pertenece a los episodios de mayor perversidad de la sanidad española. Esa estructura tan arcaica no puede vivir con un conocimiento tan extraordinario y noble Punto de encuentro I. Ayerdi: La externalización en el mundo industrial no es una novedad. Ahora bien, externalizar no supone delegar responsabilidad, sino todo lo contrario; cuando se externaliza, se hace en búsqueda de más eficiencia y en general estimulada para ser más competitivos. En la política de Philips, lo que llamamos “Core Business” –actividades fundamentales– no se externalizan; como norma solo se externalizan aquellas actividades que no implican pérdida importante de conocimiento de actividades clave. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 55 como el que se consigue a través de la colaboración. I. Ayerdi: Hace un par de años, Philips hizo una encuesta masiva entre Radiólogos, Gestores, Clínicos… para ver donde debería ponerse el énfasis desde el punto de vista de la innovación tecnológica y cómo debería evolucionar el diagnóstico por imagen. La encuesta fue muy concluyente; decía, primero, que la imagen tenía que facilitar la integración clínica; segundo, que el paciente tenía que adquirir un protagonismo que no había tenido hasta ahora, y tercero, que tiene que haber un resultado en salud que justifique el coste de la tecnología. Como colofón sugería que el radiólogo liderara el cambio. G. Madrid: No deberíamos terminar sin conocer vuestra rápida opinión sobre un tema candente y que está generando una creciente inquietud social; la protección radiológica de los pacientes. Hay un desarrollo tecnológico espectacular; las imágenes son cada vez mejores, con mejor resolución, con diagnósticos más brillantes, pero todo ello se va acompañando de una pérdida de sensibilidad hacia la radioprotección. Hace 20 años, los radiólogos eran muy cuidadosos con este asunto, pero ahora y sobre todo las nuevas generaciones de profesionales, creo que no lo son lo suficiente. Las organizaciones supranacionales expertas en protección radiológica apuntan hacia un hipotético problema de salud pública en el futuro, caso de que no recuperemos el rigor en la justificación para el uso de las pruebas radiológicas, sobre todo de aquellas que mayor dosis suponen para los pacientes. ¿Cuál es vuestra opinión en este sentido? E. Fraile: Creo que eso se consigue liderando y compartiendo, que serían las claves para el papel del radiólogo: liderar el conocimiento y compartirlo con el resto de la sociedad. P. Valdés: Creo que, a pesar de eso, sí está aumentando la sensibilidad entre la gente de la comunidad y hay iniciativas para disminuir dosis. Creo que los residentes lo van viviendo y la industria también debe tener en cuenta los protocolos. Se busca tener una imagen cada vez mejor, pero con menor dosis. Punto de encuentro Algunas claves para la Radiología del futuro Creo que en las últimas décadas ha habido un énfasis en pasar por ‘policía sanitaria’ que los políticos han puesto como paradigmas de la calidad sanitaria, como la lista de espera, y esto es un gran error Ignacio Ayerdi El gran reto es si somos capaces de adaptarnos a lo que nos pide el paciente y la sociedad, y yo estoy convencido de que sí somos capaces, porque tenemos el conocimiento y prestamos el servicio, pero a lo mejor hay que reorientar cómo se presta ese servicio Eduardo Fraile L. Martí-Bonmatí: Es cierto que hacemos cada vez más exploraciones, pero también damos cada vez menos dosis en cada una. El esfuerzo, tanto de la industria como de la parte médica, para que esa menor dosis sea real en los últimos cinco años es brutal: estamos diez veces por debajo que hace cinco años. Por otro lado, hay una legalidad con respecto a las dosis de radiación y todos los Servicios de Radiología nos estamos reorganizando para ver cómo llegamos a ese nivel y damos esa formación. Además, la industria 56 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 G. Madrid: Y cumplido nuestro tiempo y con la seguridad de que muchas cosas habrán quedado en el tintero, os agradezco, en nombre de la Fundación Signo y en el mío propio, vuestra participación y las interesantes aportaciones con las que habéis contribuido al éxito de este Punto de Encuentro. Algunas claves para la Radiología del futuro C. Martínez: La prueba que menos irradia es la que no se hace, por lo que tenemos que incidir ahí: eso es lo más importante. Punto de encuentro nos está dando las herramientas para el control individualizado de dosis por paciente. Por otro lado, las sociedades están muy involucradas en la formación de la población para minimizar un riesgo que todavía es totalmente desconocido. Pienso que ahora nos estamos tomando la dosis de radiación mucho más en serio que hace 20 años. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):37-57 57 Influencia del diagnóstico precoz con resonancia magnética del infarto cerebral agudo en la función global de salud y en los costes de la atención del paciente Salvador Pedraza. Pedraza Gutiérrez S, 2Parody Rúa E, 3Caminal Homar J, 4García Gil MM, 5 Serena Leal J, 6Dávalos Errando A 1 Departmento de Radiología-IDI. Hospital Doctor Josep Trueta. Girona. 2 Programa de Química Farmacéutica. Facultad de Ciencias Naturales. Universidad Icesi. Cali (Colombia). 3 Universitat Autónoma de Barcelona. 4 Facultad de Medicina. Universidad de Girona. 5 Departmento de Neurologia. Hospital Doctor Josep Trueta. Girona. 6 Departmento de Neurología. Hospital Germans Trias i Pujol. Badalona, Barcelona. Dirección para correspondencia: [email protected] Resumen Objetivos: El ictus isquémico tiene altas tasas de mortalidad y discapacidad. El diagnóstico radiológico pretende diferenciar el infarto de la hemorragia cerebral. Hay dos estrategias de diagnóstico por imagen: tomografía computarizada (TC) y resonancia magnética (RM). El objetivo de este estudio es valorar la influencia de TC o RM en los resultados y costes del manejo de los pacientes con isquemia cerebral aguda (ICA). Métodos: Estudio observacional prospectivo con seguimiento longitudinal de los pacientes con ICA de menos de 12 horas de evolución. La asignación de la prueba inicial de neuroimagen se realizó en función de la hora de llegada del paciente y la disponibilidad de las técnicas diagnósticas en esa franja horaria. La medida principal de resultado de salud fue la escala Rankin modificada (mRS). Se cuantificó los recursos hospitalarios y recursos post-alta. Resultados: Se incluyeron 130 pacientes (87 grupo TC y 43 grupo RM), 60% fueron hombres y la edad media fue de 69 años. Al alta más del 50% de los pacientes tenían un valor en la mRS entre 3 y 5 en ambos grupos; a los tres meses la mayor proporción de los pacientes estaban en el valor de mRS ≤2 en el grupo de TC. Los costes directos hospitalarios fueron mayores que los costes directos postalta. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):59-68 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 1 59 Pedraza Gutiérrez S, et al. Influencia del diagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 60 Conclusiones: La utilización de TC y RM son equivalentes para conseguir estado de salud, puesto que las decisiones terapéuticas aún no se toman en función de la neuroimagen. Los costes directos totales en el empleo de TC y RM fueron también equivalentes. Palabras clave: Resonancia magnética, Costes, Tomografía computarizada, Infarto cerebral, Función global de salud. Influence of early MRI-based diagnosis of acute cerebral infarction on functional outcome and costs of patient care Abstract Objectives: Ischemic Stroke results in a high rate of mortality and disability. Radiological diagnosis is requires to differentiate cerebral infarction and hemorrhage. They are two imaging strategies: computed tomography (CT) or magnetic resonance (MR). We aimed to study the influence of CT or MR in the final outcome and cost management of patients with acute ischemic stroke. Methods: We studied 130 patients with acute ischemic Stroke within 12 hours of onset of symptoms. We designed a prospective and longitudinal study two compare two strategies: Immediate CT or MR. Randomization between both groups was based on time arrival at hospital. Clinical outcome measures were assessed with modified Rankin Scale (mRs). We determined the cost of the management during in-hospital and post-discharge periods. Results: The 130 patients were studied with CT (87 patients) or MR (43 patients). Mean age was 69 years and 60% were male. At discharge 50% of patients presented a mRS between 3 and 5 in CT and MR group. Most patients of both groups had a favorable outcome (modified Rankin Scale 0 to 2) at 3 months. The cost due to hospital management was higher that cost related to post discharge attention. Conclusions: The use of early CT or early MR in the diagnosis of acute ischemic stroke was associated to similar outcome and management cost. The lack of costutility differences could be related to the actual decision based on stroke duration instead on imaging biomarkers. Key words: Magnetic resonance imaging, Cost, Computed tomography, Cerebral infarct, Functional outcome. Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios En la actualidad, la tomografía computarizada (TC) convencional es la técnica radiológica más generalizada para el diagnostico inicial del ictus agudo; a pesar de que las nuevas técnicas de resonancia magnética (RM) tienen una mayor sensibilidad y especificidad en la detección precoz8,9 y menor variabilidad en la interpretación de los resultados10. La realización de RM en ictus agudo permite una evaluación diagnóstica rápida y proporciona información necesaria y relevante en este tipo de pacientes10. Además, las técnicas de RM son tan eficaces como la TC para descartar o definir la magnitud de la hemorragia11. Sin embargo, el uso de la RM se ve limitado por el mayor coste de la exploración y menor accesibilidad. Al ser los recursos sanitarios limitados es necesario hacer un uso eficiente de estos; para ello, los estudios de evaluación económica en tecnología sanitaria aportan un papel fundamental como herramienta para la toma de decisiones12. Al aplicar esta herramienta en un problema de salud como el ictus El objetivo de este estudio fue valorar el efecto de la RM y la TC para el diagnóstico de la isquemia cerebral aguda (ICA) en la función global de salud y en los costes hospitalarios y post-alta. Sujetos y método Estudio observacional prospectivo con seguimiento longitudinal de los pacientes con ICA de menos de 12 horas de evolución que se presentaron o fueron remitidos al hospital Doctor Josep Trueta (HJT, Girona). El estudio fue aprobado por el comité ético de investigación clínica del hospital. Se incluyó pacientes consecutivos con ICA durante el periodo del 1 de diciembre de 2003 hasta el 9 de marzo de 2005 que cumplieran con los siguientes criterios de inclusión: pacientes ≥18años, episodio de ictus con menos de 12 horas de evolución, pacientes susceptibles de ingreso en la unidad de ictus (UI) del hospital y consentimiento informado del paciente o familiar. Se excluyeron pacientes en coma, con accidente isquémico transitorio (AIT), con hemorragia cerebral, con dependencia en sus actividades de la vida diaria previos al ictus (escala Rankin > 2), pacientes en los que se sospechó que abandonarían el control o pacientes que presentaban contraindicación a la RM o a la TC. Pedraza Gutiérrez S, et al. Influencia del diagnóstico... Las secuelas del ictus tienen un enorme impacto social al obligar a tratamientos rehabilitadores, dependencia de cuidadores, generalmente en el propio entorno, y la posible existencia de complicaciones asociadas al propio tratamiento o a la evolución del propio proceso. Si además se valora que afecta a personas mayores de 55 años, sumado al progresivo envejecimiento de la población y el incremento de la esperanza de vida, el ictus sufrirá un incremento de su incidencia y prevalencia en los próximos años1,2, constituyendo un auténtico problema de salud pública por los problemas de dependencia que creará. Además, el ictus tiene un impacto económico considerable tanto en la fase aguda como a largo plazo1,3-7. y sobre técnicas de neuroimagen la TC y la RM, nos ayudarán a manejar una información evaluada. La asignación de la prueba inicial de neuroimagen se realizó en función de la hora de llegada, las condiciones clínicas del paciente, y de la disponibilidad de las técnicas diagnosticas en esa franja horaria. Así, se incluyeron los pacientes que se les realizó un estudio de RM entre las 08:00 y las 20:00 horas de lunes a viernes (no festivos) y a los que se les realizó TC entre las Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Introducción Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios 61 Se registró la siguiente información para cada uno de los pacientes incluidos: datos sociodemográficos, factores de riesgo, tratamiento previo e información sobre el ictus actual. Como medida principal de resultado se utilizó la evolución funcional global de la salud del paciente al alta, y a los 90 días, medida a través de una entrevista estructurada13 para asignar grados en la escala Rankin modificada (mRS). El investigador que valoró la mRS tenía certificado acreditativo en la evaluación de esta escala y estaba ciego ante la prueba diagnóstica realizada. Un resultado favorable fue definido como independiente (mRS entre 0 y 2), un resultado desfavorable o dependiente (mRS de 3 a 5) y muerte (mRS=6). Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Pedraza Gutiérrez S, et al. Influencia del diagnóstico... 20:00 y 08:00 horas todos los días de la semana, y los sábados, domingos y festivos las 24 horas del día. Se realizó análisis descriptivo con el programa estadístico SPSS® versión 15.0. Se fijó el valor de significancia en 62 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):59-68 Se cuantificó los siguientes costes directos hospitalarios relacionados con el ictus: pruebas diagnósticas, días de estancia hospitalaria (unidad de ictus [UI] y cama convencional), tratamiento farmacológico, y rehabilitación. Se cuantificó también los costes post-alta (tres meses) y se consideró: rehabilitación (fisioterapia y/o logopedia), recursos físicos adicionales (muletas, silla de ruedas, caminador, cama especial...), adecuaciones físicas requeridas en la casa del paciente (cambiar bañera por ducha, colocar pasamanos...), medicamentos y tratamiento quirúrgico. La información del uso de los recursos hospitalarios se obtuvo de la historia clínica del paciente y por el servicio de farmacia del hospital y la información a los tres meses se obtuvo a través de una entrevista a los pacientes y/o cuidadores. Los costes se expresaron en euros (2004). p < 0,05. Para el análisis de las variables categóricas se utilizó el test Chicuadrado y para las variables numéricas demográficas, clínicas, recursos y costes, se calcularon las medias con su respectiva desviación estándar, se utilizó el test t-Student para muestras independientes. Resultados En la Figura 1 se presenta el resumen de los pacientes que se presentaron o fueron remitidos al hospital por sospecha de ictus. En total se incluyeron 130 pacientes, a 87 se les realizó TC y a 43 RM; de los 117 supervivientes al tercer mes del ictus, se pudo hacer seguimiento a 114 pacientes. La media de edad en ambos grupos fue de 69 años, el 60% eran hombres. No se observó diferencias estadísticamente significativas en los datos basales de los dos grupos (Tabla 1). Los valores de la mRs al alta y a los tres meses se representan en las Figuras 2 y 3 respectivamente, como puede apreciarse, los pacientes del grupo de TC tuvieron un resultado de la mRS más favorable (≤2) que el grupo RM, pero sin diferencias estadísticamente significativas. En la Tabla 2 se describe la media de costes hospitalarios de cada grupo, solo se observaron diferencias estadísticamente significativas en los costes de la RM y la TC. Los costes por estancia hospitalaria fue menor en el grupo de la RM. En cuanto a los costes postalta (Tabla 3), no se encontraron diferencias significativas y el mayor coste se observó en coste de institucionalización. La media de los costes directos totales por paciente (hospitalarios más post-alta) fueron de 5830,63 € (4255,54) y 5692,95 € (4268,11) para el grupo de TC y RM respectivamente, sin diferencias estadísticamente significativas. Pedraza Gutiérrez S, et al. Influencia del diagnóstico... 472 pacientes con sospecha de ictus 99 no ictus isquémicos 373 pacientes con ictus isquémico 213 excluidos por otras causas* 160 pacientes por intención de tratar 30 excluidos por realización Neuroimagen en franja horaria que no correspondía La estancia media hospitalaria en ambos grupos fue menor que la registrada en otro estudio4, pero en dicho estudio también incluyeron pacientes con hemorragia cerebral. En el total de costes directos hospitalarios no hubo diferencias estadísticamente significativas en los grupos, pero la media en el grupo de RM fue ligeramente menor, como consecuencia de la reducción de la estancia hospitalaria en ese grupo. De igual forma que en otros trabajos4,5,9 en nuestro estudio la permanencia en el centro hospitalario fue el principal inductor de gasto en la Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 130 pacientes incluidos Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):59-68 63 114 pacientes seguimiento 3 pérdidas de seguimiento 13 éxitos al 3.er mes *Otras causas: pacientes con más de 12 horas de evolución, AIT, ingreso en la UI, mRs previo >2, no firmaron consentimiento informado, contraindicación a la RM o a la TC. Figura 1. Resumen pacientes incluidos y excluidos Discusión Con el presente estudio se pretendía valorar la influencia del diagnóstico precoz de la RM en pacientes con ICA comparado con TC, en términos de estado funcional de salud y de costes. En este sentido, la situación clínica al alta, y a los tres meses y los costes directos totales fueron similares en los pacientes del grupo de TC y RM. Es interesante remarcar que aunque el coste directo en sí de la prueba de RM era mayor que la prueba de TC (aproximadamente 3,8 veces más), los resultados indican que no se incrementaron los costes directos hospitalarios totales del grupo estudiado inicialmente con RM respecto al grupo estudiando inicialmente con TC. Este hecho es comparable a lo obtenido en un estudio14, que a pesar del incremento sustancial en la utilización de técnicas de imagen de TC y RM, no se observó un incremento en los costes hospitalarios. Pedraza Gutiérrez S, et al. Influencia del diagnóstico... 0 RM 4,7 7,0 21,3 4,7 30,2 25,6 4,7 1 2 3 4 TC 3,4 9,2 13,3 17,2 28,7 25,3 2,1 5 6 20% 0% 40% 60% 80% 100% RM: resonancia magnética; TC: tomografía computarizada. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Figura 2. Puntuación ranking al alta 64 fase aguda, en especial, si su estancia se realizaba en la UI. Solo el 24% de los pacientes estaba empleado cuando se inició el ictus, coincidiendo con otro estudio de ictus8. Al igual que otros estudios7,8, la mayoría de los pacientes después del alta retornaron a su domicilio. La elevada dependencia de los pacientes de nuestro estudio se refleja en la necesidad de un cuidador, en el 50% de los casos los requirieron y de estos, aproximadamente el 71% eran no remunerados, coincidiendo con otro estudio7, en el que el 74% de los pacientes que requirieron asistencia fue realizada por familiares o amigos; 0 RM 9,5 26,2 7,1 7,1 28,2 9,5 14,3 1 2 3 4 TC 15,3 15,5 18,8 12,9 22,4 5,9 5 8,2 6 0% 20% 40% 60% 80% RM: resonancia magnética; TC: tomografía computarizada. Figura 3. Puntuación ranking a los tres meses Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):59-68 100% Información laboral previa* Empleado Jubilado Ama de casa Desempleado Indemnizado Factores de riesgo HTA Fibrilación auricular IAM Diabetes mellitus Fumador Ictus previo Ranking previo 0 1 2 NIHSS ingreso (mediana-rango interquartílico) RM (n = 43) 68 (13) IC: 64,0-72,0 7,0% 16,3% 51,2% 25,6% 69,8% P 0,685 24,4% 48,7% 23,1% 1,3% 2,6% 25,0% 52,8% 19,4% 0 2,8% 0,951 67,8% 20,7% 8,0% 23,0% 14,9% 17,2% 60,5% 18,6% 11,6% 16,3% 18,6% 14,0% 0,407 0,780 0,507 0,375 0,593 0,632 90,8% 5,7% 3,5% 8 (4-16) 88,4% 7,0% 4,6% 7 (3-18) 0,906 0,110 En una revisión sistemática de costeefectividad de TC y RM para algunos desordenes clínicos (incluyendo el ictus)15 concluyen que aunque las tecnologías de imagen diagnóstica pueden mejorar o acelerar el diagnóstico, no necesariamente cambian los resultados; porque la investigación de imagen diagnóstica puede ocurrir pronto en el tiempo clínico del paciente, muchos factores potenciales pueden afectar el progreso desde el tiempo Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 30-45 46-60 61-75 76-90 Sexo (hombre) TC (n = 87) 69 (11) IC: 66,7-71,3 3,4% 19,5% 43,7% 33,3% 55,2% Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):59-68 65 0,825 *Información disponible solo para los pacientes cuyo destino al alta fue su casa, 72,4% y 74,4% para TC y RM respectivamente. DS: desviación estándar; HTA: hipertensión arterial; IAM: infarto agudo de miocardio; IC: intervalo de confianza; RM: resonancia magnética; TC: tomografía computarizada. reflejando el papel importante del cuidado informal en el ictus. En nuestro estudio, en el que los cuidadores eran familiares, aproximadamente el 26% tuvo que abandonar su trabajo para cuidar del paciente, con el impacto social y económico que esto implica. La institucionalización post-alta fue el principal coste de los recursos post-alta, coincidiendo con otro estudio7, que mostró que la institucionalización y cuidado de enfermería a domicilio estuvieron dentro de los principales costes post-alta. Los costes directos hospita- Pedraza Gutiérrez S, et al. Influencia del diagnóstico... Tabla 1. Características de la población de estudio Variable Edad. Media (DS) larios fueron mayores que los costes directos post-alta en ambos grupos; coincidiendo con otros estudios5-7. Pedraza Gutiérrez S, et al. Influencia del diagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 66 Tabla 2. Media de costes directos por paciente de recursos hospitalarios en euros 2004 (DS) Recurso Pruebas diagnosticas TC cráneo RM cráneo RX tórax Doppler/Dúplex transcraneal Dúplex carotideo Doppler continuo carotídeo Ecocardiograma Fisioterapia Tratamiento farmacológico Costes de estancia hospitalaria Unidad de ictus Cama convencional Total estancia (media) Total costes directos hospitalarios: media (DS) TC (n = 87) RM (n = 43) p 111,61 (39,60) 115,42 (134,64) 5,92 (1,97) 35,41 (19,46) 29,07 (22,30) 26,95 (22,78) 33,47 (33,97) 9,79 (11,96) 304,71 (427,44) 45,48 (43,45) 281,42 (75,67) 5,85 (1,31) 39,56 (16,12) 27,80 (22,75) 34,21 (20,30) 33,86 (34,18) 7,26 (9,15) 241,11 (387,59) 0,000 0,000 0,825 0,229 0,763 0,079 0,951 0,223 0,412 2092,57 (1298,19) 771,93 (1286,58) 2864,50 (1938,44) 3536,85 (2196,29) 1945,26 (830,21) 503,44(973,63) 2448,70 (1289,84) 3165,25 (1446,63) 0,499 0,230 0,205 0,316 DS: desviación estándar; RM: resonancia magnética; RX: radiografía; TC: tomografía computarizada. del test de imagen hasta el último resultado del paciente. El tamaño reducido de la muestra es una limitación importante en nuestro estudio, a pesar de que el tiempo de inclusión fue de 14 meses, pero debido a los criterios de inclusión y a la disponibilidad de las técnicas de neuroimagen, de los 472 potenciales pacientes, solo se incluyeron 130. El sistema de asignación a los grupos de estudio, dependió del horario del inicio del ictus. Este sistema pudo comportar un sesgo de selección. Sin embargo, los grupos fueron comparables en cuanto a las características del ingreso, tales como el déficit neurológico, factores de riesgo cardiovascular y discapacidad previa. Por lo tanto, el sesgo potencial de selección es poco probable. El presente estudio indica que es factible realizar RM como diagnóstico emergente del infarto cerebral; es importante remarcar que estos resultados pueden ser orientativos para los gestores y clínicos; pero la decisión de neuroimagen a emplear siempre se Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):59-68 debería de abordar de forma individualizada de acuerdo a la edad del paciente, la clínica, las horas de evolución del infarto y la disponibilidad de las técnicas, entre otros factores. En el futuro serán necesarios más estudios de EE sobre las nuevas técnicas diagnósticas de neuroimagen, cuando los hallazgos radiológicos sean considerados dentro de los protocolos de tratamiento del ictus agudo, por la información que aportan sobre la hemodinámica cerebral, el volumen de penumbra, el tamaño del infarto y la presencia de oclusión vascular entre otros. En conclusión, la utilización de TC y RM es equivalente para conseguir estado de salud, puesto que las decisiones terapéuticas aún no se toman en función de la neuroimagen. Los costes directos en el empleo de TC y RM son equivalentes, puesto que el coste mayor post-alta en el grupo de RM se compensa con los costes directos menores en la hospitalización y por la necesidad a posteriori de RM en algunos pacientes del grupo TC. TC 1106,83 (2385,44) 46,82 (82,95) 89,30 (253,90) 130,65 (724,69) 966,77 (1965,73) 111,06 (322,93) 92,82 (123,15) 2558,44 (2891,03) RM 1386,12 (2564,83) 54,77 (78,85) 148,06 (335,18) 202,57 (660,61) 894,22 (1986,77) 171,52 (371,64) 129,17 (127,33) 3019,20(3379,26) p 0,571 0,627 0,299 0,617 0,855 0,374 0,146 0,455 DS: desviación estándar; RM: resonancia magnética; TC: tomografía computarizada. Fuente de financiación Esta publicación es resultado de un proyecto de investigación sobre el estudio coste utilidad del diagnóstico del infarto cerebral financiado por la SERAM (Sociedad Española de Radiología Médica). Conflicto de intereses Ninguno. Bibliografía 1. Martínez-Vila E, Irimia P, Urrestarazu E, Gallego J. El coste del ictus. Anales Sis San Navarra. 2000;23, Supl 3:33-8. 2. Chamorro A, Alonso P, Arrizabalaga J, Carné X, Camps V. Luces y sombras de la medicina basada en la evidencia: el ejemplo del accidente vascular cerebral. Med Clin (Barc). 2001;116:343-9. 3. Carod-Artal FJ, Egido-Navarro JA, González-Gutiérrez JL, Varela E. Coste directo de la enfermedad cerebrovascular en el primer año de seguimiento. Rev Neurol. 1999;28: 1123-30. 4. Caro JJ, Huybrechts KF, Duchesne I; for the Stroke Economic Analysis Group. Management Patterns and Costs of Acute Ischemic Stroke. An International Study. Stroke. 2000;31: 582-90. 5. 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Variable Institucionalización Sesiones de rehabilitación Recurso adicional Adecuaciones en casa Cuidador Uso de ambulancia Coste medicamentos Total costes directos post-alta: media Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Tabla 3. Media de costes directos por paciente de recursos post-alta en euros 2004 (DS) 67 Pedraza Gutiérrez S, et al. Influencia del diagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 68 9. Rovira-Cañellas A. TC y RM en la fase aguda del ictus. En: Radiología en patología cardiovascular. Madrid: Marbán Libros; 2002. 10.Schellinger PD, Jansen O, Fiebach J, Pohlers O, Ryssel H, Heiland S, et al. Feasibility and practicality of MR imaging of stroke in the management of hyperacute cerebral ischemia. An J Neuroradiol. 2000;21: 1184-9. 11.Kidwell CS, Chalela JA, Saver JL, Starkman S, Hill MD, Demchuk AM. Comparison of MRI and CT for detection of acute intracerebral hemorrhage. 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Stuttgart (Alemania) Dirección para correspondencia: [email protected] One of the greatest problems of the health care system is the cost of evaluation of patients with chest pain (CP) in the emergency department (ED). CP is the second most common cause that will bring the patient to the emergency room. A Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Juan Fernández Sánchez. La importancia de la Radiología de Urgencias en el coste-efectividad de la evaluación del dolor torácico Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 69 Resumen Uno de los mayores problemas de los sistemas sanitarios es el coste de la evaluación de los pacientes con dolor torácico (DT) en los Servicios de Urgencias (SUH). El DT constituye el segundo motivo más frecuente por el cual los pacientes acuden a Urgencias. Un gran número de patologías pueden ocasionar DT y por tanto el manejo de estos pacientes puede ser difícil. Se estima que un 4-8% de los pacientes con DT son dados de alta del SUH incorrectamente. Por consiguiente, es necesaria una correcta evaluación de estos pacientes. Hemos llevado a cabo una revisión sistemática de la bibliografía de estudios relacionados con el coste-efectividad de la evaluación radiológica del DT en el SUH. La búsqueda bibliográfica en MedLine identificó a 17 estudios que cumplieron con los criterios de inclusión. El uso apropiado de las modernas técnicas de diagnóstico por imagen en la Unidad de Radiología de Urgencias, especialmente los equipos de tomografía computarizada más avanzados, puede disminuir el número de ingresos innecesarios en pacientes con DT. También puede disminuirse el tiempo para establecer el diagnóstico y la duración de la hospitalización. Por tanto, la Radiología de Urgencias puede ayudar a reducir los costes de la evaluación de los pacientes con DT. Palabras clave: Radiología de Urgencias, Dolor torácico, Coste-efectividad. The value of emergency radiology in the cost-effectiveness of chest pain evaluation Abstract Key words: Emergency radiology, Chest pain, Cost-effectiveness. Introducción Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Fernández Sánchez J. La importancia de la Radiología... large number of pathological conditions can cause CP and therefore the management of these patients can be difficult. It is estimated that 4–8% of patients with CP are inappropriately discharged from the ED. Therefore, it is necessary a correct evaluation of these patients. We conducted a systematic literature review of studies regarding the cost-effectiveness of the radiological evaluation of CP in the ED. A Medline literature search identified 17 studies that met criteria for inclusion. The appropriate use of modern diagnostic imaging techniques at the emergency radiological unit, especially most advanced CT equipments, can decrease the number of unnecessary hospital admissions in patients with CP. Also the time to diagnosis and the length of hospitalization may be reduced. Therefore, emergency radiology may help to reduce costs in the evaluation of patients with CP. Un gran número de pacientes acuden diariamente a los Servicios de Urgencias (también denominados Unidades o Servicios de Urgencias Hospitalarias [SUH]) de numerosos hospitales y clínicas, con frecuentes saturaciones que pueden en ocasiones colapsar la asistencia sanitaria1,2. En España la tasa de frecuentación de Urgencias es más elevada que en otros países europeos, como el Reino Unido o Alemania, e incluso mayor que la de EE. UU., y oscila entre 31 000 y 58 500 casos anuales por cada 100 000 habitantes3-5, con demandas diarias de asistencia referidas en algunos estudios de 39 a 64 pacientes6. Incluso se ha evidenciado que entre siete y nueve personas pueden presentarse cada hora en Urgencias de los hospitales de máxima atención sanitaria durante determinadas horas puntas entre las 08:00 y las 22:00 horas7, lo cual puede ser mayor en determinadas situaciones, como en días festivos y en épocas de vacaciones, sobre todo en hospitales o clínicas ubicados en ciudades o regiones turísticas. Extrapolando estos datos y haciendo un cálculo aproximativo, 1-2 personas por cada 100 000 habitantes se presentarán en Urgencias durante el tiempo que el lector esté leyendo este artículo. El 70 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 dolor torácico (DT) es un frecuente motivo por el que los pacientes requieren una asistencia médica urgente, de forma que aproximadamente un 5% de las Urgencias se deben al DT8. Entre cinco y ocho millones de personas acuden anualmente a los SUH en EE. UU. para la evaluación de un DT, valoración que en muchas ocasiones es difícil, ya que entre un 2 y un 8% de los pacientes con una causa grave de DT son dados de alta en Urgencias sin un diagnóstico adecuado, mientras que un 40-60% de los pacientes con DT son ingresados con un diagnóstico incorrecto, todo lo cual conlleva problemas evidentes, tanto desde el punto de vista de la asistencia sanitaria como de coste-eficacia9,10. Debido a que las causas del DT pueden ser muy diversas (tabla 1), muchos de estos pacientes necesitan diversas exploraciones radiológicas requeridas por los diversos médicos especialistas de Urgencias, fundamentalmente internistas y cirujanos. Mediante una revisión bibliográfica, así como también en base a una experiencia de 30 años en diversos hospitales de Alemania, se presenta y discute la implicación del resultado de las exploraciones efectuadas en la Sección de Radiología de Urgencias o Unidad de Diagnóstico por Imagen de Urgencias (UDIU) en la evaluación del DT. – Dolor de origen hiliar y mediastínico. – Dolor de origen cardiovascular. – Dolor de origen gastrointestinal. – Dolor de origen musculoesquelético. – Dolor de origen psicógeno. – Dolor de origen desconocido o idiopático. Material y método Evaluación de la repercusión de la Radiología de Urgencias o UDIU en el manejo de los enfermos que acuden a los Servicios de Urgencias por DT y su coste-eficacia. Se realiza una revisión bibliográfica (PubMed/Medline) con una estrategia de búsqueda basada en la siguiente terminología: – Patología (DT) por la que se acude a Urgencias (“chest pain”). – Radiología de Urgencias (“emergency radiology”). – Coste-efectividad (“cost-effectivness”). Además se efectuaron búsquedas adicionales con las causas más frecuentes de DT y/o con mayor repercusión por su morbilidad y mortalidad, como infarto de miocardio/síndrome coronario agudo (SCA), tromboembolismo pulmonar (TEP), disección aórtica, neumonía, neumotórax, neumomediastino, pleuritis y fractura costal. Resultados Se detectaron 17 estudios en la búsqueda principal y adicional con refe- Fernández Sánchez J. La importancia de la Radiología... – Dolor de origen pleural y pulmonar. rencia al coste-eficacia de determinadas exploraciones radiológicas en la evaluación del DT en Urgencias, con exclusión de estudios de costes no relacionados directamente con el tema en concreto, excluyendo también revisiones generales o artículos de opinión. La gran mayoría de los estudios están en relación con el empleo de los modernos equipos multicorte de tomografía computarizada (TC) con un elevado número de hélices o cortes (64 o más) para el estudio de las tres causas de DT con mayor mortalidad y morbilidad: el infarto de miocardio/ SCA, TEP y la disección aórtica. Hoffmann et al.11 efectuaron un estudio en 103 pacientes con DT con una evaluación clínica inicial inconcluyente (electrocardiograma no diagnóstico, enzimas cardiacas negativas) y demostraron que la TC ayudó significativamente en la catalogación correcta de los pacientes, permitiendo ahorrar costes. En el estudio de Bastarrika et al.12, la realización inmediata de una TC multicorte de 64 hélices tras la evaluación clínica inicial y la realización de un electrocardiograma, con unas primeras determinaciones enzimáticas cardiacas no relevando una isquemia miocárdica aguda, permitió ahorrar el tiempo diagnóstico del paciente con DT, evitando ingresos hospitalarios innecesarios y presentando por ello importantes implicaciones desde el punto de vista coste-efectividad. El estudio de cálculo de costes de Goldstein et al.13 muestra que, si bien el coste diagnóstico inicial al utilizar la TC multicorte en Urgencias para descartar una patología coronaria aguda responsable del DT fue, evidentemente, mayor que la mera evaluación clínica convencional (electrocardiogramas, pruebas de laboratorio), se obtuvo finalmente un menor coste global debido a la reducción del tiempo diagnóstico y de la estancia del enfermo en Urgencias (aproximadamente 250 euros por cada Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Tabla 1. Causas del dolor torácico Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 71 72 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 Fernández Sánchez J. La importancia de la Radiología... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología caso). En un estudio de 285 pacientes con DT, donde la TC multicorte realizada en la UDIU no detectó una estenosis coronaria significante, el 85% de esos pacientes que fueron dados de alta en el SUH no presentaron un evento cardiovascular grave (infarto de miocardio, angina grave) en un periodo de seguimiento de un mes tras acudir a Urgencias14. Gallagher et al.15 compararon los resultados de la TC multicorte con la evaluación clínica y la gammagrafía de micoardio de esfuerzo en Urgencias en 85 pacientes con DT con bajo riesgo de padecer un SCA. En la determinación del valor predictivo de la TC con un seguimiento clínico de los enfermos durante 30 días tras ser dados de alta en Urgencias se comprobó que la TC fue tan fehaciente como la gammagrafía de esfuerzo en el diagnóstico o exclusión de un SCA, pero lo realizó de forma más rápida. Un mayor seguimiento clínico de los pacientes con DT que acudieron a Urgencias fue llevado a cabo por Rubinshtein et al.16. Estos autores evaluaron a 58 pacientes durante un periodo de 15 meses y pudieron determinar que ninguno de los pacientes que fueron dados de alta en Urgencias tras un informe normal de TC fallecieron ni sufrieron un infarto de miocardio. En otro estudio de los mismos autores el resultado de la TC en Urgencias permitió disminuir en un 50% los ingresos de pacientes con DT por posible isquemia miocárdica17. Min et al.18 efectuaron un estudio de costeefectividad en pacientes con DT sin historia de padecer una enfermedad cardiovascular, evaluando diversos escenarios para descartar una causa cardiaca del DT. Los diversos escenarios diagnósticos incluyeron TC multicorte seguida de angiografía cardiaca (cateterismo) en casos de TC positiva o incierta con respecto a una estenosis coronaria, TC seguida de cateterismo en casos de TC positiva o de gammagrafía SPECT miocárdica de esfuer- zo en TC incierta, gammagrafía SPECT seguida de cateterismo en casos de gammagrafía positiva o de resultado incierto y SPECT seguido de cateterismo en gammagrafía positiva o de TC en gammagrafía incierta. Los autores llegaron a la conclusión que la realización de la TC multicorte como primer paso evaluativo en este grupo de enfermos con DT es la variante diagnóstica con mejor coste-efectividad. Fazel et al.19, tras la evaluación clínica inicial de pacientes con DT en Urgencias, seleccionaron 436 casos en donde se pensó que podría tratarse de una angina de pecho, pero en pacientes con una probabilidad pretest intermedia de padecer una enfermedad coronaria. En 376 de los pacientes la TC multicorte de 64 hélices no detectó una estenosis coronaria relevante. En los 60 casos con TC patológica, el cateterismo cardiaco descartó una enfermedad coronaria significativa en 26, mientras que lo confirmó en los otros 34 pacientes, a los cuales se les efectuó una angioplastia coronaria transluminal percutánea, con o sin colocación de un stent, o se les realizó una operación de bypass. El 100% de los pacientes con TC negativa (n = 376) no presentaron ningún síntoma o molestia de origen cardiaco y, por tanto, no necesitaron ningún cateterismo adicional, en los tres años siguientes a su valoración en Urgencias, teniendo este estudio como conclusión el potencial significativo de la TC multicorte en la disminución de costes. Además de las evaluaciones citadas con diversas series de casos de DT en Urgencias, también se han diseñado modelos informáticos para la valoración de la eficacia diagnóstica y del manejo de dichos pacientes20-23. Ladapo et al.20 hicieron un estudio económico y de coste-efectividad de la TC multicorte en comparación con los protocolos diagnósticos convencionales de los pacientes con un DT torácico Fernández Sánchez J. La importancia de la Radiología... por SCA con determinaciones enzimáticas negativas en comparación con el ingreso hospitalario de esos pacientes para su valuación clínica convencional posterior. Khare et al.23 elaboraron también un modelo de decisión analítica para comparar el desenlace clínico y los costes de tres estrategias diferentes de estratificación y abordaje del DT en Urgencias en pacientes con bajo riesgo de padecer una enfermedad coronaria: electrocardiograma de esfuerzo después de la evaluación clínica inicial convencional, ecocardiografía de esfuerzo después de la evaluación clínica inicial convencional y TC multicorte sin, inicialmente, evaluación clínica detallada en la Unidad de Observación de Urgencias. El desenlace clínico fue medido en relación con los años de vida ganados ajustados por calidad (quality-adjusted life years). En este modelo matemático de decisión analítica la TC resultó ser menos cara y más efectiva que las otras dos vías estratégicas en la evaluación del DT en ese grupo de enfermos. Esto ha sido verificado en el reciente estudio de Priest et al.24. Los resultados de las búsquedas con respecto a las otras dos causas de DT con alta mortalidad y morbilidad han sido: 85 artículos seleccionados en relación al TEP, en donde solo tres se efectuaron estudios de coste-efectividad, y solo dos artículos en la búsqueda específica de la disección aórtica, pero aquí sin evaluación de costes. Van Erkel et al.25 demostraron que la TC en comparación con la angiografía pulmonar convencional reduce la mortalidad y proporciona un mejor costeefectividad en el diagnóstico de un TEP. Mediante un modelo analítico de decisión en hipotéticas cohortes de 1000 enfermos Larcos et al.26 compararon la TC con la gammagrafía pulmonar de ventilación y perfusión, obteniendo como resultado que la TC permitiría salvar 2,5 vidas adicionales a Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología estable y con sospecha de padecer una enfermedad coronaria. Acorde con los datos publicados en la literatura, así como el estado actual tecnológico, estos autos autores desarrollaron un modelo informático para la evaluación de ese grupo específico de pacientes y determinaron que, si bien la TC presenta inicialmente un mayor coste que los debidos a análisis de laboratorio, la radiografía de tórax y los electrocardiogramas, así como en comparación con la gammagrafía de miocardio (SPECT de esfuerzo) y también ocasiona gastos posteriores debido a diversas patologías adicionales detectadas en TC como hallazgos secundarios no relacionados con el DT, pero que subsiguientemente requieren valoraciones clínicas y otras pruebas diagnósticas, el coste-eficacia de la TC evaluado globalmente en la atención sanitaria es positivo, también por presentar pocas complicaciones, siendo estas de bajo coste, sobre todo en comparación con las posibles complicaciones de un cateterismo cardiaco en aquellos casos que tras la valoración convencional se requiera esa prueba invasiva, potenciando la TC además los años de vida ajustados por calidad en este grupo de pacientes con DT. En otro estudio del mismo grupo de investigación con un modelo de simulación evaluando el coste de TC en el triage de los pacientes con DT los autores llegaron a la conclusión que la TC multicorte ocasiona unos costes mayores en varones, en general, pero es coste-efectivo en aquellos varones menores de 55 años con baja probabilidad de padecer una enfermedad coronaria y es coste-efectivo en las mujeres de cualquier edad, con independencia de la probabilidad pretest que presenten21. De Beule et al.22 llegan a la conclusión en su análisis matemático con un modelo de decisión que la TC multicorte presenta un coste-efectividad mejor en los pacientes que acudieron a Urgencias con DT Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 73 Fernández Sánchez J. La importancia de la Radiología... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 74 las posiblemente obtenidas por la gammagrafía, pero con un mayor coste. El análisis de coste-efectividad de Perrier et al.27 sobre las estrategias diagnósticas del DT causado por un TEP refleja también los elevados gastos de la TC utilizada como único método de evaluación. Pero el resultado del estudio de estos autores indica que la TC combinada con la determinación del dímero D y la realización adicional de una ecografía venosa de las extremidades inferiores es costeefectiva en el diagnóstico del TEP. La búsqueda del coste-eficacia radiológica en las neumonías como posible causa del DT no proporcionó ningún trabajo científico específico, sino cuatro citas bibliográficas no relacionadas estrictamente con el tema objeto de estudio: un trabajo sobre el costeefectividad de los informes de las radiografías de tórax en neumonías en Pediatría efectuados en Urgencias por médicos no radiólogos en comparación con los informes de los radiólogos, otro sobre el coste-eficacia del tratamiento de infecciones respiratorias de vías bajas, un tercer artículo de revisión, pero sin evaluar directamente el coste y la eficacia de la Radiología de Urgencias en las neumonías, y el último, un estudio de coste-eficacia de la embolización arterial en hemoptisis. Sin embargo, es evidente la eficacia de la radiografía de tórax y su coste adecuado ante la sospecha clínica de una neumonía, de forma que su realización está indicada y requerida, entre otras, por las normativas de diversas sociedades cientificas (por ejemplo, la Guidelines American Thoracic Society)28. Lo mismo sucede con respecto al neumotórax y al neumomediastino, donde no se ha encontrado un estudio concreto de coste-eficacia de la Radiología de Urgencias en estas patologías, pero la práctica diaria y las directrices Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 de diversas sociedades científicas confirman la eficacia de la radiografía de tórax unida a su adecuado coste en su evaluación29-32. Discutible es la necesidad de una evaluación radiológica de una pleuritis como causa del DT. Sin tampoco haber constancia de un estudio de costeeficacia al respecto, sí existen diversos trabajos sobre la eficacia de la ecografía en estos pacientes, permitiendo en Urgencias una valoración adecuada y de bajo coste33,34. Finalmente, con respecto al DT debido a una fractura costal, tampoco se ha publicado un estudio específico de coste-eficacia al respecto porque dicho estudio estaría de más, al ser un hecho constatado que la evaluación radiográfica constituye el método de elección y más rápido para detectar una fractura a un coste adecuado35. Discusión El adecuado funcionamiento de los SUH constituye para no pocos hospitales y clínicas su talón de Aquiles, no solo desde la asistencia sanitaria del enfermo en sí misma, sino también desde el punto de vista económico. Debido a que para el estudio clínico del paciente en Urgencias con frecuencia son necesarias diversas exploraciones radiológicas, no solamente al inicio de su valoración, sino también a través de todo su curso evolutivo y de estancia en los SUH, las UDIU constituyen unos de los puntos angulares del sistema sanitario de Urgencias y por consiguiente deben estar organizadas adecuadamente36. El DT es un ejemplo evidente de ello, pues, unido a su elevada frecuencia y la gran variedad de las posibles patologías subyacentes, da lugar a que los diversos médicos especialistas de Urgencias requieran diversas pruebas de laboratorio Por todo lo comentado, es necesario un abordaje coste-efectivo de la evaluación del DT en Urgencias42. Acorde con el estado tecnológico actual y utilizando adecuadamente los equipos modernos de diagnóstico por imagen, la Radiología de Urgencias es coste-efectiva en el DT que clínicamente se sospecha, o no se puede descartar, que sea de origen cardiaco en pacientes (mujeres de cualquier Fernández Sánchez J. La importancia de la Radiología... edad y hombres jóvenes) sin antecedentes de enfermedad cardiovascular, con una evaluación cardiaca inicial negativa (electrocardiogramas y determinaciones enzimáticas y de troponina normales) y con un pretest de probabilidad de enfermedad cardiaca bajo a intermedio21,43,44. En este grupo de pacientes, la TC multicorte (de 64 hélices) permite una correcta evaluación con un coste adecuado, presentando además un importante valor predictivo negativo, de forma que la TC es extremadamente útil en la predicción de una evolución clínica libre de eventos cardiovasculares graves (letalidad por muerte súbita o por infarto miocárdico, isquemia miocárdica grave y angina de pecho inestable) hasta tres años después de su asistencia a Urgencias19. Ante un paciente que acude a Urgencias con DT, asociado o no a disnea, y con un dímero D elevado se debe siempre evaluar la existencia de un TEP. La radiografía simple de tórax solo muestra signos indirectos de una embolia pulmonar en algunas ocasiones (y raramente signos directos), por lo que su confirmación o descarte en los SUH debe hacerse mediante TC, pues una gammagrafía pulmonar, como exploración diagnóstica alternativa, no suele estar disponible, por lo general, durante las guardias. Numerosos estudios han demostrado la valía de la TC en el diagnóstico de un TEP45,46. Pero el mal uso de la TC, esto es, realizar su petición para descartar un TEP ante cualquier DT de etiología incierta y/o por la inexperiencia de los médicos de Urgencias y/o por temor a equivocarse en la evaluación del paciente, llevando a cabo una medicina defensiva, nunca será coste-efectivo. La posibilidad de un TEP en pacientes con valores normales de dímero D es mínima, por no decir nula46. Pero es que, además, al realizar una TC en esos pacientes sin un dímero D pato- Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología (fundamentalmente, determinaciones de enzimas cardiacas y seriadas de troponina ante la sospecha de un posible infarto de miocardio o para descartarlo en casos de una sintomatología inespecífica o incierta), electrocardiogramas, ecocardiografías y diversas exploraciones radiológicas, todo lo cual conlleva un importante gasto. El elevado diagnóstico erróneo en Urgencias del DT en el marco de un SCA (2-4% de evaluaciones incorrectas), lo cual va asociado a una duplicación de la mortalidad9,37, el diagnóstico tardío de un TEP o la demora en su seguro descarte, así como los fallos y/o demoras en el diagnóstico o exclusión certera de otras principales y frecuentes causas del DT (disección aórtica, neumotórax, neumonía, pleuritis, etc.) conllevan importantes consecuencias en el manejo global y la toma de decisiones diagnósticas y terapéuticas. Todo ello da lugar a un elevado índice de ingresos hospitalarios por DT, habiéndose referido que anualmente más de dos millones de pacientes que acuden a Urgencias por DT son ingresados innecesariamente en EE. UU.3840 . Aproximadamente un 60% de los pacientes en quienes seria posible un alta inmediata o temprana de los SUH son ingresados37. Todo ello también tiene implicaciones médico-legales. Un 20% de los juicios perdidos por mala praxis médica están relacionados con la atención sanitaria de Urgencias9, muchos de ellos por diagnósticos radiológicos erróneos41. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 75 Fernández Sánchez J. La importancia de la Radiología... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 76 lógico se puede bloquear el equipo de TC y demorar el diagnóstico de otros pacientes en Urgencias en donde una TC sea imprescindible, o esté, al menos, más indicada. La realización de una TC en Urgencias para la evaluación de un TEP presenta un costeefectividad en enfermos con DT y unos valores elevados de dímero D, llevando a cabo también una ecografía Doppler en color venosa de la extremidad inferior en la evaluación global del paciente27. La ecografía de las venas, la cual, por lo general, también es efectuada por la UDIU, es importante, no ya para determinar una posible fuente de origen del TEP, sino además para el diagnóstico diferencial, porque el dímero D está también elevado en un infarto miocárdico agudo, pudiendo tener aquí un valor pronóstico conforme a la evolución de los pacientes48. Sin embargo, es discutible si las ecografías venosas son necesarias en Urgencias tras detectar un TEP, o habiéndolo descartado, por TC, en aquellos pacientes sin molestias en las piernas y sin sospecha clínica de padecer una trombosis venosa profunda. Además, cuando se realiza una TC para estudiar un posible TEP se puede planificar una extensión de la exploración a la pelvis y a las extremidades inferiores en caso de considerarse necesario, constituyendo esta pauta un protocolo alternativo en la evaluación de un TEP en algunos SUH49. Con respecto a la disección aórtica, la TC es en actualidad el método de diagnóstico por imagen que se debe llevar en Urgencias para su evaluación y, en caso de su detección, decidir y planificar su tratamiento, bien quirúrgico en la disección tipo Stanford A, bien inicialmente conservador en Stanford tipo B, pudiéndose en esos casos evaluar la colocación de una endoprótesis (stent) aórtica tras el ingreso del paciente50. Debido a la importancia de la TC en Urgencias en estos casos no tiene mucho sentido discutir su coste-eficacia, porque su necesidad y efectividad es evidente y de la TC dependen las medidas a tomar para salvar la vida del enfermo, de tal forma que en la actualidad y en la práctica diaria la TC multicorte está considerada el método estándar de referencia en el diagnóstico de la disección aórtica51. En aquellos pacientes donde clínicamente es posible que el origen del DT pueda ser tanto cardiaco como debido a un TEP o a una disección aórtica, o en aquellos casos donde no se pueda descartar en la evaluación clínica inicial simultáneamente, estas tres causas de DT con mayor mortalidad y morbilidad, la TC multicorte de 64 hélices (triple rule out) presenta en estos casos un coste-efectividad adecuado12,42,44,52 (tabla 2). Con respecto a otras etiologías del DT, la experiencia de la práctica diaria, pu- Tabla 2. Coste-efectividad verificada de la Radiología de Urgencias en la evaluación del DT (mediante TC multicorte de 64 hélices). – Posible DT de origen cardiaco en hombres jóvenes y mujeres de cualquier edad con una evaluación cardiaca inicial negativa (ECG y enzimas cardiacas, incluidas determinaciones de troponina, normales o inconclusivas) y con un pretest de probabilidad bajo o intermedio. – DT con sospecha de TEP en pacientes con dímero D elevado (y con realización adicional de una ecografía venosa de las extremidades inferiores). – Pacientes donde clínicamente no se puede descartar simultáneamente alguna de las tres causas del DT con mayor mortalidad y morbilidad (SCA, TEP, disección aórtica) (triple rule out TC). Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 La Radiología de Urgencias también tiene una importante función en la detección o descarte de las causas pleurales del DT, diagnóstico que con eficacia y bajo coste puede iniciarse con ultrasonidos (utilizando incluso ecógrafos portátiles en la propia cama del enfermo en Urgencias), para complementarse o completarse con la radiografía de tórax si se estima conveniente58. Fernández Sánchez J. La importancia de la Radiología... o pleural o tras la introducción de catéteres centrales, etc.), se puede evaluar la posibilidad de una TC de toráx, que podrá detectar o descartar definitivamente el neumotórax con una efectividad máxima56. Lo mismo sucede con el neumomediastino57. Finalmente, con respecto al DT debido a una fractura costal, es evidente Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología blicaciones y libros de texto, así como las recomendaciones de numerosas sociedades científicas avalan la importancia con un adecuado coste de la radiografía de tórax como método inicial de diagnóstico por imagen en muchas de esas patologías (tabla 1), bien gracias a su detección radiológica en algunos casos, pero también por su eficacia en su descarte en otros, todo lo cual permite considerar además la necesidad o no de una TC torácica complementaria. Y es que, parafraseando al filósofo alemán A. Schopenhauer cuando afirmó que “la salud no lo es todo, pero todo sin salud es nada”, se puede decir que “la radiografía de tórax no lo es todo en Urgencias, pero todas las Urgencias sin una radiografía de tórax puede que sean (nada o) incompletas”. Así, es un hecho admitido por las directrices de numerosas sociedades cientificas (por ejemplo, Guidelines American Thoracic Society) y avalado en artículos publicados28,53,54 que la radiografía de tórax es, con un coste bajo, eficaz para la evaluación de una neumonía, que también puede presentarse clínicamente con DT, quedando la TC como prueba complementaria en algunos casos de radiografías convencionales negativas en pacientes de alto riesgo (por ejemplo, inmunsuprimidos)55. En la evaluación de un neumotórax en Urgencias como posible causa del dolor, sobre todo ante la existencia de un trauma, pero también para descartar un neumotórax idiopático en aquellos casos de difícil catalogación clínica del DT, es evidente que la radiografía de tórax es el primer método de diagnóstico por imagen que se debe emplear por su eficacia, rapidez de realización y adecuado coste. Si la radiografía convencional es negativa y persiste el DT en un paciente con elevado riesgo de padecer un neumotórax (por ejemplo, historia previa de neumotórax, enfisema pulmonar con bullas, traumatismo pulmonar, punción pulmonar Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 77 En otras causas menos frecuentes de DT, como los linfomas y otras masas mediastínicas o hiliares, la radiografía de tórax proporciona en Urgencias una evaluación rápida, pudiendo descartar también otras posibles patologías, permitiendo seleccionar a esos pacientes en relación a su posible alta, ingreso o estancia en la Unidad de observación asociada al SUH en función de su estado clínico, para así planificar y realizar posteriormente una TC con evaluación definitiva o más concreta del linfoma o de las tumoraciones mediastínicas o hiliares, estando asociado este proceder a un coste-efectividad adecuado59. En las posibles causas del DT de origen gastrointestinal, es evidente que el diagnóstico de una esofagitis, gastritis, hernia o úlcera péptica se suele establecer por la clínica y la endoscopia, pero la radiografía de tórax en estos casos también es eficaz en el descarte de otras patologías e incluso puede detectar hernias de hiato o vólvulos gástricos como posible causa del DT60,61. Fernández Sánchez J. La importancia de la Radiología... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología que toda persona que acuda a Urgencias por molestias torácicas tras un trauma será evaluada inicialmente mediante radiografías, sin que un estudio de coste-eficacia sea necesario para validar este proceder, sobre todo en traumatismos menores. En politraumatizados o en traumas torácicos mayores, diversos estudios han demostrado la eficacia de realizar directamente una TC. En aquellos pacientes sin historia de un traumatismo (o con pequeños traumatismos olvidados) la radiografía de tórax efectuada en Urgencias puede ser muy eficaz, ahorrando costes, al detectar fracturas costales ocultas62-65. La rapidez en la realización de las exploraciones radiológicas constituye un factor en la evaluación global de su eficacia y los costes en Urgencias, ya que la demora de, por ejemplo, una TC de varias horas o incluso su citación para el día siguiente de la guardia nocturna en enfermos estables, ocasiona una mayor estancia del mismo en Urgencias o en su Unidad de Observación. Es evidente que la evaluación del DT ante la sospecha de una de las causas subyacentes de mayor mortalidad y morbilidad (SCA, TEP, disección aórtica) debe de hacerse lo más rápido posible, de forma que el concepto de golden hour, inicialmente aplicado a los politraumatizados, también se ha extendido a la isquemia miocárdica y al TEP66,67. Debido a las importantes consecuencias terapéuticas es también necesario un rápido diagnóstico o descarte de una disección aórtica, sobre todo del tipo Stanford A68. Todo ello no es fácil, de forma que algunos estudios indican que, por término medio, la TC se efectuó 2,4 horas después de su petición y que su retraso fue mayor, incluso superior a las 12 horas, en pacientes mayores de 65 años con DT con diversas patologías conocidas (por ejemplo, hipertensos, episodios previos de insuficiencia cardia- 78 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):69-83 ca, etc.) y con síntomas adicionales al acudir a Urgencias69. De ahí la importancia de la denominada TC triple rule out y de la adecuada organización de las UDIU para llevarla a cabo en el menor tiempo posible, que, acorde con nuestra experiencia y un estudio de próxima publicación, su debería realizar, por término medio, dentro de los primeros 60 minutos tras su petición por los médicos de Urgencias. Conclusión Los equipos modernos de diagnóstico por imagen permiten que la Radiología de Urgencias sea coste-efectiva en la evaluación de muchos casos de DT, sobre todo en determinados subgrupos de pacientes con una causa subyacente del DT de elevada mortalidad y morbilidad. Por ello, la Administración sanitaria debería dotar adecuadamente a las UDIU para que estas, con una organización adecuada, puedan llevar a cabo el gran número de exploraciones radiológicas requeridas por los SUH. Acorde con el estado actual de las investigaciones y de los estudios clínicos, será imprescindible que para la evaluación del DT todo hospital de primer orden o máxima atención sanitaria disponga a corto plazo de un TC multicorte de 64 hélices o TC de doble fuente (CT dual source) situado en o próximo al área de Urgencias. Bibliografía 1. Olshaker JS. Managing emergency department overcrowding. Emerg Med Clin North Am. 2009;27:593-603. 2. Bullard MJ, Villa-Roel C, Bond K, Vester M, Holroyd BR, Rowe BH. 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Pero debido a la existencia de múltiples pruebas de screening con sus diferencias en costes, aceptabilidad y efectividad en términos de años de vida ganados (AVG), se necesitan estudios bien diseñados de coste-efectividad que ayuden en la toma de decisiones por parte de las autoridades sanitarias. En este punto, una novedosa técnica de radiodiagnóstico, la colonoscopia virtual, ha surgido como parte del screening de CCR en la población general. Cuando ambos tipos de colonoscopia se comparan con la estrategia de “no screening”, las relaciones de coste-efectividad incremental para la colonoscopia tradicional y para la CV son, respectivamente, 20 000 y 30 000 € por AVG, demostrando ambas estrategias ser coste-efectivas de acuerdo a la mayoría de umbrales de aceptabilidad internacionales. Ahora bien, cuando ambas son comparadas entre sí, la colonoscopia tradicional parece ser la más coste-efectiva. Puesto que la mayoría de los estudios se apoyan en asunciones y estimaciones basadas en datos procedentes de ensayos clínicos y construcción de modelos matemáticos, aún queda mucho por hacer para obtener conclusiones definitivas. Palabras clave: Colonoscopia virtual; Screening; Cáncer colorrectal; Coste-efectividad. Cost-effectiveness of radiological tests applied to colorectal cancer screening: computed tomography colonography Abstract Colorectal Cancer (CRC) screening is an effective strategy to reduce mortality and even the incidence rate. However, there are many types of screening tests which differ in cost, acceptability and effectiveness in terms of life years gained (LYG). Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Esther Uña Cidón. Uña Cidón E Departamento de Oncología Médica. Royal Bournemouth Hospital NHS Foundation Trust y Dorset Cancer Centre. Bournemouth. United Kingdom. Dirección para correspondencia: [email protected] 85 Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 86 Thus, well-designed studies are needed to improve the knowledge of their costeffectiveness to assist authorities in health decision-making process. At this point a novel radiological technique namely, virtual colonoscopy (VC), has emerged as part of the screening for CRC in the general population. When both types of colonoscopies are compared with the strategy of “no screening”, the incremental cost-effectiveness ratio for colonoscopy and VC are € 20,000 and € 30,000 per LYG respectively. Therefore, both strategies have proved to be costeffective screening alternatives according to most international acceptability thresholds. However, when both are compared to each other, traditional colonoscopy appears to be the most cost-effective strategy. Since most studies are based on assumptions and estimates are based on data from clinical trials and mathematical modeling, much remains to be done to draw firm conclusions. Key words: Virtual colonoscopy; Screening; Colorectal cancer; Cost-effectiveness. Introducción El cáncer colorrectal (CCR) es el segundo tumor más frecuente en los países occidentales, con una esperable tendencia al incremento de su incidencia paralela al envejecimiento poblacional1. Este hecho, unido a su todavía elevada tasa de mortalidad, sitúa a la enfermedad en uno de los primeros puestos en la escala de problemas relevantes de salud pública1. Los recientes avances en biología molecular y epidemiología han permitido conocer con más detalle las causas y mecanismos implicados en el desarrollo de esta patología y, consecuentemente, el progreso hacia tratamientos más personalizados que logran mejores resultados en supervivencia2. Pero este avance ha traído consigo un incremento muy llamativo de los costes que se ha cuantificado en más de un 200% desde los años 90 hasta 20033,4, lo cual, unido a su creciente incidencia y alta mortalidad, obliga a adoptar medidas encaminadas a la contención de la enfermedad. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 La mayor proporción de CCR es de tipo esporádico, mientras que solo el 10% presenta componente hereditario5. Por tanto, el mayor impacto en cifras de CCR se lograría a través de la reducción del número de casos que aparecen en población con un riesgo medio de desarrollar esta patología. En este sentido, el cribado de CCR en la población se ha revelado como una medida eficaz para disminuir la morbimortalidad secundaria a esta enfermedad6, siendo además coste-efectivo. Pero a pesar de la fuerte evidencia respecto de la conveniencia del screening7, estos programas abarcan en general a menos el 50-60% de la población diana8,9. Los problemas clave que explican esta baja adherencia poblacional se relacionan, entre otros, con la existencia de numerosas incertidumbres tales como cuál debería ser la edad de la población diana, con qué intervalo ideal deberían repetirse los estudios, qué test debe utilizarse como la mejor estrategia de cribado poblacional y cuáles son los potenciales riesgos o efectos adversos asociados a la aplicación del test o incluso el prevalente, solo superado por el cáncer de mama. La peculiaridad patogénica que presenta el CCR, con una larga fase asintomática6, unida a la circunstancia de que es una enfermedad altamente curable en fases iniciales, la convierte en una patología idónea para plantear el screening poblacional con la intención de reducir la mortalidad. Por otro lado, el hecho de que a través del cribado se detecten y eliminen las lesiones precursoras (pólipos adenomatosos), interrumpiendo así la vía de transformación adenoma-carcinoma, podría reducir las crecientes cifras de incidencia. De hecho, se sabe que la eliminación de adenomas a través de colonoscopia reduce el riesgo de cáncer un 75%11,12. Entre 1982 y 2002, la incidencia en Europa para hombres y mujeres fue del 38,5 y el 24,6% (ajustado por edad) por 100 000 habitantes, respectivamente, mientras que en Estados Unidos (EE. UU.) las cifras fueron más altas (el 38,6 y el 28,3% en hombres y mujeres, respectivamente)1. Consecuentemente, la introducción de programas poblacionales de screening o cribado se ha convertido en una prioridad para las políticas sanitarias de muchos países. Epidemiología del cáncer colorrectal Globalmente, el CCR presenta una incidencia más alta en los países con estilo de vida occidentalizado, más aún en varones que en mujeres y sobre todo por encima de los 50 años1. Mundialmente, es el segundo tumor más Los análisis de coste-efectividad (ACE) son una forma de evaluación económica que compara los resultados en salud y las consecuencias económicas de diferentes intervenciones o alternativas dentro de programas de intervención sanitaria. Los costes son valo- Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Dos estudios que han evaluado directamente la consecuencia del incremento de los costes del tratamiento del CCR en las relaciones de costeefectividad del screening, han mostrado que el coste-efectividad del cribado es favorable comparado con “no screening” y que la mayoría de las estrategias de cribado son incluso ahorradoras de costes, en comparación con los que generarían los tratamientos13,14. Por el contrario, la mortalidad fue más elevada en Europa, con un 18,5 y un 10,7% en hombres y mujeres, frente al 13,5 y 9,2%, respectivamente, en EE. UU. Las cifras totales de 2002 recogen aproximadamente 529 000 muertes secundarias a CCR en el mundo1. Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... miedo a los resultados o al dolor o incomodidad de la prueba10. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 87 La relevancia de este problema de salud se refleja claramente en la relación que existe entre la tasa de incidencia y mortalidad que se considera aproximadamente la mitad de los nuevos casos1. En España, de acuerdo a datos de 2000, el número de casos nuevos por año se sitúa en torno a los 21 000 en ambos sexos, frente a 11 900 defunciones, mientras que el número de casos prevalentes es de 64 000 (28 000 en mujeres y 36 000 en varones)15. De todos modos, la incidencia y la mortalidad en España son sustancialmente menores que las de los países del norte de Europa, e incluso que las tasas promedio del continente15. Análisis de coste-efectividad en Medicina: generalidades Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 88 rados en unidades monetarias y los beneficios en unidades naturales de efectividad que varían de acuerdo a la evaluación que se lleva a cabo16,17. La efectividad hace referencia al impacto o efecto que se alcanza con una intervención sanitaria en condiciones reales, lo que la diferencia de la eficacia que evalúa el impacto en condiciones ideales16. Los ACE pueden aplicarse a aquellos programas o intervenciones en salud cuyo grado de efectividad es distinto, pero que comparten los mismos objetivos y por tanto se pueden medir en la misma unidad de efectividad. De hecho, la elección del indicador de efectividad para llevar a cabo estos estudios puede afectar a la eficiencia relativa de las diferentes opciones que se analizan y, por tanto, dicha elección deberá tener en cuenta los objetivos finales del análisis, los objetivos de la política sanitaria y la información científica disponible16,17. Finalmente, aunque estos análisis no permitan determinar cuál es la intervención óptima, sí pueden indicar cuál es la que proporciona los mayores beneficios en salud al menor coste, con la intención de facilitar de este modo la toma de decisiones en política sanitaria. Con este objetivo, utilizan habitualmente un modelo matemático de estimación de beneficios y potenciales complicaciones con cada intervención, así como los costes asociados a cada una de ellas. A través de este modelo, se da un valor a cada uno de los potenciales efectos con el fin de obtener un efecto neto, ya sea un beneficio o un daño neto16,17. Los resultados de los ACE se resumen en la relación de coste-efectividad y la comparativa entre dos estrategias se valora de acuerdo a la relación de coste-efectividad incremental que nos Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 muestra el coste extra por cada AVG, con una estrategia frente a la otra. Esta última se halla mediante la fracción entre la diferencia en años de vida ganados (AVG) con cada intervención incluida en el numerador y la diferencia en costes asociados a cada estrategia colocada en el denominador16,17. La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que un programa de screening poblacional solamente debería ser puesto en marcha si cumple con el requisito de mantener un “buen balance” o “equilibrio” entre los beneficios que proporciona en términos de salud y los costes globales que implica. Por desgracia, no existe una definición universal del significado de “buen balance”18. Esto significa que distintos países pueden adoptar políticas sanitarias diferentes en relación al screening, sin faltar a la recomendación de la OMS. De hecho, esto es lo que sucede en la realidad. Los ACE aplicados a la salud consideran en general que una intervención sanitaria que proporciona un AVG extra al coste de ≤50 000 $ es aceptable en la mayoría de los países industrializados, pero si el coste es de 100 000 $, la aceptabilidad sería muy discutible19. Screening de cáncer: principios generales y aplicado a cáncer colorrectal El screening o cribado, como actividad de prevención secundaria, se considera un método eficaz para controlar las cifras de cáncer a nivel poblacional siempre que se logre una elevada participación individual, un adecuado diagnóstico y un correcto y temprano tratamiento15. Para implementar uno de estos programas, es necesario evaluar adecuadamente los resultados sanitarios y los Las guías21 para la detección temprana del CCR en adultos con riesgo medio actualizadas en 2008 (Tabla 2) a través del consenso alcanzado entre la American Cancer Society (ACS) y la US Multi-Society Task Force (USMSTF) en CCR, y el American College of Radiology (ACR), recomiendan iniciar el cribado a la edad de 50 años con una de las opciones siguientes: sangre oculta en heces (SOH) (test de resina de guayaco [G] o inmunoquímicos [I]) anual, sigmoidoscopia flexible cada cinco años, colonoscopia cada diez años, enema baritado de doble contraste cada cinco años o colonoscopia virtual (CV) cada cinco años. Las decisiones finales relativas a la aplicación de programas de cribado del cáncer corresponden a las autoridades sanitarias y deben tomarse como parte de un ejercicio general de fijación de prioridades en el uso de los recursos sanitarios. Aunque las tasas de cumplimiento con las medidas de screening son muy variables, habitualmente menos del 5060% de la población se adhiere al programa8,9. Hay muchas razones que explican esta baja participación, aunque en el estudio llevado a cabo por Vernon se reflejaron como principales la incomodidad de someterse a estos test, el exceso de trabajo o de carga familiar, la falta de interés o incluso se adujo como causa la ausencia de síntomas22. Para el CCR, se han considerado distintos test a la hora de decidir la puesta en marcha de un programa de screening20. Pueden clasificarse en dos tipos: por un lado, los test que detectan primariamente cáncer y, por otro, Ahora bien, también hay otras razones para no realizar estos test de screening, como son la preocupación por las posibles complicaciones generadas por los mismos, como dolor, disconfort o daños secundarios, o tam- Tabla 1. Test de screening en adultos con riesgo medio20 Test que detectan primariamente cáncer Test de sangre oculta en heces con resina de Guayaco Test de sangre oculta en heces inmunoquímico Test de ADN exfoliado en heces – Test que detectan cáncer y lesiones avanzadas Colonoscopia Sigmoidoscopia flexible Enema baritado con doble contraste Colonoscopia virtual (CV) Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... La gestión de programas de screening no es fácil y requiere de recursos suficientes, tanto humanos como financieros y materiales, que garanticen una adecuada organización y calidad. Todos estos programas de screening del cáncer deben ofrecerse a personas sanas si se ha demostrado que disminuyen la mortalidad específica de la enfermedad o la incidencia de la enfermedad, en general o en estadios avanzados, si además se conocen adecuadamente sus beneficios y sus riesgos, y si la relación coste-efectividad resulta aceptable, así que no todas las pruebas de screening de enfermedad neoplásica reúnen estas características1. los que detectan cáncer y otras lesiones avanzadas (Tabla 1). Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología costes de todos los procedimientos mediante la realización de ensayos clínicos comparativos aleatorizados. Este requisito es extensible a todas las nuevas pruebas de screening, antes de incorporar dichos test a la práctica clínica rutinaria1. 89 Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 90 Tabla 2. Recomendaciones de screening de cáncer colorrectal en la población de riesgo medio21 Organización American Cancer Society, U.S. MultiSociety Task Force en Colorectal Cancer, y American College of Radiology Test que detectan primariamente la presencia de pólipos adenomatosos y cáncer (opciones aceptables) Test que detectan primariamente cáncer (opciones aceptables) American College of Gastroenterology Colonoscopia es la modalidad preferida para el screening de cáncer colorrectal (nivel de evidencia B) Métodos alternativos a la colonoscopia de screening incluyen sangre oculta en heces anual (nivel de evidencia A), sigmoidoscopia flexible cada cinco años o la combinación de sangre oculta en heces anual y sigmoidoscopia flexible bién la poca aceptabilidad general de los test debido a su inconveniencia20. Con la intención de franquear dichas barreras están emergiendo nuevos test de cribado como la CV y la cápsula endoscópica del colon (CEC). Nuevos test de screening en cáncer colorrectal Cápsula endoscópica del colon La CEC puede ser un medio para superar la baja adherencia poblacional al cribado de CCR23. Es un dispositivo a modo de cápsula ingerible con una cámara de vídeo en los dos extremos que puede tomar fotografías a medida que avanza a través del tracto gastrointestinal. PillCam Colon 1 (PCC1) fue la primera cápsula para la visualización del colon, siempre tras una limpieza adecuada. PCC1 es un dispositivo pequeño, que mide 11 x 31 mm y cuenta con dos cámaras que permiten al dispositivo la adquisición de imágenes de vídeo con una amplia área de Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 Recomendaciones Desde la edad de 50 años: – Sigmoidoscopia flexible cada cinco años – Colonoscopia cada diez años – Enema de doble contraste baritado cada cinco años – Colonoscopia virtual cada cinco años Desde la edad de 50 años: – G-SOH anual con alta sensibilidad – I-SOH anual con alta sensibilidad – ADN fecal con alta sensibilidad para cáncer (intervalo no claro) cobertura, control automático de la luz y una velocidad de cuatro imágenes por segundo. El sistema incluye un conjunto de sensores y un registro de datos conectado al paciente durante el procedimiento. Los datos registrados se descargan en la estación de trabajo para la revisión del vídeo del colon23. La segunda generación de PillCam Colon 2 (PCC2) es similar a la anterior, pero incorpora nuevos avances como el ángulo de visión, que se ha aumentado a 172°, la tasa de fotogramas adaptativa dependiendo de si está en movimiento o estacionaria y un nuevo software sencillo para la estimación del tamaño del pólipo. El procedimiento de limpieza del intestino hasta la ingestión de la cápsula es similar al utilizado para la colonoscopia tradicional. Sin embargo, este ha de ser más riguroso para lograr una adecuada sensibilidad del método23. El nivel de limpieza ha sido considerado como bueno a excelente en el 72- De esta forma, la CCE parece ser un método seguro y eficaz para visualizar la mucosa del colon sin necesidad de sedación o insuflación de aire23. Aunque su sensibilidad para detectar pólipos, adenomas avanzados y cáncer es menor en comparación con la colonoscopia tradicional, se sigue avanzando en las mejoras. De momento, la CCE es el método menos evaluado para el screening de CCR. Colonoscopia virtual Hay un creciente interés en la colonografía por tomografía computarizada multicorte (TCMC), también conocida como colonoscopia virtual (CV), fundado en que esta prueba combina la sensibilidad y la especificidad de la colonoscopia con la no invasividad de los biomarcadores de detección (SOH, ADN fecal). Dentro del marco del screening, la CV se integra en sustitución del enema de bario en los casos de colonoscopia incompleta24. Pero mucho más importante aún es su papel potencial en el screening de primera línea, a la par que la SOH o la sigmoidoscopia flexible o colonoscopia. Su objetivo en este campo sería seleccionar individuos que van a necesitar someterse a otras modalidades de cribado. Como se ha explicado anteriormente, en marzo de 2008 el consenso 21 alcanzado por la ACS, la USMSTF y el Desafortunadamente, la USPSTF25 no la consideró suficientemente avalada por la evidencia científica, debido a la incertidumbre que aún existía con respecto a la significación de los hallazgos incidentales de lesiones extracolónicas y del potencial daño por exposición a la radiación. Tampoco había muchos datos sobre coste-efectividad de la prueba en este campo y aún quedaba por resolver el problema de la preparación intestinal ideal. Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... La PCC2 mostró una mayor sensibilidad (89%) y especificidad (76%). ACR se plasmó en la publicación de las guías de screening en la población con riesgo promedio (Tabla 2). Estas directrices distinguían entre pruebas que pueden detectar CCR y reducir así la mortalidad y las que detectan pólipos y CCR, disminuyendo con ello incidencia y mortalidad20 (Tabla 1). Este último grupo de pruebas incluye colonoscopia tradicional, sigmoidoscopia flexible, enema baritado de doble contraste y por primera vez la CV, con la recomendación de ser repetida cada cinco años a partir de los 50. Mucho queda aún por conocer sobre su precisión en la detección de CCR y adenomas. Los resultados de varios trabajos28-30 son contradictorios, pero un metaanálisis ha puesto de manifiesto que la CV es altamente específica para la detección de pólipos colónicos y neoplasias31 (Figuras 1 y 2). Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 88% de los estudios con PCC1. La sensibilidad para la detección de pólipos significativos (>6 mm o más de tres pólipos >3 mm) osciló entre el 63 y el 88%, con especificidades del 64-94%. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 91 Otros dos importantes grupos como son el Asia Pacific Working Group on Colorectal Cancer26 y el American College of Gastroenterology (ACG)27 consideran a la CV como un test de segunda línea en el screening, reservado para los individuos que no quieren o no pueden someterse a la colonoscopia tradicional o para los que aquella fue incompleta. Precisión diagnóstica de la Colonoscopia Virtual Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 92 de realización de la CV con la colonoscopia tradicional en individuos asintomáticos con un riesgo promedio. Por el contrario, el IMPACT (Italian Multicenter Polyps Accuracy Computed Tomography Colonography)33 se realizó en población mixta de sujetos asintomáticos con riesgo elevado y en pacientes remitidos por un test de SOH positivo. Figura 1. Pólipo visualizado en colonoscopia virtual Tres importantes ensayos han sido diseñados con el fin de aclarar estas incertidumbres. Por un lado, dos grandes ensayos clínicos multicéntricos: el ACRIN32, llevado a cabo en EE. UU., y el IMPACT33, realizado en Italia. El ACRIN (American College of Radiology Imaging Network)32 se diseñó con el objetivo de comparar la factibilidad A El tercero de los estudios es el SIGGAR (Special Interest Group in Gastrointestinal and Abdominal Radiology); llevado a cabo en el Reino Unido, se dirigió a pacientes sintomáticos con el objetivo de detectar CCR34. Aún está pendiente de resultados concluyentes. Los resultados del ACRIN y del IMPACT han mostrado una sensibilidad para la detección de pólipos >10 mm del 90%, y del 78-85% para pólipos >6 mm, mientras que la especificidad fue extremadamente buena, independientemente del tamaño de la lesión. B Figura 2. Imagen de pólipo (a) y resto del colon (b) Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 En cambio, el valor predictivo negativo (VPN) fue muy elevado en ambos ensayos clínicos, acercándose al 100%, lo que es muy importante para asegurar al paciente con resultado negativo la validez de dicha prueba32,33. Otros trabajos reafirman la importancia de la CV cuando se la compara con la tradicional. El proyecto de screening realizado en la Universidad de Wisconsin35 objetivó tasas de detección para adenomas avanzados del 3,2% para El grupo de Colorectal Cancer Prevention Trial de Munich36 reclutó 300 sujetos sanos y obtuvo excelentes resultados en comparación con los de otros test de screening como son la colonoscopia, la sigmoidoscopia flexible y la SOH. De todas formas, varias cuestiones permanecen aún abiertas como cuál es el significado de los pólipos diminutos (<6 mm), el manejo de los intermedios (6-9 mm) o cuál es la tasa de detección de lesiones no polipoideas o lesiones planas37 y el impacto de los hallazgos extracolónicos. Una revisión sistemática publicada por Hassan et al.38 concluye que los pólipos diminutos no tienen impacto clínico, o este es mínimo (Tabla 4). De esta forma, si se resuelve fijar el umbral para realizar polipectomía en 6 mm, se identificaría al 95% de sujetos con adenomas avanzados, mientras que si es de 10 mm identificaríamos al 88%. Tabla 3. Resultados del ACRIN e IMPACT en precisión diagnóstica32,33 Ensayo clínico Sensibilidad ACRIN IMPACT Especificidad ACRIN IMPACT VPP ACRIN IMPACT VPN ACRIN IMPACT Pólipos >10 mm Pólipos >6 mm 90% 91% 78% 85% 86% 85% 88% 88% 23% No evaluado 40% 62% 99% No evaluado 98% 96% VPN: valor predictivo negativo; VPP: valor predictivo positivo. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... El IMPACT, por el contrario, mostró un mejor VPP, tal como se muestra en la Tabla 3. Los datos que publican hospitales con alta experiencia, como el grupo de hospitales de Korea, confirman este VPP (69% si >6 mm y 92% si >10 mm). CV y del 3,4% para colonoscopia, sin diferencias estadísticamente significativas. No obstante, la CV no tuvo complicaciones, mientras que en siete casos del grupo de colonoscopia se observaron perforaciones. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología La mayor limitación del ACRIN fue su pobre valor predictivo positivo (VPP), que resultó de un 23% para pólipos ≥10 mm. Esto afectaría muy negativamente al programa de screening, pues obligaría a la realización de numerosas colonoscopias que finalmente habrían resultado innecesarias con la consecuente incomodidad, riesgos potenciales de complicaciones y un coste muy elevado. 93 Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 94 Tabla 4. Relación entre el tamaño del pólipo y el riesgo de lesión avanzada Tamaño del pólipo ≤5 mm 6-9 mm <10 mm >10 mm Riesgo de lesión avanzada 0,9% 4,9% 1,7% 73,5% El manejo de los pólipos intermedios (de 6 a 9 mm) es aún motivo de debate. Actualmente, cualquier pólipo ≥6 mm debería ser referido para colonoscopia y polipectomía (American College of Surgeons Guidelines)24, aunque ya hay algunos estudios que consideran la alternativa del seguimiento periódico del pólipo39. Por otro lado, la CV presenta una cierta dificultad para detectar lesiones no polipoideas o planas, aunque, debido a que estas representan un subgrupo de los pólipos sésiles, se considera que la mayoría son ligeramente elevadas37. Este hecho favorece su detección a través de CV, que ha demostrado una sensibilidad del 80-90% para adenomas planos40. Tasa de participación La colonoscopia tradicional es considerada la mejor técnica de screening, pero tiene muy baja tasa de participación poblacional. Datos muy recientes de un estudio italiano subrayan las dificultades para implementar esta técnica, que presenta unas tasas de participación entre el 2,8 y el 12,4%41. La implicación de la población en los programas de cribado es clave porque afecta directamente a la eficacia del programa. De hecho, si la colonoscopia tradicional reduce la incidencia de CCR un 76% asumiendo una participación del 100%, cuando esta cae a tan solo un 20% de la población, el beneGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 ficio en reducción de incidencia cae al 15%42. Teóricamente, la CV sí podría incrementar la adherencia poblacional. Los tres problemas más importantes que disminuyen la participación en colonoscopias tradicionales de screening son la necesidad de preparación del intestino, la vergüenza por el tipo de prueba y el miedo al dolor43, que quedaría resuelto con el uso de sedación. La ventaja de la CV es el uso de una preparación más suave o incluso sin laxante con una minimización del dolor por distensión que hacen que el paciente se sienta más cómodo durante la exploración44. Ahora bien, aún no está claro si la CV incrementaría esta tasa de participación. Un estudio realizado en Australia45 ha mostrado que el 28,4% de la población diana aceptó someterse a CV de screening y que el 67% de ellos la prefirieron a la colonoscopia, pero se necesitan más datos antes de obtener una conclusión definitiva. Llegados a este punto, todos los esfuerzos han de encaminarse a la consecución de técnicas más aceptadas y con mayor tasa de cumplimiento, o bien adoptar estrategias que mantengan una buena relación de coste-efectividad a pesar de la tasa de cumplimiento. El estudio de Vijan et al.46 indica que la colonoscopia tradicional cumple con el último requisito y mantiene su relación de coste-efectividad incluso con menor tasa de cumplimiento, lo que haría de esta técnica la preferida para el screening poblacional. Análisis de coste-efectividad aplicados al screening de CCR Los test de screening de CCR varían considerablemente en términos de Múltiples estudios que evalúan la relación de coste-efectividad de las diferentes estrategias de cribado han mostrado que la colonoscopia tradicional, la sigmoidoscopia flexible y la SOH son alternativas coste-efectivas. Frente a “no screening” Una revisión sistemática publicada en 200247 mostró que las relaciones de coste-efectividad para G-SOH oscilaron entre 5691 y 17 805 $ por AVG; para la sigmoidoscopia flexible, fueron de 12 477 a 39 359 $; para la combinación de G-SOH y sigmoidoscopia flexible, las cifras fueron de 13 792 a 22 518 $ y, finalmente, para la colonoscopia tradicional, de 9038 a 22 012 $ por AVG. Los autores concluyeron que comparada con “no screening” la relación de coste-efectividad era inferior a 50 000 $ por cada AVG, lo que significa que la mayoría de los países industrializados las considerarían aceptables. Otros estudios publicados desde 2001 confirman que el screening del CCR es coste-efectivo, pero no establecen qué estrategia es más coste-efectiva o presenta mejor relación de coste-efectividad incremental con respecto a las demás46,48. Los programas de screening de países europeos y asiáticos presentan mejores relaciones de coste-efectividad que las obtenidas en estudios de EE. O’Leary et al. demostraron que la relación de coste-efectividad incremental para la sigmoidoscopia flexible era aceptable frente a “no screening” (16 801 $ por AVG). También la colonoscopia tradicional (19 285 $ por AVG). Pero la SOH anual o bianual fueron las estrategias menos coste-efectivas (46 900 $ y 41 183 $ por AVG, respectivamente)51. Y es que, aunque la efectividad de la SOH ha sido demostrada en tres ensayos clínicos aleatorizados y uno no aleatorizado controlado utilizando GSOH, la sensibilidad es muy baja y su impacto en la detección de lesiones precancerosas es muy limitado. Los test de I-SOH son más precisos, aunque también más caros y con mayor tasa de falsos positivos, lo que podría sobrecargar el programa de screening, incrementando los costes innecesariamente ante la necesidad de completar el estudio con endoscopia sin que esto impacte en la efectividad. Además, el problema de la tasa de aceptación y participación sigue siendo importante. El hecho de que recientemente se haya simplificado el test podría mejorar el cumplimiento. Por otro lado, se ha sugerido que un proceso de lectura automatizado podría mejorar la sensibilidad del test manteniendo una aceptable especificidad. Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... El test de SOH y la colonoscopia tradicional representan los dos extremos de un amplio rango de potenciales estrategias de screening. El primer método se caracteriza por su bajo coste y su simplicidad de realización, mientras que el segundo se caracteriza por su eficacia y meticulosidad. UU. (<10 000 $ por AVG) cuando se comparan con “no screening”, aunque también los costes de los test son más baratos49,50. Recientemente se ha intentado introducir el test de ADN fecal, pero un estudio llevado a cabo en EE. UU. detectó que la relación de coste-efectividad para este test comparado con “no screening” es de 13 000 a 30 000 $ por AVG. Sin embargo, el test de SOH es más efectivo (es decir, logra mayor número de AVG) a un menor coste y, por Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología aceptabilidad por el público en general, coste, tasa de complicaciones o efectos adversos y efectividad. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 95 Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 96 tanto, el test de ADN resulta ser la estrategia fuertemente dominada, con lo que se concluye que no debe ser la opción a implementar53. Comparación entre diferentes tipos de estrategias Una revisión sistemática publicada en 200247 que comparó las relaciones de coste-efectividad de unas estrategias frente a otras no arrojó ninguna conclusión definitiva. La mitad de los estudios incluidos concluyeron que la combinación de sigmoidoscopia flexible y G-SOH era la estrategia más coste-efectiva; pero la otra mitad concluyó que lo era la colonoscopia tradicional. Por otro lado, si se fija como cifra umbral de aceptabilidad 20 000 $ por AVG, se detecta que existe al menos un estudio que avala a cada una de las pruebas de screening como la preferida. En Europa, la mayoría de los ACE adoptan como estrategia estándar de cribado el test de G-SOH54, seguido en número por la sigmoidoscopia flexible55, mientras que solo tres estudios evalúan la colonoscopia como técnica de screening56. Esto se debe a que en muchos países europeos la colonoscopia no se considera una opción para el cribado poblacional debido, por un lado, a la ausencia de ensayos aleatorizados que la avalen y, por otro, a la reducida disponibilidad de recursos endoscópicos y a la preferencia por otros test no invasivos por parte de la población general. Existe además otra diferencia entre EE. UU. y Europa relativa al modo de establecer las recomendaciones de screening. En EE. UU., estas recomendaciones se realizan por consenso entre las diferentes organizaciones o sociedades Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 científicas no presionadas por razones económicas, mientras que en Europa (al menos en muchos países europeos) la decisión se basa fundamentalmente en la capacidad de recursos, en los costes y en la efectividad de las opciones de screening alternativas. De esta forma, la estrategia de screening deberá adaptarse a cada país, sin posibilidad de generalización. El estudio de Vijan et al.10 puso de manifiesto que la colonoscopia podría ser la técnica más coste-efectiva a los niveles de cumplimiento y participación que se observan en la práctica clínica real. De hecho, la colonoscopia realizada dos veces a partir de los 50 años sería probablemente el test preferido para el cribado de CCR, a no ser que el resto de test contara con una participación mucho más elevada de la observada en la literatura. En el análisis de sensibilidad que realizan, demuestran que la tasa de cumplimiento, el coste de la prueba y la proporción de cánceres provenientes de pólipos son los factores clave que determinan la relación de coste-efectividad de esta estrategia de screening. De este modo, la sigmoidoscopia flexible y la SOH combinadas serían de elección si el 50% de los CCR proviniesen de pólipos, el cumplimiento fuera ≥75% y el coste de las pruebas moderado. O bien si el cumplimiento fuera del 50%, el 50% de los CCR proviniesen de pólipos y el coste de la colonoscopia fuera de 1000 $ o más57. De todos modos, al igual que la efectividad de la colonoscopia de screening no ha sido evaluada en ensayos clínicos aleatorizados, tampoco lo ha sido la combinación de sigmoidoscopia flexible y SOH. Olynyk et al.58 publicaron en 2001 un estudio que demostró que la sigmoi- La evaluación del enema baritado de doble contraste como test de screening ha detectado menor efectividad que la colonoscopia tradicional y la CV. En este sentido, su uso como técnica de screening es altamente debatido, considerándose únicamente en aquellos países con poca disponibilidad de recursos para realizar otras exploraciones1. Análisis de coste-efectividad con los nuevos test de screening Hasta ahora solamente se ha llevado a cabo un estudio de coste-efectividad60 con la CEC. El estudio de Hassan et al. mostró que la ratio de coste-efectividad de esta técnica cuando se la compara con “no screening” es de 25 000 a 29 000 $ por AVG. En este sentido, la Por otro lado, obtener conclusiones de ACE para la CV es una difícil tarea debido a la ausencia de datos reales. Los datos se basan únicamente en modelos matemáticos. Siete son los estudios principales que han evaluado la relación de costeefectividad de la CV como herramienta primaria de screening de CCR. De ellos, cinco46,48,61-63 se realizaron en EE. UU., uno en Canadá64 y uno en Italia56. Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Por el contrario, O’Leary et al.59 demostraron que la sigmoidoscopia flexible era menos efectiva que la SOH y la colonoscopia. De hecho, las relaciones de coste-efectividad incremental comparadas de colonoscopia y SOH frente a sigmoidoscopia fueron 25 769 $ y 141 496 $, respectivamente, por lo que los autores concluyeron que la colonoscopia mantenía una relación de coste-efectividad aceptable pero no así la SOH. Ahora bien, cuando evaluaron el impacto del cumplimiento, demostraron que la relación de coste-efectividad apenas variaba para la sigmoidoscopia flexible con un cumplimiento del 100% (13 958 $ por AVG frente a la opción de “no screening”), mientras que sí lo hacía para la SOH anual y bianual, mejorando drásticamente la relación coste-efectividad. colonoscopia ha demostrado obtener una mejor ratio de coste-efectividad que la CCE. Los autores concluyeron que la relación de coste-efectividad de la CCE dependería principalmente de su capacidad para mejorar la adherencia de la población a dicha técnica e incrementar así su participación. En cambio, el estudio de Lin et al.63 utilizó datos procedentes de un ensayo clínico aleatorizado con el objetivo de desarrollar una clasificación de riesgo para identificar individuos de bajo ries- Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología doscopia flexible comparada con SOH resultaba más eficiente en términos de menor necesidad de realización de colonoscopias y más casos de CCR detectados. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 97 Excepto uno de ellos63, los demás usaron modelos económicos de decisión analítica que tenían similar estructura. Evaluaron los costes y los beneficios totales asociados con las estrategias de screening del CCR. Todos ellos evaluaban hipotéticas cohortes de individuos de al menos 50 años de edad que se sometían a screening de CCR a intervalos regulares. Si se identificaban pólipos, se sometían a colonoscopia tradicional para realizar polipectomía. En tres de los estudios48,63,64, los pólipos diminutos (<6 mm) no se consideraron hallazgos positivos y fueron ignorados. Además, los individuos a los que se detectó neoplasia fueron tratados de acuerdo al estadio y los que se sometieron a polipectomía pasaron a considerarse de alto riesgo y por tanto entraron en una fase de revisiones periódicas. Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 98 go que pudieran beneficiarse de CV de screening más que de la colonoscopia tradicional. Estos autores solamente consideraron los costes del screening y los beneficios a corto plazo como el número de neoplasias avanzadas detectadas. Todos los estudios consideraron exclusivamente los costes directos médicos que incluían los costes de la prueba, los de la polipectomía y sus complicaciones y los del tratamiento del CCR. Los resultados en salud se midieron en AVG y compararon la CV con la tradicional, aunque la mayoría incluyeron una opción de no screening, tres incluyeron también sigmoidoscopia flexible y uno consideró SOH y la combinación de SOH y sigmoidoscopia. Todos aquellos trabajos que incluyeron una estrategia de no screening sugirieron que cualquier forma de screening es coste-efectiva, con relaciones de coste-efectividad incremental <30 000 $ por AVG. La CV fue la estrategia favorecida frente a la sigmoidoscopia flexible y la relación de coste-efectividad incremental frente a SOH fue <25 000 $ por AVG. También resultó favorecida (tanto la CV 2D como la CV 3D) con intervalos de repetición de cinco años, frente a la combinación de sigmoidoscopia flexible y SOH. Ahora bien, cinco estudios46,61-64 concluyeron que, comparada con la colonoscopia tradicional, no era costeefectiva. Algunos de ellos la consideraron más cara y menos efectiva y los otros mostraron que, aunque era más cara, la relación de coste-efectividad incremental era de 10 500 $61 y de 7700 $ por AVG46. Por el contrario, los estudios de Pickhardt et al. y de Hassan et al. enconGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 traron a la colonoscopia tradicional más efectiva y también más cara y por tanto menos coste-efectiva. Pickhardt et al.48 concluyeron que, si se ignoran las lesiones diminutas (<6 mm), la CV es el test más coste-efectivo. Sin embargo, el método usado para esta afirmación no fue considerado el ideal, por lo que se aplicó la relación de coste-efectividad incremental. Esta mostró que la relación cuando se compara la colonoscopia tradicional con la CV fue de 64 000 $ por AVG (superando la cifra umbral de 50 000 $) y cuando se consideran todos los pólipos independientemente del tamaño, la cifra es de 42 000 $ por AVG, que es también muy superior a las descritas previamente. El problema es que la mayor parte de la relación de coste-efectividad de la CV frente a la tradicional se debe a las muy pequeñas diferencias en efectividad estimadas entre ambas pruebas. De esta forma, Pickhardt et al.48 estimaron que el beneficio incremental de la colonoscopia tradicional frente a la CV fue de 0,266 AVG por cada 100 individuos sometidos a screening, o 0,375 si se ignoran los pólipos diminutos. Mientras que aquellos estudios que consideraron más coste-efectiva a la colonoscopia tradicional estimaron que era mucho más efectiva, de 0,622 a 1,623 AVG adicionales por cada 100 individuos sometidos a cribado. A esto se debe añadir que otros dos estudios que también ignoraron la presencia de pólipos diminutos favorecieron a la colonoscopia tradicional. Por otro lado, el trabajo publicado por Hassan et al.56 concluyó que la CV era más coste-efectiva, sobre la base de la estimación de la relación de costeefectividad incremental de la colonoscopia tradicional frente a la CV de 15 000 € por AVG, que consideraron muy elevada. también a la hora de considerar la relación de coste-efectividad de la CV. Globalmente, estos resultados fueron muy sensibles a la tasa de cumplimiento, de forma que los análisis de sensibilidad demostraron que si la tasa fuera superior con la CV, esta sería la más coste-efectiva. Hay algunos datos que indican que esta podría ser la técnica preferida, pero no es un hallazgo universal. El estudio de Heitman et al.64 mostró que la CV sería coste-efectiva si la tasa de perforación fuera de dos por 1000. Las cifras recientemente descritas de perforación en la colonoscopia de screening varían más de 20 veces de 2,3 por 1000 a 0,1 por 1000. Los estudios de Pickhardt et al.56 y de Sonnemberg et al.61 encontraron diferencias de hasta diez veces en la detección de adenomas entre distintos endoscopistas y la detección de adenomas ≥10 mm varió 3-4 veces. Por otro lado, la relación de costeefectividad56 también varió de acuerdo a la prevalencia de neoplasia avanzada estimada en los pólipos diminutos. De esta forma, cuando era un 0,8%, la relación de coste-efectividad incremental cayó a <100 000 $, mientras que si la estimación era de 0,09% en pólipos diminutos ≤5 mm, la relación era de 464 407 $ por AVG y si se estima 0,5% para pólipos intermedios (6-9 mm) la relación es de 59 015 $ por AVG. Conclusiones A todos estos datos hay que añadir la relevancia de la calidad de la colonoscopia tradicional como punto clave La prevalencia de lesiones diminutas y su historia natural también impactan en los resultados. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Por último, la correcta intubación cecal es muy variable y esta es una variable importante porque incrementaría los costes con la necesidad de la repetición de la prueba. Estudios realizados en EE. UU. han mostrado una tasa de intubación cecal del 97%66 y las guías procedentes de dicho país la consideran adecuada si alcanza el 95%67. Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Ahora bien, aunque la decisión del umbral para considerar aceptable la estrategia es arbitraria, es cierto que este resultado hubiera sido considerado aceptable en EE. UU. y en la mayoría de los países industrializados, lo que significaría que la CV no sería finalmente coste-efectiva al compararla con la tradicional. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):85-104 99 Por otro lado, el hallazgo de lesiones extracolónicas no se tuvo en cuenta en estos estudios económicos y la evidencia sugiere que podrían incrementar los costes con CV. Ahora bien, si este encarecimiento no es seguido de una mejora en los resultados de salud, la relación de coste-efectividad sería peor que la estimada. Y por el contrario, si permite adoptar medidas que incrementen la expectativa de vida (como en los casos de cáncer renal o aneurisma de aorta abdominal), mejoraría su relación de coste-efectividad65. El problema es que los estudios de ACE no incluyen esta variable en sus estimaciones para comparar las relaciones de coste-efectividad entre la colonoscopia tradicional y la CV. La mayoría de los estudios económicos para la evaluación de la CV como método inicial de screening de CCR la consideran, al menos, tan coste-efectiva como la colonoscopia tradicional cuando los pólipos diminutos son ignorados. Ahora bien, estos resultados son muy sensibles al incremento de los costes, las tasas de cumplimiento y la efectividad de la colonoscopia. Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 100 Por otro lado, el hecho de que los costes relativos de la CV y de la colonoscopia tradicional y las tasas de aceptación y cumplimiento son muy variables según el sistema de salud considerado, condiciona que la CV pueda ser coste-efectiva en algunos lugares y no en otros. En este sentido, se necesitarían estudios con datos reales que pudieran comparar estrategias prospectivamente para poder obtener conclusiones definitivas. Agradecimientos A la Dra. M.ª Isabel Jiménez Cuenca, por su amable colaboración al cederme estas imágenes. A mi actual equipo de Oncología Médica (en especial a Tamas Hickish, Lyn Purandare y Marie Miller), por su siempre dispuesta colaboración y sus críticas constructivas a la hora de preparar este manuscrito. Bibliografía 1. Zavoral M, Suchanek S, Zavada F, Dusek L, Muzik J, Seifert B, et al. Colorectal cancer screening in Europe. World J Gastroenterol. 2009; 15(47):5907-15. 2. Aparo S, Goel S. 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Dirección para correspondencia: [email protected] Introducción Frente a la externalización de recursos en la práctica radiológica, una experiencia asociada con frecuencia a efectos negativos tales como la fractura profesional, la desertización científica y el expolio económico, existe un tipo de relación entre la Administración pública y las entidades empresariales, bastante menos explorado, que permite un mejor desarrollo de la asistencia sanitaria, de la excelencia investigadora y del uso racional de posibilidades y recursos. En un modelo fuertemente burocratizado como el de los hospitales públicos, donde se prima una supuesta estabilidad y seguridad frente a la innovación y la excelencia, esta colaboración público-privada (public-private partnership) puede implementarse con criterios de beneficio mutuo1. El sistema sanitario público en los últimos años ha alcanzado muchos logros, pero existen limitaciones y amenazas que restringen su eficiencia y calidad asistenciales. Entre ellas cabe destacar la falta de ajuste del gasto, la burocratización excesiva, la falta de flexibilidad de sus estructuras y el riesgo de insatisfacción de sus profesionales. Una aproximación hacia la mejora pasa por acercar la organización y la toma de decisiones a las necesidades de los pacientes y los profesionales, proponer modelos organizativos que individualicen las responsabilidades dentro de la organización, y orientar la estructura hacia modelos de eficiencia en la toma de decisiones y el consumo de los recursos. En el Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia se aprovechó la oportunidad del traslado a unas nuevas instalaciones para definir un modelo de relación que maximizara el tramo tecnológico del equipamiento, evitara su obsolescencia, garantizara su uso adecuado y permitiera definir colaboraciones encaminadas hacia un beneficio final al paciente. Esta colaboración público-privada es capaz de implementar y ejecutar proyectos en menos tiempo, aprovechar los conociGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 1 105 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 106 mientos técnicos y la experiencia empresarial, ahorrar en esfuerzo y costes globales, integrar y estandarizar los proyectos, y desarrollar infraestructuras y servicios, como la investigación, con un control transparente. Su desarrollo nos permite obtener servicios, equipamientos e infraestructuras de titularidad pública y con acceso universal, pero con el valor, los recursos y la eficiencia de las empresas especializadas. En este capítulo se abordarán dos aspectos de esta colaboración, menos conocidos pero de enorme importancia. Además del desarrollo de mejores equipamientos y mayores prestaciones, mantenimientos y renovaciones, inversiones e innovación, costes y amortizaciones; la colaboración público-privada tiene un aspecto de desarrollo profesional en un grupo de trabajo que aúna conocimientos y habilidades como base de la excelencia continuada. La colaboración como objetivo El Área Clínica de Imagen Médica inició un proceso de colaboración con el proveedor líder en tecnología de imagen del hospital para mejorar la calidad de la atención al paciente y la eficiencia global del departamento. En este momento, el hospital se encontraba inmerso en un proceso de cambios radicales. En su nueva ubicación, se integraron cinco servicios y unidades, diferentes en lo profesional y físicamente distantes. La coexistencia de culturas organizativas muy diferentes representó un reto importante donde las expectativas de los miembros podían plantear tensiones para establecer unas normas y comportamientos homogéneos. Por otro lado, esta diversidad ofrecía una oportunidad para identificar mejoras y potenciar ejemplos de excelencia. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 Desde los inicios se reconoció que el objetivo tenía que estructurarse hacia la colaboración del equipo en la mejora de los procesos, la normalización de la gestión y la centralización en la satisfacción de los pacientes. La cooperación, el trabajo en equipo, la comunicación e interiorizar la misión, visión y estrategia del Departamento debían convertirse en nuevos procesos y comportamientos. Para ello era necesario centrarse primero en la integración del personal. Así pues, se elaboró un plan para potenciar la visión y aplicar la estrategia, mejorar la calidad asistencial y la eficiencia del departamento, basado en la creación del equipo de liderazgo y la construcción del método para optimizar los flujos de trabajo individuales a través de una serie de eventos Kaizen2 mediante talleres de mejora continua. La racionalización de los procesos y la optimización de los recursos proporcionarán un mejor entorno profesional pese a los recortes presupuestarios y las dificultades estructurales de nuestro sistema sanitario. Visión y plan estratégico a través de un taller de trabajo Se decidió utilizar la colaboración público-privada para afianzar una visión que permitiera acelerar coordinadamente el cambio, mejorando los mapas de procesos y agilizando las respuestas. Este proceso se articuló con un taller de cinco días de duración donde se proporcionó al personal seleccionado la información, los instrumentos y la metodología necesarios para desarrollar una “visión” compartida por la Dirección. Los participantes se seleccionaron de entre los líderes de opinión y representantes de los distintos estamentos involucrados. El principal objetivo era acelerar la integración de los El taller partía del documento de estrategia del área clínica ya existente, de un estudio sobre la cultura de la organización y de una serie de entrevistas individuales con todos los participantes. El plan de acción finalmente se estructuró en varias fases. Fase 1. Involucrar al personal El principal objetivo inicial fue involucrar a los participantes. Para ello se empleó una encuesta de evaluación de la cultura organizativa, una entrevista personal y un análisis de los resultados de la encuesta del taller. Se recogieron comentarios y sugerencias de las diferentes personas del grupo. La encuesta utilizada fue el Organizational Culture Assessment Instrument (OCAI)3. Esta fase era importante para comprender las motivaciones personales y todos aquellos aspectos, tanto indivi- En la encuesta sobre la cultura de la organización se identificó que el personal opina que en nuestra organización la “adhocracia” es dominante. En este modelo, la organización se siente como un ambiente dinámico y creativo de trabajo donde los empleados asumen riesgos, son los líderes, los innovadores y quienes deciden tomar el riesgo. La dotación de nuevos equipamientos, productos y servicios se vio como un éxito donde la organización promueve la iniciativa individual y la libertad. Sin embargo, el deseo del personal era mayoritariamente pertenecer a una familia, construir una “cultura de clan”. Esta relación crea un ambiente agradable donde los componentes tienen muchas cosas en común y se convierten en una gran familia. Los líderes y directivos se ven como mentores o incluso como figuras paternas. La organización se mantiene unida por la lealtad y la tradición, con una alta participación. La organización hace hincapié en el desarrollo a largo plazo de los recursos humanos y en un clima laboral de compañerismo, promoviendo el trabajo en equipo, la participación y el consenso. Aunque al Director del Área se le reconoció un estilo de dirección innovador, visionario y emprendedor, la mayoría de colaboradores echaban en falta un mentor y un facilitador. La conclusión más importante de esta fase fue que el deseo de la mayoría de componentes era la construcción de un grupo y el trabajo en equipo. Fase 2. Mejorar y perfeccionar la visión Durante las sesiones en equipo, se instó a describir un estado ideal (soñar el Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... Dado que el área se compone de algo menos de 400 personas, y para integrar opiniones y posiciones diferentes, se seleccionó para este equipo de liderazgo a 28 participantes, incluyendo 11 radiólogos, dos médicos nucleares, un cardiólogo, un pediatra, un residente, cinco enfermeros, tres técnicos en Radiología, un celador y tres empleados administrativos. Los criterios de selección se basaron en la actitud personal, la aptitud, la categoría laboral y la experiencia, procurándose que existiera un equilibrio de género. duales como de grupo, que permitieran articular las visiones personales y compartir, mejorar y pulir la visión departamental. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología profesionales, compartir e implantar la visión de la nueva área de imagen, construir un equipo con el compromiso de colaborar y participar, motivar y escuchar al personal. La clave del éxito era involucrar y comprometer a todos y cada uno de los participantes como agentes de cambio para desarrollar la nueva estrategia en un ambiente colaborativo. 107 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 108 futuro) y dibujar la situación actual (dónde nos encontramos), para medir la distancia entre los dos escenarios y comprender las acciones a emprender para avanzar. En estas sesiones se identificaron muchas oportunidades. Algunos ejemplos son: – La tecnología proporciona grandes oportunidades clínicas y de investigación. – El deseo de satisfacer a los clientes, pacientes y prescriptores, ayuda a poner foco en la organización. Las personas se comportan como verdaderos promotores de su lugar de trabajo. – El equipo es entusiasta y está dispuesto a trabajar conjuntamente para crear oportunidades. – La nueva estructura mejora la posibilidad de ampliar conocimientos, experimentar, atraer a más residentes y mejorar las sinergias interdepartamentales. – Por último, el área clínica de imagen médica se ve como un gran lugar para aprender, publicar, innovar y hacer nuevas cosas. También se identificaron algunas preocupaciones, destacando entre las más relevantes: miento y el intercambio de información eran una preocupación. – La inquietud de los facultativos era alejarse de su verdadero trabajo clínico por las tareas administrativas y de gestión. La metodología empleada consistió en recoger estos datos, agruparlos y organizarlos según los requisitos para el éxito del cambio definidos por el modelo Knoster4. En este modelo se distinguen seis requisitos organizativos para una aproximación satisfactoria al cambio (visión, consenso, habilidades, incentivos, medios y acciones). Un cambio exitoso debe optimizar toda esta variedad de elementos condicionales, incluyendo la visión y la estrategia, el consenso sobre la estrategia, las habilidades para ejecutarlo, los incentivos para que valga la pena (lo que está en él para mí), los medios para ayudar a ejecutarlo, y finalmente un plan de acción claro que permita implementar la estrategia. Todas las condiciones son fundamentales para un proceso exitoso de cambio, todos los requisitos deben estar en su lugar y deben identificarse todas las acciones a realizar (Figura 1). Fase 3. Acuerdo sobre la realidad actual – No estaba claro el motivo para crear un único Departamento de Imagen Médica cuando se seguía trabajando en grupos pequeños. La sensación de ser un solo departamento era débil. Se propuso definir la imagen de un servicio perfecto con su respectiva organización, centrándose en torno a cuatro ciclos de atención seleccionados por los participantes: la Radiología en Pediatría, la alta resolución o vía rápida (accidente cerebro-vascular, insuficiencia cardiaca, isquemia intestinal), la imagen en Oncología y la Radiología de Urgencias. Los organizadores insistieron en que debían ponerse en el lugar del paciente y consensuar la situación actual. – La colaboración efectiva dentro de este equipo, la gestión del conoci- El análisis de la opción deseada frente al estado actual para cada ciclo de – Los procesos no estaban todavía implementados de forma rutinaria. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 En las últimas sesiones se investigó y desarrolló un plan de comunicación para el área. También se identificaron Las conclusiones se plasmaron en un plan de acción (Figura 2) y en una matriz de implementación, organizada Figura 1. Una imagen sobre la visualización del modelo Knoster diseñado y utilizado durante el taller atención permite comparar el rendimiento real con el rendimiento potencial. Cotejar los deseos con la realidad permitió identificar aspectos comunes a los cuatro ciclos seleccionados. Se acordó que es fundamental disponer de una herramienta eficaz para gestionar el flujo de información, planificar los procedimientos y el flujo de los pacientes. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... Fase 4. Desarrollo de los planes de acción En este sentido, se usó una combinación de los modelos de cambio de Knoster con las propuestas de Lewin5 y Kotter6, sobre un plan de acciones concretas con un enfoque por fases. Knoster muestra la relación entre el cambio y la posibilidad de mejorarlo distinguiendo seis requisitos organizativos para una aproximación satisfactoria al cambio (visión, consenso, habilidades, incentivos, medios y acciones). Lewin5 presenta la gestión del cambio vía un enfoque dividido en tres fases de tiempo. Cada fase requiere una atención hacia requisitos específicos del modelo Knoster. Lewin explica el cambio organizativo usando la analogía del cubo de hielo. Si queremos convertir un cubo de hielo en un cono, el cubo tiene que derretirse para que sea susceptible de cambiar (descongelar); el agua helada tiene que trasladarse a un molde donde pueda adaptar la forma de cono deseada (cambio); y, finalmente, debe solidificarse en su nueva forma (volver a congelar). Por su parte, Kotter6 presenta un enfoque de acciones en ocho pasos para liderar el cambio (crear urgencia, formar una coalición poderosa, crear una visión para el cambio, comunicar la visión, eliminar obstáculos, crear triunfos a corto plazo, construir sobre el cambio, y anclar los cambios en la cultura corporativa). Todos estos pasos se organizan en las tres fases de Lewin estructurando un plan de acción donde el modelo Knoster muestra qué elementos deben estar en su lugar, como requisitos previos para un proceso de cambio exitoso. El objetivo es encontrar una manera de llenar los vacíos en el análisis Knoster. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología oportunidades de ganancia rápida en el proceso del flujo de pacientes y en la planificación de los exámenes. 109 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 110 sobre la complejidad de cada acción y el impacto del objetivo conseguido. Con estas acciones definidas, el equipo fue capaz de poner en marcha diversas iniciativas clave para garantizar el éxito del Área de Imagen Médica para el futuro. Con el taller se consiguió: – Aumentar el compromiso del personal. – Aumentar la sensación de responsabilidad del individuo hacia el grupo. – Mejorar la colaboración transversal a través de todo el Departamento de Imagen Médica mediante la colaboración funcional interdepartamental. – Reducir la distancia entre la visión de la gestión (percepción del estado deseado) y los empleados (percepción actual del estado). – Crear un plan de acción de mejora. – Identificar las opiniones y visiones de los diferentes grupos de interés. El taller fue una plataforma muy útil para compartir ideas colectivamente y construir un equipo sólido. Era una “llamada de despertador” para cada – Involucrar al personal, ya que no hay compromiso sin participación. Action plan summary 1. Increase urgency – Collect facts and sharpen arguments in support of change vision 2. Build the guiding team – Build a core team, MT+ or dedicated team for vision & strategy development – Start regular meeting focused on vision & strategy development 3. Get the vision right – Conduct vision & strategy workshop – Formulate and present in a compelling and visually attractive way 4. Communicate for buy-in – Further develop communication plan and execute – Establish success factors and performance indicators tied to objectives, communicate to train people and clarify expectations – Walk the talk, take sufficient time to answer questions and handle objections Phase 1 – Unfreeze (vision, consensus, skills) Phase 2 – Change (skills, incentives, means) 5. Empower action – Investigate mid term opportunities, e. g., planning process, way-finding, communication plan 6. Create short-term wins – Assign core team members to quick win projects – Give priority to the execution of change project, provide training opportunities 7. Build on change – Communicate quick win results and celebrate success – Continue with new opportunities or refine implemented improvements – Share best practices to speed up change process 8. Make change stick – Recognize key members, celebrate success! – Establish a track record of success! – Involve everyone, and talk about progress every chance you get Phase 3 – Freeze (incentives, means, actions) Figura 2. El plan de acción del primer proyecto diseñado con la combinación de modelos Knoster+Lewin+Kotter (involucrar los elementos de los requisitos organizativos necesarias para el desarrollo del cambio según Knoster, con las etapas de preparación al cambio, trasformación y consolidación de Lewin y con los pasos necesarios para una aproximación satisfactoria al cambio identificados por Kotter) Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 La implantación de una cultura de mejora continua Uno de los elementos básicos del nuevo plan estratégico para el Área Clínica de Imagen Médica propone establecer una cultura de mejora continua. Esta implantación del éxito por el cambio se enmarca en iniciativas concretas a corto plazo, orientadas alrededor del paciente, con el objetivo de mejorar la satisfacción del personal y aumentar la eficacia, la productividad y la calidad del proceso asistencial. Esta iniciativa, dentro de los eventos Kaizen, utiliza entre otras metodologías la “Lean”, “Six Sigma”, y “5-S”, persiguiendo una mejora explosiva con resultados significativos y garantías de sostenibilidad a largo plazo. Un evento Kaizen identifica soluciones y mejoras operacionales específicas, desarrolla al máximo el potencial profesional y tecnológico del hospital y establece criterios y métodos para incentivar, medir y controlar los logros conseguidos2. Nuestro segundo proyecto colaborativo llevó a cabo un Kaizen para desarrollar una vía clínica en el cáncer de próstata y mejorar la asistencia sanitaria, buscando sinergias multidisciplinares, enfocando la atención al paciente desde el diagnóstico hasta el segui- En este proyecto Kaizen trabajaron en grupo multidisciplinario un total de 16 personas, contando con cinco radiólogos, tres urólogos, dos radioterapeutas, un oncólogo, un médico nuclear, un enfermero, un administrativo, un ingeniero y un gestor de proyectos. El objetivo inicial era identificar acciones de mejora e implementar soluciones para mejorar una vía clínica concreta, estableciendo las bases de la innovación y la investigación con biomarcadores de imagen. Con estas acciones se pretendió conseguir una mejora en la calidad de la atención, el beneficio y satisfacción del paciente, aumentando la profesionalidad y excelencia de los facultativos, de forma que finalmente se optimicen también los recursos, humanos y materiales, más adecuados. La metodología del taller La metodología principal empleada en este caso ha sido el evento Kaizen, término que proviene del japonés y significa “cambio a mejor”. El uso común de su traducción al castellano es “mejora continua” y su aplicación se conoce como MCCT (Mejora Continua hasta la Calidad Total). Se considera que Kaizen es una estrategia o metodología de calidad tanto para la empresa como para el trabajo, y tanto de forma individual como colectiva7. En este taller Kaizen, los miembros del grupo y los facilitadores trabajaron durante cinco días para identificar, defi- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... Aunque la presión del trabajo diario y las tareas en la asistencia clínica hospitalaria restan mucha capacidad de tiempo de dedicación para trabajar en estos objetivos, el grupo identificó muchas buenas ideas y creó las bases para seguir trabajando en otros objetivos, como las mejoras en otros procesos asistenciales. miento del tratamiento. Se decidió esta vía dado que el papel de la Radiología en el diagnóstico precoz, la localización precisa, la gradación de la agresividad y la monitorización de la respuesta a la terapia (tanto quirúrgica como local y tras la radioterapia) no se había desarrollado en el hospital con los últimos conocimientos en estas áreas. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología participante dado que cualquier cambio y mejora en un entorno empieza con una iniciativa y un cambio en un individuo. 111 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 112 nir, implementar y monitorizar la solución más efectiva que permitiera mejorar los procesos e implementar los cambios definidos y propuestos sobre la vía clínica del cáncer de próstata. La metodología Kaizen requiere de una intensa colaboración y trabajo en equipo, siendo la clave del éxito la capacidad de involucrar a todas las personas (Figura 3). La herramienta empleada fue “Lean”8. Se decidió seleccionarla dado que crea valor, disminuye y elimina todos aquellos pasos o elementos que no aporten valía. En la fase de preparación inicial hubo entrevistas individuales a todos los miembros del taller. En estas entrevistas todos los participantes mostraron, tras explicarles los objetivos, un verdadero entusiasmo, un esfuerzo de colaboración y una motivación para el trabajo conjunto. Reconocieron que el equipo multidisciplinar es la clave para alcanzar una calidad y excelencia a través de la mejora en la atención, la práctica centrada en el paciente y el aumento de la reputación del hospital. En la primera sesión del grupo se definieron los objetivos y el alcance previsto del trabajo centrado en la vía clínica del cáncer de próstata. Una vía clínica es la intervención compleja para la toma de decisiones y la organización de todos aquellos procesos de atención relacionados con un episodio, centrada en un grupo de pacientes y durante un periodo de tiempo bien definido. El primer ejercicio realizado fue visualizar y plasmar el flujo actual de estos pacientes para que así pudieran identificarse los problemas principales y definir con ello los obstáculos que limitan dar un servicio de calidad y eficiencia reconocidas. Con un análisis de causa-efecto9 se identificaron las causas de los problemas y se analizó el árbol de decisión, visualizando con ello todos los parámetros que influyen en la toma de decisiones sobre el mejor tratamiento en estos pacientes, ajustados a las diferentes categorías de riesgo vital existentes. Tras estos análisis del estado actual del proceso se trabajó en definir cuál debía ser la situación deseada, contrastando el escenario actual con el contexto ideal. Con ello se identificaron unas claras oportunidades de mejora, diversos factores del “critical to quality” (CTQ)10, áreas de colaboración entre las disciplinas involucradas y algunos logros rápidos relacionados Figura 3. Dos momentos del trabajo del Taller del Kaizen de Vía Clínica del Cáncer de Próstata. Ejemplo de uno de los planes de acciones del Taller del Kaizen de Vía Clínica del Cáncer del Próstata Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 – Mejorar la información al paciente, tanto antes de la biopsia como tras un diagnóstico positivo, mediante folletos explicativos para entregarles. Con una información estructurada y precisa se hace participativo al paciente en todo el proceso (Figura 4). – Establecer un Comité de Tumor de Próstata mejor estructurado, donde se optimice el diagnóstico y tratamiento individualizados a cada situación de riesgo, se discuta cada caso en un entorno multidisciplinar y se optimice el uso de nuevas tecnologías (como los biomarcadores de imagen) para el diagnóstico y el seguimiento de la respuesta al tratamiento. Se constituyeron tres grupos, con un plan de acción detallado para cada proyecto, identificando el objetivo principal y el cambio que se pretendía Figura 4. Plan de acción para mejorar la información al paciente con cáncer de próstata Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... Conjuntamente, todos los miembros ayudaron a construir una matriz con las distintas oportunidades de mejora mencionadas en el grupo, siendo uno de los ejes el impacto del cambio-mejora (grande frente a pequeño) y el otro la dificultad para implementarlo (fácil frente a complicado). Tras un voto individual, se eligieron tres proyectos para desarrollar: – Eliminar las duplicidades en los diversos pasos y acciones que el paciente tiene que realizar (analíticas, exploraciones, visitas). Con una organización mejor, todo el proceso puede simplificarse y trazarse en el seguimiento con varios puntos de control. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología con la información que se ofrece a los pacientes. Todas las oportunidades de mejora se agruparon en aspectos de calidad, del entorno del paciente y de la eficiencia global del proceso. 113 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 114 conseguir. La clave del éxito de este ejercicio era identificar cada paso del proceso, la lista entera de las tareas para desarrollar el plan de acción, asignar los responsables y dar los tiempos adecuados. De esta manera, el equipo pudo trabajar individualmente durante los meses consecutivos del taller. Finalmente, los grupos de trabajo presentaron de forma colectiva sus planes y la metodología para llevar a cabo las mejoras identificadas. En el cierre, los miembros del taller tenían la posibilidad de presentar cualquier iniciativa, cualquier idea relacionada con esta vía clínica, para aprovechar la fuerza y potencia de un equipo multidisciplinar. Iniciativas de este tipo fomentan la colaboración, y la colaboración fomenta la calidad en la atención y el servicio. Los resultados alcanzados representan ganancias para los profesionales, pero son igualmente ganancias muy significativas para los pacientes. En conclusión, este evento centrado en una vía clínica tan multidisciplinar como el cáncer de próstata es un logro de suma importancia para el hospital. La creación de una estrategia de mejora y excelencia, la confianza entre profesionales de especialidades diferentes y el deseo de mejorar pese a las dificultades en la asistencia diaria han sido claves en este evento. Futuro La integración de los procesos clínicos y los sistemas de ayuda en el proceso de la toma de decisión son el objetivo final de las iniciativas de esta colaboración público-privada. Actualmente existe una desviación importante entre la planificación y la preparación, realización e integración de los distintos exámenes a los pacientes. Esto tiene un impacto en la eficiencia, consis- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 tencia y calidad del examen, y frena la mejora en técnicas de estudios avanzados. Con este proyecto nos centramos en la integración de la información para reducir el uso del papel y distintos Sistemas de IT. Proporcionando diferentes datos, informes y valores (laboratorio, patología) en la misma interfaz, visualizaremos toda la información disponible, y de manera automática se asignará el protocolo más adecuado reduciendo el tiempo necesario para conseguir la información relevante. Identificaremos rápidamente el factor de riesgo del paciente. Dispondremos de la posibilidad de búsquedas rápidas en la historia de paciente. Obtendremos recomendaciones para los siguientes estudios en función del informe radiológico previo. De este modo se reducirá la desviación en la toma de decisiones. Los resultados anticipados son la integración de la información, una reducción del tiempo de búsqueda de la información relevante y una reducción del factor de desviación en el proceso de toma de decisión. Como conclusión, destacar que no podemos centrarnos en la mejora de procesos, la normalización y el control integrado del paciente, si no contamos con un equipo dedicado y comprometido con la colaboración y la participación. Bibliografía 1. Results from the European Commission public consultation about plans for a Public Private Partnership in life sciences research and innovation under Horizon 2020. 2.Kaizen [en línea]. Disponible en http://es.wikipedia.org/wiki/Kaizen 5. Lewin’s Change Management Model. Understanding the Three Stages of Change [en línea] [consultado el 15/06/2013]. Disponible en http://www.mindtools.com/pages/ article/newPPM_94.htm 6. Kotter’s 8-Step Change Model. Implementing Change Powerfully and Successfully [en línea] [consultado 7. Europe Japan Centre, Kaizen Strategies for Improving Team Performance, Ed. Michael Colenso, London: Pearson Education Limited; 2000. 8. Lean manufacturing [en línea] [consultado el 15/06/2013]. Disponible en http://es.wikipedia.org/wiki/ Lean_manufacturing 9. Ishikawa diagram [en línea] [consultado el 15/06/2013]. Disponible en http://en.wikipedia.org/wiki/Ishikawa_diagram 10.CTQ Tree [en línea]. Disponible en http://en.wikipedia.org/wiki/CTQ_ tree Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):105-15 Martí-Bonmatí L, et al. Innovación en Radiología... 4. Knoster T. from Enterprise Group, Ltd. (1991) Presentation in TASH Conference Washington, D.C. [en línea] [consultado el 15/06/2013]. Disponible en http://www.gertjanschop.com/modellen/model_knoster.html el 15/06/2013]. Disponible en http://www.mindtools.com/pages/ article/newPPM_82.htm Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 3.The Organizational Culture Assessment Instrument (OCAI) [en línea] [consultado el 15/06/2013]. Disponible en http://www.ocai-online.com/ 115 Los Servicios de Radiología en Red: Unidad Central de Radiodiagnóstico de la Comunidad de Madrid Fraile Moreno E, 2García González M, 3López Velayos C Director Técnico. Unidad Central de Radiodiagnóstico. Comunidad de Madrid. 2 Directora gerente. Unidad Central de Radiodiagnóstico. Comunidad de Madrid. 3 Responsable financiero. Unidad Central de Radiodiagnóstico. Comunidad de Madrid. Dirección para correspondencia: [email protected] 1 Eduardo Fraile Moreno. Marisa García González. César López Velayos. Resumen Los resultados de cinco años de funcionamiento de la Unidad Central de Radiodiagnóstico de Madrid ponen de manifiesto que la gestión conjunta de los Servicios de Radiología en red con soporte tecnológico de altas prestaciones es una alternativa eficaz a los sistemas tradicionales y la evolución natural de los mismos, desde el punto de vista asistencial, económico y científico. Palabras clave: Red de servicios radiológicos; Integración de servicios; Telerradiología; Gestión radiológica integral. Radiology Services Network: Radiology Central Unit of the Community of Madrid Abstract “Five years of managing the radiological services of 6 hospitals technically connected, have proven that managing them all as one is an effective alternative to the traditional way of managing radiological services. From the economical, scientific, technical and medical point of view, it could be perceived as the natural evolution of traditional radiological departments.” Key words: Radiological Services Network; Service integration; Teleradiology; Comprehensive radiological Management. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):117-23 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 1 117 Uña Cidón E. Coste-efectividad del radiodiagnóstico... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 118 Introducción Los avances tecnológicos han influido de manera importante en la Medicina y por ende en una de sus especialidades más tecnificadas como es el diagnóstico por imagen. La evolución de las modalidades diagnosticas al ámbito digital ha producido no solo la mejora de las características técnicas de las mismas, sino la posibilidad de trasmitir las imágenes obtenidas en tiempo real entre lugares distantes, integrarlas en archivos permanentes y relacionarlas con los sistemas de información disponibles en el ámbito sanitario. La Unidad Central de Radiodiagnóstico (UCR) fue fundada en el año 2007 por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid como una empresa pública (Ley 7/2007, de 21 diciembre, de Medidas Fiscales y Administrativas de la Comunidad de Madrid, Articulo 14) y sus estatutos fueron publicados en el Decreto 11/2008 de 21 de Febrero 20081, con el objetivo de dar asistencia radiológica a las áreas de población que atienden los hospitales Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes, Infanta Leonor de Vallecas, Infanta Cristina de Parla, Hospital del Sureste en Arganda, Hospital del Henares en Coslada y Hospital del Tajo en Aranjuez. En total 1 141 794 habitantes son atendidos por la empresa pública con una distri- bución por área según censo de ese año (Tabla 1). En el reglamento de funcionamiento de dicha empresa se recoge el organigrama de la misma. El Consejo de Administración lo forman los Directores Generales de la Consejería de Sanidad junto al Director Gerente de la empresa, presididos por el Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid. En el mismo reglamento, se establece la figura del Director Técnico como la persona que, junto al Gerente de la Unidad, dirige y coordina el proceso asistencial de los seis Servicios de Radiología. Cada Unidad Asistencial está dirigida por un radiólogo responsable de la asistencia clínica y un coordinador de técnicos superiores en imagen para el diagnóstico, que conjuntamente dirigen el servicio radiológico en cada hospital, siendo los encargados de la comunicación con los clínicos y el personal del hospital, participando en los distintos comités de los hospitales y estando integrados en todos los niveles asistenciales de cada hospital. Todos los servicios comparten el mismo sistema de información radiológico (RIS) y el mismo sistema de archivo de imágenes (PACS), estando integrados con la historia clínica electrónica de cada hospital, con lo que el flujo de Tabla 1. Distribución de la población asistida por cada hospital Hospital Infanta Leonor (Vallecas) Hospital Infanta Sofía (Norte) Hospital del Henares Hospital Infanta Cristina (Parla) Hospital del Sureste (Arganda) Hospital del Tajo TOTAL Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):117-23 0a2 8790 3a6 12 404 7 a 13 20 447 14 a 64 229 361 ≥65 54 295 TOTAL 325 297 10 938 5081 4940 5727 2357 37 833 14 940 6565 6113 7617 3139 50 778 22 945 10 818 8868 12 054 4898 80 030 224 718 126 772 98 444 110 918 48 203 838 416 32 860 13 142 10 084 14 103 10 253 134 737 306 401 162 378 128 449 150 419 68 850 1 141 794 Asimismo, por el mismo procedimiento se adquirieron estaciones de trabajo radiológicas con sistemas de reconocimiento de voz y conexión a los sistemas de información y archivo, así como a la historia clínica electrónica, permitiendo el acceso de los radiólo- Mediante concurso público, la Comunidad de Madrid adquirió el equipamiento para los Servicios de Radiología con el denominador común de ser todos digitales, permitien- Tabla 2. Distribución por hospital del equipamiento radiológico de la UCR Equipo RX mesa Equipo RX vertical Equipo RX mesa y vertical Equipo mamógrafo Equipo telemando Equipo radioquirúrgico Equipo densitómetro Equipo Unidad RC Equipo S. multifuncional Equipo ecógrafo altas Equipo ecógrafo medias Equipo ecógrafo portátil Equipo portátil RX Equipo RM 1,5 teslas Equipo TC multicorte TOTAL H. Henares H. I. Sofía H. Parla H. Tajo H. Sureste H. Vallecas 2 3 2 1 2 3 1 2 1 1 2 1 2 1 1 1 2 TOTAL 13 7 8 1 1 1 1 1 2 7 1 2 1 3 1 2 1 1 1 2 1 3 6 13 2 3 1 1 6 2 1 2 1 1 1 1 1 1 1 1 4 5 4 4 4 5 26 1 1 1 1 1 1 6 2 1 2 1 2 1 2 1 2 1 2 1 12 6 1 1 1 1 1 1 6 18 25 18 15 18 27 123 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):117-23 Fraile Moreno E. Los Servicios de Radiología en Red... do la integración de las imágenes en el archivo digital de una manera directa. Todos los hospitales cuentan con radiografía simple, mamografía, ecografía, tomografía computarizada y resonancia magnética, y los hospitales Infanta Sofía e Infanta Leonor con equipos de densitometría y radiología vascular, adecuándose el número de equipos a la población asistida con un resultado final de 123 equipos con la distribución por centro que se muestra en la Tabla 2. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología trabajo comienza con la petición de una exploración radiológica desde la historia clínica electrónica del paciente y previa validación de la misma por el radiólogo en los casos de exploraciones complejas, se produce la citación en las agendas del Servicio de Radiología. Las imágenes obtenidas son enviadas inmediatamente tras su adquisición al archivo central, así como el informe de las mismas realizadas por el radiólogo, estando a disposición del clínico de manera inmediata insertadas en la historia clínica del paciente. 119 Fraile Moreno E. Los Servicios de Radiología en Red... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 120 gos a través de la red radiológica, independientemente del hospital en el que se encuentren físicamente. Por lo tanto, los seis departamentos de radiología de la UCR comparten aplicaciones informáticas, RIS, HIS y PACS. Además, los seis hospitales cuentan con una red duplicada de conexión entre ellos a una velocidad de 1 Gb/s para cada una. Resultados Desde la puesta en funcionamiento de los hospitales en el año 2008 hasta el mes de marzo de 2013, se han realizado más de tres millones de exploraciones radiológicas, correspondiendo el 65% a estudios de radiología convencional, el 14% a estudios de ultrasonidos, un 8% a estudios de tomografía computarizada y un 6% a resonancias magnéticas. La evolución anual de las pruebas realizadas y el número de las mismas por año y modalidad se puede ver en la Tabla 3. La actividad diaria por centro se adecua a la población atendida y a los medios de que dispone cada departamento, realizándose una media de 2000 exploraciones día en toda la UCR, con la distribución que se observa en la Figura 1. La actividad por ámbitos no se modifica significativamente a lo largo de los años, proviniendo un 50% de las pruebas solicitadas de las consultas externas, un 38% desde Urgencias y un 9% del ámbito de pacientes ingresados. De los indicadores de calidad, destaca que el 70% de todas las pruebas realizadas tiene un informe radiológico, estando el 93% de los mismos disponible en un plazo inferior a 48 horas. Discusión El modelo planteado de gestión centralizada de varios Servicios de Radiología en distinta localización geográfica, basado en una red de comunicación de alta velocidad y sistemas de gestión compartidos de la información, gestionados de manera conjunta por una empresa pública e independiente del resto de los servicios hospitalarios, supone un cambio en el concepto del manejo de los Servicios de Radiología que impacta sobre la atención radiológica del hospital, así como sobre los propios Tabla 3. Distribución del número de estudios por año y hospital desde la puesta en marcha de la UCR hasta marzo de 2013 Modalidad Densitometrías Doppler Fluoroscopia Mamografía Radiografía digital Resonancia magnética Tomografía axial computarizada Ultrasonidos TOTAL Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):117-23 2008* 1722 4040 5557 3789 218 151 16 902 2009 8753 4444 10 949 9320 409 899 39 701 2010 9971 4800 12 808 11 603 442 087 46 394 2011 10 266 4705 14 043 13 430 481 340 49 964 2012 10 257 8016 12 700 15 003 480 913 47 312 2013** TOTAL 2934 43 903 2012 28 017 3000 59 057 3657 56 802 111 916 2 144 306 7704 207 977 22 839 44 378 49 330 53 053 55 779 12 799 27 898 300 952 64 579 592 023 74 450 651 443 84 106 710 907 93 473 723 453 19 836 364 342 163 858 3 142 636 238 232 Total organizaciones Hospital Infanta Sofía Hospital del Henares 259,81 2.201,84 Hospital del Sureste Hospital del Tajo 426,15 216,05 326,64 Hospital Infanta Cristina Hospital Infanta Leonor Figura 1. Número medio de estudios por día y hospital Departamentos de Radiología y el personal que trabaja en ellos. Impacto en el hospital y ámbito sanitario Los recursos tecnológicos aportados han permitido una reducción de la duración de lo que se conoce como el proceso radiológico, que abarca desde la solicitud de una exploración radiológica por un clínico hasta la visualización de las imágenes obtenidas y la recepción del informe realizado por el especialista correspondiente. Los estudios radiológicos se encuentran a disposición del clínico solicitante desde el mismo momento en que el técnico de radiología finaliza la exploración, y los informes radiológicos lo están desde el momento de su realización por parte del radiólogo. La gestión de los Servicios de Radiología es uniforme en los seis hospitales con un control de la demanda y de la lista de espera por modalidad y hospital, permitiendo adecuar la actividad de los equipos a la demanda al tener un conocimiento en tiempo real de lo que ocurre en cada hospital. Asimismo, existe un control centralizado de la gestión de gastos e ingresos de cada uno de los seis Servicios de Radiología, que permite la distribución de los mismos en función de las necesidades de cada Servicio. Anualmente, la UCR firma un contrato programa con presupuesto estimativo de funcionamiento con el Servicio Madrileño de Salud, en función de la actividad prevista en cada hospital y tomando como unidad de referencia económica el valor asignado por la Comunidad de Madrid a cada Unidad Relativa de Valor. Este modelo ha permitido reducir el valor de la URV en más del 25% desde su puesta en marcha, encontrándose en la actualidad significativamente por debajo de la media del resto de hospitales de la comunidad madrileña. La UCR ha conseguido un abaratamiento en los costes de compras de medios de contraste, material fungible y otros gastos operativos, al aplicar economías de escala basadas en la compra centralizada para seis centros Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):117-23 Fraile Moreno E. Los Servicios de Radiología en Red... 418,44 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 554,74 121 Fraile Moreno E. Los Servicios de Radiología en Red... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 122 de Radiología en vez de realizarlo de forma individualizada La centralización de los datos de las exploraciones, informes e imágenes, así como de los costes, ingresos y tiempos asociados a los mismos, permite tener una base de datos con gran contenido científico y de gestión. Mediante una herramienta informática de explotación de la misma, hemos desarrollado una actividad científica y un conocimiento y control de todo el proceso radiológico mucho mayor que si cada hospital funcionara de manera independiente. Impacto en los Departamentos de Radiología El impacto del modelo en el ámbito radiológico afecta a todo el personal que trabaja en él, incluyendo la utilización de la estación de trabajo como herramienta habitual de realización de los informes radiológicos, con mejora significativa en el acceso a los estudios previos de los pacientes y la utilización de herramientas de postproceso de la imagen que han permitido un incremento en la eficacia y exactitud de los informes radiológicos. Los radiólogos realizan los informes de los estudios mediante un sistema de reconocimiento de voz o con plantillas establecidas, agilizándose de manera significativa la elaboración de dichos informes y la consulta por parte de los clínicos. La posibilidad de informar estudios de otros centros desde la misma estación de trabajo y la consulta electrónica de la historia clínica, ha permitido aumentar el grado de experiencia de los radiólogos e incrementar la presencia de radiólogos especialistas en determinadas áreas, en centros de pequeño tamaño. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):117-23 La conexión en red de los Servicios de Radiología permite la atención continuada a distancia en los centros con menor actividad en periodos nocturnos o festivos y, gracias a ello, cuatro radiólogos de presencia física en los hospitales de mayor tamaño realizan las guardias de los hospitales de menor tamaño, demostrando la efectividad de la telerradiología en la práctica clínica diaria. Las aplicaciones informáticas y la integración de las mismas han permitido a los radiólogos la validación y adecuación de la justificación de los estudios solicitados, con la consiguiente reducción en el número de estudios no indicados. La base de estudios radiológicos, con más de tres millones de exploraciones archivadas electrónicamente a fecha de hoy, ha permitido la publicación de varios artículos científicos en las revistas radiológicas de mayor impacto2-4, así como la presentación de numerosas comunicaciones en los congresos científicos más importantes del sector y el desarrollo de programas de investigación con centros de prestigio nacional e internacional, como el Hospital Universitario La Fe de Valencia, el Hospital Clínic de Barcelona o el Massachusetts Institute of Technology, con el consorcio Madrid + Visión-MIT. Conclusión Después de cinco años de funcionamiento, la aceptación del modelo por parte de los radiólogos y de los clínicos de los distintos hospitales es buena, habiéndose recibido múltiples consultas para la incorporación del modelo en diferentes comunidades autónomas, por lo que consideramos que se implementarán soluciones similares en otras regiones de nuestro país. En conclusión, tras los resultados de cinco años de funcionamiento de la UCR, la gestión conjunta de los Servicios de Radiología en red con soporte tecnológico de altas prestaciones es una alternativa eficaz a los sistemas tradicionales y la evolución natural de los mismos, desde el punto de vista asistencial, económico y científico. 1. Real Decreto 11/2008, de 21 de febrero. BOCM de 22 de febrero de 2008. 2. de Miguel Criado J, García del Salto L, Fraga Rivas P, Aguilera del Hoyo LF, Gutiérrez Velasco L, Díez Pérez de las Vacas MI, et al. MR Imaging Evaluation of Perianal Fistulas: Spectrum of Imaging Features. Radiographics. 2012; 32(1):175-94. 3.Lorente-Ramos RM, Armán JA, Muñoz-Hernández A, Gómez JM, de la Torre SB. US of the eye made easy: a comprehensive how-to review with ophthalmoscopic correlation. Radiographics. 2012;32(5): E175-200. 4. Lorente-Ramos R, Azpeitia-Armán J, Muñoz-Hernández A, GarcíaGómez JM, Díez-Martínez P, Grande-Bárez M. Dual-energy x-ray absorptiometry in the diagnosis of osteoporosis: a practical guide. AJR Am J Roentgenol. 2011; 196(4): 897-904. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):117-23 Fraile Moreno E. Los Servicios de Radiología en Red... De las desventajas o inconvenientes del modelo implantado, la principal es la alta dependencia tecnológica de mantenimiento de los sistemas informáticos y de gestión y la conexión requerida entre ellos, lo que obliga a una alta especialización del personal de mantenimiento de estos sistemas y una disponibilidad de los mismos los 365 días del año. Bibliografía Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, en su Consejo Interterritorial de diciembre del año 2012, elaboró una serie de recomendaciones para la cartera básica de salud; en lo referente al diagnóstico por imagen, recomienda replicar el modelo de “anillo radiológico”, como comúnmente se conoce la Unidad Central de Radiodiagnóstico de la Comunidad de Madrid 123 ¿Es posible consensuar las cargas de trabajo en los Servicios de Radiodiagnóstico? Martínez Serrano C Jefe del Servicio de Radiodiagnóstico. Hospital Son Llàtzer. Palma de Mallorca. Dirección para correspondencia: [email protected] Todos estamos de acuerdo en que para poder optimizar al máximo nuestros recursos, humanos y tecnológicos, es imprescindible contar con la mayor información posible de la actividad que se efectúa en los Servicios de Radiología. Mucho se ha escrito sobre la necesidad de medir dicha actividad que hasta hoy se ha basado en el número de pruebas totales realizadas tanto por el Servicio como por cada radiólogo. Hoy sabemos que este tipo de medición está obsoleto y tratamos de basarnos en la complejidad de las pruebas. La Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM), con su catálogo de exploraciones, ha sido pionera internacionalmente en su intento de generalizar y homogeneizar al máximo la medición de la actividad radiológica. Por supuesto que no es perfecto y muchos de nosotros encontramos que en ocasiones no responde a nuestra realidad cotidiana. No obstante, creo que de momento es el mejor sistema del que disponemos, que hace que intentemos compararnos unos con otros con el objetivo de ir mejorando nuestro rendimiento. Y creo que todavía es de mayor utilidad para poder planifi- car internamente los Servicios, ya que se presupone una política común de trabajo en ellos. Llegados a este punto, mi experiencia es que es factible llegar a consensuar las cargas de trabajo de los radiólogos. Hay publicaciones sobre el tema, sin llegar a ninguna conclusión clara. Algunos artículos internacionales analizan tímidamente las unidades relativas de valor (URV) por radiólogo, aunque todos sabemos que es una medida económica, y en otros se empieza a valorar el tiempo que el radiólogo utiliza para trabajos distintos a la pura elaboración de informes. Lo primero de todo, hay que dejar atrás la teoría de que únicamente la elaboración de informes está en relación con la productividad del radiólogo. También quiero comentar que no me parece una práctica correcta hacer trabajos excesivos de adquisición de imágenes/estudios radiológicos sin un plan de respuesta de informado. Y lo llamo “adquisición de imágenes”, ya que creo que un estudio radiológico sin tener un radiólogo responsable del mismo se queda en una mera e inconGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):125-7 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Carmen Martínez Serrano. 125 Martínez Serrano C. ¿Es posible consensuar las cargas ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 126 trolada adquisición de imágenes y, además, puede llevar a la mercantilización de los informes, al margen de otros riesgos para la seguridad del paciente, como la imposibilidad de aplicar los criterios médico-legales de justificación y optimización. Y no niego que pueda haber una concertación de servicios, pero ello entraría dentro de un plan de respuesta que conllevaría, al menos, un control de calidad de qué, cómo y dónde se hace, y quién lo informa. Para intentar establecer unas cargas de trabajo adecuadas hay que definir el tiempo asistencial contratado para cada radiólogo y transformar toda la actividad en tiempo, asignando tiempo de médico a cada cometido/función del mismo. Dentro del perfil del radiólogo está la clásica tarea asistencial directa (fácilmente cuantificable) de la interpretación de estudios, obtenidos o no por él mismo, y el tratamiento en el caso de la radiología intervencionista. Pero además, y no menos importante, está la actividad asistencial “indirecta” de radiólogo consultor, con la asistencia a comités y su preparación, consultas directas diarias por parte de otros especialistas, comunicación de hallazgos graves o inesperados; revisión de las peticiones para su justificación, adecuación y priorización, entre otras (no cuantificable, pero con un tiempo previsto valorable). En la guía de gestión de la SERAM ya se propone tener en cuenta este tipo de actividad. Por otra parte, no podemos olvidar la actividad no asistencial de investigación, docencia y formación continuada. Es necesario encontrar entre todas estas actividades un equilibrio que se adecue tanto a la organización como Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):125-7 al desarrollo profesional del radiólogo. Dependiendo de los radiólogos y de los Servicios será distinto, ya que hay hospitales muy organizados en comités e incluso en unidades multidisciplinares, con docencia o no, con gran política investigadora en sus objetivos o no, etc. Según el Royal College of Radiologists, hay que tener en cuenta que: “El tiempo derivado de las comisiones suele ser igual a la duración de la reunión. Para una reunión de una hora, el radiólogo consumirá dos horas de su tiempo y si es necesario la asistencia de dos radiólogos consumirán tres horas en total”. Y que: “Un residente inexperto influye en un 30% del tiempo de un radiólogo”. En mi experiencia, en un radiólogo con un perfil amplio estándar, el tiempo de pura elaboración de informes (cuantificable) es difícil que supere las cinco horas al día en una jornada de 37,5 semanales o, dicho de otro modo, utiliza dos horas al día para trabajos asistenciales indirectos y no asistenciales. Me atrevería a decir que se podría establecer una media de 60-65 UAR/ día y radiólogo en jornada de 37,5 horas. Evidentemente, habrá radiólogos con un perfil puramente asistencial, con la única tarea de obtención e informado de estudios en todo su horario, con una media de 85 UAR, y radiólogos cuya función sea puramente de gestión, o investigación, según la política del Servicio y del hospital y por tanto disminuya considerablemente. También en mi experiencia, creo recomendable que si el Servicio funciona con órganos/sistemas, la carga de trabajo se calcule para el área en su totalidad, en relación a los radiólogos que García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física Puede ser conveniente que la carga de trabajo planificada sea ligeramente superior a la capacidad de respuesta para contrarrestar las anulaciones imprevistas. No obstante, unas estadísticas periódicas ágiles ayudan a reasignar cargas de trabajo y rediseñar agendas en caso necesario. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología la componen, ya que ayuda a la responsabilidad y gestión compartida dentro de los equipos. Es muy efectivo y altamente enriquecedor que la distribución de la carga de trabajo total del área la organice los mismos radiólogos que la componen, así como la asistencia a comités, consultas telefónicas, trabajos de gestión y otras tareas que asume el radiólogo. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):125-7 127 Evaluación de la actividad individual del radiólogo Vieito Fuentes JM Servicio de Radiología. Complexo Hospitalario Universitario de Vigo. Vigo, Pontevedra. Dirección para correspondencia: [email protected] Resumen La evaluación de la actividad individual del radiólogo ha recibido una escasa atención en nuestro país hasta fechas recientes. Sin embargo, el conocimiento del número de exploraciones por radiólogo y año, o por día, es muy útil para la planificación de recursos sanitarios, para el diseño de plantillas o, sencillamente, para la negociación de objetivos. La evaluación de la actividad en jornada ordinaria es esencial para la programación de la actividad diaria, así como para la confección de las agendas de trabajo. El abandono progresivo de la radiología simple, forzado por el aumento de técnicas complejas, ha centrado el trabajo del radiólogo esencialmente en la realización e informado de estas últimas. La actividad asistencial debe medirse siguiendo criterios estándar y objetivos, y debe realizarse sobre el número de estudios realizados e informados por cada radiólogo. El catálogo de exploraciones propuesto por la Sociedad Española de Radiología Médica tiene una amplia aceptación; sin embargo, escasean los estudios publicados sobre la efectividad del mismo como sistema de medida. Las Unidades Relativas de Valor, el tiempo neto del radiólogo en la realización de informes y las unidades de actividad se han diseñado para equilibrar la evaluación individual de rendimientos. Se analizan los distintos elementos que intervienen en una evaluación correcta de la actividad, se establecen propuestas razonadas de rendimiento asistencial y se compara la actividad individual en España con la actividad en otros países. Finalmente, se realizan recomendaciones para la obtención de un rendimiento óptimo de cada profesional, así como su satisfacción personal. Palabras clave: Radiología; Evaluación de rendimientos; Unidades Relativas de Valor; Unidades de actividad; Tiempo neto radiólogo. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Juan M. Vieito Fuentes. 129 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 130 Radiologist’s individual activity evaluation Abstract Radiologists’ workload analysis has received scanty attention in our country up to recent dates. However, knowing how many examinations a radiologist carries out per day or per year can be very useful for the planning of health resources, manpower definition or objective-based negotiation. A day-to-day evaluation of a radiologist’s ordinary activity is essential for the organization of daily tasks and for the definition of work schedules. The progressive abandonment of plain film examination reports due to the apparition of more complex techniques has focused the radiologists’ attention, essentially, on these last examinations. The evaluation of a clinical radiologist’s workload should be made following standard, objective and well-established criteria, and should only take into consideration the number of individual studies that are performed or reported upon. The Examination Catalogue proposed by the Spanish Society of Radiology had excellent acceptation between radiologists and health authorities however few reports about its efectivity have been conducted or published. Relative Value Units (RVUs), radiologists’ net time of clinical activity and Activity Units have been designed to balance individual workload evaluation. We analyze the different factors related to a correct workload evaluation and compare radiologists’ workload in Spain with other countries. Finally we propose recommendations for improving a clinical radiologist’s workload as well as his satisfaction. Key words: Radiology; Workload evaluation; Relative value units; Activity units; Radiologist net time. Introducción Las avanzadas técnicas de imagen con las que trabajamos en la actualidad, aunque han aumentado de manera significativa la eficacia diagnóstica en su conjunto, con el consiguiente beneficio para el paciente, no es menos cierto que han incrementado el tiempo de dedicación del radiólogo y de forma significativa el gasto sanitario. En el escenario de cambio mundial por el que atravesamos, con un progresivo aumento en la demanda de técnicas radiológicas, el aumento en la complejidad de las mismas, el perfeccionamiento de los sistemas de archivo y comunicación que permiten el trabajo a distancia del radiólogo y el propio mercado laboral en este terreno, la eficacia y la eficiencia en radiología se sitúan en el primer plano de la Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 profesión. Por otro lado, se ha producido una aumento paulatino en la absorcion de técnicas radiológicas por otras especialidades. La realización de ecografía por ginecólogos, cardiólogos, digestólogos o médicos de Atención Primaria son buen ejemplo de ello. Sin embargo, otras técnicas como la tomografía axial computarizada (TAC), la resonancia nuclear magnética (RNM) o la radiologia vascular están siguiendo el mismo camino. En Alemania, el 70% de los estudios de imagen están en manos de no radiólogos. Por todo ello, la carga de trabajo del radiólogo se ha convertido en una preocupación constante para Administraciones sanitarias, Gerencias, Directores de unidades y, cómo no, para los propios radiólogos. No obstante, no es tarea fácil establecer criterios estándar en Radiología, puesto que a la Análisis de la actividad individual del radiólogo: asistencial, científica y docente Los elementos básicos que afectan a la actividad frecuentemente varían entre países, comunidades autónomas, entre hospitales e incluso dentro de un mismo equipo de trabajo. La diferencia está clara entre países con connotaciones culturales, legislativas y salariales diferentes; sin embargo, esas diferencias pueden existir en un país como el nuestro. Por ejemplo, puede haber diferencia entre un hospital docente y uno no docente, puede haber diferencia entre equipos con una Unidad de Radiología Intervencionista y uno que no la tiene. Puede haber diferencia, asimismo, por ejemplo, dentro de un mismo equipo, entre radiólogos Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... nes, y con posterioridad revisiones de este último en los años 2000, 2004 y 2009. En este Catálogo, además del número de exploraciones se valoran otros tres parámetros: el tiempo neto del radiólogo, las URV y las Unidades de Actividad Radiológica (UA). Fue rápidamente incorporado a los sistemas de información existentes en las distintas comunidades autónomas, transformándose en el sistema más importante de evaluación y medida de la actividad radiológica. No obstante, pocos estudios han sido realizados sobre la evaluación de estos datos y con cierta frecuencia generan conflicto con las autoridades sanitarias, o incluso entre los propios profesionales. Es, por lo tanto, objetivo del presente trabajo analizar los elementos básicos que influyen en la actividad del radiólogo, proponer estándares aproximados de actividad por radiólogo en nuestro país, analizar nuestra posición con respecto a otros países y establecer las propuestas para mejorar la eficiencia en la actividad asistencial del radiólogo. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología gran complejidad existente en la especialidad se suman variables culturales, legislativas, salariales, etc., lo que dificulta aún más el establecimiento de valores comparativos. Al número total de estudios por radiólogo se han añadido criterios de ponderación para equiparar la complejidad de los mismos. El método Keogh, desarrollado en la década de los 80, o el Comharley en los 90 han dado paso en los últimos años a la introducción de la Unidades Relativas de Valor (URV) como elemento de comparación y evaluación de actividad. Este sistema, aplicado con ligeras variantes en países como EE. UU., Canadá, Nueva Zelanda o Australia, mide esencialmente el coste de la exploración. La evolución en las recomendaciones del Royal College of Radiologists (RCR) a través de su historia reciente es un buen ejemplo de la evolución del pensamiento en relación a la carga de trabajo del radiólogo. El primer documento, elaborado en 1990, cifraba la carga de trabajo del radiólogo en 12 500 estudios por radiólogo y año. Un segundo documento del mismo colegio («Workload and mampower in clinical radiology»), publicado en 1999, reconocía que el documento anterior no era apropiado para la evaluación de la carga de trabajo y establecía algunas referencias específicas como ejemplos en radiología simple (75 técnicas por radiólogo) y radiología intervencionista (tres intervenciones por radiólogo) en una jornada de 3,5 horas. Estas recomendaciones fueron retiradas en el año 2006. En los años 2008 y 2012, el RCR publicó dos nuevas guías en las que ya no realiza ninguna recomendación numérica, teniendo en cuenta los cambios en el papel del radiólogo y sobre todo su mayor importancia en la toma de decisiones clínicas. En el año 1998, la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM) publicó una guía de Gestión de los Servicios de Radiología y el primer Catálogo de Exploracio- 131 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 132 que tengan una mayor productividad científica y docente y otros que no la tengan. Tipo de Actividad y tiempo neto de dedicación La actividad del radiólogo se divide esencialmente entre la asistencial, la científica y la docente. El peso específico de cada uno de estos tres apartados puede variar de un centro a otro. Existen otras actividades diarias o semanales de difícil cuantificación pero que constituyen una parte esencial de su trabajo. Las interconsultas con el clínico, la actividad en grupos de trabajo, sesiones clínicas, tareas administrativas o de gestión –que son tan solo algunas de ellas– son de difícil evaluación. M. Cohen analiza, en un exhaustivo trabajo, el porcentaje de tiempo que cada radiólogo de un hospital docente emplea en sus distintas actividades, separándolas en científicas, docentes y asistenciales. Concluye que cada radiólogo dedica aproximadamente el 72% de su tiempo a actividades asistenciales, el 19% a enseñanza y el 9% a investigacion. Del tiempo dedicado a actividades asistenciales, tan solo el 60% corresponde a la realización de estudios e informes radiológicos, es decir, un 42% de su tiempo total. Efectivamente, la realización de estudios e informes radiológicos son los elementos más valorados, tanto en el sistema público como privado, por sus repercusiones asistenciales o de negocio. El tiempo de dedicación a la realización de exploraciones e informes es, por lo tanto, la parte más visible de la actividad del radiólogo y es asimismo el pilar más importante en el que se sustenta el Catálogo de la SERAM. A la hora de cuantificar la actividad individual del radiológo, es muy impor- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 tante ceñirse a la actividad realmente informada, en lugar de a la actividad total realizada por la Unidad. Es asimismo importante que exista un protocolo de carga de datos, de cumplimiento obligatorio, con el fin de dar uniformidad a la recogida de los mismos y evitar la picaresca. Horario de trabajo y dias netos La resolución del 28 de diciembre de 2012, de la Secretaría de Estado de Administraciones públicas, fija la jornada laboral española en 37,5 horas y la jornada anual en 1664 horas. Ello representa un aumento en el número de horas de trabajo y en la disminución de días libres con respecto a la legislación anterior. Al tratarse de una ley de reciente incorporación, no disponemos de datos sobre su repercusión en la actividad asistencial. Los cálculos referidos al año 2012, en nuestra comunidad, se articulan sobre un horario semanal de 35 horas sobre los demás criterios legislativos existentes en ese momento. Entre ellos se incluyen las libranzas de guardia, los días de libre disposición (LD), la asistencia a congresos o cursos, los días festivos locales o nacionales, etc. El número de días netos correspondientes al año 2012 se obtiene de la siguiente fórmula: Días netos = Días totales-Vacaciones y festivos-LD-Libranzas guardia – Bajas – Congresos – Otros En el año 2012, el número medio de días netos/radiólogo en nuestro hospital fue de 193, con un máximo de 215 y un mínimo de 106. El conocimiento de los días netos es importante, especialmente para la valoración de la actividad referida al horario ordinario. La actividad ordinaria es aquella que es común a todos los radiólogos y que está relacionada con un salario estipulado por ley. Esta actividad se desarrolla esencialmente en jornada de mañana de lunes a viernes. La actividad extraordinaria tene carácter esporádico y voluntario. Depende de un pago adicional que se establece generalmente por exploración realizada e informada. Se suele realizar para aquellas técnicas con mayor lista de espera y con el fin de regularla. En este apartado se incluye también la llamada compensación de guardias, de características similares. Las guardias médicas se pagan también como un concepto aparte. Tienen la ventaja asistencial de que ofrecen asistencia especializada al paciente durante las 24 horas, los 365 días del año. Tienen el inconveniente de que los derechos a libranza generados por las mismas merman de forma significativa la actividad ordinaria. Las unidades de medida, así como la forma de calcularlas, están perfectamente definidas en el catálogo de la SERAM. No vamos a entrar, por lo tanto, en un análisis profundo de la mismas, pero sí analizaremos su importancia relativa en la evaluación de la carga de trabajo del radiólogo: – El numero de exploraciones debe ser manejado con cautela puesto que los estudios no informados – generalmente estudios radiológicos simples– no constituyen actividad del radiólogo. El número de exploraciones realizadas e informadas por el radiólogo tampoco es un parámetro útil para evaluar la actividad del radiólogo, a menos que estemos evaluando la actividad en una misma técnica o en un mismo grupo de exploraciones. El número de exploraciones por radiólogo dependerá esencialmente del nivel de complejidad de las mismas. – Las unidades relativas de valor (URV) reflejan la distinta complejidad de cada técnica, con lo cual establecen un sistema de equilibrio entre técnicas más o menos complejas. Sin embargo, las URV estan referidas al coste total de la exploración, del cual el trabajo del radiólogo es tan solo uno de los elementos. – Las Unidades de Actividad Radiológica (UA). Al igual que las anteriores, reflejan el distinto nivel de complejidad y contribuyen a la mejora de elementos comparativos; sin embargo, las UA no solo están relacionadas con el tiempo de radiólogo, sino también con el personal sanitario necesario para la realización e informe de la exploración y con el tiempo de ocupación de sala (TOS). Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... La actividad del radiólogo en el sistema sanitario público está sujeto a varias normas legislativas, así como a percepciones económicas diferenciadas en función de su régimen de trabajo. Existen asimismo ligeras variantes según la comunidad donde se preste el servicio. Desde el punto de vista asistencial así como del rendimiento hay, en líneas generales, tres que merecen nuestra consideración: actividad ordinaria, guardias y actividad extraordinaria. En esta última, conocida como «peonadas», solemos incluir la llamada compensación de guardias, por tener un concepto económico aparte y ser realizado fuera de la jornada ordinaria. Unidades de medida Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Variantes de actividad y salario en el sistema público 133 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 134 – El tiempo neto es el tiempo empleado por el radiológo en la realización de la exploraciones –en los casos necesarios– y en la elaboración de informes radiológicos. Es por lo tanto un elemento específico para la evaluación del trabajo del radiólogo. Actividad asistencial del radiólogo e índices de actividad en nuestro medio La actividad radiológica en la Comunidad Autónoma de Galicia se registra en el sistema de informacion de Diagnóstico por Imaxe (SIDI) desarrollado en la propia comunidad y común a todas las dependencias radiológicas del Servico Galego de Saude (SERGAS). La carga de datos se rige por el catálogo de la SERAM 2004, implantado en el año 2005 con ligeras adaptaciones y recientemente actualizado a la nueva versión 2009. La explotación de datos se realiza mediante un Sistema de Información de Análisis Complexas (SIAC) que permite la explotación de datos on line. A lo largo del año 2012 se realizaron un total de 2 304 506 técnicas radiológicas en la red asistencial del SERGAS, de las cuales 1 445 201 (62%) tenían un informe radiológico asociado. En el SERGAS desarrollan su labor a tiempo completo un total de 276 radiólogos. Por lo tanto, el número medio total de técnicas por radiólogo fue de 8349. Sin embargo, si tenemos en cuenta las técnicas informadas, el número de técnicas por radiólogo fue tan solo de 5226. El 49% de las técnicas informadas correspondían a estudios radiológicos simples y el 51% a técnicas especiales. En el mismo periodo se realizaron en el Complexo Hospitalario Universitario de Vigo (CHUVI) –acreditado con do- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 cencia MIR y de grado– y su érea de influencia un total de 413 597 técnicas radiológicas, de las cuales 279 209 (67%) correspondían a estudios radiológicos simples y el 33% a técnicas especiales. Del total de estudios realizados, tan solo 227 590 (55%) tenían un informe radiológico asociado. El 100% de los estudios sin informe asociado correspondían a estudios radiológicos simples, en su mayor parte solicitados desde el Área de Urgencias o del Servicio de Traumatología. El número total de exploraciones por radiólogo fue de 8271, si tenemos en cuenta el número total técnicas realizadas, y de 4551 si tenemos en cuenta el número de técnicas realmente informadas. Es importante resaltar que el 59% de las técnicas informadas correspondían a estudios especiales y tan solo el 41% a estudios simples. Asimismo, el 77% de los primeros se distribuía entre ecografía, TAC y RNM. Ello quiere decir que tan solo el 33% de los estudios radiológicos simples tenían un informe asociado. En la Tabla 1 presentamos un resumen de la actividad total por radiólogo en nuestro complejo hospitalario. Con el fin de obtener un panorama referido exclusivamente a la actividad diagnóstica, hemos eliminado la actividad correspondiente a los radiólogos intervencionistas y a los radiólogos con contrato a tiempo parcial. Se incluyen en el estudio las técnicas informadas, el tiempo médico, las URV y las UA. Hemos calculado la media para cada uno de estos parámetros, así como las cifras máximas y mínimas. La media de técnicas informadas fue de 4829 por radiólogo y año, con un mínimo de 1666 y un máximo de 21 075. El tiempo neto medio por radiólogo en ese periodo fue de 64 572 minutos con picos máximo y mínimo de 114 924 y de 39 005, respectivamente. La media de URV por radiólogo fue de 20 834 con pico máximo de 53 062 y mínimo de TI 3617 6301 3087 2581 1666 6146 6899 6185 9290 3241 2840 9751 3655 2294 1974 4364 3255 2867 3385 3312 1838 2726 3298 5525 4785 4644 2040 5911 3137 2868 1796 3450 2548 2995 21 075 2750 5740 7677 6023 4674 3700 19 389 2363 4829 TM 70 600 61 455 58 590 45 278 44 235 56 788 103 710 101 795 46 883 75 060 53 690 76 734 67 500 46 070 54 495 88 815 55 440 57 505 68 200 75 555 43 255 51 685 66 695 67 587 53 973 64 413 45 590 61 725 54 585 48 980 39 005 80 365 50 910 56 175 114 924 49 310 76 507 64 480 92 160 59 386 66 383 102 723 57 375 64 572 URV 14 915 24 419 13 201 18 657 14 989 18 671 22 691 24 108 11 982 14 767 32 752 17 507 12 029 26 156 28 606 16 966 13 805 35 863 53 062 13 174 23 713 32 528 15 040 15 635 8367 14 770 22 062 19 447 20 809 27 166 18 935 14 432 14 405 11 985 22 912 28 703 15 139 21 234 21 815 11 558 44 817 20 585 21 499 20 834 UA 14 219 13 439 11 962 10 501 9703 12 844 19 579 19 614 12 573 15 146 21 164 15 932 13 352 16 193 16 523 17 553 10 520 22 215 17 690 14 675 14 876 20 325 13 923 13 618 9951 13 377 15 344 13 888 13 016 18 905 13 268 15 749 10 662 11 422 23 646 18 926 15 120 14 202 17 434 11 807 16 113 20 932 12 565 15 220 Máximos 21 075 114 924 53 062 23 646 Mínimos 1666 39 005 8367 9703 TI: técnicas informadas; TM: tiempo neto/año/radiólogo; UA: Unidades de Actividad/año/radiólogo; URV: Unidades Relativas de Valor/año/radiólogo. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 Media Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Tabla 1. Actividad total por radiólogo en el año 2012 135 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... 8637. Finalmente, los radiólogos realizaron una media de 15 220 UA/año con oscilación entre las 9703 y las 23 646. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología En las Figuras 2 y 3 comprobamos esta misma tendencia en radiólogos del área de genitourinario y mama. 136 aquellos que pudieran deberse a guardias médicas, a compensación de guardias o a autoconcertación. La media de técnicas informadas por radiólogo y año fue de 4694 a las que corresponden 61 983 minutos de tiempo, 20 084 URV y 14 645 UA. A continuación introdujimos en el análisis los días netos trabajados por cada uno de ellos y calculamos, además, los índices de actividad por día, resultado de dividir los parámetros anuales de actividad ordinaria por el número de días netos trabajados. La media de días netos de trabajo en jornada ordinaria por radiólogo fue de 193, con oscilación entre los 215 y los 106, respectivamente. Los índices obtenidos en actividad diaria fueron los siguientes: 25 técnicas por radiólogo y día con máximo de 101 y mínimo de 7; 327 minutos de tiempo neto por radiólogo y día (5 horas y 27 minutos) con oscilación entre los 185 y los 608; 107 URV por radiólogo y día con máximo de 340 y mínimo de 37, y 77 UA, con máximo de 134 y mínimo de 42. En la Figura 1 se analiza la actividad total de un grupo de radiólogos que realizan un número y tipo de técnicas similares en el área de radiología torácica. De los cinco radiólogos dedicados a esta actividad, tres realizan guardias y dos no. Sin embargo, y como podemos comprobar, los cuatro parámetros que reflejan los índices de actividad son muy similares entre todos los radiólogos –al margen de que realicen guardias o no– y las curvas del gráfico son casi superponibles. En la Tabla 2 analizamos los parámetros de cada uno de estos radiólogos correspondientes a la actividad ordinaria, es decir, los referidos a su jornada ordinaria de trabajo y excluyendo 700 000 600 000 500 000 Radiólogo 1 400 000 Radiólogo 2 Radiólogo 3 300 000 Radiólogo 4 200 000 Radiólogo 5 100 000 0 1 2 3 4 Figura 1. Actividad Total por radiólogo con dedicación específica al Área de Tórax en 2012 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 100 000 80 000 Radiólogo 1 60 000 Radiólogo 2 Radiólogo 3 40 000 20 000 1 2 3 4 Distribución de Índices de Actividad por radiólogo: 1. Técnicas informadas; 2. Tiempo médico; 3. Unidades Relativas de Valor; 4. Unidades de Actividad Figura 2. Actividad total por año de radiólogos con dedicación específica a mama en 2012 En la Figura 4 podemos ver la distribución de los cuatro índices más importantes referidos a la actividad ordinaria de cada radiólogo por día. En todos ellos destaca la gran variabilidad en la distribución. La actividad diaria de la mayoría de los Radiólogos se situa entre las 10 y las 30 técnicas. La mayoría de los radiólogos centran su actividad ordinaria en la realización e informe de técnicas especiales. Cifras superiores indican generalmente que el radiólogo centra su actividad esencial en estudios radiológicos simples o en la combinación de estudios simples y estudios especiales. La distribución del tiempo neto dedicado a la realización de informes radiológicos se sitúa esencialmente entre los 200 y los 300 minutos/radiólogo/día. Un porcentaje muy inferior de radiológos se situa entre los 400 y los 600. La distribución de las URV/día se sitúan entre las 50 y las 150, aunque un porcentaje reducido supera esta cifra. Finalmente, la distribución del número de UA/radiológo y día se sitúa entre las 50 y las 100, en- contrándose un porcentaje mínimo por debajo de 50 y otro entre 100 y 150. Como se puede ver, casi todos los índices muestran una variabilidad relativamente amplia. Análisis de los datos en nuestro medio El análisis de los datos anteriores demuestra en líneas generales lo siguiente: Estudios radiológicos sin informe Existe un porcentaje elevado de estudios radiológicos simples sin informe. Esta tendencia es común en mayor o menor medida en todos los hospitales de la comunidad y probablemente en el conjunto del país. En nuestro hospital corresponden esencialmente al Área de Urgencias y Traumatología. Casi la mitad (48%) del total de exploGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 0 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... 120 000 137 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... 90 000 80 000 70 000 60 000 50 000 Radiólogo 1 40 000 Radiólogo 2 20 000 10 000 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 0 138 Radiólogo 3 30 000 1 2 3 4 Distribución de Índices de Actividad por radiólogo: 1. Técnicas informadas; 2. Tiempo médico; 3. Unidades Relativas de Valor; 4. Unidades de Actividad Figura 3. Actividad total por año de radiólogos con dedicación específica a genitourinario en 2012 raciones radiológicas realizadas en nuestro hospital corresponden al Área de Urgencias. Consideramos que el abandono progresivo de estas técnicas sin informe se debe esencialmente al aumento general y progresivo de técnicas especiales –tanto en actividad programada como de urgencias– sin adecuación del número de radiólogos. Actividad anual del radiólogo El número medio de técnicas informadas por radiólogo, aunque es aparentemente muy bajo en relación a los datos referidos en la literatura, no lo es tanto si tenemos en cuenta que la mayoría de los estudios corresponden a técnicas especiales. Los tiempos netos y las UA contribuyen a ajustar de forma más razonable la carga de trabajo entre la totalidad de radiólogos, pero presentan un alto índice de variabilidad. Sin embargo, cuando comparamos estos índices entre radiólogos que realizan una actividad similar (FiGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 guras 1-3), la variabilidad entre los mismos es prácticamente inexistente y además no existe prácticamente diferencia entre radiólogos que realizan y no realizan guardias. Ello se debe a que el aumento actividad ordinaria entre los que no realizan guardias es prácticamente equivalente a la actividad de guardia de los que sí las hacen. La ligera diferencia entre las cifras de nuestro hospital y la media de la comunidad es también fácilmente justificable si se tiene en cuenta el mayor porcentaje de técnicas especiales. Índices de actividad ordinaria por radiólogo y día Los índices medios en actividad ordinaria por radiólogo y día fueron también aparentemente bajos. Sin embargo, estos índices medios deberán ser manejados con mucha cautela, y teniendo siempre en cuenta el porcentaje de estudios especiales que el radiólogo realiza o informa. Se deberían TI 3134 6138 2893 2506 1447 5899 6721 5946 9290 2919 2840 9510 3615 2294 1974 4116 3001 2867 3384 3121 1838 2726 3035 5150 4507 4562 2040 5903 3137 2868 1796 3016 2431 2901 21 075 2750 5719 7677 5794 4523 3700 19 137 1943 4694 TM 61 020 58 785 54 720 43 758 39 805 51 973 101 020 97 640 46 883 68 895 53 690 72 044 66 700 46 070 54 495 83 820 51 180 57 505 68 180 71 510 43 255 51 685 61 805 60 222 48 413 63 213 45 590 61 540 54 585 48 980 39 005 71 940 48 695 54 295 114 924 49 310 76 082 64 480 88 735 56 351 66 383 97 683 48 390 61 983 URV 11 496 23 501 12 288 18 229 13 325 17 182 22 279 22 937 11 982 12 467 32 752 16 088 11 908 26 156 28 606 15 359 12 674 35 863 53 054 11 557 23 713 32 528 13 178 13 447 7609 14 586 22 062 19 372 20 809 27 166 18 935 12 430 13 467 11 700 22 912 28 703 15 070 21 234 21 291 11 097 44 817 19 981 17 816 20 084 UA 11 936 12 800 11 154 10 170 8645 11 763 19 071 18 685 12 573 13 501 21 164 14 848 13 202 16 193 16 523 16 399 9578 22 215 17 684 13 709 14 876 20 325 12 651 11 971 8968 13 149 15 344 13 843 13 016 18 905 13 268 13 943 10 113 11 068 23 646 18 926 15 039 14 202 16 787 11 239 16 113 20 100 10 432 14 645 Días N 201 208 209 189 208 170 198 191 177 203 196 179 176 189 198 215 206 208 156 208 208 183 179 208 207 176 189 208 203 183 211 208 203 208 209 209 167 106 177 188 174 201 201 193 TI/día 16 30 14 13 7 35 34 31 52 14 14 53 21 12 10 19 15 14 22 15 9 15 17 25 22 26 11 28 15 16 9 15 12 14 101 13 34 72 33 24 21 95 10 25 TM/día URV/día UA/día 304 57 59 283 113 62 262 59 53 232 96 54 191 64 42 306 101 69 510 113 96 511 120 98 265 68 71 339 61 67 274 167 108 402 90 83 379 68 75 244 138 86 275 144 83 390 71 76 248 62 46 276 172 107 437 340 113 344 56 66 208 114 72 282 178 111 345 74 71 290 65 58 234 37 43 83 75 359 241 117 81 296 93 67 269 103 64 268 148 103 185 90 63 346 60 67 240 66 50 261 56 53 550 110 113 236 137 91 456 90 90 608 200 134 501 120 95 300 59 60 382 258 93 486 99 100 241 89 52 327 107 77 Máximos 21 075 114 924 53 054 23 646 215 101 608 340 134 Mínimos 1447 39 005 7609 8645 106 7 185 37 42 Días N: días netos/radiólogo/año; TI/día: técnicas informadas/radiólogo/día; TI: técnicas informadas; TM/día: tiempo neto/radiólogo/día; TM: tiempo neto/año/radiólogo; UA/día: UA/radiólogo/día; UA: Unidades de Actividad/ radiólogo/año; URV/día: URV/radiólogo/día; URV: Unidades Relativas de Valor/año/radiólogo. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 Media Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Tabla 2. Actividad ordinaria por radiólogo en 2012 e índices de actividad por día 139 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... Técnicas/Radiólogo/Día 120 100 80 60 40 20 0 Tiempo neto/Radiólogo/Día 800 600 400 200 0 10 20 30 40 50 10 20 30 40 50 40 50 U.A./Radiólogo/Día 400 150 300 100 200 0 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 0 URVs/Radiólogo/Día 50 100 140 0 0 10 20 30 40 50 0 0 10 20 30 Figura 4. Distribución de índices de actividad ordinaria por radiólogo y día establecer índices específicos en función del área o la técnica de dedicación. Asimismo, consideramos que el catálogo SERAM debería realizar nuevas adaptaciones en función del conocimiento, especialmente en el tiempo del radiólogo o creando unidades de actividad específicas teniendo encuenta el área anatómica. El conocimiento y análisis de la actividad ordinaria es fundamental, desde nuestro punto de vista, para la planificación de plantillas, para adecuar la carga de trabajo por radiólogo, para el diseño de agendas y para la negociación de objetivos o de autoconcertación Variabilidad entre radiólogos Existe una amplia variabilidad –siempre dentro de unos márgenes– en los índices de actividad entre los distintos radiólogos del Servicio. Consideramos que ello se debe esencialmente a desajustes en los tiempos de radiólogo establecidos en el catálogo de la SEGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 RAM, si bien podrían influir también factores atribuibles al propio radiólogo. En cualquier caso, debe ser analizado siempre con cautela. Por ejemplo, en nuestro caso, el radiólogo con menor índice de actividad está centrado en la realización de técnicas especiales avanzadas y con gran actividad científica y docente; la labor del radiólogo con mayor índice de actividad corresponde esencialmente a estudios radiológicos simples procedentes de Atención Primaria. No obstante, y como apuntábamos previamente, cuando se compara la actividad entre los que tienen una dedidación similar, ya corresponda a un área anatómica o a una técnica concreta, la variabilidad de los índices disminuye de forma significativa. Anális de actividad en relación con otros países Las referencias a la evaluacion del trabajo del radiólogo son escasas en la literatura española. La Guía de Gestión de los Servicios de Radiología es- La cifra de 4829 exploraciones por radiólogo y año en nuestro medio podría parecer, por lo tanto, muy baja con respecto a otros países si se analizan tan solo como datos crudos. Sin embargo, si tenemos en cuenta que el 59% de estas exploraciones corresponden a exploraciones especiales e introducimos un factor de correción, transformando el exceso de porcentaje de estudios especiales en estudios simples con una relacion de 1:4 (una exploración especial corresponde de media a cuatro estudios simples), el Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... que oscila entre el 75 y el 80%. En hospitales docentes, el número de estudios por radiólogo suele ser un 25% inferior. Es importante resaltar también que el horario medio de trabajo es superior al de nuestro país. En Nuevazelanda, por ejemplo, el horario de trabajo del 50% de los radiólogos se sitúa entre las 40 y las 50 horas semanales, con un 25% entre las 50 y las 60 horas y otro 25% con menos de 40. En Europa, en sendos informes publicados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE) y la European Association of Radiology (EAR), se comparan diversos elementos relacionados con el desarrollo de la Radiología en los distintos países de la Comunidad Europea. Llama la atención que España se sitúa en un nivel medio alto en cuanto a número de Equipos de CT y RNM, pero es el segundo país –por debajo de Suecia– que tiene más radiólogos por millón de habitantes. En ninguno de estos informes se evalúa comparativamente la actividad individual del radiólogo; sin embargo, es importante resaltar que en 11 de 14 países los técnicos realizan inyección de contraste, en 4 de 14 enemas de bario y en 7 de 14 estudios ecográficos. Incluso, en uno de los países los técnicos realizan informes de estudios radiológicos simples o de ecografía bajo la supervisión del radiólogo. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología tablece la recomendación de un radiólogo por cada 9000 estudios/año (entre 8000 y 10 000); sin embargo, esta recomendación probablemente haya sido establecida por la relación entre las técnicas realizadas y el número de radiólogos, más que por un análisis de actividad de estos. En la revisión del catálogo del año 2000 se realiza una recomendación específica para la carga diaria del trabajo del radiólogo en módulos de 20 minutos, consistente en 16-18 módulos en el medio hospitalario y de 20-22 módulos en centros de salud. Al margen de los anteriores, poco se ha publicado al respecto en nuestro país, con análisis de datos fiables. En el ámbito internacional, la mayoría de las publicaciones referidas a la evaluación del trabajo del radiólogo corresponden a EE. UU. y están en su mayoría basadas en encuestas. Otros países como Inglaterra, Canadá, Australia, Japón, etc., han publicado cifras de referencia y recomendaciones similares relativas a la carga anual de trabajo del radiólogo. En todos ellos, la medida de de la actividad se realiza en función del número de exploraciones. Las URV se usan generalmente para medir el coste financiero y el reembolso. La cultura radiológica, la forma de trabajar y el salario en estos países, especialmente en EE. UU., difieren considerablemente de nuestro medio. Sirvan de ejemplo la mejor formación de los técnicos de radiología, la acreditación del técnico con formación avanzada, el radiologist assistant o el salario del radiólogo, este último referido generalmente a la productividad y entre cuatro y seis veces superior al de un radiólogo en España. El número medio de exploraciones por radiólogo y año recomendado en estos países está alrededor de las 13 000 técnicas por radiólogo y año; sin embargo, un 25% de los radiólogos realizan menos de 9000 por año y otro 25% más de 15 000, con un índice de estudios de radiología convencional 141 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 142 número medio de exploraciones por radiólogo y año se situaría en el entorno de las 8000-9000 por radiólogo y año. La cifra media de 25 exploraciones por radiólogo en jornada laboral ordinaria puede ser razonable cuando el mayor número corresponde a exploraciones especiales; sin embargo, es bajo si se combinan exploraciones especiales y generales, y muy bajo si predominan las generales. Las URV-107/radiólogo/día, aunque equiparan mejor la actividad entre radiólogos, se han diseñado para medir el coste de la exploración, y por lo tanto su aplicación como medida de actividad es desaconsejable. En los países anteriormente mencionados, las URV son controladas como un elemento financiero que influye en su salario, más que como un elemento de medida de su actividad. Las UA –77 UA/radiólogo/día– ponderan bastante mejor, desde nuestro punto de vista, la equiparación entre radiólogos, y presenta una variabilidad menor que las anteriores. Sin embargo, no existe el mismo elemento en otros países a la hora de establecer comparaciones. Finalmente, el tiempo neto –327 minutos/radiólogo/día (5 horas 27 minutos)– se asemeja a las UA en su rango de variabilidad y establece un tiempo neto dedicado a actividad asistencial que nos parece bastante razonable. Cuando se compara con otros países, este tiempo representa el 78% del total (420), basado en una jornada de siete horas/día, lo cual representaría un mayor porcentaje de tiempo dedicado a actividad asistencial que en otros países (40-50%). En resumen, podríamos concluir que en nuestro medio se realiza un trabajo Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 eminentemente asistencial y que el rendimiento es elevado, aunque el número medio de horas trabajadas así como el salario son bastante inferiores. Recomendaciones para optimizar la eficiencia en Radiología Aunque los servicios actuales de Radiología ofrecen una elevada rentabilidad por radiólogo cuando se tiene en cuenta la complejidad legislativa, los horarios de trabajo y los salarios actuales, consideramos que existe un margen relativamente importante de mejora en la productividad que, a nuestro entender, podríamos resumir en cinco recomendaciones: Análisis y mejora continua del proceso radiológico El análisis permanente y las acciones de mejora pueden contribuir a la mejora tanto de la calidad como de la eficiencia. Los sistemas informáticos actuales permiten una recogida de datos en todos los puntos del proceso radiológico. El análisis de los mismos, de forma precisa, con la participación de todo el personal implicado, permite establecer acciones de mejora significativas. Flexibilización de horarios, formas de trabajo y salarios, de forma justificada y bajo el prisma de la negociación La adaptación del trabajo del radiólogo a las necesidades de atención de los pacientes, la flexibilización en la realización de determinados informes y la consiguiente adaptación de salarios deberían ser contempladas en el futuro, cuando menos, como una herramienta a tener en cuenta. El liderazgo en estos cambios sería además, desde nuestro punto de vista, prove- Aumentar el número de horas/ semana con carácter voluntario y ligadas a rendimientos específicos y negociados La negociación de objetivos en los ámbitos asistenciales, científicos y/o docentes que impliquen una mayor dedicación en horas de trabajo, siempre regidos por parámetros de calidad y con el cosiguiente acompañamiento salarial, debería ser una herramienta de gestión habitual en cualquier Servicio de Radiología. Permtiría, por ejemplo, un rápido desatasco en los “cuellos de botella” de las listas de espera a un precio más razonable o realizar actividades científicas, docentes o administrativas negociadas sin interrumpir la labor asistencial. Informar el 100% de los estudios realizados, esencialmente los estudios radiológicos simples La información del 100% de los estudios radiológicos, especialmente los procedentes del Área de Urgencias, significaría una mejora importante en la calidad asistencial, una mayor dependencia del radiólogo como profesional y mejoraría positivamente la percepción sobre la actividad realizada. La adaptación de los recursos exis- Mejorar la formación de TESID. Técnico avanzado y técnico asistente del radiólogo La formación adecuada de TESID, así como la posibilidad de promoción en su profesión, es la gran asignatura pendiente de la Radiología en España. La formación básica de los TESID no es la adecuada para los cometidos que exige el desarrollo posterior de la profesión. Un programa de formación adecuado a las necesidades asistenciales, una mayor dependencia formativa de la Universidad y de los hospitales y un aumento en el tiempo de formación serían necesarios. No existe conciencia ni estructura para formación avanzada en áreas como ecografía, TAC, RNM, etc. La regulación oficial y la acreditación adecuada de esta formación en técnicas como ecografía, TAC o RNM deberían ser desarrolladas de forma inminente. La creación y regulación del técnico asistente del radiólogo y que contribuye a optimizar el trabajo del mismo no existe en la actualidad en España, aunque se hayan demostrado sus ventajas en otros países. Bibliografía recomendada – Bhargavan M, Kaye AH, Forman HP, Sunshine JH. Workload of radiologist in the United States in 20062007 and trends since 1991-1992. Radiology. 2009;252(2):458-67. – Brady AP. Measuring consultant radiologist workload: Method and results from a national Survey. Insights Imaging 2011;2:247-60. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):129-45 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... tentes a la demanda y la flexibilización en horarios, salarios y forma de trabajar anteriormente mencionados deberían ser, en mayor o menor medida, herramientas de gestión imprescindibles. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología choso para la Radiología como especialidad, y para el radiólogo en particular. La negociación individual o por grupos elimina el criterio rígido de la imposición legal y generalmente resulta atractivo para los profesionales. Por ejemplo, la organización de asistencia por turnos prestaría una mejor atención a la dinámica de la asistencia sanitaria, una mejor rentabilidad de los equipos e, incluso, contribuiría a disminuir el intrusismo profesional; la realización de informes de baja rentabilidad clínica en casa podría representar una mejora en la calidad de vida o en el salario del radiólogo. 143 Vieito Fuentes JM. Evaluación de la actividad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 144 – Cohen MD, Hawes DR, Hutchins GD, McPhee WD, LaMasters MB, Fallon RP. Activity-based cost analysis: A method of analyzing the financial and operating performance of academic Radiology departments. Radiology. 2000;215: 708-16. – Duszak R, MuroffLR. Measuring and managing radiologist productivity, part 1. Clinical metrics and benchmarcs. J Am Coll Radiol. 2010;7(6): 452-8. – Duszak R, MuroffLR. Measuring and managing radiologist productivity, part 2. Beyond the clinical numbers. 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Agencia Sanitaria Costa del Sol.Marbella, Málaga. 2 Responsable de Selección, Formación y Desarrollo. Dirección de Recursos Humanos. Agencia Sanitaria Costa del Sol. Marbella, Málaga. Dirección para correspondencia: [email protected] Pablo Valdés Solís. Francisco Galindo Sánchez. Resumen El concepto de competencia es usado con frecuencia, pero en pocas ocasiones analizado de forma correcta. Su definición es compleja y existen múltiples modelos, tanto en su descripción como en su implantación. Los modelos funcionales, como el aquí propuesto, permiten valorar las competencias del personal de forma objetiva. Implantar un sistema de evaluación de competencias funcionales mejora el rendimiento de un servicio médico, ya que asegura que solo quien realiza un procedimiento de forma correcta seguirá realizándolo. Implantar un modelo de competencias funcionales es complejo, ya que se debe partir de unos estándares bien definidos, que en muy pocas ocasiones están desarrollados. Establecer un sistema de evaluación de competencias se puede considerar una prioridad en el sistema sanitario, especialmente en la situación actual de crisis económica. Las sociedades científicas juegan un papel importante para aglutinar los modelos que se siguen en los diferentes sistemas sanitarios autonómicos. Palabras clave: Competencias funcionales; Assessment of competencies; Modelo de competencias. Evaluating competencies Abstract The concept of competence is often used but rarely analyzed correctly. Its definition is complex and there are many models, both in its description as in its implementation. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 1 147 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 148 Functional models, as proposed here, allow assessing staff competencies objectively. Implement a system of functional skills assessment improves the performance of a medical service, as it ensures that only those who perform a procedure correctly will continue performing it. Implement a functional competency model is complex, as it must be based on clearly defined standards that are rarely developed. Establish a competency assessment system can be considered a priority in the health system, especially in the current economic crisis. Scientific societies play an important role in bringing together the models followed in different regional health systems. Key words: Functional competencies; Competencies evaluation; Competencies model. Introducción Dentro de la gestión del profesional de los Servicios de Radiodiagnóstico, pocos conceptos hay tan paradójicos como el de las competencias. Se trata de un concepto intuitivo y muy usado pero, como veremos, pocas veces estudiado en profundidad y aplicado con criterio. Los manuales de gestión de radiodiagnóstico, incluso algunos recientes centrados en la seguridad y la calidad en Radiología1, tratan temas relacionados con la gestión del personal, el rendimiento del área, las revisiones por pares, etc., pero no suelen tocar el tema de las competencias del radiólogo. Sin embargo, y como se verá más adelante, se trata de un concepto que cada vez tiene más importancia en la gestión de los servicios de salud. Muchos gestores sanitarios están proponiendo cambios en los modelos de salud, que afectan de forma muy importante al personal. Así, el informe “Diez temas candentes de la Sanidad Española para 2012” de la consultoría PwC2 hace referencia a la necesidad de una modernización de la gestión de los recursos humanos y un nuevo sistema de retribución que no vaya ligado exclusivamente a indicadores de actividad. Estos cambios proGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 puestos “deberán tener su reflejo en la carrera profesional donde la evaluación de las competencias debe ser el eje de medición fundamental”. La gestión de las competencias profesionales es uno de los puntos fundamentales para que el sistema sanitario consiga lo que Porter define como “valor óptimo”3. Este valor lo define como los resultados de salud conseguidos por cada dólar invertido. Se debe centrar en el usuario, medir en función de los resultados (no del volumen de servicios prestados) y lleva implícito el concepto de eficiencia. Sin embargo, y tal como comenta Porter, los sistemas sanitarios actuales suelen medir lo que se hace, pero en pocas ocasiones los resultados. Una gestión de competencias que conduzca a que solo los profesionales que tienen mejores resultados realicen los procedimientos diagnósticos y terapéuticos permitiría no solo un sistema más eficiente, sino dar un mayor valor al acto sanitario. Pero un estudio de las competencias profesionales no debe centrarse en el enfoque economicista, a pesar de la importancia que este factor tiene en la actualidad en la gestión sanitaria. La calidad y la seguridad son temas directamente influidos por la Conceptos básicos Se han publicado múltiples definiciones del concepto de competencia. En 1993, Dubois definió las competencias como “aquellas características de la persona que determinan que su rendimiento en el trabajo sea efectivo y/o superior”10. La eficiencia es otra de las características que se destaca en otras definiciones. Así, Gilbert define al trabajador competente como “aquel que consigue resultados con valor añadido sin necesidad de un comportamiento que origine más gasto”11. El concepto de competencia es confuso en la literatura actual5. Sin embargo, de una forma más o menos intuitiva, se trata de una idea que todos tenemos y que el Diccionario de la Real Academia de la Lengua define como: “Pericia, aptitud, idoneidad para hacer algo o intervenir en un asunto determinado”6. Sin embargo, algo que parece tan claro no se aplicó al ámbito sanitario hasta bien avanzado el siglo XX. El concepto de competencia comenzó a emplearse en los años 70 a raíz de las investigaciones del profesor McCleland de la Universidad de Harvard, donde cuestionaba los clásicos exámenes académicos, como predictores del rendimiento tanto en el ámbito laboral como en el personal: “Los mejores no eran los que obtenían expedientes académicos brillantes”. McCleland define el concepto de competencias haciendo referencia a “la característica esencial de la persona que es la causa de su rendimiento eficiente en el trabajo”7. A raíz de estos hallazgos se han multiplicado las investigaciones buscando las características que marcaban la excelencia en diferentes sectores, y los sistemas de gestión por competencias han sido desarrollados tanto desde la perspectiva universitaria como empresarial, y con mayor o menor rigor científico o metodológico en su aplicación, no exento de críticas8. En el ámbito de la Medicina, la definición que se suele usar con más frecuencia es la publicada por Epstein y Hunter en el año 200212. Proponen que se defina competencia como “el habitual y juicioso uso de la comunicación, conocimiento, habilidades técnicas, razonamiento clínico, emociones, valores y reflexión en la práctica diaria en beneficio del individuo y la comunidad a la que se sirve”. Esta definición, si bien muy completa, no deja de ser muy teórica, conceptualmente adecuada pero difícil de llevar a la práctica. Por eso, otras definiciones pueden tener una mayor aplicabilidad. En 1997, Miller decía que la competencia clínica existía “cuando un médico tiene el conocimiento y habilidad suficientes como para realizar un procedimiento que consiga el resultado esperado sin causar daño al paciente”13. Esta definición incluye los elementos clave que pueden ser útiles para evaluar las competencias: conoci- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 Valdés Solís P, et al. Evaluando competencias Aunque no estemos familiarizados con el concepto, el término de competencias ya está incluido en la legislación. La Ley de Cohesión y Calidad del Sistema Sanitario Nacional define la competencia como “la aptitud del profesional sanitario para integrar y aplicar los conocimientos, habilidades y actitudes asociados a las buenas prácticas de su profesión para resolver las situaciones que se le plantean”9. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología competencia del profesional. La definición y evaluación de las competencias de los profesionales permiten asegurar que la formación se ha llevado de forma adecuada, que los resultados se acercan a los marcados previamente y que el profesional tiene la capacidad para realizar los procedimientos de forma segura y con eficiencia4. 149 Valdés Solís P, et al. Evaluando competencias Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 150 mientos, habilidades, procedimientos y resultados. Perspectivas conceptuales En el estudio de las competencias, los expertos en recursos humanos plantean las siguientes perspectivas conceptuales: Perspectiva de los atributos o rasgos de las personas Es la utilizada mayoritariamente por los departamentos de Recursos Humanos. Se centran en la concepción conceptual impulsada por McCleland14, orientada a la identificación de las competencias desde una perspectiva de excelencia, extrayendo las características de los profesionales destacados, y utilizándolas de modelos en las diferentes organizaciones y puestos. Estas competencias tienen diferentes acepciones: competencias estratégicas, competencias específicas comunes, genéricas, core competencias, competencias transversales u horizontales, competencias claves, nucleares, etc. Independientemente de su denominación, son competencias que están muy relacionadas con los valores de la organización y/o con las características intrínsecas de la unidad funcional o posición jerárquica. Suelen ser competencias diferenciales que marcan la excelencia. Perspectiva analizada desde las tareas o funciones realizadas Desde esta perspectiva, la información se extrae desde las tareas y funciones. La terminología utilizada varía de la anterior, y se basa en el análisis funcional, que considera la competencia como la capacidad para realizar actividades y lograr resultados en una función productiva, determinada según Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 criterios de desempeño. Se centra más “en lo que se deber hacer” frente a “lo que se debe ser”. Este planteamiento es el más utilizado para la definición de las competencias técnicas o laborales. Modelo constructivista, integrado u holístico Según este modelo, la competencia se construye no solo a partir de las aportaciones de las funciones del trabajo, sino que también tiene en cuenta las características de los excelentes, expresado en comportamientos 15. Desde este enfoque, las competencias emergen de la generación o rediseño de los procesos o flujos de mejora; surgen desde el análisis de los procedimientos, con un objetivo final de identificar las competencias que surgen de los procesos de mejora más que de las competencias existentes. El enfoque complejo Propuesto por Tobón en 200816, este modelo consiste en conceptualizar las competencias como procesos complejos de desempeño ante actividades y problemas con idoneidad y ética, buscando la realización personal, la calidad de vida y el desarrollo social y económico sostenible y en equilibrio con el ambiente. Modelo conceptual propuesto para las competencias técnicas en Medicina El análisis funcional es una forma de aproximación al contenido de los puestos, una manera de identificar las competencias técnicas o laborales. Se define como un “método mediante el cual se identifica el propósito clave de un área objeto de análisis, como punto – Está orientado a los resultados. No se enfoca a cómo se hacen las cosas, no describe tareas ni procesos. Lo fundamental es el resultado final. – Se basa en criterios de desempeño, que determinan si ese logro es adecuado o en qué grado se adecua a una norma de referencia. Para poder aplicar este modelo, se requiere el establecimiento de unos requisitos mínimos. Estos requisitos se denominan estándares. En Radiología, los estándares se definen como la forma en que se debe hacer un procedimiento radiológico para que se asegure un producto de calidad y reproducible18. El American College of Radiology (ACR) introdujo los estándares en el año 1990, como una guía para que los radiólogos realizaran los procedimientos (diagnósticos y terapéuticos) de la mejor forma posible. Cada estándar incluye una introducción, una sección de cualificaciones y responsabilidades del personal (tanto los facultativos como los técnicos), descripción de las especificaciones del equipamiento y la prueba, anotaciones sobre la documentación y mejoras de calidad y referencias correspondientes. Se revisan cada cuatro años (con mayor fre- Valdés Solís P, et al. Evaluando competencias Esta forma de entender las competencias tiene unas implicaciones: cuencia si es necesario), de forma que representen la práctica radiológica más idónea18. El Royal College of Radiologists también ha publicado una serie de estándares19, con una filosofía y metodología similar a la ACR. La European Society of Radiology (ESR) tiene un subcomité de auditorías y estándares20 y ha publicado diferentes documentos. Sin embargo, no disponemos en España de un conjunto completo de estándares, lo que dificulta la elaboración de un sistema de evaluación de competencias completo. Cómo se definen las competencias A partir de este modelo funcional, el enfoque de elaboración de las competencias es deductivo: se parte de lo general a lo específico; se define el propósito principal o misión de lo que se quiere analizar y se va desglosando en funciones hasta llegar al nivel del elemento de competencia. No se tiene en cuenta la especificidad de una persona en un puesto de trabajo, ni de un puesto en una organización, ni se trabaja con tareas, sino que se hace en base a funciones, funciones que sean transferibles o utilizables en diferentes organizaciones para dar respuesta a su cartera de servicio, o al propósito principal de la sociedad científica, el sector, etc. Las funciones se van desagregando hasta que puedan ser evaluadas por una persona, es decir, puedan ser realizadas por un profesional. En este momento habremos llegado al elemento de competencia, que es la función básica, el último componente del mapa funcional. Estructura propuesta para las competencias técnicas en Radiología A partir del modelo definido más arriba, se irían elaborando una serie de Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología de partida para enunciar y correlacionar sus funciones hasta llegar a especificar las contribuciones individuales. Este método facilita la definición de unidades de competencia laboral y el establecimiento de normas de competencia laboral”17. Este procedimiento no es exacto y se construye con las aportaciones de los participantes. Por ello, se debe desarrollar con expertos en la actividad que se está trabajando y con un facilitador que conozca la metodología. 151 Valdés Solís P, et al. Evaluando competencias Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 152 fichas para cada elemento de competencia. Estas fichas incluirían: – Título de la Unidad de Competencia: es una función productiva, justo el nivel de desagregación previo a los elementos de competencia y, de esta forma, estará compuesta por los elementos de competencia que se correlacionan entre sí. En radiología vascular e intervencionista, la Unidad de Competencia “Arteriografía diagnóstica” incluiría dos elementos de competencia: “Arteriografía diagnóstica no selectiva” y “Arteriografía diagnóstica selectiva”. – Elemento de Competencia: tal como se comentó anteriormente, se trata del último nivel del mapa funcional. Describe el resultado que se espera lograr. Se debe poder realizar por un trabajador en su puesto. A la hora de definirlo, su formulación debe ser comprensible, útil y aplicable en las diferentes organizaciones/puestos que lo vayan a utilizar. Un elemento de competencia es más que un procedimiento o una técnica. En Radiología, un elemento de competencia englobaría uno o varios procedimientos (como los incluidos en el catálogo de prestaciones de la SERAM) que tengan ciertos elementos comunes. La filosofía de esta agrupación es considerar que, si un profesional realiza (bien) una de las prestaciones incluidas en el elemento de competencia, podría realizar las otras sin problema. Parece razonable considerar que quien puede hacer una arteriografía diagnóstica de miembros inferiores podrá hacer con la misma calidad y seguridad una aortografía. – Descripción: la ficha del elemento de competencia tendrá una des- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 cripción de los procedimientos o técnicas que se incluyen, que estarán relacionados funcionalmente entre sí y con una complejidad técnica similar. – Nivel del elemento de competencia: se establecen tres niveles en función de variables como el nivel de complejidad, su novedad, las complicaciones, las tecnologías utilizadas, etc., del elemento de competencia. • Nivel I: por lo general, son los elementos más sencillos. Muchos de ellos se adquieren durante la formación vía MIR y se obtendrían prácticamente de forma inmediata con el título de la especialidad. • Nivel II: son elementos de competencias que conllevan una mayor complejidad técnica, o requieren práctica en las últimas novedades tecnológicas, o áreas de conocimientos o habilidades muy especializadas, o procedimientos que tienen mayores índices de complicaciones. No se adquieren con la formación estándar. • Nivel III: los más complejos dentro de la especialidad. Estos no deben ser muchos, por regla general se realizarán en pocos centros. – Criterios de desempeño: son los criterios de calidad que definen si un estudio se realiza de forma adecuada o no, basándonos en los estándares publicados. El elemento de desempeño se redacta haciendo referencia a un resultado, de forma que permita una evaluación objetiva, aunque también se pueden incluir aspectos procedimentales o de actuación claves. – Criterios de mantenimiento: en las diferentes áreas médicas, las bases – Grados del elemento de competencia: independientemente del nivel que tenga cada elemento de competencia, una vez que se adquiere, no todos los radiólogos lo hacen igual, ni aportan lo mismo al desarrollo de la disciplina, o a otros profesionales. Se han considerado tres grados para cada elemento de competencia. Las consideraciones que se incluyan en cada grado para cada elemento de competencia pueden variar. Por ejemplo, “generar producción científica” puede ser distintivo de nivel experto en un elemento de competencia y en otro se puede utilizar para indicar grado de excelente. Los grados son: • Grado avanzado: lo da el haber adquirido el elemento de competencia. Coincidirá con lo indicado en los criterios de adquisición y/o mantenimiento. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 Valdés Solís P, et al. Evaluando competencias – Criterios de adquisición: es lo que hay que hacer para obtener por primera vez un elemento de competencia. Puede ser un número de procedimientos, todos ellos realizados cumpliendo los estándares de calidad, pero en ocasiones se pueden utilizar otros criterios, como formación, estancias en otros centros, procedimientos supervisados, etc. El número de prestaciones realizadas es un criterio muy importante en casi todos los elementos de competencia. Sin embargo, no siempre existe evidencia de que realizar un mayor número de procedimientos vaya a mejorar el rendimiento21, y se deberían valorar otros factores, no del todo claros. La información sobre el resultado de la prueba parece tener gran importancia. Por otra parte, en técnicas como la ecografía se ha visto que para un mismo procedimiento, las recomendaciones en cuanto el número de pruebas que hay que realizar para conseguir la competencia pueden variar según la sociedad científica que se consulte. Por estos motivos, las fichas de los elementos de competencia y la evaluación de las evidencias que envíen los profesionales deberían incluir no solo el número absoluto de pruebas, sino también los resultados (en relación con los estándares aceptados). de conocimiento de los médicos se desvanecen de forma progresiva con el tiempo. Se ha comprobado que profesionales bien considerados no pasarían los exámenes nacionales en EE. UU., situación que se podría extrapolar a los radiólogos21. La formación continua se considera una necesidad para que los médicos no pierdan sus habilidades e incluso puedan llegar a ser peligrosos para los pacientes. Por este motivo, adquirir una competencia no debe considerarse como algo permanente, y se deberán definir los criterios que permitan mantener esta competencia. Cualitativamente, estos criterios suelen ser similares a los criterios de adquisición (número de procedimientos realizados según estándares de calidad, estancias en otros centros, procedimientos supervisados, etc.), pero habitualmente en un número menor. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología – Evidencias de desempeño: es el instrumento utilizado para ofrecer información sobre el logro del resultado. Es la demostración de que se han realizado las cosas, siguiendo (o no) los criterios de desempeño. Serán pruebas documentales que habrá que enviar para optar a una certificación. 153 Valdés Solís P, et al. Evaluando competencias Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 154 • Experto: se pueden utilizar diferentes criterios: hacer un mayor número de procedimientos anuales que los considerados para su mantenimiento o hacerlos con mayores niveles de calidad previamente establecidos, o participar en comités de expertos nacionales, generar producción científica, etc. • Referente: se pueden utilizar aquí criterios como docencia, publicaciones, participación en comités de expertos internacionales, desarrollo de patentes relacionadas, determinados niveles de resultados u otros criterios que sean capaces de diferenciar y ubicar en este grado a un grupo reducido de profesionales “referentes”, para ese elemento de competencia. – Bibliografía: se incluirán una serie de referencias fundamentales para cada elemento de competencia. Evaluación de competencias Una vez definido el mapa de competencias, habría que pasar a evaluar el rendimiento de cada profesional, es decir, para ser juzgado como competente, “el individuo deberá demostrar su habilidad para desempeñar roles laborales globales de acuerdo con normas esperadas para el empleo en ambientes reales de trabajo”22. En Medicina es frecuente usar la llamada “pirámide de Miller”23, que mide componentes de conocimiento (“sabe” y “sabe cómo”) y de comportamiento (“muestra cómo” y “hace”). Es decir, evalúa desde la base de conocimientos de la actuación médica hasta la “punta de la pirámide”, lo que verdaderamente hace el profesional. Cada uno de estos niveles de la pirámide se puede medir de diferentes formas: Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 exámenes teóricos para evaluar los conocimientos, simuladores para evaluar el nivel “muestra cómo”, o diferentes procedimientos para evaluar el nivel “hacer”. Este nivel es probablemente el más complejo de evaluar. En el modelo propuesto, este nivel es el más interesante y el que consideramos más útil para evaluar la competencia real de los profesionales. Al mismo tiempo, es el más complejo de evaluar, y se pueden usar diferentes opciones: observación por expertos, autoevaluación a partir de los resultados incluidos en las historias clínicas, certificaciones emitidas por organizaciones o sociedades científicas, evaluación por profesionales expertos, etc. Los sistemas de evaluación de competencias están bien implantados en los programas formativos de las diferentes especialidades médicas24. Sin embargo, aparecen muchos retos a la hora de evaluar la competencia en la realización de procedimientos25: hay poca evidencia en los parámetros establecidos, hay problemas para definir cuál es el límite para que una prestación sea adecuada, tamaños de muestra y estudios estadísticos, problemas para que los datos sean representativos, dificultades para correlacionar la evaluación con los datos clínicos y el resultado y el coste de obtener la información necesaria para que la evaluación sea adecuada26. A la hora de poner en marcha un sistema de evaluación de competencias en nuestro país se añaden otras dificultades: existen tantos sistemas sanitarios como autonomías, y los modelos de evaluación de competencias varían mucho entre las diferentes regiones. El papel aglutinador que puede tener una sociedad científica (en este caso, la Sociedad Española de Radiología Médica [SERAM]) se enfrenta con la dificultad de poder evaluar la información que le envíen los aspirantes a una teórica certificación (dado que la SE- – Permite definir puestos de trabajo con perfiles específicos. Con ello se podría usar esta herramienta en los procesos de selección y en los programas de formación de los profesionales del puesto. – Permite diseñar un programa formativo del servicio adaptado a las necesidades de los profesionales. – Asegura que los profesionales que realizan los procedimientos están capacitados y presentan unos niveles de seguridad y de rendimiento diagnóstico y terapéutico acordes con los estándares publicados. Esto mejora la seguridad y la calidad asistencial. – Permite adecuar los puestos de trabajo, de forma que sean ocupados por los profesionales más eficientes. A la larga, esto repercute de forma positiva no solo en el gasto del servicio, sino en el valor añadido del acto médico. – Podría servir para evaluar el rendimiento de los profesionales de una forma objetiva y permitiría adecuar la retribución económica de una forma individualizada. Bibliografía 1. Abujudeh HH, Bruno MA. Quality and Safety in Radiology. Oxford UniversityPress; 2012. 2. Diez temas candentes de la Sanidad española para 2012. Dos agendas simultáneas: recortes y reformas. Madrid: PwC; 2012 [en línea]. Disponible en: http://kc3.pwc.es/ local/es/kc3/publicaciones.nsf/V1/ A408DA7FDD4D09A3C12579E500 32CD56/$FILE/temas-candentessanidad-2012-pwc.pdf 3. Porter ME. What is value in healthcare? New Engl J Med. 2010;363(26): 2477-81. 4. Mendiratta-Lala M, Eisenberg RL, Steele JR, Boiselle PM, Kruskal JB. Quality initiatives: measuring and managing the procedural competency of radiologists. Radiographics. 2011;31:1477-88. 5. Robotham D, Richard J. Competences: measuring the unmeasurable. Manag Dev Rev. 1996;9(5):25-9. 6. RAE, Real Academia Española. Diccionario de la lengua española. Vigésima Segunda Edición [en línea] [consultado el 15/04/2013]. Disponible en http://lema.rae.es/drae/? val=competencia Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 Valdés Solís P, et al. Evaluando competencias – Se puede adaptar de forma sencilla al programa de objetivos anuales del área o del trabajador, siempre que el servicio tenga dicho programa. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología RAM no es una entidad acreditadora y no puede acceder a datos clínicos de las historias que evalúen los radiólogos). De esta forma, el modelo de certificación que está elaborando la SERAM se basa en la documentación enviada por los aspirantes a la certificación, y según este modelo, una comisión científica evaluaría el número de procedimientos realizados por el profesional, siempre y cuando cumplan los criterios de desempeño de cada uno de los elementos de competencia. Haber realizado un número importante de procedimientos no aseguraría la competencia para dicho elemento. En cualquier caso, un sistema de evaluación de competencias con un enfoque funcional presenta múltiples ventajas por su utilidad en diferentes situaciones: 155 Valdés Solís P, et al. Evaluando competencias Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 156 7. McClelland DC. Testing for competence rather than for intelligence. Am Psychol. 1973;28:1-14. 8. Soto Berenguel A. La gestión por competencias: Una revisión crítica. Capital Humano. 2002;15:30-42. 9. Gobierno de España. Ley 16/2003, de 28 de mayo, de cohesión y calidad del Sistema Nacional de Salud. Madrid, 2003. 10. Dubois DD. Competency-Based Performance Improvement: A Strategy for Organizational Change. Amherst: HRD Press; 1993. 11.Teodorescu TM, Binder C. Getting to the bottom line competence is what matters. Performance Improvement. 2004;43:8-12. 12.Epstein RM, Hundert EM. Defining and assessing professional competence. JAMA. 2001;287:226-35. 13.Miller MD. Office procedures. Education, training, and proficiency of procedural skills. Prim Care. 1997; 24:231-40. 14.McClelland DC. Testing for competence rather than for intelligence. American Psychologist. 1973;28:1-14. 15.Schwartz Y. De la qualification a la compétence. Education Permanente. 1995;123:125-7. 16.Tobón S. La evaluación por competencias. Congreso internacional por competencias. Julio 10, 11 y 12 de 2008. 17.Guía para la identificación de Unidades de Competencia y Titulaciones con base en el Análisis Funcional, Servicio Nacional de Aprendizaje SENA, División de Estudios Ocupacionales, Bogotá, 1998. 18.Amis ES Jr. American College of Radiology standards, accreditation programs, and appropriateness cri- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):147-56 teria. AJR Am J Roentgenol. 2000; 174:307-10. 19.The Royal College of Radiologists. Standards [en línea] [consultado el 25/04/2013]. Disponible en http:// www.rcr.ac.uk/content.aspx?PageI D=444 20.Subcomité de auditorías y estándares [en línea] [consultado el 30/04/2013]. Disponible en http:// w w w. m y e s r. o rg / c m s / w e b s i t e . php?id=/en/membership/statutory_committees_working_groups/ professional_organisation_committee_poc/subcommittee_on_audit_and_standards.htm 21.Weinreb JC, Wilcox PA. How do training, education, and experience affect quality in radiology? J Am Coll Radiol 2004;1:510-5. 22.Whitear G. Para entender la evaluación. Competencia laboral. Normalización, certificación, educación y capacitación. Antología de lecturas, tomo 1. México: Conocer y Alambra Mexicana; 1997. 23.Miller GE. The assessment of clinical skills/competence/performance. Acad Med. 1990;65(9 Suppl): S63-S67. 24.Relyea-Chew A, Talner LB. A dedicated general competencies curriculum for radiology residents development and implementation. Acad Radiol. 2011;18:650-4. 25.Mendiratta-Lala M, Eisenberg RL, Steele JR, Boiselle PM, Kruskal JB. Quality initiatives: measuring and managing the procedural competency of radiologists. Radiographics. 2011;31:1477-88. 26. Landon BE, Normand S-LT, Blumenthal D, Daley J. Physician Clinical Performance Assessment. JAMA. 2003;290:1183-9. Evaluación de la planta física 1 García Ruiz JA, 2García Medina B Socio de Alrad Consulting. Ingeniero Superior Industrial. 2 Arquitecto. Dirección para correspondencia: [email protected] 1 Resumen La planta física, como espacio arquitectónico que soporta la actividad clínica, ha experimentado en las últimas décadas un significativo crecimiento, consecuencia del desarrollo de las técnicas de diagnóstico por imagen, donde al clásico diagnóstico radiológico se han añadido técnicas como la resonancia magnética, la ecografía, la densitometría ósea, y otras nuevas que se van incorporando paulatinamente como consecuencia del desarrollo tecnológico. Esta evolución no solo es en su magnitud sino también en su organización, su reparto zonal y los equipamientos técnicos que permiten el funcionamiento del Servicio, sin olvidar las necesidades financieras crecientes que permiten su construcción. Tradicionalmente, el diseño ha estado realizado por los profesionales médicos implicados en el funcionamiento, pero en la actualidad la complejidad adquirida precisa la colaboración de un equipo de trabajo compuesto por los propios profesionales médicos y expertos en arquitectura e ingeniería clínica para conseguir Servicios cuya planta física siga el proceso clínico y no lo dificulte. Este es un proceso complicado, aún, en nuestro país, donde situaciones de individualismo, proyectos con falta de liderazgo, falta de conocimientos, insuficiencia de dotaciones presupuestarias, incapacidades de las Administraciones para dirigir o controlar proyectos sanitarios, y muchas otras razones, conducen en la mayoría de los casos a ejecuciones de plantas físicas que, o bien no se adaptan al proceso, o bien presentan defectos de infra- o sobredimensionamiento, que no analizamos en este trabajo pero remitimos al interesado a análisis realizados sobre casos recientes donde los costes inducidos, que generalmente paga el ciudadano, en el funcionamiento a medio y largo plazo, desbordan las expectativas iniciales. Se analizan los pasos a realizar en el proceso de planificación y diseño para la definición de la demanda, el cálculo de la superficie bruta, la distribución zonal, los procesos que el Servicio pretende realizar, el cálculo del personal, el diseño de los flujos de trabajo y el diseño de las salas individuales y las dependencias necesarias. Remitimos al lector interesado a los siguientes trabajos que puede encontrar en el Bazar de la Fundación Signo: Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología José Ángel García Ruiz. 157 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 158 – Influencia del diseño arquitectónico en los costes de diagnóstico por imagen. – Sobre- e infradimensionamiento en departamentos de diagnóstico por imagen. Motivos y consecuencias. – Centro de diagnóstico por imagen. Arquitectura. – Diagnóstico por imagen. Comparativo de modelos de gestión (Word y Power Point). Palabras clave: Demanda; Factor de utilización de sala; Modalidades; Procesos Clínicos; Planificación y diseño. Evaluation of the physical plant Abstract The physical plant, the architectonic space that supports the clinical activity, has experimented in the last decades a great evolution, consequence of the development of the diagnostic imaging techniques, where to the classic radiological diagnosis have added new techniques like the magnetic resonance, the ecography, the bone densitometry, and other new ones which they are gotten up gradually as a result of the technological development. This evolution not only is in its magnitude but also in its organization, her zonal distribution, the technical equipment that allow the operation of the Service and without forgetting the increasing necessities financial that they allow his construction. Traditionally the design been has simplified by the knowledge of the implied medical professionals in the operation, but at the present time the acquired complexity needs the collaboration a work party made up of the own medical and expert professionals in architecture and clinical engineering for the attainment of Services whose physical plant follows the clinical process and that does not make difficult it. This it is a complicated process, still, in our country, where individualism situations, projects with lack of leadership, lack of knowledge, insufficiency of budgetary dowries, incapacities of the administrations to manage or to control sanitary projects and many other reasons lead in most of cases to executions of plants physical that or does not adapt to the process, either display defects of infra or sobresizing, that we did not analyze in this work but we sent to the interested one to analyses made on recent cases where the costs induced, that pays the taxes generally, in the operation to means and length term overflow the initial expectations. The steps are analyzed to make in the process of Planning and Design for the definition of the demand, the gross surface, the zonal distribution, the processes that Service tries to make, the personnel, the design of the work flow and the individual rooms and the necessary dependencies. Key words: Demand; Room Utilization Factor; Modalities; Clinical Processes; Planning and Design. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 Cada estructura física precisa un diseño diferente y este diseño no es único, pueden existir diversas soluciones que faciliten el desarrollo del proceso clínico, y un análisis riguroso debería permitir calcular los costes de funcionamiento de las diversas soluciones, de forma que se pueda escoger la más adecuada a medio-largo plazo, que no siempre es la más económica, bajo un punto de vista constructivo. Dependerá siempre de las previsiones del cen- La evaluación de la planta física comprende: – Análisis de la demanda. – Cálculo de la superficie bruta. – Cálculo del personal. – Definición de las zonas. – Diseño de la planta. – Diseño de las salas individuales. – Proyecto de ejecución. Materiales y métodos Para los cálculos que aquí se exponen se han utilizado los programas del Sistema de Panificación PLANDIS. Este permite calcular desde las salas y la superficie de un departamento hasta el personal, los costes por examen y los resultados, basándose siempre en la demanda asistencial. El proceso de cálculo se sistematiza para cada año, de los diez que comprende el análisis, de forma que se disponen de resultados anuales tanto de costes en general, como de costes por examen, así como de facturación y resultados por modalidad. Figura 1. Planta física Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física La evaluación de la planta física es una tarea de planificación que ha realizarse en las nuevas instalaciones, en el momento del diseño del hospital o centro diagnóstico, o también en Servicios en funcionamiento donde se precisa una renovación o restauración. En los primeros casos, el equipo que redacta el plan funcional debe tener suficiente información sobre demanda y procesos a realizar que debería permitir el cálculo y el comienzo del proceso de planificación de forma segura. En los casos de renovación, los datos de demanda están, en general, disponibles con claridad, actualizados, pero la planta física no se adapta a los procesos clínicos y un cálculo razonable de costes de funcionamiento debería proporcionar datos suficientes para comenzar la acción del equipo planificador (Figura 1). tro, de su análisis de negocio y de su desarrollo. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Introducción 159 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 160 Los programas del Sistema PLANDIS están escritos en Excel y en Visual Basic y convertidos en ejecutables con el compilador DONE EXE, de forma que las fórmulas están bien protegidas y el operador puede trabajar sin miedo a su destrucción por acciones indebidas. Un dato sin el que no se puede trabajar es la demanda. Su análisis es la clave de los resultados posteriores y aquí nuevamente hay que hacer un ejercicio de llamada a la responsabilidad de los directores de proyecto. Análisis de la demanda (Figura 2) En las instalaciones de titularidad pública, las frecuentaciones locales de exámenes de diagnóstico por imagen son los primeros datos de análisis utilizados, así como los crecimientos de estas frecuentaciones en la zona de influencia. Las instalaciones privadas tienen otra forma muy diferente de calcular la demanda. Son aquí los contratos que se esperan realizar o que ya están realizados los que aportan los datos de demanda, jugando la frecuentación un papel secundario y siendo los crecimientos anuales experimentados en el área de implantación datos fundamentales para determinar a medio y largo plazo la demanda esperada, y por tanto el dimensionamiento del centro o departamento. POBLACIÓN • Datos previos • Crecimiento FRECUENTACIÓN • Regional • Local INSTALACIONES DE IMAGEN • Internacionales, nacionales, regionales • Locales INSTITUCIONES PÚBLICAS Y PRIVADAS EN EL ENTORNO REGIONAL Y LOCAL ENTORNO SOCIOECONÓMICO. PREVISIONES A MEDIO-LARGO PLAZO PERSONAL NECESARIO. HÁBITOS. REGULACIONES LABORALES REGULACIONES NACIONALES Y LOCALES SOBRE SISTEMAS DE DIAGNÓSTICO POR IMAGEN COMPROMISOS DE ENVÍO DE PACIENTES DE INSTITUCIONES PÚBLICAS Y PRIVADAS Figura 2. Análisis de la demanda Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 Percentage PRIV priv 6 2 2 2 4 6 7 3 0 32 27 WINS1 mutuas 4 1 2 2 0 2 2 3 0 16 14 PUBL sms 1 1 1 1 1 1 1 0 0 2 6 INS2 seguros 5 1 3 5 0 3 5 5 0 27 23 TOTAL day 26 7 13 14 7 17 18 15 0 117 100 Figura 3. Previsión de demanda de exámenes El análisis de la demanda lleva a una tabla del tipo mostrado en la Figura 3, que es la base para comenzar el plan de negocio del centro. El estudio arquitectónico es el primer eslabón del plan. Con el proyecto arquitectónico se disponen los elementos básicos para determinar los costes, y con estos los precios y facturación, que determinen la viabilidad del proyecto. Cálculo de la superficie El arquitecto precisa, en primer lugar, saber la magnitud de la superficie bruta aproximada en la que debe hacer su trabajo. Sobre esa desarrollará su acción de forma que quede definido un anteproyecto que siga, con la mayor fidelidad posible, los procesos que se van a efectuar en el centro. Desde el equipo de diseño, el arquitecto recibe los apoyos necesarios para orientar el anteproyecto, definir accesos, circulaciones, ubicaciones, etc. En principio, el cálculo de la superficie bruta es muy simple; definida la demanda para cada modalidad, la relacionamos con la producción estimada para cada sala. Esta se determina con el tiempo medio por examen, las horas y días anules de actividad y el factor de ocupación de sala. Este dato en una renovación es conocido. En una instalación nueva hay que estimarlo. La media del sector puede ser adecuada. La superficie bruta se calcula mediante un factor de la superficie neta de examen total del Servicio (Figura 4). También puede calcularse sumando las superficies netas totales del Servicio, pero aún no hemos calculado el personal y sus necesidades. En este segundo caso hay también una estimación, que es la relación entre superficie neta y bruta. Esta varía entre el 20 y el 45%, por lo que este método no conduce, en principio, a resultados más exactos que el utilizado por el método PlanDis. El objetivo debe ser no solo determinar la superficie al comienzo de la operación del centro, sino a medio y largo plazo. Nuestro modelo de cálculo nos permite determinar la demanda a largo plazo de forma lineal, también nos permite hacer cambios de demanda, según previsiones de crecimiento, interanuales. El periodo de cálculo se extiende a diez años, limite tecnológico, y físico, de los equipos necesarios para el diagnóstico por imagen, propósito del centro. De la misma forma, el cálculo lineal del número de exámenes indica cada año Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física HC7 empresas 4 1 3 3 1 3 2 2 0 19 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Exams (per day) Modality HC3 Referal asegurad 6 RD 1 FL 2 ORT 1 DEN 1 MAM 2 CT 1 MR 2 ECO 0 VAS 16 N.º examin. 161 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 162 Modalidad RD RX FLUORO OROPANTO DENSITOM. MAMOGRAF. TAC MULT. RES. MAGN ECOGRAFÍA % Exámenes T. exa Producc. media mín. Exámenes. Sala 55 5 5 0 8 6.500 1.750 3.250 3.500 1.750 5 15 6 15 10 44.625 11.900 29.750 11.900 17.850 0,1 0,1 0,1 0,1 0,1 12 10 6 4.150 4.500 15 25 15 11.900 7.140 0,3 0,6 0,3 100 29.150 3.750 11.900 Sala RD 1 1 1 Sup. media Sup. total m2 m2 20 25 8 15 12 20 25 8 15 12 30 35 15 30 35 8 15 160 SUPERFICIE NETA DE EXAMEN 160 SUPERFICIE TOTAL BRUTA DEL DEPARTAMENTO 1.120 Figura 4. Cálculo de la superficie bruta el número de exámenes anuales esperados y del número de salas necesarias, en función de los rendimientos esperados (factor de utilización de sala) (Figura 5). Así, el cálculo nos indica que en diez años, con los crecimientos anuales determinados, la superficie necesaria para el desarrollo de las actividades del Servicio seria de 1610 m2. Esta distribución es muy importante, tanto para el arquitecto como para los radiólogos. El primero tiene con esto información previa de cómo distribuir su espacio en la superficie bruta calculada. Los segundos pueden evaluar, a priori, la forma de conducir en el espacio físico sus procesos clínicos. Todo ello en la fase de anteproyecto. El modelo rectangular se adapta, según el cálculo, a una superficie de 1120 m2 (44,8 x 25 m): Personal necesario – Superficie departamento: 1120 – D1 - I 44,8: 25 La distribución de espacios, de acuerdo con el método de Holms, quedaría como se muestra en la Figura 6. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 Su conocimiento es necesario para definir las dependencias propias del personal al comienzo de la actividad y poder comenzar el diseño del centro: primero en diagrama de bloques, después el anteproyecto y finalmente el proyecto completo. La evolución del personal a largo plazo es necesaria para dejar las reservas correspondientes en el área de personal (Figura 7). 70.000 60.000 50.000 40.000 30.000 20.000 10.000 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 S9 S10 Evolución del número de salas 12 10 8 6 4 2 0 S1 S2 S3 S4 S5 S6 S7 S8 Figura 5. Número de exámenes y de salas en diez años Puesto que proyectamos el centro con una visión de diez años, necesitamos los cálculos del personal en ese periodo (Figura 8). Determinar el personal necesario a medio-largo plazo es imprescindible para el diseño del centro. Los crecimientos vienen determinados por dos factores: crecimiento (positivo o negativo) de la población en el área de influencia y crecimiento medio estimado de las modalidades diagnósticas que configuran el centro. Las salas de diagnóstico, vestuarios, office, etc., deberán estar dimensionadas para este personal. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física 80.000 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Desarrollo de la demanda 163 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física R E C E P C I Ó N E S P E R A E X A M E N 39% 28% Externos ZONA DE PACIENTES ZONA DE EXAMEN D I A G N Ó S T I C O T E C N O L O G Í A 7% 6% P E R S O N A L 20% Internos Z. TEC. Z. DIAGN. ZONA DE PERSONAL Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Figura 6. Espacios funcionales según Holms (actualizado) 164 Procesos Diseño Los consultores médicos deben proporcionar al arquitecto los datos referentes a los procesos que se esperan realizar en el Centro. Recordamos que la arquitectura debe seguir el proceso clínico. Este necesita espacios para su desarrollo. Siguiendo el ejemplo de la Figura 9, hay que definir si la resonancia magnética tendrá o no sala de preparación, si el consentimiento informado se firma en algún despacho antes de entrar a la sala o si se firma al entrar al propio técnico, etc. Haremos algunos tanteos en programas de CAD construyendo un diagrama de bloques que nos permita una primera distribución de las circulaciones, los equipos y la zona de personal, adaptando asimismo el diseño a posibles preferencias del usuario y las limitaciones que una ubicación concreta pueda marcar (Figura 10). MODALIDAD EXÁMENES TOTAL % El concepto modular empleado en PlanDis se traslada a la planta de manera directa, yuxtaponiendo las distintas salas de imagen y otorgándoles las T. EX min Nº SAL Nº Radiólogos Técnicos Enfermeros Auxiliares RX DIGITAL RX FLUORO ORTOPANTO DENSITOM. MAMOGRAF 6.500 1.750 3.250 3.500 1.750 22 6 11 12 6 4 15 6 15 10 1 1 1 1 1 1,8 0,3 0,2 0,2 0,3 2,4 0,3 0,5 0,5 0,3 TAC MULT. RES. MAGN. ECOGRAFÍA VASCULAR 4.250 4.500 3.750 0 15 15 13 0 15 25 15 60 1 1 1 0 0,8 0,9 0,7 0,0 1,1 1,2 1,1 0,3 0,0 0,0 1,2 0,7 0,0 8 5,4 6,3 1,5 1,9 29.250 100 Administrat. Informática 0,8 2,4 0,3 0,8 2,4 0,3 0,1 Figura 7. Personal en el año uno Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 Celadores Total Radiol. Técnicos Enferm. Auxiliares Celadores Administr. Informática 1 19 5,4 6,3 1,5 1,9 0,8 2,4 0,3 2 31 9,2 10,3 2,6 3,7 0,8 3,5 0,6 3 32 9,5 10,7 2,7 4,0 0,8 3,6 0,6 4 33 9,9 11,1 2,9 4,3 0,8 3,8 0,6 5 35 10,3 11,6 3,0 4,7 0,8 3,9 0,6 6 39 10,8 12,0 3,2 5,1 2,9 4,1 0,7 7 38 11,3 12,5 3,4 5,5 0,8 4,3 0,7 8 40 11,8 13,1 3,6 5,9 0,8 4,4 0,7 9 42 12,3 13,7 3,8 6,4 0,8 4,6 0,7 10 45 12,9 14,3 4,0 6,9 0,8 4,9 0,8 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física AÑO dimensiones requeridas a cada módulo en el estudio previo. Las circulaciones son un punto clave para el óptimo funcionamiento del centro, diferenciando y separando claramente las de personal interno y las de pacientes o externos, cuya relación se produce principalmente en las salas de examen. Tiempo (min) 1 2 2 1 Cada sala tiene su propio proyecto, este es función del equipamiento se- Departamento Administración Gestión de citas HIS-RIS Identificación asignación sala Recepcionista Recepción del paciente Auxiliar Consentimiento Técnico/DUE Preparación del examen/tratamiento Técnico/especialista Realización Técnico/especialista Control de calidad Médico Informe Médico/ informática Distribución y archivo Entrada en sala Preparación Realización Cuidados 25 Diseño de las salas individuales Registro datos confirmación Información Consent. inform. Cuidados 3 a 15 El sistema de módulos permite el crecimiento en sus extremos de manera que el diseño pueda atender a futuras necesidades de ampliación de servicios radiológicos (Figura 11). m2 = 4-8 ¿Dónde? Sala de información/ consent. Sala de examen/ tratamiento ¿Dónde? Sala de preparación m2 = 12 15 Tiempo TOTAL = 49 – 71 min. Figura 9. Ejemplo de proceso clínico para exámenes de resonancia magnética Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Figura 8. Personal en diez años 165 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 166 Figura 10. Diagrama de bloques leccionado, y de la creatividad del arquitecto y del equipo de diseño. Presentamos una alternativa en 3D, sin considerar el proyecto de implantación que para cada sala debe realizar la compañía suministradora de cada equipo. Se exponen dos ejemplos, de resonancia magnética y de radiografía digital (Figuras 12 y 13). En función de la tecnología de equipo de resonancia elegida, puede haber ligeras diferencias en la arquitectura, no en las superficies, que son muy similares, pero sí en las dimensiones longitudinales de la sala y los posibles apantallamientos posteriores a considerar en el cálculo de costes. Figura 11. Planta de equipos. Espacio libre para una segunda resonancia magnética Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Figura 12. Resonancia magnética cilíndrica Figura 13. Radiografía digital Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 167 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 168 Figura 14. Sala de espera y salas de diagnóstico Las salas de radiografía digital de las diferentes compañías suministradoras son muy similares en cuando a la superficie que precisa y las necesidades energéticas, si bien cada equipo requiere su propio diseño. Planos a escala 1:50 se requieren para el cálculo de las barreras de protección radiológicas. Dependencias La zona de pacientes ocupa, según los cálculos mostrados anteriormente, un 39% de la superficie total del centro. El arquitecto tiene un especial reto en el diseño de esta área, previendo las circulaciones, de forma que no interfieran los pacientes en la organización del personal y permitiendo con su diseño un entorno agradable para el paciente, a ser posible que le haga olvidar los aspectos clínicos a los que va a Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 someterse. Espacios, luz y superficies juegan un papel clave en este conjunto armonioso que se espera conseguir (Figura 14). Las salas de diagnóstico son unas de las claves del diseño actual. El radiólogo permanece muchas horas en estas y las condiciones de habitabilidad, iluminación, ergonómicas, etc., con básicas para alcanzar la optima productividad y resultados clínicos (Figura 15). Las instalaciones de aire acondicionado son muy importantes, no solo para el confort de los pacientes y personal, sino también para el optimo funcionamiento de la maquinaria instalada en el centro, tanto informática, como de adquisición de imágenes. Las mayores necesidades de suministros de los centros diagnósticos mo- García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física dernos radican en la energía eléctrica. Un centro como el del ejemplo puede demandar hasta 450-500 kVA, dependiendo del equipamiento seleccionado, y para estos consumos se requieren centros de trasformación dedicados. El suministro de energía desde la compañía suministradora se efectúa en media tensión, y el consumo del equipamiento requiere entre 220 y 380 Vac. Las comunicaciones internas en el centro y de este con el exterior forman otro capítulo importante en el diseño. Se adjuntan fotos de los armarios que alojan los servidores, de comunicación y de archivo (Figura 16). La sala de emergencia es necesaria para prever efectos adversos de contrastes o para indisposiciones eventuales de pacientes. Conclusiones Los centros de diagnóstico por imagen modernos son instalaciones que albergan gran cantidad de tecnología, y precisamente por esta complejidad requieren para su diseño el concurso de equipos multidisciplinares donde se precisa que el arquitecto tenga una especial formación en temas de imagen. Cada centro es diferente, pero la metodología del cálculo puede hacerse en todos con las mismas herramientas y con los mismos criterios de planificación y diseño. Por fortuna, el panorama y el interés hacia estos asuntos está mejorando en nuestro medio y cada vez es más frecuente la participación multidisciplinar (arquitectos, planificadores sanitarios, radiólogos, físicos, interioristas, etc.) en el diseño y planificación de los Servicios de Radiología (Figura 17). Un Servicio de Diagnóstico por Imagen requiere una disciplina de planificación y diseño para eliminar todos los posibles costes adicionales que provienen de un incorrecto proceso, y se debe buscar la necesaria implicación por parte de los directores de proyecto hospitalarios y dirigentes sanitarios sobre estos costes inducidos, que no Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Figura 15. Varios 169 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 170 Figura 16. Sala de servidores. Salas de control eléctrico y reanimación PROYECTO DE EJECUCIÓN ARQUITECTURA INSTALACIONES –E stado original y reformado – Cotas y acabados – Falsos techos – Falsos suelos –S eñalización –C arpintería –C errajería –M obiliarios – Climatización – Gases medicinales – Saneamiento y fontanería – Electricidad – Alumbrado – Protección contra incendios – Ventilación y extracción – Red digital – Blindajes radiológicos y magnéticos Figura 17. Diagrama de actividades del proyecto de ejecución Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física hay que olvidar que pueden representar un lastre para toda la vida del Servicio, incrementando gravemente los ya muy elevados costes operativos del diagnóstico por imagen. Bibliografía recomendada – Busch HP, Georgi M (eds.). Digital Radiography: Quality Assurance and Radiation Protection. Konstanz: Schnetztor-Verlag; 1992. – del Cura JL, Pedraza S, Gayete A. Radiología Esencial. Editorial Médica Panamericana; 2010. –Energy Agengy, Panamerican Health Organization, World Health. International Basic Standards for Protection against Ionization Radia- tion and for the Safety of Radiation Sources. Vienna: Safety Series. IAEA; 1996. – Ficher H. Radiology Departments: Planning, Operation and Management. Ann Arbor; 1982. – García JA. Planificación y Diseño de Departamentos de Diagnóstico por Imagen y Radioterapia. Ed. Diego Marín; 2009. – Krestel E. Bildgegebende Systeme fur die medizinische diagnostk. Siemens; 1980. – Madrid García G. Planificar un nuevo servicio de Radiología. SEGECA. Gestión en Radiología. SERAM; 2010. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Figura 18. Resonancia magnética abierta de alto campo (1,0 T) 171 – Rostemberg B. Ergonomics straigttens its posture at SCAT 2004. Diagnostic Imaging; 2004. – Rostemberg B. The arquitecture of medical imaging. Wiley and Sons Inc.; 1996. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología García Ruiz JA, et al. Evaluación de la planta física – Martínez Serrano C. Salas de informes en los nuevos Servicios de Diagnóstico por Imagen. SEGECA. 2010. SERAM 1. 172 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):157-72 – Stedeford B, Morgan HM, Mayles WPM. The Desing of Radiotherapy Treatment Room Facilities. York: The Institute of Physics and Engineering in Medicine; 1997. – Williams DG. Radiation Shielding for Diagnostic X-Rays. Report of a joint BIR/IPEM Working Party. London: BIR; 2000. Evaluación de costes en Radiología García Medina V Jefe de Servicio de Radiología. Hospital General Universitario Reina Sofía. Murcia. Dirección para correspondencia: [email protected] Resumen Se presenta una evaluación de los costes en Radiología, analizando un nivel básico donde se incluyen las Unidades Relativas de Valor (URV) y otro global en el que se proponen de modo estratificado los diversos pasos necesarios para encuadrar, dentro de una contabilidad analítica general, dichos costes. Se analizan también algunos puntos controvertidos por novedosos, y actualmente no definitivos, sugiriendo soluciones a la hora de imputar sus costes. Palabras clave: Costes; Contabilidad analítica; Radiología. Cost evaluation in Radiology Abstract We present a twofold evaluation of costs for a Radiology Department; firstly a basic level, comprehensive of URV, is defined. Then a global, multi-layer analysis puts forward the various steps required to include these costs within a general Analytical Accounting system. Some recent controversial issues, not yet quite defined, are also taken into consideration, and suggestions are made as to how to allocate their cost. Key words: Costs; Analytical Accounting; Radiology. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Vicente García Medina. 173 García Medina V. Evaluación de costes en Radiología Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 174 Introducción Durante años, los intentos de evaluación de los costes radiológicos en la medicina pública dependieron en cierta medida del interés mostrado por un determinado Gerente o Jefe de Servicio. Con unas líneas generales de evaluación amplias, sin unos criterios claros y tomando de un lado y de otro conceptos diversos, aplicando fórmulas y modelos parciales. Todo lo anterior en el mejor de los casos; en el peor y tal vez el más generalizado, no se hacía nada o simplemente lo más fácil, contener o reducir los costes en contrastes y material. En la actualidad, se aplican desde las Consejerías de Sanidad contabilidades analíticas no equiparables entre ellas, donde se imputan costes a Radiología, como centros básicos o intermedios, tal como señala un estudio del Instituto de Información Sanitaria del Ministerio de Sanidad1. Siguiendo con la situación en España, vemos que hay un denominador común: los radiólogos de a pie, es decir los que cada día tienen que leer múltiples estudios radiológicos, han vivido y viven de espaldas a esa realidad. Indirectamente, producen una reducción de costes mejorando los niveles de calidad. La consecuencia de la falta de conocimiento de los costes económicos en Radiología, y en general en toda la medicina pública, dio lugar a plantillas muy mal elaboradas con grandes variaciones en la productividad, entre otros problemas. También fue la causa de compras de equipamiento unas veces excesivo, otras insuficiente y, lamentablemente, otras innecesarias. Compras que se realizaban al albur de las habilidades Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 de un Jefe de Servicio, de sus relaciones personales con las direcciones, de su tamiz político…, y de tantas otras cosas que nada tienen que ver con la necesidad de los mismos. Una vez hechas las compras, no se solían pedir resultados, ni importaba que equipos quedaran infrautilizados en cuanto a tiempo de uso y prestaciones. Niveles de análisis La evaluación de los costes en Radiología hay que analizarla en un contexto de eficiencia, de coste-efectividad. Y esto no de manera aislada en ciertos procesos, sino en la globalidad. Su aplicación se debe articular en una evaluación de los costes en todo el sistema sanitario. Dividamos por lo tanto el estudio de costes radiológicos en un nivel A o elemental y otro B o global. Nivel A (elemental) Revisaremos de un modo sucinto, por conocidos, las URV y los costes basados en actividades. Unidades Relativas de Valor Los esfuerzos más importantes en la evaluación de costes en Radiología se han hecho con el análisis de las URV que nos permite, además, diseñar algoritmos de coste-efectividad, lo que posibilita detectar variaciones entre los costes reales y con los costes basados en actividades (ABC). En una elaboración teórica de su utilidad, podríamos decir que las URV deberían permitirnos el conocimiento de los costes de nuestras exploraciones y desglosarlos por pacientes, salas… Podríamos imputarlas a Servicios, Gru- En España, a diferencia de EE. UU.2,3, donde los sueldos de los radiólogos pueden presentar variaciones importantes, se incluyen los de estos, junto al componente técnico y al profesional no médico. Para conocer lo que realmente cuesta cada URV deberíamos dividir el presupuesto global del Servicio entre el número de URV y, para poder conocer lo que cuesta cada exploración, deberíamos aplicar los costes de cada URV al número de URV que transporta cada exploración. Es por tanto muy importante imputar todos los costes al presupuesto del Servicio. En esquema, estos incluyen las retribuciones, que son costes fijos pese a ser directos, dado que, en la mayoría de los centros públicos, son independientes de la actividad. En alguna situación pueden convertirse en variables o semivariables si incluimos los debidos a horas extraordinarias, prolongaciones y/o cumplimiento de objetivos. Hay que incluir las amortizaciones y el mantenimiento como costes fijos, durante el periodo que corresponda. Con respecto al material y el consumo, son costes variables y directos. Están relacionados con la actividad. También incluimos aquí los costes de electricidad, agua, limpieza y reparaciones no incluidas en el programa de mantenimiento. Los resultados de los costes en un Servicio de Radiología, sin embargo, varían si realizamos contabilidades analíticas por modalidades. Así, en un estudio que hicimos sobre diversos artículos publicados por Saini4 al que desgajamos los de Medicina Nuclear, vemos las diferencias5. Para una contabilidad global de todo el Servicio, el porcentaje del gasto en una modalidad es obviamente igual al de URV de esa modalidad y, sin embargo, con una contabilidad analítica por modalidad, hay entre ellas diferencias notables entre los porcentajes de gastos y los de URV; así por ejemplo para la tomografía computarizada (TC) el porcentaje de gasto es menor. Por lo tanto, para poder comparar los costes por modalidades de modo independiente, deberíamos crear una contabilidad analítica para cada una de ellas. De este modo, las URV de todas las exploraciones de una misma modalidad serán iguales entre ellas, pero serían diferentes a las de otra modalidad. Costes basados en actividades Basado en el concepto en que las actividades son las que producen los costes y los productos los que consumen actividades. Gestionando las actividades podemos actuar sobre los costes (activity based management). En EE. UU., se han realizado en algunos centros y Departamentos de Radiología utilizándolo como estudio Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 García Medina V. Evaluación de costes en Radiología Nos permite compararnos con nosotros mismos y teóricamente con otros Servicios. Con respecto a los gastos estructurales (por ejemplo: personal que trabaja para todo el hospital, como directores, administrativos de Servicios Generales), se deben imputar de modo proporcional. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología pos Relacionados por el Diagnóstico (GRD), etc. 175 García Medina V. Evaluación de costes en Radiología Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 176 comparativo entre varias técnicas e incluso para comparar con las tarifas de Medicare6. En el Reino Unido, el manual NHS, fundamentado en gran parte en la metodología ABC, insiste en que todos los costes deben ser asumidos y posteriormente asignados7. Los Servicios de Radiología se consideran centro de costes y ellos asignan costes a través de los drivers o inductores de costes (bien en URV o número de exploraciones). Es muy importante, tal como señala el manual, imputar previamente a los Servicios de Radiología todos los costes directos, indirectos y generales. Y junto a las imputaciones ya conocidas, el manual NHS considera como costes directos en Radiología las compras de nuevos equipos, y como costes indirectos, los contratos de mantenimiento. Nivel B (global) Para evaluar adecuadamente los costes en Radiología no es suficiente conocer lo que nos cuestan las URV, el presupuesto o las variaciones anuales. Las causas que lo impiden están señaladas en la Tabla 1. El conocimiento y la evaluación global de los costes en Radiología son inseTabla 1. Causas que impiden una correcta evaluación de los costes en Radiología – Lenguaje diferente – Contabilidades Analíticas diferentes para cada comunidad autónoma (y en algunos casos para cada hospital y área sanitaria dentro de la misma comunidad) – Variabilidad asistencial – Sistemas informáticos diferentes para realizar la contabilidad analítica – Códigos de exploraciones diferentes Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 parables y se enmarcan dentro de los costes de toda la sanidad. Se precisa, además, de un valor añadido que yo, más bien, diría que es esencial. Se trata de saber si estamos haciendo las cosas bien y con arreglo a un modelo de contabilidad analítica. El siguiente punto es definir quién lo establece. En estos momentos, cada comunidad autónoma tiene su propio modelo de contabilidad analítica, aunque algunos sean parecidos entre sí, tal como indica el Ministerio en el estudio antes citado1. Al haber varios modelos con diferentes grados y formas de imputación, el sistema no es comparable y no existe un estándar. Por otro lado, tampoco podemos comparar la actividad asistencial entre diversas comunidades autónomas e incluso entre hospitales, ya que se utilizan códigos de exploraciones diferentes: unos propios de la comunidad autónoma8, otros de la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM)9 y, en algunos casos, variantes de la SERAM. Como veremos más adelante, esto plantea problemas. Al mismo tiempo, la práctica clínica difiere incluso entre médicos de un mismo hospital, de tal modo que, para una misma patología, el tipo y el número de exploraciones es diferente, con lo que se establece una variabilidad en los costes, difícil de controlar. Deberíamos, pues, conocer, quien o que organismo se responsabiliza de establecer los estándares. En primer lugar, veamos quién ha de determinar qué contabilidad analítica hay que poner en práctica en todos los hospitales y áreas sanitarias en el territorio del Estado. Este organismo debería estar formado por expertos en Economía y en Economía de la Salud, personalidades con reconocimiento y experiencia en gestión. Este organismo debería, antes de nada, definir con exactitud todos los términos a emplear, de modo que no cupiera la posibilidad de una mala interpretación o de dudas. La definición de términos incluiría de manera precisa su contenido. Para ello todos deberíamos utilizar el mismo catálogo de exploraciones. Desde mi punto de vista, el más adecuado es el de la SERAM, si bien se precisan algunas aclaraciones en algunos códigos. Por ejemplo: en un Servicio de Radiología, al realizar una TC urografía, se aplican las URV que señala el catálogo, pero puede haber otro Servicio de Radiología que entienda que el estudio simple sin contraste inicial sea previo y valorado independientemente y que la TC urografía solo conlleve el estudio con contraste. Esto deduciría que este Servicio muestra una actividad en URV mayor con un coste de URV más bajo que el real y, por tanto, otras exploraciones teóricamente resultarían más baratas. En segundo lugar, y de un modo claro, debería desarrollar toda la cascada de imputaciones y asignaciones de costes del sistema (hospitales y áreas de salud o sanitarias) a diversos niveles. De tal modo que en cada nivel la suma fuera la misma. Con respecto al Servicio de Radiología, debería quedar meridianamente claro lo que se le imputa; lo que son costes directos e indirectos, así como la manera de imputar estos costes a otros Servicios, Departamentos o centros de salud. Con esto quiero decir que la SERAM o los autores del catálogo de exploraciones, en aquellos estudios o exploraciones que detecten que pueda haber confusión, deberían añadir una pequeña explicación. En el ejemplo que hemos puesto, sería UroTC X URV (estudio simple y dos estudios con contraste). Cualquier variación que el Servicio, por cualquier razón, realizara no debería suponer un aumento o disminución de las URV reflejadas en el catálogo. Dado que la complejidad de los hospitales es diferente, se deberían dividir en tres o en cuatro tipos, lo que conllevaría un sistema corrector. En este momento ya conocemos los costes que se nos imputa y lo que nos cuestan nuestras exploraciones, pero aún no podemos decir si estamos haciendo las cosas bien, es decir, si estamos realizando las exploraciones que son necesarias o no. Para establecer el modelo de contabilidad analítica debería, además, estudiar los distintos modelos ya conocidos en las CCAA, los más punteros de casas comerciales y las experiencias en otros países. Llegados a este punto y aplicando exactamente la contabilidad analítica Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 García Medina V. Evaluación de costes en Radiología diseñada por este organismo creado ad hoc, cada hospital y cada Servicio de Radiología sabría exactamente sus costes. Sin embargo, y seguimos hablando de Radiología, aún no tendríamos la certeza de si los costes de nuestros procedimientos y exploraciones son comparables con los de otros Servicios de Radiología. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Desde mi punto se debería crear un Órgano al amparo de la Ley 26/2003, de 28 de mayo, de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud10. Situada al mismo nivel que la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios o el Instituto de Salud Carlos III y con el apoyo de todos los Servicios Autónomos de Salud. 177 García Medina V. Evaluación de costes en Radiología Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 178 Para ello se precisaría que, siguiendo el modelo CPT/ACR utilizado por MEDICARE en EE. UU., comisiones formadas por Especialista en Radiología y de las otras Áreas de la Medicina nombrados por las respectivas sociedades científicas, junto con economistas y economistas de la salud, agencias de evaluación tecnológica y representante de la industria de tecnología sanitaria acordaran y establecieran11, tres puntos básicos: – Determinar de modo teórico unos costes de las exploraciones radiológicas que se basarían en los ya obtenidos en los hospitales con mejor práctica clínica. Obviamente, esto sería orientativo, como tabla de referencia en los primeros años. Además, los costes por procedimientos quedarían incluidos en una columna, junto al código del catálogo. – Ligar los códigos de Radiología con las enfermedades descritas en ICD-9. – Relacionado con el punto anterior, decidir qué tipo de exploración hay que realizar, así como sus seguimientos, comenzando por las enfermedades más frecuentes. Para ello se cuenta con abundantes guías clínicas. No hay duda de que se trata de una aplicación práctica de la Medicina Basada en la Evidencia y que debería ser “obligatoria” para todos, médicos prescriptores y radiólogos. Siendo necesario justificar las causas en aquellos casos en que no se siguiera la norma (retrasos en los diagnósticos, complicaciones, etc.). El coste de cada exploración incluida en cada enfermedad repercutiría en el servicio demandante y el hospital lo tendría incluido dentro del coste glo- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 bal del proceso o enfermedad, junto a los de los días de hospitalización, quirófanos, farmacia, etc. Es un paso más allá de la aplicación en los GRD, y no se engaña a nadie si decimos que se trata de un trabajo duro y extenso y además revisable cada cinco años en una puesta al día, o antes, en los casos en los que los avances en la tecnología diagnóstica y/o terapéutica lo hagan preciso. Hay un amplio trabajo ya realizado en estos momentos en un bosque de guías clínicas y de estudios coste-efectividad, algunos excelentes, que serían de una ayuda inestimable y, tal como indica Oliva, “la evaluación económica de intervenciones, programas, políticas sanitarias presentarán limitaciones de orden metodológico, técnico, normativo o de aplicabilidad práctica. Pero ello no es excusa para su no aplicación dado que no existe ningún tipo de estudio científico o técnico que esté carente de limitaciones”12. Los estudios de coste-efectividad son un método objetivo y sistemático en las estrategias de salud que toman como base los costes y la efectividad de modo simultáneo y los radiólogos deberíamos mejorar nuestro conocimiento y entender las herramientas de investigación con el fin de participar activamente en la política de la toma de decisiones13. Con una contabilidad analítica, un catálogo de prestaciones iguales para todos y unas guías de práctica radiológica o criterios apropiados que lleguen a abarcar todas la patologías, seríamos ya capaces de conocer lo que cuesta nuestro trabajo y en consecuencia poder realizar una buena gestión, en el amplio sentido de la palabra, no solo clínica, sino también en la elaboración de plantillas, rendimientos, adquisición de medicamentos. Y al mismo tiempo y fundamental, sa- Los Servicios de Radiología son complejos por su volumen de trabajo, por la trascendencia de sus resultados, por su interrelación con otros Servicios, por su histórica relación con la industria, por su íntima relación con los cambios en ingeniería, en informática y en telemática, y por tantas otras razones… Esto hace que determinados ítems se encuentren aún en estudio y mirados desde diferentes ángulos. De la resolución de sus controversias habrá cambios en los resultados económicos de nuestros Servicios. De modo aleatorio, sin ordenarlos por importancia, citamos: Trabajo no relacionado directamente con la realización de un estudio o procedimiento y su informe La formación, la investigación, la participación en conferencias y congresos, las interconsultas y las visitas a planta, Sin embargo, y a diferencia de las URV asignadas a las exploraciones, que son las que son, la realidad diaria se presta a ciertas confusiones e interpretaciones. En otras especialidades, también algunas de estas actividades son diarias y no todas se computan, ni siquiera como indicadores. Cabría la interpretación opuesta de que algunas de estas actividades son inherentes e inseparables del trabajo del radiólogo y por lo tanto están ya reflejadas en las URV de las distintas exploraciones. Solicitud de estudios radiológicos Pese a que legalmente la última palabra en cuanto a la idoneidad de qué estudio se ha de realizar corresponde al radiólogo y, pese a los esfuerzos de Tabla 2. Diversos escalones que abarca todo el proceso para evaluar Costes Función MINISTERIO DE SANIDAD Organismo encargado de crear un Modelo de Contabilidad Analítica Radiología • Modelo de contabilidad analítica para todas las CCAA • Conoce todos sus Costes SERAM • Catálogo de exploraciones • Conoce lo que le cuesta cada exploración GRUPO DE TRABAJO • Asigna costes teóricos a cada código • Liga los códigos de Radiología a las ICD-9 • Decide las guías clínicas • Se realizan los estudio adecuados • Conoce lo que cuestan las exploraciones radiológicas para cada enfermedad (economista salud, SERAM, otras especialidades, Agencia de Evaluación de Tecnología…) Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 García Medina V. Evaluación de costes en Radiología Controversias etc., constituyen una importante parte del trabajo del radiólogo y necesita ser incorporado como costes propios e independientes de las exploraciones e informes, según algunos autores14. También, así lo ha hecho la SERAM, asignando a estas actividades un determinado número de URV. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología bríamos si estamos haciendo las cosas bien (Tabla 2). 179 García Medina V. Evaluación de costes en Radiología Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 180 determinados Servicios, la realidad en España y en otros países es que, en la mayoría de los casos y debido a la enorme demanda, se efectúan los solicitados por los médicos prescriptores tal como llegan. los estudios e informes (que pasan de ser obtenidos por un especialista formado en Diagnóstico por Imagen a otro que no ha recibido esa formación), repercuten en la elevación de los costes. Esto es causa de un aumento de estudios innecesarios y responsable de una elevación de costes directos, pero también de otros costes sin valor añadido como son citaciones, analíticas, intervenciones y días de trabajo médico relacionados con hallazgos incidentales15. Es bien conocido que la autocitación produce derivaciones de pacientes a los Servicios de Radiología para que se les realicen estudios de mayor complejidad tecnológica que aclaren las dudas de hallazgos no reconocibles por los primeros. En el mejor de los casos, los estudios originales son repetidos pero por profesionales ya cualificados. Según Swensen, las causas del exceso de estudios solicitados se basan en las lagunas de conocimiento de los médicos prescriptores, en la disponibilidad de tecnología, en la medicina defensiva y en la falta de accesibilidad a estudios previos. En un estudio de AHIP se comunica que en EE. UU. un tercio de los estudios solicitados son inapropiados16. Desde nuestro punto de vista, y mientras recorramos el camino en el que todas las prescripciones radiológicas sean supervisadas por el radiólogo, los médicos que solicitan los estudios deberían ceñirse a criterios apropiados, tal como indicábamos en el inicio de este artículo. Por tanto, vemos que la autocitación produce un aumento de los costes por el aumento de estudios de imagen, difícil de decidir dónde se encuadran. Con respecto a otros costes hospitalarios, también aumentan, dado que aparece la necesidad de crear nuevos puestos de trabajo que cubran el trabajo propio abandonado por estos especialistas sectoriales de imagen. En EE. UU., la autocitación de estudios radiológicos por especialistas no radiólogos es 2,29 veces más frecuente por episodio que cuando el médico remite al paciente a un centro radiológico17. La disponibilidad de tecnología a mejor precio y el tamaño de los equipos, sobre todo –aunque no solo– de los ultrasonidos, está permitiendo que especialistas no radiólogos realicen estudios radiológicos de sus propios pacientes, es decir, se autociten. Esto obviamente tiene un componente de beneficio económico para estos especialistas en la medicina privada. Se trata de una situación difícil de solucionar, por estar ya consolidada en muchos hospitales y por la diversidad de intereses de todo tipo, pero que debería hacer reflexionar no solo a gerentes sino a las máximas autoridades sanitarias. Se produce un aumento descontrolado de los costes de imagen y, en el mejor de los casos, siendo generoso, no se mejoran los resultados obtenidos en Servicio de Radiología. En la medicina pública la autocitación, además de repercutir en la calidad de Hay fórmulas de colaboración con otras especialidades que funcionan Autocitación Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 En los estudios de coste-efectividad, a diferencia de los de coste-utilidad de la industria, la efectividad se mide de modo independiente de los costes. Pero también tradicionalmente se suele realizar en un plazo inmediato o medio. Sin embargo, es conocida la utilización de los estudios de imagen como prevención y detección de determinadas enfermedades. En esta situación, es obvio que inicialmente se produce una elevación de costes, pero sería preciso evaluar los resultados a largo plazo, donde tal vez se produciría, como consecuencia de la prevención, resolución o mejora de la enfermedad, una reducción de costes en tratamientos, pruebas diagnósticas, estancia hospitalaria, etc.16. La mejora de la tecnología, de la que se derivan no solo análisis anatómicos, va a dar lugar en los próximos años, ya lo está haciendo, a un aumento de este tipo de estudios. Se precisa, por lo tanto, estudios de coste-efectividad de las nuevas indicaciones. Esta utilización se acota en el contexto de estudios genéticos y metabólicos, y no como amplios screening. Telerradiología La telerradiología, en general toda la telemedicina, es una realidad que se extiende inexorable por nuestra actividad médica. Un Servicio de Radiología puede informar estudios realizados en otros hospitales o, por el contrario, enviar los estudios realizados a otros centros, para que sean informados. En el primer caso, solo se tendría en cuenta el componente profesional médico (y tal vez el mantenimiento de las estaciones). En el segundo, las URV deberían contemplar el componente técnico y profesional no médico. Algunos trabajos ya reflejan las ventajas, desde el punto de vista económico, que representa la telerradiología para pequeños hospitales17. Conclusión La evaluación de costes en Radiología exige, desde mi punto de vista, una ordenación y unos criterios comunes. Se trata de que todos hablemos el mismo lenguaje y nos podamos comparar. Y es fundamental considerarlos dentro de un marco de evaluación de costes de todo el Sistema. Bibliografía 1.Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Instituto de Información Sanitaria. Análisis de contabilidad en los hospitales del SNS. Año 2011. Volumen I. Informe. Información y estadísticas sanitarias. 2.Moorefield JM, Mac Ewan DW, Sunshine JH. The Radiology relative valor scale: its development and implications. Radiology. 1993:187: 317-26. 3.Radiology Cost and Productivity Benchmarling Dtudy. Oak Brook, Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 García Medina V. Evaluación de costes en Radiología La imagen radiológica como prevención y detección En las dos situaciones los estudios tienen un número de URV inferior al que tendría si el estudio completo con su informe se realizara en el propio Servicio. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología muy bien, pero centralizadas en Servicio de Diagnóstico por Imagen. 181 García Medina V. Evaluación de costes en Radiología Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 182 III: University Health System Consortium; 1996. 4. Saini S, Sharma R, Levine LA, Barmson RT, Jordan PF, Thrall JH. Technical Costs of CT Examinations. Radiology. 2001;218:172-5. 5. García Medina V, Soler García R. Análisis de costes de los Servicios de Radiología. Gest y Eval Cost Sanit. 2004;5(1):23-39. 6. Cohen MD, Hawes DR, Hutchings GD, McPhee W, La Maters M, Fallon RP. Activity-based Costs Analysis: A Method of Analizing the Financial and Operating Performance of Academic Radiology Departments. Radiology 2000;215:70816. 7. NHS Costing Manual. 26 January 2012 [en línea]. Disponible en https://www.gov.uk/government/ uploads/system/uploads/attach ment_data/file/152174/dh_132398. pdf.pdf 8. Catálogo de Procedimientos Diagnósticos y Terapéuticos de Diagnóstico por la Imagen. Generalitat Valenciana. Conselleria de Sanitat. 2003. 9. Catálogo de exploraciones SERAM 2009 [en línea]. Disponible en http:// seram.es/modules.php?name=docu mentos&lang=ES&docuclick=3&do cument=catalogo_se ram2009.pdf&iddocument=28&idw ebstructure=208&op=getDocument Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):173-82 10.Ley 26/2003, de 28 de mayo, de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud. 11.Phillips CD, Hillman BJ. Coding and Reimbursement Issues for the Radiologist. Radiology. 2001;220:7-11. 12.Oliva J. Introducción: La evaluación económica de intervenciones sanitarias en España. Situación actual y perspectivas. Gest y Eval Cost Sanit. 2013;14(1):15-24. 13.Singer ME, Applegate KE. Costeffectiveness análisis in radiology. Radiology. 2001:219:611-20. 14.Ondategui-Parra S, Bhagwat JG, Zou KH, Nathanson E, Gill IR, Ros PR. Use of Productivity and Financial Indicators for Monitoring Performance in Academic Radiology Departments. U.S. Nationwide Survey. Radiology. 2005;236:214-9. 15.Swensen SJ. Patient-centered imaging. Am J Med. 2012;125(2):115-7. 16.America’s Health Insurances Plans Ensuring quality through appropriate use of diagnostic imaging. July 2008. 17.Edwin M. New Image. Manager Health Executive. September 2008. 18.Plathow C, Waltz M, Essig M, Engelmann U, Schultz-Ertner D. Teleradiology economic research analysis of CT investigations in a small hospital. Rofo 2005;177(7):1016-26. Evaluando la satisfacción de los pacientes Resumen Evaluar la satisfacción de los pacientes es el primer paso para hacerles partícipes de los aspectos relacionados con su salud. Los radiólogos debemos buscar la complicidad con los pacientes para que puedan tomar decisiones informadas acerca de las exploraciones solicitadas por su médico. Informar, formar y hacer partícipe al paciente, forma parte de nuestra obligación como profesionales y es un derecho de los pacientes. Palabras clave: Satisfacción; Ética; Derechos del paciente; Participación; Radiología. The evaluation of the patient’s satisfaction Abstract Knowing the patient opinion is the first step towards getting him to share their health care’s aspects. Radiologist should look for helping patient to make informed decisions about the tests ordered by his doctor. Taking the patient into the decision process is a duty for the medical staff as well as a right of the patient. Key words: Satisfaction; Ethics; Patient’ rights; Participation; Radiology. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):183-90 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología González Álvarez I Hospital Universitario San Juan. Alicante. Dirección para correspondencia: [email protected] 183 González Álvarez I. Evaluando la satisfacción... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 184 “Para convencer a los otros de que algo es correcto o erróneo, necesitamos un lenguaje de fines y no de medios. No hace falta que creamos que nuestros objetivos tienen buenas posibilidades de alcanzarse. Pero si hemos de poder creer en ellos.” (Tony Judt) El paciente es el eje del sistema, es una de las frases más repetidas en los foros académicos y de gestión sanitaria pero, salvo iniciativas aisladas de algunas Administraciones autónomas, responsables de su impulso, y de organizaciones independientes, no ha pasado de eslogan sanitario. La participación de pacientes y ciudadanos en nuestro sistema sanitario necesita dar el paso del ámbito académico, teórico, a la práctica asistencial del día a día. Quizás la complejidad de la es- tructura sanitaria, y en el caso del radiólogo la imagen y los avances tecnológicos, nos hayan hecho perder de vista los fines de la Medicina y olvidar que detrás de cada imagen no hay un “caso”, existe una persona, un paciente. Aún estamos instalados en el “todo para el paciente pero sin el paciente” (Figura 1). Sin embargo, si tenemos en cuenta los seis requisitos que el Institute of Medicine (IOM) considera que debe reunir la prestación de los Servicios de Salud: servicio efectivo, seguro, centrado en el paciente, oportuno en el tiempo, eficiente y equitativo1, nos enfrentamos a una situación en la que la participación del paciente y de los ciudadanos en las decisiones relacionadas con su salud adquiere gran trascendencia. ¿Medir la satisfacción de los pacientes es una misión imposible? No, pero antes de llegar a este punto es necesario Figura 1. El paciente aún no es el centro. Todo continúa girando alrededor de los profesionales: “Todo para el paciente pero sin el paciente”. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):183-90 La pregunta clave no es qué evaluar o cómo hacerlo, medir no es difícil, requiere el manejo de instrumentos y el uso de una metodología. La pregunta que debemos plantearnos es ¿por qué medir? Conocer y evaluar qué piensa y espera el paciente del Servicio de Radiología no es algo opcional y que pueda, por tanto, dejarse al libre albedrío de cada uno. Por razones jurídicas y éticas que no debemos obviar, el ejercicio diario de nuestro trabajo requiere el compromiso ético personal e individual de cada miembro de la organización y, a su vez, los valores deben ser claves en la dirección de la misma. Lo anterior es necesario pero no suficiente. Pacientes y ciudadanos deben ser considerados interlocutores válidos. Según Vuori, si se supone que los pacientes son racionales y capaces de opciones inteligentes sobre su estado Aspectos éticos y jurídicos confluyen y, así, la Ley General de Sanidad (1986)4 supuso el primer reconocimiento formal de derechos de los pacientes. Posteriormente, en el año 2003, la Ley de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud5 trata de garantizar al ciudadano valores básicos como la equidad, la calidad y la participación social en la atención sanitaria. La entrada en vigor de la conocida como LAP, Ley de Autonomía del Paciente (2002)6, supone un punto de inflexión, destacando, entre todos los derechos reconocidos, el del acceso a la información. Sin embargo, la existencia de leyes no es garantía del cumplimiento de las mismas. Así, hay estudios cuyos resultados apuntan que una cuarta parte de los médicos no ha oído hablar de la LAP,7 hasta un 50% de los facultativos desconoce las penas asociadas a la vulneración del derecho a la confidencialidad8 y un 38% no ha leído las normas que regulan las voluntades anticipadas9. No solo estas y otras leyes sanitarias promulgadas en nuestro país trascienden del ámbito jurídico y alcanzan dimensiones éticas. Los modelos de calidad que habitualmente se utilizan en nuestro entorno: European Foundation for Quality Management (EFQM), International Organization for Standardization/Una Norma Española (ISO/UNE) y The Joint Commission on Acreditation of Healthcare Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):183-90 González Álvarez I. Evaluando la satisfacción... Se consideran usuarios de Radiología todos aquellos a quienes afecta su actividad: médicos que solicitan pruebas diagnósticas, profesionales de Radiología, Administración pública o entidad privada, ciudadanos y pacientes. La cuestión radica en cómo priorizar los intereses de los diferentes afectados y es aquí donde el cuidado del paciente se convierte en la prioridad más elevada2. de salud, existe el imperativo ético de involucrar a los mismos en la mejora de la calidad de los servicios. Vuori propone una serie de consideraciones éticas desde el punto de vista del paciente, tales como el principio hipocrático, según el cual el bienestar del paciente ha de ser el interés máximo de la atención médica o el principio democrático, según el cual aquellos a quienes concierne una decisión han de estar implicados en ella3. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología recorrer un largo camino y preguntarse, ¿queremos verdaderamente conocer lo que piensan los usuarios de nuestros servicios? Las encuestas generales realizadas a pacientes hospitalizados no suelen formular preguntas sobre los Servicios de Imagen, a pesar de que la imagen diagnóstica es hoy una herramienta imprescindible para los médicos. Sin embargo, dado que la accesibilidad es un aspecto recurrente, las demoras diagnósticas suelen aparecer como un elemento que preocupa al usuario del sistema. 185 González Álvarez I. Evaluando la satisfacción... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 186 Organizations (JCAHO) promueven la participación de todos los grupos de interés, y la orientación al cliente es una exigencia de todos ellos. Las dos primeras tienen su origen en la empresa y la JCAHO ha sido pensada y elaborada para organizaciones sanitarias exclusivamente y en el año 1995 incorporó a uno de los apartados de su manual de calidad nuevos criterios agrupados bajo el título “ética de la organización”. Así, el término calidad en sus vertientes teórica y práctica lleva implícito siempre una dimensión ética. La satisfacción es un concepto complejo, multidimensional y cambiante, y se relaciona con múltiples factores en los que intervienen sentimientos y razonamiento, basado este último en información y experiencias previas. Los contenidos del proceso asistencial relacionados con la satisfacción del paciente deberán abarcar al menos tres dimensiones diferentes de la atención: aspectos técnico-instrumentales, comunicación y los relacionados con la propia asistencia: confort, rapidez, trato…10. Sin embargo, conocer la satisfacción de los pacientes en los Servicios de Radiología tiene algunas connotaciones especiales derivadas de la fe que tanto médicos como pacientes tienen depositada en la tecnología y de nuestra situación en medio del proceso asistencial que confiere al “tiempo” un valor especial. Evaluar la satisfacción de los pacientes en Radiología lleva aparejado un plus de complejidad y dificultad relacionado con el desconocimiento que pacientes y ciudadanos tienen sobre la tecnología y la figura del radiólogo, y de ahí, por otra parte, la creencia de que su médico es quien interpretará la imagen. Si a esto añadimos que nuestros interlocutores con los pacientes son en gran medida los administrativos, los técnicos y los enfermeros, lo que realmente les preocupa es cuánto Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):183-90 tardaremos en hacerles la exploración, cuándo tendrá el resultado –la imagen– su médico y cómo han sido el trato, la información, la accesibilidad etc., ya que la seguridad es algo que dan por supuesto. Hemos visto que atendiendo a los valores éticos, los aspectos legales y las exigencias de los diferentes modelos de calidad tenemos la obligación de conocer y evaluar cuál es el grado de satisfacción de nuestros pacientes y ciudadanos, pero debemos ir más allá. Comparto la afirmación de J. Camprubí: “Un paciente que después de recibir asistencia sanitaria siguiera con su sintomatología o con su enfermedad igual que al inicio del proceso asistencial y estuviera satisfecho (trato personalizado, confortabilidad, uso de tecnología, abundancia de medicamentos, etc.) sería victima de un fraude”11. Nuestra experiencia en la evaluación de la satisfacción del paciente La satisfacción tiene su origen no solo en los aspectos relacionados con la competencia profesional o la organización sino que es fruto también de las vivencias, las actitudes y las creencias personales del paciente y todo ello conforma sus expectativas12. Conocer las necesidades y expectativas de todos los grupos de interés, especialmente del paciente, ha sido la “puerta” de entrada a la gestión de los procesos asistenciales en nuestro Servicio. Para conocerlas hemos utilizado la metodología cualitativa y cuantitativa. Con la primera buscamos respuestas al qué, cómo y por qué, y con la segunda con qué frecuencia, cuánto y con qué intensidad. Dentro de la metodología cualitativa hemos empleado técnicas descripti- SAIP 1994-2012 126 1 23 Radiología 2003-2012 166 88 200 150 454 TOTAL SAIP: Servicio de información y atención al paciente. vas: entrevistas semiestructuradas prey postprueba grabadas, observación de hechos y escucha activa en las diferentes salas de espera, organización de grupos focales, análisis de sugerencias y reclamaciones del Servicio de Atención al Paciente y de las recogidas en el Servicio de Radiología (Tabla 1) y análisis de la literatura; hemos, por tanto, escuchado, observado, preguntado y facilitado a los pacientes la posibilidad de opinar. Un valor añadido importante ha sido la labor de profesionales de diferentes estamentos, siempre con una actitud receptiva a los cometarios y sugerencias de los pacientes, que ha permitido implementar mejoras sustanciales. La metodología cualitativa fue la base para la elaboración de encuestas generales y específicas de determinadas secciones. Las preguntas están relacionadas con: accesibilidad, tiempos, información, trato, conocimiento del personal, infraestructuras y consentimiento informado. Algunos de los resultados pueden verse en la Tabla 1 y en las Figuras 2 y 3. Los resultados de nuestra evaluación coinciden con la mayoría de los estudios, aunque el factor tiempo relacionado con la espera para realizar la exploración, sobre todo en pacientes de controles oncológicos, y el intervalo hasta ser vistos por su médico posteriormente es lo que más impacto tiene por el miedo y la ansiedad que genera la incertidumbre. Los aspectos de la asistencia más importantes para los pacientes que acuden al Servicio son la accesibilidad temporal y física, la información y la atención. Calidad percibida por el paciente Muy corto Tiempo de espera Trato percibido Muy bueno Corto Bueno Largo Malo Muy largo Muy malo ¿Cómo considera el ¿Cómo considera el ¿Cómo valora el trato ¿Cómo valora el trato ¿Cómo valora el trato tiempo desde que le tiempo desde que llega recibido por teléfono? recibido por el personal que le ha dado el solicitaron la prueba al Servicio de Radiología cita telefónica de admisión de personal durante la hasta su llegada al hasta que le realizan la Radiología? realización de la prueba? Servicio de Radiología? prueba? 2012 Figura 2. Resultado de las encuestas (2012). Tiempo de espera y trato percibido por el paciente que acude al Servicio de Radiología Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):183-90 González Álvarez I. Evaluando la satisfacción... Reclamaciones Sugerencias Felicitaciones Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Tabla 1. Reclamaciones, sugerencias y felicitaciones procedentes del Servicio de Información y Atención al Paciente y del propio Servicio de Radiología 187 González Álvarez I. Evaluando la satisfacción... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 188 Calidad percibida por el paciente Información recibida Muy adecuada Confortabilidad Muy bueno Adecuada Bueno Inadecuada Malo Muy malo Muy inadecuada 0 Información Información Tiempo dedicado Información proporcionada por proporcionada por a informar al disponible en sala teléfono Admisión de Rx paciente de espera Información Confortabilidad de Cómo percibe el proporcionada la sala de espera orden y limpieza durante la en la sala de realización de la exploración prueba 2012 Figura 3. Resultado de las encuestas (2012). Calidad percibida en relación con la información recibida y la confortabilidad del Servicio A pesar de que nuestros resultados en términos de satisfacción son buenos, estamos aún lejos de satisfacer al paciente que desea tomar decisiones sobre su salud. Debemos apoyar el cambio de modelo de relación médico-paciente (Figura 4)13, reconociendo y fortaleciendo el rol del paciente y favorecer que ciudadanos y pacientes estén no solo informados sino también preparados, para que puedan así pasar de ser receptores pasivos a protagonistas informados, convirtiéndolos en pacientes “competentes” (Jovell)14,15 que se implican ejerciendo responsablemente su autonomía. Y si, además, tal y como demuestran algunos estudios, los pacientes bien informados tienden a optar por procedimientos menos invasivos y menos CAMBIOS EN EL MODELO DE RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE Paternalismo Paciente como Objeto Decisiones compartidas Paciente como BENEFICIENCIA Riesgos compartidos Sujeto AUTONOMÍA Modificado de Mira Solves J. ¿Deben compartir los riesgos de toma de decisiones los pacientes? En: De las complicaciones y efectos adversos a la gestión de los riesgos de la asistencia sanitaria. EVES; 2004. Figura 4. Cambios en el modelo de relación médico-paciente: el principio de Beneficencia se va transformando en principio de autonomía Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):183-90 Conclusiones A pesar de que nuestros resultados, en términos de satisfacción, son buenos, estamos aún lejos de satisfacer al paciente que desea tomar decisiones sobre su salud. Conocer, medir y fomentar la participación y satisfacción del paciente y el ciudadano no solo es posible sino obligado jurídica y éticamente y debe formar parte de la Misión y los valores del Servicio de Radiología. Informar, formar y hacer partícipe al paciente de las decisiones que le afectan forma parte de las obligaciones de la Administración y de los profesionales, así como de los derechos del ciudadano. Cuando la organización interioriza que el paciente es verdaderamente el centro, que existimos como profesionales porque hay pacientes, surgen de manera espontánea iniciativas encamina- Y como reflexión final: aunque en ocasiones no nos sintamos comprometidos con la Administración o la Organización, nuestra responsabilidad y compromiso con los pacientes es ineludible y forma parte de la esencia moral de nuestra profesión. “La idea de que los pacientes deben implicarse en su asistencia no se pone en práctica de una forma responsable. Hoy día se habla sobre la autonomía del paciente, pero esta se traduce con frecuencia en abandono del paciente”. (Donabedian A. Health Affairs. 2001;2081:137-41). Agradecimientos A Mónica García Pérez, responsable del sistema de calidad del Servicio de Radiología, por su apoyo en la confección del manuscrito así como por su motivación y dedicación a la calidad. Bibliografía 1.Crossing the Quality Chams, A New Health System for the 21th Century. Institute of Medicine, March 2001. 2. Simón P (ed.). Ética de las organizaciones sanitarias. Nuevos modelos de calidad. Madrid: Triacastela; 2005. 3. Vuori H. Patient satisfaction. An attribute or indicador of the quality of care? QRB; 1987. p. 106-8. 4. Ley 14/1986, de 25 de abril, General de Sanidad. BOE de 29 de abril de 1986. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):183-90 González Álvarez I. Evaluando la satisfacción... Los radiólogos debemos aliarnos no solo con los médicos sino también con los pacientes para reducir o eliminar las pruebas innecesarias, tal y como está ocurriendo en EE. UU. con la iniciativa de la Americam Board of Internal Medicine (ABIM Foundation), conocida como Choosing Wisely (elegir sabiamente), a la que pertenecen numerosas sociedades científicas entre ellas el American College of Radiology (ACR) y en la que profesionales sanitarios y pacientes toman las decisiones de manera compartida evitando pruebas y procedimientos que la evidencia no respalda16. das a mejorar la atención a lo largo del proceso asistencial y favorece la aparición de un clima ético en la organización Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología costosos, mejoraremos la efectividad y por tanto la eficiencia de nuestras intervenciones16, lo cual es una excelente noticia siempre, y más aún en el contexto de crisis actual. 189 González Álvarez I. Evaluando la satisfacción... 5. Ley 16/2003, de 28 de mayo, de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud. BOE de 29 de mayo de 2003. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 8. Iraburu M; Grupo Trabajo EMIC. Estudio multicéntrico de investigación sobre confidencialidad. Med Clin (Barc). 2007;128:575-8. 190 6. Ley 41/2002, de 14 de noviembre, Básica Reguladora de la Autonomía del Paciente y de Derechos y Obligaciones en Materia de Información y Documentación Clínica. BOE de 11 de noviembre de 2002. 7.Mira JJ, Lorenzo S, Vitaller J, Guilabert M. Derechos de los pacientes. Algo más que una cuestión de actitud. Gac Sanit. 2010;24(3): 247-50. 9. Simón-Lorda P, Tamayo-Velázquez MI, Vázquez-Vicente A, DuránHoyos A, Pena-González J, Jiménez-Zurita P. Conocimientos y actitudes de los médicos en dos áreas sanitarias sobre las voluntades vitales anticipadas. Aten Primaria. 2008;40:61-8. 10.Caminal J. 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Más procedimientos incluidos en la cartera de servicios, aplicables a un mayor número de pacientes y la posibilidad de diagnósticos más precisos, han propiciado una progresiva dependencia del proceso clínico sobre la imagen, que hoy demandan tanto los profesionales como los propios usuarios. Aparte del factor tecnológico, otros factores de tipo sociodemográfico, como el envejecimiento de la población; o puramente médico, como la mejoría en la supervivencia de gran parte de los procesos clínicos, han contribuido al crecimiento continuo de la demanda y, con él, de los costes e inversiones en Radiología, que suponen en torno al 3-5% del presupuesto de la mayor parte de los centros hospitalarios. En la década 1997-2006 se duplicó el empleo de la tomografía computarizada y se triplicó el de la resonancia magnética (RM), sin reducción significativa del resto de estudios “convencionales”, con lo que el coste total en Radiología se vio duplicado1. Por otra parte, existe la percepción de que un porcentaje variable de estos costes no estaría justificado en virtud del beneficio que producen. Con frecuencia, para un determinado problema de salud existen varias opciones diagnósticas y terapéuticas, y la elección entre una y otra no siempre se fundamenta en la evidencia científica disponible, sino que se encuentra sujeta a una gran variabilidad, que propicia la duplicación, la reiteración y el empleo innecesario o inadecuado de la imagen diagnóstica, que en el ámbito de la “alta tecnología” se ha situado entre el 20 y el 50%2. Este hecho resulta especialmente sensible en una situación de contracción económica como la actual, con importantes restricciones presupuestarias que alcanzan también al ámbito sanitario. En tal contexto, el papel del radiólogo ha de enfocarse hacia una mayor implicación directa en la atención y el cuidado de Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):191-8 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología José M.ª Artigas Martín. 191 Artigas Martín JM, et al. Estudios de coste-efectividad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 192 los pacientes, compartiendo con otros profesionales, en el seno de grupos multidisciplinares, la responsabilidad de utilizar los recursos de forma eficiente. Para ello, los Servicios de Radiodiagnóstico deben estar íntimamente relacionados y coordinados con sus servicios clientes, con los que deben adoptar y desarrollar protocolos y pautas de actuación comunes, avalados por la evidencia científica, como mejor garantía del empleo adecuado de su cartera de servicios. No solo hay que estar capacitado para aplicar una determinada tecnología, sino que es preciso conocer las razones para aplicarla, el contexto clínico idóneo, las posibles alternativas y sus respectivos costes3. Es en este escenario de mejora en la gestión donde se sitúan los llamados análisis de costeefectividad (ACE)4,5. En las siguientes líneas se expondrán algunos aspectos relevantes para el desarrollo de un ACE, incluyendo la propuesta de un esquema metodológico básico, con el que orientar la elección de la técnica de diagnóstico por imagen (TDI) idónea para su inclusión en los algoritmos de manejo de las situaciones clínicas de mayor relevancia, por su frecuencia o por su impacto asistencial o económico. Objetivos del análisis de costeefectividad El objetivo de un ACE es determinar el valor relativo de una intervención comparada con otra. Cualquier intervención, incluida la abstención, tiene unos costes y unos beneficios. De esta forma, podría definirse la relación costeefectividad de cualquier TDI, como la diferencia en costes y beneficios entre las diferentes alternativas diagnósticas. Independientemente de cualquier otra consideración, la premisa previa es que la limitación de los recursos Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):191-8 obliga a racionar y priorizar su consumo en cualquier escenario. Para ello, los ACE comparan las diferentes alternativas diagnósticas y terapéuticas con sus respectivos costes asociados, ofreciendo una referencia objetiva de gran utilidad para priorizar su empleo y homogeneizar la práctica médica, favoreciendo con ello un consumo de recursos más eficiente. Su aplicación como herramienta de gestión debería generalizarse en todos los Servicios de Radiología. Diseño de un análisis de costeefectividad3,6-8 En el diseño y desarrollo de un ACE se diferencian varias etapas: 1. Definir el objetivo o hipótesis del análisis de coste-efectividad Debe incluirse una descripción detallada de la intervención: – Características de la población a estudio, especificando claramente en qué grupo de pacientes son aplicables los resultados del análisis (edad, sexo, esperanza de vida en base a modelos poblacionales, etc.). – Horizonte temporal del análisis. Debe ser lo suficientemente largo para poder incluir todos los costes y consecuencias clínicas relacionados con la aplicación de una determinada TDI, incluyendo aquellas que se presenten a largo plazo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un periodo de diez años (los resultados deben ser monitorizados durante el resto de la vida del individuo)9. – Momento en que se realiza la TDI. – Se recomienda mencionar evaluaciones económicas previas para 2. Describir las alternativas diagnósticas a la TDI objeto del análisis Toda TDI debe ser inicialmente comparada con la posibilidad de no hacer nada. Una vez superado este análisis, debe compararse con otras alternativas diagnósticas, ciñéndose a las indicaciones aprobadas para una determinada TDI y sus alternativas. Cualquier variación en este sentido debe ser aclarada. 3. Aclarar la perspectiva desde la que se realiza el análisis La OMS recomienda emplear la perspectiva de la sociedad9, pero también se puede analizar desde la perspectiva individual o del “tercer pagador”, ya sea público (Administración y sistemas de Seguridad Social) o privado (compañías de seguros y familias). El empleo de la perspectiva social implica un análisis de costes complejo, al que se hará referencia en el apartado de costes. Entre otras características, un resultado debe ser relevante y validado por sí mismo, debe reflejar los beneficios a largo plazo y estar relacionado con el resultado final. La medida de un único resultado es menos confusa, pero se acepta la medida de múltiples resultados. El empleo de medidas de resultado ajustadas por calidad de vida (Quality-Adjusted Life Years [QALY]) implica un análisis de coste-utilidad que, si bien es aplicable, presenta importantes dificultades de diseño en el ámbito de la Radiología. 4. Definir el resultado o beneficio derivado de la aplicación de la TDI a estudio La OMS recomienda expresar la efectividad en términos de Disability-Adjusted Life Years (DALYs) o años vividos con discapacidad, aunque también acepta su expresión en QUALYs o Life Years (LYs) gained (años de vida ganados)12,13. La eficacia es la medida del beneficio en condiciones controladas, pero para Es requisito imprescindible que exista evidencia científica de la efectividad Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):191-8 Artigas Martín JM, et al. Estudios de coste-efectividad... – Finalmente, es aconsejable incluir una breve reseña sobre la historia natural de la enfermedad, incluyendo los parámetros más relevantes relacionados con nuestro análisis (supervivencia, esperanza de vida desde el diagnóstico, etc.). las decisiones sobre asignación de recursos sanitarios se requiere evidencia sobre beneficios en situaciones reales (efectividad). La efectividad debe reflejar los resultados del proceso diagnóstico que se está evaluando y es un dato que puede provenir de la literatura. La efectividad traduce un efecto sobre la salud, por lo que la precisión de una prueba diagnóstica (sensibilidad, especificidad, valor predictivo positivo o valor predictivo negativo) no se considera un resultado, debido a que la detección de patología no implica necesariamente mejoría en la salud del paciente. Aquí radica una de las dificultades fundamentales para el desarrollo y aplicación de los ACE en el ámbito de la Radiología diagnóstica, que produce mayoritariamente resultados intermedios (por ejemplo, número de casos detectados), siendo preferibles los resultados finales (por ejemplo, muertes prevenidas, días sin ingreso o años de vida ganados). Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología una determinada TDI, explicando la relevancia y el objetivo del nuevo ACE, siempre con cautela dado que la comparabilidad de estudios en materia de evaluaciones económicas en sanidad es siempre compleja y en muchos casos limitada10,11. 193 Artigas Martín JM, et al. Estudios de coste-efectividad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 194 de las TDI comparadas y reflejar explícitamente los resultados. El empleo de datos procedentes de la literatura científica es aceptable, pero es preciso evaluar previamente su relevancia (posibilidad de extrapolar dichos datos tanto a la población general como a nuestra muestra) y su calidad (grado de confianza de los resultados, directamente vinculado con el tipo de diseño y la ejecución del estudio). En los ACE de pruebas diagnósticas son mejores los estudios cruzados donde se compara la TDI a estudio con el estándar de referencia vigente. Pero, con frecuencia, no se dispone de información que permita medir la efectividad en términos de resultados finales, debiendo recurrir a modelos matemáticos que integran la información procedente de estudios diversos y establecen la relación entre variables intermedias y finales. 5. Identificar los costes Se deben identificar todos los costes relacionados con la TDI a estudio, definir los criterios de exclusión en función de la perspectiva del estudio y eliminar los costes poco significativos o presentes en ambos grupos. El método de análisis debe quedar claramente definido. La tendencia es a realizar un macroanálisis que, si bien es menos preciso que el detallado microanálisis, es más fácil de reproducir y generalizar. Los principales tipos de costes incluidos en los ACE son: – Coste neto directo de cada TDI: debe especificarse el valor, la fuente y la fecha del dato. – Costes indirectos: incluyen la pérdida de producción de bienes que ocasiona una enfermedad. La OMS Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):191-8 recomienda incluirlos, pero complican el análisis por lo que suelen excluirse. – Costes a largo plazo: mejora la calidad del estudio y su exclusión debe justificarse. Los costes secundarios (por ejemplo, complicaciones) y los costes intangibles (dolor, sufrimiento…) pueden ser prescindibles en un primer análisis. Como se mencionó previamente, la elección de una perspectiva social implica la inclusión de una serie de costes, generalmente indirectos, no considerados desde la perspectiva del sector público (por ejemplo, costes por productividad perdida o coste de oportunidad del tiempo de los familiares dedicado al cuidado del paciente). En los ACE en Radiología este tipo de costes se suele obviar. La OMS recomienda incluir los costes administrativos y los derivados del empleo de recursos para acceder a determinada TDI. Por el contrario, recomienda excluir los costes relacionados con la pérdida de productividad y los costes de la Administración central9. En los ACE en Radiología se ha extendido el uso de las Unidades Relativas de Valor (URV), como unidad de medida de actividad y costes asignados a cada una de las TDI incluidas en el catálogo de servicios14-17. 6. Descuento18-20 En ACE con horizontes temporales mayores a un año se deben considerar los principios de preferencias intertemporales. De acuerdo con las recomendaciones de la OMS, se deben ajustar los costes y los beneficios según el momento en que se producen. Esto se debe a que la preferencia temporal más extendida consiste en retra- n Σ t=0 Ci(t) (1+r)t 8. Resultados y análisis28 Donde VP (Ci) es el valor presente de los costes derivados de una TDI, Ci (t) representa los costes en un determinado periodo de tiempo (t) y r es la tasa de descuento. La OMS recomienda aplicar una tasa de descuento del 3%9. Los ACE deben permitir evaluar de manera crítica la validez de las estimaciones de coste y efectividad de las TDI estudiadas. Se unifican costes y beneficios en una fórmula que representa el valor de la intervención: 7. Ajuste de los resultados y análisis de la incertidumbre21-24 – Tasa cruda de CE por caso detectado: Efectividad TDI/coste TDI (debe ser superior a 1). Como queda dicho, existe acuerdo en la literatura sobre la necesidad de ajustar los costes mediante la aplicación de una tasa de descuento para analizar el valor real de dichos costes en el momento presente, pero el ajuste de los resultados derivados de la TDI (o beneficios) no goza del mismo nivel de consenso. Existe acuerdo en considerar que tanto costes como resultados o beneficios son una estimación y, como tal, debe realizarse un análisis de incertidumbre y presentar su sensibilidad y grado de confianza25. El análisis de la incertidumbre en los ACE puede hacerse utilizando dos grupos de técnicas: análisis de sensibilidad cualitativos y análisis estadísticos de la incertidumbre26,27. Sin entrar en detalles sobre el análisis estadístico que permite analizar la incertidumbre incorporada en el ACE, señalar únicamente que la influencia de la incertidumbre se incorpora a tra- – Efectividad TDI – coste TDI (debe tener saldo positivo). Las pruebas de mayor coste y menor efectividad pueden eliminarse de la comparativa. El paso siguiente es la realización de un ACE incremental, que indica el sobrecoste de cada caso detectado en comparación con la prueba inmediatamente más económica y evidencia dominancia fuerte, débil o extendida, permitiendo orientar la asignación de recursos y maximizando el beneficio obtenido por una población definida para un presupuesto determinado. Según la OMS, los informes derivados de los ACE deben proporcionar información suficiente como para permitir a analistas independientes y legisladores realizar una evaluación crítica de los costes estimados y la efectividad de las TDI estudiadas: documentación gráfica y numérica los ACE, tasas de Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):191-8 Artigas Martín JM, et al. Estudios de coste-efectividad... VP(Ci) = vés de la fórmula del valor esperado, que calcula el valor de la intervención multiplicando la probabilidad de que ocurra una cierta ganancia por el valor de esta. La OMS recomienda realizar análisis de sensibilidad con tasas de descuento entre el 0% (para los resultados) y el 6% (para los costes), para ver cómo las variaciones sobre las tasas de descuento influyen sobre el resultado final. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología sar lo máximo posible los costes y percibir lo antes posible los beneficios. Por este motivo, para analizar costes y beneficios conjuntamente, debemos ajustar su valor al mismo momento en el tiempo, lo cual se consigue mediante la aplicación de la siguiente fórmula matemática: 195 Artigas Martín JM, et al. Estudios de coste-efectividad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 196 coste-efectividad comparadas con la “no intervención”, realización de un ACE incremental e inclusión de un análisis de incertidumbre9. Los ACE asocian algunas limitaciones relevantes para la toma de decisiones y gestión sanitaria, debido a que las decisiones que de ellos se derivan no pueden fundamentarse exclusivamente en datos numéricos. Dadas dos alternativas diagnósticas, una puede ser más coste-efectiva, pero otra presentar una efectividad neta mayor, con lo que la elección dependerá del nivel de incremento presupuestario en que se esté dispuesto a incurrir para mejorar la efectividad. Generalmente se prefieren las TDI con mayor efectividad, pero la información sobre el aspecto económico que proporcionan los ACE debe tenerse en cuenta para una adecuada distribución de los recursos, en un planteamiento de coste de oportunidad. Al realizar una prueba diagnóstica a un paciente, se limita la probabilidad de aplicar esa prueba sobre otro paciente potencial. La elevada probabilidad de un resultado negativo o irrelevante en una TDI debería hacer pensar en otras alternativas tanto al médico prescriptor como al radiólogo que la admite y, eventualmente, realiza. La solución para este problema no pasa por aumentar la eficacia o efectividad, sino por la implantación y diseminación de sistemas de apoyo a la decisión clínica y, en su caso, el establecimiento de restricciones y medidas de racionamiento (ajuste de indicaciones, listas de espera…), para aquellas situaciones clínicas más frecuentes donde una determinada TDI no ha demostrado un beneficio neto. No obstante, es preciso tener en cuenta otros criterios, aparte de los resultados numéricos, que influyen en la toma de decisiones, como preferencias sociales, planteamientos de equidad, grado de descentralización de las decisiones o participación de los usuarios. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):191-8 Conclusiones Los conceptos de efectividad y costes deben ser integrados entre los argumentos del radiólogo para decidir la aplicación de una determinada TDI en un escenario clínico concreto, especialmente los más frecuentes. Los ACE aportan información relevante para incrementar la eficiencia de los algoritmos diagnósticos y pueden desarrollarse mediante una metodología básica. Los Servicios de Radiología deberían familiarizarse con este tipo de estudios y fomentar la infraestructura necesaria para su desarrollo. Aunque los ACE no reflejan todos los elementos que influyen en la toma de decisiones en sanidad, proporcionan una información crucial para la asignación de recursos sanitarios. Bibliografía 1. Smith-Bindman R, Miglioretti DL, Larson EB. Rising use of diagnostic medical imaging in a large integrated health system. Health Aff (Millwood). 2008;27:1491-502. 2. America’s Health Insurance Plans. Ensuring Quality through Appropriate Use of Diagnostic Imaging. Washington, DC: America’s Health Insurance Plans; 2008. 3. Murray CJ, Evans DB, Acharya A, Baltussen RM. Development of WHO guidelines on generalized cost-effectiveness analysis. Health Econ. 2000;9(3):235-51. 4. Sistrom CL. The Appropriateness of Imaging: A Comprehensive Conceptual Framework. Radiology. 2009;251(3):637-49. 7. Drummond MF, O’Brien BJ, Stoddart GL, Torrance GW. Methods for the economic evaluation of health care programmes. Oxford University Press; 1997. 8. Drummond M, McGuire A. Economic evaluation in health care. 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Se consideran aquellas cuyo resultado no contribuye a modificar la conducta diagnóstico-terapéutica del médico, y son identificadas utilizando la aplicación informática del Servicio de Radiodiagnóstico (RIS). – Cálculo de los costes totales multiplicado el número de radiografías innecesarias por un valor estándar tomado como referencia. – Diseño y desarrollo de una estrategia de intervención basada en la formación de los médicos que más las solicitan y en la información al paciente sobre sus posibles efectos adversos. – Cálculo de las radiografías innecesarias realizadas tras la estrategia de intervención comparando con el número realizado para el mismo periodo de tiempo de los dos años anteriores. Resultados: El total de radiografías innecesarias solicitadas en nuestro hospital (población referencia de 50 000 habitantes) durante el periodo de estudio fue de 7544 placas que multiplicado por el valor estándar tomado para cada radiografía (26,91 euros), supuso un coste económico total de 203 009 euros. El número total de radiografías innecesarias disminuyó alrededor de un 30% con respecto a los años anteriores tras la realización de la estrategia de intervención. La mayor reducción se produjo en las radiografías de abdomen en bipedestaGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 1 199 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... ción, que disminuyó un 52%. Otras disminuciones significativas se produjeron en las radiografías de cráneo (48%), parrilla costal (42%) y senos paranasales (24,5%). Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Objective: To investigate the unnecessary x-rays costs, calculate potential cost savings related to their elimination and analyze the cost avoidance resulting from an intervention strategy. 200 Conclusiones: Este estudio pone de manifiesto el elevado número de radiografías innecesarias que se realizan, así como el posible ahorro económico y beneficio para el paciente generados si no se llevasen a cabo. La formación a los facultativos peticionarios y la información a los pacientes han demostrado la reducción en la realización de radiografías innecesarias, contribuyendo así a la mejor utilización de los recursos sanitarios. Palabras clave: Radiografías; Pruebas innecesarias; Gasto sanitario; Optimización. Cost-benefit analysis of unnecesary x-rays carried out in a radiology department Abstract Material and methods: – Determination of unnecessary radiographs performed during the study period (1/01/2010-1/01/2012) considering those whose findings do not modify the diagnostic-therapeutic approach. They were identified using the radiology department information system (RIS). – Calculation of total costs multiplying the number of unnecessary radiographs by a standard price taken as reference. – Design and development of a multiple intervention strategy based on educational activities focused on physicians who requested more tests and giving information to patients about the possible adverse effects. – Estimation of unnecessary radiographs carried out after the intervention strategy and comparison with the previously obtained results. Results: During the study period the number of unnecessary radiographs requested by physicians in our hospital (with a 50,000 patients reference population) was 7,544, which multiplied by the standard value (26.91 euros), gives a total economic cost of 203,009 euros. After the intervention strategy the average reduction in total number of unnecessary rx was almost 30%. Abdominal standing rx number reduction was 52%. Other significant results were obtained for skull rx (48%), rib cage (42%) and sinus (24.5%). Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 Key words: Radiography; Unnecessary procedures; Health Services Misuse; Health care costs. Introducción El momento económico actual y las medidas de contención del gasto en sanidad están dificultando la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS). La búsqueda de soluciones desde las instancias políticas requiere la implicación de profesionales y ciudadanos que participen con el uso racional de los recursos sanitarios. Antes de adoptar medidas que ocasionen una disminución en la calidad asistencial, deberían plantearse otras opciones, como la eliminación de procedimientos innecesarios, tanto diagnósticos como terapéuticos, altamente utilizados en la práctica médica habitual y extremadamente costosos para nuestro sistema, no solo en términos económicos sino también por los riesgos derivados de los mismos. La Organización Mundial de la Salud calcula que el 30% de los procedimientos sanitarios que se aplican en el mundo son inoperantes. Las técnicas de imagen y los Servicios de Radiodiagnóstico suponen un alto porcentaje del gasto sanitario. En España se realizan entre 800-1000 pruebas radiológicas al año por cada 1000 habitantes (aproximadamente prueba por persona al año). En 2008 se estimaba que un tercio de las mismas eran inadecuadas. Este trabajo se centra en las radiografías, la prueba de imagen más barata pero también la mas utilizada. Al igual que con otras técnicas diagnósticas, se hace un uso abusivo de las mismas, no contribuyendo en muchos casos a modificar la conducta diagnóstico-terapéutica del médico. Los objetivos de nuestro trabajo son: 1. Revisar la evidencia científica disponible sobre la utilidad de las radiografías consideradas “innecesarias” en las diferentes situaciones clínicas. 2. Analizar los recursos y los costes empleados en la realización de estas radiografías. Estimar el ahorro económico potencial si no se solicitaran estas exploraciones. 3. Analizar la reducción de estas peticiones que se genera tras una estrategia de intervención basada en la formación de los médicos que más las solicitan y la información al paciente sobre sus efectos adversos. Material y métodos Ámbito de actuación Este estudio se ha llevado a cabo en el Hospital Santos Reyes de Aranda de Duero. Es un hospital comarcal que da cobertura a cinco zonas básicas de sa- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... The physicians training and information to patients has shown a reduction in unnecessary X-rays contributing to a better use of health resources. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Conclusions: This study shows the high number of unnecessary radiographs performed in a radiology department and the potential cost savings and benefit to patients generated if they were eliminated. 201 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 202 lud y que atiende a una población de 50 306 habitantes. Este hospital se considera el entorno ideal para realizar este estudio por los siguientes motivos: – Todos los radiólogos informan parte de la Radiología convencional, lo que ha permitido adquirir conciencia del elevado número de placas que se informaban de las consideradas clásicamente como innecesarias. – Fácil accesibilidad al personal médico y al resto de profesionales por tratarse de un hospital pequeño, lo que ha facilitado tanto la organización como realización de la estrategia de intervención. – Por otro lado, este hospital está digitalizado, ya que dispone desde el año 2009 del sistema de información radiológica (RIS), lo que nos ha permitido realizar la búsqueda de las radiografías innecesarias según los criterios establecidos. Determinación de las radiografías consideradas innecesarias Se han considerado radiografías innecesarias todas aquellas cuyo resultado (positivo o negativo) no contribuye a modificar la conducta diagnóstico-terapéutica del médico o a confirmar el diagnóstico, ya que el beneficio de un diagnóstico radica en que el resultado de la prueba cambie la decisión que se tomaría sin la realización de la misma. En este estudio no se han considerado las radiografías innecesarias que lo son por otros motivos: repetición de radiografías que ya se han realizado, solicitud de radiografías con demasiada frecuencia para un mismo proceso clínico y solicitud de más proyecciones Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 de las necesarias para la realización del diagnóstico. Muchas de estas podrían evitarse aportando información clínica en el volante de petición. Las radiografías innecesarias consideradas en este estudio son las siguientes: – Radiografías de cráneo en casos de traumatismo. – Radiografías de senos paranasales para el diagnóstico de sinusitis. – Parrillas costales en pacientes con traumatismo y dolor costal. – Radiografías de coxis en pacientes con coxigodinia. – Radiografías de columna lumbar en pacientes jóvenes con lumbalgia aguda. – Radiografías de tobillo ante un esguince. – Radiografías de huesos propios en el traumatismo nasal. – Radiografías de abdomen en bipedestación en pacientes sin sospecha de obstrucción. Otras radiografías que no han demostrado utilidad clínica y que no se incluyen en el estudio son la radiografía de columna cervical en pacientes conscientes y sin dolor tras un traumatismo, la radiografía de calcáneo en la fascitis plantar y la de tórax preoperatoria en pacientes menores de 60 años sin antecedentes de enfermedad cardiopulmonar. El número total de radiografías innecesarias llevadas a cabo en este Servicio de Radiodiagnóstico se ha obtenido a partir de los datos de la aplicación informática RIS utilizando el filtro de Radiografías de cráneo se consideraron las que provenían de Urgencias y Atención Primaria, ya que las procedentes de otros servicios podrían formar parte de series óseas de hematología para el estudio del mieloma o Mención especial merecen las radiografías de tobillo, columna lumbar y abdomen en bipedestación ya que, aunque seamos conscientes del abuso que se hace de ellas y de que se piden de manera rutinaria en muchas ocasiones, existen situaciones en las que sí están indicadas: – Radiografía de abdomen en bipedestación cuando exista sospecha clínica de obstrucción y dudas diagnósticas con la proyección anteroposterior (AP). Figura 1. Forma de obtención del número total de radiografías innecesarias (flecha naranja) ayudados por el sistema informático RIS. Utilizamos el filtro de código del estudio, en este caso rx de senos paranasales (flecha azul) y seleccionamos por fecha las realizadas del 1/01/2010 al 1/01/2012 (flecha roja). Después hemos utilizado el filtro de servicio peticionario para determinar el porcentaje de radiografías solicitado por cada servicio (flecha amarilla) Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... En el caso de las radiografías de senos paranasales, huesos propios, coxis y parrilla costal, se consideraron todas las realizadas en el cómputo final. de Pediatría en caso de sospecha de malos tratos o traumatismo leve, en los que sí estaría indicada la realización de este tipo de radiografía. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología código del estudio y seleccionando por fecha las realizadas del 1/01/2010 al 1/01/2012. Después, se ha utilizado el filtro de Servicio peticionario para determinar el porcentaje de radiografías solicitado por cada servicio (Figura 1). 203 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 204 – Radiografía de tobillo en traumatismo agudo cuando se cumplan los criterios de Ottawa. – Radiografía de columna lumbar cuando el paciente presente lumbalgia con signos de alarma. En el cómputo final se han considerado todas ellas como innecesarias, salvo las que fueron diagnosticadas de una patología para la que sí están indicadas, es decir, las que tuvieron hallazgos positivos. De modo que revisamos las obstrucciones intestinales, las fracturas de tobillo y la patología de columna lumbar que se habían diagnosticado en el hospital en los dos años en los que se realizó el estudio y restamos ese número al total. En el caso de las radiografías de tobillo, se consideraron solo las realizadas por el Servicio de Urgencias, que es donde fundamentalmente se atienden los traumatismos agudos-esguinces, no incluyendo las que provenían de Atención Primaria y otros Servicios porque parte de esas solicitudes podían corresponder a patología crónica. En la radiografía de columna lumbar se introdujo un nuevo filtro que fue la edad, ya que en pacientes <20 años y >55 años la edad es un signo de alarma que podemos controlar con el sistema informático. Por ello, solo se consideraron las realizadas a pacientes entre 20 y 55 años. Existe la posibilidad de que, en algunos casos, los médicos hayan solicitado estas pruebas sobre la base de una sospecha clínica fundamentada y que, en cambio, no hayan aparecido hallazgos positivos en la radiografía: pacientes que hayan cumplido los criterios de Ottawa en el caso del tobillo, hayan tenido signos de alarma diferentes a la edad en el caso de la columna o en los Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 que con sospecha de obstrucción intestinal persistieran dudas diagnósticas tras la proyección AP en el caso del abdomen en bipedestación, lo cual podría dar lugar a una sobrestimación en la cuantificación de estas tres pruebas. Cuantificación de los costes Se consideran los costes en términos monetarios, aunque es indudable que el principal beneficio de la disminución de estas pruebas innecesarias es la reducción de los posibles riesgos derivados de la exposición de los pacientes a radiaciones ionizantes. Además, esto puede originar falsas expectativas en los pacientes basadas en el posible resultado del examen, ocasiona la pérdida de su tiempo y favorece la denominada “cascada clínica”, es decir, que la realización de una radiografía innecesaria puede dar lugar a la aparición de falsos positivos que conlleven más pruebas, con el consecuente aumento del riesgo derivado de la exposición. De hecho, la solicitud de radiografías innecesarias incumple lo establecido en los Reales Decretos 1976/1999 y 815/2001, según los cuales toda prueba radiológica debe estar justificada. Precio de cada radiografía Se ha tomado como valor estándar para todas las radiografías el precio de la radiografía de tórax en Castilla y León (publicado en el BOCYL, de 17 de junio de 2010 [Figura 2], por el que se actualizan los precios públicos por actos asistenciales y servicios sanitarios prestados por la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León a pacientes no beneficiarios de la seguridad social o cuando existan terceros obligados al pago). El precio de una radiografía de tórax es de 26,91 euros (el mismo que el de una radiografía de cráneo o senos y similar al de Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... una radiografía de huesos propios [22 euros] o de columna [33 euros]), por lo que se ha utilizado este como valor de referencia para el cálculo de los costes totales. Aunque todas las autonomías tienen establecidas unas tarifas de facturación para los servicios sanitarios publicadas en sus boletines oficiales y que varían de unas a otras, se han considerado las fijadas por la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León, por ser las de nuestra comunidad y por considerar en el precio de las pruebas todos los costes: gastos de personal sanitario, mantenimiento de equipos, electricidad y generales del hospital: amortización del inmueble o los gastos del personal de Administración (Figura 3). Cálculo de los costes totales Se ha multiplicado el número de radiografías innecesarias por el precio tomado como referencia. Estrategia de intervención Con el fin de disminuir la realización de radiografías innecesarias, se llevó a cabo una estrategia de intervención dirigida a los médicos peticionarios y a Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Figura 2. BOCYL del 17 de junio del 2010 por el que se actualizan los precios públicos por actos asistenciales y servicios sanitarios prestados por la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León a pacientes no beneficiarios de la Seguridad Social o cuando existan terceros obligados al pago. En él se establece que el valor de una radiografía de tórax es de 26,91 euros (círculo rojo), este es el precio que utilizamos como estándar para el cálculo del coste de una radiografía 205 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 206 Figura 3. Desglose proporcionado por la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León con los gastos derivados de la realización de una radiografía de tórax, el total es de 22,46 euros, este documento se realizó en el año 2005, y los precios fueron actualizados en 2010 con la consecuente subida del IPC, que es lo que deja el precio final en 26,91 (valor que hemos establecido) los pacientes que, en muchas ocasiones, son demandantes de este tipo de pruebas. Sesión formativa a los facultativos En primer lugar, se organizó una sesión formativa los días 22 y 23 de febrero de 2012 a través del sistema de formación continuada para los profesionales sanitarios en Castilla y León (FOSA), que iba dirigida a los principales peticionarios de estas radiografías: médicos de atención primaria (MAP) y médicos de Urgencias (Figura 4). La charla consistía en mostrar los protocolos de actuación en las diferentes Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 situaciones clínicas para las que se realizan estas radiografías, justificando los motivos por los que no están indicadas. Además, se mostraron diapositivas con la pantalla de la aplicación informática RIS filtrando por Servicio peticionario para que comprobaran el alto número de radiografías innecesarias que se había solicitado desde cada Servicio en los dos últimos años (Figura 1). Los resultados fueron expuestos en tres grupos: Atención Primaria, Urgencias y Otros. Finalmente, se mostró el coste económico del total de radiografías innecesarias y en términos de coste-oportunidad. Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... Aunque los argumentos que evidencian la inutilidad de estas radiografías han cambiado poco en los últimos 30 años, se utilizaron como sustento guías actualizadas dirigidas a médicos que prescriben pruebas radiológicas, cuyo objetivo es ajustar las modalidades diagnósticas al problema clínico. Información a los pacientes De forma consensuada con los médicos de Urgencias y Atención Primaria, se distribuyó un documento con las equivalencias entre la dosis efectiva de algunos estudios radiológicos con el número equivalente de radiografías de tórax y con el periodo equivalente de tiempo de exposición a radiación natural (Tabla 1). Estos documentos fueron colocados en las salas de espera de Urgencias y de los centros de salud. Con esta propuesta se pretendía informar al paciente del efecto nocivo de las radiaciones ionizantes que, por otro lado, es nuestra responsabilidad y su derecho, y así disminuir las radiografías innecesarias que se realizan por la presión social a los facultativos. Estimación del beneficio El cálculo del beneficio era en apariencia lo más sencillo, ya que se tiende a considerar que el beneficio de realizar una radiografía innecesaria, en términos económicos, es nulo y, en términos sanitarios, es negativo para la salud del paciente, pero en la práctica Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Figura 4. Imagen del sistema de formación continuada para los profesionales sanitarios en castilla y león (FOSA) donde se muestra la charla formativa que impartimos los días 22 y 23 de febrero del 2012 dirigida fundamentalmente a los médicos de urgencias y Atención Primaria 207 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 208 habitual de Atención Primaria y Urgencias interfieren otros muchos factores además del puramente científico, que son discutibles y hacen que pueda ser coste-efectivo solicitar una radiografía innecesaria. De hecho, este asunto fue el que generó más polémica en las charlas formativas. El motivo por el que se solicitan no es solo el desconocimiento del médico, ya que pueden influir otros factores como la medicina defensiva, la presión social o el posible efecto placebo de la realización de la radiografía. En general, está aceptado entre la población que para una atención adecuada y completa es necesaria la realización de técnicas de imagen, por lo que en situaciones específicas y con determinados pacientes, la realización de radiografías innecesarias también puede ser costeefectiva, al evitar segundas consultas en pacientes no satisfechos con la atención recibida. Lógicamente, determinar cuántas de esas placas han sido beneficiosas no es posible, por lo que se ha de considerar que el beneficio económico de estas radiografías ha sido cero. Resultados (Figuras 5-7) A continuación se muestra el desglose de las radiografías innecesarias consideradas: – Senos paranasales: 1246. – Huesos propios: 320. Figura 5. Gráficas que muestran el número total de las diferentes radiografías innecesarias solicitadas en nuestro hospital durante el periodo de estudio y su distribución por servicios. Los resultados fueron mostrados en tres grupos: Atención primaria (color rojo), Urgencias (azul) y otros servicios (verde) Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... – Parrilla costal: 1559. – Coxis: 111. – Cráneo: 631 (se han restado del total [657] 26 placas provenientes de otros Servicios diferentes de Urgencias y Atención Primaria por los motivos aclarados anteriormente). – Abdomen en bipedestación: 949. Del total (1270) se incluyen todos menos los casos ingresados por obstrucción intestinal (321). – Columna lumbar: 1279. Se han considerado las de Atención Primaria realizadas a pacientes entre 20 y 55 años (1320), restando aquellos que con ese rango de edad habían in- gresado por fractura, tumor o espondilodiscitis (41), que son las tres patologías cuya sospecha en base a los signos de alarma obliga a la realización de esta radiografía. – Tobillo: 1449. Se tienen en cuenta las realizadas por Urgencias (1625) menos las diagnosticadas de fractura de tobillo entre hospitalizados y los que pasaron a consulta externa (176). El total de radiografías innecesarias solicitadas en nuestro hospital durante el periodo de estudio fue de 7544 placas, que multiplicado por el valor estándar estimado para cada radiografía, 26,91 euros, supuso un coste económico total de 203 009 euros. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Figura 6. Gráficas que muestran el número total de las diferentes radiografías innecesarias solicitadas en nuestro hospital durante el periodo de estudio y su distribución por servicios. Los resultados fueron mostrados en tres grupos: Atención primaria (color rojo), Urgencias (azul) y otros servicios (verde) 209 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 210 Figura 7. Gráfica que muestra los resultados derivados de la estrategia de intervención. Se expone el número de las diferentes radiografías innecesarias y la suma de todas ellas realizadas durante los tres meses posteriores a la sesión formativa (febrero-mayo de 2012) comparados con el mismo periodo de tiempo de los años 2010 y 2011 De ellas, 5207 procedían del Servicio de Urgencias (69%), 1356 de Atención Primaria (18%) y 981 de otros Servicios (13%). Estos resultados también fueron mostrados en la charla formativa en términos de coste-oportunidad con el fin de concienciar a los facultativos, mostrando lo que se podría haber hecho con ese dinero si no se hubiese malgastado en radiografías innecesarias. Se establecieron las equivalencias del potencial ahorro económico con necesidades expresadas por los diferentes servicios de este hospital. El coste económico total de 203 000 euros equivale a cada una de las siguientes tecnologías sanitarias: Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 – Un mamógrafo digital (principal necesidad actual del Servicio de Radiodiagnóstico de nuestro hospital). – Una sala de Radiología convencional. – Tres ecógrafos de gama alta. – Ocho ecógrafos portátiles. – Cinco torres de artroscopia. – Tres torres de laparoscopia quirúrgica. – Diez y seis colonoscopios. – Diez y ocho desfibriladores bifásicos. – Cinco estaciones de anestesia. La valoración de la indicación de las pruebas y la gestión de los recursos por parte del radiólogo, así como el establecimiento de criterios consensuados mediante protocolos y guías basados en la evidencia científica, pueden ayudar a mejorar la calidad y la efectividad de la asistencia sanitaria y a reducir costes innecesarios. – Cinco incubadoras de transporte. A los tres meses de la sesión formativa, se evaluaron los resultados obtenidos con la estrategia de intervención y estos fueron comparados con el número de radiografías innecesarias para el mismo periodo de tiempo de los años 2010 y 2011. El número total de radiografías innecesarias disminuyó en torno a un 30% con respecto a los años anteriores. La mayor reducción se produjo en las radiografías de abdomen en bipedestación, que disminuyó un 52%. También fueron significativas en cráneo (48%), parrilla costal (42%), senos paranasales (24,5%) y columna lumbar (23,2%). Al año de la sesión formativa se volvió a repetir el mismo procedimiento con los datos de un año natural (del 1 de marzo de 2012 al 1 de marzo de 2013), persistiendo la disminución en el número de peticiones de la totalidad de las radiografías consideradas, objetivando disminuciones de entorno a un 50% en la radiografía de cráneo y parrilla costal, 36% en el abdomen en bipedestación y 30% en la radiografía de senos paranasales Discusión Este estudio pone de manifiesto el elevado número de pruebas innecesarias que se realizan y el posible ahorro económico y beneficio para el paciente que se generaría si no se llevasen a cabo. El impacto económico sería mucho mayor si los resultados se extrapolasen al conjunto de todos los hospitales del SNS y si se consideraran otros La formación a los facultativos peticionarios, así como la información a los pacientes, ha demostrado la reducción en la realización de pruebas innecesarias, contribuyendo así a la mejor utilización de los recursos sanitarios La principal limitación encontrada es la posible sobrestimación derivada de las radiografías cuya indicación atiende a las recomendaciones de las guías clínicas, fundamentalmente tobillo y columna, donde no se ha supervisado la anamnesis del paciente (únicamente consideramos la edad en el caso de la columna), computando como innecesarias aquellas que no presentaron hallazgos positivos en la radiografía. Además, debe tenerse en cuenta que en la estimación del ahorro potencial con la eliminación de las radiografías innecesarias se han incluido los costes totales, variables y fijos, no modificándose estos últimos de forma significativa con la actividad que se realiza. Bibliografía recomendada – Abrams HL. The overutilization of x-rays: Sounding Board. N Engl J Med. 1979;300:1213-6. – Appropriateness Criteria. Diagnostic Imaging Topics. American College of Radiology [en línea] [consultado el 26/05/2013]. Disponible en: Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... procedimientos innecesarios, tanto diagnósticos como terapéuticos. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología – Setenta y ocho monitores de constantes vitales. 211 Sánchez Hernández J, et al. Análisis coste-beneficio ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 212 http://www.acr.org/Quality-Safety/ Appropriateness-Criteria/Diagnos tic – Hall F. Overutilization of radiological examinations. Radiology. 1976; 120:443-8. – Castilla y León. Decreto 25/2010, de 17 de junio, por el que se actualizan los precios públicos por actos asistenciales y servicios sanitarios prestados por la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León. Boletín Oficial de Castilla y León, 17 de junio del 2010, núm 119, p. 49646. – Helms CA. Fundamentos de radiología del esqueleto. Marbán Libros; 1993. p. 1-6. – Diagnostic Imaging Pathways. Government of Westhern Australia. Department of Health [en línea] [consultado el 26/05/2013]. Disponible en: http://www.imagingpath ways.health.wa.gov.au/ Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):199-212 – Referral guidelines for imaging. Radiation Protection 118. European Commission. Directorate General for the Environment. 2000 [en línea] [consultado el 26/05/2013]. Disponible en: http://ec.europa.eu/ener gy/nuclear/radioprotection/publi cation/doc/118_en.pdf Racionalización de la solicitud de radiografías de abdomen en el Servicio de Urgencias de un Hospital Comarcal Resumen Objetivo: Exponer las acciones realizadas desde el Servicio de Radiología de nuestro hospital a fin de racionalizar la solicitud de radiografías abdominales convencionales demandadas desde el Servicio de Urgencias, con especial atención a la radiografía de abdomen en bipedestación, y mostrar los resultados obtenidos. Métodos: Tras analizar el número y distribución de las peticiones de radiografías convencionales abdominales desde el Servicio de Urgencias, y su proceso de solicitud, se objetivó la realización de una considerable cantidad de radiografías de abdomen en bipedestación, la mayoría no justificadas y con escaso beneficio diagnóstico. Con el objetivo de racionalizar esta demanda se decidió emprender cuatro acciones: 1.Comunicación oral e insistente respecto al tema con los facultativos implicados, aprovechando la relación laboral diaria. 2.Implicación de las Jefaturas de los Servicios de Urgencias y Cirugía. 3.Modificación del petitorio de pruebas, cuyo diseño favorecía dicha petición, y solicitud de modificación de la nomenclatura y codificación de las pruebas radiológicas abdominales en el Catálogo de Exploraciones de la SERAM, al ser el modelo tomado como referencia. 4.Impartición de sesiones formativas e informativas con el fin de, mediante la docencia, justificar el objetivo pretendido. Resultados: En el periodo de dos años se redujo muy significativamente el número de radiografías de abdomen en bipedestación realizadas en nuestro hospital. Conclusiones: Es posible, mediante acciones lideradas desde un Servicio de Radiología, racionalizar la demanda de exploraciones poco útiles, lo que beneficia tanto a pacientes como al propio hospital, contribuyendo a pequeña escala a la sostenibilidad del Sistema Sanitario Público. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Jordi Català Forteza. Català Forteza J Hospital General de L’Hospitalet de Llobregat-Consorci Sanitari Integral. L’Hospitalet de Llobregat, Barcelona. Dirección para correspondencia: [email protected] 213 Català Forteza J. Racionalización de la solicitud... Palabras clave: Radiografía abdominal; Urgencias; Radiografía de abdomen en bipedestación. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 1.Oral and insistent communication on the issue with the staff involved, using the daily working relationship; 2.involvement of the Emergency and Surgery Departments headquarters; 3.modification of the petitionary of radiological exams whose design favored that application, and request for modification of the nomenclature and coding of abdominal radiological exams of the Catalog of Explorations SERAM to be taken as a reference model; 4.Impartation of formative and informative sessions in order to, through teaching, to justify the intended purpose. 214 Rationalizing abdominal radiography application in the Emergency Department of a Community Hospital Abstract Objective: Exposing the actions taken from the Department of Radiology of our hospital in order to rationalize the application of conventional abdominal radiographs demanded from the Emergency Department, with a focus on abdominal radiography in the standing position, and display the results. Methods: After analyzing the number and distribution of applications for abdominal radiographs from the Emergency Department, and the application process, we observed the realization of a considerable amount of erect abdominal radiographs, most with little unjustified and diagnostic benefit. In order to rationalize this claim was decided to undertake four actions: Results: In the period of two years the number of erect abdominal radiographs ordered by the Emergency Department was dramatically decreased. Conclusions: It is possible by actions led from Radiology Department to rationalize the demand of unhelpful exams, benefiting both patients and the hospital itself, contributing a small-scale to the sustainability of public health system. Key words: Abdominal radiography; Emergency; Erect abdominal radiography. Introducción A finales del año 2009, a raíz de un proyecto de mejora del Servicio de Urgencias de nuestro hospital, se pidió al Servicio de Diagnóstico por la Imagen que aportásemos ideas para mejorar el flujo de trabajo entre ambos. Aprovechando la circunstancia, consensuamos empezar por evitar la realización de exploraciones innecesarias, ya que Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 ello podía suponer un triple beneficio: agilización en la realización de las exploraciones correctamente indicadas, disminución de la radiación innecesaria infligida a la población y ahorro económico. Decidimos comenzar a trabajar sobre las radiografías de abdomen, ya que desde nuestro Servicio teníamos la impresión de que se solicitaban en exce- Método En primer lugar se analizó retrospectivamente el número y distribución de las solicitudes de radiografías convencionales abdominales emitidas desde el Servicio de Urgencias durante el año 2009. Durante ese periodo se realizaron 7347 radiografías de abdomen, de las cuales 4379 (59,6%) fueron en decúbito supino y 2968 (40,4%) en bipedestación. Revisamos el circuito de solicitud de radiografías abdominales desde Urgencias, que consistía en un proceso informático por el cual el médico prescriptor solicitaba la exploración desde su ordenador, escogiendo la prueba de entre las del petitorio de Diagnóstico por imagen. En el caso de las radiografías abdominales, existían dos posibilidades: a.Abdomen anteroposterior (AP). b.Abdomen decúbito-bípedo. Sobre esta base se decidió emprender cuatro acciones: 1.Comunicación verbal e insistente respecto al tema con los facultativos implicados, aprovechando la relación laboral diaria. Y así el personal médico del Servicio de Radiología aprovechaba las interconsultas, comités, sesiones, presentación de nuevos facultativos o las rotaciones de los médicos internos residentes (MIR) para recordar las indicaciones adecuadas en cuanto a la solicitud de radiografías abdominales. 2.Implicación de las Jefaturas de los Servicios de Urgencias y Cirugía, al ser estos últimos los especialistas más demandantes de la radiografía de abdomen en bipedestación, con el 73% del total de peticiones, relacionado con la atención de pacientes con sospecha de oclusión intestinal. Se habló directamente con los Jefes de estos dos Servicios para que concienciasen a su personal en la necesidad de realizar las solicitudes adecuadamente, y solo en aquellos casos en los que se considerase beneficiosa la realización de esas exploraciones complementarias, en un intento de abandonar progresivamente prácticas costumbristas o rutinarias pero difícilmente justificables. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 Català Forteza J. Racionalización de la solicitud... Se analizó retrospectivamente el número y tipo de radiografías abdominales realizadas en 2009, se revisó el circuito de solicitud de las mismas y se preguntó a los facultativos solicitantes los motivos de sus peticiones. Conociendo esta información, se decidieron varias acciones de mejora con el objetivo de conseguir reducir el número de radiografías abdominales innecesarias solicitadas desde el Servicio de Urgencias, realizando un seguimiento prospectivo durante un periodo de dos años. Se preguntó a los facultativos los motivos por los que solicitaban la opción b y concretamente por qué requerían la proyección en bipedestación. Las contestaciones fueron diversas: “Marcando una sola opción tenemos dos proyecciones”, “Me lo han enseñado así” o “siempre lo hacen así” o “por costumbre”, “en las sospechas de perforación, para ver neumoperitoneo”, “en las sospechas de oclusión, para ver niveles”. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología so y con escasa justificación, con especial énfasis en la radiografía de abdomen en bipedestación, exploración que, clásicamente, desde los Servicios de Radiología, se ha considerado de escasa utilidad por diferentes razones. 215 Català Forteza J. Racionalización de la solicitud... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 216 favorecía la solicitud de las dos proyecciones, pero además consideramos que la terminología era poco precisa e incluso proclive a la confusión. El vocablo «simple» y el término AP, en realidad no nos orientan sobre la posición en la que deseamos realizar la prueba. De hecho «simple» no indica nada y ambas proyecciones (decúbito y bipedestación) son AP, pues en las dos la dirección del haz de rayos es anteroposterior. Consideramos más correctas las siguientes opciones y por separado: Estas dos primeras acciones se empezaron a llevar a cabo al inicio de 2010. 3.Modificación de nuestro petitorio de pruebas y solicitud de modificación de la nomenclatura y codificación de las pruebas radiológicas abdominales en el Catálogo de Exploraciones de la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM) al ser el modelo tomado como referencia. Detectamos que nuestro diseño de petitorio utilizaba una nomenclatura confusa debido a que tanto la proyección en decúbito supino como en bipedestación son proyecciones de “abdomen AP”(AP: anteroposterior, que indica la dirección en que el haz de rayos X incide sobre el cuerpo del paciente), aunque se utilizaba esta opción para solicitar una radiografía en decúbito supino, e impedía solicitar aisladamente la radiografía de abdomen en bipedestación, a menos que se indicase específicamente en la casilla de información para el técnico de radiodiagnóstico, corriendo el riesgo de volver a repetir la proyección en decúbito supino si primero se solicitaba la opción a y más tarde la opción b. Esto provocaba que habitualmente solicitasen directamente la opción b, que incluía las dos proyecciones. Asimismo, nos dimos cuenta de que la nomenclatura de las pruebas radiológicas abdominales había sido extraída tomando como referencia el Catálogo de Exploraciones de la SERAM, donde constan las siguientes dos opciones: –Abdomen simple AP. –Abdomen simple y decúbito o bipe. Decidimos que era conveniente modificar esta nomenclatura, pues Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 –Abdomen decúbito supino. –Abdomen bipedestación. Y además pensamos que si esto ocurría en nuestro hospital, también era posible que ocurriese en otros centros a nivel nacional, por lo que solicitamos la revisión de la nomenclatura del Catálogo a la SERAM aludiendo los motivos aquí expuestos, recibiendo como respuesta el compromiso de exponerlo en las futuras reuniones para la revisión del Catálogo, pues la petición parecía razonable. La modificación del petitorio, dependiente del Servicio de Informática, no se llevó a cabo hasta el mes de noviembre de 2010. La solicitud de revisión del Catálogo de Exploraciones de la SERAM se realizó en septiembre de 2010, recibiendo respuesta por parte del Presidente de la Comisión del Catálogo en octubre de 2010. 4.Impartición de una sesión general en el hospital específica sobre este tema con el fin de, mediante la docencia, justificar el objetivo pretendido. En ella explicamos en que consiste la radiografía de abdomen en bipedestación, la radiación que –La mayoría de las veces en las que la radiografía de abdomen en bipedestación es patológica o normal, la proyección en decúbito supino también lo es. –La única indicación de la proyección en bipedestación es ante la sospecha de oclusión intestinal y la proyección en decúbito supino no es concluyente. Esto generalmente sucede en el caso de escasa presencia de gas dentro de las asas y abundante líquido en su interior, lo que impide su visualización en la proyección en decúbito supino. –La exploración a realizar ante la sospecha de neumoperitoneo es la radiografía de tórax en bipedestación, y si existe imposibilidad para la bipedestación del paciente, se realizará una radiografía de abdomen en decúbito lateral izquierdo con rayo horizontal. La sesión general del hospital se realizó en octubre de 2010. Tras la implementación de dichas acciones, analizamos su repercusión en los dos años siguientes al inicio del proyecto. El análisis numérico mostró que durante el año 2010 el Servicio de Urgencias solicitó 5176 radiografías de abdomen, de las cuales 3581 (69,2%) fueron en decúbito supino y 1595 (30,8%) en bipedestación. Por lo tanto, la reducción respecto a 2009 fue del 29,5% en cuanto al total de radiografías, con una reducción del 18,2% de la proyección en decúbito supino y una reducción del 46,2% de la proyección en bipedestación. En el año 2011, el total de radiografías solicitadas por el Servicio de Urgencias fue de 3593, un 48,9% menos que en 2009, de las cuales 3179 (88,5%) fueron en decúbito supino y 414 (11,4%) en bipedestación. Así pues, respecto a 2009 la reducción de la proyección en decúbito supino fue del 27,4% y la reducción de la proyección en bipedestación del 86%. Se pasó de una media mensual en el año 2009 de 247 radiografías de abdomen en bipedestación solicitadas por el Servicio de Urgencias con un rango de [223-314] a una media mensual en el año 2011 de 34 con un rango de [1451] (figuras 1-3). Discusión Una de las principales prioridades que debería plantearse un Servicio de Radiodiagnóstico y, por extensión, cualquier servicio central de un hospital, es la de procurar realizar solamente aquello que pueda representar un beneficio para el paciente. Esta máxima cobra un mayor sentido, si cabe, en los Servicios de Radiología, ya que algunas de las pruebas realizadas representan administrar radiación al paciente, lo que no está exento de inocuidad, y en el contexto actual de crisis económica es reforzada, pues nada es gra- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 Català Forteza J. Racionalización de la solicitud... Los conceptos en los que más insistimos fueron: Resultados Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología comporta, su coste económico y en tiempo, y sus indicaciones. En este último punto es donde pusimos más énfasis, demostrando con ejemplos de pacientes del propio hospital que la mayoría de las exploraciones de abdomen en bipedestación solicitadas no tienen utilidad en la práctica. 217 Peticiones TOTALES Peticiones DEC-BIPE Peticiones DECÚBITO Peticiones BIPE SEP NOV MAY JUL MAR 2011 ENE SEP NOV JUL MAY MAR 2010 ENE NOV JUL SEP MAY MAR 2009 ENE 450 400 350 300 250 200 150 100 50 0 Figura 1. Evolución durante los tres años de las solicitudes de radiografías abdominales desde el Servicio de Urgencias. El asterisco (*) marca el momento en que se cambiaron las opciones en el petitorio de pruebas del hospital tuito y las políticas se dirigen a reducir gastos innecesarios. El proyecto de optimización y mejora del Servicio de Urgencias de nuestro hospital nos brindó la oportunidad de poner encima de la mesa, entre otros, el tema de la realización de exploraciones innecesarias, considerando estas como aquellas pruebas que apor- RESULTADOS Exploraciones TOTALES DECÚBITO BIPEDESTACIÓN SEP NOV MAY JUL MAR 2011 ENE NOV SEP JUL MAY MAR 2010 ENE NOV JUL SEP MAY MAR 800 700 600 500 400 300 200 100 0 2009 ENE Català Forteza J. Racionalización de la solicitud... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 218 RESULTADOS Figura 2. Evolución en tres años del número de exploraciones radiológicas abdominales solicitadas desde el Servicio de Urgencias Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 Figura 3. Evolución del porcentaje relativo respecto al total de exploraciones radiológicas abdominales solicitadas desde el Servicio de Urgencias de las diferentes proyecciones (decúbito y bipedestación) durante los tres años de estudio tan escaso valor en el proceso asistencial del paciente asistido en Urgencias. Se estima que aproximadamente un 30% de las exploraciones que realiza un Servicio de Radiología son innecesarias1. Los motivos por los que se decidió aunar esfuerzos para intentar reducir el número de radiografías de abdomen, y específicamente la proyección en bipedestación, fueron la impresión de que se solicitaban en exceso, y si lográbamos su reducción podríamos obtener un triple beneficio: agilización en la realización de las exploraciones correctamente indicadas, lo que supondría un mejor aprovechamiento del tiempo de trabajo y una disminución en el tiempo de espera de los pacientes, disminución de la radiación innecesaria infligida a la población y ahorro económico. La discusión sobre la sobreutilización en los Servicios de Urgencias de la radiografía de abdomen, y en concreto la proyección en bipedestación. es un tema recurrente y con vasta bibliografía al respecto2-8. Se estima que la radiación aproximada que recibe el paciente por una radiografía abdominal es de 0,7 mSv, el equivalente a 35 radiografías de tórax o cuatro meses de radiación cósmica ambiental9. El tiempo de ocupación de sala según el Catálogo de Exploraciones de la SERAM 200910 para la realización de una radiografía de abdomen es de seis minutos y si se realizan dos proyecciones (decúbito supino y bipedestación), de 12 minutos. El coste económico de una radiografía de abdomen es difícil de precisar, debido a que depende de múltiples factores, no coincidentes al 100% en los diferentes centros; no obstante, sí constatamos a título orientativo lo que se puede llegar a pagar o cobrar por ella en Cataluña. Y así el Institut Català Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 Català Forteza J. Racionalización de la solicitud... SEP NOV MAY JUL MAR 2011 ENE SEP NOV JUL BIPEDESTACIÓN MAY MAR 2010 ENE NOV JUL SEP MAY MAR 100 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0 2009 ENE DECÚBITO SUPINO Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología RESULTADOS 219 Català Forteza J. Racionalización de la solicitud... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 220 de la Salut (ICS) paga 6 € a los centros concertados de la Xarxa Hospitalaria de Ús Públic (XHUP), a las Mútuas se les cobra entre 7 y 13 €, el Col·legi Oficial de Metges de Barcelona (COMB) recomienda cobrar 20,48 € y los centros privados pueden llegar a cobrar 60 € por una radiografía. La radiografía de abdomen en decúbito supino tiene unas indicaciones muy concretas11, algunas todavía discutibles, aunque detectamos que se solicitaba en muchos casos sin motivo razonable. La proyección en bipedestación es una exploración cuya solicitud rutinaria debería evitarse, al no aportar en la gran mayoría de los casos más información que la radiografía abdominal en decúbito supino si se solicitan ambas, y en caso de realizar solo la proyección erecta, se suele perder información por la peor calidad de visualización de las estructuras abdominales, al aumentar el volumen de tejido a atravesar debido a la interposición del grueso de partes blandas abdominales y/o torácicas. La única indicación de la proyección en bipedestación sería ante la sospecha de oclusión intestinal y la proyección en decúbito supino realizada previamente no es concluyente. Habitualmente, en nuestro hospital el facultativo, ante esta sospecha, solicitaba ambas proyecciones, hecho favorecido por el propio diseño del petitorio. El análisis de todo el proceso desde su inicio nos permitió lo ya expuesto en cuanto a identificar que el petitorio de exploraciones radiológicas no era el más adecuado, por lo que se modificó de modo que no provocase la solicitud excesiva de exploraciones indiscriminadamente. Consideramos imprescindible la participación de los Jefes de Servicio tanto de Urgencias como de Cirugía por el beneficio que podía ejercer su influen- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 cia jerárquica en los facultativos de su Servicio, concienciándolos de la importancia de su implicación. También es crucial la implicación del personal asistencial del Servicio de Radiología aprovechando la relación del “día a día” con los facultativos solicitantes. De hecho, el mayor porcentaje de reducción se produjo solo con las dos primeras acciones en los diez primeros meses, ambas, las que implican un mayor contacto personal y relación humana, por lo que consideramos muy importantes las acciones basadas en reforzar la comunicación entre facultativos. Se creyó conveniente la realización de una sesión formativa e informativa de cara a que los facultativos solicitantes conociesen las indicaciones de solicitud, los costes de la exploración y de la radiación que suponía para el paciente, datos estos últimos de los cuales no era consciente la mayoría de ellos. Esta sesión se acompañó de ejemplos sustraídos de casos reales vistos en el propio hospital. “Si esto me ha sucedido a mí, quizás también le suceda a otros”. Si nosotros tomamos como referencia para crear el petitorio de pruebas el Catálogo de Exploraciones de la SERAM, y esto favorece la petición excesiva de pruebas, creímos adecuado sugerir su revisión y modificación para intentar que no ocurra en otros centros. La modificación del petitorio y la sesión mejoró ligeramente y estabilizó lo conseguido tras las dos primeras acciones. Tomando como referencia el total de radiografías abdominales solicitadas en 2009, la diferencia con las solicitadas en 2010 y 2011, y los datos de coste y de tiempo de ocupación de sala expuestos previamente, se realizaron Concluimos pues con este trabajo la importancia de racionalizar la demanda de exploraciones radiológicas, plasmadas en nuestro caso con el ejemplo de la radiografía de abdomen y en concreto con la proyección en bipedestación solicitadas desde el Servicio de Urgencias, a fin de disminuir las exploraciones innecesarias, lo que supone agilizar la realización de las exploraciones correctamente indicadas, disminuir la radiación infringida a la población y ahorro económico. El análisis de todo el proceso desde su inicio, ayuda a detectar los puntos a mejorar, y las posibles acciones a realizar. Bibliografía 1. E l 30% de las pruebas radiológicas que se realizan son innecesarias. Diario Médico [en línea]. Disponible en: http://www.diariomedico. com/2010/05/31/area-cientifica/especialidades/radiodiagnostico/el30-de-las-pruebas-radiologicasque-se-realizan-son-innecesarias 2.Feyler S, Williamson V, King D. Plain abdominal radiographs in acute medical emergencies: an abused 3. Field S, Guy PJ, Upsdell SM, Scourfield AE. The erect abdominal radiograph in the acute abdomen: should its routine use be abandoned? Br Med J (Clin Res Ed). 1985;290(6486):1934-6. 4. Morris-Stiff G, Stiff RE, Morris-Stiff H. Abdominal radiograph requesting in the setting of acute abdominal pain: temporal trends and appropriateness of requesting. Ann R Coll Surg Engl. 2006;88(3):270-4. 5. Karkhanis S, Medcalf J. Plain abdomen radiographs: the right view? Eur J Emerg Med. 2009;16(5):26770. 6. Smith JE, Hall EJ. The use of plain abdominal x rays in the emergency department. Emerg Med J. 2009; 26(3):160-3. 7. Anyanwu AC, Moalypour SM. Are abdominal radiographs still overutilized in the assessment of acute abdominal pain? A district general hospital audit. J R Coll Surg Edinb. 1998;43(4):267-70. 8. Flak B, Rowley VA. Acute abdomen: plain film utilization and analysis. Can Assoc Radiol J. 1993;44(6):4238. 9.European Commission. Radiation Protection 118. 2008 [en línea]. Disponible en: http://ec.europa.eu/ energy/nuclear/radioprotection/ publication/doc/118_update_en. pdf 10.Catálogo SERAM 2009. Explicaciones a la edición 2009 del Catálogo de Exploraciones Radiológicas. 2009 [en línea]. Disponible en: http://seram.es/modules.php?nam Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 Català Forteza J. Racionalización de la solicitud... Los facultativos de Urgencias dejaron progresivamente de solicitar la proyección en bipedestación sin perjuicio en la valoración de sus pacientes, hecho constatado por ellos mismos. investigation? Postgrad Med J. 2002;78(916):94-6. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología en dos años aproximadamente 6000 exploraciones menos de las que se hubiesen solicitado de seguir la misma tendencia que en el año 2009, aproximadamente 4000 de la cuales hubiesen sido en bipedestación), lo que supuso un ahorro en tiempo de 36 000 minutos (600 horas netas de ocupación de sala), y dependiendo del coste/placa aplicado, un considerable ahorro económico. 221 11. American College of Radiology. ACR–SPR Practice Guideline for Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Català Forteza J. Racionalización de la solicitud... e=documentos&lang=ES&docucli ck=3&document=catalogo_se ram2009.pdf&iddocument=28&id webstructure=208&op=getDocum ent 222 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):213-22 the Performance of Abdominal Radiography. 2011 [en línea]. Disponible en: http://Www.Acr.Org/~/Me dia/ACR/Documents/PGTS/Guidelines/Abdominal_Radiogra phy.pdf Aplicación y utilidad de los criterios de indicación clínica ACR en las exploraciones de resonancia magnética de cerebro y de base del cráneo Paniagua Bravo A, 1Albillos Merino JC, 2Fraile Moreno E Unidad Central de Radiodiagnóstico. Hospital Infanta Sofía. San Sebastián de los Reyes, Madrid. España. 2 Unidad Central de Radiodiagnóstico. Dirección Técnica. Hospital Infanta Sofía. San Sebastián de los Reyes, Madrid. España. Dirección para correspondencia: [email protected] 1 De izquierda a derecha: Álvaro Paniagua Bravo, José C. Albillos Merino y Eduardo Fraile Moreno. Resumen Objetivos: Conocer el grado de adecuación existente entre la indicación clínica de ciertas exploraciones de resonancia magnética (RM) respecto a los criterios definidos por el American College of Radiology (ACR). Saber si de su aplicación se traduce una mejoría en la tasa de exploraciones patológicas. Material y métodos: Se ha revisado la indicación clínica y el informe radiológico de 300 RM de cerebro y 200 RM de base del cráneo realizadas en 2011 de un total de seis hospitales pertenecientes al Servicio Madrileño de Salud. Se ha valorado cuántos estudios se ajustan a los criterios de adecuación clínica determinados por el ACR y el porcentaje de exploraciones patológicas. Resultados: Del total de RM revisadas, el 37,4% se ajusta a alguno de los subgrupos clínicos estipulados por los criterios del ACR. El grado de indicación medio obtenido es de 7,1 sobre 9. En el 79,4% de los casos, no se encontraron hallazgos Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 1 223 Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 224 patológicos que corroborasen la sospecha clínica, con porcentajes similares en los estudios que se ajustaban a los criterios del ACR y en los que no. Conclusiones: Las exploraciones de RM de cerebro y de RM de base del cráneo que se justifican de acuerdo con los criterios del ACR son minoría; sin embargo, la aplicación de estos criterios no se traduce en un mayor porcentaje de exploraciones con hallazgos patológicos. Palabras clave: ACR Appropriateness Criteria®; Indicación clínica; Minimización de costes. Application and utility of clinical indication criteria ACR MRI scans of brain and skull base Abstract Objectives: To know the degree of adjustment between the clinical conditions and the criteria defined by the American College of Radiology (ACR) in some magnetic resonance (RM) studies. To know if the application of the “ACR appropriateness criteria” improves the ratio of pathological examinations. Material and methods: We reviewed the clinical conditions and the radiological reports in 300 brain MR studies and 200 cranial base MR performed in 2011 in six different hospitals belonging to the Madrid Healthcare Public System. The agreement with the ACR guidelines and the ratio of pathological studies were evaluated. Results: The percentage of MR studies that agree with the ACR guidelines was 37.4%. The obtained rating scale, calculated by the ACR appropriateness criteria was 7.1 over 9; 79.4% of the studies do not present pathological findings matching with the suspected disease. This rate was similar in both those studies that agree with the ACR criteria and those with are not. Conclusion: Brain MR and cranial base MR studies that agree with the ACR appropriateness criteria are in a minority; however, application of these criteria does not improve the rate of pathological studies. Key words: ACR Appropriateness Criteria®; Clinical indication; Minimization of costs. Introducción Resulta sobradamente conocido cómo en estos últimos años se ha incrementado la demanda de exploraciones radiológicas mientras que las inversiones y recursos se ven cada vez más mermados, conduciendo a un escenario que exige como solución evidente una racionalización de la demanda. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 No debería ser negociable que la restricción de exploraciones complementarias conlleve una disminución de la calidad asistencial. Muy al contrario, no someter al paciente a un procedimiento innecesario, además de racionalizar costes, habría de ser considerado un indicador de buena praxis. Sin embargo, esto exige un esfuerzo por parte de los gestores y, sobre todo, de Material y método En seis hospitales de segundo nivel con poblaciones de similares características, todos ellos pertenecientes al Servicio Público de Salud de la Comunidad Autónoma de Madrid, se han revisado las peticiones y el informe de un total de 500 estudios de RM, de los cuales 300 eran con RM cerebral (50 por hospital) y 200 con RM de la base del cráneo (50 en un hospital y 30 en los cinco restantes), en ambos casos sin distinción entre si el estudio se realizaba sin o con contraste intravenoso. Todas las exploraciones se realizaron entre el 1 de junio y el 10 de julio de 2011. Los centros participantes han sido el Hospital Infanta Sofía (HIS), el Hospital Infanta Leonor (HIL), el Hospital del Henares (HHEN), el Hospital Infanta Cristina (HIC), el Hospital del Sureste (HSE) y el Hospital del Tajo (HTAJ). En la revisión de las peticiones, se atendió a la información clínica aportada por el médico peticionario para valorar la concordancia de la indicación con los tres niveles de consideración contemplados por los criterios En la revisión del informe, se contabilizó el número de exploraciones en las que aparecieron hallazgos que justificasen la patología a estudio. Los hallazgos patológicos casuales, sin relación con la clínica y motivo de solicitud de la prueba, no fueron considerados patológicos. Los criterios de indicación clínica del Colegio Americano de Radiología (American College of Radiology [ACR]) consisten en unas guías diseñadas como recomendación de la prueba de imagen más apropiada para un supuesto clínico concreto. Están disponibles gratuitamente en la dirección www.arc.org. Se diferencian tres tipos de categoría (Figura 1): – Supuesto clínico general: ataxia, demencia, cefalea, enfermedad cerebrovascular, etc. – Variante o subgrupo: en cada supuesto clínico se contemplan diversas posibles variantes. Por ejemplo, dentro del supuesto clínico “cefalea”, se distinguen cefalea crónica, cefalea crónica con cambio de características, cefalea aguda grave, etc. – Grado de indicación: en cada subgrupo, se asigna un grado de indicación a cada tipo de prueba de imagen (RM de cerebro, tomografía computarizada [TC] de cerebro…). El grado de indicación se mide en una escala del 1 al 9, donde 9 sería el máximo grado de recomendación y 1 el mínimo. Posteriormente, se realiza un análisis de los datos recopilados mediante el software Microsoft Office Excel 2010, valorando los siguientes conceptos: Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... En este estudio, se han revisado las resonancias magnéticas (RM) de cerebro y de base del cráneo realizadas en diversos centros y se han cotejado con las Guías del Colegio Americano de Radiología (ACR)1, para valorar el grado de indicación del estudio en cada caso. Además, a partir de la revisión de los informes radiológicos, se ha determinado el porcentaje de exploraciones normales frente a aquellas que confirmaron la sospecha clínica. del ACR: supuesto clínico general, variante de presentación y grado de indicación1. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología los profesionales clínicos, en la elaboración de protocolos que permitan una óptima selección de los pacientes que deben someterse a cualquier acto médico, lo que incluye las exploraciones diagnósticas. 225 Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 226 Figura 1. Ejemplo extraído de uno de los supuestos clínicos recogidos en la Guía de Indicaciones Clínicas del ACR. Dentro del supuesto clínico “Enfermedad Cerebrovascular” se distinguen diversas variantes de presentación (por ejemplo: asintomático con factores de riesgo, screening de accidente isquémico transitorio, déficit focal de menos de 3 horas de evolución, etc). Dentro de cada variante, se asigna un grado de adecuación en una escala del 1 al 9 para cada una de las exploraciones radiológicas posibles para su estudio Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 De las 500 exploraciones revisadas, 300 fueron RM de cerebro y 200 RM de la base del cráneo. Se revisaron 80 exploraciones en cada uno de los hospitales, salvo en el HIS, donde se revisaron 100. – Número y porcentaje de exploraciones de RM de cerebro y de RM de base del cráneo que se ajustan a una de las situaciones clínicas contempladas por los criterios del ACR. Distribución global, por hospitales y porcentaje de exploraciones patológicas. Estas son las únicas exploraciones para las que se dispone de información suficiente como para poder determinar el grado de indicación clínica. Distribución global, por hospitales y porcentaje de exploraciones patológicas. El 87,5% de las peticiones RM procedían de consultas externas, el 10% de hospitalización y en el 2,5% restante no se registró la procedencia. En un análisis global de todas las exploraciones, el 66% de las RM revisadas se ajustan a los supuestos clínicos generales referidos en los criterios del ACR, porcentaje que se reduce al 37,4% cuando se exige que se ajusten a uno de los subgrupos concretos. Como consecuencia, en el 62,6% de los casos no se puede determinar un grado de adecuación de la indicación clínica, bien por falta de información o por no ajustarse a los criterios del ACR. – Comparativa entre el porcentaje de exploraciones patológicas para cada uno de los grupos anteriormente descritos. Dentro de aquellas ajustadas a los criterios del ACR, se diferencia entre aquellas con grado de indicación alto y bajo. Tabla 1. Resultados obtenidos para el conjunto de RM de cerebro y de RM de base del cráneo en todos los centros. Se muestra el número y, entre paréntesis, el porcentaje de estudios contemplados por alguna de las variantes clínicas recogidas por los criterios del ACR, el grado de indicación clínica y el porcentaje de exploraciones patológicas para cada uno de los grupos Exploración Hospital N.º de casos RM de base del cráneo RM de cerebro Cumple criterios ACR Grado de Hallazgos indicación patológicos Hallazgos patológicos Criterios ACR 7/75 (9,3%) Hallazgos patológicos NO criterios ACR 14/125 (11,2%) Todos 200 75 (37,5%) 7,4 21 (10,5%) Todos 300 112 (37,3%) 6,9 85 (28,3%) 34/112 (30,3%) 51/188 (27,12) RM: resonancia magnética. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... El conjunto de los resultados obtenidos se expone en las Tablas 1 y 2. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Resultados – Número y porcentaje de exploraciones de RM de cerebro y de RM de base del cráneo que no se ajustan a una variante reconocida por los criterios del ACR. Distribución global, por hospitales y porcentaje de exploraciones patológicas. 227 Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 228 Tabla 2. Resultados obtenidos para el conjunto de RM de cerebro y de RM de base del cráneo desglosados por los distintos hospitales estudiados. Se muestra el número y, entre paréntesis, el porcentaje de estudios contemplados por alguna de las variantes clínicas recogidas por los criterios del ACR, el grado de indicación clínica y el porcentaje de exploraciones patológicas para cada uno de los grupos Exploración Hospital N.º de Cumple estudios criterios ACR Grado de Hallazgos indicación patológicos Hallazgos Hallazgos patológicos patológicos NO Criterios ACR criterios ACR RM de cerebro HIS 50 22 (44%) 7,3 15 (24%) 8/22 (36,3%) 7/28 (25%) RM de cerebro HIL 50 26 (52%) 6,5 18 (36%) 12/26 (46,2%) 6/24 (25%) RM de cerebro HHEN 50 24 (48%) 5,7 18 (36%) 1/24 (4%) 17/26 (65,4%) RM de cerebro HIC 50 14 (28%) 7,3 16 (32%) 6/14 (42,8%) 10/36 (27,8%) RM de cerebro HSE 50 10 (20%) 6,8 4 (8%) 1/10 (10%) 3/40 (7,5%) RM de cerebro HTAJ 50 16 (32%) 7,9 14 (28%) 6/16 (37,5%) 8/34 (23,5%) RM de base del cráneo HIS 50 19 (38%) 7,9 6 (12%) 2/19 (10%) 4/31 (12,9%) RM de base del cráneo HIL 30 18 (60%) 7,9 4 (13,3%) 2/18 (11,1%) 2/12 (16,7%) RM de base del cráneo HHEN 30 6 (20%) 7,7 5 (16,6%) 1/6 (16,6%) 4/24 (16,7%) RM de base del cráneo HIC 30 4 (13%) 6,5 0 (0%) 0/4 (0%) 0/26(0%) RM de base del cráneo HSE 30 18 (60%) 7 0 (0%) 0/18 (0%) 0/12 (0%) RM de base del cráneo HTAJ 30 10 (33%) 7,4 6 (20%) 2/10 (20%) 4/20 (20%) HHEN: Hospital del Henares; HIC: Hospital Infanta Cristina; HIL: Infanta Leonor; HIS: Infanta Sofía; HSE: Hospital del Sureste; HTAJ: Hospital del Tajo; RM: resonancia magnética. Resonancia magnética de cerebro (Figura 2) Aunque un 62% de las exploraciones revisadas incluían a alguno de los supuestos clínicos generales contemplados en los criterios del ACR, el porcentaje de casos que realmente se ajustaban a una de las variantes recogidas para cada supuesto, y de los que se puede extraer un grado de indicación, se redujo al 37,4%. En este último grupo de exploraciones, el grado de indicación medio fue de 6,9. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 Cuando se analizó en cuántas exploraciones se confirmaba la existencia de hallazgos patológicos que corroborasen la sospecha clínica, el porcentaje fue del 28,3%. El hecho de que las exploraciones se ajustasen a una variante dentro de los criterios del ACR no aumentó la tasa de exploraciones patológicas respecto a aquellas con indicaciones no contempladas en el catálogo del ACR. Analizando los resultados por hospitales, el porcentaje de estudios que se HIC 10 40 14 36 HHEN 24 HIL 26 0% 10% 20% No Supuesto ACR 26 24 22 HIS Supuesto ACR 28 30% 40% 50% 60% 70% 80% 90% 100% Figura 2. Exploraciones de RM de cerebro realizadas en cada uno de los hospitales participantes. Se comparan las exploraciones que no se ajustan a los criterios del ACR con las que sí lo hacen. Hospital Infanta Sofía (HIS), Hospital Infanta Leonor (HIL), Hospital del Henares (HHEN), Hospital Infanta Cristina (HIC), Hospital del Sureste (HSE) y Hospital del Tajo (HTAJ) adaptaba a una de las variantes recogidas por los criterios oscila entre el 20 y el 52%. El porcentaje de hallazgos patológicos varía entre el 8 y el 36%. En general, las exploraciones que se adaptaban a los criterios del ACR incrementaron la tasa de exploraciones patológicas, salvo en un centro, el HHEN, donde se produjo un efecto contrario. Resonancia magnética de base del cráneo (Figura 3) El 72% de las RM de base del cráneo se ajustaban al supuesto clínico general de “hipoacusia y vértigo” recogido por los criterios de indicaciones clínicas del ACR. Sin embargo, cuando se exigía que además se correspondieran con una de las formas de presentación descrita en esta guía, solo en el 37,5% se aportaba la suficiente información clínica; en estos casos, el grado de indicación medio era del 7,4. En el 10,5% de los estudios se encontraron hallazgos patológicos que corroboraron la sospecha clínica. Los estudios de este grupo cuya información clínica se ajustaba a los criterios del ACR no mejoraban la tasa de exploraciones patológicas respecto a aquellos que no se podían incluir en los grupos de indicaciones establecidos. En la distribución por hospitales, el porcentaje de estudios cuya información clínica permitía incluirlos en una de las variantes de presentación oscilaba entre el 13 y el 60%. El porcentaje de hallazgos patológicos variaba según el centro, entre el 0 y el 20%, sin grandes diferencias entre las exploraciones que cumplían los criterios de indicación clínica y las que no. Grado de indicación clínica (Figura 4) Del total de exploraciones para el que se puede determinar el grado de indi- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología HSE 34 16 HTAJ Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... RM de cerebro 229 Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... RM de base del cráneo Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 12 4 20 5 HHEN Supuesto ACR No Supuesto ACR 24 18 HIL 12 19 HIS 0% 230 18 HSE HIC 20 10 HTAJ 10% 20% 31 30% 40% 50% 60% 70% 80% 90% 100% Figura 3. Exploraciones de RM de base del cráneo realizadas en cada uno de los hospitales participantes. Se comparan las exploraciones que no se ajustan a los criterios del ACR con las que sí lo hacen. Hospital Infanta Sofía (HIS), Hospital Infanta Leonor (HIL), Hospital del Henares (HHEN), Hospital Infanta Cristina (HIC), Hospital del Sureste (HSE) y Hospital del Tajo (HTAJ) cación clínica, el 87% muestra una indicación clínica apropiada (≥7 según el ACR) y el porcentaje de exploraciones patológicas para este grupo es del 22,8%. Únicamente el 13% de los estudios tenía un grado de indicación bajo según los criterios del ACR, con una tasa de exploraciones patológicas del 7,1%. El resto de estudios, que suponen el 62,6% del total, o bien no se corresponden con una situación clínica contemplada por los criterios del ACR o bien no adjuntaban suficiente información clínica como para etiquetarlos en uno de estos grupos. La tasa de exploraciones patológicas fue del 21,3% para este grupo. Discusión La realización de este estudio surge como respuesta a las necesidades de racionalización de la demanda de exGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 ploraciones complementarias, en concreto de estudios cerebrales por RM. Para ello, planteamos un estudio retrospectivo analizando el grado de adecuación de las indicaciones de los estudios solicitados y, en una segunda parte, la efectividad de los criterios empleados. Se aplican los criterios recogidos por el Colegio Americano de Radiología en sus ACR Appropriateness Criteria®, un catálogo que informa sobre cuál es la técnica de imagen más adecuada para el manejo de una determinada situación clínica. Se trata de una guía de indicaciones clínicas actualizada y ampliamente reconocida, heredera de otras semejantes como fueron la Guía de Criterios de Remisión de Pacientes a los Servicios de Radiodiagnóstico, elaborada en 1989 por el Real Colegio de Radiólogos del Reino Unido y posteriormente editada y actualizada por la Comisión Europea y desarrollada por otras Sociedades y Colegios profesionales2-5. 20 15 10 23% 21% 5 7% Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... 25 0 ACR INDICACIÓN ALTA ACR INDICACIÓN BAJA Figura 4. Tasa de exploraciones con hallazgos patológicos en el conjunto de exploraciones según el grado de indicación de los criterios del ACR: menor o igual a 6 (ACR indicación baja), mayor o igual a 7 (ACR indicación alta) y en aquellas en las que no se pudo establecer un grado de indicación al no corresponder con una variante o subgrupo englobado en la guía (no ACR) Al tratarse de un estudio retrospectivo, inicialmente se pretendía dividir las exploraciones en dos grandes grupos: aquellas que cumplen los criterios y las que no; con ello, obtendríamos datos sobre el “rigor” de los médicos peticionarios en la solicitud de pruebas. Dentro de aquellas que no se ajustan a los criterios del ACR, cabe diferenciar distintas causas: – No se dispone de información clínica suficiente como para encuadrar la exploración en un grupo clínico. En muchos casos, sí se correspondían con alguno de los grupos clínicos generales de los criterios del ACR, pero faltaba información suficientemente detallada como para saber a qué subgrupo o variante pertenecían. Es posible que algunas de estas exploraciones tuvieran un grado de adecuación alto, pero los datos no permiten saberlo. – Se dispone de información clínica, pero esta no se corresponde con las situaciones clínicas descritas en la guía del ACR. Dentro de este grupo, caben dos posibles razones diametralmente opuestas: 1) la petición clínica es inadecuada y la prueba no debe pedirse, y 2) es un supuesto clínico no recogido por los criterios del ACR pero que puede beneficiarse del estudio. Es por ello que también resulta interesante analizar los resultados de las exploraciones de este grupo. En conjunto, solo el 37,4% de las exploraciones realizadas reunían criterios de adecuación clínica, una cifra ampliamente mejorable. Excluyendo algunos valores extremos, el dato es similar en los distintos centros estudiados. Se han realizado algunos estudios similares a este sobre exploraciones de TC y RM traumatológicas, en los Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología NO ACR 231 Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 232 que se ha obtenido un porcentaje de exploraciones adecuadas a los criterios del ACR ligeramente mayor, del 44 y del 41,2%, respectivamente7,8. Sin embargo, cuando se revisa la bibliografía, no se encuentra un estudio que evalúe la aplicación de los criterios del ACR específicamente sobre las RM de cerebro y de base del cráneo, ni su correlación con el porcentaje de hallazgos patológicos. Entre los múltiples factores que pueden influir en un bajo porcentaje de adecuación clínica, deben atajarse aquellos que impliquen una mala selección de pacientes: exploración clínica y anamnesis inadecuadas, falta de formación del médico, medicina defensiva, etc., elementos que no solo incrementan el coste, sino que también implican una mala praxis, exponiendo al paciente a procedimientos innecesarios. Por otro lado, hay que considerar que ninguna guía o protocolo es perfecto y que la diversidad y complejidad de situaciones clínicas es tan amplia que no cabe en catálogo alguno, es decir, porcentajes de inclusión demasiado altos deberían igualmente resultar sospechosos. Cuando se planteó valorar el número y porcentaje de exploraciones patológicas para cada grupo, se partía de la premisa de que, en aquellos estudios adecuadamente solicitados según los criterios del ACR, la orientación diagnóstica sería refrendada en un alto porcentaje de casos por el informe radiológico, por lo que la concordancia entre ambos diagnósticos podría considerarse una aproximación indirecta de la calidad asistencial. Sin embargo, al analizar la tasa de exploraciones patológicas en aquellas RM que se ajustan a los criterios del ACR (21,9% de estudios patológicos) frente a las que se encuentran excluidas de los criterios (20,7%), se observa que su aplicación no se tradujo en un incre- Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 mento de las confirmaciones diagnósticas. Hay que señalar que, en un alto porcentaje de casos, la información clínica era insuficiente, por lo que un número indeterminado de estudios que se ajustan a los criterios del ACR podrían estar incluidos en el equipo contrario; un dato más por el que perseguir la correcta cumplimentación de la historia y de la información clínica en la petición. Por otro lado, durante la elaboración del estudio, los autores observamos cómo los criterios del ACR no contemplaban algunas situaciones frecuentes y a las que se les reconoce la necesidad de un estudio con RM, como sucede los controles de esclerosis múltiple o de tumores cerebrales. Antes de desestimar un protocolo elaborado por profesionales de gran prestigio, se imponía un análisis más profundo. Dentro del conjunto de exploraciones ajustadas a los criterios del ACR, no todas tienen el mismo grado de indicación. Para aquellas en las que los criterios marcaban una adecuación moderada o baja (menor de 7 en una escala de 9), la tasa de exploraciones patológicas fue del 7%, frente al 23% de aquellas con una adecuación alta. Cabe concluir, por tanto, que en aquellos casos ajustados a los criterios del ACR en los que el nivel de adecuación no es alto, la posibilidad de encontrar alteraciones en la exploración de RM es muy baja. Conclusiones 1. Las exploraciones de RM de cerebro y de RM de base del cráneo que pueden englobarse en una de las variantes clínicas recogidas por los criterios del ACR oscilan en torno al 37% para los dos tipos de ex- – Falta de información en la petición clínica, lo que no permite establecer adecuadamente el grado de indicación. – Escasa concordancia entre el criterio del médico peticionario y los supuestos recogidos por los criterios del ACR. 2. En la mayoría de los centros estudiados, el hecho de que una exploración se encuadre o no en los criterios de adecuación clínica del ACR no implica un mayor porcentaje de estudios con hallazgos patológicos. Pueden ser varios los factores que influyen en este resultado: – Existen supuestos clínicos con alta incidencia de patología en los estudios de imagen que no se contemplan en los criterios del ACR. – Laxitud de los criterios establecidos por el ACR, que admiten una alta tasa de exploraciones normales. – Buen grado de adecuación de las indicaciones clínicas en aquellos estudios que no se guían por los criterios del ACR. 3. El menor porcentaje de exploraciones patológicas se da en aquellos estudios que reciben un bajo grado de adecuación clínica al aplicar los criterios del ACR. 4.Aunque existen variaciones que probablemente dependan de peculiaridades concretas del funcio- 5. Debe avanzarse en el desarrollo de catálogos y guías de indicaciones clínicas que permitan una adecuada selección de los pacientes que pueden beneficiarse de ciertas exploraciones diagnósticas. Bibliografía 1. ACR Appropriateness Criteria® [en línea] [consultado en abril de 2013]. Disponible en http://www.acr.org/ Quality-Safety/AppropriatenessCriteria 2. Royal College of Radiologists. Making the best use of a Department of Clinical Radiology: Guidelines for Doctors. 1989. 3. Comisión Europea y del Real Colegio de Radiólogos del Reino Unido. Protección radiológica 118. Guía de indicaciones para la correcta solicitud de pruebas de diagnóstico por imagen, adaptadas por expertos europeos en radiología y medicina nuclear, junto con el Real Colegio de Radiólogos de Reino Unido. 2000. 4. Guide du bon usage des examens d’imagerie médicale. Société française de radiologie et Société française de biophysique et de médecine nucléaire, avec la participation méthodologique de l’ANAES, 2005. 5.Diagnostic Imaging Guidelines getting to yes. SM National Imaging Associates, Inc 11050 Olson Drive #200 Rancho Cordova, CA. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... – Limitaciones de los criterios del ACR, que no contemplan todos los supuestos clínicos posibles. namiento interno de los hospitales del estudio, en la mayoría de los casos las conclusiones son extrapolables a todos los centros participantes. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología ploraciones. Cabe destacar entre las posibles causas: 233 7. Hadley JL, Agola J, Wong P. Potential impact of the American College of Radiology appropriateness criteria on CT for trauma. AJR Am J Roentgenol. 2006;186:937-42. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Paniagua Bravo A, et al. Aplicación y utilidad... 6. Foerster V, Murtagh J, Lentle Bc, Wood Rj, Reed Mh, Husereau D, et al. CT and MRI for selected clinical disorders: a systematic review of clinical systematic reviews. Canadian Coordinating Office for Health Technology Assessment; 2005. 234 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):223-34 8. Levy G, Blachar A, Goldstein L, Paz I, Olsha S, Atar E, et al. Nonradiologist utilization of American College of Radiology Appropriateness Criteria in a preauthorization center for MRI requests: applicability and effects. AJR Am J Roentgenol. 2006; 187:855-8. Estudio de la variabilidad de la práctica médica entre servicios, de las pruebas radiológicas en el grupo relacionado con el diagnóstico 014 en un hospital de tercer nivel Sabatel Hernández R, 2 Valcárcel Nazco C, Fuentes García M, 1Pastor Santoveña MS 1 Servicio de Radiodiagnóstico. Complejo Hospitalario Universitario de Canarias (CHUC). La Laguna, Tenerife. 2 Servicio de Evaluación del Servicio Canario de la Salud (SESCS). Centro de Salud San isidro-El Chorrillo. Santa Cruz de Tenerife, Tenerife. Dirección para correspondencia: [email protected] 1 María Soledad Pastor Santoveña, Rafael Sabatel Hernández y Margarita Fuentes García. Resumen Objetivo: El objetivo principal de este estudio es identificar la posible existencia de variabilidad de la práctica médica en las pruebas diagnósticas por imagen solicitadas durante el ingreso hospitalario en el grupo relacionado con el diagnóstico (GRD) 014: Ictus con infarto. A la vez pretendemos detectar la influencia de dicha variabilidad en la estancia hospitalaria. Métodos: Se recogieron los datos de todos los pacientes ingresados durante el año 2006 y codificados al alta con el GRD 014: sexo y edad, diagnóstico principal y diagnósticos secundarios, días de ingreso y servicio responsable del paciente, número y tipo de pruebas diagnósticas por imagen solicitadas, médico solicitante e índice de Charlson del paciente. La variable dependiente fueron los días de estancia de los pacientes incluidos en este GRD. Análisis estadístico: paquete estadístico SPSS (v.15) con nivel de confianza del 95%: –Test de Student. –Análisis de la varianza ANOVA y corrección de Bonferroni. –Correlación lineal de Pearson. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 1 235 Sabatel Hernández R, et al. Estudio de la variabilidad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 236 Resultados: Los resultados obtenidos muestran que las características de los pacientes (edad, sexo e Índice de Charlson) no tienen influencia en los días de estancia, siendo las variables que influyen en los días de estancia el número de pruebas diagnósticas realizadas y el servicio responsable del paciente. Conclusiones: A raíz de los resultados obtenidos en este estudio, se concluye que la elaboración de protocolos tendentes a estandarizar el número de pruebas realizadas a los pacientes es requisito fundamental para la disminución de los días de estancia de los pacientes y del número de ellas. Palabras clave: Variabilidad en la práctica médica; Grupo relacionado con el diagnóstico; Unidad relativa valor; Pruebas radiológicas. Study of the variability of medical practice between services of diagnostic imaging tests in the Diagnosis related group 014 on a 3rd-level hospital Abstract Objective: The main objective of this study is to identify the possible existence of variability of medical practice in diagnostic imaging tests ordered during hospitalization in the DRG 014: Stroke with infarction. While we intend to detect the influence of such variability in length of stay. Methods: We recollected the information of patients admitted during the year 2006 and codified at discharge with DRG 014: sex and patient age, primary diagnosis and secondary diagnoses, length of stay and service responsible for the patient, number and type of diagnostic imaging tests requested, requesting physician and patient Charlson Index. The dependent variable will be the length of stay of patients included in the DRG. Statistical analysis: SPSS (v.15) with confidence level of 95%: –Student Test. –Analysis of variance ANOVA with Bonferroni correction. –Pearson linear correlation. Results: The patient characteristics: age, sex, and Charlson index have no influence on the length of stay, being the variables that influence the length of stay: the number of diagnostic tests underwent and the department in charge. Conclusions: The development of protocols designed to standardize the number of diagnostic imaging tests to patients is the most appropriate tool for reducing the length of stay and the number of them. Key words: Variability medical practice; Diagnosis related group; Value relative unit; Diagnostic imaging tests. Introducción El uso inadecuado de los recursos sanitarios origina un claro incremento del coste sanitario, teniendo en cuenta que los recursos sanitarios son limiGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 tados y el financiador ha de realizar un gran esfuerzo para hacer un uso adecuado de los mismos, y que la distribución de los recursos debe hacerse en función de parámetros de equidad y calidad. Por otra parte, en los últimos En las últimas décadas ha habido un extraordinario avance en Radiología e Ingeniería y en las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC). Así mismo, se ha producido un incremento en la demanda debido a la edad de la población, pruebas más fiables y de mayor capacidad resolutiva así como la creciente facilidad de acceso a las mismas y a la práctica en muchas ocasiones de una medicina defensiva; se comprende cómo se ha generado un aumento en la solicitud de los procedimientos de alta tecnología. Dicho incremento ha llevado a una mayor dosis de radiaciones ionizantes recibidas, un aumento de las listas de espera diagnósticas y, en definitiva, a una insatisfacción de los pacientes y a una aplicación inefectiva de los recursos sanitarios1,2. Los tres ejes en los que se ha sustentado la realización de este trabajo son: Variabilidad en la práctica médica Definici ón Variaciones sistemáticas, no aleatorias, en las tasas estandarizadas de un procedimiento clínico (terapéutico o diagnóstico, médico o quirúrgico) a un determinado nivel de agregación de la población3. La variabilidad, una vez controladas las variables que puedan justificar las diferencias, indica que, bien por exceso o por defecto, se pueden estar realizando actuaciones sanitarias inadecuadas4. Pueden deberse a múltiples factores: –Demanda: morbilidad, factores demográficos, socioeconómicos, hábitos y expectativas. –Oferta: de recursos, organización sanitaria, acceso a los recursos y forma de financiación. –Discrepancias entre médicos: tipo de retribución y diferente formación e incertidumbre en la toma de decisiones de los profesionales. Grupo relacionado con el diagnóstico El grupo relacionado con el diagnóstico (GRD) es un sistema de clasificación homogéneo de pacientes, en cuanto al consumo de recursos, que permite conocer la casuística hospitalaria y el coste que representa su asistencia. Ello permite crear un marco de referencia que evalúe la calidad asistencial y la utilización de los servicios prestados por los hospitales5,6. Unidades relativas de valor La unidad relativa de valor (URV) expresa un coste económico para cada procedimiento radiológico. Indica cuántas veces más cuesta un procedimiento que otro que se toma como referencia7. Debemos tener en cuenta que el coste de la URV puede variar de un hospital a otro y permite conocer el coste de un servicio y comparar la eficiencia entre diferentes servicios homólogos. Objetivos El objetivo principal de este trabajo es identificar la posible existencia de variabilidad en la práctica médica y estimar su magnitud en las pruebas diagnósticas radiológicas solicitadas Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 Sabatel Hernández R, et al. Estudio de la variabilidad... Recursos Técnicos Radiológicos Causas Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología tiempos ha habido una generalización de conceptos ligados a la gestión sanitaria formando parte del bagaje científico propio de muchos profesionales de la salud, y entre ellos los radiólogos. 237 Sabatel Hernández R, et al. Estudio de la variabilidad... durante el ingreso hospitalario en el GRD 014. Así mismo, se obtuvieron las URV del servicio de Radiodiagnóstico del Complejo Hospitalario Universitario de Canarias dentro de este GRD. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Se diseñó un estudio retrospectivo observacional sobre los días de estancia y el número de pruebas realizadas, seguido de un análisis ecológico de la variabilidad observada. Los datos necesarios para el análisis se extrajeron del conjunto mínimo básico de datos (CMBD) y de los sistemas de información y registro hospitalario RIS-PAC del CHUC así como de la historia clínica electrónica de cada paciente. 238 Métodos Población de estudio Se recogieron los datos los 194 pacientes ingresados durante el año 2006 en el Complejo Hospitalario Universitario de Canarias (CHUC) incluidos en el GRD 014 (Ictus con infarto). Diseño y fuentes de datos Análisis estadístico Para analizar los datos extraídos se utilizó el paquete estadístico SPSS 15.0 y se trabajó en todo el análisis con un nivel de confianza del 95%. Las variables que inicialmente se consideraron relevantes, y por tanto se analizaron, se detallan a continuación: –Días de estancia de los pacientes (que se consideró como variable dependiente, al ser una variable muy relacionada con el consumo de los recursos y por tanto de los costes sanitarios). –Número de pruebas realizadas a cada paciente. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 –Sexo y edad de cada paciente. –Diagnóstico principal. –Índice de Charlson. –Categoría del médico solicitante (residente, médico adjunto o jefe de servicio). Para el diagnóstico principal se mantuvo la codificación inicial de acuerdo con el CIE-9 MC. El índice de Charlson fue calculado al ingreso del paciente, tomando como base la patología previa de cada uno de los pacientes. Se comenzó realizando un análisis exploratorio y descriptivo de los datos, agrupando los resultados según la edad y el sexo de los pacientes. Posteriormente, se analizó la variable dependiente de interés (días de estancia) teniendo en cuenta el sexo de los pacientes, su edad, su índice de Charlson, el servicio responsable, el número de pruebas que se le realizaron durante su ingreso y la categoría del médico responsable, y se comparó la media de los días de estancia según cada una de estas variables, con el fin de encontrar diferencias estadísticamente significativas. Al seguir la variable en estudio (días de estancia) una distribución normal, se aplicaron el test de Student (cuando la variable tenía dos categorías como el sexo) y un análisis de la varianza ANOVA (cuando la variable tenía más de dos grupos como el servicio responsable). Al realizar las comparaciones múltiples en este último caso y, con el objetivo de no aumentar la probabilidad global, se aplicó una corrección estadística de los resultados; en nuestro caso, el método o corrección de Bonferroni. Dado el interés del número de pruebas realizadas a cada paciente, se re- Para el cálculo de las URV, se tomaron los costes por Secciones del Servicio de Radiodiagnóstico aportados por la Subdirección del Gestión Económica del CHUC. Estos incluyen: El diagnóstico principal más frecuente fue la oclusión de arteria cerebral no especificada (32,5%) seguida de la trombosis cerebral con infarto cerebral (29,4%) y embolia cerebral con infarto cerebral (23,7%), siendo la oclusión de la arteria carótida bilateral o unilateral la de más baja frecuencia (12,9% y 1,2%, respectivamente). –Costes de farmacia y material fungible. –Costes de utilización de otros servicios. –Costes de personal. –Costes de funcionamiento (amortización y mantenimiento). –Costes estructurales. –Costes de material no sanitario. Seguidamente, para obtener el coste total se agregaron los costes directos a los indirectos de todas las Secciones del Servicio de Radiodiagnóstico y se calcularon las URV generadas por todas las pruebas realizadas en el Servicio de Radiodiagnóstico. Para obtener el coste medio de una URV se realizó el cociente entre el coste total y las URV generadas. Resultados Se obtuvieron un total de 194 pacientes entre los cuales se encontraban 125 hombres (64,4%) y 69 mujeres (35,6%). Además, se solicitaron un total de 1040 pruebas radiológicas por imagen, de las cuáles 263 eran ecografías de carótidas, 232 tomografías (TC) de cráneo, 183 resonancias mágnéticas de carótidas, 166 resonancias magnéticas de cráneo y 173 radiografías de tórax. En cuanto al servicio responsable del paciente, se puede destacar que el 76,8% de los pacientes se encontraban ingresados en el Servicio de Neurología. El 18,6% de los pacientes pertenecían al Servicio de Rehabilitación y un 4% se encontraba repartido entre los servicios de Nefrología, Medicina Interna, Neurocirugía, Medicina Intensiva Traumatología, Oncología Médica y Endocrinología. La esta ncia media de los pacientes fue de 17,15 (16,39) días. Al analizar los días de estancia en función del sexo y la edad de los pacientes, se obtuvieron los resultados que se muestran en la tabla 1. Como puede observarse, no existen diferencias estadísticamente significativas en la estancia media de los pacientes según su sexo, como tampoco se demuestran en múltiples publicaciones8-11. Así mismo, tampoco se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre la estancia media de los pacientes según su edad. Este hecho difiere con los resultados de algunas publicaciones en las que se afirma existir una mayor estancia media en pacientes de edad avanzada con predominio en mayores de 80 años11,12. La estancia media según el servicio responsable del paciente, también se muestra en la tabla 1. Se observa que Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 Sabatel Hernández R, et al. Estudio de la variabilidad... La edad media de los pacientes fue de 70,41 (10,80) años y el 72% de ellos tenían un índice de Charlson menor de 4. El número medio de pruebas por paciente fue de 5,52 (1,97). Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología pitió este análisis, considerando como variable a estudiar el número de pruebas, y se analizó si existían o no diferencias estadísticamente significativas según el resto de variables. 239 Sabatel Hernández R, et al. Estudio de la variabilidad... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 240 Tabla 1. Estancia media de los pacientes según sexo, edad y servicio responsable Hombres Mujeres Menores de 65 años 65 o más años Neurología (149 pacientes) Rehabilitación (36 pacientes) Media (desv. típica) Intervalo de confianza al 95% Sexo 17,01 (18,05) (13,81; 20,20) 17,41 (12,97) (14,29; 20,52) Edad 16,88 (12,55) (13,39; 20,38) 17,25 (17,63) (14,32; 20,17) Servicio responsable 13,47 (15,20) (11,01; 15,93) 32,92 (12,89) (28,55; 37,28) los pacientes ingresados en el Servicio de Rehabilitación tienen una estancia media de alrededor de 33 días, mientras que los ingresados en el Servicio de Neurología permanecen una media de 13 días en el hospital. Estas diferencias encontradas son estadísticamente significativas (p <0,001). Al analizar los días de estancia de los pacientes ingresados en el GRD en estudio según su índice de Charlson, encontramos que no existen diferencias estadísticamente significativas (p-valor = 0,399). Este aspecto contrasta con los resultados de otros estudios donde se observa un aumento p-valor 0,872 0,892 <0,001 de la duración de la estancia con el aumento de la comorbilidad de los pacientes en algunas patologías13,14. El número de pruebas medio por paciente según su sexo, edad, servicio responsable y categoría del médico se muestra en la tabla 2. Como puede observarse, el número medio de pruebas es superior en hombres que en mujeres, resultando estas diferencias estadísticamente significativas (p-valor = 0,008). Sin embargo, no se encontraron diferencias estadísticamente significativas en el número medio de pruebas realizadas a los pacientes según su edad (pvalor = 0,555). En estudios llevados a Tabla 2. Número de pruebas medio según sexo, edad, servicio y categoría del médico responsable del paciente Hombres Mujeres Menores de 65 años 65 o más años Servicio responsable Neurología (149 pacientes) Rehabilitación (36 pacientes) Jefe de Servicio Médico Adjunto Residente Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 Media (desv. típica) Intervalo de confianza al 95% Sexo 5,79 (2,05) (5,43; 6,16) 5,01 (1,71) (4,60; 5,43) Edad 5,65 (2,17) (5,05; 6,26) 5,46 (1,90) (5,15; 5,78) 5,34 (1,90) 6,25 (1,74) Categoría del médico 4,86 (4,07) 5,23 (1,36) 2 (1,36) p-valor 0,008 0,555 (5,03; 5,64) (5,66; 6,84) 0,009 (2,51; 7,21) (3,69; 6,76) (1,57; 2,43) 0,002 La secuencia de pruebas solicitadas en este GRD, distribuidas por servicios responsables de los pacientes queda expuesta en la figura 1. En esta figura se muestra la secuencia de las siete primeras solicitudes de pruebas, aunque el número total de peticiones llegó en algunos casos hasta 12. Así mismo, se muestra en qué secuencias hay una discordancia en las pruebas solicitadas entre servicios, en relación al número de pacientes, subrayándose los casos en los que el número de pruebas solicitadas es mayor. Cabe destacar que no se aprecian pruebas correspondientes a TC de carótidas en la figura 1, debido a la no realización de las mismas al no dispo- Neurología 149 1ª 2ª Rehabilitación 36 3ª 4ª 5ª 6ª 7ª TOTAL GRD 014 1040 Pruebas N R N R N R N R N R N R N R N R RM Cráneo 14 2 27 6 50 15 14 2 9 4 1 2 2 1 129 33 TC Cráneo 73 15 54 18 17 8 7 8 7 1 3 4 7 3 170 58 E. Doppler TSA 3 2 1 1 30 4 35 10 53 21 42 3 16 5 207 50 RM Carótidas 3 8 2 51 6 60 15 10 2 7 3 1 2 150 32 7 1 A. Cerebral y carótidas 2 1 2 Figura 1. Distribución y secuencia de pruebas en los Servicios de Neurología y Rehabilitación Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 Sabatel Hernández R, et al. Estudio de la variabilidad... En cuanto al número de pruebas solicitado y el servicio responsable del paciente, los resultados muestran que el Servicio de Rehabilitación solicita un mayor número de pruebas que el Servicio de Neurología siendo esta diferencia estadísticamente significativa, tal y como se muestra en la tabla 2. Se realizó un análisis comparativo, entre ambos servicios, estudiando la proporción de pacientes pertenecientes a uno u otro sexo no encontrándose diferencias estadísticamente significativas en la proporción de pacientes pertenecientes al sexo masculino. Se descarta, por tanto, la posibilidad de que las diferencias encontradas en el número de pruebas medio se deban a este factor. Por último, y tal como se observa en la tabla 2, se encontraron diferencias estadísticamente significativas en el número medio de pruebas realizadas a los pacientes según la categoría del médico responsable de los mismos (p-valor = 0,002). Al realizar las comparaciones múltiples y utilizando la corrección de Bonferroni con alfa co- rregido de 0,017, se obtienen diferencias estadísticamente significativas al comparar el número medio de pruebas solicitado por los médicos adjuntos y el número medio de pruebas solicitado por los médicos residentes (P <0,0001 <0,017). La reducción en el número medio de pruebas en el grupo de médicos residentes puede atribuirse a su poca experiencia, así como a una correcta tutela a cargo de sus superiores al estar en periodo de formación. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología cabo en el ámbito extrahospitalario como Atención Primaria, se observan diferencias estadísticamente significativas en el número de pruebas realizado a pacientes según su edad8,10,15. 241 Sabatel Hernández R, et al. Estudio de la variabilidad... ner el Servicio de Radiodiagnóstico en 2006 de TC multicorte. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Durante el año 2006, se obtuvieron un total de 7345,2 URV y un coste total de 122 297,58 € en el GRD 014, lo que supone 37,861 URV por paciente y 630,369 € por paciente. Las URV de cada Sección del Servicio de Radiodiagnóstico se muestran en la figura 2. Se obtuvieron un total de 924 625,09 URV, lo que supuso un coste medio de 16,65 €/URV. Si desglosamos las URV por los principales Servicios, se obtienen los resultados que se muestran en la tabla 3. 242 Finalmente, al realizar el estudio comparativo entre ambas variables principales, días de estancia y número de pruebas radiológicas, se comprobó que existe correlación lineal y positiva entre ambas. No se han encontrado referencias bibliográficas que también estudien la relación entre estas dos variables, de manera que no se han podido comparar los resultados de nuestro estudio con otros entes del ámbito hospitalario. Unidades relativas de valor en el Servicio de Radiodiagnóstico Discusión y conclusiones El incremento, en las últimas décadas, de las modalidades diagnósticas y terapéuticas de los Servicios de Radiología, así como la variedad de procedimientos radiológicos que aportan igual o similar información ante una misma enfermedad, obliga a la colectividad médica a poner en práctica una gestión de recur- sos eficientes. Nosotros nos planteamos como punto de partida en la realización de nuestro trabajo que debíamos investigar que los pacientes incluidos en un mismo GRD no deben recibir decisiones diagnósticas o terapéuticas muy diferentes cuando se realizan las solicitudes de pruebas diagnósticas por imagen y por tanto corroborar la existencia o no de diferencias. Hasta nuestro conocimiento, no hemos encontrado trabajos publicados (hasta el año de este estudio en 2006) que estudien la variabilidad de la práctica médica en pruebas radiológicas de los pacientes incluidos en un mismo GRD. Al realizar una búsqueda bibliográfica sobre la existencia de variabilidad en la práctica médica observamos que existen numerosos trabajos al respecto en relación a diversas técnicas, tratamientos quirúrgicos, tratamientos médicos, pero sin embargo, no encontramos en la bibliografía internacional estudios que estuviesen relacionados con las pruebas radiológicas de los pacientes incluidos en mismo GRD. En el estudio realizado, las características de los pacientes: edad, sexo e índice de Charlson, no tienen influencia en los días de estancia de los pacientes, objetivándose relación entre los días de estancia según el servicio responsable del paciente. Además, existe variabilidad en la práctica médica en el número de pruebas realizadas a los pacientes entre los servicios responsables, y el sexo de los mismos (no debiéndose las diferencias entre servicios al sexo de los pacientes). Tabla 3. Unidad relativa de valor en los Servicios de Neurología y Rehabilitación Servicio Neurología Rehabilitación Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 URV 6032,71 1026,23 Coste 100 444,62 € 17 082,9 € N.º de Pacientes 149 36 Coste/Paciente 674,12 € 474,525 € 382.289,28 350.000,00 300.000,00 250.000,00 200.000,00 148.370,28 150.000,00 115.172,42 134.121,61 100.000,00 85.762,40 58.909,10 50.000,00 0,00 Radiología de Urgencias (unidad) Tomografía Diagnóstica e intervencionista Neurorradiología Diagnóstica e intervencionista Angiorradiología Diagnóstica e intervencionista Ultrasonografía Diagnóstica e intervencionista Radiología General (incluye U. de mama) Figura 2. Unidad relativa de valor por secciones y unidades del Servicio de Radiodiagnóstico El Servicio de Rehabilitación solicitó el mayor número de pruebas por paciente, correspondiendo también a este servicio una mayor estancia media. También se encontró variabilidad en la práctica médica en el número medio de pruebas solicitadas entre el grupo de médicos adjuntos y el de residentes. Se destaca la correlación significativa existente entre los parámetros principales: días de estancia y el número medio de pruebas solicitadas a los pacientes. Este hallazgo conlleva un gasto doble en los recursos hospitalarios al suponer un gasto añadido en el número de días de ocupación de una cama hospitalaria y un gasto suplementario en la realización de pruebas de alta tecnología no indicadas. Las URV del GRD 014 corresponden a 7345,2, observándose un mayor coste por paciente en el Servicio de Neurología que en el de Rehabilitación. Al comprobar en este estudio una clara discordancia entre servicios tanto en los días de estancia como en número de pruebas, creemos que la elaboración de protocolos consensuados y guías de práctica clínica contribuirían a la disminución en la VPM del número de pruebas radiológicas solicitadas, de los días de estancia de los pacientes ingresados y, en definitiva, de los recursos empleados y los costes hospitalarios. Este trabajo abre posibilidades de investigación en los nuevos conceptos que en la actualidad están empezando a desarrollarse en la disciplina de la Economía de la Salud: uso inapropiado y costes evitables, como expresiones de investigación en desinversión16. Agradecimientos Agradecemos a la Dra. Begoña Bellas Beceiro, Jefa de Servicio de Admisión Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 Sabatel Hernández R, et al. Estudio de la variabilidad... 400.000,00 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 450.000,00 243 Sabatel Hernández R, et al. Estudio de la variabilidad... y Documentación Clínica del Complejo Universitario de Canarias, su colaboración en la aportación de los datos para la realización de este trabajo Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 3. McPherson K. Como debería modificarse la política sanitaria ante la evidencia de variaciones en la práctica médica. Var Pract Med. 1995; 7:9-17. 244 Bibliografía 1. Phelps CE, Parente ST. Priority setting in medical technology and medical practice assessment. Med Care. 1990;28(8):703-23. 2. Caicoya M, Alonso M, Nadal C, Sánchez LM, Alonso P, Moral L. La variabilidad en la práctica médica. A propósito de la utilización de TAC y RMN en el territorio INSALUD. Gac Sanit. 2000;14(6):435-41. 4. Iñiguez A. Variabilidad en la práctica médica. Gestón de Calidad [Internet]. Available from: http//www.webcalidad.org/articulos/var_pra_cli 5. Calvó-perxas L, Osuna MT, Gich J, Eligio-hernández E, Linares M, Viñas M, et al. Características clínicas y demográficas de los casos de demencia diagnosticados en la Región Sanitaria de Girona durante el período 2007-2010: datos del Registro de Demencias de Girona (ReDeGi). 2012;54(7):399-406. 6. Casas M, Abicart J, Bisbe J, Guash E, Ibern P, Fetter R, et al. Los Grupos Relacionados con el Diagnóstico. Experiencia y perspectivas de utilización. Masson, editor. Barcelona; 1991. 7. Goin JE, Hermann GA. The clinical efficacy of diagnostic imaging evaluation studies. Problems, paradigms, and prescriptions. Invest Radiol. 1991 May;26(5):507-11. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):235-44 8. Pérez I, Guillén F. Radiologia Innecesaria en Atención Primaria. An Sist Sanit Navar. 2007;30(1):53-60. 9. Ministerio de Ministerio de Sanidad y Política Social de Información. Memoria 2006. 2006. 10.Ministerio de Ministerio de Sanidad y Política Social de Información. Memoria 2007. 2007. 11.Saposnik G, Black SE, Hakim A, Fang J, Tu J V, Kapral MK. 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CHERE Working Paper 2010/5. Available from: http://www.chere.uts.edu.au Adecuación de las solicitudes de la ecografía abdominal en los pacientes que acuden a la Unidad de Urgencia del Hospital de Fuenlabrada 1 Martínez González J, 1Hernández Meléndez MT, Gómez Santos D, 2López-Pedraza Gómez MJ, 1Blasco Amaro JA 1 Médico Adjunto de Radiodiagnóstico. Hospital Universitario de Fuenlabrada. Fuenlabrada, Madrid. 2 Unidad de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (UETS). Agencia Laín Entralgo. Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid Dirección para correspondencia: [email protected] 1 Resumen Objetivos: Los estudios de adecuación tienen como finalidad reducir la variabilidad en la práctica clínica para conseguir una mayor calidad asistencial y eficiencia de los recursos utilizados. El objetivo de nuestro estudio fue evaluar la adecuación de las indicaciones de la ecografía abdominal, la calidad de la cumplimentación de la petición cursada en urgencias y conocer si la petición de la ecografía tuvo relevancia en la historia clínica (HC) del paciente. Método: La población de estudio estaba compuesta por todos los pacientes adultos que acudieron a la urgencia del Hospital Universitario de Fuenlabrada y se les solicitó una ecografía abdominal durante el año 2009. Los datos se obtuvieron del sistema informático de dicho hospital y de la HC electrónica del paciente. Se recogieron variables de identificación del paciente e información clínica (motivo de consulta, diagnóstico de sospecha y datos clínicos). Para evaluar la adecuación se utilizó el protocolo del plan de uso adecuado de tecnologías de diagnóstico por imagen en patología abdominal elaborado y publicado por la Unidad de Evaluación y Tecnologías Sanitarias de la Agencia Laín Entralgo de la Comunidad de Madrid. Se establecieron tres categorías: apropiada, inapropiada y dudosa. La calidad de la cumplimentación de la solicitud se definió como alta, media o baja. Resultados: Se revisaron y valoraron 641 solicitudes de ecografías abdominales de adultos realizadas en el Servicio de Urgencias. El 52% correspondió a varones con una media de edad de 50 años (desviación estándar [DE]: 20). El porcentaje de adecuación de las peticiones de ecografía abdominal en Urgencias de acuerdo al protocolo utilizado fue del 93,3%. El motivo de consulta y el diagnóstico de sospecha más frecuente fue el dolor abdominal (32 y 14%, respectivamente). La calidad de la cumplimentación de las solicitudes de ecografía fue bajo en el 18,7%, medio en 45,1% y alto en 36,3%. El 88% de los informes de las ecografías realizadas fueron relevantes o constaron en el informe de alta del paciente. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Judith Martínez González. 245 Martínez González J, et al. Adecuación ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 246 Conclusiones: El porcentaje de adecuación de las peticiones de ecografía abdominal en Urgencias de acuerdo al protocolo utilizado fue del 93,3%. La calidad de la cumplimentación alta fue del 36,3%, siendo las solicitudes adecuadas las que mejor se cumplimentaron (p<0,05). Palabras clave: Estudios de adecuación; Ecografía de abdomen; Urgencias. Adequacy of applications for abdominal ultrasound in patients who attend to the emergency of Hospital Universitario de Fuenlabrada Abstract Objectives: Adequacy studies are intended to reduce the variability in clinical practice to achieve a higher quality of care and efficiency of resource use. The aim of our study was to evaluate the appropriateness of indications of abdominal ultrasound, the quality of the completion of the request made in the emergency and know if the request of ultrasound has been relevant in the clinical history of the patient Method: The study population is composed of all adult patients presenting to the emergency hospital and were referred for abdominal ultrasound in 2009. The data come from the hospital information system and electronic patient. Variables are collected patient identification and clinical information (complaint, suspected diagnosis and clinical data). To assess the adequacy have used the Protocol Plan proper use of imaging technologies in abdominal pathology produced and published by the Evaluation Unit and the Agency for Health Technology Laín Entralgo of the Community of Madrid, establishing three categories: appropriate, inappropriate and uncertain. The quality of the filling of the application is defined as high, medium or low. Results: Were reviewed and evaluated 641 applications adult abdominal ultrasound performed in the emergency service. 52% are male with an average age of 50 years. The percentage of adequacy studies of emergency abdominal ultrasound according to the protocol used was 93.3%. The reason for consultation and the most common diagnosis was suspected abdominal pain (32 and 14% respectively). The quality of the filling has been low in 18.7%, medium in 45.1% and high in 36.3%. The 88% of the tests have been relevant in the patient discharge report. Conclusions: The percentage appropriateness of requests emergency abdominal ultrasound according to the protocol used was 93.3%. The high filling quality is 36.3% being suitable applications that best are completed (p <0.05). Key words: Adequacy studies; Abdominal ultrasound; Emergency. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 Para disminuir tanto la variabilidad como la incertidumbre en la práctica de los médicos clínicos y ayudar a establecer decisiones de forma sistemática, existen documentos de consenso basados en la evidencia científica disponible como son las guías de práctica clínica. En las técnicas de diagnóstico por imagen, estas guías de práctica clínica junto con otros documentos de consenso favorecen la adecuación de su uso. Entre el 10 y el 40% de las pruebas de diagnóstico por imagen se consideran inadecuadas, lo que supone una dificultad para el diagnóstico clínico del paciente, además de una pérdida de recursos1. La inadecuada solicitud de las tecnologías de diagnóstico por imagen, como puede ser la ecografía,entre otras, genera una sobrecarga para el Servicio de Radiodiagnóstico e incrementa el coste de oportunidad para otros pacientes, al no poder beneficiarse de esta prueba cuando está indicada. Además, el uso inadecuado El desarrollo de equipos de visualización de imágenes del cuerpo humano con medios no invasivos y poco lesivos para el sujeto ha supuesto grandes avances en el diagnóstico clínico. La ecografía es una prueba de diagnóstico por imagen que permite ver casi todo tipo de tejidos blandos, fundamentándose en la observación de cambios morfológicos de tamaño o deformidades de los órganos, alteraciones en el grado de ecogenicidad de los tejidos o presencia de estructuras anómalas. La inocuidad de esta prueba frente a otros sistemas basados en las radiaciones ionizantes, su fácil manejo y la buena relación calidad/precio de los equipos han contribuido de manera importante a su difusión. Es la técnica de primera elección en mujeres gestantes, niños y pacientes jóvenes, constituyéndose como excelente opción inicial en muchos casos y recomendándose como adecuada siempre que sea posible2. En el Plan de uso adecuado de tecnologías de diagnóstico por imagen en patología abdominal en Atención Primaria y especializada3, realizado por la Unidad de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (UETS) de la Agencia Laín Entralgo, se definen las indicaciones y recomendaciones para un uso adecuado de las tecnologías más frecuentes, entre ellas la ecografía. Están basadas en los criterios de la mejor evidencia científica y en el consenso de los profesionales expertos. Para elaborar este plan se realizó una búsqueda bibliográfica en la que se incluyeron documentos que evalúan criterios, indicaciones y recomendaciones de uso apropiado de los procedimientos diagnósticos, como ecografía, en Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 Martínez González J, et al. Adecuación ... Los estudios de adecuación tienen como objetivo reducir la variabilidad en la práctica clínica para conseguir una mayor calidad asistencial con los recursos asignados. Existe una gran variabilidad en la utilización de los procedimientos diagnósticos que no puede ser explicada exclusivamente por las características de los pacientes. La disminución de los usos inapropiados no es una tarea sencilla, pero si se consiguiera lograría mejorar la calidad asistencial y liberar recursos para proveer otros servicios, aproximándonos así al objetivo de mejorar la salud de la población y gestionar mejor los recursos disponibles. puede llevar a hallazgos casuales que generan pruebas y tratamientos adicionales innecesarios que originan incertidumbre y ansiedad en los pacientes. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Introducción 247 Martínez González J, et al. Adecuación ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 248 la patología abdominal de origen gastrointestinal (guías, protocolos, revisiones sistemáticas, informes de evaluación de tecnologías sanitarias y estudios primarios). Posteriormente se evaluó la calidad de los documentos encontrados atendiendo a los aspectos metodológicos del diseño del estudio, la población sujeta a estudio y los resultados obtenidos. Los documentos relevantes seleccionados se presentan en el Anexo 1. Tras ser revisados, se identificaron y analizaron en cada uno de ellos los criterios, las indicaciones y las recomendaciones específicas para la petición de los procedimientos diagnósticos, y se elaboró una propuesta de protocolo de uso adecuado según los diferentes cuadros clínicos o de sospecha diagnóstica. La metodología empleada es una variante del método RAND/UCLA, que propone utilizar la mejor evidencia científica disponible a partir de los estudios clínicos y complementar las áreas para las que no existe tal evidencia con el juicio de expertos. La opinión de los expertos se recoge básicamente a través de la técnica de consenso Delphi, que permite cotejar las opiniones, los acuerdos y desacuer- dos de los diferentes profesionales participantes en relación a un listado de 126 indicaciones o escenarios clínicos previamente elaborados, que evalúan 29 cuadros clínicos o de sospecha diagnóstica y corresponden a los cuadros clínicos abdominales más frecuentes o de mayor relevancia clínica. Los cuadros clínicos se distribuyen en los cuatro cuadrantes abdominales, junto con un apartado de dolor abdominal difuso. La clasificación de las patologías clínicas según la localización anatómica constituye una aproximación práctica y eficiente, que permite al clínico orientar rápidamente el diagnóstico ante un cuadro de dolor abdominal con una localización determinada. La ecografía abdominal es la técnica de primera elección en el dolor abdominal localizado en hipocondrios derecho e izquierdo. También es una prueba apropiada ante dolor abdominal en la fosa ilíaca derecha para realizar el cribado en pacientes con sospecha de apendicitis de presentación atípica, sobre todo en pacientes pediátricos y mujeres embarazadas. En el caso de dolor abdominal en la fosa ilíaca izquierda, las pruebas de imagen más apropiadas son la tomografía computarizada (TC) y la ecografía, con menor eficacia pero recomendada en mujeres en edad fértil para Anexo 1. Documentos incluidos en el Plan de uso adecuado de tecnologías de diagnóstico por imagen en patología abdominal en atención primaria y especializada3 – Making the best use of clinical radiology services: referral guidelines. The Royal College of Radiologist, 2007. – Appropriateness Criteria©. American College of Radiology (ACR) 2008. – Referral guidelines for imaging. Adapted by experts representing European radiology and nuclear medicine, in conjunction with the UK Royal Collage of Radiologist. EU 2000. – Criterios de remisión de pacientes a los servicios de radiología en el Área de Abdomen. Sociedad Española de Diagnóstico por la Imagen de Abdomen (SEDIA). Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM). Adaptación de los elaborados por la comisión europea. Madrid 2002. – Practice Guidelines and Technical Standards. American College of Radiology (ACR) 20042008. – Elección apropiada de técnicas de diagnóstico por imagen en la práctica clínica: Informe de un grupo científico de la OMS 1988. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 Sus resultados dependen de la habilidad y experiencia del profesional que realiza la prueba, aunque pueden aparecer dificultades en pacientes obesos o no colaboradores. En cualquier caso, deben utilizarse criterios de evidencia científica para evitar aquellas pruebas diagnósticas que no están justificadas y, por supuesto, no debe hacerse un uso excesivo de estas técnicas en detrimento de una correcta anamnesis. En el CMBD del año 2006 de la Comunidad de Madrid se recogieron los diez diagnósticos principales que se asocian con mayor frecuencia a ecografía de abdomen como procedimiento (ultrasonografía de abdomen, ultrasonidos diagnósticos de aparato digestivo y ultrasonidos diagnósticos de abdomen y retroperitoneo) El Hospital Universitario de Fuenlabrada atiende una población de algo más de 216 000 habitantes de los municipios de Fuenlabrada, Humanes de Madrid y Moraleja de En medio. El Para evaluar el uso apropiado de esta prueba diagnóstica, la Comisión de Tecnología y Adecuación de Medios Diagnósticos y Terapéuticos del Hospital Universitario de Fuenlabrada solicitó a la propia Agencia Laín Entralgo la evaluación de la adecuación de las solicitudes de diagnóstico por imagen de la ecografía abdominal, así como la calidad de la cumplimentación de la petición cursada desde el Servicio de Urgencias al Servicio de Diagnóstico por Imagen del Hospital de Fuenlabrada. Objetivos – Conocer el porcentaje de adecuación de las peticiones de ecografía abdominal, pélvica y renal en pacientes adultos que acudieron a los Servicios de Urgencia del Hospital Universitario de Fuenlabrada durante el año 2009. – Determinar el porcentaje de peticiones adecuadas según los servicios solicitantes. – Analizar la calidad de la cumplimentación de la solicitud. – Conocer si la petición de la ecografía tuvo relevancia en la historia clínica del paciente. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 Martínez González J, et al. Adecuación ... En los últimos años, la ultrasonografía (US) ha experimentado un importante desarrollo tecnológico, lo que ha ampliado sus aplicaciones clínicas; la mayoría de las veces como instrumento de diagnóstico no invasivo indispensable en Medicina, y en otras ocasiones como técnica auxiliar en procedimientos terapéuticos como la biopsia dirigida y el drenaje de colecciones4. hospital dispone de cinco ecógrafos en el Servicio de Diagnóstico por Imagen, tres de uso general, uno dedicado a técnicas portátiles e intervencionismo y uno exclusivamente dedicado al estudio de patología mamaria. Asimismo, existen otros diez equipos en otros servicios asistenciales. Durante el año 2009 se realizaron 23 203 ecografías, de las cuales el 87% correspondieron a pacientes ambulatorios, el 9% a ingresados y el 4% fueron solicitadas por Urgencias. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología realizar el diagnóstico diferencial con las patologías ginecológicas. Asimismo, la ecografía constituye la prueba de elección ante un cuadro clínico de dolor abdominal inespecífico cuya información ayudará a orientar el diagnóstico. Entre sus ventajas se encuentra que es una prueba rápida, de bajo coste, sin riesgo de radiación y de amplia disponibilidad1. 249 Martínez González J, et al. Adecuación ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 250 Metodología Pacientes y método La población de estudio está compuesta por todos los pacientes adultos que acudieron al Servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Fuenlabrada a los que se les solicitó una ecografía abdominal, pélvica o renal durante el año 2009. La identificación de los casos se realizó con el sistema informático del hospital, obteniendo los datos para la explotación desde el programa SELENE. Posteriormente se verificaron los datos obtenidos mediante una nueva consulta en el sistema informático del Servicio de Diagnóstico por Imagen (RIS). Se excluyeron del estudio a los pacientes menores de 18 años, los mayores de 18 cuya ecografía no correspondía al territorio abdominal, pélvico o renal, y aquellos cuyas solicitudes no fueron solicitadas desde Urgencia, es decir, las que procedían de consultas o de la hospitalización. Se recogieron datos para la identificación del paciente (edad, sexo y nacionalidad), fecha de realización de la ecografía, servicio y médico solicitante, prioridad de la prueba, área de localización de la ecografía, motivo de consulta, diagnóstico de sospecha y datos clínicos que justificaban la exploración solicitada). Los datos y las variables clínicas fueron recogidos y evaluados por dos médicos investigadores ajenos al Servicio de Diagnóstico por Imagen y al centro sanitario. Para identificar la adecuación se utilizaron las guías de referencia internacionales y el documento del Plan de uso adecuado de tecnologías de diagnóstico por imagen en patología abdominal3. Además, la información recogida en la solicitud se contrastó con el informe Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 ecográfico y la historia clínica del paciente. En los casos dudosos se solicitó información a un radiólogo del Servicio. Para valorar el uso adecuado del procedimiento, siguiendo el método RAND explicado anteriormente, las peticiones se clasificaron en apropiadas, cuando el beneficio en salud esperado superaba las posibles consecuencias negativas, por un margen suficiente para que mereciera la pena realizar el procedimiento diagnóstico, independientemente de su coste. En caso de que las consecuencias negativas excedieran a los beneficios, la indicación se consideró inapropiada. Y se definió como dudosa cuando los riesgos y los beneficios esperados eran similares. La calidad de la solicitud se valoró teniendo en cuenta la correcta cumplimentación de la petición. Para ello se utilizó la información suministrada en tres de los diferentes campos de la solicitud: motivo de consulta, diagnóstico de sospecha y datos clínicos. Se establecieron tres categorías para valorar el grado de cumplimentación de la solicitud: alto, cuando los tres campos aportaban información relevante y concordante con su categoría, medio cuando al menos dos campos cumplían la condición anterior, y bajo para el resto. Para completar la valoración y conocer si la solicitud de la ecografía tuvo relevancia en la HC del paciente, se consideró si el informe de la ecografía se incluyó en el informe de alta médica, en las notas médicas del paciente o en ambos. El análisis descriptivo de las variables cuantitativas se realizó mediante los procedimientos estadísticos de tendencia central y dispersión (media, desviación estándar [DE], mediana, mínimo y máximo); y el de las variables cualitativas mediante frecuencias y Durante el año 2009, en el Servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Fuenlabrada se realizaron 728 peticiones de ecografía abdominal y renal. Se eliminaron un 12% por tratarse de solicitudes de Pediatría (56), de las consultas u hospitalización (24), o por estar repetidas (7). Se revisaron finalmente 641 peticiones de ecografía abdominal en Urgencias, el 52,0% fueron de hombres y un 48,0% de mujeres, la media de edad fue de 49,8 años (DE: Los servicios peticionarios más frecuentes fueron Medicina Interna (79,8%) y Cirugía General y Digestiva (8,3%). La ecografía más frecuentemente solicitada según el área de localización fue la del área abdominal, siendo el 69,8% de las peticiones analizadas, el resto de las áreas se presenta en la (Figura 1). La media mensual de solicitudes de ecografía abdominal en Urgencias fue de 52 (DE: 10). El mes con menor número de solicitudes a lo largo del año 2009 fue julio (38 peticiones) mientras que en los meses de febrero y octubre ECOGRAFÍA ABDOMINOPÉLVICA 3,7% ECOGRAFÍA RENAL 11,4% ECOGRAFÍA PÉLVICA 15,1% ECOGRAFÍA ABDOMINAL 69,8% Figura 1. Porcentaje de las ecografías abdominales en Urgencias según el área de localización. Año 2009 Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 Martínez González J, et al. Adecuación ... Resultados 21,0 años), la mediana de 50 años, y la edad mínima y máxima de 14 y 96 años, respectivamente. De aquellos en los que figuraba la nacionalidad, el 88,0% eran españoles. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología porcentajes. Se utilizó la comparación de proporciones como prueba de homogeneidad entre variables cualitativas. El análisis de los datos se realizó mediante le paquete estadístico SPSSv18 para Windows. 251 Martínez González J, et al. Adecuación ... el número de solicitudes fue el más alto (66 peticiones). El motivo de consulta que apareció con mayor frecuencia fue el “dolor abdominal” (32,0%), seguido del “dolor en fosa renal” (6,7%), “dolor en fosa ilíaca derecha (4,7%), “dolor torácico” (2,5%) y de “otros” (2,2%). En el 2,2% de las solicitudes no figuró el motivo de consulta. Los 30 primeros diagnósticos de sospecha más frecuentes supusieron el 73,3% de las peticiones. Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Estos motivos de consulta varían según los servicios peticionarios, sobre todo en aquellos servicios que realizan menor número de peticiones ecográficas. 252 En el 14,0% de las peticiones, el diagnóstico de sospecha es “dolor abdominal”, seguido de “apendicitis aguda” en el 6,9%, “colecistitis” en un 5,3% y de “dolor lumbar” y “cálculo urinario”, ambos en el 3% de las ocasiones. En este caso únicamente aparece cumplimentado el campo con la palabra “otros” en tres ocasiones. Los 30 primeros diagnósticos de sospecha más frecuentes supusieron un 62,2% de las peticiones de ecografía. Estos diagnósticos de sospecha también variaron según los Servicios peticionarios, sobre todo en aquellos servicios que realizan menor número de peticiones ecográficas. En cuanto a los datos clínicos que justifiquen la exploración, en un 10% de las peticiones no se aportaban o se hacía de forma insuficiente. Esta información fue contrastada directamente por un radiólogo del centro, mediante comunicación telefónica con el médico solicitante. El porcentaje de adecuación de las peticiones de ecografía abdominal en urgencias de acuerdo al protocolo utilizado fue globalmente del 93,3% (Figura 2), en cuanto a la adecuación de la petición por servicios, se resume en la Figura 3. La media del porcentaje de adecuación fue de 93,3%; los Servicios de CiDUDOSO 0,9% INADECUADO 5,8% ADECUADO 93,3% Figura 2. Porcentaje de adecuación al protocolo de la ecografía abdominal en Urgencias Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 100,0% TRAUMATOLOGÍA 83,3% 80,0% CIRUGÍA GENERAL Y DIGESTIVA 98,1% 60,0% 40,0% 20,0% DIGESTIVO 88,9% 0,0% OBSTETRICIAGINECOLOGÍA 90,0% ONCOLOGÍA 86,7% NEFROLOGÍA 72,7% Martínez González J, et al. Adecuación ... MEDICINA INTERNA 94,3% Figura 3. Porcentaje de adecuación de la ecografía abdominal en Urgencias por Servicios rugía General y Digestiva (52 peticiones calificadas como adecuadas de 53 solicitadas) y de Medicina Interna (482 adecuadas y 511 solicitadas) se encontraban por encima de la media. El Servicio de Nefrología tuvo un porcentaje de adecuación del 72,7%, aunque tal vez no sea relevante por haber tenido únicamente 11 peticiones de ecografía. La adecuación de las solicitudes de ecografía al protocolo establecido, teniendo en cuenta exclusivamente la cumplimentación de la petición y sin considerar los datos de la historia clínica, fue del 85,5%. El grado de cumplimentación observado en las peticiones fue bajo en 120 casos (18,7%) y en 48 ocasiones el campo correspondiente a datos clínicos apareció cumplimentado con algún símbolo carente de significado para los revisores y los radiólogos (Figura 4). En cuanto a la cumplimentación de la solicitud y la adecuación al protocolo, se observó una relación estadística- mente significativa (p<0,05) entre el grado de cumplimentación y la adecuación de la petición, siendo el porcentaje de adecuación del 99,6% en aquellas peticiones clasificadas de alto grado de cumplimentación y descendiendo al 78,1% en las que se identificaron como de bajo grado de cumplimentación. Es decir, en las peticiones con cumplimentación de baja calidad, el uso inapropiado de la ecografía fue mayor, alcanzando la falta de adecuación al protocolo al 20,2% de las peticiones. En el 88,1% de los casos el informe de la ecografía apareció referido en el informe de alta de Urgencias o de hospitalización (Figura 5), y en caso de no tener informe de alta, quedó reflejado en las notas médicas. Este porcentaje descendió al 67,6% en aquellas peticiones calificadas como no adecuadas al protocolo. Se observaron diferencias estadísticamente significativas (p<0,05) en la proporción de ecografías que aparecieron referenciadas en los informes de alta o notas médicas, según que las peticioGest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología OTROS 75,0% 253 Martínez González J, et al. Adecuación ... BAJO 18,6% ALTO 36,3% Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología MEDIO 45,1% 254 Figura 4. Porcentaje de cumplimentación de la petición nes de ecografía hubiesen sido adecuadas o no al protocolo, en función de la información reflejada en la solicitud (90,0 frente a 77,3%). Es decir, las pruebas que fueron solicitadas de for- ma inadecuada o cuya adecuación fue dudosa fueron aquellas que menos veces aparecieron referidas en informe de alta médica del paciente. NO 11,9% SÍ 88,1% Figura 5. Porcentaje de informes de alta o notas médicas en las que se hace referencia a la ecografía solicitada Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 – Los Servicios de Cirugía General y Digestiva (98,1%) y de Medicina Interna (94,3%) fueron los que mayor número de peticiones de ecografía generaron y los que mejores proporciones de adecuación tuvieron. – La adecuación de las peticiones de ecografía a las indicaciones establecidas fue del 93,3%. Estos resultados no coinciden con los porcentajes de falta de adecuación de las pruebas de diagnóstico por imagen que aportan otros estudios y que consideran que del 10 al 40% de las pruebas son inadecuadas1. – La cumplimentación de alta calidad alcanzó el 36,6% de las peticiones. Se observó una relación estadísticamente significativa (p<0,05) entre el grado de cumplimentación y la adecuación de la petición, siendo el porcentaje de adecuación del 100% en aquellas peticiones clasificadas de alto grado de cumplimentación y descendiendo al 80% en las que se identificaron como de bajo grado de cumplimentación. – La adecuación de la petición al protocolo, teniendo en cuenta exclusivamente la información que figuraba en la solicitud, fue del 85,5%; pero al consultar la historia clínica del paciente esta adecuación aumentó hasta el 93,3% de las peticiones. – Los principales fallos en la cumplimentación de la petición fueron: información repetida ya en otros campos de la misma petición, cumplimentación con símbolos carentes de significado o con palabras que no aportan información (por ejemplo, “otros”) o la inclusión de un proceso anterior, sin relación – La información proporcionada por la ecografía apareció en el informe de alta de la Urgencia y en las notas médicas en una elevada proporción de los casos (88,1%). Además se observó que cuanto mayor fue la adecuación de la petición de la ecografía al protocolo mayor fue la relevancia de la ecografía en el Informe de alta del paciente. Martínez González J, et al. Adecuación ... Conclusiones con el proceso actual, como motivo de la petición. Limitaciones, recomendaciones y propuestas de mejora Limitaciones – Los sistemas informáticos RIS y SELENE no aportan la misma información, lo que hizo más difícil la búsqueda de la información. – La falta de calidad en la cumplimentación de la petición de ecografía dificultó la extracción de la información y la consecuente explotación de los datos. – Se identificaros algunas solicitudes de ecografía que no aparecían referenciadas en la HC del paciente. Recomendaciones y propuestas de mejora: – Establecer una adecuada correspondencia entre los datos del sistema informático del Servicio de Diagnóstico por Imagen y los que se extraen de la historia clínica. – Información para los facultativos sobre la necesidad de la correcta cumplimentación de los contenidos de los documentos de la historia clínica electrónica especialmente para los servicios con menor volumen de solicitudes y menor porcentaje de adecuación. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología Conclusiones y recomendaciones 255 Martínez González J, et al. Adecuación ... Iniciativas de Evaluación y Coste Efectividad en Radiología 256 – Información sobre la importancia de la correcta cumplimentación de la petición para la obtención de indicadores y de cuantificación de la actividad. – Intentar que la información relevante a partir de la comunicación telefónica con el Servicio de Diagnóstico por Imagen quede registrada. – Revisar el vínculo entre el campo del proceso y el de diagnóstico de sospecha. Evitar en la medida de lo posible la utilización de los campos abiertos que pueden inducir a errores o datos incorrectos. Esto facilita la adecuada justificación de la prueba con la solicitud. – Valorar con los servicios informáticos las posibles mejoras que faciliten la cumplimentación de la solicitud. – Valorar modificaciones en el campo “datos clínicos que justifiquen la exploración”. Bibliografía 1. Hospitals-Management and Use of Diagnostic Imaging Equipment. Annual Report of the Office of the Auditor General of Ontario. Ontario; 2006. Gest y Eval Cost Sanit 2013;14(3):245-56 2. Comisión Europea. Guía de indicaciones para la correcta solicitud de pruebas diagnostico por imagen. Protección radiológica 118. Luxemburgo: Oficina de Publicaciones Oficiales de las Comunidades Europeas. 2001. 3. Valentín López B, Blasco Amaro JA. Plan de uso adecuado de tecnologías de diagnóstico por imagen en patología abdominal en atención primaria y especializada. Madrid: Plan de Calidad para el SNS del MSC. Unidad de Evaluación de Tecnologías Sanitarias, Agencia Laín Entralgo; 2009. Informes de Evaluación de Tecnologías Sanitarias: UETS STVI08-11-1. 4. Osteba. Servicio de Evaluación de Tecnologías Sanitarias. Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco. Ultrasonidos diagnósticos en régimen ambulatorio en la CAPV: estado actual, recomendaciones de uso y práctica. VitoriaGasteiz: Gobierno Vasco. Departamento de Sanidad. Dirección de Planificación y Educación Sanitaria. 1998.