HEM DE LA SEGUNDA MITAD DEL EMBARAZO
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HEM DE LA SEGUNDA MITAD DEL EMBARAZO
TESIS PARA OPTAR TÍTULO DE SEGUNDA ESPECIALIDAD DE OBSTETRICIA EN SALUD FAMILIAR Y COMUNITARIA HEMORRAGIA DE LA SEGUNDA MITAD DEL EMBARAZO EN EL CENTRO DE SALUD DE TAMBO DE MORA TESISTA: VASQUEZ GUTIERREZ, VÍCTOR ICA - 2015 INDICE CARATULA………………………………………………….………………… 1 INDICE…………………………………………………………………………. 2 DEDICATORIA………………………………………………………………… 4 INTRODUCCIÓN……………………………………………………………… 5 I. RESUMEN …… ….…………………………………………………… 6 II. MARCO TEORICO …………………………………………………… 7 ANTECEDENTES……………………………………………………… 7 BASES TEORICAS…………………………………………………… 17 CAPITULO I……………………………………………………………… 31 TEMA DE CASO CLINICO…………………………………………………………………… 31 1. Definición……………………………………………………… ……… 31 2. Incidencia………………………………………………………………. 31 3. Etiología……………………………………………………… ………… 31 4. Epidemiologia ………………………………………………… ……… 33 5. Fisiopatología………………………………………………………….. 34 6. Diagnóstico diferencial…………………………..………………….. 35 7. Factores de Riesgo………………………………………………………………….. 36 8. Clasificación …………………………………………………………………………... 36 9. Las formas clínicas y frecuencia de presentación……………………………………….......................... 10. Repercusiones maternas, perinatales y sociales …..……………. 37 39 CAPITULO II CASO CLINICO……………………………………………………………… 40 1. Introducción……………………………………………….………… … 40 2. Objetivo ……………………………………..………………… ……… 40 3. Material y método……………………………………………………… 40 2 4. Caso clínico …….……………………………………………… …… 40 Anamnesis …………………………………………………… 40 Exploración física………………………………………..…… 41 Pruebas complementarias ……...…………………………… 42 Diagnostico …………………………………………………… 42 Tratamiento…………………….. …………………………… 42 Evolución………………………… …………………………… 43 5. Discusión y análisis …………………………………………..……… 43 6. Conclusiones y recomendaciones ………………… ……………… 44 7. Propuesta de Mejora ………………………………………………… 43 BIBLIOGRAFIA………………………………..……………………………… 44 ANEXOS……………………………………………….……………………… 52 3 DEDICATORIA Dedico esta investigación s Dios, y mis hijos por darme la oportunidad de vivir y por estar conmigo en cada paso que doy; por fortalecer mi corazón e iluminar mi mente y por haber puesto en mi camino a aquellas personas que han sido mi soporte y compañía durante el periodo de estudio AGRADECIMIENTO A mis profesores quienes que les debo gran parte de mis conocimientos, gracias a sus paciencia y enseñanza y finalmente un eterno agradecimiento a esta prestigiosa universidad a cual abrió sus puertas a personas como nosotros preparándonos para un futuro competitivo y formando como personas de bien. 4 INTRODUCCIÓN Paciente gestante de 37 sem por FUM quien ingresa al tópico de emergencia el dia 18- Enero 2016 a las 11: 50am con sangrado color rojo oscuro en moderada cantidad, pálida, mareos, disminución de movimientos del bebe, evaluada por equipo multidisciplinario. Se registra Au: 34cm, FCF: 162X¨ MF: no se evidencia, tacto vagina y especulocopia diferido. En historia clínica registra examen de laboratorio: con principal diagnostico anemia leve, no cumple con tratamiento indicado. La gestante demora en la atención por no reconocer como signos de alarma, la gestante es monitoreada sus funciones vitales, se coloca en decúbito lateral izquierdo y se administra oxígeno. Es referida a Hospital San José de Chincha en compañía de familiar, obstetra y personal técnico. Realizo visita domiciliaria correspondiente a la paciente encontrando puérpera de 1 sem, post cesareada con Dx: Desprendimiento prematuro de placenta, recién nacido vivo brindando la consejería del cuidado posparto y del neonato. 5 I. RESUMEN Se define como hemorragia de la segunda mitad del embarazo al sangrado que tiene lugar después de las 22 semanas de gestación. Las causas más frecuentes son placenta previa (PP) y desprendimiento prematuro de placenta (DPP), menos frecuentes son rotura uterina (RU), rotura del seno marginal y vasa previa1. Sin embargo, a pesar del escrutinio de la placenta después del parto, no se llega a encontrar una causa identificable de la hemorragia en 25 a 35% de los casos 2. En 5% de los embarazos se producen hemorragias anteparto, en 1% por placenta previa, en 1,2% por desprendimiento de placenta y en 2,8% por causas indeterminadas. En conjunto, todas estas causas de hemorragias son responsables de 20 a 25% de todas las muertes perinatales 3,4. Debemos tener en cuenta que la hemorragia en la segunda mitad del embarazo está asociada a parto pretérmino, causa principal de morbimortalidad perinatal, además de que también se puede asociar a sufrimiento fetal agudo y a óbito fetal. Por otro lado, tanto el desprendimiento prematuro de la placenta (DPP) como la placenta previa pueden ser causantes de sangrado materno importante, a veces asociado a coagulación intravascular diseminada (CID) -sobre todo los casos de DPP con óbito fetal-, siendo necesarias con cierta frecuencia las transfusiones de hemoderivados. Incluso, el gineco obstetra muchas veces debe tomar la decisión de realizar una histerectomía de emergencia. Y, pese a todos los esfuerzos realizados, nos encontramos con casos de muerte materna5. 6 II. MARCO TEORICO ANTECEDENTES INTERNACIONALES: A nivel internacional encontramos los siguientes estudios como el de Suarez J. et al 6 (2011) en su trabajo titulado “Algunos factores asociados a la morbilidad obstétrica extremadamente grave” se realizó un estudio descriptivo longitudinal y prospectivo en el Hospital Universitario Ginecoobstétrico "Mariana Grajales" de Santa Clara de enero de 2007 a diciembre de 2008, con el objetivo de describir los principales factores relacionados con la morbilidad obstétrica grave. Para la recogida de la información se confeccionó un formulario con las variables de interés a través de la revisión de historias clínicas individuales, de entrevistas a las pacientes y de datos ofrecidos por el departamento de estadísticas del hospital. Se constató que en el periodo del estudio 93 pacientes presentaron morbilidad obstétrica grave. Las principales causas estuvieron relacionadas con la hemorragia con 39,8 % y la preeclampsia 37,6%; la sepsis solo apareció relacionada en un 4,3 %; el parto distócico por cesárea fue un evento obstétrico relacionado directamente con la morbilidad grave y la realización de histerectomías obstétricas. Existe una relación directa entre los resultados maternos y los resultados perinatales en este grupo de pacientes. Se utilizaron los servicios de Terapia intensiva en los casos de extrema gravedad y ocurrieron 4 muertes maternas en estos dos años, se dejaron de vivir un total de 169 años por causas asociadas a la maternidad, y como promedio de años de vida potencialmente perdidos, cada mujer dejó de vivir 42,25 años por dichas causas. En tanto Peralta Z. 7(2011), en su investigación sobre el “Comportamiento de la mortalidad materna en la Provincia de Córdoba, periodo 2001-2009”, su objetivo es de conocer cuál ha sido el comportamiento de MM en la Provincia de Córdoba y sus causas, en el período 2001-2009. Un estudio retrospectivo, descriptivo y correlacional simple. Las variables estudiadas 7 fueron: número de MM por año, causas, momento de ocurrencia, edades de las pacientes, residencia, prevalencia del aborto, comparación con datos nacionales. Los resultados en el periodo 2001-2009 hubo 172 MM en Córdoba, se calcularon tasas sobre 100.000 nacidos vivos. La edad promedio fue de 30. La tasa fue de 26 en 2001 aumentando progresivamente hasta 2005 (34), disminuye en 2006 y 2007 con un franco incremento en 2008 y 2009llegando a 41 y 75. Existen variaciones importantes a nivel nacional, donde hay tasas que llegan a 197 en Formosa (2001) y a 7 el Buenos Aires (2008). En cuanto a las causas el aborto ocupó el primer lugar (26%), las causas indirectas globales llegaron al 33%, los estados hipertensivos al 15%, las infecciones el 10%, las hemorragias el 11%, otras causa directas el 5%. El aborto ocupó 50% de los óbitos en el año 2003. El incremento de las causas indirectas se relaciona con afecciones respiratorias y cardiovasculares. La distribución de acuerdo a la procedencia fue similarpara capital e interior. Se concluyó que la MM fue alta en Córdoba posteriormente a la crisis económica nacional del 2002, con un nuevo ascenso en 2008 y 2009, probablemente dependiente de factores socio económicos y a la pobre respuesta frente a la pandemia de gripe A. Los aspectos a mejorar son la inequidad, la prevención de embarazos no deseados y aborto, la legislación. La capacidad instalada y el recurso humano capacitado deberían y derivaciones rápidas y efectivas, sonaspectos pendientes. Se debe facilitar el empoderamiento, la educación, la igualdad de oportunidades en el acceso a los servicios de salud. Según Napoles M., (2012) 8 en su investigación titulada “Consideraciones practicas sobre la hemorragia en el periparto”, brindo el análisis sobre La hemorragia de origen obstétrico constituye la primera causa de morbilidad y mortalidad maternas en la región de las Américas y el mundo, con el sangrado posparto como su forma de presentación más común. La presente revisión ha perseguido actualizar la información disponible sobre prevención, diagnóstico precoz e intervención temprana en lo que respecta 8 al tratamiento médico o quirúrgico del riesgoso proceso, a fin de que apoye a la comunidad científica de esta disciplina en la toma de decisiones, contribuya a lograr un mejor control de esa contingencia negativa en las féminas y disminuya el número de madres fallecidas por complicaciones del embarazo, parto o puerperio, como la mencionada al inicio de esta síntesis. Peña G., et al (2012) 9 en su tesis titulada Prevalencia y factores de riesgo de placenta previa en pacientes que ingresaron al servicio de patología obstétrica del hospital gineco- obstétrico isidro ayora de quito, durante el período comprendido entre enero- diciembre del 2011. Con el objetivo de identificar la prevalencia y factores de riesgo de placenta previa, se realizó un estudio retrospectivo en el Hospital Gineco – Obstétrico Isidro Ayora de Quito, de enero a diciembre del 2011.Población 252 pacientes, muestra 50 mujeres con placenta previa. Se estudió las variables: edad, procedencia, paridad, volumen de sangrado, tipo de inserción placentaria, tipo de terminación del embarazo, patologías sobreañadidas, complicaciones post parto y otros. Mediante un instrumento se obtuvo: prevalencia 5/100, representa 5% de la población, edad materna 31 a 40 años 40%, factores de riesgo: procedencia urbana 64%, multiparidad 88 %, etnia negra 12%, tipo de inserción placentaria oclusiva total 42 %, cesárea 100%, pérdida sanguínea de 500 a 999 cc 80% y la mayor complicación histerectomía 44%, patologías sobreañadidas: anemia 30%. Arce R. et al 10 (2012), en el artículo científico sobre la “Guía de practica Hemorragias obstétrica en la segunda mitad del embarazo”, sostuvo que El embarazo a edades más avanzadas y el aumento en la frecuencia de nacimientos por cesárea pueden incrementar la incidencia de patologías asociadas con hemorragia obstétrica. En el Instituto Mexicano del Seguro Social son la segunda causa de mortalidad materna, solo precedidas por la preeclampsia-eclampsia. En los últimos años se han realizado diferentes estudios para mejorar la detección, el diagnóstico y el tratamiento oportunos 9 de mujeres con riesgo o presencia de hemorragia obstétrica para disminuir la mortalidad materna y perinatal. Por esa razón, el objetivo de esta guía de práctica clínica es mencionar las recomendaciones basadas en la mejor evidencia disponible, para estandarizar las acciones en relación con el diagnóstico y manejo de la hemorragia obstétrica en las unidades hospitalarias. Según Ruiz R. 11 (2012) en su artículo sobre “Hemorragias obstétricas, causa de muerte materna IMSS”, el objetivo fue describir las características maternofetales en las muertes maternas en el IMSS durante 2011. Métodos: se incluyeron muertes maternas en las que se identificó hemorragia grave durante el embarazo, parto o puerperio. Resultados: se analizaron 32 de 135 muertes maternas; 65.6 % presentó hemorragia obstétrica como causa básica y 34.4 %, hemorragia obstétrica grave con diferente causa básica de muerte materna. El grupo de edad con mayor número de muertes fue el de 30 a 39 años. La resolución del embarazo en la mayoría fue por cesárea. Predominaron el acretismo placentario y la atonía uterina asociados con otra patología. Concluye que la hemorragia grave que se presenta durante el embarazo, parto o puerperio continúa ocupando el segundo lugar como causa de mortalidad materna en México y en el Instituto Mexicano del Seguro Social. Es necesario continuar la estrategia de capacitación a los médicos ginecoobstetras para mejorar la competencia clínico-quirúrgica en el manejo de la paciente con embarazo y hemorragia Sin embargo Yepez R., 12 (2013) en la investigación realizada sobre Hemorragias uterinas del tercer trimestre de embarazo de 32 a 36 semanas, hospital obstétrico Enrique C. Sotomayor fue un estudio retrospectivo, descriptivo, de diseño no experimental, la recolección de la información fue extraída de las historias clínicas del departamento de estadísticas, cumpliendo con criterios de inclusión y exclusión y en base a 10 variables seleccionadas. La muestra seleccionada fue de 128 mujeres con embarazo de 32 a 36 semanas diagnosticadas al ingreso con hemorragias por desprendimiento prematuro de placenta con el 53.90%, placenta previa 42.96% y rotura uterina 0.78% de Septiembre 2012 a Febrero del 2013. Observando que la anemia en 48.43% y la hipertensión arterial en un 25% fueron los factores de mayor riesgos, entre las complicaciones materna el 96,87% fue anemia aguda y las complicaciones perinatales; la taquicardia, bradicardia e irregularidades de los latidos fetales en un 91.3%, según el Apgar el 7.03% fueron óbitos, el 17.96% deprimidos graves y el 28.95% deprimidos, referente a la edad y paridad la mayor frecuencia fue de 39.06% en mayores de 31 años, las multíparas en el 45.31%, referente al estado civil y nivel de escolaridad el 57.03% fueron de unión libre y el 43.75% de secundaria y de acuerdo al número de controles pre-natales encontramos apenas el 28.90% registró más de 5. Consideré con los resultados obtenidos elaborar estrategias orientadas en educación, porque: “Sí concienciamos a la gestante involucrando a su familia de la importancia de los controles prenatales lograríamos disminuir las complicaciones que presentan las hemorragias uterinas en el embarazo mejorando la salud materna y perinatal Villalba C., et al 13 (2014) en la investigación sobre “Morbilidad materna en la clínica universitaria” su objetivo fue de describir la morbilidad materna extrema en una clínica de alta complejidad obstétrica. Materiales y métodos: estudio descriptivo de vigilancia epidemiológica, basado en el análisis de los resultados de la implementación del subsistema de vigilancia de la morbilidad materna extrema (MME) en la Clínica Universitaria Colombia, entre junio de 2012 y junio de 2013. Esta es una institución de referencia que atiende pacientes de una empresa de aseguramiento privado y contributivo en Bogotá. Se estableció el número de gestantes que presentó morbilidad materna extrema en dicho periodo. Se evaluó la edad materna, la situación de salud generadora del reporte, los criterios 11 definitorios de MME y los indicadores de calidad de la MME. Se realiza análisis descriptivo de los datos y se presenta la razón de prevalencia de la morbilidad materna extrema. Su resultado sobre la prevalencia de MME en la institución fue de 11 por 1.000 nacidos vivos. El 55 % de los eventos se relacionaron con hemorragias del embarazo, seguidos por trastornos hipertensivos del embarazo (30 %), complicaciones de comorbilidades cardiacas (9 %) y choque séptico (6 %). Un 58 % de las pacientes presentaron disfunción orgánica, con una utilización de la Unidades de Cuidado Intensivo en 52 %; la transfusión de hemoderivados se requirió en un 61 % de los eventos y la cirugía adicional en un 36 %. El índice de mortalidad fue del 8 %. La relación MME/MM fue de 11:1. El porcentaje de casos de MME con más de tres criterios fue del 73 %. La morbilidad materna extrema es un problema frecuente en esta institución de referencia. Su medición es posible con base en la vigilancia pasiva y activa de los criterios definitorios. Se requiere más información de estos indicadores de calidad a nivel nacional para hacer comparaciones entre instituciones. NACIONALES A nivel nacional tenemos los estudios de Pérez C 14 (2010) en su artículo sobre “Hemorragias en la segunda mitad del embarazo, mortalidad perinatal y materna; en el INMP”, compromete entre el 9 al 15% de todas las gestantes. Se recuerda que se asocia a parto prematuro, desprendimiento prematuro de placenta, placenta previa, coagulación intravascular diseminada. En el manejo se requiere con frecuencia transfusiones de sangre y hemoderivados, así como realizar procedimientos quirúrgicos, incluyendo la histerectomía de emergencia. Se hace una revisión de las causas de hemorragias de la segunda mitad del embarazo, haciendo énfasis en el diagnóstico precoz y tratamiento oportuno de las patologías causantes. 12 Acho S., et al 15 (2011) en la investigación titulada Hemorragia de la segunda mitad del embarazo en un hospital nacional de lima tuvo como objetivos el de determinar la frecuencia de hemorragias de la segunda mitad del embarazo de la gestación. Estudio descriptivo. La población de estudio fueron las gestantes con hemorragia de la segunda mitad del embarazo. Se revisó 161 historias clínicas del Sistema Informático Perinatal del Departamento de Ginecología y Obstetricia, de gestantes con hemorragia de la segunda mitad del embarazo, en el período de enero de 2008 a diciembre del 2009. Las 161 historias clínicas analizadas representaron 1,68% de las atenciones obstétricas en el hospital. La edad de las gestantes con hemorragia de la segunda mitad del embarazo varió entre los 14 y 43 años, con una mediana de 28 años; 62,7% (n=101) presentó desprendimiento prematuro de placenta, 34,8% (n=56) placenta previa y 2,5% (n= 4) rotura uterina; 7,5% (n=12) tenía un control prenatal adecuado, igual o mayor de 6 controles, y 92,6% (n=149) menos de 5 controles; 77,6% (n=125) de las gestantes con hemorragia de la segunda mitad del embarazo tenía entre 36 y 40 semanas y 13% (n=21) entre 32 y 35 semanas. Los días de hospitalización fueron 3 a 20 días, con una mediana de 3 días. Se identificó 16 óbitos fetales, que constituyeron 9,9% del total de madres con hemorragia de la segunda mitad del embarazo, siendo la tasa de letalidad 0,62%. Concluyeron que la hemorragia de la segunda mitad del embarazo comprometió 1,68% de la población obstétrica en el periodo estudiado y produjo morbimortalidad materna y perinatal. Además Díaz M., (2011) atención de 16 emergencias en su artículo “Grado de uso de la guía de en hemorragia obstétrica severa y su correlación con el tiempo de estancia en el Hospital Vitarte de la Ciudad de Lima en el periodo 2005 al 2009”El objetivo planteado fue determinar la correlación existente entre el grado de uso de la guía de atención de emergencias en Hemorragia Obstétrica Severa, y el tiempo de estancia en el Hospital Vitarte de la ciudad de Lima en el periodo 2005 al 2009.Se 13 realizó un estudio de enfoque cuantitativo, de tipo de diseño observacional y correlacional. La Población en estudio estuvo constituida por las Gestantes que acudieron al hospital Vitarte en búsqueda de atención obstétrica por Hemorragia Obstétrica Severa y Shock en el periodo 2005 al 2009 y que cumplieron los criterios de inclusión, la cual asciende a 105 gestantes. Dentro de los resultados hallados se encontró que el grado de uso de la guía de atención de emergencias en Hemorragia obstétrica Severa se correlaciona negativamente con el tiempo de estancia en el Hospital Vitarte de la ciudad de Lima fue estadísticamente significativa (r=0.58; p=0.0001). La estancia hospitalaria fue de 2 días en 63 pacientes (60.00%) de ellas e igual o mayor o a 3 días 23 pacientes (31.43%). 92 (87.6%) salieron de alta mejoradas sin complicaciones, mejorada con complicaciones 2 (1.9%) y referida 8 (7.6%) pacientes. Las referidas fueron por complicaciones a descartar como: CID, insuficiencia renal a otro establecimiento de mayor complejidad. El grado de uso de la guía de atención de emergencias obstétricas fue alto en 96 (91.43%) de los casos, mediano en 8 (7.62%) y bajo en 1 (0.95%). A mayor grado de uso de la guía de atención de emergencias en Hemorragias Obstétricas Severas tuvo más días de estancia hospitalaria. Pero al parecer la calidad de su aplicación es inadecuada a juzgar por los resultados. Del total de pacientes 28 (26.7%) tenían instrucción primaria, 73 (69.5%) secundaria, 22 (21.0%) 1 embarazo, 35 (33.3%) 2 embarazos y 48 (45.9%) entre 5 y 8 embarazos, 40 (38.10%) tuvieron antecedente de aborto, 13 (12.38%) con antecedente de hemorragia y 5 (4.8%) antecedente de cesárea. La edad gestacional fue ≤22 semanas 14 (34.15%), 23 a 36 semanas 13 (31.71%) y ≥37 semanas 14 (34.15%). 35 (33.33%) tuvieron período intergenésico menor de 1 año. La condición de la paciente al ingreso fue: 96 (91.43%) de ellas estable y grave 9 (8.57%). En relación a los procedimientos, en el 68 (64.76%) de ellas se administró cristaloides o plasma, el monitoreo del estado de conciencia se realizó en 96 (91.4%) de ellas, la medición y control de la diuresis en 14 18 (17.1%) y el monitoreo de las funciones vitales en 95 (90.5%). La toma de exámenes de laboratorio se realizó en 101 (96.19%). Las complicaciones se observaron en 6 (5.71%) de las pacientes, complicaciones como: 1 Coagulación intravascular diseminada en casos de DPP, 1 útero de couvelaire, 1 rotura uterina y otras 3 a descartar CID. Del total 9 (8.57%) de las pacientes fueron referidas. El grado de uso de la guía de atención de emergencias en Hemorragia obstétrica Severa se correlaciona negativamente con el tiempo de estancia en el Hospital Vitarte de la ciudad de Lima. A mayor grado de uso de la guía de atención de emergencias en Hemorragias Obstétricas Severas tuvo más días de estancia hospitalaria. El grado de uso de la guía de atención de emergencias de Hemorragia Obstétrica Severa es alto, pero al parecer la calidad de su aplicación es inadecuada a juzgar por los resultados. Los factores que influyen en la estancia hospitalaria de las pacientes atendidas por emergencias en Hemorragias Obstétrica Severa fueron: Condición de ingreso y/o complicaciones de la Hemorragia Obstétrica Severa (severidad del cuadro por asociación a enfermedades intercurrentes); uso inadecuado de la guía (uso parcial), sub registro de diagnósticos complementarios en historia clínica. En otro antecedente citado es el de Palacios K. 17 (2012) “Morbilidad materna en primigesta adolescentes y adultas jóvenes, Instituto nacional Materno perinatal”, cuyo objetivo es de comparar las diferencias de las morbilidades entre las primigestas adolescentes y adultas jóvenes. El presente es un estudio de tipo retrospectivo, transversal, descriptivo comparativo. Se estudió 97 historias clínicas de primigestas adolescentes (10 a 19 años) y a 197 historias clínicas de primigestas adultas jóvenes (20 a 29 años) escogidas mediante el muestreo probabilístico estratificado proporcional; la información fue recogida mediante la aplicación de la hoja de registro. Para el análisis se utilizaron las distribuciones absolutas y porcentuales, la prueba de chi15 cuadrado y para determinar la asociación se utilizó Odds ratio con sus respectivos Intervalos de confianza del 95%. Por lo tanto estor resultados la edad promedio fue de 17 años en las adolescentes y de 22.9 años en las adultas jóvenes. Se observó que las adolescentes y las adultas jóvenes compartían características maternas similares (Convivientes, dedicadas a las labores domésticas, con escolaridad baja). Se comparó la presencia de 3 morbilidades en el embarazo, siendo la ruptura prematura de membranas a más frecuente en ambos grupos, existiendo mayor probabilidad en las adolescentes de presentar esta morbilidad (OR: 1,48 IC 0.85 – 2.56). No se hallaron mayores diferencias en el parto. Durante el puerperio se encontró más frecuente la hemorragia posparto en las adolescentes (17.5%) y en las adultas se halló mayor frecuencia de desgarros perineales (44.2%). Las morbilidades neonatales fueron semejantes en ambos grupos. Se encontró mayor frecuencia de ruptura prematura de membranas y hemorragia posparto en la adolescente, no obstante los resultados durante el parto y neonatales no se hallaron mayores diferencias entre las primigestas adolescentes y adultas jóvenes. Así mismo el trabajo realizado por Carpio L. (2013) 18 “ Situación de la mortalidad materna en el Perú 2000 – 2012 “, en el presente artículo se realiza un análisis respecto a la situación de la mortalidad materna en el Perú, se toma como fuente del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de la Mortalidad Materna de la Dirección General de Epidemiologia del Ministerio de Salud, así como la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar. Se evidencia una disminución en las razones de mortalidad materna entre los años 2000 y 2012, las causas directas se mantienen, pero en diferentes porcentajes por regiones naturales, donde la hemorragia es la primera causa de mortalidad materna. La cobertura de atención se ha incrementado en los últimos años pero todavía es necesario mejorar la capacidad de respuesta oportuna y de calidad de los servicios de salud. La mortalidad materna en el Perú está relacionada con la inequidad y la falta de 16 empoderamiento de las mujeres para ejercer sus derechos, en especial los sexuales y reproductivos. Es necesario fortalecer las estrategias que se han implementado para cumplir con la meta de la reducción de la mortalidad materna en el Perú. BASES TEORICAS HEMORRAGIAS EN EL SEGUNDA MITAD DEL EMBARAZO Definición: Sangrado vaginal variable que puede estar acompañado o no de dolor en la mujer con más de 22 semanas de gestación, con o sin trabajo de parto. 19 De otra forma, es la hemorragia que se presenta la madre como consecuencia del embarazo parto y puerperio que en países en desarrollo es la causa más común de muerte materna. Las dos entidades obstétricas principales que pueden ocasionar sangrado en las gestantes, son el desprendimiento de la placenta normo inserta y la placenta previa pero también pueden ocurrir la rotura uterina, tumores benignos o malignos del tracto genital inferior la vasa previa y la ruptura del seno marginal. Cada una de ella se encuentran asociados a diversas situaciones o factores que condicionan la aparición de sangrado durante el embarazo 20,21 Placenta Previa: Es la inserción placentaria anormal sobre el orificio interno del tero en gestación a término. De acuerdo a su ubicación se clasifica: 20, 21,22 Placenta previa total: El orificio cervical interno está cubierto completamente por la placenta. 17 Placenta previa parcial: El orificio cervical interno está cubierto parcialmente por la placenta. Placenta previa de inserción baja: El borde placentario se encuentre a unos 3 cm. De orificio cervical interno, pudiendo ser palpado digitalmente a través de la cerviz Actualmente gracias a la ecografía transvaginal se permite dar una ubicación más precisa de la placenta en relación al orificio cervical y de acuerdo a esto la placenta previa se clasifica en total, parcial y de inserción baja. Su exacta etiología es desconocida por lo que se considera de causa multifactorial y determinadas condiciones se asocian a una mayor incidencia de placenta previa: a) Alteraciones endometriales o miometriales : antecedentes de cesares, legrado uterino, multiparidad, edad sobre 35 años miomas uterinos. b) Aumento relativo de masa placentaria embarazo gemelar, fetos de altura, tabaquismo. c) La asociación entre la placenta previa y cicatriz de cesarea es de particular importancia debido al considerable aumento de esta intervención y el mayor riesgo de acretismo placentario que implica. Causas Durante el embarazo, la placenta se desplaza a medida que el útero se estira y crece. A comienzos de embarazo, es muy común que la placenta esté en la parte baja del útero. Pero a medida que el embarazo continúa, la placenta se desplaza hacia la parte superior de éste. Hacia el tercer trimestre, la placenta debe estar cerca de la parte superior del útero, de manera que el cuello uterino esté despejado para el parto.23 Algunas veces, la placenta cubre parcial o totalmente el cuello uterino. Esto se denomina placenta previa. 18 Existen diferentes formas de placenta previa: Marginal: la placenta está al lado del cuello uterino pero no cubre la abertura. Parcial: la placenta cubre parte de la abertura cervical. Completa: la placenta cubre toda la abertura cervical. La placenta previa ocurre en 1 de cada 200 embarazos y es más común en mujeres que tienen: Un útero anormalmente formado Muchos embarazos previos Embarazos múltiples (gemelos, trillizos, etc.) Cicatrización del revestimiento del útero debido a antecedentes de embarazo anterior, cesárea, cirugía o aborto Fertilización in vitro Las mujeres que fuman, usan cocaína o tienen niños a una edad avanzada también pueden tener un mayor riesgo. Síntomas El síntoma principal de la placenta previa es un sangrado vaginal súbito. Algunas mujeres presentan cólicos también. El sangrado a menudo comienza cerca del final del segundo trimestre o empezando el tercer trimestre. El sangrado puede ser intenso y potencialmente mortal. Puede detenerse por sí solo, pero puede empezar de nuevo días o semanas después. El trabajo de parto algunas veces empieza al cabo de varios días después del sangrado abundante. Algunas veces, es posible que el sangrado no ocurra hasta después del comienzo del trabajo de parto. Pruebas y exámenes 19 El médico puede diagnosticar esta afección con una ecografía del embarazo. Tratamiento Su proveedor de atención médica evaluará cuidadosamente el riesgo de sangrado comparado con el riesgo de un parto prematuro para el bebé. Después de las 36 semanas, dar a luz al bebé puede ser el mejor tratamiento.Casi todas las mujeres con placenta previa necesitan una cesárea. Si la placenta cubre todo o parte del cuello uterino, un parto vaginal puede causar sangrado intenso, lo cual puede ser mortal para la madre y el bebé. 21, 23 Si la placenta está cerca del cuello uterino o está cubriendo una parte de éste, el médico puede recomendar: Reducir actividades Guardar reposo en cama Descanso de la pelvis, lo cual significa no tener relaciones sexuales, ni practicarse duchas, ni usar tampones No se debe colocar nada en la vagina. Es posible que usted deba permanecer en el hospital para que el equipo médico pueda monitorearlos cuidadosamente a usted y al bebé. Otros tratamiento que usted puede recibir incluyen: Transfusiones sanguíneas Medicamentos para prevenir un parto prematuro Medicamentos para ayudar a que el embarazo continúe por lo menos hasta la semana 36 Inyección de un medicamento especial llamado Rhogam si su tipo de sangre es Rh negativo Inyecciones de esteroides para ayudar a que los pulmones del bebé maduren 20 Se puede hacer una cesárea de emergencia si el sangrado es abundante y no se puede controlar. Pronóstico El mayor riesgo es el sangrado intenso que puede ser potencialmente mortal para la madre y el bebé. Si tiene sangrado profuso, el bebé tal vez necesite nacer de manera prematura, antes de que los órganos mayores, como los pulmones, se hayan desarrollado.23 DESPRENDIMIENTO PREMATURO DEPLACENTA (DPP) Sinonimia: Separación prematura de la placenta, hemorragia accidental y Abruptio placentae (latin que significa “desgarro en pedazo de placenta”) Definición: Es la separación de la placenta de su sitio de implantación antes de que se produzca el parto fetal. Parte del sangrado puede insinuarse entre las membranas y el útero y drena por el orificio externo Hemorragias externa. Menos frecuente es que el sangrado salga al exterior quede entre la placenta despegada y el útero Hemorragia oculta que significa de mayor riesgo gravedad. 23, 24,25 De acuerdo a la gravedad del cuadro se clasifica según Vargas26, Mongrut27, Sher 28 en: 1. Grado I: Hemorragia escasa o ausente. El diagnostico se hace usualmente en el posparto. La mortalidad perinatal no está aumentada. Representada las formas leve y moderada que constituye el 80 % de los desprendimientos y que comprometen menos del 25% de superficie placentaria. 2. Grado II: Hemorragia ante parto oscura. Alteración de la contractibilidad uterina deto vico. Sufrimiento fetal agudo del 90% de los casos. La mortalidad perinatal esta aumentada particularmente en los que tiene parto vaginal. El desprendimiento de superficie placentaria e mayor 50% y la posibilidad de CIVD 30%. 21 3. Grado III: Incorpora las características del grado II, pero existe muerte fetal. En un grupo se presenta Coagulación intravascular diseminada. En esta grado se dan las muertes maternas Las causas primaria es desconocida pero su presentación es más común en grupos de mujeres gestantes con ciertos hábitos o características o con portadoras de patologías, lo cual convierte en grupos de riesgo. Así mas frecuente en gestantes añosas nulíparas, que presenten pre eclampsia, hipertensión crónica, ruptura prematura de membranas, DPP previos, leiomiomas uterino, diabetes mellitus o gestacional, inserción ve lamentosa del cordón , cordón corto, sobre distención uterina, trombofiliasas y en las que tienen habito de fumar o e consumir cocaína Entre los factores de riesgo se pueden mencionar: 29 Trastornos de la coagulación de la sangre (trombofilias) Tabaquismo Consumo de cocaína Diabetes Beber más de 14 tragos de alcohol por semana durante el embarazo Presión arterial alta durante el embarazo (aproximadamente la mitad de los casos de desprendimiento prematuro de placenta que llevan a la muerte del bebé están asociados con hipertensión arterial). Antecedentes de desprendimiento prematuro de placenta Aumento de la distensión uterina (puede ocurrir con embarazos múltiples o un volumen muy grande de líquido amniótico) Gran número de partos anteriores Edad avanzada de la madre 22 Ruptura prematura de membranas (la bolsa de agua se rompe antes de las 37 semanas en el embarazo) Miomas uterinos Síntomas Dolor abdominal Dolor de espalda Contracciones uterinas frecuentes Contracciones uterinas sin ninguna relajación de por medio Sangrado vaginal Pruebas y exámenes Los exámenes pueden abarcar: Ecografía abdominal Conteo sanguíneo completo Monitoreo fetal Nivel de fibrinógeno Tiempo parcial de tromboplastina Examen pélvico Conteo de plaquetas Tiempo de protrombina Ecografía vaginal Tratamiento El tratamiento puede incluir administración de líquidos a través de una vena (vía intravenosa) y transfusiones de sangre. Igualmente, se hará un control cuidadoso de la madre en búsqueda de síntomas de shock. Se 23 vigilará al feto en busca de signos de sufrimiento fetal, que incluye frecuencia cardíaca anormal.30 Se puede necesitar una cesárea de emergencia. Si el bebé está muy inmaduro y hay sólo un pequeño desprendimiento de placenta, la madre puede ser hospitalizada para observación minuciosa y se le puede dar de alta a los pocos días si su estado no empeora y cualquier sangrado se detiene.Si el feto está lo suficientemente desarrollado, se puede practicar un parto vaginal si es seguro para la madre y el niño; de lo contrario, se puede hacer una cesárea. 31, 32 Pronóstico La madre generalmente no muere a raíz de esta afección. Sin embargo, cualquiera de los siguientes factores aumenta el riesgo de muerte tanto de la madre como del bebé: 33,34 Cuello uterino cerrado. Retraso en el diagnóstico y tratamiento del desprendimiento prematuro de la placenta. Pérdida excesiva de sangre que causa choque o shock. Sangrado uterino oculto en el embarazo. Ausencia del trabajo de parto. El sufrimiento fetal ocurre temprano en este trastorno en aproximadamente la mitad de todos los casos. Los bebés que sobreviven tienen un 40 a 50% de probabilidades de presentar complicaciones que van de leves a graves. Posibles complicaciones 24 La pérdida excesiva de sangre puede provocar choque (shock) y la posible muerte de la madre o el feto. Si el sangrado se presenta después del parto y la pérdida de sangre no se puede controlar de otras formas, la madre puede necesitar una histerectomía (extirpación del útero). ABRUPTIO DE PLACENTA PRESENTACIÓN CLÍNICA Los síntomas del abruptio son sangrado genital oscuro, dolor abdominopélvico intenso y contracciones uterinas. La ecografía es de poca utilidad en el diagnóstico aunque puede observarse en estados tempranos y tardíos la presencia de sangre retroplacentaria. 35,36 El diagnóstico se basa en la clínica y la presencia de alteración del estado fetal evidenciado por pérdida de la reactividad, la variabilidad y alteración de los parámetros biofísicos. COMPLICACIONES COAGULACIÓN INTRAVASCULAR DISEMINADA Se identifica en 10% de las pacientes con abruptio. Es más grave en las pacientes con óbito fetal secundario. Se genera por un fenómeno protrombótico local con depleción sistémica del fibrinógeno y de la producción de fibrina con hipofibrinogenemia. ÚTERO DE COUVALLIER Es una complicación posparto secundaria a la infiltración eritrocitaria del endometrio que le da un aspecto violáceo sin permitirle la contracción adecuada, lo que lleva a hemorragia profusa. El tratamiento es la histerectomía Rotura Uterina. (RU) 25 Es la solución de la continuidad de la pared uterina, no quirúrgica, que ocurre durante el embarazo, una vez que el feto ha alcanzado su viabilidad y que pone en peligro la vida de la gestante, del producto o de ambos. Esta rotura ocurre por encima del cuello y en gestaciones avanzadas, porque habitualmente las del cuello reciben el nombre de desgarros y las del cuerpo, que se producen en gestaciones pequeñas, se denominan perforaciones uterinas. Es una complicación grave y se acompaña de alta mortalidad materna y perinatal. La incidencia es muy variable, algunos autores reportan 1 rotura espontánea cada 2000 nacimientos, mientras que otros plantean frecuencias de 8 por cada 1000 nacimientos. 37 Los factores que intervienen en la rotura uterina son heterogéneos y las causas más frecuentes son: Cesárea o histerotomía previa (aumenta 8 veces la posibilidad de rotura uterina). Presión excesiva sobre el fondo uterino (maniobra de Kristeller). Legrados uterinos a repetición. Fórceps e intervenciones destructoras. Uso inapropiado de oxitócicos. Gran multiparidad. Anomalías uterinas. Acretismo placentario y DPP. Mola invasora y carcinoma cervical. Fetales: macrosomía, malformaciones. Clasificación. La rotura uterina se puede clasificar de acuerdo a su extensión, su forma de presentación y antecedentes obstétricos. 38 a) Según su extensión: Rotura completa: Cuando la lesión abarca todo el espesor de la pared uterina e involucra al peritoneo visceral. 26 Rotura incompleta: Cuando la lesión se extiende solo al músculo uterino quedando el peritoneo intacto. b) Según la forma de presentación: Rotura espontánea: surge con útero indemne por distensión sostenida del segmento inferior, entre estas causas tenemos: pelvis estrecha, hidrocefalia, situación transversa y tumores pelvianos. Rotura traumática: Se origina por efecto de una violencia externa o por procedimientos obstétricos tales como versiones internas y gran extracción podálica, colocación de fórceps medio, maniobra de Kristeller y extracción manual de la placenta. c) Según el antecedente obstétrico: Con antecedente de cicatriz uterina: Se presenta luego de una cesárea, miomectomía y correcciones de malformaciones uterinas. Sin antecedente de cicatriz uterina: La rotura ocurre en anomalías placentarias como placenta áccreta y mola invasora. Manifestaciones Clínicas. La rotura uterina va precedida por signos y síntomas que hacen pensar que en poco tiempo va a ocurrir. El más común es el sufrimiento fetal en el trabajo de parto y le siguen en orden de frecuencia: dolor abdominal, hemorragia vaginal, falta de descenso de la presentación, hipertonía uterina y alteración del contorno uterino. 39, 40 El dolor se inicia a nivel del segmento uterino y se caracteriza por persistentes contracciones, se acentúa con la palpación y, en ocasiones se acompañas de los signos de Bandl y de Frommel. El signo de Bandl se caracteriza por la distención marcada del segmento inferior con ascenso de anillo de Bandl (limite superior del segmento cervico uterino) que puede llegar al ombligo y el signo de Frommel se origina porque los ligamentos redondos se ponen en 27 tensión y parecen cuerdas que tiran del segmento. La coexistencia de ambos signos se conoce como el síndrome de Bandl-Frommel y se asociados con sufrimiento fetal agudo conforman el cuadro clínico De inminencia de rotura uterina. Además al examen físico también se puede apreciar que en ciertas ocasiones el útero asemeja a un reloj de arena, en el tacto vaginal puede apreciarse el cuello alto y engrosado tirando de la vagina. Rotura Uterina Consumada: Después de los signos y síntomas anteriormente descritos, en el clímax de una contracción enérgica, la paciente se queja de un dolor agudo y cortante en el abdomen inferior y, a menudo, puede sentir que “algo se le ha roto” dentro de ella. Inmediatamente luego de esto cesan las contracciones uterinas y la gestante que estaba ansiosa, excitada y con dolor agudo, experimenta ahora un gran alivio. En ese momento puede sentir movimientos fetales muy activos que cesan cuando el feto muere. Como consecuencia de la rotura, aparece un sangramiento rojo radiante que puede no ser intenso, porque la mayor cantidad de sangre se encuentra en la cavidad peritoneal, y por eso llama la atención el mal estado de la paciente que no se corresponde con el aparente escaso sangramiento. Aspectos Diagnósticos. Además de las manifestaciones clínicas, el diagnóstico definitivo de rotura uterina se establece por medio de la visión directa durante el acto operatorio o con la revisión manual de la cavidad uterina. Las roturas uterinas de la pared posterior no son infrecuentes y, en muchas ocasiones, son difíciles de diagnosticar si el examinador es inexpertos. Aspectos Terapéuticos: Si se sospecha de RU se debe practicar una laparotomía para valorar la severidad de la misma y decidir la conducta. Histerorrafia se usa en pacientes 28 jóvenes, que deseen preservar su fertilidad, se encuentren hemodinamicamente estables al momento de la laparotomía y donde la reparación sea técnicamente factible. Se ha señalado una tasa de rotura uterina recurrente de 4 a 10% en pacientes con histerorrafia previa, por lo que se recomienda la cesárea electiva tan pronto se confirme madurez fetal. La histerotomía se recomienda en pacientes añosas, que hayan completado el número de hijos deseados, cuando la rotura es muy amplia y anfractuosa o cuando se comprometa el futuro obstétrico. Pronóstico. La rotura uterina se acompaña de un incremento notable en el índice de complicaciones y muerte materna. El diagnostico precoz, la intervención rápida, la disponibilidad de sangre y la antibioticoterapia han mejorado de manera considerable el pronóstico materno. El pronóstico fetal es malo porque en las etapas previas a la rotura uterina el feto puede fallecer por el síndrome de hiperdinamia y en los casos de rotura completa la muerte fetal es casi segura. Otras Causas Obstétricas. Una vez descartadas la Placenta Previa, el Desprendimiento Prematuro de Placenta y la Rotura Uterina como la causa de las hemorragias se debe establecer la posibilidad de rotura de vasa previa o rotura del seno marginal 4.- Rotura de Vasa Previa. Constituye una anomalía en la que los vasos umbilicales tienen una inserción velamentosa y atraviesan las membranas ovulares en el segmento uterino inferior, por delante de la presentación fetal. Esta patología tiene una incidencia de 1/2000 a 3000 partos y se observa con mayor frecuencia en embarazos gemelares. El sangrado genital generalmente ocurre cuando se produce la ruptura espontánea de membranas por laceración de los vasos 29 umbilicales. La hemorragia es de origen fetal por lo que puede haber sufrimiento y muerte fetal. Aunque no se presente la ruptura de los vasos puede haber hipoxia, cuando la parte fetal que se presenta comprime los vasos contra la pelvis materna. La vasa previa con sangrado vaginal se asocia con mortalidad fetal entre 75 y 100% de los casos y la muerte fetal secundaria a compresión del cordón se encuentra entre el 50 y 60%. El diagnostico generalmente se realiza postparto al revisar los anexos de un feto muerto o gravemente comprometido. En los pocos casos de sobrevida fetal, el diagnóstico clínico se sospecha cuando existe sangrado genital y alteración de la frecuencia cardiaca fetal después de la rotura de las membranas, con placenta de inserción normal o cuando por tacto vaginal se palpa un vaso pulsátil. Entre los métodos paraclínicos utilizados para el diagnóstico se encuentran: la confirmación de la presencia de componentes de sangre fetal en el líquido vaginal a través de la electroforesis de hemoglobina, el test de Kleihauer y el test de desnaturalización alcalina o test Ogita, que tiene la ventaja de no requerir equipo sofisticado. Otros métodos son la amnioscopia previa a la amniorrexis y el estudio ecosonografico que permite visualizar el vaso sanguíneo atravesando las membranas ovulares cerca del orificio cervical interno. Una vez comprobado el diagnostico se debe proceder a realizar una cesárea, a menos que el feto este muerto o el cuello este totalmente dilatado. El pronóstico materno es excelente porque esta es la única condición en la cual existe una elevada tasa de mortalidad fetal y ausencia de mortalidad materna. 39, 40 Rotura del Seno Marginal. El seno marginal es un colector venoso, venas dilatadas y lagos venosos, que recorre el margen de la placenta y lleva sangre de retorno a la circulación materna, aunque no existe evidencia anatómica del mismo. Es otra causa de hemorragias y el síntoma principal es la hemorragia vaginal de moderada intensidad, de sangre roja sin coágulos que ocurre durante el reposo o el sueño y que se puede detener en forma espontánea al formarse el coágulo que obtura el desgarro. En algunos casos el episodio se puede repetir con sangrado más 30 abundante. El seno marginal se puede romper durante el embarazo y, con mayor frecuencia, durante el parto. El mecanismo se relaciona a un exceso de tensión vascular por estancamiento del aparato venoso uterino y a una degeneración prematura de la placa decidual, que al menor estiramiento de las membranas ovulares ocasiona la rotura del seno marginal. Generalmente no se afecta el estado materno por lo que el tratamiento es expectante y se basa en reposo absoluto y mantenimiento del estado general de la paciente en el momento del parto se realiza amniorrexis y transfusión de hemoderivados en caso de ser necesario. CAPITULO I TEMA DE CASO CLINICO: Desprendimiento Prematuro de Placenta 1. Definición: El desprendimiento prematuro de placenta normoinserta (D.P.P.N.), abruptio placentae o accidente de Baudelocque 40 es el proceso de separación parcial o total de la placenta de su lugar de inserción normal que corresponde al fondo uterino, se produce a partir de las 20 semanas de gestación hasta antes del nacimiento del feto, pudiendo ocurrir incluso durante el trabajo de parto 41 2. Incidencia El desprendimiento de placenta complica del 0,4 al 1 % de los embarazos y su incidencia parece estar aumentando, posiblemente debido al aumento en la prevalencia de sus factores de riesgo. Del 40 al 60 % de desprendimientos ocurren antes de las 37 semanas de gestación y el 14 % antes de las 32 semanas.42 3. Etiología En muchas ocasiones, la causa del desprendimiento no se puede determinar con certeza pese a una amplia investigación clínica y epidemiológica. La mayoría de desprendimientos parecen estar relacionados con una enfermedad crónica placentaria basada en anomalías 31 en el desarrollo temprano de las arterias espirales (alteraciones en el proceso de invasión trofoblástica en el primer trimestre) que conduce a una necrosis decidual con activación de procesos inflamatorios, disrupción vascular y finalmente sangrado. A pesar de ello, múltiples factores de riesgo se han descrito en relación al DPPNI. Los principales son: 43,44,45 a) De etiología aguda: Traumatismo abdominal/accidente (mecanismo de aceleracióndeceleración): Se produce un cizallamiento de la placenta inelástica debido a la contracción súbita de la pared uterina subyacente. El desprendimiento de la placenta en estos casos suele presentarse dentro de las primeras 24 horas tras el evento precipitante y tiende a ser grave. Cocaína y otras drogas de abuso: Producen vasoconstricción, isquemia y alteración de la integridad vascular. Hasta un 10 % de las mujeres consumidoras de cocaína en el tercer trimestre tendrá un desprendimiento de placenta. Solicitaremos las pruebas de tóxicos en orina en las pacientes con factores de riesgo para el consumo de sustancias Tabaco: Tiene también efectos vasoconstrictores que causan hipoperfusión placentaria, isquemia decidual, necrosis y hemorragia. Es uno de los pocos factores de riesgo modificables. Conlleva 2.5 veces más riesgo de desprendimiento y el riesgo aumenta en un 40% por cajetilla fumada al día. Además, la combinación de tabaquismo e hipertensión tiene un efecto sinérgico sobre el riesgo descompresión uterina rápida tras rotura de membranas o parto del primer gemelo) b) Obstétricos y médicos: Hipertensión crónica y trastornos hipertensivos del embarazo : El tratamiento antihipertensivo no parece reducir este riesgo. Malformaciones uterinas (útero bicorne, sinequias uterinas, 32 leiomiomas...) Conforman sitios mecánica y biológicamente inestables para la implantación de la placenta; el desprendimiento en estos sitios puede ser debido a una decidualización insuficiente o a un cizallamiento excesivo. Cesárea anterior. Conlleva una implantación trofoblástica subóptima en esa zona. Rotura prematura de membranas Corioamnionitis Isquemia placentaria en embarazo previo (Preeclampsia, CIR o antecedente de DPPNI) c) Sociodemográficos: Edad materna ≥ 35 años Multiparidad (≥ 3 hijos) Sexo fetal masculino La presencia de anticuerpos antitiroperoxidasa elevados y el hipotiroidismo, incluso subclínico, se han asociado con desprendimiento en algunos estudios. Sin embargo, la mayoría de las mujeres con desprendimiento no presentan problemas tiroideos y la presencia de alguna alteración tiroidea no es predictiva de desprendimiento, así como no hay evidencia de que el tratamiento de las pacientes asintomáticas reduzca el riesgo de desprendimiento. 4. Epidemiologia El D.P.P.N. es la segunda causa en orden de frecuencia de las hemorragias de la segunda mitad de la gestación, siendo esta una complicación que afecta del 2-5 % de las embarazadas 47 . Constituye así mismo una de las complicaciones más riesgosas del embarazo y el parto, a pesar de todos los progresos aplicados a la vigilancia del embarazo de alto riesgo. Es así que esta patología continua apareciendo en nuestro país como una de las tres primeras causas de mortalidad materna (4) , que en las formas clínicas graves de la enfermedad alcanza un 20 % a causa del shock motivado por la hemorragia y la 33 hipofibrinogenemia 48 , asociada a muerte fetal en un 100% de los casos 49 y en un 30-35 % se asocia a la muerte perinatal que se halla en estrecha relación a cuadros de hipoxia y prematurez 50 . Presenta una incidencia que oscila entre 0,5 - 1 % que corresponde en su mayoría a los desprendimientos parciales, mientras que la proporción de los desprendimientos totales es del 0,5 % Esta es una patología que tiene tendencia a recurrir en embarazos posteriores con un riesgo de 5,6 a 17 % con un antecedente de abruptio placentae anterior y de aproximadamente un 25 % con antecedente de dos episodios previo Por lo mencionado anteriormente, consideramos importante realizar una revisión bibliográfica consultando variados textos y artículos publicados en los últimos años sobre esta materia, rescatando las ideas principales, seleccionando y sintetizando los datos relevantes, siendo el objetivo de este trabajo ofrecer un material de consulta rápida y actualizada que sea útil en el enfoque inicial y definitivo de las pacientes portadoras de dicha patología.51 5. Fisiopatología Se han propuesto varios mecanismos que explican el desprendimiento prematuro de la placenta. Uno de ellos implica la injuria vascular local. Se produce disrupción de los vasos sanguíneos de la decidua basal, condicionada por una arteriolitis. Los vasos sanguíneos de la decidua se rompen y se produce hemorragia en el espacio retroplacentario. 52 Otro mecanismo implica un aumento del tono y la presión intramiometral, con lo que se produce el colapso de las venas. De esta manera, la sangre que llega al útero, tiene dificultades para ser evacuada. Aumenta entonces la presión sanguínea dentro de los espacios intervenosos alcanzando valores muy altos, hasta que se rompen y dan origen al hematoma y al desprendimiento. 34 Luego de la formación del hematoma subplacentario, la hemorragia puede: 52 Limitarse a los márgenes de la placenta, en cuyo caso se produce una hemorragia invisible. Desprender las membranas y salir a través de la vagina, produciendo una hemorragia visible. Invadir la cavidad amniótica. Infiltrarse entre las fibras musculares uterinas, dando lugar al útero de Couvelaire, de color azul característico, con pérdida de la capacidad contráctil 6. Diagnóstico diferencial: En las mujeres embarazadas con sospecha de desprendimiento, el diagnóstico diferencial de sangrado vaginal acompañado de dolor y contracciones incluye el trabajo de parto normal, la placenta previa, la rotura uterina y el hematoma subcorial. 53,54 a) Trabajo de parto: Los signos y síntomas del parto tienen un inicio más gradual que los del desprendimiento. El inicio del parto (prematuro o a término) se caracteriza por contracciones uterinas leves e irregulares que con el tiempo se vuelven cada vez más regulares y dolorosas y se acompañan de dilatación y/o borramiento cervical. Sin embargo, puede haber una superposición de síntomas cuando el desprendimiento se comporte como desencadenante de un trabajo de parto. b) Placenta previa: La presentación clínica característica de la placenta previa es un sangrado vaginal indoloro en gestantes de más de 20 semanas de gestación. Sin embargo, del 10 al 20% de los casos se presentan con una hemorragia asociada a dinámica uterina. Por lo tanto, el desprendimiento y la placenta previa pueden ser difíciles de distinguir clínicamente ya que el desprendimiento puede no estar asociado a dolor significativo y la placenta previa puede no ser indolora. Por ello, en toda embarazada con sangrado vaginal se debe realizar 35 una ecografía para determinar si la placenta previa es la causa del sangrado. c) Rotura uterina: La sospecharemos en mujeres con antecedentes de cicatriz uterina previa o malformaciones uterinas. Los signos de rotura uterina pueden incluir alteraciones bruscas de la FCF, sangrado vaginal, dolor abdominal constante, cese de las contracciones uterinas, retroceso de la presentación fetal e hipotensión materna y taquicardia. Muchos de estos síntomas son comunes al desprendimiento debido a que la rotura uterina a menudo conduce a una separación de la placenta. d) Hematoma subcorial: El hematoma subcorial se cree que es el resultado del desprendimiento parcial de las membranas coriónicas de la pared uterina. Las pacientes se presentan asintomáticas o con un ligero sangrado vaginal. En contraste con el desprendimiento, el dolor abdominal suele estar ausente, sólo una minoría de las pacientes sienten calambres o contracciones, y el diagnóstico se hace generalmente antes y no después de 20 semanas de gestación. El diagnóstico se basa en el hallazgo ecográfico de una zona hipoecoica o anecoica en forma de media luna detrás de las membranas fetales, que también pueden elevar el borde de la placenta. Cabe destacar que las mujeres con hematoma subcorial tienen un riesgo cinco veces mayor de desarrollar un desprendimiento de placenta, así como otras complicaciones del embarazo (por ejemplo, trabajo de parto prematuro o rotura prematura de membranas). 7. Factores de Riesgo: Dentro de los factores de riesgos tenemos los siguientes: 55 Antecedente de DPP Preeclampsia Cordon corto Consumo de cocaína, PBC Embarazo multiple 36 Polihidramnios Traumatismo abdominal Iatrogenia: Uso indebido de la oxitocina, misoprostol, versión externa. 8. Clasificación: Se clasifica DPP según Page en: 56 Grado 0: Casos asintomáticos Grado I: metrorragia variable sin otros síntomas Grado II: Feto vivo, presencia de dolor abdominal, hemorragia oculta afectación fetal y menos frecuentemente CID. Grado III: Muerte fetal con sintomatología aumentada y aumento de las complicaciones. 9. Las formas clínicas y frecuencia de presentación La hemorragia de vasos arteriales con elevada presión típicamente ocurre en la zona central de la placenta y conduce a un rápido desarrollo de manifestaciones clínicas severas potencialmente mortales (sangrado grave, coagulación intravascular diseminada y anomalías graves en la FCF) En cambio, la hemorragia de vasos venosos con baja presión ocurre por lo general en la periferia de la placenta (desprendimiento marginal) y es más probable que produzca manifestaciones clínicas que se desarrollen con el tiempo (sangrado intermitente, oligohidramnios, retraso del crecimiento fetal) Actualmente distinguimos entre desprendimiento agudo y crónico de placenta: 57, 58,59 1. Desprendimiento agudo de placenta: El desprendimiento agudo de placenta se presenta clásicamente con: Sangrado vaginal brusco. Es el signo de presentación más frecuente (78% de los casos). 37 Dolor abdominal leve-moderado y/o dolor lumbar (suele aparecer cuando la placenta está en la pared posterior del útero). Contracciones uterinas hipertónicas. El útero suele encontrarse aumentado de tono/rígido y puede estar sensible durante y entre las contracciones. Patrón anormal de la frecuencia cardíaca fetal (FCF). Cabe destacar que la presencia del cuadro clínico completo sólo se produce en un número reducido de casos. El sangrado vaginal puede variar desde leve y clínicamente insignificante, a grave y amenazar la vida de la paciente. Hay que tener presente que es fácil subestimar la pérdida sanguínea pues el sangrado puede quedar retenido detrás de la placenta y, por lo tanto, ser difícil de cuantificar. Debido a ello se debe tener presente que la cantidad de sangrado vaginal se correlaciona mal con el grado de separación de la placenta y no sirve como un marcador útil de riesgo fetal o materno. En cambio, la hipotensión materna y las anomalías en la FCF sí son predictivas de la gravedad del cuadro. Cuando la separación de la placenta es superior al 50% aumentan las probabilidades de coagulación intravascular diseminada y muerte fetal. Cabe resaltar que en un 10-20% de los desprendimientos placentarios las pacientes presentan una clínica de trabajo de parto prematuro con escaso o nulo sangrado vaginal. En estos casos, denominados 'desprendimiento oculto', toda o la mayor parte de la sangre queda atrapada entre las membranas fetales y la decidua, en lugar de escapar a través del cuello uterino y la vagina. Por lo tanto, en las mujeres embarazadas que se nos presenten con dolor y contracciones, incluso una pequeña cantidad de sangrado vaginal debe obligarnos a descartar un desprendimiento de placenta. En otros casos, un pequeño desprendimiento oculto puede ser 38 asintomático y sólo reconocido como un hallazgo casual en una ecografía. 2. Desprendimiento crónico de placenta: Las pacientes con un desprendimiento crónico presentan un sangrado intermitente, leve pero crónico, que con el tiempo conduce a la presencia de manifestaciones clínicas relacionadas con una enfermedad placentaria isquémica: oligoamnios, restricción del crecimiento fetal y preeclampsia. En ellas, los estudios de coagulación son normales y la ecografía puede identificar el hematoma placentario (tras las membranas, marginal o central). El desprendimiento en el segundo trimestre acompañado de oligoamnios tiene un pronóstico sombrío, incluyendo altas tasas de muerte fetal, parto prematuro y morbilidad neonatal grave o muerte. 10. Repercusiones maternas, perinatales y sociales Para la madre, las posibles consecuencias del desprendimiento se relacionan principalmente con la gravedad y el grado de separación de la placenta, mientras que los riesgos para el feto están relacionados tanto con la gravedad de la separación como con la edad gestacional en la que se produce el episodio. 60,61 a) Consecuencias maternas: La repercusión hemodinámica materna es variable, desde una leve hipotensión hasta un cuadro de shock hipovolémico por pérdida sanguínea grave. Coagulación intravascular diseminada que puede desencadenar una insuficiencia renal, síndrome de distress respiratorio del adulto, fracaso multiorgánico y muerte (La muerte materna es siete veces mayor que la tasa general de mortalidad materna en gestantes). 39 Aumento de la tasa de cesáreas urgentes por interés fetal o materno. b) Consecuencias fetales y neonatales: Aumento de morbilidad y mortalidad perinatal relacionada con la hipoxemia, la asfixia, el bajo peso al nacer y el parto prematuro. b. Restricción del crecimiento fetal en los casos de desprendimiento crónico. El desprendimiento es una causa importante de morbimortalidad materna y perinatal. La tasa de mortalidad perinatal es de aproximadamente un 12% (frente al 0,6% de los nacimientos sin desprendimiento). La mayoría de las muertes perinatales (hasta el 77 %) se producen intraútero y las muertes en el período postnatal se relacionan principalmente con la prematuridad. Sin embargo, la mortalidad perinatal asociada al desprendimiento parece estar disminuyendo. En los países desarrollados, aproximadamente el 10% de todos los nacimientos pretérmino y el 10-20% de todas las muertes perinatales son causados por desprendimiento de la placenta. CAPITULO II CASO CLINICO 1. Introducción El desprendimiento prematuro de placenta normalmente inserta (DPPNI) es la separación prematura, parcial o total, de una placenta normoinserta de su inserción decidual después de la semana 20 o 22 de gestacióny antes del periodo del alumbramiento. Se estima que se produce en 6,5 embarazos por cada 1.000 nacimientos.La triada clásica de síntomas es hemorragia, dolor e hipertonía uterina. La hemorragia, escasa y de color oscuro, se da en el 80% de los casos. El dolor suele ser de aparición brusca y lacinante3. Las exploraciones complementarias son el registro cardiotocográfico (RCTG) y la ecografía.62 40 2. Objetivo: Presentación de un caso y revisión bibliográfica 3. Material y método: Para el estudio y análisis del caso clínico se utilizó la Historia clínica de Centro de Salud De Tambo de Mora, además se aplicó una ficha de recolección de datos y se contrasto la información con base de datos por medio de Biremes, Scielo, Pubmed, Medline, biblioteca virtual Universidad Cayetano Heredia, Biblioteca virtual Universidad Mayor de San Marcos, 4. Caso clínico Anamnesis: Fecha: 18-Enero- 2016 Hora: 11:50 am Datos de Filiación: Edad: 36 años Estado civil: Casada Ocupación: Obrera Grado de Instrucción: Secundaria Completa Enfermedad Actual: Paciente de 36 años, con edad gestacional 36 sem. Acude al establecimiento de salud por referir sangrado genital color rojo oscuro en cantidad moderada, dolor abdominal constante, disminución de los movimientos fetales hace más o menos 5 horas. Además refiere tener mareos, cansancio y que durante su última atención tuvo diagnóstico de anemia leve, y refiere no haber estado cumpliendo son suplemento de hierro. Antecedentes Personales: Obstétricos: Menarquia: 12 años FUR: 04-07-2015 R/C: 3 /30 IRS: 15 años PS: 01 pareja FPP: 09-04-2016 F.OBST. G4P4004 APN: 05 atenciones 41 Exploración física: Peso: 75. 300 Kg P.A: 150/90 mmhg FC 118X´ T°36.8°C R: 20X’ Cabeza y Cuello: mucosa oral hidrata, conjuntivas pálidas, no adenopatías, Cardiopulmonar: ruidos cardiacos rítmicos aumentados, expansión pulmonar normal, murmullo pulmonar presente, con ruidos agregados. Abdomen: Útero grávido con AU: 33cm. Feto único longitudinal cefálico derecho. FCF: 162X’. Tono uterino aumentado MF no se evidencian Genitourinario: Genitales externos normo configurados, Se difiere especulocopia y tacto vaginal Extremidades Inferiores: Se evidencia edema grado I Pruebas complementarias En Historia Clínica registra los siguientes análisis con fecha 30/12/2015 ANALISIS RESULTADOS Hemoglobina 10.5gr/dl Examen Completo de orina Leucocitos:5 – 8 por campo Piocitos: No se evidencia Gérmenes y bacterias: +++ Glucosa 76mg/dl Grupo Sanguíneo y factor RH O+ VDRL No reactivo 42 VIH No reactivo Imágenes: En Historial clínica se registra ecografía con fecha 23 de diciembre 2015 EG: 34 .5 sem Feto: LCD FCF: 144X´ Peso: 2300gra Placenta: posterior grado II Diagnostico: Multigesta de 37 sem. por FUM Feto único vivo Taquicardia fetal D/C Desprendimiento prematuro de placenta D/C Preeclampsia D/C Sufrimiento fetal agudo Tratamiento Fecha: 18-Enero- 2016 Hora: 11:50 am Se realiza control y monitoreo de funciones vitales del feto y de la madre Se coloca Cloruro de Sodio al 9% con catéter N° 18, Se coloca a la gestante en decúbito lateral izquierdo Se administra oxígeno a 4l x min Se coloca paños para el control del sangrado Médico de guardia hace referencia al Hospital San José Evolución: Fecha: 18-Enero- 2016 Hora: 12:15 pm 43 Pacientes gestante es referida a Hospital San José de Chincha, acompañada de familiar y monitoreada sus funciones vitales por obstetra y técnica de enfermería. Fecha: 26 – Enero – 2016 Hora: 4:00 pm Obstetra de turno realiza vista domiciliaria a paciente, encontrándola acompañada en familiar. Puérpera de 1 sem , post cesareada por Dx de desprendimiento de placenta / Preeclampsia/ anemia moderada, recién nacido a término. Paciente refiere cumplir con tratamiento (sulfato ferroso), brinda lactancia materna mixta, Además no se administró ningún método anticonceptivo El profesional brinda consejería en cuidado posparto, cuidados del recién nacido, asesora en lactancia materna exclusiva. Se concluyó la visita con el compromiso de la puérpera en acudir al establecimiento de salud. 5. Discusión y análisis La paciente acude al tópico de emergencia del Centro de Salud Tambo de Mora que es un Centro de Salud nivel I- 3, que no cuenta con personal especialista, solo cuenta con equipo básico de atención; solo algunos de los profesionales están capacitado en atención de emergencias obstétricas La paciente es evaluada por médico de guardia, acompañado del equipo multidisciplinario (Obstetra, Enfermera y Técnico de enfermería), en el establecimiento no cuenta con insumos para la Clave roja; médico y obstetra realizan la evaluación, medico ordena la colocación de vía endovenosa. 44 Se observa en el carnet de APN, que la paciente tenía 5 APN; la primera con 14 sem. y una presión arterial base de 90/60 mmhg. Se observa una demora en la atención por parte de la paciente que al parecer no reconoce los signos de alarma, lo que podría poner en riesgo el estado de salud de la madre y el producto. Los análisis registrados en la historia son actualizados, pero no ayudan al diagnóstico actual de la gestante. Además se observa que la gestante presenta una anemia leve según estos análisis La paciente refiere no haber cumplido con tratamiento para la anemia, por motivos laborales. Pudiendo esto agudizar su estado La evaluación fue la adecuada, según la guía protocolizada se establece diferir el tacto vaginal y especulopía. Lo que no se observa es que no hay coordinación con el servicio de referencia y emergencia del hospital San José de Chincha La paciente es referida al hospital San José de Chincha, acompañada de familiar, obstetra y técnico de enfermería que monitoreo las funciones vitales de la madre y el feto. Se desconoce si el familiar que acompaña puede ser un posible donante de sangre. Lo que causaría demora en buscar donantes compatibles. La paciente es recibida por ginecólogo y obstetra de guardia, quien evalúa y solicitan los análisis y ecografía de urgencia. Se realiza visita domiciliara a paciente establecido por una semana para su seguimiento, realizado por el profesional obstetra, debiendo ser atendido por equipo multidisciplinario, esto se debería a la falta de personal profesional para ejecutar dicha actividad. 45 6. Conclusiones y recomendaciones El Centro de salud de tambo de mora no se encuentra implementado para el manejo de emergencias obstétricas, por falta de insumo y personal. No existe coordinación entre el servicio de referencia del centro de salud Tambo de Mora y el servicio de referencia y contra referencia del Hospital San José. El personal del establecimiento no se encuentra capacitado en emergencias obstétricas. 46 Existe demora en la atención oportuna en la emergencia obstétrica por parte de la paciente. 7. Propuesta de Mejora Capacitar al personal sobre emergencias obstétricas Realizar las gestiones para la implementación para las claves en emergencias obstétricas en centro de salud Tambo de Mora (Insumos y personal) Sensibilizar a la paciente, familia, comunidad en signos de alarma durante el embarazo. 47 Sensibilización y capacitación a autoridades municipales respecto a la atención materno neonatal enfocado a la prevención de emergencias obstétricas Sensibilizar y capacitar a los agentes comunitarios en signos de alarma durante el embarazo. Crear el centro de Vigilancia Materno Establecer coordinaciones con el servicio de referencia y contra referencia del Hospital San José de Chincha. BIBLIOGRAFIA 1. Cobo E. Metrorragias de la segunda mitad de la gestación. Desprendimiento prematuro de placenta normo-inserta, placenta previa. En: Pérez Sánchez. Obstetricia. 2a edición. Chile: Publicaciones Técnicas Mediterráneo; 1994:525-34. 48 2. Martell A, Astorga A. 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DATOS DE ANAMNESIS Fecha:___________ OCUPACION___________ Hora de Ingreso:______________ 55 3. ANTECEDENTES PERSONALES Menarquia: R/C: FPP: F. Obste: IRS: PS: FUM: APN: 4. EXPOLARCION FISICA Peso: Kg P.A: mmhg FC T° R: Cabeza: Cardiopulmonar: Abdomen: Genitourinaario: Extremidades inferiores: 5. EXAMENES AUXILIARES Hemoglobina: Resultado:___________ Fecha: ___/____/___ Glucosa: Resultado:___________ Fecha: ___/____/___ Grupo Sanguíneo y Factor RH: Resultado:___________ Fecha: ___/____/___ VDRL: Resultado:___________ Fecha: ___/____/___ VIH: Resultado:___________ Fecha: ___/____/___ EXAMEN COMPLETO DE ORINA: Resultado:____________________________ Fecha: ___/____/___ ____________________________ ____________________________ 6. APOYO DIAGNOSTICO POR IMAGENES Ecografía Obstétrica: FECHA: ________________ Feto: Peso: LCF: DBP: Cc CA: 56 LF: ILA: 15 Placenta: Cordón: Perfil Biofísico fetal: Imp Dx. 7. TRATAMIENTO 8. EVOLUCION 57 58