P. José Noriega, cs - Stella Maris Collegue
Transcripción
P. José Noriega, cs - Stella Maris Collegue
Palabras de José Noriega (dcjm) ¿Dónde se coloca una primera piedra? -Cierto, en la tierra, porque va a sustentar el edificio del colegio. Ese hoyo es como surco en el campo, y la piedra como semilla. Así la primera piedra de toda obra educativa es la esperanza de que los niños que aquí entren puedan aprender a colmar su vida, llenarla de plenitud, hacerla grande y bella. -Esta tierra de la primera piedra es tierra especial, porque es tierra de relaciones humanas que durante años se han cultivado: con la querida Compañía del Salvador, que nos sorprende con su magnanimidad y visión; relación con el Colegio Mater salvatoris y con su Congregación mariana; relación con los arquitectos Cano y Escario y la constructora Aldesa que ya nos han probado su excelencia en la construcción de nuestro colegio de La Gavia; tierra de relaciones con las familias que con tanta esperanza y generosidad habéis intuido y apoyado el proyecto, y sobre todo, nos confiaréis a vuestros hijos: ¿Acaso hay mejor tierra para depositar la piedra de nuestra esperanza? -Esa piedra, sin embargo, no va a quedar solo sepultada. Detrás vienen muchas más piedras. Cada alumno será piedra a esculpir. Porque el arte de educar va dirigido a generar en cada alumno una medida más grande, una excelencia nueva. Queremos llegar no solo a la inteligencia de los niños, sino a su corazón para en él engendrar las virtudes que embellecen la vida: la gratitud que nos permite reconocer el amor originario, la laboriosidad que nos pone manos a la obra con tenacidad, la concordia que nos aúna en la amistad, la ciencia que nos habla del esplendor de la creación, la sabiduría que nos permite reconocer la verdad toda de una vida. -Y es piedra que se coloca también en lo alto, como clave de bóveda que sostiene el arco de las prácticas educativas. Con San Ignacio descubrimos que la amistad con Cristo nos hace buenos amigos de nuestros amigos. Y en esa amistad con Cristo queremos introducir y acompañar a cada alumno, presentándoles un Dios que hace grande y bella nuestra vida. -Por fin, es piedra que es estrella. Stella Maris hemos querido llamar al college. Si los niños aprenden a mirar alto, a mirar a las estrellas, a mirar a María, podrán navegar la vida y madurar sus etapas. El logo del colegio lo refleja bien: una estrella, hecha de una cruz que se abre al encontrarse el palo vertical y el palo horizontal, esto es, el amor de Dios y el amor al hombre, y que ahora gira sobre sí formando una estrella sobre tres olas.