bloque sindical - Biblioteca Digital de los Trabajadores de la Argentina

Transcripción

bloque sindical - Biblioteca Digital de los Trabajadores de la Argentina
me apoyo en la lucha por la paz y la democracia.
* Defensa de la ley 20615 de Asociaciones Profesionales y de toda la legislación obrera vigente al 24-3-76.
* Plena vigencia del derecho de huelga - Art. 14 bis de la Constitución.
* Levantamiento de la intervención de
las obras Sociales y defensa del patrimonio sindical.
Las Obras Sociales, creadas, conducidas y sostenidas con el aporte de los
trabajadores, constituyen un patrimonio inalienable de los trabajadores, cuya legalización y vigencia se encuentra
encuadrada en la ley 18610.
* Plena vigencia de las conquistas obreras obtenidas al 24-3-76.
* Aumento de salarios, 100 % de
emergencia y salario mínimo, vital y
móvil de 18 millones. Libre discusión
de los convenios colectivos de trabajo
(Ley 14.250).
* Libertad de todos los presos sindicales y políticos. Derecho de
opción,
como lo establece el artículo 23 de la
Constitución.
La defensa de los presos y la posibilidad del retorno de todos los argentinos exiliados, es un objetivo que debemos exigir sin ningún tipo de exclusiones. A la Dictadura Militar no le
otorgamos ningún derecho para juzgar
a ningún dirigente sindical. Cuando el
Movimiento Obrero se legalice si alguien tiene que dar cuenta de sus actos,
lo hará ante la clase trabajadora.
* Aministía laboral.
Reincorporación de todos los trabajadores despedidos por causas sociales,
gremiales o políticas.
* Levantamiento de la proscripción y
legalización de los organismos políticos sindicales, como 62 organizaciones,
Bloque Sindical y de todas las agrupaciones y nueleamientos obreros.
* Defensa de un sindicalismo mayoritario, solidario, unido en torno al principio de una sola Central y un solo sindicato por rama de la industria. Un sindicalismo dinámico, de frente al país,
comprometido políticamente con los
grandes problemas nacionales.
* Renuncia de Martínez de Hoz e impulso de una política económica que
signifique un mejoramiento del nivel
de vida del Pueblo, sostenida con el esfuerzo compartido de todos los sectores y no el sacrificio exclusivo de los
trabajadores.
* Plena vigencia de la libertad y democracia, las instituciones, los partidos
políticos, que aseguren la paz y la convivencia entre argentinos.
* Convocatoria a elecciones libres, sin
proscripciones.
BLOQUE SINDICAL
MOVIMIENTO PERONISTA
MONTONERO
AUTORIDADES DEL BLOQUE
SINDICAL DEL M. P. M.
Primer Secretario
Gonzalo Chaves
Secretario Adjunto
José Dálmaso López
Secretario de Organización
Ramón Herrera
Secretario de A s u n t o s Exteriores
BLOQUE SINDICAL:
POR LA UNIDAD
DEL PERONISMOS, HACIA
LA NORMALIZACION
Y LA
RECUPERACION
SINDICAL
En el histórico 20 de abril de 1977, día en que quedó constituido el
Movimiento Peronista Montonero, las palabras de nuestro Secretario General,
el compañero Mario Eduardo Firmenich, dejaron expresamente
definida la importancia fundamental de la
tarea a desarrollar en el seno del Movimiento Obrero.
Los trabajadores tenemos en el Bloque Sindical una importante
herramienta organizativa. El Bloque como Rama del MPM tiene como objetivo
encuadrar a todos los trabajadores que se expresen en él.
El Bloque recoje lo más rico de la historia del Peronismo, partiendo
del 17 de Octubre y pasando por la Resistencia del 55
las 62 organizaciones, la lucha por el retorno
del General Perón, la Juventud Trabajadora Peronista JTP, las Agrupaciones
de Base, el Bloque Sindical del Peronismo Auténtico, etc.,
sintetiza esta experiencia superando lo negativo para ponerla al servicio
de la unidad y la lucha contra el enemigo común, la Dictadura Militar.
LA INTERVENCIÓN MILITAR
A más de dos años de intervención
militar a los sindicatos, la Dictadura
no ha podido lograr sus objetivos de
dividir y atemorizar al Movimiento
Obrero. Los interventores se suceden
en la CGT como meros administradores de un edificio, cosechando el odio
y el desprecio de los trabajadores.
En este tiempo el Movimiento Obrero, a pesar de la feroz represión desatada, supo organizar, sin medios, sin locales, en la clandestinidad y haciendo
uso de todos los resquicios legales, una
heroica resistencia sindical, que hoy
asombra al mundo por su fuerza y masividad. Esta realidad reafirma lo correcto de nuestra propuesta al apoyar
el nacimiento y desarrollo de la CGT
en la Resistencia.
La acción de la Dictadura Militar,
golpeó al conjunto de la clase obrera,
llevando una política represiva que tuvo diferentes intensidades, objetivos y
direcciones. Por un lado encarceló y
proscribió a la primera línea de la conducción sindical, en la CGT, Federaciones y Sindicatos más fuertes. Por otro
dirigió una política de real genocidio
sobre toda una generación de nuevos dirigentes sindicales, principalmente a
nivel de conducciones de fábrica y
seccionales, que constituían una fuerza
de recambio del sindicalismo. Sobre esta pujante fuerza sindical, con una gran
representatividad y experiencia, forjada
en conflictos y puesta a prueba en la
conducción de las movilizaciones de junio y julio del 75, la Dictadura lanzó el
peso de la represión.
LA UNIDAD DEL MOVIMIENTO
OBRERO, PILAR DEL TRIUNFO
POPULAR
Los numerosos conflictos que estallaron hacia fin del año pasado como,
Agua y Energía, transporte automotor,
Subterráneos, etc., y en particular la
huelga ferroviaria, marcan el punto más
alto del desarrollo de la Resistencia Sindical.
La huelga ferroviaria es el ejemplo
más claro de un movimiento de fuerza,
gestado, lanzado y conducido clandestinamente. Una huelga que logró ganar
espacios de legalidad, realizando asambleas en los lugares de trabajo, que desarticuló el aparato represivo y supo
arrancar importantes reivindicaciones.
Un conflicto de alto contenido político, que cuestionó el plan de privatización y desmantelamiento de los ferrocarriles impuesto por el F.M.I., que golpeó a la política económica ejecutada
por Martínez de Hoz y que amenazó
con convertirse en una huelga general.
La huelga ferroviaria no es un conflicto más, sino que constituye el punto más alto de organización de la Resistencia Sindical y marca el paso hacia un
nuevo escalón de la lucha. Este nuevo
escalón nos exige como única forma de
seguir avanzando, la Unidad del Movimiento Obrero.
La unidad sindical, deja de ser una
frase, para transformarse en una necesidad imperiosa. Debemos gestar un
proceso de unidad, capAz de convocar al
conjunto de los trabajadores, a todas las
corrientes políticas que se expresan en
el Movimiento Obrero, sin sectarismo,
amplia y generosa. Una unidad que revitalice el sindicalismo, que impida su
fragmentación y aislamiento, que reafirme su papel aglutinante, uniendo a todos los sectores sociales, políticos y
económicos afectados por la política
entreguista, antipopular y represiva de
la Junta.
LA UNIDAD DEL SINDICALISMO
PERONISTA, PASO DECISIVO EN EL
FORTALECIMIENTO
DEL MOVIMIENTO OBRERO
Las columnas obreras que marcharon
sobre la Plaza de Mayo el 17 de Octubre del 45, fueron las principales protagonistas de un acontecimiento que trastocó la vida política del país. Ese día
marca la irrupción de la clase trabajadora y el inicio de una nueva etapa del
Sindicalismo Argentino. Atrás quedaba
la existencia de un Movimiento Obrero
heróico pero fragmentado, dando paso
a un sindicalismo mayoritario, nacional,
unido y politizado.
Contra esa unidad, contra esa conciencia de clase, nacional, expresada en
el Peronismo, se alzaron ayer y hoy los
enemigos históricos de la clase trabajadora.
La unidad del Peronismo Sindical,
por su historia, por constituir la identidad política mayoritaria de la clase
trabajadora, es un paso importante en
la unidad del conjunto del Movimiento
Obrero y constituye una necesidad en
el fortalecimiento de la Resistencia.
Este objetivo no debe ser solamente preocupación de los peronistas, sino de todos los sectores políticos populares, de los que buscan realmente
la unidad de los trabajadores, porque
no se conoce en el mundo, la existencia de organizaciones gremiales sólidas, sin partidos o Movimientos políticos representativos.
Sabemos que no es fácil unir, en
medio de la crisis interna más profunda que ha vivido el Peronismo, cuando aún está fresco los enfrentamientos
internos, cuando todavía vivimos la
frustración del último gobierno Peronista, cuando sumado a todo ésto la ausencia de Perón se siente en la dispersión del Movimiento. No se trata de
echar un manto de olvido sobre el pasa-
do sino de reconocernos en esta crisis, de aprender de la experiencia pasada, de recuperar nuestra historia y dar
la lucha para salir adelante transformando y revitalizando al Peronismo.
EL BLOQUE SINDICAL
FACTOR DE UNIDAD Y DEMOCRACIA SINDICAL
El debilitamiento de la Dictadura
abre nuevas perspectivas para el Movimiento Obrero y nos plantea la necesidad de ir definiendo los lineamientos
generales que regirán toda una nueva
etapa que se avecina. Para ello es necesario darle continuidad a nuestra lucha,
recuperando lo más rico y positivo de
nuestra historia sindical, rescatando la
CGT Negra del 55, la huelga del Lisandro de la Torre, el Plan de lucha y las
tomas de fábrica del 64, la CGT de los
Argentinos, los Cordobazos, los Rosariazos, las movilizaciones de junio y
julio. La segura derrota de la Dictadura ponen al Movimiento Obrero como
el más firme reaseguro para la consolidación de la democracia y la paz en
nuestro país.
En este camino el Bloque Sindical
del Movimiento Peronista Montonero,
convoca a la unidad del Peronismo Sindical como paso decisivo hacia el fortalecimiento, unidad y organización del
Movimiento Obrero en torno a los
siguientes ejes:
* Levantamiento de las intervenciones;
militares y normalización sindical e inmediata convocatoria a elecciones sindicales.
El logro del levantamiento de las intervenciones, la legalización como la democratización de la vida sindical a través de elecciones que actualicen el mandato de los dirigentes constituyen un
duro golpe para la Dictadura y un fir-