Gaceta lasallista - La Salle México Norte

Gaceta lasallista - La Salle México Norte

Nombre del trabajo
HISTORIA LA SALLE EN MÉXICO
Las características de algunos de los Hermanos Lasallistas, pioneros en México, son
las que a continuación se describen y que
demuestran como estaban hechos estos
hermanos y que es el legado, que en la actualidad, se refleja en cada una de las obras
escolares.
Semanario lasallista
FORMACIÓN CONTINUA PARA MAESTROS
DEL DISTRITO MÉXICO NORTE
Formación continua para Maestros del COLEGIO regi contry
Editor: Lic. José R. Talamantes Díaz
Gaceta
lasallista
HNO. JEBERT, DIRECTOR: Hombre de
grandes facultades, y sobre todo dotado de
gran dinamismo y un entusiasmo que hacía
vibrar a todos sus colaboradores.
Hno. AMEDEE FRANCOIS: Inteligencia y
sobresaliente en las ciencias exactas, particularmente en matemáticas y física.
HNO. ADRIEN MARIE: Hermano que vivió
su espíritu de Fe hasta el martirio, cuando
fue fusilado en el estado de Zacatecas.
HNO. ANTOINE CLAUDE: Acompañó a sus
Hermanos para ayudarlos en los trabajos de
cocina, más tarde se especializó en la educación de alumnos pequeños.
Únicamente, llevaban los Hermanos 8 años
de labor educativa en nuestra patria. Varias
ciudades gozaban de Educación Lasallista:
Puebla, Saltillo, Torreón, Acatzingo, Monterrey, Morelia, Querétaro, Zacatecas, Toluca,
México D.F., eran varios los colegios que
funcionaban, y ya para entonces, contaban,
los Hermanos con un floreciente Noviciado
en la Ciudad de México D.F.
Pero las dificultades vinieron nuevamente, a
probar a los hermanos, cuando en el año de
1914, en la Ciudad de Zacatecas, fueron
fusilados injustamente, por orden del Gral.
Francisco Villa, los Hermanos ADOLPHE
FRANCOIS y ADRIEN MARIE quien fuera
fundador de nuestros Colegios en Puebla. Al
triunfar la revolución carrancista en 1914,
órdenes sectarias, obligaron la salida de todos los Hermanos Franceses, quienes en
furgones cargueros, tuvieron que salir sólo
con la ropa que pudieron llevar.
Oh glorioso San Juan Bautista de La Salle,
apóstol de la niñez y de la juventud, se
desde lo alto del cielo nuestro guía y
protector. Intercede por nosotros,
asístenos, para que preservados de toda
mancha de error y de corrupción,
permanezcamos fieles a Jesucristo y a la
cabeza infalible de la Iglesia, el Sumo
Pontífice.
¡
ESCRITOS DEL SEÑOR DE LA SALLE (Para uso de los maestros lasallistas)
DE LA GUÍA DE LAS ESCUELAS CRISTIANAS
DE LAS MEDITACIONES PARA TIEMPO DE RETIRO
DE LAS REGLAS DE CORTESIA Y URBANIDAD
Esta Guía está dividida en tres partes. En la primera
se tratan todos los ejercicios de la escuela y de cuan-
Quinta meditación
to en ella se practica, desde la entrada hasta la salida.
Que los elegidos por la Providencia para educar a los
niños deben ejercer con éstos las funciones de ángeles
custodios en su empleo.
Es deber de ustedes proceder de tal forma que, como hacen
los ángeles custodios con ustedes, los comprometan a
practicar las máximas del Santo Evangelio; y les proporcionen, para conseguirlo, medios para ello, fáciles y adecuados a su edad; de modo que habiéndose acostumbrado
insensiblemente a ellas en su infancia, puedan tener adquirido, cuando sean mayores, como cierto hábito, y así ponerlas por obra sin mucha dificultad.
La segunda ofrece los medios necesarios y útiles de
que han de valerse los maestros para establecer y
mantener el orden en las clases. La tercera expone:
las obligaciones del Inspector de las Escuelas, el cuidado y la atención que ha de tener el formador de los
nuevos maestros, las cualidades que deben tener o
adquirir los maestros y el proceder que deben observar para cumplir bien su deber en la escuela; y, por
fin, lo que deben cumplir los escolares. Eso es, en
general, el contenido de este libro.
De la entrada de los escolares a la escuela.
Se cuidará de que no se amontonen en la calle donde
está la escuela antes de que se abra la puerta, y de
que no hagan bullicio gritando o cantando.
No se permitirá que se diviertan corriendo y jugando
durante ese tiempo por el barrio cercano a la escuela,
ni que molesten de cualquier modo que sea a los vecinos; por el contrario se procurará que caminen con
tal modestia por la calle donde está la escuela y que
esperen luego ante la puerta hasta que la abran, con
tal compostura, que puedan edificar a los transeúntes.
Pidan hoy a Dios la gracia de velar de tal manera sobre los
niños que tienen confiados, que tomen todas las precauciones posibles para preservarlos de caídas importantes, y que
sean buenos guías para con ellos.
Sexta meditación
De cómo se ejerce en la educación de la juventud la función de ángel custodio
Los ángeles suben a Dios para darle a conocer las necesidades de los que tienen a su cargo, y para recibir las órdenes referentes a ellos; y descienden para descubrir a los que
guiaban cuál era la voluntad de Dios en lo tocante a su salvación.
De igual modo han de proceder ustedes con los niños que
están confiados a sus cuidados. Su deber es subir todos los
días a Dios por la oración, para aprender de Él todo cuanto
deben enseñarles, y descender luego hasta ellos, acomodándoos a su capacidad, para instruirlos sobre lo que Dios
les haya comunicado para ellos.
De la cabeza y de las orejas
Una libertad que nunca hay que permitirse es
apoyar la cabeza en la mano, como si no se la
pudiera sostener.
Rascarse la cabeza cuando se habla, o incluso
cuando se está en compañía, aunque no se hable, es muy indecoroso e indigno de persona
educada. También es el efecto de grave negligencia y suciedad, pues de ordinario proviene
de que no se tiene suficiente cuidado para peinarse bien y mantener limpia la cabeza.
No es decoroso llevar una pluma en la oreja,
ponerse flores en ellas, o llevar las orejas traspasadas y ponerse aretes en ellas. Esto no dice
bien en un hombre, pues es señal exterior de
esclavitud, lo cual no le conviene.
Con todo es más modesto y más cristiano no
añadir a las orejas ningún adorno, ya que a través de ellas entra la palabra de Dios en la mente y en el corazón, y el respeto que se debe tener a esta divina palabra ha de impedir que nada que resienta vanidad se aproxime a ellas.
El adorno más hermoso para las orejas de un
cristiano es que estén bien preparadas y siempre dispuestas a escuchar con atención, y a recibir con sumisión, las instrucciones relativas a
la religión y las máximas del Santo Evangelio.