Mi Museo y Vos
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Mi Museo y Vos
Mi Museo y Vos Granada, Nicaragua. Junio de 2014 Las guerras Año 8 No. 28 ancestrales Mi Museo y Vos 1 Editora: Nora Zambrana Lacayo Redactores: Oscar Pavón Sánchez Tabla de Contenido Geoffrey McCafferty Pat Werner Edgar Espinoza Pérez Carrie L. Dennett Martha Barahona Diseño y diagramación: Nora Zambrana Lacayo Propietario: Peder Kolind www.mimuseo.org [email protected] www.facebook.com/mimuseo.granada Las guerras ancestrales .................................................. 2 Investigaciones recientes en Nicaragua ................... 5 La Investigación de San Jacinto: Dos teorías, la ortodoxia, y el futuro de arqueología histórica en América Central ........................................................... 7 El Horizonte Cerámico de Engobe Blanco del Postclásico Temprano de México y Centro América .................................................................. 20 Muebles antiguos de Mi Museo ................................... 32 Visitas a Mi Museo .............................................................. 35 Las guerras ancestrales es probable que el deseo de obtener esclavos para los sacrificios, también haya despeñado su parte. Desarrollo del conflicto Oscar Pavón Sánchez Arqueólogo, Mi Museo los nobles: caciques, consejo de ancianos, capitanes principales, sacerdotes, funcionarios del mercado, orfebres; en segundo lugar, la plebe: guerreros, comerciantes, agricultores, cazadores, pescadores, artesanos, prostitutas, mendigos; en tercer lugar, los esclavos y en cuarto lugar, los cautivos de guerra. Orígenes de las guerras E n la nueva exposición de Mi Museo se ha seleccionado el tema: las guerras ancestrales. El objetivo principal es que los visitantes que acuden al museo se instruyan sobre la historia de nuestros antepasados, que en su totalidad ha sido olvidada; en la exhibición se observan algunas herramientas de guerra que posiblemente se utilizaron en los conflictos, y vasijas donde se pueden interpretar decoraciones vinculadas a estas prácticas. Los pueblos de Nicaragua frecuentemente estaban en guerra entre sí, y el arte militar estaba altamente desarrollado. Los jóvenes eran entrenados cuidadosamente y organizados en compañías que mantenían guardia regular y estaban constantemente listos para la batalla. Estructura social Según Tomás Ayón el arte de las guerras fue efectuado por diferentes pueblos indígenas, para estos pueblos la guerra era sagrada y las causas principales fueron religiosas y territoriales, relacionado con su cosmovisión, tradición y cultura. Según el historiador Tomás Ayón, la estructura social indígena se podía observar en cuatro niveles, en primer lugar, Oviedo afirma que las causas de las guerras (lib. XLI I, cap. III) han sido principalmente por disputas territoriales; pero 2 Mi Museo y Vos Las declaraciones de guerra se hacían por mensajeros, el cacique no acompañaba al ejército, salvo que fuera un hombre excepcionalmente valiente; quien estaba a la cabeza era aquella persona que era nombrada por el consejo de ancianos, que por su característica tenía que ser fuerte, si éste cabecilla moría y estaba presente el cacique, inmediatamente nombraba a otro cabecilla o tomaba el mando él mismo; de otra manera, seguía el inmediato desbande y retirada. Las obligaciones del jefe militar consistían en dirigir las operaciones de batalla y exhortar a sus hombres "que maten cuantos pudieren de sus enemigos, y corten brazos, cabezas y lo demás de sus contrarios y que no huyan" (Oviedo, loc. cit.). Entre los pertrechos militares que utilizaron las tribus chorotegas y nicaraos, Oviedo señala que los aborígenes “estaban armados con chalecos sin mangas o corazas de algodón natural y con madera durísima, y muchos de ellos llevaban arcos y flechas (no envenenadas) y otros portaban varas para tirar”, este tipo de armazón fue utilizado en todo México y Centroamérica. “Los escudos son de cortezas de árboles o de madera ligera, cubiertos de plumas é labores de pluma é algodón ; de tal manera, que son muy ligeras ; lindas y fuertes … las lanzas terminan en una punta de pedernal, o en hueso puntiagudo ; y las lanzas están hechas de cañas (de la cuales abundan en el lago)”. Pedro Mártir dice que los templos se empleaban como arsenales, que se mantenían a punto grandes cantidades de armas. Figura 1: Cerámica que presenta decoraciones alusivas a equipos militares, tales como los arcos de madera y lanzas con sus puntas de pedernal. Colección Mi Museo. Mi Museo y Vos 3 Después de la batalla, el cacique, siempre que no hubiera acompañado a las tropas, salía a su encuentro. Si se había obtenido la victoria, las recibía con grandes demostraciones de júbilo, y algunos de los cautivos eran sacrificados inmediatamente. Si el ejército había sido derrotado, el cacique lloraba delante de la tropa y los capitanes principales iban al montículo de los sacrificios y "derramaban lágrimas muy tristemente". Beneficios Se premiaba el valor con el ascenso a varias castas guerreras, estos eran identificados como los “tapaliguis”, hombres que han vencido a un enemigo en combate singular a la vista de los dos ejércitos, de quienes Oviedo (lib. XLII, cap. I) dice: “trae rapada la cabeza con una corona encima trasquilada, y el cabello de la corona tan alto como el trecho que hay desde la cintura alta del dedo index a la cabeza deI mismo dedo”. Oviedo narra que al parecer los guerreros podían mejorar su condición social al adquirir riquezas o lograr distinguirse en el consejo, o en las guerras, es decir, mejoraban su linaje. Las sanciones La desobediencia en combate era castigada severamente; el desobediente era despojado de sus armas y apaleado con rigor; se le podía desterrar, y su jefe podía hasta matarlo. Figura 2: Bifaz de pedernal, utilizadas para protección personal. Colección Mi Museo. Bibliografía Ayón, Tomás 1956 Historia de Nicaragua. Escuela Profesional de Artes Gráficas. Madrid. Lothrop, Samuel K. 2000 Cerámica de Costa Rica y Nicaragua vol. I. Traducción de Gonzalo Meneses Ocón. Colección Cultural de Centro América, Managua. Investigaciones recientes en Nicaragua* Geoffrey McCafferty Universidad de Calgary N icaragua ha experimentado un aumento de la investigación arqueológica en los últimos años. Esta ha incluido a investigadores internacionales de Canadá, Holanda, Costa Rica y Estados Unidos, así como la profesionalización de arqueólogos nicaragüenses a través de postgrados y la colaboración en los grandes proyectos. En abril de 2014, un simposio de la Sociedad de Arqueología Americana celebrado en Austin, Texas, reunió a estudiosos de diversos orígenes para discutir los resultados de investigaciones recientes y las nuevas interpretaciones. Los conferencistas luego comentaron sobre las trayectorias de más largo plazo y discusión sobre orientaciones futuras. Alexander Geurds - La Fase Cuapa: Notas sobre el Ultimo Período Cerámico Prehispánico en el Centro de Nicaragua. Participantes en el simposio: Kelsey Friesen y Geoffrey McCafferty - Investigaciones Recientes por Difracción de Rayos-X Relacionadas a la Composición Cerámica Nicaragüense. Clifford Brown - Investigaciones Recientes en el Departamento de Chinandega, Nicaragua. Justin Lowrie - Proyecto Arqueológico Chiquilistagua. Conclusiones de la Primera Temporada del Proyecto. *Traducción al español: Nora Zambrana Lacayo 4 Mi Museo y Vos Jennifer Lapp - Proyecto La Flor. Sharisse McCafferty y Geoffrey McCafferty - La Monumentalidad en Sonzapote, Nicaragua. Larry Steinbrenner - Managua Policromo: El eslabón Perdido de Mesoamérica? Carrie Dennett – Familiarización con Usted: Cerámica e Identidad en Gran Nicoya. Jessica Manion - Memoria y Manipulación en la Gran Nicoya. Kendra Philmon - Análisis Bioarqueológicos de la Cueva Cusirisna, Nicaragua. Mi Museo y Vos 5 Gina Carroll - Investigación Isotópica de Variación Inter e Intra- esquelética en Tejidos Lesionados y no Lesionados de Muestras Patológicas de Nicaragua. Suzanne Baker - Enigmáticos Rasgos Picoteados en la Isla de Ometepe, Nicaragua. La Investigación de San Jacinto: Dos teorías, la ortodoxia, y el futuro de arqueología histórica en América Central Katrina Kosyk - Un Preludio: Aerófonos de la Gran Nicaragua Precolombina. Adam Benfer – Un Siglo en Piedra: Cien Años de Análisis Líticos en Nicaragua. Fred Lange – Comentarista. Karen Olsen Bruhns – Comentarista. En Julio muchos de estos académicos presentarán sus ideas en una conferencia que se celebrará en Nicaragua, cuyos detalles serán anunciados. Esta conferencia también incluirá a arqueólogos nicaragüenses, y estará abierta al público. Pat Werner* y Edgar Espinoza Pérez** * Decano Académico. Keiser University Latín American Campus. **Miembro de la Academia de Geografía e Historia de Nicaragua. I ntroducción El aniversario de la Batalla de San Jacinto, 14 de septiembre de 1856, es una fiesta nacional celebrada en todas partes de la república. Después de trabajar en asuntos precolombinos, los dos autores decidieron examinar un evento histórico y utilizar la metodología histórica y arqueológica juntas para averiguar finalmente lo que sucedió. La batalla de San 6 Mi Museo y Vos Jacinto fue escogida porque hay reportes contemporáneos, el sitio está intacto y es muy accesible. La investigación fue hecha con la suposición que al final, no se podrá tener una diferencia entre lo que realmente pasó y lo que se encuentra en el suelo y en restos físicos de la batalla. Las bases de datos son dos, las historias escritas y las publicadas, y los restos de la batalla todavía ubicados cerca de la casona de San Jacinto. La base de lo publicado es muy bien conocida Mi Museo y Vos 7 por cada alumno en las escuelas desde hace 60 años. De los restos todavía en el sitio no había nada conocido. Pensamos que había posibilidades, las balas en las paredes de la casona y la fosa común de los soldados y filibusteros muertos en la batalla. Nunca encontramos una fosa común. Pero sí encontramos balas en las paredes casi seguramente tiradas durante la batalla. El resultado de la investigación fue el encuentro de 68 balas en las paredes, no más. Con este resultado, los investigadores desarrollaron dos modelos de la batalla. Un modelo propuso 250 filibusteros que atacaron la casona y guarnición de José Dolores Estrada, con 151 hombres pelando durante cuatro horas. Los filibusteros tenían 24 bajas y Estrada tuvo 51 bajas. Las armas de los filibusteros tenían capacidad de enviar 6-10,000 balas durante las cuatro horas. Encontramos 68 balas en las paredes. Otro modelo propuso 63 filibusteros atacando la casona y guarnición de Estrada, con 151 hombres y peleando por cinco minutos. Los filibusteros tenían 24 bajas y Estrada tuvo 51 bajas. Las armas de los filibusteros tenían capacidad de enviar 700 balas durante cinco minutos. Encontramos 68 balas en las paredes. La cuestión es cuál de los modelos es el correcto y describe la batalla, y cuál fue la reacción de varios grupos de historiadores a este análisis. Fue la primera vez que este tipo de análisis, que incorpora el record escrita y el producto de un análisis arqueológico en el mismo sitio o evento, fue utilizado en Nicaragua. 8 Mi Museo y Vos Ubicación de la Hacienda La Hacienda San Jacinto está ubicada a unos 45 kms de Managua en la vía panamericana norte que conecta con los departamentos de las Segovia nicaragüenses, después dobla unos 3.kms al oeste. El edificio es una construcción con paredes de abobe y techumbre de tejas a dos aguas. Está rodeada de corredores techados y está dividido en tres áreas domésticas que actualmente albergan un museo destinado a la “Guerra Nacional”. El Sitio Histórico fue declarado “Monumento Nacional” en 1960, es decir 103 años después de ocurrir el suceso, permitiendo de esta manera su conservación casi intacta. El Estado de Nicaragua ha dado mantenimiento y restauración al bien inmueble, protegiendo por lo menos el 80% de su originalidad al igual que sus alrededores, los cuales no han sido impactados por las actividades humanas contemporáneas. Posiblemente lo único que ha cambiado es el acceso al inmueble, ya que en el siglo XIX, se llegaba a la hacienda en su lado sur a través del Valle del Otocal, una gran planada pedregosa con suelos negros que en invierno se tornan intransitables para carretas y animales. Ahora se llega al sitio desde el Oeste. La idea de reconstruir la Batalla de San Jacinto nació de varias conversaciones de quienes suscriben este documento y expertos nicaragüenses en la “Guerra Nacional, así como los documentos escritos por varios participantes en la guerra, básicamente provienen de parte de guerra hecho por el jefe de la tropa acantonada en la hacienda el Coronel José Dolores Estrada, el reporte de William Walker que publicó en su periódico, El Nicaragüense, una semana después de La batalla, los documentos de Francisco Ortega Arancibia, alcalde de Masaya y soldado en la guerra Nacional. Publicó su libro 50 años después de la batalla y contiene una historia general de 1838 a 1878, pero él estaba más involucrado en la parte administrativa y nunca en los campos de batalla. Otra fuente importante para entender la batalla de San Jacinto son Las Obras Históricas Completas, escrita por Jerónimo Pérez en 1865. Pérez fue político de Masaya y estuvo involucrado en todos los eventos políticos de Nicaragua desde 1854 hasta 1868. Se casó con la hermana de Tomás Martínez, el ganador de la Guerra Nacional y dictador desde 1858 hasta 1868. Fue un defensor de Martínez, pero fue testigo ocular de muchos de los acontecimientos de la Guerra Nacional. La tecnología militar de la Guerra Nacional Para reconstruir la batalla de San Jacinto era necesario entender la tecnología disponible de los grupos en conflictos. La ausencia de artillería en la batalla de San Jacinto restringe la investigación a los fusiles y revólveres que poseían los dos ejércitos. Los fusiles que usaban pólvora negra eran las armas que se usaron en los combates de la guerra nacional. El componente mayor de la Figura 1: Fachada arquitectónica y actual estado de conservación de la casa hacienda de San Jacinto (Tomada del Libro “La Historia, La Arqueología y La Batalla de San Jacinto”). pólvora negra es nitrato de potasio, un tipo de sal que es muy higroscópica y causa considerable cantidad de sarro en el hierro rápidamente. Además, agrega mucha humedad a la atmósfera. Cuando explota, deja alrededor de 35-40 por ciento de su masa en el arma en forma de ceniza espesa, grasosa, sucia, que entra en el mecanismo del arma y tapa su movimiento interno. A diferencia de la pólvora sin humo, y que no deja ceniza más que un vapor de agua. Otra parte importante en el estudio son las balas en sí mismo, las armas de la época usaban cartuchos, pero no cartuchos de metal, sino de papel o lino saturado con nitrato de potasio. Para el Colt, aunque era posible recargar el tambor sin sacar el cañón, era incómodo. Lo más rápido era sacar el cañón, poner seis cartuchos de lino, abrirlos por detrás, reponer el tambor, reponer el cañón, poner los fulminantes detrás de cada recámara, y halar el gatillo. Mi Museo y Vos 9 Para los fusiles, el proceso era de morder la parte de atrás del cartucho de lino, usar el palo para forzarlo hasta la recámara del cañón, reponer el palo, montar un fulminante en el tubito cerca de la recámara, apuntar el fusil y apretar el gatillo. Con los fusiles de chispa, era más complicado, el tirador tenía que morder el cartucho detrás de la bala, poner un poco de la pólvora en el rastrillo, cerrar el rastrillo, poner el resto de la pólvora en el cañón, usar el palo para empujar el cartucho a la recámara, poner la pierna de gato detrás, apuntarlo y halar el gatillo. Entre las armas que poseía el ejército de Walker podían identificarse por los menos las siguientes: Fusil rifle de US, modelo 1841, conocido como el Rifle Mississippi, de calibre .54, con estrías: Mencionado por las fuerzas de Walker. Fue el rifle, tipo "Mississippi", de dos bandas, modelo 1841. De calibre 54, con una carga de 60 gramos de pólvora, una bala redonda y una velocidad de 950 pies por segundo. El cañón tenía estrías y el proyectil era de alrededor de 280 gramos de peso. Este fusil fue usado en la Guerra con México y tenía una puntería muy fina. El fusil de Minie: Este fue el fusil, modelo 1855, fabricado en Springfield, Massachusetts la fábrica oficial del gobierno de los EEUU, y adoptado por el ejército americano en 1855. Era de calibre 58, y tenía tres estrías, con una gira de 72 pulgadas, en su cañón para estabilizar el proyectil. Fue la primera arma diseñada 10 Mi Museo y Vos para la bala Minie en los EEUU. seguro. Su propulsor fue pólvora negra. Anteriormente, los fusiles americanos con estrías usaban balas en forma de pelotas. La bala fue oblongada y pesaba 476 gramos, con la base hueca, más o menos una copia de la bala Minie, inventada por el ejército francés en 1845. Carabina Sharps, modelo 1853 “slant breech” (cerrojo inclinado): La cuarta arma usada en la batalla fue la carabina Sharps, modelo 1853, con cerrojo inclinado, de calibre 0.52 pulgadas. Fue el primer modelo del mecanismo Sharps vendido comercialmente. Poco después de la guerra nacional en 1859, la compañía Sharps cambió el diseño para que el cerrojo subiera y bajara verticalmente, no inclinado. Por eso, por su rareza (fabricaron un total de mil armas más o menos, muchas usadas en la guerra de guerrilla en Kansas en 1859 y nunca fue vendida internacionalmente). Un rifle tipo Sharps, con cerrojo inclinado, encontrado en Centro América, probablemente fue utilizado por las fuerzas de Walker. Esta arma fue mencionada por Walker y era cargada detrás del cañón a manera de un cerrojo que el tirador podía bajar muy rápido, recargar la recámara, subir y cerrar la recámara. Tenía cañón de 25 pulgadas y era de calibre 52, o sea el diámetro de su bala fue 0.52 pulgadas. Su cañón tenía estrías pero no se sabe el tipo de bala que usaba, pero la más común fue una bala alongada. Su ventaja era que se podía tirar y recargar más rápido que cualquier otro tipo de fusil. Fue utilizado por el ejército americano en su guerra civil como arma de precisión de los francotiradores. Tenía carga de 60 gramos de pólvora y una velocidad en la boca del cañón de 900 pies por segundo. Su gran ventaja es que se podía tirar y recargar muy rápidamente, a pesar de las cenizas de la pólvora negra, que dejaba mucha suciedad dentro del cañón hasta que no se podía empujar otra bala por la garganta del cañón. La bala de este fusil minie era muy delgada y entraba fácilmente. Los gases generados por la ignición de la pólvora negra pegaban duro a la base del proyectil y se abrió para agarrar las estrías del interior del cañón. Esto dio estabilidad y puntería a la bala. Fusil carabina Enfield de Gran Bretaña, de calibre .577 con cañón de 28 pulgadas y con estrías para usar bala tipo Minie: Utilizaba una carga de 60 gramos de pólvora negra y la bala pesaba alrededor de 500 gramos en forma alongada con la base hueca. Fusil carabina Enfield de Gran Bretaña, de calibre .577 con cañón de 24 pulgadas y con estrías para usar bala tipo Minie: Todos estos fusiles se recargaban por la boca del cañón, y tenían un sistema de ignición fulminante de mercurio, muy Revólver Colt, modelo primero de tipo Walker “Whitneywille” (Cumpston, Fadala, 1847, calibre 0.44): Tal vez los más notables fueron los revólveres men- Figura 2: Sharps Modelo 1853, una de las armas usada por los Filibusteros en la Batalla de San Jacinto. cionados por ambos, Walker y Francisco Ortega Arancibia. Ortega Arancibia notó que cada revolver tenía un cañón de nueve pulgadas de largo. La idea fue fabricar un revólver con tanto poder para matar a un jinete o a su caballo de un sólo tiro y lo logró. Pesaba casi cinco libras con tambores vacíos y tenía casi 18 pulgadas de largo. Era de calibre 45 aunque lo llamaban de calibre 44, con diámetro de bala de 0.451 pulgadas. Tenía dos tipos de balas, una la pelota de 145 gramos, la otra bala en forma alongada con punta muy aguda de 141 gramos de peso. Su carga de pólvora fue hasta 60 gramos, la carga regular para fusiles. Fue el revólver más poderoso del siglo 19 y no fue alcanzado en poder hasta una invención del cartucho .357 magnum en 1935. Su bala de 200 gramos tenía una velocidad de 1,100 pies por segundo. Mi Museo y Vos 11 Fue muy útil para la caballería americana durante la Guerra con México, y las tropas de Walker tenían el revólver más poderoso y peligroso de la época. Su tambor tenía recámaras para seis tiros, pero después el tirador tenía que desarmar el revólver para recargar el tambor, no con cartuchos, sino con pólvora y bala en frente y un fulminante detrás de cada recámara para encender la pólvora. El armamento del ejército de Nicaragua es más complicado de identificar, pero seguro que provenía de los fusiles españoles de los años, 1752, 1791 o 1803. Se menciona que el gobierno del Presidente Carrera, en Guatemala, envió armas a los nicaragüenses. En otros documentos se habla de las armas de chispa, que hacían luz cerca de la cara del tirador cuando se disparaba. La invención del sistema de ignición de percusión, utilizó una copita de fulminante de mercurio para encender la pólvora, fue inventada en 1814 y la mayoría de los ejércitos en Europa y las Américas habían convertido los fusiles viejos a este sistema nuevo o habían adquirido fusiles nuevos alrededor de los años 50. La gran ventaja de este sistema de ignición con fulminante de mercurio es que funcionaba de forma más segura, más rápido y era más fácil para entrenar a un soldado campesino que el sistema de chispa que utilizaba un pie de gato con una piedra de pedernal, para generar chispas al chocar con el rastrillo para encender la pólvora negra. La desventaja 12 Mi Museo y Vos del sistema de ignición de chispa era que se ensuciaba fácilmente con la pólvora negra y no encendía, le afectaba mucho la humedad, hasta llegar al punto de no encender solamente por razón de la humedad en el aire. La Batalla según las fuentes documentales Los reportes de Walker y Estrada son bastante similares, ambos reportan que el combate tuvo lugar en la mañana del 14 de septiembre, Walker menciona que el ataque se realizó en tres flancos, los cuales se realizaron de manera simultánea. Walker reporta que ellos habían llegado a unas cuantas varas de los corrales y se habían tomado posiciones, recibieron un nutrido fuego de los nicaragüenses que aniquilo completamente a los líderes de la expedición. Mientras Estrada menciona que ellos habían perdido su franco izquierdo y que era imposible retomarlo desde el frente debido al fuego nutrido, obligó a uno de sus oficiales a salir en un movimiento de flanqueo y atacar para poder retomar ese punto. La estrategia de Estrada para contener el avance fue de disparar cuando los enemigos estuvieran lo suficientemente cerca, principalmente debido a la tecnología de poco alcance y efectividad de su armamento, esto provocó la muerte de una buena parte de sus tropas, pero el resultado final fue un fuego nutrido desde el frente y desde el flanco izquierdo. Al final los filibusteros perdieron 27 de 63 hombres, mientras que las fuerzas nicaragüenses 55 de 160. Aunque el mérito de Estrada es innegable, es posible que basados en los reportes y la técnica empleada en el asalto, la batalla duró unos cuantos minutos y no las cuatro horas que la historiografía ha consignado. Para demostrar estos supuestos se analizaron y se realizaron prospecciones y excavaciones arqueológicas en la Hacienda, para determinar los alcances del combate. Para esclarecer lo ocurrido y tomando en consideración que era imperativo no dañar el inmueble, se utilizaron métodos no intrusivos para manejar los materiales que resultaron del combate, esto es las balas de los contendientes y los restos humanos productos de los muertos en el combate. Una de las ventajas de las paredes de la casa hacienda es que son de adobe y prácticamente es una especie de esponja que absorbe casi todo los impactos, por otra parte es que sabemos que los tiros de forma circular sin duda podían adscribirse al ejército de Nicaragua, mientras que los tiros de forma alargada pertenecen a los fusiles y pistolas de los filibusteros. Para identificar las posibles balas en las paredes se utilizó un detector de metales Mine Lab modelo ABN, este tiene la característica que puede identificar metales ferrosos y no ferrosos o como el oro o el plomo. El resultado de las prospecciones en las paredes de la casa permitió ubicar por lo menos 68 balas. Las mayores concentraciones de disparos se encuentran en la parte norte y este de la casa, siendo esta parte donde se encontró la mayor concentración de disparos, la puerta principal de la hacienda no presenta una concentración de disparos. Lo que sí es claro es que no se encuentra evidencias de una fuerte concentración de disparos en todo del inmueble. Debido a la baja concentración de disparos en las paredes, sumadas a la tecnología de la época, no apoyo un escenario de 200 filibusteros atacando por más de dos horas y disparando más de seis mil tiros. Figura 3: El autor Pat Werner y su asistente Gerardo Blandón, buscando balas en las paredes de La casa Hacienda San Jacinto. (“Tomada del Libro La Historia, La Arqueología y La Batalla de San Jacinto”). Los restos humanos Un total de tres individuos fueron excavados en las cercanías de la hacienda San Jacinto, se trata de individuos jóvenes entre los 19 y 25 años, solamente un individuo presentaba evidencias de muerte producto de combate, ya que presentaba una entrada de bala en la parte occipital y saliendo en la parte frontal del individuo. No hay más evidencias Mi Museo y Vos 13 le gustaba, no lo iba a publicar. Escribió el prefacio. El dueño de la imprenta también lo apoyó, tanto como el jefe de cultura de la Alcaldía de Managua. y nunca encontraron puntas de flechas en ninguna parte de la investigación. La pregunta es si se debe seguir lo ortodoxo en la historia escrita cuando la prueba arqueológica resulta en datos diferentes, o posiblemente en conflicto con la relación histórica escrita. Como suposición, al final, no puede haber diferencia o conflicto entre la base de datos completos históricos y la base de datos completos arqueológicos. La razón para aplicar las dos metodologías es que uno debe soportar al otro, y cada uno debe averiguar hechos que no es posible averiguar por usar solamente una de las dos metodologías. Hace años hice una exploración de varios pueblos en el departamento de Carazo, fui acompañado por la arqueóloga costarricense Dra. Silvia Salgado. Después de escuchar varios relatos de habitantes de los pueblos que contaban con grandes detalles las historias de cada pueblo desde hace 2,000 años, la Dra. comentó que no fuera necesario hacer ninguna exploración porque la gente conocía todo. Obviamente la arqueología podía contribuir algo. En el caso de la investigación arqueológica del sitio de San Jacinto, comenzamos con el interés de conseguir tantos datos fuera posibles y seguir donde los datos se desarrollaban. Y para nosotros lo más importante fue el número de balas Figura 4: Restos de un individuo encontrado durante la investigación. en las paredes de la casona. Pasamos mucho tiempo examinando fotos viejas de la casona, examinando mapas viejos y entrevistando a la familia que vivían en la casona desde los años 30 del siglo pasado. También examinamos el exterior de la casona para ver si habían hecho modificaciones del exterior de las paredes. Nos aparecimos en el 2008, a como nos aparecemos ahora, y el exterior de la casona en el 2008 estaba poco modificado o tal vez no había sido modificado en comparación con el exterior de la casona para el 14 de septiembre de 18561. La reacción de los historiadores e intelectuales fue de dos cortes muy diferentes. La mayoría de marxistas concluyeron que la investigación fue un desarrollo nuevo de la historiografía de Nicaragua. El jefe de la bancada Sandinista en la Asamblea Nacional quería leerlo por lo que se lo presenté y dije que si a él no 1 Otra alternativa es que alguien modificó el exterior para engañar a los 150 historiadores en el futuro. 14 Mi Museo y Vos La reacción de algunos historiadores del partido conservador y también del partido del Coronel José Dolores Estrada, héroe de la batalla, era muy indiferente, hasta llegar a despreciar a sus investigadores. Uno mencionó que uno de los investigadores era como William Walker porque su apellido comenzaba con la letra W2. En mayor sentido el problema que algunos tenían era porque se estaba modificando la historia verdadera de Nicaragua, es decir, se estaba confundiendo un proceso de investigación histórica y arqueológica y el proceso con nacionalismo. Y sin duda las consideraciones de nacionalismo y opiniones personales han hecho la historiografía una actividad muy fructuosa y a veces conflictiva. Dos ejemplos que merecen ser notados: 1. El caso de la opinión de Sir. Eric S. Thompson y la imposibilidad de leer los glifos mayas: El descifrar los glifos egipcios por Chompollion es un alcance sobresaliente que debía de haber puesto la luz en como descifrar los glifos de los mayas John Lloyd Stephens en los 1840´s sugería que un proceso como el de Jean Francois Champollion en Egipto funcionaría. Pero la herencia intelectual de Athanasius Kircher, y más tarde Sir Eric S. Thompson, sirvió para parar por un siglo el conocimiento de los mensajes de las ruinas y escritos mayas, y últimamente su historia, siendo un gran ejemplo del efecto de la ortodoxia que retardó el desarrollo de conocimiento de la lengua maya por sus escritos3. Kircher propuso la idea que los glifos podían representar ideas o símbolos no representados por una lengua, algo tal vez imposible. Thompson, un experto en cálculos de números y fechas mayas, nunca pensó que los glifos representaban ruidos y palabras mayas de una lengua existente en los tiempos de los mayas. Además, él atacó a la escuela que argumentaba que los glifos eran un tipo de escritura que tenía su gramática y estaban escritas en forma de una lengua maya. El efecto de la influencia de Thompson en estudios mayas fue que durante toda su vida no avanzaban los estudios mayas. Thompson murió en 1975 y los estudios y la habilidad de comenzar a descifrar los glifos se adelantó. Hasta hoy día, se han interpretado la gran mayoría de los glifos formando una historia escrita de muchos lugares y ruinas en el territorio maya en México, Guatemala, El Salvador y Honduras. El 2 Otro comentario era que los resultados de la investigación eran muy especulativos. Para algunos es mucho más especulativo cómo los filibusteros pudieron haber combatido por cuatro horas, a una distancia de la casona de 30 metros, tirando quizás 6,000 tiros, y solamente dejaron 68 balas en las paredes. Quizás con una muy mala puntería. 3 Véase, por ejemplo, Michael D. Coe, Breaking The Maya Code, Thames & Hudson, New York, 1999. Mi Museo y Vos 15 efecto de la ortodoxia atrasó bastante el estudio de los glifos y lenguas mayas. La utilidad de tener otra fuente de información es para ampliar el conocimiento del pasado. Otra vez Sir Eric S. Thompson rescató el argumento. Puesto que el período clásico de los mayas terminó poco después del año 900 d.C. o época moderna o del año 300 de calculación Islámico, no existían relaciones hechas por los españoles al conquistar las tierras de habla maya en los siglos 16 y 17. La información generada por la arqueología, dirigida por Thompson, tocaba los catálogos de glifos, mapas de edificios, exanimación de restos humanos, tratados de la secuencia cerámica, trabajos sobre el manejo y uso de piedras, entre otras cosas. Pero no se hizo esa historia o historias de los mayas, ni de cualquier ciudad, ni de cualquier rey. La imagen de los mayas como intelectuales calculando el movimiento de las estrellas, gente no violente, era muy parecido a un ideal de comportamiento de académicos del siglo 20, fue una creación de varios investigadores que produjeron sus obras sin conocer el contenido de las inscripciones, escrituras y relaciones de los mayas, que emergieron cuando una generación nueva comenzó a leer los grifos e inscripciones de los mayas, comenzando en los años 70 del siglo pasado. Y lo que esta nueva fuente de información sobre los mayas en sus propias palabras, se origino una historia y documentación de la cultura de los mayas. Los mayas emergen de sus escritos e inscripciones no como una sociedad de intelectuales, sino como una cultura dinámica que se ocupaba en guerras de dinastía entre ciudad-estados, con guerras, imperialismo temprano, asesinatos de reyes derrotados y auto mutilación. O sea una cultura dentro de tradiciones mesoamericanas4. Claramente, el descubrimiento de la habilidad de escribir las escrituras e inscripciones mayas, abre una base de datos enorme no posible en utilizar solamente la base de datos de arqueología tradicional. Y se puede notar la utilidad de la historia al modificar la vista ortodoxa de la historia y arqueología ortodoxa. Es una base de datos completa y diferente a otras fuentes, y rinde información no accesible por otras bases de datos. La reacción es defender la ortodoxa cuando se puede enfrenta otras bases de datos que rinden información en contradicción fuerte de la ortodoxa. 2. En el caso de la historia Americana y la visión de George Bancroft como ortodoxia y el resultado de Charles A. Beard, The Economic Interpretation Of The United States Constitution (1913): 4 Hay poca evidencia, pero si hay la posibilidad de que los mayas conocían varias sustancias sicotrópicas como Brugmansia suaveolens En la historia de los Estados Unidos, hay otro ejemplo de la ortodoxia obstaculizando la investigación de historia. Desde 1789, varios han escrito la historia de los EEUU en varias formas. Típico de las historias escritas por historiadores con interés nacionalista. El primer siglo de historia de los Estados Unidos refleja una actitud que define que el desarrollo de los EEUU es obra de Dios y del destino. Tal vez el historiador más conocido fue George Bancroft, autor de varios libros sobre los EEUU e historias relacionadas, pidió por ejemplo, muchos documentos del Presidente Cuadra sobre la historia colonial de Nicaragua. Su estilo fue de hacer una investigación exhaustiva de un tema antes de escribirlo5. En sus obras, atribuyó al desarrollo de los EEUU cuatro factores, uno fue la providencia divina. La ortodoxia de la historia de los EEUU se cambió por completo cuando el historiador progresivo Charles A. Beard rechazó completamente la idea de que la historia de los EEUU fue dirigida por Dios, y propuso que la historia de la formación de la constitución de 1787 fue guiada y dirigida por los intereses económicos y políticos de los autores de la constitución. Eso fue hace un siglo y la batalla continúa. La historia de la constitución de los EEUU tiene varias sendas, interpretaciones y disputas doctrinales en revistas de historia, en conferencias de historias y en los departamentos de historia en docenas de universidades dentro y fuera de los EEUU. Solamente hay una cosa constante: la visión de la historia de George Bancroft, es la más aceptada en todos los grupos intelectuales al fin del Siglo XIX la verdadera ortodoxia, hoy día es rechazado por todos. Similarmente, el rechazo completo de la posición intelectual de Sir Eric S. Thompson, de la imposibilidad de leer los glifos de los mayas, es otra evidencia que la ortodoxia de una fecha se pone rechazado con nueva información, nuevos historiadores y arqueólogos. En el asunto de la historia de América Central el reverso también se aplica. Hay una abundancia de base de datos escritos sobre conflictos. Para El Salvador hay datos sobre el General Gerardo Barrios capturado por el presidente Martínez, enviado a El Salvador donde lo fusilaron. El historiador de Martínez, Jerónimo Pérez escribió que fue una gran sorpresa. Que yo no creo. La arqueología tal vez puede ayudar a entender lo que pasó con el General Barrios. En la historia del siglo XIX hubo movimientos para unificar América Central a la fuerza, liderado por el General Justo Rufino Barrios. Hubo batallas donde una élite de jóvenes liberales, como José Santos Zelaya y Benjamín Zeledón, recibieron entrenamiento que aplicaron por los siguientes 30 años. Y este movimiento se (floripón), Ipamoea violácea y hongos, posiblemente Amanita muscaria. Al menos los mayas hicieron dibujos de hongos o cetas, muy parecidos a la famosa Aminita muscaria. De la cocaína es más difícil decirlo, pero los Nahuas en la zona del cacique Nicaragua 5 Parece como que Cuadra envió muchos documentos a Bancroft y nunca fueron regresado a Nicaragua. Existe una colección Bancroft describieron sustancias y efectos de estas sustancias muy parecidas a las hojas de Erythroxolom coca. en una universidad en California. Los documentos enviados por el Presidente Cuadra no han sido identificados en esta colección. 16 Mi Museo y Vos Mi Museo y Vos 17 terminó cuando Barrios recibió una bala en el corazón. Pero, ¿conocimos la totalidad de este movimiento? Creo que no. Y una exanimación detallada de todos los documentos, de los campos de batalla y conocimiento de las armas y sus balas, solamente puede aumentar el conocimiento total de la historia del movimiento liberal y las reacciones de sus opositores en América Central. Otro ejemplo de investigación arqueológica- La Batalla de Namisigue. En 1907, posiblemente por enojo entre el Presidente Zelaya y el presidente Bonilla, el ejército y nave de Nicaragua atacó Honduras y su aliado El Salvador. El esfuerzo de Santos Zelaya de establecer una academia Prusiana en Managua, incorporación de estrategia Prusiana en el uso de ametralladoras Maxim y cañones Krupp, fue complementado con el uso hondureño de mercenarios americanos, General Lee Christmas, Sam Dreben y Tracy Richardson, como Castellón y Jerez habían hecho 60 años antes con William Walker. El resultado fue decisivo en Namisigue cuando el ejército nicaragüense, utilizando fuego de las ametralladoras destruyó los ejércitos de Honduras y El Salvador. El ejército victorioso de Santos Zelaya marchó por la calles de Tegucigalpa. Los cadetes del ejército salvadoreño se acabaron. Poco se ha escrito en Nicaragua sobre la política exterior de Santos Zelaya y esta batalla, y aún menos ha habido escritos en Honduras y El Salvador sobre esta batalla tan importante. Ubicado no muy lejos de San Marcos de Colon, el campo de la batalla de Namisigue está en parte intacto, como fue el campo de batalla de San Jacinto. La batalla del Little Bighorn de Custer en 1876 fue clarificada solamente después de un examen de donde pegaron las balas y donde se dejaron las conchas de cartuchos del ejército y de los indígenas. Todos los participantes del ejército murieron, ninguno de los indígenas victoriosos podía escribir. Los arqueólogos, utilizando una metodología independiente de lo escrito finalmente determinaron lo que pasó en 19866. Y el conocimiento de cómo la infantería británica del duque de Wellington derrotó el olde guarde de Napoleón en la batalla de Waterloo fue terminado solamente cuando cavaron en los años 60 del siglo 20, en el sitio de la derrota, para desarrollar el concepto de bunching, o juntándose cuando se recibe mucho fuego mortal y las tropas perdieron su habilidad de responder. Ningún participante escribió sobre este fenómeno y la base de datos escrita es pobre; los arqueólogos 150 años después lo averiguaron. Antes del 18 de junio de 1815 el olde guarde nunca había perdido un asalto. Los arqueólogos explicaron el por qué por primera vez Wellington pudo derrotarlos y terminar con la carrera política de Napoleón Bonaparte. Para el futuro Si se rechaza la santidad de la hagiografía de la historia de un país en su forma inerte, se puede pensar de un proceso que incorpora la historia y la arqueología como dos bases de datos que se completan. Se puede sugerir sendas para explorar: 1. En Nicaragua la victoria de los liberales en la Cuesta de Plomo, 1893. Es fácil detectar las balas de los protagonistas. Y el lugar es claramente identificado. 2. Las guerras del fin del régimen de José Santos Zelaya, la guerra Mena y el ataque en Masaya de los Marines en Octubre, 1912. 3. Los varios ataques de la catedral de León en los años 20 del siglo XIX y la Guerra de Espina. 4. Medir cuáles edificios en Granada todavía tienen balas en sus paredes, sacarlas e identificar a qué época pertenecen, especialmente el Ex-Convento San Francisco. 5. Ver si hay restos de los ataques de indígenas en las ruinas de Santa María de Buena Esperanza y después Nueva Segovia. En asuntos de arqueología marina, hay al menos cuatro que merecen consideración: 1. Una lancha al otro lado del raudal El diablo, en el Castillo, Río San Juan. Se ve claramente merece estudio. 2. El almirante Fayssoux destruyó un barco de guerra Tico cerca de la bahía de San Juan del Sur. Con instrumentos modernos posiblemente se puede escanear al fondo del mar y encontrarlo. 3. En 1532, Pedro de Alvarado robó barcos y hundió al menos uno en la bahía de El Realejo. Merece una búsqueda y Alvarado dijo cerca de donde lo hundió. 4. En 1854, el General Ponciano Corral hundió un barco de los liberales cerca de la Isla Zapatera y la Isla de Muerto. Debe haber al menos restos de metal del barco en una zona fácil de examinar. 5. El historiador Alejandro Bolaños identificó uno de los barcos de Vanderbilt, que tenía dos ruedas en lugar de una o dos hélices en la playa cerca de la Virgen, lo cual merece ser estudiado. La historia y la arqueología de Nicaragua forman una unidad de base de datos sobre el país que solamente pueden apoyar y completar una a otra. Al final, no puede haber contradicciones entre las dos. Cada una es el otro lado del otro. Por eso vale la pena en hacer los dos tipos de estudios para finalmente descubrir lo que pasó en Nicaragua y en América Central en el pasado. 6 Véase, Fox, Richard Allan Jr., Archaeology, History, and Custer´s Last Battle, University of Oklahoma Press, Norman, 1992. Y Keegan, John, The Face Of Battle, Guildford, Biddles, 1978, y Weller Jac, Wellington at Waterloo, Greenhill Books, London, 1992. 18 Mi Museo y Vos Mi Museo y Vos 19 El Horizonte Cerámico de Engobe Blanco del Postclásico Temprano de México y Centro América* Geoffrey McCafferty* y Carrie L. Dennett** *Universidad de Calgary, Canadá. **Universidad de Calgary y Museo de Arte de Denver. H ace veinticinco años McCafferty y John Hoopes comenzaron una colaboración para investigar la aparente relación entre México central y la región Gran Nicoya de Centro América. Este tema es el ímpetu detrás de la reciente investigación en el Pacífico de Nicaragua, y es también el fundamento del interés de largo plazo en la interacción entre las tierras altas y bajas durante el Epiclásico y *Traducción al español: Nora Zambrana Lacayo 20 Mi Museo y Vos Postclásico Temprano de Cholula, México. Un rasgo material que vincula estos dos tópicos es el uso de la decoración pintada policroma sobre vajillas de servicio engobadas en blanco, especialmente relacionadas a vasijas periformes que fueron usadas probablemente para el consumo del chocolate. En este reporte documentamos dónde y cuándo aparece este complejo, seguido por una consideración de las posibles interacciones culturales. En una reciente publicación, Leonardo López Lujan (2013) se refiere a lo que según él, puede ser el primer artículo publicado sobre arqueología mesoamericana, que trata con el sitio de Isla de Sacrificios, Veracruz. El artículo incluía varias litografías de artefactos encontrados, incluyendo varias vasijas de lo que ha llegado a ser llamado Isla de Sacrificios Blanco sobre Crema (Figura 1). Estas presentan decoraciones curvilineales pintadas en blanco (delineados en café) sobre un fondo crema, con las decoraciones delineadas ocasionalmente con líneas finas incisas. Cerámica similar ha sido hallada en otros sitios en la región de la Costa del Golfo de Veracruz, incluyendo Cerro Montoso, y es fechada tradicionalmente en el período Postclásico Temprano (900-1200 d.C.). McCafferty llegó a interesarse en las vajillas de engobe blanco estilo Costa del Golfo durante la investigación para su disertación, en Cholula (Puebla, México). Mientras que muchos de los policromos del Postclásico de Cholula fueron pintados sobre un engobe naranja, un gran porcentaje de los policromos del Postclásico Temprano presentaban un engobe blanco. Estos correspondían al tipo policromo, originalmente descrito por Eduardo Noguera (1954) como `Policromo Mate´. Como resultado del análisis de seriación conducido durante esta investigación, se descubrió que las vajillas de engobe blanco policromos se fechaban en el período postclásico Temprano (fase local Tlachichualtepetl Medio/Tardío) (900-1200 d.C.). Dos tipos distintivos fueron identificados: Cuaxiloa Mate Policromo, y Ocotlan Borde Rojo: variedad Cristina (Figura 2). Figura 1: Blanco sobre Crema Isla de Sacrificios de Veracruz, México. Figura 2: Cuaxiloa Mate Policromo y Ocotlan Borde Rojo: subtipo Cristina, de Cholula. Mi Museo y Vos 21 Un contexto fechado con seguridad para estas vajillas policromas de engobe blanco fue hallado por Sergio Suarez Cruz, en una bien sellada área urbana de San Pedro, Cholula (McCafferty 1996). Fragmentos reconstruibles de Ocotlán: variedad Cristina fueron hallados mezclados con restos datados entre 900 y 1000 d.C. Estos policromos se asemejan cercanamente a aquellos discutidos por López Lujan para Isla de Sacrificios en términos de decoración pintada, mientras que otros tienen iconografía parecida a la Maya, pero son hechos de fuentes de arcilla locales (Figura 3). Otro contexto excavado fue una plataforma de la Gran Pirámide que incluyó importaciones del Golfo, asociados con los policromos más tempranos en la secuencia, apoyando una sugerencia hecha originalmente por H.B. Nicholson (1982), que los policromos más tempranos estaban relacionados probablemente a influencias del Golfo. Figura 3: Ocotlan Borde Rojo: subtipo Cristina con motivos del Golfo. Las vajillas de engobe blanco Isla de Sacrificios importadas, se distinguen fácilmente por la composición de su pasta muy fina, 22 Mi Museo y Vos careciendo de inclusiones obvias y que tienen un color blanco/crema, en contraste a la pasta Cholula que es de textura relativamente tosca y de color café claro. No obstante, algunas de las decoraciones pintadas halladas en los policromos Ocotlán variedad Cristina, producidos localmente, es claramente reminiscencia del estilo del Golfo (Figura 4). Las variaciones Cholula, sin embargo, también incluyen patrones más diversos, incluyendo representaciones realistas de aves, octopi, y al menos, uno que muestra a un señor con un tocado de plumas elaborado. Postclásico Temprano y continúa a través del período Postclásico Tardío. Mientras que menores variaciones estilísticas del tipo en general, pueden distinguir a diferentes comunidades Mixtecas que son ubicuos en la Mixteca Alta. Estas no son halladas en la adyacente Mixteca Baja o en el Valle de Oaxaca. Notablemente el famoso policromo Mixteca no es introducido hasta el período Postclásico Tardío, así que no está tan directamente relacionado a esta manifestación del Postclásico Temprano del horizonte de la vajilla de engobe blanco. Figura 4: Ocotlan Borde Rojo: subtipo Cristina. Figura 5: Cuaxiloa Mate Policromo. El segundo tipo de vajilla de engobe blanco del postclásico Temprano Cholula -Cuaxiloa Mate Policromo- tiene un acabado menos lustroso, más mate, y los patrones generalmente consisten en un panel de motivos geométricos (Figura 5). Este tipo tiene una semejanza más cercana al tipo policromo Yanhuitlan Rojo sobre Crema de la región de la Alta Mixteca de Oaxaca (Figura 6). Yanhuitlan Rojo sobre Crema también presenta un panel de motivos geométricos sobre engobe crema, y aparece primero en el Figura 6: Yanhuitlan Rojo sobre Crema, de la Mixteca Alta, Oaxaca. El horizonte de la vajilla de engobe blanco en México central y la Costa del Golfo sigue siendo enigmático. Está vinculado al Postclásico Temprano, con los restos mejor fechados que vienen de Cholula. Este es un período asociado con la ocupación Olmeca-Xicallanca de la ciudad, un grupo que se creyó se había originado en la región sureña de la Costa del Golfo (McCafferty 2007). Ellos pueden haber sido étnicamente Maya, pero esta fue un área multiétnica donde se hablaban varios lenguajes al momento de la conquista española. La interacción tierras bajas/ tierras altas puede también relacionarse a las incursiones al sur de los del Golfo Maya, hacia las tierras altas comenzando cerca de 600 d.C. Los policromos de engobe blanco son muy limitados en su uso, y no están presentes en las partes más Nahua de las tierras altas centrales, tales como la Cuenca de México o Morelos. En Tula, unos pocos ejemplos de vajillas de engobe blanco fueron inicialmente identificados como policromos Nicoya de Centro América (Healan 1988; Figura 7), pero recientemente han sido mas adecuadamente identificados como pertenecientes a la tradición policroma hondureña Las Vegas (contemporáneo con los policromos Nicoya). Habiendo demostrado el desarrollo de las cerámicas de engobe blanco en México, pasamos ahora a la otra manifestación importante de este horizonte de vajillas de engobe blanco de la región Gran Nicoya de Centro América. Gran Nicoya comprende el Pacífico de Nicaragua y el Noroeste de Costa Rica. Ha Mi Museo y Vos 23 sido considerada grandemente como la frontera sur de la gran Mesoamérica (McCafferty et al. 2012), especialmente durante el período Postclásico. Los cronistas de la colonia temprana registraron los lenguajes dominantes de la región como dialectos del Nahuat (Nicarao) y Oto-mangue (Chorotega y Monimbo), y rasgos culturales a como también mitos de la migración claramente vinculados a los habitantes con México central y sur, y que el término identificador Chorotega es actualmente una derivación del término Choluteca. Notamos, sin embargo, que estas conexiones tradicionales pueden no estar tan claras a como se asumía originalmente. Mientras que es absolutamente razonable aceptar este argumento lingüístico, hay ciertos factores que no pueden ser pasados por alto o ignorados. Por ejemplo, Chorotega también fue el nombre de un jefe dominante al momento de la conquista española, y que el término Choluteca tiene sus conexiones más fuertes (lingüística, étnica, y geográficamente) en el occidente de Honduras, justo al norte del región Gran Nicoya. La transición del Clásico al Postclásico, conocida localmente como la transición de Bagaces a Sapoá, presenta un cambio dramático en los tipos cerámicos, del uso de una superficie roja bien quemada al uso innovador del engobe blanco con decoración policroma. Las excavaciones recientes en el sitio El Rayo, proveen un contexto bien datado para esta transición, mientras que unas 20 fechas de radiocarbono adicionales proveen una base sólida para una micro cronología 24 Mi Museo y Vos Figura 8: Policromos de la vajilla de engobe blanco de Gran Nicoya. publicados por Samuel Lothrop Cerámica de Costa Rica y Nicaragua (1926). La historiadora de arte Jane Day (1994) enlazó los policromos de Gran Nicoya a la algo ambigua tradición estilística Mixteca-Puebla, aunque nada señala que pudo haber comenzado antes en Centro América que en México central. Figura 7: Policromos ‘Nicoya’ de Tula, Hidalgo en el Museo Nacional de Antropología, Ciudad de México. del desarrollo de las cerámicas de engobe blanco desde 800 y 1250d.C. a lo largo del Istmo de Rivas. Numerosos tipos y variedades de la cerámica de engobe blanco han sido identificados basados en el tratamiento de superficie y elementos decorativos (Figura 8). Se ha estimado que Vallejo Policromo es lo más mexicano en términos de elementos simbólicos, especialmente en el uso de los motivos de la serpiente emplumada (Manion y McCafferty 2013; Figura 9). La asociación de las vajillas de engobe blanco de Gran Nicoya con cerámicas mexicanas ha sido grandemente reconocida, datando desde los dos volúmenes Figura 9: Vallejo Policromo con imágenes de la serpiente emplumada. Foto (a) cortesía de Mi Museo, y (b) por G. McCafferty. El desarrollo de la tradición de la vajilla de engobe blanco es típicamente vista como el marcador del arribo de los grupos étnicos foráneos migrantes (mexicanos) al Pacífico de Nicaragua, porque estos no tienen antecedentes en forma madura antes de la llegada de los migrantes que vienen de México, sin embargo, ahora estamos mas inclinados a ver esta tradición como el fin resultante de la mezcla étnica intensa que siguió (o durante el continuo) de la migración a la región. Este impacto humano físico estuvo probablemente aparejado con los efectos de intercambio prolongado y/o interacción entre Gran Nicoya y la periferia sureste Mi Museo y Vos 25 mesoamericana (Honduras y/o El Salvador). El resultado parece representar una “ceramogénesis” que acompaña un desarrollo de la “etnogénesis Chorotega” que ocurre entre 600 y 800 d.C. En el noroeste de Costa Rica, el desarrollo de Galo Policromo después de 500 d.C. (el primer policromo verdadero de la región) esta directamente vinculado a desarrollos contemporáneos en el Valle del Ulúa de Honduras. La relación entre los Ulúa Policromo: clase Nebla, por ejemplo, y Galo: variedades Jaguar y Lagarto es innegable; formas de vasijas, color y toda la presentación están inextricablemente vinculadas (Figura 10). De hecho, las semejanzas mas allá de la emulación o copia, son probablemente el resultado del intercambio de artesanos y/o entrenamiento; probablemente alfareros de Gran Nicoya fueron entrenados en Honduras, por el contenido iconográfico que es verdaderamente indígena de Costa Rica. El argumento para su conectividad no descansa solo en las cerámicas. Durante este período también atestiguamos la aparición de espejos de mineral de hierro del período Clásico Maya y vasos de mármol estilo Ulúa (objetos de élite que son probablemente el resultado de regalos de élites y formación de alianzas), encontrados en contextos arqueológicos en Costa Rica (Dennett y Blainey 2014; Dennett et al. 2008), a como también la fama de la manufactura del jade Post Olmeca en Centro América, con fuentes de materias primas que se creen son de la periferia sureste. 26 Mi Museo y Vos Figura 11: Comparición de Momta Policromo de Nicaragua y Copador Policromo de Honduras. Figura 10: Comparación de (a) Galo Policromo de Costa Rica y (b) Ulúa Policromo de Honduras. En el Pacífico de Nicaragua, la relación con Honduras continúa, pero en un modelo muy diferente de lo que vemos en Costa Rica. Galo policromo está siendo imitado allí, más que evolucionado a lo largo de la relación Guanacaste/NicoyaHonduras vista tan fuertemente en Costa Rica. El desarrollo de las tradiciones de policromos locales esta comenzando en el Pacífico de Nicaragua después de 600 d.C., no obstante, con ambos Belo y Momta Policromos (Figura 11) están siendo generados en el sitio Ayala, justo al suroeste de la moderna ciudad de Granada (Salgado González 1996a, 1996b). Su conexión (en forma y esquemas decorativos), sin embargo, parece estar más alineada con contemporáneos (período Clásico a Terminal/Epiclásico) desarrollos en la vajilla Copador del área del Valle de Copán. Mientras que algunos de estos cambios fueron probablemente el resultado del desarrollo de lazos entre grupos distantes en una esfera de interacción amplia, creemos que estos cambios repentinos, a como también el arribo de los migrantes más que las ideas/tecnologías, fue estimulado por un evento natural muy localizado –la devastadora erupción del Volcán Ilopango ca. 536 d.C. Esta masiva erupción tuvo impacto apocalíptico en la región de incidencia local de El Salvador, con impactos medioambientales subsecuentes dirigidos hacia el norte. No podemos ignorar la temporalidad de todos estos eventos concurrentes, y también se debe considerar el impacto de los otros eventos que siguieron en los siguientes cien años o más, incluyendo la disolución de la elite política de las tierras bajas sureñas Maya. Tomados en conjunto, estos eventos probablemente sirvieron como el ímpetu de una reconfiguración significativa del comercio existente/ rutas de intercambio, a como también la actual migración de seres humanos fuera del área del impacto periférico. Independientemente de los mecanismos, por 800 d.C. los grupos Chorotegas ocuparon la región Gran Nicoya y habían desarrollado la tradición de la vajilla de engobe blanco local. Actualmente no tenemos evidencia de vajillas de engobe blanco en ninguna parte en Centro América (o Mesoamérica) en una fecha anterior. De manera interesante, siguiendo los pasos de la “revolución Papagayo” se da la a aparición de los policromos Las Vegas en Honduras ca. 950 d.C. Apoyo para este argumento puede ser también hallado en el conocimiento tecnológico diseminado desde Honduras, específicamente la producción de figurillas hechas con moldes, lo que también marca el comienzo del período Sapoá en diferentes manifestaciones. Las variedades más tempranas de Papagayo, Culebra y Serpiente, muestran afiliación con cerámicas mesoamericanas…y no necesariamente con aquellas de México (Figura 12). Hay suficiente influencia material e iconográfica de Honduras y El Salvador que cuentan para estas primeras manifestaciones, especialmente con respecto a la imaginería de serpiente y humana. Las variedades, Culebra como Serpiente están mas cercanamente unidas a los tipos como Ulúa Mi Museo y Vos 27 Policromo, vajilla Copador, y la tardía Las Vegas Policroma en el Clásico Terminal. La imaginería de la Serpiente Emplumada, en su manifestación más temprana en Gran Nicoya, aparece más cercanamente unida con la Visión Maya de la serpiente y aspectos estilísticos de la vajilla Copador, que con la idea Postclásica de la serpiente emplumada a como es atestiguada en el tardío Vallejo Policromo. Esta re-evaluación de la temprana imaginería de la serpiente emplumada, y una re-orientación hacia la visión Maya de la serpiente, también esta ocurriendo en la investigación mexicana central (Jordan 2013). Los desarrollos considerados con mayor fuerza como más “mexicanos” en origen (Quetzalcoatl y Ehecatl) parece que fueron introducidos en el período Postclásico Temprano (ca. 1000 d.C.), y probablemente se ajustan bastante a la perfección con la estructura iconográfica de los indígenas Chorotega. Similitudes entre las vajillas de engobe blanco de Cholula y nicaragüenses son extremadamente cercanas en algunos casos, sin duda un factor significativo en intentos tempranos para relacionar la tradición estilística (Day 1994; Lothrop 1926; McCafferty y Steinbrenner 2005). De hecho, los grupos mexicanos pudieron haber arribado como resultado de una nueva dominación de antiguas rutas de comercio, en ausencia de control u organización del Clásico Maya. ¿Qué buscaban? Probablemente cacao, plumas de quetzal, oro, etc. ¿Cómo vinieron? Probablemente vía Pacífico (por agua y por tierra) y las costas caribeñas (por agua). 28 Mi Museo y Vos Figura 12: (a) Papagayo Policromo: variedad Serpiente, (b) Dibujo de un detalle de Dintel 15 en el sitio Clásico Maya de Yaxchilán que muestra una visión de serpiente (Wikimedia Commons, http://commons.wikimedia.org/wiki/ File:YaxchilanDivineSerpent.jpg#filelinks). Una pista para esta conexión puede ser hallada en una de las formas de vasijas diagnósticas de la tradición de la vajilla de engobe blanco, por toda esta región panmesoamericana. Vasijas altas para beber estaban entre éstas, halladas en Isla de Sacrificios, Cholula, Tula, y en toda la región Gran Nicoya (Figura 13). Creemos que estas fueron usadas para el consumo ceremonial de cacao –análisis de residuos de contenidos de vasijas periformes del cementerio en El Rayo están en ejecución para probar esta hipótesis. Si el patrón general de consumo de cacao está unido a la tradición cerámica de la vajilla de engobe blanco, entonces las regiones asociadas con los mitos históricos de la migración -Soconusco, El Salvador, y Gran Nicoya –todas áreas primarias de crecimiento del cacao. Quizás parte del ímpetu fue el control económico de este valioso artículo. Figura 13: Vasijas de cacao de la vajilla de engobe blanco de la Costa del Golfo, Cholula, Tula, y Nicaragua. El complejo cerámico de la vajilla de engobe blanco del Postclásico Temprano de Mesoamérica y la región Gran Nicoya de Centro América es sólo: complejo. En la medida en que los investigadores continúen en la clarificación de las cronologías relativas de estas áreas, y en la medida en que detallados análisis iconográficos exploren la dinámica de los contenidos simbólicos, las cerámicas de engobe blanco ofrecen importantes pistas en lo cultural, lo ideológico y las relaciones de intercambio que vinculaban a todas estas regiones a través del tiempo. Referencias Day, Jane Stevenson 1994 Central Mexican Imagery in Greater Nicoya. En Mixteca-Puebla: Discoveries and Research in Mesoamerican Art and Archaeology, edited by H.B. Nicholson and E. Quiñones Keber, pp. 235-248. Labyrinthos Press, Culver City, CA. Dennett, Carrie L. y Marc G. Blainey 2014 Reflecting on Exchange: Maya Iron ore Mirrors beyond the Southeast Periphery. In Reflections of the Soul: Mirrors in the Mesoamerican Realm, edited by Emiliano Gallaga and Marc Blainey. University Press of Colorado, Boulder. In press. Dennett, Carrie L., Christina Luke, y Paul F. Healy 2008 Which Came First? The Mi Museo y Vos 29 Marble or the Clay?: Ulua-style Vase Production and Precolumbian. Documento presentado en the Annual Meeting for the Society for American Archaeology, Vancouver, BC. Nicholson, Henry B. 1982 The Mixteca-Puebla Concept Re-visited. En The Art and Iconography of Late Post-Classic Central Mexico, editado por E.H. Boone, pp. 227254. Dumbarton Oaks, Washington, D.C. Healan, Dan M. 1989 [ed.] Tula of the Toltecs: Excavations and Survey. Universidad de Iowa Press, Iowa City, Iowa. Noguera, Eduardo 1954 La Cerámica Arqueológica de Cholula. Editorial Guaranía, México, D.F. Jordan, Keith 2013 Serpents, Skeletons, and Ancestors?: The Tula Coatepantli Revisted. Ancient Mesoamerica 24:243-274 Salgado González, Silvia 1996a Social Change in the Region of Granada, Pacific Nicaragua (1000 B.C. - 1522 A.D.). Ph.D. dissertation, State University of New York, Albany, NY. 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Pp.282-292 , The Archaeological Association of the University of Calgary, AB. 30 Mi Museo y Vos Mi Museo y Vos 31 Muebles antiguos de Mi Museo los mobiliarios como: sillones, armarios, mesa, baúl, espejos, vitrinas etc. sus diseños se caracterizan por su estilo, tales como Jacobino, Luís XV, y datan de finales del siglo XIX y comienzo del siglo XX. Martha Barahona Guía, Mi Museo L os muebles han existido desde tiempos remotos, no hay datos precisos del surgimiento, solamente se conoce que datan desde los tiempos primitivos. Los muebles antiguos varían mucho, dependiendo de la época de su fabricación, es por ello que existen varios estilos que son influidos por muchos aspectos tales como, la influencia del artista que lo diseña, lo que impulsa al artista a innovar en la forma, entre otros. En Mi Museo el señor Peder Kolind tiene una colección de muebles antiguos que comparte con la obra de arte arquitectónica. En ellos se puede observar la evolución del arte decorativa aplicada a 32 Mi Museo y Vos El armario es conocido al menos desde la época romana, en un principio sólo servían para contener armas, según indica su nombre, pronto se utilizó para guardar todo tipo de objeto. A partir del siglo XVIII se construyen armarios vitrinas, y bibliotecas vitrinas, como dignos de salón y gabinetes. En los corredores de Mi Museo se pueden observar algunos de estos tipos de armarios, que posiblemente datan de más de un siglo de antigüedad (Figura 1); la utilidad que desempeñaron estos armarios fue para guardar ropa, bisutería, hasta tenían compartimientos ocultos para documentos y dinero. Actualmente se utilizan para guardar las diferentes enciclopedias. En las instalaciones del museo se recibe la visita de un especialista de muebles Figura 1: Armarios antiguos de Mi Museo. antiguos y conocedor de la historia que han tenido estos objetos, a él le impresionó uno de los muebles que se ubican en el primer corredor del museo, que por su diseño, decoración y acabado, corresponde a un mueble muy antiguo que posiblemente data del siglo XIX (Figura 2); él afirma que en esta butaca existen rastros de desperdigo de balas, quizás por el hecho de que Granada pasó por continuas guerras y la población ocupó muchos de estos muebles como barricada. Estos muebles antiguos que están en Mi Museo parecen hablar por sí mismos, son ricos tanto en diseño como en matices, tienen la particularidad de llevar ornamentaciones talladas a mano y patas torneadas, todos estos detalles fabricados artísticamente los hacen ser únicos, por la calidez de confección. Figura 2: Sillón antiguo de Mi Museo. Mi Museo y Vos 33 Visitas a Mi Museo Los muebles antiguos son hechos de la madera preciosa del trópico de Nicaragua, tales como: cedro real, roble, macuelizo, laurel, guachipilín, caoba, entre otras. Gracias a la extraordinaria habilidad de nuestros diestros artesanos es posible observar y conservar estos muebles, que son una verdadera obra maestra de arte nicaragüense. También el museo posee una colección de muebles importados de Dinamarca, entre los que se destacan sillas y sillones de grandes diseñadores daneses, como por ejemplo los muebles del área de reuniones conformados por la silla Serie 7 de Jacobsen, posiblemente una de las más famosas sillas nórdicas que representan el interiorismo escandinavo en todo el mundo. Sencilla, con un asiento de madera y estructura metálica, se trata de la silla nórdica más vendida en la historia (Figura 3); también están los sillones de roble danés y cuero, diseñados por Borge Mogensen, ubicados en uno de los corredores del museo, donde los visitantes pueden hacer uso de ellos acompañados de una taza de café orgánico (Figura 4). E n el segundo trimestre que este año, del 15 de Marzo al 15 de Junio, Mi Museo obtuvo un total de 3048 visitas, de las cuales 2025 corresponden a extranjeros, 264 nacionales y 559 estudiantes. Estamos contentos de recibir a los visitantes de los diferentes lugares y realizarles un tour por las instalaciones del museo de forma gratuita. A continuación el detalle de los países que visitaron Mi Museo: Figura 3: Juego de sillas Modelo 3107, también conocida como Serie 7. Colección de 1955 del arquitecto y diseñador danés Arne Jacobsen. Figura 4: Sillones elaborados de roble danés y cuero. Diseñados por Borge Mogensen, colección de 1950. 34 Mi Museo y Vos Nicaragua 725 Estados Unidos 694 Costa Rica 181 Reino Unido 136 Francia 111 Canadá 108 Alemania 74 España 42 Holanda 38 Dinamarca 32 Italia 28 Guatemala 25 Australia 25 Argentina 24 Venezuela 23 Puerto Rico 19 Honduras 19 México 15 Suecia 14 El Salvador 14 Bélgica 13 Finlandia 13 Chile 13 Nueva Zelanda 12 Suiza 10 Hungría 8 Paraguay 7 Japón.7 Polonia 6 Austria 5 Irlanda 5 Colombia 5 Brasil 4 Luxemburgo 3 Perú 3 India 3 Rusia 3 Israel 2 Grecia 2 Panamá 2 Portugal 1 Barbados 1 Ecuador 1 China 1 Corea del Sur 1 República Checa 1 Mi Museo y Vos 35 Mi Museo, Calle Atravesada 505, Frente a Bancentro. Granada, Nicaragua. Telf. (505) 2552-7614 E-mail: [email protected] Horario de atención: Lunes-Domingo: 8:00 a.m. - 5:00 p.m. Entrada gratuita. www.mimuseo.org 36 Mi Museo y Vos www.facebook.com/mimuseo.granada