Mayo/Junio 2008
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Mayo/Junio 2008
LA PALABRA HoY Mayo - Junio 2008 centro Santiago apostol chimbote, perú Por Sor Sarah Lennon y Sor Juanita Albracht sobre las aguas sin hundirse Por José Cristo Rey García Paredes, CMF Mi Educación en la Misión del Verbo Encarnado Por Daniela Virgen Cuevas, estudiante Semillas en Tierra Fértil Por Maria Teresa Mañon, Misioneros del Verbo Encarnado En las Noticias Por Randy Escamilla Consejo General de las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado, 2002-2008 Queridas Hermanas, Asociadas/os, Misioneros y Co-Ministros: Sisters of Charity of The Incarnate Word Hermanas de la Caridad Del Verbo Encarnado Amor Meus Directorio Sor Helena Monahan Coordinadora Congregacional Sor Feliciana Mejia Consejera General Sor Maria de Lourdes Urrutia Consejera General Sor Walter Maher Consejera General / Editora Randy Escamilla Director de Relaciones Públicas Maria del Refugio Hubbard Directora de Arte Graciela Frisbie Trducciones La misión de nuestra Congregación es actualizar el amor salvador y misericordioso del Verbo Encarnado, promoviendo la dignidad de la persona humana. Movidas por el Espíritu Santo, analizamos la realidad del mundo en que vivimos para discernir las necesidades de la Iglesia. Seguimos al Verbo Encarnado, modelo de caridad y obediencia, y proclamamos la misión de El, que asumió nuestro existir humano e hizo propios los sufrimientos y las esperanzas de su pueblo. Durante nuestra Reunión de Enero, decidimos “regresar por un camino diferente”, “no llevar nada para el viaje” y “caminar sobre las aguas”. Los invito a reflexionar en ese compromiso personal y en la dirección en que nos lleva como grupo. “Regresar por un camino diferente”, “no llevar nada para el viaje” y “caminar sobre las aguas” nos llaman a abrirnos al amor de Dios, para permitir que nos abrace y nos comprometa plenamente. Nuestro Dios desea conquistar nuestros corazones, cortejarnos y hablarnos con ternura, recordándonos que Dios nos ama. “Por lo tanto, ahora la cautivaré, la llevaré al desierto y le hablaré con ternura” (Oseas 2:14). ¿Es posible que el “camino diferente” se relacione con la atención que prestamos a la vida de Dios en nuestro interior, donde Dios nos habla, no con palabras sino con su presencia? ¿Es posible que el “no llevar nada” nos impulse a entregarnos en forma más completa al poder revitalizador de Dios, como un “árbol que experimenta la presencia del verano” (Rolheiser, The Shattered Lantern [La Linterna Destrozada], 106)? Sabemos que los árboles necesitan agua y luz solar para mantenerse vivos. Así como estas condiciones forman parte de su vida, el Espíritu Santo es parte de la nuestra. San Pablo nos recuerda: “Y de igual manera, el Espíritu viene en ayuda de nuestra flaqueza. Pues nosotros no sabemos cómo pedir para orar como conviene; mas el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos inefables, y el que escruta los corazones conoce cuál es la aspiración del Espíritu, y que su intercesión a favor de los santos es conforme al deseo de Dios”. (Rom 8:26-27). Este peregrinar “por otro camino, por otra ruta” nos anima a enamorarnos locamente de Dios, sabiendo que no nos dejará desamparados. “No os dejaré huérfanos, volveré a vosotros” (Juan 14:18). Dios está con nosotros, nos provee y camina con nosotros. ¿Estamos listos para confiar en este Dios amante y generoso que conoce los anhelos de nuestro corazón? Con la llegada del verano, disfrutamos de los días largos y hermosos de esta estación, recordemos también la promesa de Dios. Basémonos en una profunda comprensión del amor y la fidelidad de Dios para que podamos seguir “haciendo que el amor de Dios, que se muestra en la Encarnación, sea una presencia real y tangible en le mundo de hoy” (Constitución, 2). Con gratitud, , Sor Walter Maher INDICE EN LA PORTADA Centro Santiago Apóstol, Chimbote, Perú 1 Sobre las Aguas sin Hundirse 3 Mi Educación en la Misión del Verbo Encarnado 7 Por Sor Sarah Lennon y Sor Juanita Albracht Por Jose Cristo Rey García Paredes, CMS Por Daniela Virgen, Estudiante Comuníquese con nosotros 4503 Broadway San Antonio, Texas 78209 (210) 828-2224 (oficina) (210) 828-9741 (fax) www.AmorMeus.org Semillas en Tierra Fértil 16 En las Noticias 19 Consejo General de las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado, 2002-2008 20 Estudiante orgulloso, nos compate su sonrisa, Kano’j, Santa Cruz del Quiché, Guatemala. Por Maria Teresa Mañon, Director de Misoneros del Verbo Encarnado ©2008 Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado Por Randy Escamilla www.amormeus.org LA PALABRA Hoy Centro Santiago Apóstol Para el cuidado de pacientes en etapa terminal, Chimbote Perú Por Sor Sarah Lennon y Sor Juanita Albracht A lo largo de más de 44 años, las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarando, además de atender otros ministerios, han prestado sus servicios a los pobres, los enfermos y los moribundos en Chimbote y en zonas cercanas. Esta ciudad está entre las áreas de mayor pobreza en Perú. Incluso hoy en día, los servicios para el cuidado a la salud son muy limitados y su calidad no satisface los estándares. Las Hermanas han trabajado en cooperación con su parroquia vecina y con su párroco, el Padre Jack Davis, oriundo de Fargo, Dakota del Norte, que ha sido misionero en esta zona durante aproximadamente 40 años. A finales de la década de 1990, un grupo formado por sus familiares y amigos en Estados Unidos estableció un Fondo llamado “Amigos del Padre Jack”, para apoyar sus numerosos proyectos de servicio social a favor de los pobres de Chimbote. En la década de los 90, el Padre Jack visitó al menos a tres de sus amigos cercanos mientras sufrían enfermedades terminales en Estados Unidos. Fue testigo de la atención que recibieron en los centros de cuidado a pacientes en etapa terminal donde murieron. Le conmovió el cuidado amoroso que se da a los moribundos en estos programas. Como el Padre conocía la agonía y la falta de atención que sufren los moribundos en Chimbote, decidió establecer en esta ciudad un centro de atención a pacientes en etapa terminal. Así, en noviembre de 2001, un grupo de religiosos de Chimbote se reunió con el Padre Jack y con Gary Zespy, un representante de los “Amigos del Padre Jack”, para hablar sobre la necesidad de establecer un Centro de Atención a Enfermos en Etapa Terminal en Chimbote. Todos estuvieron de acuerdo en que este centro era muy necesario. El grupo se puso en contacto con Sor Juanita Albracht, que es enfermera titulada, para preguntarle si estaba dispuesta a dirigir el proyecto para el desarrollo del programa de atención a enfermos en etapa terminal. Ella aceptó. En abril de 2002, se estableció un programa piloto para determinar si el concepto de un centro de atención a pacientes en etapa terminal podía integrarse con éxito en la cultura peruana. Al concluirse el programa piloto, se incorporó formalmente el centro. En noviembre de 2002 se nombró una Junta Directiva compuesta por personas de Estados Unidos y de Chimbote, Perú, y el Centro de Atención a Pacientes en etapa Terminal empezó a funcionar. Fue el primer programa de su tipo en Perú. Continúa en la Página 2 1 LA PALABRA Hoy Centro Santiago Apóstol ...Continuación de la página 1 Sor Juanita Albracht escogió y entrenó a un médico, una enfermera y varios asistentes para iniciar el aspecto del programa relacionado con cuidado a pacientes en etapa terminal en sus casas. Sor Sarah Lennon se unió al equipo con el compromiso de atender a pacientes de SIDA en etapa terminal y a sus familias. Pronto se difundió la noticia y muchas familias con parientes o vecinos moribundos que padecían cáncer, SIDA, hepatitis y otras enfermedades terminales y que estaban en casa, se pusieron en contacto con Juanita para solicitar que se les admitiera en el programa. Con este rápido crecimiento, se descubrió que muchos de los pacientes no tenían donde vivir o no tenían familiares que cuidaran de ellos y vivían en condiciones de pobreza extrema; a menudo no tenían que comer, no tenían agua ni otros suministros básicos para un cuidado digno. Sor Juanita recomendó a la Junta Directiva que se dieran los pasos necesarios para la construcción de una Residencia para el Cuidado a Pacientes en Etapa Terminal, donde pudieran morir con dignidad y respeto las personas que no podían permanecer en su casa. Anteriormente, el Padre Jack había adquirido un terreno dentro de los límites de su parroquia. Se consiguió autorización para empezar a construir una residencia de seis habitaciones con un vestíbulo muy agradable, un comedor, una capilla, salas de estar, un salón de juegos y una lavandería con equipo moderno y muebles cómodos. Un cuantioso donativo de CHRISTUS Cuidado a la Salud cubrió los gastos de la construcción y el edificio se equipó con donativos del Fondo de “Amigos del Padre Jack” y de otros donantes. El 3 de diciembre de 2002, se celebró la dedicación de la Residencia y se recibieron sus primeros pacientes. Las camas se ocuparon de inmediato, y debido a la urgencia, algunas habitaciones se hicieron dobles. Los pacientes y sus familias siempre han expresado su gratitud por el amor y el cuidado que reciben. Al paso de los años, profesionales del cuidado a la salud y otras personas de Chimbote, Lima y diferentes ciudades de Perú y de otros países, han visitado la Residencia y han conocido el Programa de Atención a Pacientes en Etapa Terminal. A medida que crecieron sus servicios, Sor Juanita respondió al reto de conseguir, enseñar y entrenar a un grupo 2 competente de médicos y enfermeras. No fue una tarea fácil, ya que el concepto del cuidado a pacientes en etapa terminal y el uso de paliativos era desconocido en Perú. Proporcionar medicamentos, líquidos y alimentación apropiada a los moribundos ha sido un reto constante. Una de las luchas diarias más preocupantes para los miembros del equipo ha sido proporcionar alivio a los dolores de los pacientes, en especial a los que padecen cáncer y SIDA, pues es relativamente imposible conseguir narcóticos. La tarea diaria de preparar vendajes para las heridas y responder a las necesidades de los pacientes que requieren pañales exige una creatividad constante por parte del personal. Pero el programa ha recibido muchas bendiciones. Cada año recibe donativos financieros y gran cantidad de suministros y medicamentos por parte de generosos donadores de Estados Unidos y otros países. A mediados de 2007, se decidió añadir otras seis habitaciones a la residencia principal y más servicios de apoyo en la propiedad. De nuevo, se solicitaron donativos para la construcción, y una familia proporcionó una cuantiosa suma para cubrir los gastos. Varios donadores ofrecieron la cantidad faltante. El 3 de abril de 2008, la noche anterior al sexto aniversario del inicio del programa, se bendecirán y dedicarán la nueva ala de camas y los servicios necesarios (lavandería, almacenes y áreas de mantenimiento). El programa de atención en casa sigue prestando servicios y el mayor espacio con que se cuenta en la Residencia ayudará a prestar servicios a quienes los requieren. Actualmente, un grupo de voluntarios de Casma, una ciudad a unos 45 kilómetros al sur de Chimbote, se está preparando para establecer un Programa de Atención a Pacientes en Etapa Terminal en su ciudad. El grupo de voluntarios de nuestro Programa está creciendo gradualmente. Entre los voluntarios tenemos a dos jóvenes norteamericanas que son enfermeras. Ambas son Misioneras del Verbo Encarnado y se comprometieron a dar un año de servicio en Perú. Eligieron el Programa de Atención a Enfermos en Etapa Terminal. Estamos sinceramente agradecidas y complacidas por esto. (Si desea mandar una donación al hospicio, comuníquese con: [email protected]) www.amormeus.org LA PALABRA Hoy ¡Sobre las Aguas sin Hundirse! Desde la Esperanza y el Tedio hacia la Creatividad Por José Cristo Rey García Paredes, CMF El P. José Cristo Rey García Paredes, misionero Claretiano, es Doctor en Teología, experto en Mariología y en Vida Consagrada. Es profesor en el Instituto de Teología de la Vida Religiosa en Manila (Filipinas) y en Madrid (España). Es autor de una serie de libros sobre la Vida Religiosa, entre ellos: Parábola del Reino, María y el Reino de Dios, Teología de la Vida Religiosa en la era post-moderna. Articulo publicado en la revista Religious Life Asia, Vol. VIII, No. 4 (October-December 2006) Cuando la misión se vuelve monótona, repetitiva, acostumbrada, todo languidece: la espiritualidad, la formación, la vida comunitaria, el trabajo que se realiza. Así está ocurriendo en no pocos sectores de la Iglesia. Después de un tiempo de entusiasmo llega el cansancio, el hastío, la pérdida de energía creadora. La misión se vuelve repetitiva. El misionero no es más un místico, un poeta, un creador… se convierte en un funcionario, en un trabajador. Y la causa profunda de esta situación es el deterioro de la esperanza teológica y la crisis del sentido de la vida. I. Comprender la crisis de Esperanza No tiene sentido la vida por la mera razón de que dispongamos de muchas diversiones. La sociedad del ocio las ofrece abundantemente. Ni tiene sentido la vida porque dispongamos de un instrumental tecnológico admirable que excita nuestra curiosidad y nos permite hacer lo que antes creíamos imposible. No tiene sentido la vida por el mero hecho de que podamos comer, dormir y disfrutar de la Continúa en la Página 4 sexualidad. 3 LA PALABRA Hoy Sobre las Aguas ...Continuación de la página 3 ¡Tiene sentido aquella vida que es capaz de superar el hastío! ¡Tiene sentido aquella vida que está planteada a largo plazo y todo en ella adquiere razón de ser! La cuestión que se nos plantea es, entonces, ¿cómo recuperar la esperanza? ¿Dónde encontrar hoy el sentido de la vida? Sólo la esperanza hará que renazca en su auténticidad la misión que Jesús nos confió. 1.“Vita brevis” Es limitado el espacio de vida que se nos ha concedido a cada uno. Tras la infancia, pasamos muchos años en formación; después viene la etapa productiva y reproductiva: ¡son de suyo pocos años! Y –como dice el salmistapasan aprisa y vuelan. Luego viene la etapa de la llamada “tercera edad” que –salvo que no ocurra ningún serio accidente- cuenta con una “vida extra”, prolongada, frecuentemente en veinte o veinticinco años. La pérdida de intensidad utópica es notoria en nuestro tiempo. La mentalidad pos-moderna se ajusta mucho más a la finitud, a lo concreto, a lo posible. Pasó el tiempo de la construcción de grandes catedrales que requerían el paso de varias generaciones para poder disfrutarlas. Ahora no nos damos plazos muy largos. Pasó también el tiempo de la gran retórica y de los heroismos, de las grandezas y de las super-responsabilidades. Hoy nos ajustamos más a nuestra limitación y hablamos con más modestia de nuestras realizaciones. 4 Aunque hay abanderados que proclaman que “otro mundo es posible”, “otra demo-cracia es posible”, sin embargo, se percibe una inteligente resignación ante el ritmo lento de un progreso que, por otra parte, nos puede deparar muchas sorpresas. La Esperanza es sensibilidad divina contagiada en nuestro ánimo. 2. El “don” de la esperanza Los cristianos confesamos que la esperanza es un don. No procede de nosotros, ni de nuestras energías ocultas. Se nos regala cuando creemos que el Reino de Dios llega y se hace presente, cuando constatamos que nuestra súplica “¡Maranatha!” es escuchada. Cuando advertimos en nuestro espacio vital las pisadas del Hijo del Hombre. La esperanza es sensibilidad divina contagiada en nuestro ánimo. A quien le es concedido esperar, supera los límites que su muerte le impone, los intereses más personales e individuales que lo motivan; se siente, sin saber cómo, afectado por “el todo”: todo le interesa, desde su familia, su comunidad, su patria, hasta la humanidad entera, la naturaleza y el cosmos. Quien espera sabe que hay “camino, verdad y vida”; se siente envuelto en la luz de la Resurrección de la carne; en ese horizonte impresionante ubica todo lo que acontece. Nuestra esperanza sólo se enciende cuando prende en nosotros la Luz de Dios. Nosotros somos incapaces de encenderla, pues no pertenece al ámbito de nuestra “luz propia”. La comunión con Jesús, la participación de su Espíritu, la vivencia intensa de la Alianza con nuestro Abbá la hace posible. Nuestra tradición la ha considerado “virtud teologal”, es decir, energía que sólo se explica desde Dios. www.amormeus.org LA PALABRA Hoy 3. Cuando nos falta la esperanza… Cuando nosotros, los seres humanos, nos creemos autosuficientes y renunciamos a vivir en alianza permanente de amor y de visión con nuestro Dios, entonces entra en crisis el amor, la fe y la esperanza. Son tres energías divinas que se mantienen vivas en nosotros gracias a la conexión viva con nuestro Dios. Cuando nos falta la esperanza la curiosidad y el snobismo ocupan su lugar. No interesan entonces: • los grandes horizontes, sino los grandes espectáculos; • no la formación, sino la información adictiva; • no la sabiduría, sino la curiosidad siempre inquieta; • no la transformación, sino el maquillaje y el “fitness”. Disfrutamos más proyectando sueños vanos, que haciéndolos realidad. El escepticismo y hasta el cinismo nos desconectan de Dios y hacen imposible la esperanza. A la vida consagrada no le falta curiosidad, ni información, ni agendas llenas de proyectos, ni diversos intentos de maquillaje. Lo que me pregunto es cuánto espacio ocupa “la esperanza teologal” cuya llama sólo la comunión con Dios enciende y cuyos efectos son notorios en una admirable “novedad de vida”, e innovación creadora. ¿No se dice que la esperanza es activa y creadora? Los ojos de la desesperanza comienzan a funcionar ya, cuando nos miramos a nosotros mismos. En lugar de ver la vida, vemos la muerte. Extrapolamos, antes de tiempo, el polo de la muerte al de la vida. Vivimos atados a la muerte, cuando pensamos que “ya no merece la pena” embarcarse en demasiadas cosas; cuando renunciamos a “dar el do de pecho” en una nueva actividad, a volver a repetir el entusiasmo que en otro tiempo nos llevó a hacer locuras. Hay quienes se desencantan ante las dificultades que encuentran y abandonan sus bellos proyectos; ¡dejan de creer en el futuro! Cuando la desesperanza cunde, nuestras reuniones comunitarias están determinadas por silencios, bloqueos ante las nuevas iniciativas, escepticismo ante los proyectos que nos proponen los más jóvenes o las personas más sensibles a la profecía. El escepticismo y hasta el cinismo nos desconectan de Dios y hacen imposible la esperanza. Somos como el que entierra su talento y piensa que no merece la pena trabajarlo ya (Mt 25,24-25-30). Nos hacemos muy difícil la experiencia de la esperanza unos a otros, cuando ante cualquier iniciativa decimos “¡imposible!” o “¡no merece la pena! Desbloqueamos la esperanza, en cambio, cuando nos recordamos que nuestro Dios suele elegir instrumentos pobres y débiles para confundir a los fuertes y que “todo es posible para el que cree” (Mc 9,23) y que Dios puede hacer de las piedras hijos de Abraham (Mt 3,9). ¿Qué nos ocurriría si de verdad hiciéramos espacio al futuro que Dios nos ofrece, al futuro apocalíptico del Reino, en nuestro presente? Continúa en la Página 6 5 LA PALABRA Hoy Sobre las Aguas ...Continuación de la página 5 4. ¿Un presente precario? ¡No todavía! Si contemplamos las generaciones que actualmente formamos la vida consagrada, constatamos que no hay motivos para el escepticismo. Es verdad, que algunos, fuera de la vida religiosa, están vendiendo la idea de que “estamos ya para el arrastre”, de que esta vida religiosa actual molesta más que ayuda. Pero, nos podemos contemplar con otra mirada menos malévola. En la película del “Gran Silencio” Philip Groaning ha filmado la vida de un monasterio cartujo que puede muy bien servir de parábola de la vida consagrada. Prevalecen los monjes ancianos, curtidos por los años, pero no falta la media edad, ni tampoco los jóvenes y nuevos candidatos. En ese monasterio la cámara sólo capta belleza, encanto, serenidad. Como cuando se detiene en los rostros y en especial en el rostro tan esculpido de un monje anciano que sólo invita a penetrar en el misterio. Hablamos frecuentemente de números, estadísticas y del envejecimiento mayoritario dentro de la vida consagrada. Pero la cuestión que debemos plantearnos es: ¿qué es la vejez? ¿Es un territorio de esperanza? ¿Sí o no? ¿y la juventud que llega desde diferentes países? ¿es un territorio de esperanza? “La vejez es tan larga, que no hay que comenzarla demasiado pronto” (Mark Twain). La vida religiosa actual en bastantes países acaba de recibir un regalo fabuloso: una “vida extra” : ¡de quince a veinte años suplementarios! Están a disposición de los religiosos y religiosas adultos. Y, lo que es aún mejor, podemos consumir ese plus de existencia con buena salud e incluso en plena forma. Se está dando una revolución que nos altera de manera durable el cuerpo, la conducta y el modo de 6 pensar; y transforma también los equilibrios de la sociedad y el futuro de nuestros jóvenes y descendientes. Se trata de un cambio capital en nuestra historia que nos afecta a todos. No se prolonga sólo nuestra vida. También nuestra vitalidad. Hasta hace poco la existencia se dividía en tres etapas: infancia (el lapso del desarrollo), edad adulta (el lapso de la actividad) y vejez (el lapso de la decadencia). Recientemente se les ha agregado la adolescencia; y se acaba de descubrir otro lapso de transición, una nueva edad, entre madurez y senectud, de los 60 a los 75 años: una segunda adolescencia, quizás tan agitada como la anterior. La vida religiosa actual en un buen número de otros países, está recibiendo otro regalo fabuloso: nuevas generaciones de otras culturas que intentan vivir con pasión esta forma de vida. Las semillas del carisma están germinando en África, Asia, Oceanía, de modo admirable. Ya son miles los nuevos religiosos y religiosas que llegan a la mayoría de edad y nos traen con ellos las riquezas de otros pueblos, culturas, y la capacidad creadora de una nueva forma de ver la caridad evangélica. La interacción entre estos regalos fabulosos será nuestro desafío (es decir, nuestro problema y nuestra oportunidad) para los próximos años. Los desafíos son llamadas a la imaginación para encontrar respuestas creativas. ¿Un presente precario? Mi respuesta es ¡no todavía! Tenemos tiempo para un nuevo proyecto de misión “inclusivo” en el que nadie sobre, ni falte; en el que la veteranía y la juventud generen un proceso creador hasta ahora no visto, y con los rasgos de la posmodernidad y la globalización, que nos hace relevantes y católicos. Continúa en la Página 9 Los desafíos son llamadas a la imaginación para encontrar respuestas creativas. www.amormeus.org LA PALABRA Hoy Mi Educación en la Misión del Verbo Encarnado, Instituto Miguel Ángel, México City Daniela Virgen Cuevas, Estudiante Mmmmm..., ¿Cómo empezar?...Resulta tan difícil decir con palabras lo que significa el Miguel Ángel para mi. La escuela ha sido muy importante en mi vida, en ella he aprendido muchas cosas que me han hecho crecer día a día, me han mejorado como persona y me han ayudado a encontrar mi camino. En unas cuantas semanas voy a acabar mi Preparatoria para después entrar a la universidad. Tan sólo en pensar en esto y en todas las experiencias que he vivido en este lugar me dan escalofríos y me produce un sentimiento tan extraño que no puedo explicar, por un lado, feliz ya que estoy muy agradecida con Dios por todas las cosas buenas que me ha dado, y por el otro lado, triste ya que sé que esto pronto acabará y para ser sincera no quiero, no soy buena para los cambios y estoy tan feliz aquí que me resulta realmente difícil dejar todo esto, pero la vida sigue su curso y yo debo moverme con ella. Entré aquí desde chiquitina, tenía como unos 4 o 5 años aproximadamente, ahora tengo 18 añotes y debo decir que a lo largo de estos años conocí gente extraordinaria que jamás olvidaré y que permanecerán en mi corazón y en mi mente por toda la vida. Mi generación, amigos, maestros, directoras, profesores y las personas que nos ayudan a mantener nuestra escuela linda y limpia, todas estas personas me enseñaron más allá de lo que uno se supone aprende en la escuela, es decir, cómo leer, cómo escribir, matemáticas, ciencias naturales, biología, física, química, etc. Ellos y mi familia me enseñaron valores, tales como la amistad, generosidad, amor, tolerancia, respeto, amabilidad, entre otros. A lo largo de los años he aprendido que la familia es la célula de la sociedad, ahí es donde nosotros aprendemos como actuar ante las diferentes situaciones que la vida nos va planteando, es donde recibimos amor, cariño y ayuda incondicional, es donde podemos ser quien somos en realidad. Pero la vida me ha enseñado otra cosa, no solo existe la familia de sangre, sino también aquella que la forman las personas que de alguna manera se han cruzado en nuestras vidas y que nos han enseñado cosas nuevas, cosas que nos ayudan a crecer, cosas que nos hacen sentir bien, cosas que nos hacen felices, son personas que nos ayudan a encontrar nuestro camino. Son personas que de alguna manera nos han dejado una marquita en nuestro corazón. Son personas que llegamos a querer como hermanos y yo la llamo la familia del corazón. He aprendido que no necesitan ser de nuestra misma sangre para que los llamemos familia, de hecho todas las personas que habitan este mundo son nuestros hermanos, eso es lo que nos enseña Jesús cuando viene al mundo. Yo me atrevo a decir que esta escuelita me ha dado la oportunidad de agrandar mi familia, todas las personas que conocí aquí me han dejado su huella en mi corazón y eso me hace muy feliz. Como dije todas estas personas me han ayudado a encontrar mi camino, bueno al menos el camino que pienso que me toca seguir. Siempre he tenido miedo de elegir cosas, nunca estoy segura de nada, pero ha decir verdad, hay una sola cosa de la que estoy segura y esa es a lo que me quiero dedicar toda mi vida. Yo quiero ser misionera, desde que estoy chiquita recuerdo que al ver a las misioneras de la escuela (las niñas de prepa) siempre me llenaba de ilusión el saber que cuando fuera grande como ellas, yo podría hacer lo mismo, haciendo algo por mi comunidad, por mi mundo. Continúa en la Página 8 7 LA PALABRA Hoy Mi Educación en la Misión...Continuación de la página 7 Y... Oooooh sorpresa ya soy grande y he tenido la oportunidad de ir de misiones por tres años seguidos en Semana Santa y es lo mejor que he hecho en toda mi vida, no se compara con nada en la vida. Es una experiencia muy enriquecedora, te llena el corazón de grandes y buenos sentimientos, te hace sentir libre, te hace aprender. Cuando uno va de misiones cambia totalmente su forma de ver la vida. Uno aprende que no necesita tener mucho para ser feliz, uno aprende a ser solidario, a compartir con las demás personas su vida. Ahora entiendo esa frase tan famosa: el que no vive para servir, no sirve para vivir. Eso es más que cierto. En nuestro mundo en general hay muchas injusticias, pobreza y está en nuestras manos poder cambiar eso y sólo tengo una palabra: servicio. Si nosotros servimos a nuestros hermanos veremos que nuestro mundo será diferente. Al servir a los demás estamos dando amor a los demás y eso es lo que necesita nuestro mundo. El servicio implica muchas cosas, una de ellas es mostrar que todos somos iguales, sin importar si tenemos dinero o no, si estamos enfermos o sanos, si somos “feos” o “bonitos”. Todos tenemos la misma dignidad como personas por el simple La plástica del mural del Instituto Miguel Angel desarrolla un concepto lleno de simbolismos: Las siglas IMA Indudablemente nos enmarcan el escenario donde todo esto puede ser posible y nos da sentido de pertenencia y comunidad, en donde adquirimos todos estos valores y de quien somos parte, como gran familia educativa y formativa. La Nube Representa principalmente el limite entre el ser y el trascender. Los Escudos: Escudo completo inferior. Nos define como un ser que ha sido formado por el IMA con todos sus valores y esencia, explorando y explotando el conocimiento que adquirimos. Escudo 8 hecho que somos personas, seres humanos. En estos tres años de misión por fin entiendo lo que significa ser misionero. Ser misionero implica llevar un rayo de esperanza a aquellos que la han perdido por su situación, es escuchar a los demás, escuchar todo lo que tienen que decir, es jugar con los niños, es disfrutar del mundo que Dios nos dio, es ayudar a los que necesiten, es llevar un poco de alegría, es disfrutar de nuestra gente y es llevar amor a los demás, y no sólo en Semana Santa si no todos los días del año en cualquier lugar en donde nos encontremos. Eso es la misión para mí y eso es lo que me hace feliz. Es lo que quiero hacer durante toda mi vida. La escuela me ha dado la oportunidad de ir, no sé que hubiera pasado si hubiera estudiado en otra escuela, a lo mejor nunca hubiera tenido la oportunidad de tener este tipo de experiencias que me han construido como persona y es por eso que estoy en el lugar y que estos 14 años de mi vida en el Miguel Ángel los he vivido con las mejores personas y con las mejores experiencias que no cambiaría por nada. Gracias a Mamá y Papá por haber escogido esta escuela para mi, es justamente donde tenía que estar. abierto inferior: Nos define como un ser completo, pensante, libre, abierto al mundo actual y dotado de todos los elementos necesarios para salir a la vida y trascender por medio de nuestros actos diarios con bases firmes. Escudo intermedio: Nos encontramos dirigiéndonos hacia Dios, habiendo cumplido todas nuestras metas espirituales y humanas, satisfechos de los que hemos logrado como seres libres y llenos de fé. Las gaviotas: Revoloteando nos muestran como seres libres llenos de luz y alegría, listos para alcanzar nuestro principal objetivo, estar cerca de Dios siempre. www.amormeus.org LA PALABRA Hoy Sobre las Aguas ...Continuación de la página 6 II. ATENDER A LA CRISIS DE SENTIDO: EL TEDIO La falta de esperanza se manifiesta en el fenómeno del tedio. “No se ha prestado al tedio la atención que merece como factor del comportamiento humano. Estoy convencido de que ha sido un poderoso agente a través de los tiempos. Y en la actualidad, lo es más que nunca” (Bertrand Russell). 1. ¿Qué es el Tedio? Cuando estamos afectados por el tedio, el tiempo futuro se nos presenta como realidad repetitiva, sin interés alguno y no como un espacio vital lleno de posibilidades. Lo único que deseamos entonces es que el tiempo pase. El tedio nos surge cuando no podemos hacer lo que queremos o, cuando –que es peor aún- no sabemos lo que queremos hacer. El tedio manifiesta que estamos desorientados en la vida; el tedio nos produce un enfriamiento psíquico, que amenaza a nuestro espíritu. “El tedio es como una enfermedad de las cosas mismas, una enfermedad que consiste en que toda vitalidad se extingue para desaparecer súbitamente” (Alberto Moravia). Para que el tedio no se apodere de nosotros llenamos nuestras agendas de trabajos o buscamos diversiones o formas de ocio. Solemos decir entonces: “¡No tengo tiempo para aburrirme!”. Pero la verdad es que ni los trabajos acumulados, ni las diversiones logran dar sentido a la vida. El vacío interior sigue ahí. El tedio está ligado al deseo de experiencia y de vivencias que no se ve cumplido. Sólo la experiencia y las vivencias nos sacan del tedio; su ausencia o pobreza lo acrecientan. Y es que cuando “experimentamos” o “vivenciamos” nos encontramos con la originalidad, la novedad de la vida. No obstante, también es cierto que las experiencias y vivencias son pasajeras y lo que en un momento resultaba muy interesante, poco después se vuelve indiferente o cansino. 2. ¿Hay tedio en la vida religiosa? El tedio nos aqueja mucho más de lo que suponemos. La vida monástica primitiva era muy consciente de ello. Lo llamaban “acedia”. Una comunidad no funciona adecuadamente, si no es capaz de encontrarle sentido a lo que es y lo que hace. Los Padres del desierto –como Evagrioconsideraban la acedia pecado grave, realidad demoníaca: el demonio inducía a los monjes a odiar el lugar en que se encontraban e incluso su forma de vida; les introducía en el alma una tristeza profunda. La acedia era descrita como un estado de hastío vital, de agotamiento. La edad media sustituyó el nombre de acedía por el de melancolía o indiferencia apática. Los grandes ascetas veían en la acedia el origen de los demás pecados. Según Casiano, la acedia se opone a la alegría que debemos sentir ante la creación y Dios. A partir del siglo XIV la acedia empezó a considerarse más como una enfermedad que como un pecado. La acedia sigue presente en la vida consagrada de nuestro tiempo. Es un mal que acaba con la esperanza y desvitaliza, entristece y desapasiona la misión. Continúa en la Página 10 9 LA PALABRA Hoy Sobre las Aguas ...Continuación de la página 9 Ocultamos el tedio en mil ocupaciones con las que enredamos nuestra vida. Los religiosos sabemos construirnos nuestra agenda de diversiones que aparcan el tedio: tenemos, por ejemplo, nuestras tiempos para la radio, para el periódico, para la televisión, para el ordenador, para el departir con la gente, además –obviamentedel trabajo de cada día. Es probable que con esa agenda nos falte tiempo incluso para la oración, para el estudio, para el diálogo con nosotros mismos. Si algún día las circunstancias nos obligan a tiempos prolongados de silencio o inactividad, descubrimos nuestro vacío interior y el “horror vacui” (horror al vacío) que nos produce estar solos con nosotros mismos. No aguantamos el silencio, ni la soledad… Porque entonces aparece el tedio. Lo grave de todo esto –referido a la vida religiosa- es que el tedio manifiesta la exclusión de Dios de nuestra vida. Pascal decía que el hombre sin Dios está condenado al tedio: “No es necesario poseer una mente privilegiada para comprender que no existe nada que nos contente de forma real y duradera sobre la tierra” (Pascal). El ocio y el tedio conducen a la minimización de la vida. ¿Cómo volver lo tedioso en algo interesante? ¡Llenando de contenido, de ser, la vida! El tedio es como una muerte en vida. 3. El tedio como paso hacia la creatividad Quienes, sin embargo, no rehuyen el tedio, sino que lo acogen y aguantan, pueden estar preparándose para un momento creativo. Así lo veía Nietzsche cuando decía que “esa desagradable calma del espíritu” que es el tedio puede ser el precedente de la acción creadora. Los espíritus creativos retienen el tedio. Los simples, lo rehuyen. El tedio puede funcionar –decía Heidegger- como una iniciación a la metafísica, 10 al encuentro con Dios. La espiritualidad puede nacer en la nada del tedio. El tedio le quita al mundo su hospitalidad: se echa entonces en falta un mundo-hospitalario. El tedio nos hace añorar el tiempo que llamamos “kairós”, evento, presencia de la Gracia. Hay un tedio superficial y un tedio profundo. En el tedio superficial uno se siente vacío de las cosas que lo rodean. En el tedio profundo, uno se siente vacío de todo, incluso de uno mismo. Nos vemos impotentes ante este tipo de tedio. Lo único que podemos hacer es entenderlo. El tedio nos hace preguntarnos por nuestra identidad: ¿quién soy? Y me hace cuestionarme si lo que tengo en mí es un fundamento o un abismo. Cuando nos entendemos como un puro presente, nos vemos como abismo. Las referencias tanto al pasado como al futuro nos estabilizan. Se han buscado muchos remedios al tedio: la relación con Dios (Pascal), el amor (Friedrich Schlegel), la renuncia al yo individual a través de la experiencia estética (Schopenhauer), encontrar sentido al mismo tedio y soportarlo (Bertrand Russel). La cuestión está en que tales respuestas no son definitivas: a la larga, el tedio retorna, pues es pesadísimo y reincidente. Joseph Brodsky tal vez ofrezca la receta más convincente: “Cuando el tedio haga presa en ti, sumérgete en él. Deja que te presione, que te arrastre hasta el fondo. El tedio tiene un potencial en virtud del vacío que genera… En virtud de su negatividad el tedio alberga la posibilidad de un cambio positivo”. El tedio es un problema capital de la edad moderna. El tedio se extiende cuando las estructuras de sentido tradicionales se derrumban. La liberación de la tradición nos obliga a buscar el sentido por nosotros mismos. El tedio nos conduce a un gran sentido oculto. Si es profundo causará un cambio en la existencia. www.amormeus.org LA PALABRA Hoy En la vida hemos de soportar una importante cantidad de tedio distribuida por aquí y por allá. El tedio debe aceptarse como insoslayable, como la fuerza de gravedad de la propia vida. Pero tal vez exista una solución: ¡contra el tedio, la capacidad creadora! El ser humano puede trascenderse, ver la realidad de otra manera, superar los límites del espacio y el tiempo con su imaginación. Puede creer y esperar. Tal vez en esto consista la “gracia” de la Misión que Jesús nos confió. Vivir aquí, y ahora, la Utopía del Reino de Dios. Vivir desde la perspectiva de la despreocupación, que nos ha sido dada al encontrar “el tesoro: para procramarlo y ser testigos de esta maravillosa invención. III. LA CAPACIDAD CREADORA Hemos utilizado tanto esta palabra últimamente, que cualquier iniciativa era denominada como “creativa”. Hemos llamado “creatividad” a la “imaginación perezosa y con prisas”. Cualquier improvisación de último momento, sin raíces, sin meditación y espiritualidad previa, ha sido considerada “creativa”. La creatividad en la vida religiosa ha estado privada de fundamento, en no pocas ocasiones. Y esto ha afectado seriamente a la misión. Nada extraño, entonces, que no pocas personas sensatas se echen para atrás cuando escuchan la palabra “creatividad”. Muestran así su cansancio y en cierta medida desprecio hacia las personas que se consideran creativas. Y es que la creatividad es otra cosa. Es una palabra válida, cuando significa lo que debe significar 1. Espacio para el encuentro Allí donde acontece la creatividad se da un encuentro entre lo humano y lo divino. En la acción creadora nosotros co-creamos con el Espíritu de Dios. Y al decir “nosotros” nos referimos a una realidad misteriosa que nos constituye: átomos de hidrógeno, los alimentos y bebidas que nutren nuestro cuerpo, las ideas que penetran en nuestra mente, el lenguaje que hemos aprendido, la belleza que hemos absorbido a lo largo de nuestros días en la tierra, los encuentros que nos han afectado. La creatividad es el espacio de encuentro, de reunión entre los poderes divinos de la creación y los poderes humanos de la imaginación. Hay creatividad allí donde se da una profunda intimidad con lo divino. “Dios goza cuando ve cómo nuestra alma se agranda”, decía el Maestro Eckhart. Y es que la capacidad creadora nos obliga a ello. La creatividad no es propia de seres superiores. No ha sido concedida únicamente a los genios. Es una capacidad que hemos recibido de nuestro Creador. El Creador ha crea- do “creadores”. ¡Lo somos! Pero la cuestión está en cómo desplegar esa capacidad interior, cómo educarla, cómo ser guiados y motivados hacia un pensamiento creativo, una praxis creadora. 2. Fuente de sentido La creación no es casi nunca el resultado de una intuición repentina, sino que llega tras años de intenso trabajo. La capacidad creadora es fuente de sentido en nuestras vidas. Entregados a la acción creadora, sentimos que estamos viviendo más plenamente que durante el resto de la vida; y el resultado de la acción creadora es siempre interesante y dador de sentido. La creatividad acontece siempre en espacios liminales: en la intersección de culturas diferentes, donde creencias, estilos de vida y conocimiento se mezclan y permiten a los individuos nuevas combinaciones de ideas con mayor facilidad. La creatividad es más probable en lugares donde la percepción de las ideas nuevas requiere menos esfuerzo. Continúa en la Página 12 11 LA PALABRA Hoy Sobre las Aguas ...Continuación de la página 11 La creatividad es un fenómeno sistémico, más que individual. Somos creadores en el conjunto, cuando nos dejamos afectar por el todo. Los sectarios, los cerrados en sí mismos y en sus propios intereses, apenas participan en la re-creación del mundo. Su creatividad es negativa. En el fondo, están preparando iniciativas anti-génesis, destructivas. No obstante, el genio creador parece que se aisla de la sociedad, se recluye en su monasterio artístico. En realidad no se aparta, sino que penetra más profundamente en la humanidad. Es como el psicoanalista que investiga la psiqué humana, o el cirujano que va penetrando por la misteriosa geografía del cuerpo humano. Cuando la persona creadora sale de su aparente aislamiento, es portadora de buenas noticias. Sin una buena dosis de curiosidad, admiración e interés por cómo son las cosas y por cómo funcionan, es difícil reconocer un problema interesante. La apertura a la experiencia, una atención fluida que procese continuamente lo que ocurre a nuestro alrededor, es una gran ventaja para reconocer una novedad potencial. La búsqueda de la creatividad nos sitúa, entonces, en el corazón mismo de la espiritualidad. 3. Miedo a la creatividad Si le preguntamos a alguien ¿porqué no desarrollas tu capacidad creadora?, tal vez nos responda: ¡porque tengo miedo! ¡Porque soy muy superficial y me falta hondura! ¡Porque se ha apoderado de mí la tristeza! ¡Porque estoy enfermo y puedo morirme pronto! ¡Porque no me van a aceptar! ¡Por el precio que he de pagar por ello! ¡Porque soy un perfeccionista! ¡Porque Dios no me ha concedido ese don! Dentro de nosotros hay una persona con capacidad creadora. ¿La dejamos inédita, como un talento que no se trabaja, como un germen que no se desarrolla? ¿Responde a su vocación, quien 12 no responde a su capacidad creadora? Todo en la creación está en constante proceso creador, procreador. Por eso, hay vida. El ser humano tiene conciencia de ello. Puedo realizarlo de forma intencional y cordial. Puede hacerse “regalo” desde su capacidad creadora: ¡un regalo único! El Maligno es el anti-creador por antonomasia. Sólo desea destruir y acabar con la vida. ¡Eso es el pecado! ¡Renuncia a la capacidad creadora en uno mismo y la bloquea en los demás! El pecado es Anti-Génesis. Cuando llega el Liberador-Jesús se produce un “génesis” (Mt 1,1.18). 4. ¡Lanzarse a lo profundo! La creatividad nos lleva al desierto, a la soledad, a aquel lugar donde se inicia la liberación de nuestra capacidad. Sólo será creadora aquella vida consagrada cuyos miembros resistan el silencio, se recluyan en el monasterio de su soledad interior, resistan la acedía y esperen la llegada del Espíritu. No se busca la soledad por la soledad, ni el silencio por el silencio. Se va allá por la urgencia creadora. Quien se siente desafiado por todo lo que ocurre en el mundo, en la sociedad, en la Iglesia, en su Comunidad, en él mismo, busca en la soledad el ámbito para madurar las respuestas, reorganizar las intuiciones, proyectar la misión. Tal vez los cuarenta días de Jesús en el desierto nos hablen de su inquietud interior por encontrar las líneas más creadoras en su misión. De allí parten sus discursos, sus acciones transformadoras y sanadoras, su espiritualidad más profunda. Poco creativa será esa vida consagrada que se desparrama en mil actividades, que se ve obligada a improvisaciones de última hora, que sólo se sirve de plagios y renuncia a cultivar su pozo de sabiduría interior y extraer de él lo mejor. www.amormeus.org LA PALABRA Hoy Cuando llega la capacidad creadora, concedida por el Espíritu, renace la alegría. “¡Alégrate, agraciada!”. Se acaba el hastío, el tedio de la vida. La inquietud interior ha encontrado respuesta. Y esa respuesta es considerada ¡pura gracia! ¡inspiración! Cuando llega la inspiración todo se intensifica en nosotros. El cuerpo vibra y se emociona. Todo renace para contribuir –en misión compartida- al resultado creador. La unión con el Espíritu Creator es la fuente más genuina de la alegría. Sólo quienes sienten ese gozo interior pueden evangelizar, transmitir la Buena Noticia. ¿Cómo puede ser mensajero de la Alegría (Mebasser o Evangelizador) una persona apesadumbrada, entristecida, que siente el tedio de la vida, a quien todo le aburre? La inspiración creadora es fuente de evangelización: primero para nosotros mismos, después para los demás. Quien se siente movido por el Espíritu Creador piensa a veces que está loco. Algo de locura salvaje está presente en quienes han recibido la gracia de la pasión creadora. Quizá esto sea el “temor de Dios”: una especie de estremecimiento ante una capacidad que nos excede por todas partes, pero que moviliza hasta los miembros más pequeños de nuestro cuerpo y los sentimientos más insignificantes de nuestro espíritu. La inspiración lleva al éxtasis. No hay que domesticarlo. ¿De qué nos sirve una vida consagrada que nunca se extasía? 5. Ámbitos de creatividad más urgentes Creo que nuestra capacidad creadora, como misioneros y misioneras del Reino de Dios, como humildes mediaciones de la Gran Alianza de nuestro Abbá con la humanidad, nos lleva a tres ámbitos que hoy, más que nunca, la necesitan: a) El ámbito de la religión y la liturgia Ante la insensibilidad de muchos de nuestros contemporáneos ante nuestro Dios, ante nuestra religión, ante nuestra fe, ¿no deberemos empeñarnos en hacer surgir nuevas formas litúrgicas, religiosas, cultuales? ¡Las que el Espíritu nos dá, pero nosotros todavía no hemos descubierto! El arte litúrgico todavía es medieval o renacentista. Guarda evidentemente los rasgos de nuestra gran tradición. Lo cual está muy bien y es necesario. Hemos introducido elementos nuevos, pero bastante pobres desde una perspectiva creativa. La gran música contemporánea está fuera de nuestras iglesias y religiones. Las nuevas tendencias artísticas en la imagen, en la escultura y arquitectura, en la danza y en la expresión, apenas rozan nuestra fe y creencias. La belleza creada se nos escapa y nos contentamos únicamente con ser los dueños de la “Belleza increada”. De esa belleza divina no sabemos cómo hablar. Nos faltan el lenguaje, las formas, los sonidos. No hay controles de calidad a la hora de crear una nueva imaginativa de la fe. Es verdad que algunos pastores han demostrado muy poca sensibilidad ante la creación y se han encastillado en “el arte sacro” para mantenernos atados al pasado antiguo y medieval con algún resabio renacentista. Lo mismo le ocurre a la expresión teológica. Se le impide la expresión creadora. Se desconfía mucho de la imaginación, de la creación. Por eso, también hay teologías que cansan. Aburren, hastían, matan la esperanza. El Espíritu Creador, sin embargo, actúa por doquier. Cuando no puede penetrar por una puerta, lo hace por la otra. Hay creatividad religiosa, teológica en nuestro mundo. Lástima sería, que llegue a nuestra casa y los de la casa, no lo reconozcan. b) El ámbito de la mejora institucional de la Iglesia La Iglesia necesita dar pasos adelante en sus estructuras. Es el tiempo de la imaginación organizativa e innovadora. La iglesia posconciliar se ha redefinido a sí misma como Iglesia de comunión y de misión. La comunión y la misión han de configurarla. Continúa en la página 14 13 LA PALABRA Hoy Sobre las Aguas ...Continuación de la página 11 No tenemos dificultad teórica en admitir que el laico es un auténtico sujeto responsable de la vida eclesial; pero de hecho, lo acogemos como un mero voluntario –sin estatuto y sin remuneración- al que se le pide su trabajo e incluso su aportación económica; ha llegado el tiempo en que hemos de dar un reconocimiento oficial, jurídico y litúrgico a muchos servicios de los laicos. ¿No está llegando el momento en el cual ellos han de ser llamados a participar en las decisiones más serias de la vida eclesial, como elección de párrocos, obispos y hasta del Papa? El camino sinodal de bastantes iglesias particulares es un primer paso, que requiere seguir siendo tomado en serio. La capacidad creadora ha de encontrar espacios nuevos para el genio femenino en la Iglesia. Las mujeres de nuestro tiempo han de encontrar en nuestra comunidad de fe un espacio para la esperanza, horizontes que den sentido a la vocación que sienten en lo más profundo. La capacidad creadora ha de ser capaz de encontrar nuevas formas de distrirución de los poderes eclesiales y de reconocer aquellos que todavía están inéditos. c) El ámbito de la misión La misión es fuente de lo nuevo. Las energías del cosmos, las riquezas de los pueblos, las culturas y las religiones, llegan a la Iglesia a través de la misión. La iglesia, en permanente diálogo de vida, ofrece a la sociedad el mejor alimento, el Pan que viene del cielo. Es más importante que ofrezca la riqueza de la Palabra y de sus Sacramentos, de sus procesos de sanación y superación del mal y de sus itinerarios de espiritualidad, que la magnificencia de sus templos y la majestad de sus autoridades. Participar de una Iglesia en misión es encontrar el sentido de la vida, superar el tedio, encontrar razones para vivir, ser agentes activos de la Esperanza. Dentro de la Misión, el anuncio del Evangelio desafía nuestra creatividad. Necesita ser traducido dos veces: la primera traducción a las lenguas de los pueblos; la segunda traducción como Palabra de Dios para el ser humano globalizado, posmoderno. El Evangelio ha de ser traducido a nuevas lenguas. Las traduc- La Misión es fuente de lo nuevo. 14 ciones deficientes deben ser urgentemente corregidas. Las traducciones han de responder a la verdad de nuestra tradición cristiana y a la cultura que la recibe. Necesitamos urgentemente generaciones nuevas de exégetas indígenas, de intérpretes que –en la variedad de culturashagan emerger la Palabra de Dios en la belleza de nuevas lenguas y mundos simbólicos. El ingenio femenino y masculino puede ofrecer hoy a la traducción de la Biblia un nuevo esplendor, belleza y atractivo. Y se necesita una segunda traducción: el anuncio del Evangelio al ser humano que vive en un momento de globalización, de posmodernidad, que padece de pérdida de sentido religioso y trascendente, que se siente alienado por el trabajo, por todo un entramado de diversiones. El anuncio del Evangelio ha de ser insistente, sin tregua. Ha de ser creador e innovador. Lleva consigo la belleza siempre antigua y siempre nueva. Dentro de la Misión, el “servitium caritatis”, los ministerios de la caridad, requieren una nueva imaginación creadora. Hay en nuestro mundo muchas personas de todas las edades, que sufren las heridas de muerte de la injusticia, de la guerra, de la corrupción, de la violencia. La comunidad de Jesús se siente llamada a salir a todos los caminos para atender, acoger, hacerse hospitalidad samaritana. La misión de la caridad encuentra hoy formas nuevas de expresión dentro de la gran red de la globalización. Aquí es donde la misión evangelizadora y nuestra liturgia reencuentran su credibilidad ante la sociedad. www.amormeus.org LA PALABRA Hoy Conclusión La vida consagrada está viviendo un momento único en su historia: como Pedro, es llamada a caminar sobre las aguas. No puede seguir sentada, sin sentido, afectada por el aburrimiento en la barca. Jesús lllama a la vida consagrada a salir y caminar sobre las olas. La vida consagrada obedece y pone sus pies en el agua. Lo imposible se hace realidad. Pero, tras los primeros pasos, el viento arrecia. La vida consagrada siente que se va a hundir. Llora al Señor. El Señor le pide fe, confianza absoluta, esperanza. Ahí están las manos que la salvarán. La creatividad es un salto en el vacío: es la posibilidad de lo aparentemente imposible. Dar el salto al ámbito de la creatividad es la salvación para nosotros y para nuestras hermanas y hermanos. En el momento creativo el tiempo se vuelve fecundo, el “sentido de vida” regresa, el entusiasmo se acrecienta, entonces merece la pena vivir y morir. Notas: 1 Rosmay, Joel De – Servant-Schreiber, Jean-Louise – Closets, Francois, Una vida extra. La longevidad: un privilegio individual, una bomba colectiva, (Anagrama, Barcelona, 2006. 2 Cf. Lars Fr. H. Svendsen, Filosofía del tedio, Ensayo Tusquets, Barcelona 2006; cf. Peter Handke, Versuch ubre di Müdigkeit, Suhrkamp, Frankfurt am Main, 1989; Fernando Pessoa, Libro del desasosiego, Acantilado, Barcelona 2002; Pound, Ezra, The Cantos, Faber and Haber, Londres 1975. 3 Joseph Brodsky, Til kjedsomhetens pris (The Price of Boredom), in Hvordan lese en bok (How to Read a Book), Aventura, Oslo, 1997. 4 Cf. Mattew Fox, Creativity. Where the Divine and the Human Meet, New York 2004; Mihaly Csiksztmihalyi, Creativitiv dad. El fluir y la psychologia del descubrimiento y la invención, Paidos, 1998 El surgir desde lo profundo de la tierra Se alimenta con lluvias largamente esperadas, golpea contra el terreno endurecido. Florece implacable, sin freno, haciendo a un lado todo lo que se interponga en su camino. Llena de novedad y vida todo lo que se había marchitado durante una larga sequía. Sor Joan Moran, CCVI 15 LA PALABRA Hoy misioneros del Verbo Encarnado [ programa de voluntarios ] Semillas en tierra fértil Por María Teresa Mañón, Directora de Misioneros del Verbo Encarnado Siempre me ha gustado viajar; me entusiasma descubrir nuevos lugares, su gente, su cultura, en fin… Hoy sigo disfrutando todo esto, pero con el tiempo he descubierto algo maravilloso: viajar es una experiencia introspectiva…un viaje espiritual; poder ir al encuentro de Dios, descubrir su presencia majestuosa en aquel remoto lugar que pareciera “olvidado de Dios” o más bien olvidado de la humanidad. Viajar a Guatemala no fue una excepción, pero si fue excepcional. Guatemala es un país fascinante. Tan pronto se llega, se está frente a un paisaje que muestra una gama de contrastes, como si la naturaleza pretendiera advertir al viajero sobre lo que encontrará al adentrarse en sus caminos y entre su gente. Curvas pronunciadas dibujan sus imponentes montañas, valles y profundos abismos, dan lugar a amplios trazos horizontales y verticales. Polvo y lluvia se amasan en barro para que sus habitantes - indígenas de 23 etnias y lenguas diferentes- impriman huellas indelebles en sus caminos y corazones. El indígena guatemalteco es en si mismo un ser de contrastes: su apariencia proyecta fragilidad, pero en su interior hay una fortaleza asombrosa. A primera vista pareciera estar conforme y ser sumiso, pero en su actuar pone de manifiesto sus convicciones y su decisión de luchar sin tregua cuando haya que defender lo que cree y lo que ama. La pobreza económica golpea al visitante, pero 16 de igual forma impacta la riqueza interior de su gente. Nuestro destino: Pueblo Nuevo: Una pequeña población situada en el municipio del Ixcán, en el Departamento de El Quiché, el cual está conformado por 176 comunidades. Esta zona fue severamente afectada durante la Guerra Civil en los años 70’s y 80’s. Durante ese tiempo, muchos de sus habitantes tuvieron que huir y esconderse por años en las montañas y otros tantos se refugiaron en México. En Pueblo Nuevo, se encuentran 4 Hermanas ccvi, que desde su vocación misionera, optaron por situarse al lado de quienes tras haber sufrido desplazamiento y desarraigo continúan viviendo en la pobreza y la marginación. Como mujeres consagradas a la vida religiosa misionera, es evidente su sintonía con el despertar de la conciencia del pueblo guatemalteco. Ellas son parte del proceso, y a la vez acompañan y alientan los esfuerzos de los indígenas para que sean ellos(as) los que organicen la vida social y eclesial en sus comunidades. www.amormeus.org LA PALABRA Hoy La gente sabe que las Hermanas escuchan y comprenden, que los acompañan de cerca en sus alegrías y en sus penas, que apoyan sus iniciativas y esfuerzos por alcanzar una vida mejor. Ellas sienten que las Hermanas entienden su historia, sufrimiento y anhelos. Al sacerdote le cuentan sus pecados, pero a las Hermanas les cuentan su vida entera. Ellas los acompañan con compasión y ternura porque saben que esto es tan valioso como impulsar sus proyectos y actividades. Es el diario compartir lo que las lleva a redescubrir y cultivar junto con esta gente sufrida y creativa, una espiritualidad en la que Dios se encarna en su realidad. En medio del sufrimiento y de la marginación, es preciso situarse desde la dimensión contemplativa de la realidad. Es la fe la que nos lleva a descubrir dinamismos de vida y esperanza que a simple vista no se ven. Mi experiencia en Guatemala me recordó y ayudó a reafirmar que la vida misionera demanda una actitud contemplativa tanto como el compromiso solidario. Estar en misión no es hacer muchas cosas, sino acoger lo que ya hay del Reino y ayudar a que este avance, sabiendo que es Dios quien nos da la fortaleza para poder crecer. Si, ser misionero es estar en la realidad, es vivir nuestra condición humana sumergidos en el Dios del Reino. Aprendí que gracias a esta experiencia de contemplación pueden vencerse día con día los dualismos, aprendiendo a descubrir la voz y la huella de Dios en los rincones de la marginación. Saber mirar y contemplar la pobreza para ayudar a transformarla, para no caer en la tentación de mutilar al pobre centrándonos solamente en sus problemas y tragedias, en sus carencias y debilidades… en su llanto, olvidándonos de sus posibilidades, su capacidad creativa, su fortaleza y su alegría. Es la mirada contemplativa la que nos revela desde Dios el sentido que tiene cada pequeña cosa de la vida y el sentido mismo de la historia.La realidad del indígena guatemalteco pesa y es dura, pero también está llena de sabiduría. En medio de los fracasos y tragedias hay ánimo y esperanza, es por eso que encuentran motivos para celebrar la fe y la vida. Su espiritualidad no es un ritual ni una oración vacía, es una inspiración que los transforma desde dentro y los impulsa a dar pasos nuevos. 17 LA PALABRA Hoy Semillas...Continuación de la página 11 Es su espiritualidad la que les permite recuperar su dignidad como personas humanas y es también la fuerza que los hace crecer individualmente y como comunidad para ir al encuentro del proyecto del Dios de la vida. Poder ser testigo de la misión de las Hermanas en Ixcán, Guatemala, ha sido para mi una experiencia de gracia y esperanza. Comprendí que su presencia es una presencia reconciliadora y sanadora enraizada en la fe. Están ahí porque han hecho un compromiso serio con el Plan de Dios en la lucha por la justicia y la paz, en la construcción de espacios de humanización y dignificación de los indígenas guatemaltecos. Con gratitud y admiración para las Hermanas: Roselia, Ceci, Rita y Angie y para los Misioneros del Verbo Encarnado: David, Rachel y Laura. Sor Ceci Estrada (izquierda) comparte un momento de descanso con una mujer en Pueblo Nuevo, Ixcán en Guatemala. 18 Una pareja enciende la vela de unión durante su boda en Ixcán, Guatemala. Encender la vela significa la comunión con Dios. Ministerio en las Llanuras del Sur Lubbock Celebra su 25o Jubileo Con la construcción de un hospital en San Antonio, las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarando iniciaron ahí su ministerio en 1869. Su misión incluye todas las áreas del trabajo en hospitales, la enseñanza y el ministerio en las parroquias. Fueron las primeras religiosas que trabajaron en la zona conocida como el “Panhandle” de Texas. Cuando el Obispo solicitó su ayuda, estas religiosas fueron a la Diócesis de Amarillo y establecieron la Academia de Saint Mary en Clarendon, Texas, en 1899. Después abrieron dos conventos y construyeron el Hospital Saint Anthony (el primer hospital de la diócesis) y la Escuela Saint Mary (la primera escuela católica de la diócesis). En 1983, las Hermanas llegaron a Lubbock para atender la Escuela Saint Elizabeth en Lubbock y la Escuela Católica Saint Michael en Levelland, Texas. Sor Evelyn Lambert dirigió el programa de Ministerio Pastoral para Adultos de 1983 a 1988 y Sor Mildred Warminski se hizo cargo de la Escuela de Religión de la Diócesis de Lubbock de 1983 a 2001. Sor Feliciana Mejia trabajó con el Padre David Cruz y dirigió un Proceso de Renovación de tres años en la Diócesis de Lubbock. Más tarde, Sor Feliciana dejó la Diócesis de Lubbock al ser elegida como miembro del equipo de liderazgo de la Provincia de Estados Unidos. Su diligente trabajo llegó a toda la zona occidental de Texas. Las últimas Hermanas del Verbo Encarnado que estuvieron en la Diócesis de Lubbock, salieron en mayo de 2001. Recordamos con gratitude a las siguientes Hermanas que ejercieron su ministerio en la Diócesis de Lubbock en años recientes: Sor Margaret Gerken, Sor Marianne Kramer, Sor Evelyn Lambert, Sor Feliciana Mejia, Sor Guadalupe Rodríguez y Sor Mildred Warminski. Nota del Editor: Se publica con permiso de South Plains Catholic, edición de abril de 2008. www.amormeus.org LA PALABRA Hoy En las Noticias La PRSA hace honores a la Congregación En los Premios 2008 PRSA Del Oro El banquete de reconocimiento de PRSA Del Oro se celebró el día 1ro de Mayo del 2008, en San Antonio, Texas. De derecha a izquierda: Sor Dorothy Batto, Sor Walter Maher, Randy Escamilla, Sor Helena Monahan, Sor Lourdes Urrutia y Sor Feliciana Mejia. Celebración para las Mujeres en Juárez El Centro Tonantzin para mujeres en Juárez, celebró el Día Internacional de la Mujer el día 8 de marzo con festividades. The Public Relations Society of American (La Sociedad de Relaciones Publicas de América) ha honrado a Randy Escamilla, Director de Relaciones Públicas de la Congregación con el premio Del Oro Horizon Award. Esta distinción es presentada por PRSA al profesionista de Relaciones Públicas con menos de cinco años de experiencia, el cual es visto como una ‘estrella incipiente’ por sus colegas. La PRSA tambien honró a la Congregación con el PRSA Del Oro Award al Mérito en la categoria de eventos especiales, por el Servicio de Oración por los Niños que se llevó a cabo en Diciembre del 2007. Este evento fué despues de múltiples asesinatos de niños por sus padres en San Antonio. También se reunieron para compartir sus logros y dificultades en un esfuerzo por concentrarse en su fuerza interior. Ha sido muy estimulante para las mujeres, el poder revisar aquello que han aprendido y los cambios positivos que han hecho en su vida. También hubo un festival muy divetido para las mujeres con sus familias en el centro comunitation de la Colonia Plutarco E. Calles. 19 La Palabra hoy Consejo General de las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado, 2002-2008 El Consejo General de la Congregación de las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado ha tomado con seriedad las Actas del Capítulo del 2002, y ha tratado de implementar sus directivas al invitarnos a vivir la Misión de la Congregación. A continuación se mencionan los aspectos mas sobresalientes y logros: • El Proceso Estrategico de Planeación, el cual incorpora a toda la Congregación a asumir responsabilidad personal de la vida de la Congregación y de la Misión. • La formación de cinco comisiones: Comisión de Misión y Ministerios Comisión de Formación Comisión de Justicia y Paz Comisión de Stewardship Comisión de Gobierno • La formación del Comité de Planeación del Capítulo: “Buscando Juntas; Encontrando y Revelando la Palabra en el Mundo de Hoy.” • El Capítulo General de 2008 • Las Elecciones del Capítulo General del 2008 • La formación de un Consejo Internacional de Comunicaciones. “La Comunicación es esencial para ayudarnos a mantener continuamente a todos los miembros de la Congregacion en diálogo constante entre ellas”. • El desarrollo del ‘network’ de la Congregación • Las Experiencias Internacionales de Formación Inicial • El desarrollo de nuestra nueva pagina de Internet. • Sponsorship/El desarrollo de Miembros Corporativos • Las Series: Espíritu y Vida • La renovación de la Capilla del Verbo Encarnado • La capacidad de tener conferencias de video, globalmente • El uso del Internet durante el Capítulo • La creación de Headwaters Coalition • La respuesta de la Congregación hacia crisis internacionales: por ejemplo, el terremoto en Perú, el Huracán Katrina, el Tsunami en Indonesia. 20 www.amormeus.org la palabra hoy hermanas de la caridad del verbo encarnado Con agradecimiento reconocemos el ministerio de nuestras Hermanas, quienes sirvieron en el Consejo General y los Equipos Provinciales y Regionales. Consejo General 2002-2008, de izquierda a derecha: Sor Maria de Lourdes Urrutia, Sor Feliciana Mejia, Sor Helena Monahan y Sor Walter Maher. 21