Un documental sigue los pasos del rodaje en México del filme de
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Un documental sigue los pasos del rodaje en México del filme de
Heraldo de Aragón l Sábado 31 de enero de 2015 CULTURA Y OCIO l 45 Un documental sigue los pasos del rodaje en México del filme de Buñuel ‘Nazarín’ La película, dirigida por el calandino Javier Espada, se estrenará en la sección oficial del Festival Internacional de Cine de Guadalajara, donde también optará al Premio Mezcal ZARAGOZA. «Yo siento que ‘Na- zarín’ es una película que realmente está ocurriendo en España. Yo siempre sentí eso, que Buñuel estaba buscando la España perdida». Lo dice el escritor y periodista mexicano José de la Colina en el tráiler del documental ‘Tras Nazarín’, dirigido por el calandino Javier Espada y que competirá en la sección oficial del Festival Internacional de Cine en Guadalajara, que se celebra del 6 al 15 de marzo. En este su tercer filme, el también director del Centro Buñuel Calanda recorre los pasos de su paisano por el estado mexicano de Morelos, donde grabó la película con la que obtuvo el Gran Premio del Jurado de Cannes en 1959. Un documental que subtitula ‘El eco de una tierra en otra tierra’ poniendo de manifesto, como asegura De la Colina (quien publicó en colaboración con Tomás Pérez Turrent en 1984 el libro de entrevistas ‘Buñuel por Buñuel’), que Buñuel encontró al otro lado del Atlántico una evocación de los mismos paisajes que había conocido durante su infancia. En ellos situó los conflictos interiores que vive el protagonista, el padre Nazario, interpretado por Paco Rabal, protagonizando las quijotescas andanzas del personaje creado por Benito Pérez Galdós. Después de dos años de trabajo, ‘Tras Nazarín’ vivirá su estreno mundial en la trigésima edición del certamen de Guadalajara, aunque aún no hay una fecha concreta. Competirá en la sección de Documental Iberoamericano y optará el Premio Mezcal que se otorga a la mejor producción mexicana de cualquier género de las proyectadas en las distintas secciones. Es una de las 21 películas que se han seleccionado para este galardón entre más de 80 largometrajes. «Es el mejor sitio para presentar una historia que se ha rodado mayoritariamente en México, con gran apoyo de entidades de allí. Además, se trata del certamen cinematográfico más importante de ese país y uno de los más destacados de América Latina», comenta Javier Espada. «También nos indica la importancia que se le da a Buñuel en México, donde es más conocido que en España», añade. La dotación económica del Premio Mezcal tampoco es desdeñable, unos 30.000 euros. Las fotos fijas de Álvarez Bravo El germen de este proyecto fue el estudio de las fotografías realizadas por el propio Luis Buñuel para las localizaciones de los exteriores de sus películas que se conservan de su archivo personal en la Filmoteca Española. Del millar de imágenes tomadas con su cámara Leica, un centenar correspondían a pueblos de Morelos. Aunque en principio Espada pensó en realizar una exposición, la idea del documental empezó a tomar forma cuando dio con las fotos fijas y de rodaje que hizo el fotógrafo mexi- Retrospectiva en 2008 La 58 de la Berlinale rindió en 2008 un homenaje al cineasta aragonés, coincidiendo con el 25 aniversario de su muerte, con una retrospectiva de toda su obra, no solo como realizador, sino también sus trabajos como ayudante de dirección, guionista, productor, director de grandes divas y explorador de un nuevo lenguaje cinematográfico. En este marco se estrenó el documental dirigido por Javier Espada y Gaizka Urresti ‘El último guión. Buñuel en la memoria’. Una veintena de entrevistas El reencuentro con ‘Nazarín’ discure a través través de estas fotografías, alternadas con los paisajes rurales y urbanos actuales de los escenarios y una veintena de entrevistas con algunos de sus protagonistas y con otros personajes que conocieron a Buñuel. También se incluyen retazos de la entrevista que le realizaron en los 70 José de la Colina y Tomás Pérez Turrent. La viuda de este último conservaba el casete de la conversación en la que hablaba sobre el largometraje y la Fonoteca Nacional de México se encargó de digitalizarlo y restaurarlo. «Entonces veo la calle aquella y de pronto, eso me ocurre mucho a mí, yo soy poco inteligente pero soy bastante imaginativo... tengo una imagen». Lo revela de sí mismo Buñuel cuando habla de esa escena en la que una pequeña arrastra una sábana blanca por una desértica calle de Tlayacapan. Entre los entrevistados aparecen los actores Ignacio López Tarco, que interpreta al buen ladrón; Pilar Pellicer, la moribunda, y Rosenda Monteros, la prostituta. Las conversaciones con estos intrépetes fue lo último que se filmó en agosto del año pasado. También hablan, entre otros, Silvia Pinal, Arturo Ripstein, Carlos Reygadas, José María Prado, Juan Luis Buñuel, Jean Claude Carrière y Carlos Saura. Se trata de una coproducción entre España y México. Han participado cineastas de aquel país como Roberto Fiesco y Hugo Espinosa, así como Carlos Reygadas (Premio a la Mejor Dirección en Cannes 2012 por ‘Post Tenebras Lux’) y en cuyo estudio se ha hecho la postproducción. El equipo español ha contado con los cineastas Emilio Barrachina y Pedro Piñeiro, el guionista oscense J. Alberto Andrés Lacasta y el fotógrafo Jorge Fuembuena. Entre las colaboraciones están también las del compositor argentino Sergio González Carducci, que ha preparado la música original, y el cantautor Luis Eduardo Aute, cuya canción ‘Allí’ acompaña los títulos de crédito. Los tambores de Calanda volverán a sonar en México, como lo hacían en ese final de ‘Nazarín’ en que el padre Nazario avanza hacia su destino entre sus redobles. S. C. SOLEDAD CAMPO Foto del rodaje de ‘Nazarín’ de Manuel Álvarez Bravo en la que Luis Buñuel habla con un actor. Una exposición de carteles de sus obras le recordará en la Berlinale El director del Centro Buñuel de Calanda muestra su colección particular en la Embajada de España en Berlín su propietario. Es la primera vez que son objeto de una exposición. Estas obras considera que reflejan la seducción que los filmes de Luis Buñuel siempre han provocado en los artistas anónimos que los han diseñado y a los que ha servido de inspiración. «Llama la atención cómo un mismo título puede ser interpretado de formas tan diferentes y sorprende la lectura que se hace de sus filmes». ZARAGOZA. Luis Buñuel volve- rá a estar este año presente en la 65 edición de la Berlinale, el Festival Internacional de Cine de Berlín que se celebrará del 5 al 15 de febrero. En esta ocasión será a través de una exposición de carteles de sus películas que han sido impresos en distintos países y que se podrán ver desde el 6 de febrero en la Embajada de España en Alemania. La muestra se organiza con motivo de la recepción que se realiza durante la celebración del certamen cinematográfica. Las piezas forman parte de la colección personal de Javier Espada, director del Centro Buñuel de Calanda desde su creación en el año 2000. Se trata de 35 carteles y 10 ‘lobby card’ (pequeños pósteres publicitarios que se ponían en los pasillos de los cines Cartel en ruso de ‘El discreto encanto de la burguesía’. con fotogramas de los largometrajes y los créditos de las mismas). Abarcan una veintena de filmes y proceden de Alemania, Argentina, Bélgica, España, EE. UU., Italia, México y Rusia. «Son carteles que he aprovechado a comprar en los diferentes países en los que he tenido la oportunidad de estar», dice cano Manuel Álvarez Bravo, que custodia la Fundación Televisa. «Televisa tiene los derechos de ‘Nazarín’ y, cuando fui a hablar con ellos del proyecto, localizaron unos 900 negativos, en formato 6x6, de Álvarez Bravo, que son bastante desconocidos», explica Espada. «Son imágenes que reflejan el ambiente de trabajo, retratos muy expresivos, momentos del rodaje y también pausas». Álvarez Bravo estuvo también al lado del cineasta ruso Sergéi Eisenstein y de John Ford. Con estas instantáneas comienza el viaje por la memoria del rodaje de Nazarín. El mismo Espada recorrió cada uno de los lugares en los que se filmó, entre ellos Oaxtepec, Tepoztlán, Atlatlaucan y Tetelcingo con una Leica similar a la del genial cineasta. «En Morelos me sentí como en un Bajo Aragón que yo no he conocido pero que he visto en fotos, casas pobres de adobe, calles polvorientas, las iglesias humildes presidiendo la plaza, algo que también debió percibir Buñuel», recuerda Espada.