Comunidad Apostólica Hosanna
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Comunidad Apostólica Hosanna Redes de Crecimiento Lección del 28 de diciembre al 3 de Enero de 2015 Apóstol Edwin Álvarez LAS PROMESAS PARA EL AÑO DEL DIOS DE LAS GENERACIONES “Entonces Josué respondió a la casa de José, a Efraín y a Manasés, diciendo: Tú eres gran pueblo, y tienes grande poder; no tendrás una sola parte, sino que aquel monte será tuyo.” (Josue 17:17) 1.1 1 Nos preparamos para el año del “Dios de las Generaciones”. Teniendo en cuenta que “…no hará nada Jehová el señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas” (Amos 3:7), aceptamos, por esta proclamación, que Dios hará para sus hijos que se manifieste su respaldo. “Creed en Jehová vuestro Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas y seréis prosperados”. (11° Crónicas 20:20) La Escritura a la que el Espíritu Santo enfoca nuestra mirada para la semana que nos introduce al “año del Dios de las Generaciones” nos enseña el poder de las cualidades necesarias para conquistar el futuro con todas las promesas de Dios. Vayamos a Josué 17:14-18 “Y los hijos de José hablaron a Josué, diciendo: ¿Por qué nos has dado por heredad una sola suerte y una sola parte, siendo nosotros un pueblo tan grande, y que Jehová nos ha bendecido hasta ahora? Y Josué les respondió: Si sois pueblo tan grande, subid al bosque, y haceos desmontes allí en la tierra de los ferezeos y de los refaítas, ya que el monte de Efraín es estrecho para vosotros. Y los hijos de José dijeron: No nos bastará a nosotros este monte; y todos los cananeos que habitan la tierra de la llanura, tienen carros herrados; los que están en el valle de Jezreel. Entonces respondió a la casa de José, a Efraín y a Manases diciendo: Tú eres gran pueblo, y tienes grande poder; no tendrás una sola parte, sino que aquel monte será tuyo; pues aunque es bosque, tú lo desmontarás y lo poseerás hasta sus límites más lejanos; porque tú arrojarás al cananeo, aunque tenga carros herrados, y aunque sea fuerte”. 1.2 2 La parte final del Capítulo 17 del Libro de Josué describe la petición que los hijos de José, Efraín y Manases le hicieron al sucesor de Moisés, con respecto a la repartición de la tierra de Canaan. Hay en la solicitud de los hijos de José y en la respuesta de Josué una edificante y preciosa lección para todo cristiano, que es además de particular aplicación a esta iglesia, sobre los logros y éxitos que pretendemos alcanzar. Consideremos las enseñanzas del texto bíblico para poseer las bendiciones prometidas por Dios. AMBICIÓN 2.1 3 Para prosperar en la vida cristiana, así como en cualquier actividad humana, se precisa de ambición. Con esta palabra no me refiero al pecado de anhelar la vanidad innecesaria, la riqueza deshonesta, el dinero mal habido ni el placer ilegítimo. Hay una ambición sana, espiritual, santa. Dios coloca en el hombre el deseo de prosperar, de crecer, de superarse. Los hombres de Dios, a quienes la Escritura retrata, son presentados en un marco de ambición espiritual. 2.2 4 Leamos la petición de los hijos de José: “Y los hijos de José hablaron a Josué diciendo: ¿Por qué nos has dado por heredad una sola suerte y una sola parte, siendo nosotros un pueblo grande, y que Jehová nos ha bendecido hasta ahora? (Josué 17:14). Los hijos de José pensaban que una heredad para ellos no era suficiente, ya que eran un pueblo grande a quienes Jehová había bendecido. ¡Ellos querían más! Todo comenzó allí: ¡A un deseo por algo más! Dios los había bendecido, estaban agradecidos, pero querían más. Y Dios siempre tiene más para sus hijos: 2.3 5 Los hijos de José eran las tribus de Efraín y Manases. Ambas tribus ya habían recibido sus tierras al otro lado del Jordán. Recordemos que Dios sacó al pueblo de Israel de Egipto y lo guió por el desierto por mano de Moisés, pero que fue Josué el comisionado para poseer y distribuir la tierra. Efraín y Manasés se rebelaron contra el conformismo, enemigo fatal del desarrollo y la prosperidad. Cuando te conformas con lo que tienes o el nivel a dónde has llegado, renuncias a la superación y asesinas a tu ambición. 2.4 6 La ambición santa puede ser el producto de un sencillo pero ardiente deseo, de una visión de Dios o de una sentida necesidad. En el caso de Efraín y Manasés pareciera que el deseo de más tierra nació de la previsión hacía el futuro. Cualquiera sea la causa que motive tu ambición santa, lo que importa es la meta u objetivo que Dios coloca delante de ti. No mates tus ambiciones. Cree en Dios por grandes cosas, trabaja por ellas y recíbelas. No te conformes con las bendiciones recibidas. Dios esperas que tú le pidas más. AMÉN. AUTO IMAGEN “Somos un pueblo grande y Jehová nos ha bendecido” 3.1 7 Para alcanzar el éxito, así como para prosperar en cualquier cosa que emprendamos, es muy importante el concepto que tenemos de nosotros mismos. Nadie puede ir más allá de lo que piense de si mismo. Josué les ofreció a los hijos de José el Monte y la llanura. El problema es que el Monte estaba ocupado por un bosque, y la llanura era habitada por los cananeos, que tenían carros herrados, esto es, eran guerreros preparados y fieros. Los hijos de José le presentaron ambos obstáculos a Josué. Entonces Josué les respondió. “Tú eres gran pueblo, y tienes gran poder”. Josué les recordó lo que ellos mismos le habían dicho al respecto al presentar su petición. “Somos un pueblo grande y Jehová nos ha bendecido” 3.2 8 La respuesta de Josué es una combinación de bondad, firmeza, fe y valor. Josué desafió la capacidad de Efraín y Manases de pelear por su aspiración. Josué apeló al concepto que los hijos de José expresaron de si mismos: “Somos un pueblo grande y Dios nos ha bendecido” 3.3 9 El principio de la autoimagen es fundamental para lograr lo imposible. Pensemos en el joven David enfrentándose él sólo al gigante que atemorizaba a todo el ejército de Israel. David tenía la imagen de sí mismo que le infundía su revelación de Dios. David no era lo que sus hermanos o Saúl decían de él. David era lo Dios dijo que David era. “Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mi con espada y lanza y jabalina; mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has provocado. Jehová te entregará hoy en mi mano, y yo te venceré, y te cortaré la cabeza, y daré hoy los cuerpos de los filisteos a las aves del cielo a las bestias de la tierra; y toda la tierra sabrá que hay Dios en Israel. Y sabrá toda esta congregación que Jehová no salva con espada y con lanza, porque de Jehová es la batalla, y él os entregará en nuestras manos”. (1° Samuel 17:45-47) 3.4 10 Pablo fue otro campeón de la autoimagen. “Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo”. (1ª. Corintios 15:10) Pablo pudo llenara el imperio romano con el Evangelio e Jesucristo porque estaba convencido de su llamado, de su unción, del respaldo de Dios y del éxito de su misión. Muchos sueños fracasan por la devaluación de la autoimagen de los encargados de realizarlos. Satanás es experto en destruir la personalidad interior. Si el diablo logra hacerte creer que no eres lo que Dios dice que eres, jamás harás lo que Dios dice que puedes hacer. En este año de lo imposible debes agarrarte de lo que la Palabra de Dios dice de ti. “Tomad el escudo de la fe y destruir todos los dardos de fuego del maligno”(Efesios 6:16) AMADOS: ¿Qué dice Dios de ti? ¿No has leído que: “Mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo”. (1ª Juan 4:4) “En todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquél que nos amó”. (Ro. 8:37) “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. (Filipenses 4:13) “Al que cree todo le es posible”. (Marcos 9:23) “Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? “ (Romanos 8:31) Te recomiendo que leas, repitas, menciones y confieses versículos bíblicos que levanten tu fe, y te coloquen en el lugar que Jesucristo ha puesto y te den una autoimagen correcta. “¡Jehová Dios de vuestros padres os haga mil veces más de lo que ahora sois, y os bendiga, como os ha prometido! (Deuteronomio 1:11) FE 4.1 13 “Aquél monte será tuyo” fue la promesa de Josué. “Sin fe es imposible agradar Dios”. (Hebreos 11:6) Los hijos de José necesitaban fe para poseer la tierra que Josué les está entregando. Josué se las entregaba, pero Efraín y Manases deberían conquistarla. Allí entraba la fe en operación. La fe opera bajo la aceptación y posesión espiritual de las promesas divinas; o sea, la Palabra de Dios. Después viene la conquista material de lo prometido. AMADO: Usa la fe que ya Dios te dio. Cree a Su Palabra. AMEN. 4.2 14 La fe camina jmuy lejos de a la jactancia. La fe se aparta del corazón caprichoso y vacío. La fe no toma la misericordia de Dios como excusa para la negligencia. Las palabras de Josué llevaban fuego para encender la fe del corazón. “Aquél monte será tuyo”. Efraín y Manasés tenían que asimilar antes de poseer la tierra que solicitaban que “… sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan”. (Hebreos 11:6) 4.3 15 “La fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios”. (Romanos 10:17). La fuente de la de es la palabra de Dios. En este caso, la fe vino por la boca del ungido de Jehová, es decir, a través de Josué. La ambición sin fe, sólo producirá frustración. La auto imagen depende de la fe en el sentido de que la fe es la aceptación de lo que Dios dice. Una baja autoestima es reflejo de una fe lastimada. 4.4 16 Efraín y Manases no recibieron la tierra porque Josue organizara la conquista el Monte con la ayuda de las diez tribus restantes. Josué se limitó a darles a Efraín y Manasés una palabra de fe. El centurión romano que clamaba ante Jesús por la salud de su criado dijo: “Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; solamente di la palabra, y mi criado sanará… Al oírlo Jesús, se maravilló, y dijo a los que le seguían: De cierto os digo que ni aun en Israel he hallado tanta fe… Entonces Jesús dijo al centurión: Ve, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue sanado en aquella misma hora”. (Mateo 8,10 13) La fe siempre logra lo que la ambición se propone. ESFUERZO: 5.1 17 La Escritura que nos sirve de base a nuestra meditación concluye con la exhortación de Josué a Efraín y a Manases, donde encontramos tres "aunques ". A cada uno de esos "aunque" Josué presentó un argumento invencible. Examinemos brevemente el texto: “Sino que aquel monte será tuyo; pues aunque es bosque, tú lo desmontarás y lo poseerás hasta sus límites más lejanos; porque tú arrojarás al cananeo, aunque tenga carros herrados, y aunque sea fuerte”. (Josué 17:18) Efraín y Manases no poseerían la tierra prometida solo con pedirla. Tenían que trabajar en el desmonte y batallar con los cananeos hasta expulsarlos de la tierra. El hecho de que Dios nos prometa sus bendiciones no nos convierte en perezosos. ¡Haloo! Muy por el contrario, el deseo de prosperar, progresar y superarnos, nos anima y nos da valor. El éxito verdadero solo es el resultado de una vida de esfuerzo. Dios había bendecido a Efraín y a Manases, pero si ellos querían más, deberían trabajar, guerrear y esforzarse. 5.2 18 Caleb es un buen ejemplo de la necesidad de esforzarse por conquistar la tierra. “Y los hijos de Judá vinieron a Josué en Gilgal; y Caleb, hijo de Jefone cenezeo, le dijo: Tú sabes lo que Jehová dijo a Moisés, varón de Dios, en Cades- barnea, tocante a mí y a ti… Todavía estoy tan fuerte como el día que Moisés me envió; cual era mi fuerza entonces, tal es ahora mi fuerza para la guerra, y para salir y para entrar. Dame, pues, ahora este monte, del cual habló Jehová aquel día; porque tú oíste en aquel día que los anaceos están allí, y que hay ciudades grandes y fortificadas. Quizá Jehová estará conmigo, y los echaré, como Jehová ha dicho”. (Josué 14:6,11,12) A los ochenta y cinco años Caleb estaba dispuesto a batallar contra los cananeos, aunque sus ciudades fueran grandes y edificadas, para poseer a Hebrón, tal como Moisés se lo había prometido. Pablo animó a Timoteo a esforzarse. “Tú, pues, hijo mío, esfuérzate en la gracia que es en Cristo Jesús”. (2ª. Timoteo 2:1) Jesús dijo: “El reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan” (Mateo 11:12) 5.3 19 El primer aunque de Efraín y Manases era el bosque. Con esfuerzo, ambos lo convertirían en tierras de labranza y población. El segundoaunque era el poder tecnológico superior de los cananeos. Los israelitas no tenían carros de hierro, ni instrumentos de guerra que si poseían los cananeos y que les daba gran ventaja. Con esfuerzo, los hijos de José deberían ingeniarse para pelear en desventaja contra el enemigo y vencerlo. El tercer aunque era la superioridad militar de los cananeos, “son fuertes”. Con esfuerzo, Efraín y Manases, peleando con valor y astucia los derrotarían. Josué no reunió a las otras tribus de Israel para que pelearan las batallas de los hijos de José. Esto nos enseña que cada uno de nosotros debe pelear su propia batalla. Con Jesús no hay aunque que nos detenga. El aunque es lo que convierte nuestro sueño en imposible. Con la ayuda de Dios será posible. Derrota a todos tus aunques. Amén Lamentablemente, es aquí donde muchos fallan. ¡Todo lo quieren suave!!! Los que así piensan no entienden que Dios nos ha llamado a esforzarnos en la gracia que es en Cristo Jesús. AMADO: ¿Anhelas Más de Dios? ¡Esfuérzate! “Esfuérzate, y esforcémonos por nuestro pueblo, y por las ciudades de nuestro Dios; y haga Jehová lo que bien le parezca”. (1 Crónica 19:13) ¡ESFUERZATE Y SE VALIENTE! 5.4 20 FAMILIA HOSANNA: Dios nos ha bendecido mucho, ¡Gloria a Su Nombre! Pero esto no es todo. ¡Hay mucho más, muchísimo más! No hemos visto nada todavía. En el 2015 sellaremos las nuevas generaciones con La Palabra, el Espíritu Santo, con la santidad y con la visión de alcanzara al mundo para Jesucristo. Reitero: Ambición, auto imagen, fe y esfuerzo. ¡AQUEL MONTE SERÁ TUYO!