De la crisis a la esclavitud obrera. El feudalismo

Transcripción

De la crisis a la esclavitud obrera. El feudalismo
De la crisis a la esclavitud obrera. El
feudalismo económico
RAMIRO PINTO
Nos vemos abocados a una crisis que está beneficiando
a unos pocos y que en lugar de buscarse una salida lo que se quiere es ejercer
el poder de una forma cada vez más opresora. Quienes se enriquecen con la
crisis usan ésta para esclavizar a los obreros con la complicidad de los
grandes sindicatos y funcionarios de partido y cargos institucionales cuya
riqueza se basa en tener gente a su servicio.
Recientemente en una entrevista (TVE 1, 24- XI – 2010) el señor Almunia,
desde su postura socialista, plantea que hay que distribuir los sacrificios para
salir de la crisis, pero nada dice de distribuir la riqueza, incluso durante la
crisis, para salir de ella, en principio, los mas desfavorecidos.
El ministro de trabajo, don Valerio Gómez, llega a plantear que como se vive
más hay que retrasar la edad de jubilación, como si vivir fuera para trabajar…
para ellos, para los ricos, porque son quienes se benefician del abaratamiento
del empleo.
Y para rematar las declaraciones en octubre
de 2010 de la ministra de economía, doña Elena Salgado, que planteó que se
mantendrá la prórroga del subsidio del paro “si hubiera dinero dinero”. O sea
hay dinero para reflotar los bancos y para reflotar a los ciudadanos sin medios
de vida no lo hay. Finalmente se ha suprimido.
Es curioso observar cómo ponen un empeño enorme en cuidar la salud de los
ciudadanos con una ley que evita que se fume en los espacios públicos. Pero
ésta es una ley que no contempla espacios de elección para fumar y lo reduce
al espacio privado, por ejemplo en una casa donde conviven niños adonde la
ley lleva el humo. Pero no es este el tema, sino ver que se trata de una ley
para controlar a la población e irla doblegando al ejercicio del Poder,
hacerla sumisa, con un discurso de salud, de progreso. Pero resulta que si el
tabaco mata, más lo hace el paro y no cobrar ninguna prestación.
Los embargos y desahucios ante situaciones de desempleo ocasionan
enfermedades mentales, anula a la persona, genera angustia colectiva en una
familia, dolor, mucho dolor y muerte. De esto no siquiera se informa.
Suicidios en aumento, locura y desesperación que destruye la existencia de las
personas. Y la respuesta es eliminar la prórroga, en lugar de darla a todo aquel
que se quede sin prestaciones. Pero usan la ley contra el tabaco para hacer
ver que se preocupan de los ciudadanos y ciudadanas. Habrá que recordar la
novela “Viaje al final de la noche”, en donde su autor, Louis Ferdinand
Cèline escribe: “jodidos de la vida, cuando los grandes de este mundo
empiezan a amaros es porque van a convertiros en carne de cañón”.
Pero ¿por qué sucede esto?. En realidad es una estrategia de los dueños del
dinero que saben que a medida que avanza la democracia aumentan los
derechos de las personas. Aunque no merma la riqueza de los poderosos, sí
temen que disminuya su poder, por eso ejercen una presión para mantener el
control sobre la ciudadanía y dar un sentido más amplio a su riqueza, algo que
tiene más que ver más con la psicología que con la economía, lo cual es hacia
donde ellos llevan el tema: disponer de la vida de los demás, para su beneficio
personal. La estrategia consiste en comprar a los políticos que toman las
decisiones, contrarias a sus programas que usan como cebo.
La explotación no es suficiente,
pues el mercado laboral se ha saturado. Entonces han provocado una crisis por
su ambición desmedida de crear riqueza, dinero fuera del marco de la
economía productiva.
Se han enriquecido usando estrategias financieras con dinero que no existe, y
cuando han logrado tener el Estado a su servicio, pues han invertido en sus
gobernantes con tanto dinero, que éstos cogen los bienes públicos para
ponerlos a su disposición, “los privatizan” o ha en una reforma laboral que
consiste en quitar a los trabajadores su poder adquisitivo o se quedan sin sus
salarios o se los bajan. Llaman crisis a lo que es un atraco.
Ser los dueños del dinero les da el poder en esta sociedad y lo ejercen dando
un paso más: hacer que los obreros trabajen para ellos sin cobrar un salario
por su tiempo y esfuerzo. Pero lo hacen de manera que se presentan como
benefactores de la sociedad.
Ya ha comenzado y se va desarrollando como
nueva estrategia para salir de la crisis. Empezaron por dar dinero a los
sindicatos para hacer cursos de formación, para trabajadores formados de
sobra o que tienen otras inquietudes, a los que tenían que asistir forzosamente,
pero en cambio les quitaban la prestación que tuviesen.
Poco a poco convirtieron a los sindicatos en empresas de servicios, que
aceptaron que en esos cursos se trabajase durante muchas horas sin cobrar
nada por el trabajo realizado.Es decir sí hay dinero para cursos inútiles, pero
no para los trabajadores en paro.
Se está fraguando de esta manera un feudalismo económico en la que una
parte de la población será sometida a otra. Tal es el modelo chino de
capitalismo que se trata de exportar como nuevo imperio emergente de la
economía mundial, al que se sigue para ser “competitivos”. Lo cual pone en
peligro la misma esencia de la democracia.
Todo este proceso se hace en nombre del libre mercado, de la responsabilidad
de los gobernantes, de la necesidad de tomar medidas duras pero
ineludibles… y habrá que recordar a Arvirago en la obra de Sakespeare,
“Cimbelina”: “como pájaro encerrado en la jaula, cantamos nuestra
esclavitud con el acento de la libertad“.
La Junta de Castilla y León y varias autonomías
más preparan leyes que van en la línea del presidente conservador del
gobierno británico, David Cameron, está imponiendo en su país, dar un
subsidio de desempleo exigiendo que realicen trabajos que no puedan rechazar
o les quitan la única fuente de supervivencia. Elaboran un discurso mediático
de decir que los parados son unos vagos y crean una tensión social cuyo
objetivo es tener a los trabajadores al su servicio.
Establecen estas medidas para cuidar sin coste alguno y sin derechos
laborales, a sus niños y niñas, a sus ancianos, para ellos, los ricos y políticos
profesionales que tienen per se un gran poder adquisitivo, poder gastar en
fiestas y viajes y disponer de tiempo para ello. En la crisis los funcionarios,
los asalariados fijos no tienen problemas, incluso aunque les bajen el sueldo
suelen tener dos salarios familiares (87% de los funcionarias y funcionarios
están casado casados con una pareja de una situación laboral similar). Esta
población se hace cómplice de esta política, así como empresarios que quieren
hacer valer su posición acomodada. Una masa social da su apoyo electoral a
este plan porque se ve beneficiada al disponer de obra de mano más barata
para ellos.
La salida de la crisis tal y cómo se enfoca es lograr la esclavitud de una parte
de la población. Cuando podría suceder lo contrario y es que se pusiera a
disposición de las personas una cantidad de dinero para sobrevivir, una Renta
Básica, a partir de la cual funcione la economía de mercado, según el criterio
de aplicar un socialismo posible con un liberalismo necesario, con el fin de
establecer una economía de mercado libre basada en la libertad individual,
pero lo que se busca no tiene el más mínimo fundamento económico, sino de
poder, de control.
Si el dinero se diera a las personas
circularía en la rueda del consumo e iría finalmente a la banca en un circuito
económico en el que se activa el consumo básico. Pero éste se elimina, se
ofrece caridad en lugar de derechos y de esta manera el dinero se da a la
banca, para esclavizar a quienes no tienen medios de vida porque no hay
trabajo ni posibilidad de conseguirlo. Se sabe que puede haber crecimiento
económico sin crecer el empleo, sino al revés.
La crisis como cambio de modelo (la palabra “crisis” significa cambio) hace
que el modelo liberal y el modelo socialdemócrata converjan en uno nuevo, a
modo de síntesis, como lo fue el modelo keynesiano entre el capitalismo y el
comunismo. Algo que no sucede en la actualidad a través de la Renta Básica
porque se ha falsificado tanto el modelo liberal convertido en conservador y
planificar la economía desde la socialdemocracia se encamina en favor de los
ricos, puesto el modelo socialista al servicio del capitalismo, para abrir el
boquete por el que luego entra la derecha, lo cual ha pasado ya en varios
países europeos. Tal ha sido la estrategia del gobierno español “socialista” y
el laborismo de Blair o Gerhard Schröder en Alemania. La
socialdemocracia logra controlar a los sindicatos mayoritarios, que no hacen
sino lo mínimo sin establecer una lucha social capaz de cambiar el rumbo de
la explotación, que luego desarrollará a sus anchas la derecha.
El gran error de la políticas económicas
aplicadas a nivel mundial es que se aplican al corazón del sistema financiero,
cuando no padece ningún infarto la economía, sino que el mal está en la
fluidez de la circulación monetaria, por lo que necesita “sintrón”, o sea la
Renta Básica.
De no aplicarse de esta manera la “sangre” monetaria no llegará a partes de la
sociedad que quedarán atrofiadas, gangrenadas y serán apartadas del cuerpo
social. para ser usadas como mano de obra esclava. Hace falta darse cuenta de
lo que esta pasando y reaccionar.
Espero que este artículo sea un grano, en la reflexión y lucha social, que no
hace granero, pero ayuda al compañero, como dice el refrán.Vale.