Quintessence Journals - Clínica Periodontal Poza 23
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Quintessence Journals - Clínica Periodontal Poza 23
n fo r ORIGINAL Evaluación a un año de implantes Astra Tech en pacientes periodontales que no acudieron a Terapia de Mantenimiento Francisco Javier Vallejo Aisa Alumno del Posgrado de Periodoncia (UPV/EHU). Rosa Ángela Sandoval Vargas Alumno del Posgrado de Periodoncia (UPV/EHU). Ruth Estefanía Fresco Alumno del Posgrado de Implantes (UPV/EHU). ot Q ui by N ht pyrig No Co t O R I G I NforA PL ub lica tio n te ss e n c e Francisco J.Vallejo, Rosa Á. Sandoval, Ruth Estefanía, Daniel Molina, Saray Ugarte, Luis A. Aguirre Palabras clave: periimplantitis, periodontitis crónica del adulto, placa bacteriana, ortopantomografía, radiografía intraoral, análisis oclusal, sobrecarga oclusal, biotipo periodontal. Objetivo: Valorar la pérdida de inserción ósea en torno a los implantes instalados en pacientes con Periodontitis Crónica del Adulto que no acudieron a Terapia de Mantenimiento, tras un año de función. Pacientes y Métodos: Veintidós pacientes remitidos al Posgrado de Periodoncia de la Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea, intervinieron de forma voluntaria en el estudio. Se valoró el índice de placa, el biotipo periodontal, y se realizó un análisis oclusal. Fueron analizados 123 implantes mediante ortopantomografías y radiografías intraorales, en el momento de la carga y un año después, valorando la pérdida del nivel de inserción mediante el programa Dental Studio NX versión 6.0® (NEMOTEC). El análisis estadístico se realizó con el programa informático SPSS. Resultados: Durante este año, la tasa de supervivencia se situó en el 99,18% obteniendo un éxito del 70,7%. La pérdida de inserción media fue de 0,62 mm (D.S 0,94; rango [-0,71-8,05]), demostrándose la existencia de una relación estadísticamente significativa entre la pérdida ósea, el biotipo periodontal y las alteraciones oclusales. Conclusión: El mantenimiento de la salud periimplantaria en pacientes con Periodontitis Crónica del Adulto, requiere su inclusión en un programa reglado de mantenimiento, así como del control personal del índice de placa. Asimismo la presencia de sobrecarga oclusal y de un periodonto fino en torno a nuestras fijaciones podrían ser factores de riesgo de pérdida ósea ulterior. Daniel Molina Blanco Posgrado de Periodoncia (UPV/EHU). Saray Ugarte Bilbao Licenciada en Matemáticas (UPV/EHU). Posgrado en Métodos Avanzados de Estadística Aplicada (UNED). Luís Antonio Aguirre Zorzano Profesor Titular de Periodoncia (UPV/EHU). Correspondencia a: Francisco Javier Vallejo Aisa Dpto. de Estomatología (Posgrado de Periodoncia) Facultad de Medicina y Odontología UPV/EHU Barrio Sarriena s/n 48940 Leioa. VIZCAYA. E-mail: [email protected] INTRODUCCIÓN Los implantes dentales han resultado ser predecibles en el tratamiento de pacientes total o parcialmente desdentados (Adell y cols. 1981; Albrektsson y cols. 1988; Nevins y Langer 1993; Rasmusson y cols. 2005). La supervivencia de los mismos es elevada, pero no está exenta de complicaciones, siendo una de las más frecuentes la patología periimplantaria (Becker y cols. 1990; Berglund y cols. 2004). Son dos las afecciones a las que nos referimos al hablar de esta enfermedad: la mucositis y la periimplantitis. Definiremos la mucositis como una forma reversible de afección inflamatoria de los tejidos blandos que rodean a un implante en función. Si además coexiste con una pérdida ósea, en este caso lo llamaremos periimplantitis y será irreversible (Albrektsson e Isidor 1994). La periimplantitis ha sido relacionada por algunos autores con factores mecánicos. Son tres los aspectos que normalmente se suelen citar (Rosenberg y Volumen 18, Número 1, 2008 27 O R I G I N A L 28 Periodoncia y Osteointegración Fig. 1 Imagen radiográfica en la que se observan las referencias utilizadas en las mediciones realizadas desde el hombro del implante al nivel óseo, tanto en mesial como en distal. fo r PACIENTES Veintidós pacientes, nueve hombres y 13 mujeres, con una edad media de Se determinó el Índice de placa (O’Leary y cols. 1972) valorando cuatro superficies por implante y expresándolo porcentualmente. A continuación se realizó un análisis oclusal que incluyó el estudio de las prematuridades en relación céntrica, de las interferencias en lateralidad (trabajo y no trabajo) y de los movimientos protrusivos. Los implantes que presentaron prematuridades o interferencias fueron considerados como sobrecargados. Se analizaron 123 implantes Astra® Fixture MicroThread (TiOblast ™) (Astra Tech AB, Mölndal, Suecia), así como las prótesis que soportaban: 34 prótesis fijas, 7 prótesis híbridas, una sobredentadura. El biotipo periodontal se valoró en función de las características anatómicas de cada paciente de acuerdo a dos patrones: biotipo fino o biotipo grueso (Olsson y Lindhe 1991). by N ht Y MÉTODOS MÉTODOS n PACIENTES 45,5 años [38-53], fueron estudiados en el Posgrado de Periodoncia de La Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea tras recibir tratamiento periodontal y rehabilitación oral mediante prótesis implantosoportadas y que, aun siendo informados de la importancia de recibir Terapia Periodontal de Apoyo, no acudieron a las citas. Estos pacientes no padecían enfermedades sistémicas, ni disfunción cráneo-mandibular severa e intervinieron de forma voluntaria en el estudio (previo Consentimiento Informado). Únicamente dos eran fumadores ocasionales y fueron incluidos en el estudio. Q ui cols. 1991; Isidor 1996): a) la sobrecarga o trauma oclusal, hace referencia a la presencia de prematuridades en relación céntrica o interferencias en los movimientos excursivos o de protrusión; b) el plan de tratamiento, respecto a la ubicación y número de implantes, y c) los factores protéticos, como pueden ser la falta de ajuste pasivo o la presencia de «cantilevers». Sin embargo, no existe evidencia científica que lo demuestre (Lang 2000). Actualmente son cinco las líneas de estudio que avalan la etiología infecciosa de la periimplantitis: 1) El éxito a largo plazo del tratamiento con implantes se relaciona con el control de placa (Esposito y cols. 2003); 2) Los depósitos mantenidos de placa inducen la presencia de una mucositis periimplantaria (Zitzmann y cols. 2001); 3) La salud se asocia con la presencia mayoritaria de bacterias aerobias grampositivas, mientras que el fracaso de los implantes se relaciona con la preponderancia de bacterias anaerobias gramnegativas y espiroquetas (factor de asociación) (Quirynen y cols. 2002); 4) La terapia antimicrobiana mejora los parámetros clínicos de los pacientes con periimplantitis (Ericsson y cols. 1996; Lang y Lindhe 2003), y 5) La colocación de ligaduras en animales va a generar una alteración en la composición de la microflora y la consiguiente periimplantitis (Ericcson y cols. 1996). Asimismo, la pérdida de inserción ósea ha sido relacionada con la presencia de factores de riesgo, como enfermedades sistémicas (Quirynen y Listgarten 1990), el tipo de superficie del implante (Shibli y cols. 2002) y el tabaco (Hinode y cols. 2006), entre otros. El objetivo de este estudio fue valorar la pérdida de inserción ósea, tras un año en función, en torno a los implantes de pacientes que, habiendo presentado una Periodontitis Crónica del Adulto, que fue tratada, no acudieron sin embargo a Terapia de Mantenimiento. pyrig No Co t o inserción se La pérdida del nivel fde rP ub a midió desde el hombro del implante lica la superficie ósea tanto en mesial tio n como en distal (fig. 1), tsiendo ess valorae e n cStuda mediante el programa Dental ot Va l l e j o y c o l s . E v a l u a c i ó n a u n a ñ o d e i m p l a n t e s A s t r a Te c h dio NX versión 6.0® (NEMOTEC), sobre ortopantomografías y radiografías intraorales escaneadas (Epson Perfection 4990 Photo) en el momento de la carga (fig. 2) y un año después (fig. 3). Los implantes que tuvieron unas pérdidas menores o iguales a la media, fueron considerados exitosos y por tanto, aquellos en los que las pérdidas fueron superiores se consideraron fracaso. El análisis estadístico de los datos se realizó con el programa informático SPSS versión 14.0, y se basó en el análisis de la media de la pérdida ósea. Se realizaron análisis descriptivos de medias, correlaciones y contrastes no paramétricos con el fin de encontrar diferencias significativas entre los grupos marcados por las alteraciones oclusales y los biotipos periodontales. El incumplimiento de la hipótesis de normalidad en los datos impidió llevar a cabo pruebas anova o pruebas t, por lo que se realizaron las pruebas no paramétricas U-Mann Whitney para contrastar dos muestras y Kruskal-Wallys para contrastar más de dos muestras. RESULTADOS La muestra presentó un nivel de placa medio del 59,63% [38%-90%], no existiendo una correlación estadísticamente significativa con respecto a la y c o l s . E v a l u a c i ó n a u n a ñ o d e i m p l a n t e s A s t r a Te c h fo r Para valorar la influencia que las alteraciones oclusales pudieran tener sobre la pérdida ósea se aplicó la prueba U-Mann-Whitney. Durante el primer año se observaron diferencias significativas (p = 9,48 × 10–16) entre implantes sometidos a sobrecarga y los que no lo estaban. Los implantes sometidos a sobrecarga (n = 43) tuvieron una pérdida de inserción media de 1,28 mm (D.S. 1,32), mientras que en los no sobrecargados (n = 80) la pérdida ósea fue de 0,26 mm (D.S. 0,22). En ambos casos la disminución distal fue mayor que la mesial (tabla 1). Respecto al biotipo periodontal, se aplicó la misma prueba y se observaron diferencias significativas en la pérdida ósea (p = 1,87 × 10–2). La pérdida ósea media obtenida en el biotipo fino (n = 73) fue de 0,78 mm (D.S. 1,14) aproximadamente el doble que la producida en el biotipo grueso (n = 50), 0,38 mm (D.S. 0,40) (tabla 2). La prueba de Kruskal Wallys fue aplicada para valorar la influencia que la combinación de las variables anteriores (alteraciones oclusales y biotipos O R I G I N A L 4 tasa de supervivencia en el 99,18% y la tasa de éxito, tal y como fue previamente definida, en el 70,7% (87 fijaciones). De los 36 implantes considerados fracaso, 27 perdieron de 0,63 a 1,5 mm, 2 de 1,5 a 2 mm, 5 de 2 a 4 mm y 2 más de 4 mm. A destacar que en una de las fijaciones se observó una disminución ósea media de 8,03 mm. by N ht pérdida ósea durante el primer año (p = 0,12). La disminución de inserción ósea media fue de 0,62 mm (D.S 0,94; rango [–0,71–8,05]), siendo mayores las pérdidas distales –0,72 mm (D.S. 0,99)– que las mesiales –0,52 mm (D.S. 0,94)–. Durante este primer año se perdió un implante (figs. 4-6), situándose la n Fig. 3 Imagen radiográfica tras un año de carga funcional. Puede apreciarse la gran pérdida ósea sufrida en el implante 36. Q ui Fig. 2 Imagen radiográfica en el momento de la carga de los implantes. En estos casos, el margen óseo coincide con el hombro del implante. pyrig No Co t fo la existencia Asimismo, se demostró rP ub signide una relación estadísticamente l a ficativa entre la pérdida ósea, lasicaltetio raciones oclusales y eltebiotipo perio- n ss e n c e dontal. ot Vallejo Aisa 5 Fig. 4 Imagen radiográfica un año después de ser sometidos a carga funcional los implantes. Obsérvense las pérdidas de hueso bilaterales y la fractura del implante 4.6 coincidiendo con la presencia de prematuridad en Relación Céntrica e interferencias en lateralidad. Asimismo, se puede observar la gran cantidad de cálculo presente. En ese momento el Índice de Placa que presentaba el paciente era del 55%. Fig. 5 Imagen clínica previa a la retirada del implante 4.6. Puede apreciarse el cálculo, el incorrecto diseño de la prótesis de cara al mantenimiento de la higiene diaria del paciente y la inflamación de la mucosa. Fig. 6 Implante fracturado observado durante el estudio y que fue retirado. 6 Volumen 18, Número 1, 2008 29 O R I G I N A L N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 43 1,05 1,40 0,00 8,00 43 1,52 1,31 0,18 8,05 43 1,29 1,32 0,15 8,03 NO SOBRECARGA N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 80 0,23 0,29 –0,71 1,33 80 0,29 0,23 –0,02 1,06 80 0,26 0,23 –0,28 1,14 TOTAL N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 123 0,52 0,94 –0,71 8,00 123 0,72 0,99 –0,02 8,05 123 0,62 0,94 –0,28 8,03 668,00 2,39E-08 145,50 6,71E-17 205,50 9,48E-16 periodontales) pudiera tener en nuestros resultados. Se obtuvieron diferencias significativas (p = 7,83 × 10–15) entre las diferentes muestras, si bien los resultados más evidentes fueron aquellos que relacionaron los biotipos finos sometidos a sobrecarga, con unas pérdidas en el nivel de inserción de 1,59 mm (D.S. 1,55), frente a los biotipos gruesos no sobrecargados, en los que se apreció una disminución ósea de 0,20 mm (D.S. 0,16) (tabla 3). Tabla 2 DISCUSIÓN Los estudios publicados para este sistema de implantes (Astra Tech® Implants) en pacientes con buena higiene y controlados profesionalmente, refieren pérdidas óseas medias durante el primer año de función, situadas entre 0,02 y 0,4 mm. (Arvidson y cols. 1998; Astrand y cols. 1999; Norton 2004). Cecchinato y cols. (2004) estudiaron las alteraciones óseas en torno a implantes Astra Tech®. Analizaron Pérdidas del nivel de inserción a 12 meses en implantes con biotipos finos y gruesos (en milímetros) PÉRDIDA MESIAL PÉRDIDA DISTAL PÉRDIDA MEDIA BIOTIPO FINO N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 73 0,67 1,15 –0,23 8,00 73 0,90 1,19 –0,02 8,05 73 0,78 1,14 –0,03 8,03 BIOTIPO GRUESO N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 50 0,30 0,39 –0,71 1,96 50 0,47 0,47 0,06 2,52 50 0,38 0,40 –0,28 2,24 TOTAL N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 123 0,52 0,94 –0,71 8,00 123 0,72 0,99 –0,02 8,05 123 0,62 0,94 –0,28 8,03 1407,50 3,15E-02 1393,00 2,61E-02 1368,50 1,87E-02 U de Mann-Whitney Sig. asintot. (bilateral) Periodoncia y Osteointegración fo r PÉRDIDA MEDIA SOBRECARGA U de Mann-Whitney Sig. asintot. (bilateral) 30 PÉRDIDA DISTAL n PÉRDIDA MESIAL Q ui Pérdidas del nivel de inserción a 12 meses en implantes sobrecargados y no sobrecargados (en milímetros) by N ht Tabla 1 pyrig No Co t fo soportadas 115 prótesis parciales fijas rP ub En por 324 fijaciones en 84 pacientes. l a el protocolo de instalación de losicimtio plantes se utilizaron procedimientos en n te s eynobserce una y dos fases (grupos A ysB) ot Va l l e j o y c o l s . E v a l u a c i ó n a u n a ñ o d e i m p l a n t e s A s t r a Te c h varon unas pérdidas óseas medias durante el primer año de carga funcional de 0,02 y 0,17 mm para los respectivos grupos. Los resultados obtenidos por Wennstrom y cols. (2005) son similares, sobre prótesis fijas unitarias. Se analizaron 45 fijaciones de este mismo sistema y obtuvieron 0,02 mm de pérdida ósea media en ese primer año de función. En otros sistemas de implantes, y en este mismo tipo de pacientes periodontalmente sanos, se consideran normales disminuciones óseas medias comprendidas entre 0,1 y 1,6 mm, durante los primeros años de carga funcional, dependiendo del tipo de implante y del estudio (De Bruyn y cols. 2001; Astrand y cols. 2002; Glauser y cols. 2003; Bergkvist y cols. 2004). Quirynen y cols. (1992), evaluaron 509 implantes del sistema Brånemark® ubicados en 146 pacientes, durante un período de 6 años. La disminución ósea media en el primer año de función fue de 0,9 mm y de 0,1 mm en los cinco años siguientes. Las pérdidas de hueso marginal tanto en los implantes maxilares como mandibulares fue similar e independiente de los aspectos oclusales. Referido a las nuevas superficies de implantes, Rocci y cols. (2003) evaluaron 111 implantes de este mismo sistema (Nobel Biocare®) colocados sobre 44 pacientes y sometidos a carga inmediata. Sesenta y seis fijaciones tenían una superficie rugosa TiUnite y cincuenta y cinco poseían una superficie mecanizada. La reabsorción media de hueso marginal después del primer año de carga funcional fue similar en ambos casos: 0.9 mm en la superficie TiUnite y 1 mm en las fijaciones mecanizadas. Behneke y cols. (1997), en un estudio realizado sobre 109 pacientes durante tres años, introducidos en un protocolo de mantenimiento, analizaron 320 implantes ITI, observando unas pérdidas medias de 0,8 mm desde la inserción de las fijaciones hasta la colocación de las prótesis, estabilizándose en 0,1 mm durante el resto de los años. N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 27 1,33 1,67 0,00 8,00 27 1,86 1,51 0,77 8,05 27 1,60 1,55 0,46 8,03 BIOTIPO FINO-NO SOBRECARGA N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 46 0,28 0,31 –0,23 1,33 46 0,33 0,28 –0,02 1,06 46 0,31 0,26 –0,03 1,14 BIOTIPO GRUESO-SOBRECARGA N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 16 0,57 0,50 0,04 1,96 16 0,96 0,55 0,18 2,52 16 0,76 0,49 0,15 2,24 BIOTIPO GRUESO-NO SOBRECARGA N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 34 0,17 0,26 –0,71 1,09 34 0,24 0,14 0,06 0,54 34 0,20 0,16 –0,28 0,61 TOTAL N Media Desv. típ. Mínimo Máximo 123 0,52 0,94 –0,71 8,00 123 0,72 0,99 –0,02 8,05 123 0,62 0,94 –0,28 8,03 34,87 1,30E-07 73,84 6,41E-16 68,77 7,83E-15 BIOTIPO FINO-SOBRECARGA Chi-cuadrado Sig. asintot. Asimismo, se han realizado estudios sobre la evolución de los implantes instalados en pacientes que habían sido tratados previamente por presentar una Periodontitis Crónica del Adulto (Karoussis y cols. 2003; Evian y cols. 2004). Estos autores no contraindican la colocación de las fijaciones en pacientes con esta patología, aunque afirman que la supervivencia de las mismas pudiera ser inferior. Wennström y cols. (2004), en 149 implantes Astra Tech® colocados en 51 pacientes con Periodontitis Crónica del Adulto, tratados previamente a la instalación de las fijaciones e incluidos en un protocolo de mantenimiento, observaron una reducción media de 0,33 mm durante el primer año en función. Es interesante mencionar el estudio de Mengel y Flores-de-Jacoby (2005), en el que se compararon los resultados obtenidos en 150 implantes (Bråne- mark System Implants® y 3i Implants Innovations®) aplicados a tres grupos de pacientes: pacientes periodontalmente sanos, pacientes tratados previamente de Periodontitis Crónica del Adulto y aquellos que presentaban una Periodontitis Agresiva Generalizada. Las pérdidas del nivel óseo medias al año fueron respectivamente de 0,58 mm, 0,68 mm y 0,83 mm, incrementándose a los tres años en 0,12 mm, 0,18 mm y 0,31 mm para los diferentes grupos. Este estudio demostraría que no sólo la periodontitis es un factor de riesgo en la pérdida de inserción, sino que el tipo de periodontitis puede tener un efecto sobre la misma. En nuestro estudio se han observado pérdidas medias de 0,62 mm [–0,71 mm–8,05 mm], que no sobrepasan los valores admitidos como éxito, de acuerdo a los criterios de Albrektsson y cols. (1986), aunque están por encima de lo referenciado en la litera- fo r PERDIDA MEDIA Al respecto, Quirynen y cols. 2007 recalcan la importancia que la Terapia Periodontal de Apoyo tiene en pacientes con un historial previo de periodontitis y que son portadores de fijaciones con superficie rugosa. La falta de una correlación estadísticamente significativa entre el índice de placa y la pérdida ósea en el presente estudio, podría ser explicada por los altos valores en el índice de placa que mostraban todos los pacientes. También se ha relacionado la pérdida ósea con las alteraciones oclusales. Isidor (1996) evaluó la disminución de hueso alveolar alrededor de implantes dentales tras ser sometidos a sobrecarga oclusal o a un acúmulo de placa excesivo. En este estudio, realizado en monos, se observó que en los implantes sobrecargados, la pérdida de oseointegración se produjo entre el cuarto y el decimosexto mes, mientras que en aquellos en los cuales se provocó un acúmulo de placa, se observó una reducción de 1,8 mm en el nivel óseo a los 18 meses, aunque mantuvo la oseointegración. El biotipo periodontal también puede influir en pacientes portadores de implantes. Kois (2001), describió cinco claves para conseguir resultados estéticos con implantes unitarios en sectores anteriores siendo el biotipo grueso una de ellas, ya que los biotipos finos, según este autor, son más sensibles a la técnica quirúrgica y propensos a pérdidas óseas posteriores. A pesar de las limitaciones que nuestro estudio presenta, principalmente en relación al tamaño de la muestra, los resultados demostrarían claramente la influencia que estos dos factores –oclusión y biotipo gingival– pueden tener en la pérdida ósea tras la carga de los implantes, principalmente cuando se comparan implantes sometidos a sobrecarga en biotipos finos, frente a implantes no sobrecargados en biotipos gruesos. Esperamos poder complementar en breve este estudio piloto con nuevos Volumen 18, Número 1, 2008 O R I G I N A L PERDIDA DISTAL n PERDIDA MESIAL Q ui Pérdidas del nivel de inserción a doce meses entre las combinaciones de las diferentes muestras: Biotipos periodontales y alteraciones oclusales (en milímetros) pyrig No Co t o resultados tura para este sistema.fEstos r ub de podrían justificarse por la P ausencia l ca mantenimiento periodontal y el ielevati do índice de placa (59,63%) te que nues-on ss e n c e tros pacientes presentaban. by N ht Tabla 3 y c o l s . E v a l u a c i ó n a u n a ñ o d e i m p l a n t e s A s t r a Te c h ot Vallejo Aisa 31 fo r O R I G I N A L by N ht Está demostrado que el mantenimiento periodontal en pacientes con Periodontitis Crónica del Adulto es funda- n CONCLUSIÓN mental para preservar la salud dental y periodontal (Renvert y Persson 2004). Nuestro estudio, aun teniendo en cuenta sus limitaciones, parece demostrar lo mismo en pacientes periodontales portadores de implantes, por lo que conservar la salud periimplantaria en este tipo de pacientes requiere su inclusión en un programa regla- Q ui datos que sean de interés y, de este modo, confirmar la validez de los resultados obtenidos. pyrig No Co t foque incluya do de mantenimiento, rP ubdel niigualmente el control personal lica vel de placa. ti De manera similar, la tepresencia de on se nc e sobrecarga oclusal y de unsperiodonto ot Va l l e j o y c o l s . E v a l u a c i ó n a u n a ñ o d e i m p l a n t e s A s t r a Te c h fino en torno a las fijaciones, constituirían factores de riesgo de pérdida ósea periimplantaria, tras ser sometidas a carga. BIBLIOGRAFÍA Adell R, Lekholm D, Rockler B, Branemark PI. (1981) A 15-year study of osseointegrated implants in the treatment of the edentulous jaw. International Journal of Oral and Maxillofacial Surgery 10, 387-416. Albrektsson T, Zarb G, Worthington P, Eriksson AR. (1986) The long-term efficacy of currently used dental implants: a review and proposed criteria of success. International Journal of Oral and Maxillofacial Implants 1, 11-25. Albrektsson T, Dahl E, Enbom L y cols. (1988) Osseointegrated oral implants. A Swedish multicenter study of 8139 consecutively inserted Nobelpharma implants. Journal of Periodontology 59, 287-96. Albrektsson T, Isidor F. (1994) Consensus report of session IV. En: Lang NP y Karring T. Eds. Proceedings of the first European workshop on Periodontology. 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