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La Evangelización de Santa María de Guadalupe Misión Guadalupana en República Dominicana Año V. No. 61. Enero de 2006. Índice 3 GRUPO EDITOR Presidente Mons. Diego Monroy Ponce Director Lic. Arturo Rocha Cortés Editorial Lic. Ángel Roa Hernández Jefe de Formación Ricardo Galindo Melchor Colaboradores P. Juan Ortiz Magos - P. Gabriel Rodríguez Martín del Campo - Diácono Mario Bustamante Rubio Ricardo Galindo Melchor - Martha Reta Hernández - Lenice Rivera Hernández - Iván Martínez Huerta - Arturo Pardo Ayala - Lic. María de la Concepción M.C. de Jiménez - Lic. Marcela Valecillo Gómez - Lic. Samuel Jiménez Hernández Boletín Guadalupano es una publicación mensual y gratuita de la Basílica de Guadalupe A.R. La distribución es realizada por la propia Basílica, con domicilio en Plaza de las Américas núm. 1, Col. Villa de Guadalupe, Deleg. Gustavo A. Madero, C.P. 07050, México, D.F. Tel.: 55776022 exts. 201 Redacción y 161; fax 5577-5038. Correo electrónico: [email protected]. Página web: www.virgendeguadalupe.org.mx. Registro de SEPOMEX (en trámite). Certificado de Licitud de Contenido núm. 10545, expedido por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la SEGOB, el 26 de noviembre de 2004. Certificado de Licitud de Título núm. 12972, expedido por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de SEGOB, expedido el 26 de noviembre de 2004. Certificado de Reserva de Derechos al Uso Exclusivo núm. 04-2004102812475400-106, expedido por la Dirección de Reservas de Derechos del Instituto Nacional del Derecho de Autor, el 28 de octubre de 2004. Diseño Arturo Pardo, Arturo Rocha y Ricardo Galindo Formación Editorial Arturo Rocha y Ricardo Galindo Impresión Litográfica Delta S.A de C.V. Pascual Orozco 47, Col. San Miguel Iztacalco, C.P. 08640, Deleg. Iztacalco, México D.F., con un tiraje de 20,000 ejemplares. Publicación GRATUITA. Prohibida su venta. Mensaje del Rector Mons. Diego Monroy Ponce saluda a todos nuestros peregrinos y lectores 9 Familia Guadalupana 5 Acontecimiento Guadalupano 7ª R elación de Chimalpháin Lic. Arturo Rocha Cortés 10 Oraciones Solución de Conflictos en el Hogar 2006 P. Gabriel Martín del Campo Diác. Mario Bustamante 12 Cultura y Arte 15 Artículo La Virgen de Guadalupe, Reina del Trabajo La Evangelización de Santa María de Guadalupe Grisell Ortega Jiménez Dra. Ana Teresa López de Llergo 21 Tonantzin Guadalupe 23 Retratos y Semblanzas Festividades en honor de San Juan Diego Cuauhtlatoatzin Pbro.Gabriel Martín del Campo Liliana Jamaica Silva Lic. Marcela Vallecillo Gómez 25 Reseña Inauguración de la exposición: Un Privilegio Sagrado 27 Pastoral Misión Evangelizadora Guadalupanacación Lic. Ma. Concepción M.C. de Jiménez ADEMÁS Monograma del Jubileo Guadalupano Autor: Fray Gabriel Chávez de la Mora Formación Digital: Arturo Pardo Ayala 30 Peregrinaciones Calendario 2006 Arquidiócesis de México Lic. Marcela Vallecillo Gómez Diócesis de Orizaba 34 Anuncio de las Celebraciones Móviles del 2006 35 En portada 2 4 Editoral 33 Año Jubilar Guadalupano en Visita el sitio oficial de la Basílica de Guadalupe: Actividades de Febrero 2005 www.virgendeguadalupe.org.mx MENSAJE DEL RECTOR H ermanos y hermanas en el Señor, al inicio de este nuevo año, con el corazón aún palpitante y lleno de alegría por el nacimiento en la carne de nuestro Señor Jesucristo, los saludo fraternalmente desde la Casita Sagrada de nuestra Señora de Guadalupe. Ocho días después de la Navidad, la Iglesia nos invita a detener nuestra mirada en el portal de Belén y contemplar en él, no sólo al Niño que ha nacido, sino también a quien nos lo ha dado, a María su Madre; quien desde antiguo ha sido proclamada Theotokos, es decir Madre de Dios y cuya solemne fiesta celebramos el primer día del año. Bajo la mirada maternal de María, la Iglesia pone sus anhelos de paz, que son los de todo hombre y toda mujer, pide que Ella nos alcance de su divino Hijo, este don precioso que cada vez más esta lejos del corazón de la humanidad y que cada día se hace más necesario. Para conmemorar la Jornada Mundial de la Paz, el sucesor del Apóstol Pedro, el Papa Benedicto XVI, ha sugerido como tema de esta jornada reflexionar sobre la importancia de la verdad para alcanzar la paz, de ahí que su mensaje se intitule: “En la verdad, la paz” Quiere, Su Santidad, que este primer mensaje por la paz, sea un homenaje a sus predecesores Pablo VI y Juan Pablo II, inspirados artífices de paz y con él también manifestar, la más firme voluntad de la Santa Sede por continuar sirviendo a la causa de la paz. En su mensaje señala que cuando el hombre se deja iluminar por el resplandor de la verdad, emprende de modo casi natural el camino de la paz. Así mismo afirma que la humanidad no conseguirá construir un mundo más humano para todos los hombres, en todos los lugares de la tierra, a no ser que todos, con espíritu renovado, se conviertan a la verdad de la paz. Es una paz que debe brotar de las raíces más profundas del hombre y ser capaz de erradicar de su ser toda agresividad y codicia, toda competitividad y violencia en cualquiera de sus formas y poner junto a ella como carta de presentación el rostro del amor y de la justicia, de la humildad y el respeto, de la prudencia y el tacto, pues sólo desde esta óptica lograremos erradicar los grandes males que aquejan al hombre de hoy. Junto a la tarea de la paz, aparece otra no menor importancia y sí de fundamental necesidad: La unidad de los cristianos. Del 18 al 25 de enero celebraremos el Octavario de Oración por la Unidad de los Cristianos. Este octavario “es el esfuerzo de todos aquellos que confesando a Jesucristo como Señor y Salvador suspiran por una Iglesia de Dios única y visible, que sea verdaderamente universal y enviada a todo el mundo, para que este se convierta al Evangelio y se salve para gloria de Dios”, tal como lo afirma el documento conciliar Unitatis Redintegratio. Este esfuerzo de unidad se alcanza mediante la conversión interior, la oración unánime, el conocimiento de los otros hermanos, la formación ecumenista y la cooperación entre sí. Sería oportuno, que nos mantuviéramos atentos a las diversas celebraciones y actividades que con motivo de este octavario se están realizando en nuestras comunidades eclesiales y sumarnos a ellas, con la intención de acrecentar nuestros lazos de comunión con nuestros hermanos separados y avanzar así hasta alcanzar la unidad plena por la que rogara Jesús: “Que todos sean uno, como Tú, Padre, estás en mí y yo en ti, para que también ellos sean en nosotros, y el mundo crea que tú me has enviado” (Jn 17, 21) Iniciaremos los festejos del Año Jubilar Guadalupano con la celebración solemne de los Akathistos, como un homenaje de amor y devoción a nuestra Señora de Guadalupe, por parte de los hermanos y de las hermanas de la vida consagrada, tanto de vida activa como contemplativa. Con esta oración de origen oriental, propia de la liturgia bizantina, el Pueblo de Dios, los consagrados y consagradas queremos proclamar unánimemente su maternidad divina y exaltar las maravillas que Dios ha obrado en Ella. Se cantaran el día doce de enero, a las 17:00 horas, en el Altar Mayor de este Santuario. Ven y únete a nuestra alabanza de gratitud al buen Dios por la presencia continua (475 años) de nuestra Madrecita llevándonos al “Verdaderísimo Dios por quien se vive” En este día, como una prueba más de filial devoción el pueblo de Tultepec, cohetero por tradición, quemará en honor de nuestra Muchachita Guadalupe algunos fuegos artificiales, además de amenizar nuestra fiesta con su música de viento. ¡Gracias pueblo de Tultepec, por su generosa participación! Me despido, no sin antes implorar para todos ustedes, un año nuevo lleno de bendiciones. Que Jesús, que ha hecho brillar su luz sobre los Magos de Oriente, al igual que a ellos, nos guíe por el camino de la paz. Los encomiendo al Corazón Inmaculado de nuestra Señora de Guadalupe. Dios les bendiga Monseñor Diego Monroy Ponce Vicario General y Episcopal de Guadalupe Rector del Santuario 3 EDITORIAL E n sus inicios la publicación del Boletín Guadalupano parecía que no sobreviviría, debido a muchos tropiezos y críticas, pero el Señor nos ha permitido llegar a un nuevo año y ofreciendo cada vez más a nuestros queridos lectores interesantes artículos que contribuyen no sólo a su información, sino también al crecimiento humano espiritual, maduramiento en la fe, y por si fuera poco, a enriquecer nuestra cultura. Somos concientes de nuestras limitaciones, pero también conocemos nuestros alcances, hemos avanzado pero también falta mucho por hacer. Los frutos que hemos logrado cosechar responden a una constante común: el trabajo en equipo. Cada uno sabe lo que tiene que hacer, en que momento y cómo. Ningún artículo, ninguna imagen es puesto al azahar, todo responde a una necesidad concreta del aquí y ahora de las exigencias de nuestra pastoral. El trabajo en equipo se ha logrado gracias al sentido eclesial que el Rector de la Basílica Mons. Diego Monroy Ponce, nos ha inyectado, amén de su entusiasmo y gran pasión por hacer que el mensaje de Jesús llegue a todos, a través del Acontecimiento de Guadalupe. Ninguna publicación del Boletín Guadalupano se va a imprenta, no sin antes ser revisada por el presidente del consejo editorial, el mismo Monseñor Monroy. La atinada, meticulosa, estricta e inteligente dirección del Maestro Arturo Rocha Cortés, ha logrado hacer de la revista, junto con el equipo de colaboradores, una de las mejores en su género y cada vez más de mayor alcance. Al iniciar este año nuevo, en estas primeras páginas que se abren, queremos ofrecerlas al Señor como primicia de gratitud por la oportunidad que nos da de servirle a través de ustedes, en este hermoso apostolado de la buena prensa, desde este lugar sagrado y tan representativo para el pueblo de México y de América. Agradecemos también las valiosísimas aportaciones que extramuros del Santuario hemos recibido y que hemos publicado oportunamente. Su autoridad en la materia, su conocimiento y su generosidad han contribuido al enriquecimiento de muchos. Muchas gracias también por su participación. Con este agradecimiento reconocemos y agradecemos también la colaboración de nuestra casa impresora Litográfica Delta, S. A. de C. V; y con ella a todos los que participan en su proceso técnico, a los 4 responsables de preprensa, de impresiones preliminares, de revisión de pruebas finas, de placas metálicas, de impresión, encuadernación, de empaque y de envío. A todos muchas gracias. Una novedad sin lugar a dudas, será la elección del nuevo presidente de la república, pidámosle a Dios, Señor que gobierna cielos y tierra nos ayude a prepararnos para vivir esta jornada electoral en un ambiente de convivencia cívica, de responsabilidad ciudadana y con la conciencia clara de saber elegir a la persona indicada para guiar el rumbo de nuestro país, buscando siempre la concordia, el progreso y el bien común. El grupo editor y sus colaboradores deseamos a todos nuestros hermanos lectores un año venturoso y lleno de proyectos, de realizaciones y logros y que todas sus aspiraciones respondan a una configuración de vida mucho más humana y cristiana. El año nuevo que empieza a despuntar, seguro traerá cosas nuevas y aunque esa novedad es incierta, no podemos olvidar que el Señor Jesús quiere hacerse compañero de nuestro camino y guiar nuestros pasos por el camino de la paz, de la solidaridad y de la justicia. Una oración y un abrazo para todos. Acontecimiento Guadalupano 7ª. relación de Domingo Chimalpháin Lic. Arturo Rocha Cortés Director del Boletín Guadalupano [email protected] H acemos un alto en la publicación de los traslados de los anales indígenas custodiados en la BNAH, pare presentar este valioso manuscrito que contiene interesantes alusiones guadalupanas: la 7ª relación de Don Domingo Francisco de San Antón Muñón Chimalpháin Quauhtlehuanitzin. La obra es una de varias relaciones que su autor, originario de Chalco Amaquemecan, donde nación en 1579, compiló a petición del gobernador de Amaquemecan, don Cristóbal de Castañeda. Al corpus de esta recopilación, realizada entre 1606 y 1631, aunque basada en códices y documentos del s. XVI así como testimonios verbales, se le conoce también como Relaciones de Chalco Amaquemecan. En la 7ª. Relación se contiene dos alusiones a Nuestra Señora de Guadalupe de México; la más importante de ellas figura en el f. 207v del manuscrito, custodiado en la Biblioteca Nacional de París. El pasaje relevante refiere que: “xxi tecpatl xihuitl 1555 años [...] auh çano ypan in yhcuac monextitzino yn totlaçonantzin S[an]ta María guadalope yn tepeyacac”,1 es decir: “En 1555 [...] en este año se apareció nuestra madre Santa María de Guadalupe en el Tepeyácac”. El año de 1555 puede confundir, máxime que arriba se habla con exactitud de la muerte del obispo de Fr. Juan de Zumárraga acaecida “7 años antes”, es decir, en 1548. La dificultad de conciliación del calendario indiano con el europeo parecería no ser aquí explicación suficiente. Pero la palabra náhuatl nextilia (nicte-, nic-) que es traducida normalmente como aparecer (monextitzino = se pareció), puede significar también “revelar, descubrir una cosa a alguien”. Tal podría haber sido el caso de la noticia consignada en la 7ª. Relación, con ocasión de una “develación” o “nueva develación” del sagrado original en la nueva ermita de Fr. Alonso de Montúfar que sustituyó a la primitiva de Zumárraga. Tales hechos ocurrieron en 1556. Con todo, no es imposible que sí hubiese habido una mala interpolación del año en lo referente a las mariofanías del Tepeyac en 1531 y no en lo relativo a la muerte de Zumárraga. Queden allí estas dos interpretaciones. 5 Acontecimiento Guadalupano Domingo Chimalpháin, 7ª. Relación, Manuscrit mexicain 74 de Bibliothèque nationale de France, f. 207v. 6 Acontecimiento Guadalupano Paleografía NOTA 1 Domingo Chimalpháin, 7ª. Relación, Manuscrit mexicain 74 de Bibliothèque nationale de France, f. 207v. 7 Acontecimiento Guadalupano Traducción al Español religioso de Santo Domingo, [...] para entonces hacía siete años que había muerto don fray Juan de Zumárraga, primer obispo de México. 11 Ácatl, 1555. En este año, el martes 20 de noviembre,49 don Juan Bautista Toyaotzin, tlatohuani de Tecuanipan, asesinó a su esposa doña Juana, señora de Cuitláhuac. Los había casado nuestro padre fray Diego de Soria, y vivieron juntos un año seis meses y 20 días hasta que él la mató, ya en tiempos de fray Pedro de Castilla, segundo vicario de Amaquemecan; aquél llevaba gobernando en Tecuanipan ocho años. También en este año, el día 17 de septiembre, murió Hernando de Tapia, hijo de Andrés Motelchiuhtzin, que era nahuatlato y vivía en San Pablo de Tenochtitlan. El mismo 17 de septiembre empezaron las lluvias con que nos inundamos en México; a muchos se les cayeron las casas, y otros tuvieron que abandonar las suyas por habérseles inundado. En el mes de diciembre comenzó a construirse el muro de piedra. 12 Técpatl, 1556. En este año se comenzó a trabajar con mayor intensidad en el muro de piedra, pues los tlatoque hicieron que la gente de todos los pueblos de la cuenca acudieran a México. En 1555, el 20 de noviembre fue miércoles; en 1554 fue martes [para construirlo], por órdenes del señor virrey don Luis de Velasco; y en poco tiempo quedó concluido el muro de piedra. También en este año se apareció nuestra madre Santa María de Guadalupe en el Tepeyácac. En este mismo año nació doña Petronila, hija de don Miguel de Santiago Yaotlapantzin, principal de Itztlacozauhcan Amaquemecan. 13 Calli, 1557. En este año, el día 5 de enero, designaron a don Cristóbal de Guzmán Cecetzin o Cecepaticatzin, hijo de don Diego de Alvarado Huanitzin, para que fuera gobernador de Tenochtitlan, [...] don Esteban Guzmán dejó el cargo de juez 8 La traducción, con algunas enmiendas, se toma de: Domingo CHIMALPÁHIN, Las ocho relaciones y el Memorial de Colhuacan, 2 vols., México: CONACULTURA, Dirección General de Publicaciones, 1998 [Cien de México]. Agradecemos la colaboración de la Profra. Amelia Camacho. FAMILIA GUADALUPANA Solución de conflictos en el hogar Pbro. Gabriel Rodríguez Martín del Campo Capellán de coro de la Basílica de Guadalupe ¡Q ué bella cosa es el amor! Pero cómo cuesta, paso a paso y constantemente, dar pie a que se instale en el corazón. El principal ingeniero, maestro de obras, obrero calificado, es Dios, es Jesucristo, es el Espíritu Santo, espíritu de amor. Se retrasa o se fracasa en este trabajo si el hombre es el que quiere implantar sus propios modos de gobernarse y de gobernar a los demás. El amor es dar muerte a sí mismo, al propio yo, para dejar que se instale en su lugar la persona de Jesucristo. “Vivo, ya no yo; es Cristo quien vive en mí”, dijo el enamorado de Jesús. “Todo lo estimo basura, al lado del conocimiento de Jesucristo y de Cristo crucificado”. Mientras no se abjure del amor propio, soberbio y ambicioso, no se darán pasos hacia el goce de la extraordinaria felicidad, del amor auténtico. Sólo contando con Él, el esposo y la esposa se vuelven una sola cosa. De lo contrario, toda su vida se vuelve una secuencia de problema tras problema. Cristo es la primera autoridad en el matrimonio. El marido no es la primera autoridad y tampoco la mujer, por mucho que crean ser capaces de ordenar las cosas. La verdadera autoridad es ponerse al servicio de los demás, como Cristo lo dijo: “Estoy en medio de vosotros como el que sirve”. Y como dice el refrán: “El que no vive para servir, no sirve para vivir”. El verdadero amor lleva al despojo de sí mismo, para hacer el don pleno a favor de los demás. En esto se encuentra la máxima realización del propio ser humano: nacimos para darnos. El amor lleva a la madurez plena porque provoca la salida total de uno mismo. Quien no se niegue a sí mismo y tome su cruz cada día, no puede seguir a Cristo y va al fracaso de la vida. La copulación animal se agota en el ámbito de lo instintivo; la del hombre, por su espiritualidad, se transporta al infinito. ¡Qué felicidad es llegar a tenerlo todo en común, alma, vida y corazón. Una sola fe, un solo bautismo, un solo Señor, Jesucristo! En el don pleno de sí mismo se encuentra la mayor satisfacción en esta tierra y abre las puertas de la felicidad eterna en el cielo. ¡Qué atinado es casarse; una pareja, pero teniendo a Cristo en medio! Continuará... 9 ORACIONES 2006 Mario Bustamante Rubio Diácono Permanente ¡F eliz Año Nuevo! Por supuesto civilmente. Gracias a Dios que nos sigue regalando la vida, que nos da una vez más, otra oportunidad para reconocer su misericordia y unirnos a los anhelos del corazón de nuestro salvador Jesús, que quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la Verdad. El drama existencial del hombre, que identificamos como pecado, continúa y la profunda necesidad de regeneración salvífica, por ende, nos hace percatarnos de nuestro fracaso existencial por el pecado que nos anula e incapacita para cooperar responsablemente en el ministerio de la Redención. Quizá uno de nuestros nuevos propósitos para este año consista en sentirnos en todo y siempre, ante todos y frente a todos, un Hijo de Dios, con optimismo, con alegría, con sencillez, sin cobardía. Si es así, refugiados en san Juan evangelista, que nos habla continuamente de las grandes realidades de la Gracia y que prefiere silenciar las escenas humanas del nacimiento de Jesús, 10 pero que sin embargo, introduce en nuestras almas las realidades divinas, alentándonos al decir que: “A todos los que recibieron (La Palabra) les dió poder de hacerse hijos de Dios, A los que creen en su nombre” Jn 1,12. En consecuencia si Cristo ya es nuestro y nosotros somos de Cristo, Él y nosotros tenemos que existir en tensión amorosa y santificadora Jn 3, 1-2. ¿A caso ha desaparecido el amor en la Tierra? ¿Ya no existe un corazón en la tierra que se alegre por la presencia de Jesús Eucaristía? o ¿nos hemos forjado un corazón de piedra congelado sin sentimientos, olvidando lo que le profeta Ezequiel proclama: “Os rociaré con agua pura y quedaréis purificados de todas vuestras impurezas y de todas vuestras basuras os purificaré. Y os daré un corazón nuevo, infundiré en vosotros un espíritu nuevo, quitaré de vuestra carne el corazón de piedra y os daré un corazón Oraciones de carne. Infundiré mi espíritu en vosotros y haré que os conduzcáis según mis preceptos y observeis y practiqueis mis normas.” Ez. 36, 2427 nuestra conducta, con nuestra actitud, Cristo sea cada vez menos conocido, menos amado y peor imitado, ¡Haciendo confusa la sublime figura de Cristo! Cada día de este año 2006 tengamos presente, insistamos hasta el cansancio en la finalidad teológica del adviento, preparando el encuentro de las almas con Cristo y con su verdad, hay que “Dar testimonio de la luz, para que todos vengan a la fe” Jn 1,7. De una vez por todas dejemos de ser miembros de esa muchedumbre de “cristianos” nominales o puramente sacramentalizados por el Bautismo. Terminemos con este endurecimiento, signo de reprobación que tiene su origen en una evasión voluntaria y culpable, el temor a buscarle y acercarse a Él sinceramente con su misión, ¡No sea que nos vaya a exigir demasiado! Hay que desarraigar de nuestras almas, la apatía, la irresponsabilidad y la incredulidad; no vaya a ser trágicamente que Jesucristo sea para nosotros ¡El gran desconocido! Tanto en su realidad ontológica de Dios-Hombre como en su mensaje evangélico o en sus exigencias morales y santificadoras, para no hablar de su ascética de crucificado. En estos tiempos se palpa un cierto derrotismo amargo en el modo de dar a conocer a Cristo y a su Evangelio. Hay que evitar a toda costa que con Busquemos a Dios con alegría, al encontrarlo sentiremos entusiastas una gran animación por su persona cautivos por la eternidad. Cristo Pantocrator 11 CULTURA Y ARTE La Virgen de Guadalupe, Reina del Trabajo: la labor y la religión en una expresión artística Grisell Ortega Jiménez* J. BURGOS La Virgen de Guadalupe, Reina del Trabajo ca.1955 Óleo sobre tela Col. Museo de la Basílica de Guadalupe E l presente cuadro elaborado por el pintor J. Burgos en 1955 titulado La Virgen de Guadalupe, Reina del Trabajo, nos presenta en primer plano a una familia, que en devota contemplación mira una imagen de la guadalupana, su extracción proletaria se revela por la vestimenta que porta (la madre cubierta de rebozo y un vestido con un largo por debajo de la rodilla, el padre con pantalón de mezclilla y camisa arremangada y el niño con un chaleco tejido) La figura de la Virgen coronada como reina del trabajo se recorta del fondo oscuro y a sus pies se colocan tanto la representación de un complejo industrial en funcionamiento como la de un campesino arando la tierra. María de Guadalupe fue nombrada reina del trabajo en 1955 culminando con ese acto una serie de acontecimientos de tipo político y social que marcaron el siglo XX mexicano y la conformación de la clase obrera nacional. 12 El fin de la Revolución Mexicana marca la incorporación activa de las masas populares a la vida política y económica del Estado posrevolucionario. Campesinos y obreros se convirtieron paulatinamente en las bases organizadas del gobierno, integradas y, por ende, bien controladas al interior de la maquinaria gubernamental. El sector obrero incrementaba sus filas de manera sostenida conforme se desenvolvía el proceso de urbanización que experimentó el país durante la primera mitad del siglo XX. A medida que se consolidaba el sistema, aquellos publicitados logros revolucionarios de justicia social, reforma agraria y políticas nacionalistas se difuminaron y lo que se presenció fue una serie de retrocesos para las masas populares, en general, y para el movimiento obrero, en particular. La Segunda Guerra Mundial proporcionó las condiciones adecuadas para que el país iniciara Cultura y arte cabalmente su proceso de industrialización. Con la producción estadounidense enfocada en el sector militar y la economía europea colapsada, éstos y otros mercados se abrieron a los productos mexicanos. Durante el periodo bélico el presidente Ávila Camacho logró concretar un pacto con las clases obreras, quienes se comprometieron a no ejercer su derecho de huelga ni entrar en pugna con los empresarios, en pro de la necesaria unidad nacional y el aumento de la producción nacional. No obstante, el fin del conflicto mundial significaba también el término de la coyuntura favorable para el desarrollo de la inmadura industria mexicana. La conclusión de la guerra coincide con la sucesión presidencial de Miguel Alemán en 1946. La directriz fundamental de la administración alemanista fue la industrialización nacional: “Fue tan profunda la convicción de industrializarse, por cualquier medio, que tendió a minimizar el alto costo social que el propio proyecto producía a nivel de la clase trabajadora tanto urbana como rural.”1 Una vez más el Estado hizo un llamado al sector obrero para su colaboración patriótica, esta vez en aras de la industrialización; y, una vez más, los líderes de las organizaciones sindicales se alinearon con el mandato presidencial. encabezados por Demetrio Vallejo y Valentín Campa; sin embargo, también tuvieron lugar movilizaciones de petroleros, electricistas, telefonistas, telegrafistas y tranviarios. Las demandas obreras, que comenzaron siendo reivindicaciones económicas y saláriales, se convirtieron en una exigencia de participación efectiva y democrática al interior de sus sindicatos, así como la denuncia abierta contra el abrumador control oficial y la colusión entre los líderes sindicales y el gobierno. La respuesta, por cierto exitosa, del Estado: la represión. Es justo en medio de este ambiente de descontento manifiesto al interior de las organizaciones sindicales, tensión en las relaciones obrero-patronales y confrontación de los trabajadores con las políticas estatales posrevolucionarias que “obreros y patrones resolvieron entonces proclamar y coronar a la Santísima Virgen de Guadalupe como Reina del Trabajo, apoyados por todos sus excelentísimos señores obispos y con plena aprobación de Roma.”2 De este modo, ante los severos problemas económicos y sociales que Adolfo Ruíz Cortines, quien subió a la presidencia en 1952, enfrentó las consecuencias de una política oficial que dio prioridad al crecimiento económico y olvidó la distribución de la riqueza. El proyecto de industrialización ruizcortinista optó por abrirse cada vez más al capital extranjero, dependiendo para ello, del necesario control de las masas obreras, no obstante, se continuaban difiriendo las demandas de este sector. A pesar de los paliativos, como la creación del Instituto Mexicano del Seguro Social en 1943, la frustración proletaria no pudo contenerse. La precaria situación soportada por los obreros desde los años cuarenta y originada por las bajas saláriales, el aumento del desempleo, el alza en los precios y el charrismo sindical, encontró una vía de expresión no institucional hacia mediados de la década de los cincuenta. En 1956, el movimiento magisterial fue el precursor de la oleada de movimientos obreros que se sucederían en 1958, año de elección presidencial. Quizás la movilización obrera más célebre de la época fue la de los ferrocarrileros, J. BURGOS La Virgen de Guadalupe, Reina del Trabajo (Detalle) 13 Cultura y arte enfrentaban los trabajadores, éstos voltearon la mirada al terreno de la fe, buscando en la religión las soluciones que el Estado no les otorgaba. La culminación de esta empresa tuvo lugar el 11 de diciembre de 1955, cuando se ciñó a las sienes de la Guadalupana la corona que le confería el título de Reina del Trabajo. La creación de la majestuosa pieza, cincelada a mano en oro de 18 quilates, se debe al orfebre mexicano Francisco J. López, quien tardó cerca de seis meses en su realización. Esta obra de arte, misma que se conserva actualmente en el Museo de la Basílica de Guadalupe, se caracteriza por las cinco estrellas imperiales que la constituyen. Cada una de estas estrellas expone, por medio de relieves trabajados al interior de ellas, distintos motivos que simbolizan las actividades laborales encomendadas bajo la protección de la Patrona del Tepeyac. De este modo, la estructura de la corona plasma las representaciones de un patrón trabajando en armonía con su empleado, un minero laborando arduamente, un campesino que con la ayuda de su tractor cultiva la tierra, una dedicada costurera y un tenaz científico en plena investigación. Este título confiere a María de Guadalupe la custodia, auxilio y protección de toda una clase social ubicada en un mismo territorio, quien a la vieja forma de los gremios o estamentos, reconoce la unidad otorgada por el sistema de producción y jura a la Virgen como protectora de su actividad y familia en un gesto de fiel aceptación. NOTAS * Licenciada en Historia por la Universidad Nacional Autónoma de México; interesada en temas relacionados con las artes audiovisuales en la primera mitad del siglo XX. 1 José Luis REYNA, “El movimiento obrero en el ruizcortinismo: la redefinición del sistema económico y la consolidación política” en Pablo GONZÁLEZ CASANOVA, La clase obrera en la historia de México, México: Siglo XXI-UNAM, 1981, p. 21. 2 Roberto VELÁZQUEZ OLIVARES, La Virgen de Guadalupe. Reina del Trabajo, México: Editorial Elite, 1980, p. 5. Francisco J. LÓPEZ Corona de la Virgen de Guadalupe como Reina del trabajo 1955 Oro cincelado Col. Museo de la Basílica de Guadalupe 14 ARTÍCULO La Evangelización de Santa María de Guadalupe* Dra. Ana Teresa López de Llergo Universidad Panamericana Fernando LEAL La primera aparición, 1947 Fresco, 376.3 x 346 cm. Capilla del Cerrito, INBG. Introducción E n este trabajo se pretende explicar lo que la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe surgirió a los nativos de América y a los europeos, en los primeros años después de sus aparaciones, y de habernos dejado su imagen imprensa en la tilma de Juan Diego. Precisamente, porque nos referimos sólo a aquellos años, no acudiremos a los descubrimientos que- con los avances tecnólogicos- después se han encontrado en la bellísima impresión de Nuestra Señora. Tampoco nos detendremos en los argumentos sobre la historicidad de las apariciones y la veneración de la imagen Guadalupana1. Para cada grupo étnico, la Madre del Verbo y Madre de todos los hombres, trajo un mensaje que logró una remoción espiritual. Abrió a los índigenas a la verdadera fe, y a los católicos les ayudó a entender que todos somos hermanos, y haber la importancia de acercar a quienes tenían otras creencias a la auténtica religión, la revelada. Ella misma se hizo códice y, en sus maravillosos diálogos con Juan Diego, usó un lenguaje coloquial. De este modo, Nuestra Señora manifestó su celo evangelizador y preparó el arduo camino de los misioneros. Juan Pablo II reconoce que : La aparición de María al indio Juan Diego, el año 1531, tuvo una repercusión decisiva para la evangelización. Este influjo va más allá de los confines de la nación mexicana, alcanzando todo el continente. Y América, que históricamente ha sido y es crisol de pueblos, ha reconocido "en el rostro mestizo de la Virgen del Tepeyac, (...) en Santa María de Guadalupe, (...) un gran ejemplo de evangelización perfectamente inculturada". Por eso, no sólo en el Centro y en el Sur, sino también en 15 Artículo en el Norte del Continente, la Virgen de Guadalupe es venerada como Reina de toda América2. 1. La imagen de Nuestra Señora de Guadalupe En el año de 1756, Miguel Cabrera3 expuso el resultado del estudio del ayate donde se encuentra la representación de Nuestra Señora de Guadalupe. El artista advirtió la perfecta conservación del lienzo, en un ambiente húmedo y salobre, a pesar de los hasta entonces 225 años de su existencia. Se maravilló de la desproporcionada elección de la fibra de maguey para ejecutar sobre ella tan excelente pintura. El lienzo de color crudo, está formado por dos piezas unidas con hilo de algodón muy delgado, incapaz por sí de soportar cualquier violencia. Los colores están aplicados directamente, sin ningún aparejo. No hay contorno ni dintorno en la figura. La altura de María es de ocho rostros y dos tercios, distribuidos de la siguiente manera: el primero, desde el nacimiento del pelo hasta el extremo de la barba, el segundo llega hasta sus virginales pechos, y de allí los demás hasta sus sagradas plantas. La Virgen aparece de catorce o quince años, su delicada simetría le conviene a la pequeña estatura; el rostro, ligeramente inclinado. Mano más que humana fue quien ejecutó tal obra. Hasta esa fecha nadie había pintado así. Se utilizaron cuatro especies de pintura: óleo para la cabeza y manos, temple en la túnica y en el ángel con las nubes; de aguazo el manto y labrada al temple para el fondo sobre el que caen los rayos del sol. El oro con que se representan las estrellas y los adornos de la túnica, está sobrepuesto como si fuera polvo, y se asemeja a las alas de mariposa. la túnica es rosada, y aparece más clara en donde la hiere la luz; hay también unas flores de extraño dibujo. El manto no es azul ni verde, sino una combinación de ambos. A las plantas de la virgen está el ángel, con las alas matizadas de modo nunca visto; las plumas se dividen en tres clases, unas de color azul finísimo, otras amarillas, y las terceras encarnadas. los claroscuros de todo el conjunto son muy adecuados. La pierna izquierda de la Morenita parece más corta, pero es debido al escorzo, pues el pie está retirado; sólo está apoyado el derecho, sobre la luna, de color tierra obscura. Sus manos miden dos tercios y medio de su rostro. El amabilísimo rostro no es delgado ni grueso, deja ver sus ojos, naríz y boca bien dibujados. La frente es proporcionada, el pelo negro, peinado a la usanza de las mujeres nobles. Las cejas delgadas y no rectas, los ojos bajos y cordiales. La nariz de bella armonía, la boca y la barba corresponden a toda esa proporción. 16 Las partes de la camisa, que sobresalen en el cuello y en las mangas, tienen pequeños puntos de oro; en el cuello, hay una abertura abotonada con una medalla con el signo de la Santa Cruz de color negro. María lleva un cíngulo morado de dos dedos de ancho y el manto, adornado por cuarenta y seis estrellas, le cubre moderamente parte de la cabeza. El sol sirve de respaldo a Nuestra Señora, y parece estar reverberando. No es dificíl comprender que quienes estuvieron cerca de la tilma y observaron tal prodigio, confirmaron su fe. 2. Los Códices y las Creencias de los Naturales de América Desde la época prehispánica se acostumbraba relatar y conservar el recuerdo de sucesos importantes por medio de códices, los cuales no buscaban provocar emociones estéticas, sino dar forma plástica a concepciones religiosas4. Algunos mostraban genealogías; otros, costumbres ligadas a la vida cotidiana. Los había con representaciones de deidades o con temas astronómicos en los que los indígenas se Artículo de invierno de 1531 que tuvo lugar a las 10:40 del martes 12 de diciembre, hora de la ciudad de México. Están representandas todas las constelaciones, que se extienden en el cielo visible a la hora de la salida del sol, y en el momento en que Juan Diego enseña su tilma (capa azteca) al obispo Zumárraga Caen las rosas que llevaba en ella, y aparece estampada en la tela la imagen de la Virgen. En la parte derecha del manto se encuentran las principales constelaciones del cielo del Norte. En el lado izquierdo las de Sur, visibles en la madrugada del invierno desde el Tepeyac. El Este se ubica arriba y el Oeste en la porción inferior. Como el manto está abierto, hay otros agrupamientos estelares que no están señalados en la imagen, pero se encuentran presentes en el cielo. Así la Corona Boreal, se ubica en la cabeza de la Virgen, Virgo en su pecho, a la altura de las manos, Leo en su vientre, justo sobre el signo Nahuil Hollín, con su principal astro denominado Régulo, el pequeño Rey. Gémini, los gemelos, se encuentran a la altura de las rodillas, y Orión, donde está el Ángel. En resumen, en el manto de la Guadalupana se puede identificar las principales estrellas de las constelaciones de invierno. Todas ellas en su lugar, con muy pequeñas modificaciones.6 apoyaban para sus augurios. Generalmente, en ellos se señalaban fechas que hacían posible ubicar los relatos. En los códices mayas había dibujos en negro; en los mixtecas, los colores eran muy importantes: usaban rojo, azul, púrpura, negro y gris. La mitología era rica y variada; los habitantes de Tenochtitlán creían en un matrimonio de dioses que procreó cuatro hijos, de allí nació la creencia del ciclo de los cuatro soles. Cuando el último sol estaba a punto de extinguirse, se recreó porque un pequeño dios, Nanahuatzin, se sacrificó arrojándose al fuego. Así surgió el quinto sol. La consecuencia de tal historia originó los sacrificios humanos, necesarios para alimentar con sangre al sol.5 Cuando Nuestra Señora de Guadalupe se manifestó delante del sol y posando sus plantas sobre la luna, muy probablemente los indígenas le reconocieron una dignidad superior. Además, los naturales de América conocían muy bien la posición de las estrellas, por lo que es lógico pensar que descubrieron las constelaciones en el manto de la Virgen, dato que después de muchos años conocimos los demás. En el manto de la Virgen de Guadalupe se encuentra representado con mucha fidelidad, el cielo del solsticio De esta manera, quedó documentada, en la misma tilma, la fecha de la aparición de María en el Tepeyac, y su imagen expresa que es Señora de cielos y tierra. El color del manto —adornado con las constelaciones— habla de divinidad; y de realeza, el color del vestido y la finísima túnica. Los naturales estaban acostumbrados al lenguaje de las representaciones plásticas, de manera que la figura de la Virgen en la tilma sin duda ayudó a la conversión a la verdadera fe. Los evangelizadores captaron este fenómeno y en la alfabetización y catequesis en América, durante el siglo XVI, uno de los 27 autores franciscanos plasmó la doctrina en un documento pictográfico.7 3. Las Representaciones Europeas de Nuestra Señora Aunque son variadísimas, en algunas se descubren semejanzas con la de Guadalupe, en México. Se trata de las representaciones de las Vírgenes orantes comteplativas gozosas8 —como las apocalípticas— representadas de tres maneras9: 1.a La Virgen sin su Hijo, con los brazos abiertos, en actitud orante. Doce estrellas enmarcando la cabeza, sobre el pecho o el vientre un disco solar, y la luna a sus pies. Estas imágenes fueron el antecedente de la Inmaculada Concepción. 17 Artículo 2.a La Virgen rodeada por los astros,- que le dan un aspecto glorificado- entreabierto su seno, y allí su Hijo rodeado de rayos solares. Ella se encuentra en actitud orante, con los brazos abiertos. El detalle del seno maternal derivó en la Virgen de la Esperanza o de la O. 3.a Nuestra Señora rodeada de estrellas acompañadas por el sol y la luna, sostiene en brazos a su Hijo; esto último le quita la característica de orante. Tal figura muchas veces se encuentra atacada por un dragón. Estas representaciones fueron precursoras de las de las Madonas románticas. Una variedad de este tipo es la sibilina10, que muestra a María dentro del sol y rodeada de rayos luminosos. Así se representaron posteriormente las Vírgenes aparecidas. Respecto al color de la piel de las imágenes de la Santísima Virgen, las hay con diversas tonalidades: blancas, morenas —como la Almudena— y negras como la de Monserrat. Un testimonio de la relación entre la Virgen de Guadalupe y las apocalípticas es el cuadro del siglo XVIII, donde Gregorio José de Lara plasmó la Visión de san Juan en Patmos11. Representa al apóstol sentado bajo un árbol, contemplando arrobado a Nuestra Señora de Guadalupe, alada y suspendida en los cielos. A sus plantas se muestra al dragón de tres cabezas12. Ella, recogida y serena, parece estar en otra dimensión, donde todo es paz y presencia de Dios13. Juan Diego, tras una vida dedicada a cuidar la pequeña ermita del Tepeyac15. El Nican Mopohua16 se considera la narración más antigua de las apariciones guadalupanas. Para este trabajo, sólo se recogen textualmente los diálogos entre la Virgen y Juan Diego. Primera aparición, sábado 9 de diciembre en la madrugada: -¿Por ventura soy digno de lo que oigo?, ¿quizá sueño?, ¿me levanto de dormir?, ¿dónde estoy?, ¿acaso en el paraiso terrenal que dejaron dicho los viejos, nuestros mayores? ¿acaso ya en el cielo? (...) oyó que le llamaba de arriba del cerrillo y le decían: -Juanito, Juan Dieguito. (...) Juanito, el más pequeño de mis hijos, ¿a dónde vas? -Señora y Niña mía, tengo que llegar a tu casa de México Tlatilolco, a seguir las cosas divinas, que nos dan y enseñan nuestros sacerdotes, delegados de nuestro Señor. -Sube y ten entendido, tú el más pequeño de mis hijos, que yo soy la siempre Virgen María, Madre del verdaero Dios por quien se vive; del Creador cabe Santa María de Guadalupe pudo unir, en admirable coincidencia, la veración prehispánica a la maternidad, con el culto milenario a la Madre de Cristo, intercesora ante su Hijo y mediadora entre Dios y los hombres. Buen número de historiadores coincide en reconocer en ello un encuentro de tradiciones, una creación colectiva y singular de la Nueva España, una expresión cargada de valores bíblicos, símbolos prehispánicos, mundo ibérico y catolisismo mediterráneo que la convertían en devoción de españoles, indios, criollos, mestizos, mulatos, ricos y pobres. Su presencia aparece definitiva en el proceso de evangelización. Su nombre marca el principio de la era cristiana en México y queda, desde entonces, como embrión de la nueva nacionalidad14. 4. El Diálogo con Juan Diego A dos leguas de Tenochtitlán, en Cuautitlán, entre 1474 y 1480, nació Cuauahtlatoatzin, perteneciente a la clase ínfima o macehualli. Más tarde se le conocerá como Juan Diego. Se casó con María Lucía, no tuvieron hijos y adoptaron a uno que después relató la vida de su padre. En 1548 murió 18 Fernando LEAL La primera aparición (Detalle) Artículo quien está todo; Señor del Cielo y de la tierra. Deseo vivemente que se me erija aquí un templo para aquí mostrar y dar todo mi amor, compasión, auxilio y defensa, pues yo soy vuestra piadosa madre: a ti, a todos vosotros juntos los moradores de esta tierra y a los demás amadores míos que me invoquen y en mí confíen; oír allí sus lamentos, y remediar todas sus miserias, penas y dolores. Y para realizar lo que mi clemencia pretende, ve al palacio del obispo de México y le dirás cómo yo te envío a manifestarle lo que mucho deseo, que aquí en le llano me edifique un templo: le contarás puntualmente cuanto has visto y admirado, y lo que has oído. Ten por seguro que lo agradeceré bien y lo pagaré, porque te haré feliz y Merecerás mucho que yo recompense el trabajo y fatiga con que vas a procurar lo que te encomiendo. Mira que ya has oído mi mandato, hijo mío el más pequeño; anda y pon todo tu esfuerzo. -Señora mía, ya voy a cumplir tu mandato; por ahora me despido de ti, yo tu humilde siervo. Segunda aparición, del mismo día: -Señora, la más pequeña de mis hijas. Niña mía, fui a donde me enviaste y cumplí tu mandato; aunque con dificultad entré a donde es el asiento del prelado; le vi y expuse tu mensaje, así como me advertiste; me recibió benignamente y me oyó con atención; pero en cuanto me respondió, pareció que no la tuvo por cierto (...) Comprendí perfectamente en la manera como repondió, que piensa que es quizá invención mía que Tú quieres que aquí te hagan un templo y que acaso no es de orden tuya; por lo cual, te ruego encarecidamente, Señora y Niña mía, que a alguno de los principales, conocido, respetado y estimado le encargues que lleve tu mensaje para que le crean porque yo soy un hombrecillo, soy un cordel, soy una escalerilla de tablas, soy cola, soy hoja, soy gente menuda, y Tú, Niña mía, la más pequeña de mis hijas, Señora me envías a un lugar por donde no ando y donde no paro. Perdóname que te cause gran pesadumbre y caiga en tu enojo, Señora y Dueña mía. Ya de ti me despido. Hija mía la más pequeña, mi Niña y Señora. Descansa entre tanto. Tercera aparición, domingo 10: -Bien está, hijito mío, volverás aquí mañana para que lleves al obispo la señal que te he pedido; con esto te creerá y acerca de esto ya no durará ni de ti sospechará y sábete, hijito mío, que yo te pagaré tu cuidado y el trabajo y cansancio que por mí has emprendido, ea, vete ahora; que mañana aquí te aguardo. Cuarta aparición, martes 12 de diciembre de 1931: -¿Qué hay, hijito mío el más pequeño?, ¿a dónde vas? -Niña mía, la más pequeña de mis hijas. Señora, ojalá estés contenta. ¿Cómo has amanecido?, ¿estás bien de salud, Señora y Niña mía? Voy a causarte aflicción: sabe, Niña mía, que está muy malo un pobre siervo tuyo, mi tío; le ha dado la peste, y está para morir. Ahora voy presuroso a tu casa de México a llamar uno de los sacerdotes amados de Nuestro Señor, que vaya a confesarle y disponerle; porque desde que nacimos, venimos a aguardar el trabajo de nuestra muerte. Pero si voy hacerlo, volveré luego otra vez aquí, para ir a llevar tu mensaje. Señora y Niña mía la más pequeña; mañana vendré a toda prisa. -Oye, hijo mío el más pequeño, ten entendido que son muchos mis servidores y mensajeros, a quienes puedo encargar que lleven mi mensaje y hagan mi voluntad; pero es de todo punto preciso que tú mismo solicites y ayudes y que con tu mediación se cumpla mi voluntad. Mucho te ruego, hijo mío el más pequeño, y con rigor te mando, que otra vez vayas mañana a ver al obispo. Dale parte de mi nombre y hazle saber por entero mi voluntad, que tiene que poner por obra el templo que le pido. Y otra vez dile que yo en persona, la siempre Virgen Santa María, Madre de Dios, te envía. -Señora y Niña mía, no te cause yo aflicción; de muy buena gana iré a cumplir tu mandato; de ninguna manera dejaré de hacerlo ni tengo por penoso el camino. Iré a hacer tu voluntad; pero acaso no seré oído con agrado; o si fuere oído, quizá no se me creerá. Mañana en la tarde, cuando se ponga el sol, vendré a dar razón de tu mensaje con lo que responda el prelado. Fernando LEAL La curación de Juan Bernardino (Detalle) 19 Artículo NOTAS * Tomado de: Dos mil años de evangelización. Los grandes ciclos evangelizadores, XXI Simposio Internacional de Teología de la Universidad de Navarra (Pamplona, 3-5 de mayo de 2000), edición dirigida por Enrique de la Lama, Marcelo Merino, Miguel Lluchbaixauli y José Enériz, Pamplona: Servicio de Publicaciones de la Universidad de Navarra, 2001 [Col. “Simposios Internacionales de Teología”, 21], pp. 615-627. 10 Cfr. 1 13 Cfr. Artes de México, Visiones de Guadalupe, pp. 10-11. 14 F. ZERÓN- MEDINA, Felicidad de México, pp. 49-50. En 1556, Fray Francisco de Bustamante, Provincial de los franciscanos en México, negó en un sermón las apariciones y adjudicó la pintura a un indio llamado Marcos. En 1770, el filósofo Juan Bautista Muñoz negó la autenticidad de los hechos acaecidos en el Tepeyac, apoyado en el argumento «del silencio», pues ni Sahagún ni Motolinía hablaron de la Virgen de Guadalupe en sus relatos. El 12 de diciembre de 1794, el dominico fray Servando Teresa de Mier, afirmó que el culto a la Guadalupana se inició antes de la Conquista, cuando Santo Tomás apóstol, que era el mismo Quetzalcóatl, mostró la imagen pintada en su propia manta. (Cfr. A. REYES, Fray Servando Teresa de Mier, p. 35). En 1881, Joaquín García Icazbalceta manifestó al Arzobispo Pelagio Antonio de Labastida y Dávalos la importancia del argumento de Juan B. Muñoz. En 1986, Edmundo O’ Gorman, prestigiado historiador, sembró dudas —especialmente entre los intelectuales— al editar su libro Destierro de sombras, donde expuso su estudio sobre los textos que abordan el tema y concluyó con la afirmación de que en 1555, el Arzobispo Alonso de Montúfar mandó colocar la imagen de la Virgen Inmaculada, copia de un modelo europeo (cfr. p. 281). 2 Ecclesia in America, núm. 11. 3 Cfr. Maravilla Americana, en «El eco guadalupano» 3 a 29. 4 Cfr. M. STEN, Las extraordinarias historias de los códices mexicanos, pp. 24 a 34. 5 Cfr. E. LUQUE ALCAIDE - J.I. SARANYANA, La Iglesia católica y América, p. 129. 6 Las estrellas, pp. 1 y 2. http://spin.com.mx./-msalazar/7.html. 7 Cfr. J. SÁNCHEZ HERRERO, Alfabetización y catequesis en España y América (s. XVI), en Evangelización y Teología en América (siglo XVI), pp. 259-260. 8 Cfr. María TRENS, Iconografía de la Virgen en el arte español, p. 14. 9 20 Cfr. ibidem, pp. 57-61. idem, p. 67. 11 Óleo sobre tela, de 120 x 112 cm., que se conserva en el Templo de Coixtlahuaca, en Oaxaca. 12 Esta es una muestra de que la iconografía guadalupana se relaciona con la Mujer Águila apocalíptica, en el momento de aniquilar a la bestia. 15 Cfr. J. SUÁREZ- GUANES, Nuestra Señora de Guadalupe, pp. 1516 y 42. 16 El texto en náhuatl se atribuye a Antonio Valeriano, principal colaborador de Sahagún. Su existencia está bien datada: perteneció a Fernando de Alva Ixtlilxóchitl (1578?-1650), descendiente de los reyes de Texcoco, lo heredó entre muchos papeles indígenas, lo tradujo al castellano y probablemente añadió algunas notas y hechos milagrosos. (Cfr. Enciclopedia guadalupana, tomo III, sub voce Nican Mopohua). Continuará... RETRATOS Y SEMBLANZAS Pbro. Gabriel Rodríguez Martín del Campo Capellán de Coro Lic. Marcela Vallecillo Gómez Comunicación Social de la INBG N ació en México, D.F., el 26 de febrero de 1929, del matrimonio formado por el Ing. Alfonso Rodríguez y la Sra. Refugio Martín del Campo, quienes procrearon 11 hijos. En 1946 hizo su profesión de votos como hermano Marista y en 1984 se ordenó sacerdote en la Arquidiócesis de México. Realizó estudios de Profesor de Escuela Primaria y Superior, en la Escuela Normal Queretana (1948); de Maestro en Historia en la UNAM (1956) y de Licenciatura en Ciencias Religiosas en la Universidad Lateranense de Roma (1961). Fue profesor de Primaria en el Colegio México (1949-1954); de Secundarias, en el Distrito Federal, Morelia y Querétaro (1956-1958); de Preparatoria en el Centro Universitario México (CUM) (1958) y en el Colegio México de Orizaba (1981). Ejerció la dirección de la Escuela Normal Queretana (1962-1966 y 1976-1979), del CUM (1979-1980), y se desempeñó como Gerente de la Editorial Progreso (1982-1983). Recibió el encargo por un año de Visitador Provincial Marista (1966-1967) y por ocho años el de Consejero General de la Formación Marista a nivel internacional (1968-1976). En la Arquidiócesis de México y en la de Yucatán fue, respectivamente, el Provicario (19891990) y Vicario de Religiosas (1991-1993). En 1984 se incorporó al servicio de la Insigne y Nacional Basílica de Guadalupe como Capellán de Coro, hasta el año 1989 y posteriormente en 1994, a la fecha. En el Santuario ha sido director y asesor del Centro de Formación de Laicos para Acciones Específicas (CEFALAE) 2003-2004, y dedica buena parte de su servicio al apostolado de las publicaciones, al momento cuenta con alrededor de 80 entre folletos y libros. En breve entrevista nos comparte de su trayectoria. P.- ¿Cómo descubrió su vocación sacerdotal? R.- Pertenecí a una familia muy cristiana y fue por medio de una tía de mi madre cuando por primera vez me dijeron que si aceptaba entrar en un seminario. Yo era un chiquillo y a los once años acepté, ingresé con los hermanos maristas porque ellos mismos me lo 23 Retratos y semblanzas sugirieron. Había estudiado el cuarto y quinto años de Primaria en el Colegio México y paralelamente se me había despertado la simpatía por esta congregación. El profesor Jesús Gil –que en Gloria de Dios esté–, nos invitó a formar parte de un grupo en el que pudiéramos escuchar sobre la vida religiosa marista. El nos echó mucho el anzuelo pero también hubo el estímulo humano que era ir a estudiar a Francia, hay que decirlo. P.- ¿Toda vocación requiere un proceso de maduración? R.- Nunca en un principio logra uno entender la misma vida de Cristo, casi siempre se entra (al Seminario) de joven, antes se entraba hasta de quinto y sexto año de primaria. Pero conforme fue pasando el tiempo, la entrada formal no se permite sino algunas veces y después de haber cursado la preparatoria e inclusive después de algún curso propedéutico. Se pide que el joven haya tenido tiempo de vivir las posibilidades en el mundo, haber tenido amistades, haberse dado cuenta de lo que significa desarrollar una profesión. Una vez que la persona ya adquirió ese conocimiento real de lo que ofrece el mundo y de un estado de vida como el sacerdocio o el matrimonio, ya de una edad mayor es cuando la Iglesia va sembrando, movida por el Espíritu Santo, esa semilla de vida del llamado. Nunca se llega a la profesión perpetua o al diaconado sin antes haberse asegurado, por parte de los superiores, si se encuentran o no las aptitudes que se requieren. Por otra parte uno mismo va reconociendo o no las aptitudes para ejercer ese estado de vida. P.- En dos periodos ha sido Capellán de coro, ¿cómo ha sido su experiencia? R.- Desde luego, estoy encantado de estar aquí, es lo que más ha llenado mis aspiraciones internas, porque no sólo es estar cerca de la Virgen de Guadalupe sino que en general se está cerca del pueblo de México. A través del Sacramento de la Reconciliación me he encontrado un pueblo mexicano que se deja trabajar en lo espiritual. En muchas parroquias se va perdiendo el deseo de recibir a la gente en este Sacramento, desgraciadamente, pero aquí en la Basílica se ha favorecido y se está favoreciendo. Durante el tiempo en que fui encargado de la formación de los religiosos maristas a nivel mundial, tomé experiencia de lo que se hacía en otros países en la dirección espiritual y se me formó la inclinación a estar atento al desarrollo psicológico y cristiano de la persona. Por medio del Sacramento de la Reconciliación Penitencial, aquí he podido intentar el cambio, la transformación de la persona, inclinándola a buscar su madurez cristiana. Le he dado muchísima importancia a la confesión dedicándole tres horas y media diarias. 24 También me he dedicado a preparar lo mejor posible la homilía, he redactado en tres ocasiones lo que podría llamar misales, el primero lo llamé “Guadalupano Explicado”, el segundo lo edite con el nombre de “Misal Guadalupano” y el tercero “Leccionario comentado al día” (…) le pueden servir también a otros sacerdotes. Comunicar el mensaje de la Salvación, la Buena Nueva, es capital para mí, y siempre he procurado darle toda su importancia a las homilías en las misas. P.- Tiene muchas publicaciones, ¿hay alguna línea común en ellas? R.- El aspecto humano y el cristiano, siempre tratados conjuntamente. Es decir, lo que trata de facilitar el desarrollo de todas las cualidades propias del hombre, del cristiano, entra en la línea de lo que escribo. En un principio lo que publicaba lo vendía, estaba destinado a las escuelas, pero últimamente regalo todo en la confesión, algunos dicen que no valen nada pero otros conforme van leyendo pueden descubrir el valor del contenido, si les sirve o no. También he procurado regalarlas a empleados y sacerdotes de la Basílica. P.- ¿Por qué es tan importante la formación integral? R.- En primer lugar, al habernos dado Dios distintos tipos de capacidades, es para que las desarrollemos todas al máximo: (Cristo dijo) “Sed perfectos como yo soy perfecto”, o “Sed santos como yo soy santo”, o por otra parte la frase tan extraordinaria de San Pablo: “Vivo ya no yo, es Cristo quien vive en mí”. Ese es el punto que procuro seguir con las personas, hacerles ver que son miembros del Cuerpo Místico de Cristo y que Él es su cabeza. Y que así como Cristo se entregó totalmente hasta dar su vida, así también nosotros nos tenemos que entregar al servicio de los demás porque sólo en ese don de sí mismo total e integral, conciente y responsable, es cuando uno experimenta que alcanzó su máximo desarrollo. P.- ¿El Evangelio va hacia el desarrollo integral del ser humano? R.- Así es. El evangelio quiere que imitemos a Cristo en ese don que hizo de sí. Tanto nos amó que dio su vida por nosotros, en la cruz demostró el máximo amor (…) nos abrió el Reino de los Cielos para que seamos Dios con Dios, porque desde el Bautismo somos verdaderos hijos en el Hijo, hijos del Padre, hermanos de Cristo y templos del Espíritu Santo, con derecho a sentarse en la mesa del Padre, con derecho a hablar y convivir con Él por los siglos de los siglos. Por lo tanto, al formar parte de la familia divina, todo lo cual quiere decir que nos invita a ser Dios con Dios, nosotros dioses por participación, Él, Dios por sí mismo. P.- Se ve muy contento R.- Así estoy. TONANTZIN GUADALUPE Y LOS INDÍGENAS Fiestividades en honor de San Juan Diego Cuauhtlatoatzin Liliana Jamaica Silva Pastoral Indígena de la Basílica de Guadalupe E l pasado 9 de diciembre de 2005 se realizó en el Santuario de San Juan Diego Cuauhtlatoatzin, ( ubicado en la esquina de avenida Montevideo e Insurgentes Norte), un Programa de festividades en honor al Santo Patrono de los Indígenas y laicos, dentro de estas resaltaron: *La kermés del 27 de noviembre en donde participaron las Vicarias Episcopales de la Arquidiócesis de México: con puestos de antojitos, venta de plantas y artesanías; en donde lo que más se comento fue la convivencia y la armonía entre los participantes y los que disfrutaron lo que ahí se ofreció. *El novenario del 1 al 9 de diciembre, en el que participaron las comunidades indígenas: Mazahuas, Triquis, Macehualmeh, Xochimilco, Papaleños, Purépechas de Santa Fe de la Laguna Michoacán las Comunidades Religiosas que se encuentran cerca del Santuario, Tlapanecos, Otomíes y Danzantes, quienes participaron resaltando la costumbre y tradición, manifestándola con ritos, símbolos y celebraciones especiales de ellos como una manera de orar a Dios a semejanza de San Juan Diego Cuauhtlatoatzin quien se levantaba todos los días muy temprano a barrer la Ermita dedicada a la Niñita Celestial. *La culminación de este novenario se dio el día 9 con las mañanitas, la procesión de la Imagen de san Juan Diego Cuauhtlatoatzin de la Basílica de Guadalupe al Santuario de San Juan Diego y a su llegada dio principio la celebración Eucarística presidida por nuestro Cardenal Dn. Norberto Rivera Carrera, participando en la música una comunidad indígena, con los cantos en náhuatl. Al termino de la celebración, se le invitó al Cardenal y a los obispos que concelebraron a visitar el tianguis de artesanías y antojitos, a lo que accedieronn complacientes, advirtiéndose su alegría (resaltó la presencia de nuestro obispo auxiliar, Monseñor Francisco Clavel Gil quien preside la Comisión de la Pastoral Indígena de la Arquidiócesis de México). 21 Tonantzin Guadalupe y los Indígenas Del 1 al 12 de diciembre, se montó un tianguis de artesanías con productos y comida de distintas comunidades indígenas en la explanada del Santuario de San Juan Diego, cuyo objeto fue apoyar a nuestros hermanos indígenas y próximamente formar con ellos una Red de Distribución Comunitaria dentro de la Pastoral Indígena. Todo lo anterior se logró por la entereza y entrega del Padre. Juan Ortiz Magos, quien es Secretario Ejecutivo de la Pastoral Indígena de la Arquidiócesis de México, que quiso se promoviera el Santuario de San Juan Diego Cuauhtlatoatzin, lugar principal de todos los Indígenas, quienes encontrarán allí el espacio de Celebraciones Indígenas, Evangelización y la manifestación de la grandeza que nuestra Señora del Cielo Santa Maria Tepeyacac quiere para todos, como lo expreso en el Nican 22 Mopohua “Porque, en verdad, yo soy vuestra Madrecita compasiva, tuya y de todos los hombres que vivís juntos en esta tierra y también de todas las demás gentes las que me amen, los que me llamen, me busquen, confíen en mi”. A tres años de su canonización, el santuario se encuentra olvidado y estancado en cuanto a la participación de los indígenas y laicos se refiere. La idea no es sólo que se realice una pastoral de eventos, sino una pastoral permanente. Terminamos recordando las palabras de nuestro Cardenal en su homilía, pronunciada en la Celebración Eucarística de esta fiesta. En ellas hizo referencia la diálogo que sostuvieron el Obispo y el indígena. Que estas palabras nos lleven a la reflexión en torno a este gran mensaje comunicado a nosotros a través de un indígena. RESEÑA Un privilegio sagrado E l Museo de la Basílica de Guadalupe presentó el pasado 8 de diciembre la exposición temporal Un privilegio sagrado: la concepción de María Inmaculada. La celebración del dogma en México. Monseñor Diego Monroy Ponce –acompañado de integrantes de los cabildos de Catedral y Guadalupe– realizó el corte del listón inaugural y dirigió unas breves y significativas palabras a los presentes en la ceremonia, con las cuales agradeció su asistencia y resaltó el esfuerzo de los trabajadores del Museo al preparar la exhibición. La muestra festeja los 150 años de la Inmaculada Concepción de María como dogma de fe, establecido en 1854 por el Papa Pío IX por medio de la bula Ineffabilis Deus. La noticia se conoció en México hasta 1855 y el entonces arzobispo Lázaro de la Garza y Ballestero fue el encargado de organizar los festejos de este privilegio sagrado otorgado a la Madre de Dios. Las 54 obras que conforman la muestra se encuentran agrupadas en seis núcleos temáticos que propone un recorrido histórico-artístico por distintas cuestiones referentes a la Inmaculada Concepción de María. Los primeros cinco núcleos corresponden a la primera parte de la exposición y en ellos se aborda su creación, su defensa, el uso político que de ella se hizo, su aceptación como dogma de fe y su difusión en ámbitos íntimos y privados. El último núcleo corresponde a la segunda parte y allí se muestra un completo mosaico de iconografía inmaculista, que a través de obras de los más importantes artistas nos ofrecen un recorrido por las variantes más destacadas e importantes en las representaciones plásticas de la Inmaculada Concepción. La curaduría académica de la exposición fue realizada por el departamento de investigación del Museo integrado por los historiadores Iván Martínez, Martha Reta y Lenice Rivera, quienes idearon el guión museológico, la 25 Reseña selección de piezas y la investigación históricoartística. La curaduría técnica de la muestra y el montaje museográfico corrió a cargo de Jorge Guadarrama –director del recinto– apoyado por el equipo de trabajo del Museo, resaltando la labor del Sr. José Cardona Betancourt. La muestra está acompañada de un libro, en una edición bilingüe español-inglés profusamente ilustrada, que con rigor académico aborda la problemática inmaculista. La exposición puede ser apreciada en las instalaciones del Museo de la Basílica de Guadalupe, de martes a domingo en un horario de 10 am a 18 pm, para mayor información y visitas guiadas especiales comunicarse al 55 77 60 22 ext. 137. 26 PASTORAL Misión Evangelizadora Guadalupana FOTO: Lic. Concepción Jiménez en la Diócesis de Puerto Plata, República Dominicana Lic. Ma. Concepción Castillo de Jiménez Secretaria Ejecutiva de la Pastoral General del Santuario U no de los proyectos de la IN Basílica de Guadalupe en este Año Jubilar, con motivo de los 475 años de las apariciones de la Virgen, es el de seguir formando y enviando misioneros a nuestra Ciudad, a la Republica y al Mundo entero. Una de estas primicias fue el envío de un matrimonio a la Republica Dominicana. A continuación presentamos la crónica de esta misión. El pasado mes de diciembre, con el envío cariñoso y fraternal de Mons. Diego Monroy Ponce, Rector del Santuario, iniciamos en el marco del Año Jubilar, la primera Misión Guadalupana fuera de nuestra Patria, del 3 al 14 de diciembre del 2005, en atención a la invitación de Mons. Julio César Corniel Amaro, Obispo de la Diócesis de Puerto Plata, República Dominicana. Esta misión se realizó para promover la devoción a Santa María de Guadalupe en la isla caribeña. Como testimonio de esta acción pastoral quedó, en un farallón que domina la costa del Caribe, la imagen monumental de nuestra Madre del Cielo, donada por los cancunenses, a la comunidad de “La Cantera”, perteneciente a la Parroquia de Nuestra Señora de las Mercedes en Ciudad Gaspar Hernández. El celo evangelizador que caracteriza a Mons. Diego Monroy Ponce nos animó a Javier, mi esposo, y a una servidora, quienes como matrimonio misionero guardamos en nuestro corazón las palabras que nos dijo cuando nos envió y nos dio su bendición “Vayan, lleven las rosas del Tepeyac y enamoren a los dominicanos de la Virgen de Guadalupe”. Al llegar a la diócesis de Puerto Plata fuimos recibidos con mucha amabilidad y alegría, por su obispo, Mons. Julio César Corniel y por los padres Bernardo y Juan, párroco y vicario de la parroquia de Ntra. Sra. de las Mercedes, quienes manifestaron su gratitud a Dios y a la Virgen María por estar con ellos y por recibir la imagen, copia fiel del sagrado original, enviada por Mons. Diego Monroy, para que peregrinara durante la misión y después se quedará en la Catedral. Desde la primera reunión presidida por el Señor Obispo, se especificaron las actividades misioneras preparatorias a la solemne bendición 27 Pastoral de la Imagen de nuestra Señora de Guadalupe en el farallón dominicano. Señalamos algunas que realizamos del 3 al 10 de diciembre. a) Difusión del Acontecimiento Guadalupano en los medios de comunicación, asistiendo a los programas televisivos más importantes: Noticiero matutino “Punto por Punto”, el programa vespertino “Con Yadira” y el “Noticiero de Luciano Vázquez”, que en horario nocturno es el de mayor audiencia. En todos ellos se transmitió el video-mensaje que llevamos de parte del Rector de la Basílica. FOTO: Lic. Concepción Jiménez b) Anuncio del Hecho Guadalupano en las comunidades: “El Cangrejo”; “Tres Ceibas”, “La Yahua”, “Río San Juan”, “Monasterio de la Visitación”, entre otras. c) Promoción y proclamación del amor maternal de Guadalupe, en colegios los católicos: “Instituto San José”, “Colegio San Felipe” y en escuelas de “La Cantera”, contando siempre con el entusiasta apoyo del P. Santiago Rodríguez. El domingo 11 de diciembre por la mañana, auxiliados por un equipo móvil de sonido y una camioneta descubierta, reiteramos la invitación de los días previos para que la comunidad nos acompañara por la tarde a la “Serenata a la Virgen de Guadalupe”. Al escuchar los cantos a la Virgen, 28 salían los lugareños (niños, jóvenes adultos y ancianos) y con el grito de “Viva la Virgen de Guadalupe” poco usual en esas tierras, daban su asentamiento a la invitación proclamada. A las 18:00 hrs. en punto, iniciamos nuestra oración, no importando las inclemencias del tiempo (fuimos bendecidos por una gran tormenta), ni las dificultades para llegar al farallón, donde ya estaba colocada la imagen monumental de la Santísima Virgen de Guadalupe, de 14 metros de altura, 6 de ancho y dos de profundad. No dejaban de subir los niños, jóvenes, adultos y familias completas a festejar a la “Madre del Verdadero Dios por quien se vive”. La Serenata inició con el rezo del Santo Rosario con la participación destacada de niños y jóvenes, que con sus cantos, al ritmo de merengue y al son de la tambora y las guitarras, homenajeaban a la Señora de Cielo. Este acto culminó con el canto de las tradicionales “Mañanitas” a la Virgen, poco usuales en ese país, que fueron conducidas por Javier Jiménez y el matrimonio dominicano de “Franklin y Nena”. Ellos, junto con los presentes, cantaban una y otra vez “las Mañanitas”, acompañadas de “¡Vivas! a la Virgen de Guadalupe y a Cristo Rey. Ya casi a la media noche y como un regalo de Mons. Julio César Corniel contamos con fuegos pirotécnicos que enmarcaron con gran hermosura a la imagen de la Virgen de Guadalupe en el farallón de “la Cantera”. El 12 de diciembre, la cita fue a las 14:00, a la vera de la carretera, se inició la primera peregrinación hacía el farallón, la cual era encabezada por jóvenes que personificaban a san Juan Diego, a una indígena y a la Virgen de Guadalupe, les seguía la Imagen Peregrina de la Virgen de Guadalupe llevada por mujeres y niños. Dicha peregrinación concluyó a los pies de la imagen monumental, donde nos esperaba Mons. Corniel, acompañado de su presbiterio y del equipo de liturgia. A las 15:00 hrs., dio inicio la Eucaristía Solemne con el canto de entrada “La Guadalupana”. Dentro de su homilía el Obispo, con gran emotividad, agradeció al Rector de la Basílica su oración, apoyo y envió de los misioneros guadalupanos y exhortó a la comunidad a orar mediante el rezo diario del santo Rosario para que en breve se le edifique ahí, a la Virgen de Guadalupe, en la “Cantera de Gaspar Hernández” “una casita” para que Ella haga realidad sus palabras y les muestre al Verdaderísimo Dios por quien se vive, el dueño del cerca y del junto, el Pastoral dueño del Cielo, el dueño de la Tierra…(Nican Mopohua 26). También destacó la importancia de construir no sólo el templo material sino sobre todo la “casita espiritual en cada corazón de los dominicanos”. Antes de la bendición final se escenificaron las apariciones de la Virgen de Guadalupe, dejando en el corazón de cada uno de los fieles el ¡compromiso misionero evangelizador! La fe compartida ahora nos hace exclamar “¡La Diócesis de Puerto Plata, es Flor y Canto del Tepeyac!”. El 14 de diciembre concluyó nuestra misión guadalupana en República Dominicana. Rogamos que sus frutos espirituales sean llevados por Santa María de Guadalupe, a Cristo Jesús, el Señor. ¡Gracias Diócesis de Puerto Plata ahora Guadalupana! ¡Gracias Mons. Julio César Corniel Amaro ahora Obispo Guadalupano! ¡Gracias Hermanos Dominicanos, ahora también Guadalupanos! ¡Gracias Mons. Diego Monroy Ponce Rector de Guadalupe, por su entrega pastoral y compromiso misionero! ¡Gracias Virgencita de Guadalupe por darnos y llevarnos siempre a Jesucristo, nuestro Señor! FOTO: Lic. Concepción Jiménez Otro gran regalo de la Santísima Virgen de Guadalupe, lo recibimos en la ciudad de Santo Domingo, por manos del P. Nelson Clark, Rector del Santuario de Nuestra Señora Altagracia, quien personalmente nos narró la historia de la Virgen Altagracia, dándonos un recorrido por todo el Santuario hasta llegar al altar donde admiramos la delicada hermosura de la imagen que ahí se venera. En medio de su homilía, el P. Nelson, nos pidió compartir el Acontecimiento Guadalupano, el cual fue recibido con mucha atención y devoción por toda la feligresía asistente. 29 PEREGRINACIONES Peregrinaciones de Arquidiócesis y Diócesis de México en el 2006 Año Jubilar Guadalupano ENERO Día 14 18 21 23 27 Hora 12:00 18:00 13:00 07:00 12:00 Peregrinación de: Arquidiócesis de México Diócesis de Zamora Diócesis de Tula Diócesis de Apatzingán Diócesis de Cuauhtémoc Maderas FEBRERO 4 5 9 12 16 10:00 10:00 10:00 11:00 10:00 Arquidiócesis de Tlalnepantla Diócesis de Tehuacan Diócesis de Chilpancingo Chilapa Arquidiócesis de Puebla Diócesis de Toluca MARZO 16 10:00 Diócesis de Tlapa ABRIL 18 18 19 23 26 27 10:00 12:00 10:00 10:00 10:00 12:00 Diócesis de Autlán Diócesis de Ciudad Guzmán, Jalisco Diócesis de Huajuapan de León, Oaxaca Diócesis de Huejutla Arquidiócesis de Acapulco Arquidiócesis de Guadalajara MAYO 1 3 8 12 13 16 16 17 21 23 23 25 28 31 30 10:00 12:00 10:00 10:00 10:00 10:00 12:00 10:00 11:00 10:00 12:00 11:00 12:00 10:00 Diócesis de Ciudad Nezahualcoyotl Arquidiócesis de Xalapa Diócesis de Tacámbaro Michoacán Arquidiócesis de Oaxaca Diócesis de Ciudad Altamirano, Guerrero Diócesis de Lázaro Cárdenas Diócesis de Veracruz Diócesis de San Juan de los Lagos, Jalisco Diócesis de Tepic Diócesis de Tuxtepec Oaxaca Diócesis de Papantla Veracruz Diócesis de Tuxpan Veracruz Diócesis de Chiapas Diócesis de Cuernavaca Morelos Peregrinaciones JUNIO 7 12 12:00 10:00 Diócesis de Orizaba, Veracruz Arquidiócesis de Durango JULIO 8 8 11 12 14 16 16 18 18 20 20 22 22 25 26 27 28 30 10:00 13:00 10:00 10:00 10:00 10:00 12:00 10:00 12:00 11:00 13:00 10:00 12:00 10:00 12:00 10:00 10:00 10:00 11:00 10:00 10:00 5 9 12:00 10:00 06:00 10:00 10:00 11:00 Peregrinación Femenil de Morelia Arquidiócesis de Monterrey Diócesis de Mazatlán Diócesis de Culiacán SEPTIEMBRE Diócesis del Valle de Chalco Diócesis de Ciudad Obregón Diócesis de Coatzacoalcos Arquidiócesis de Yucatán Diócesis de Ciudad Juárez Diócesis de Tehuantepec Diócesis de Querétaro Diócesis de San Andrés Tuxtla Diócesis de Piedras Negras Diócesis de Tijuana, Mexicali y La Paz Diócesis de Parral Arquidiócesis de Hermosillo Diócesis de Saltillo Prelatura de Cancún-Chetumal Diócesis de Nuevo Casas Grandes Arquidiócesis de Chihuahua Dióesis de Nuevo Laredo Diócesis de Tabasco AGOSTO 1 2 5 11 12 13 20 Diócesis de Tarahumana Diócesis de Linares Diócesis de Tamaulipas, Tampico Cd. Victoria y Matamoros Diócesis de Campeche Diócesis de Torreón 2 12 10:00 10:00 Diócesis de Ecatepec Diócesis de Zacatecas OCTUBRE 8 10 11 15 18 19 20 06:00 07:00 07:00 10:00 10:00 12:00 11:00 Diócesis de Irapuato Diócesis de Celaya Arquidiócesis de Morelia Diócesis de León Diócesis de Ciudad Valles Diócesis de Colima Diócesis de Atlacomulco NOVIEMBRE 4 8 8 11 14 19 23 11 17:00 07:00 11:00 11:00 10:00 10:00 10:00 17:00 Diócesis de Matehula Diócesis de Apatzingan Diócesis de Tulancingo Diócesis de Tlaxcala Diócesis de Texcoco Diócesis de Aguascalientes Diócesis de Cuauhtitlán Arquidiócesis de San Luis Potosi DICIEMBRE 8 11:00 Diócesis de Tulancingo 31 Peregrinaciones Vicarías de la Arquidiócesis de México en el Tepeyac L aicos, sacerdotes, seminaristas, los vicarios episcopales de los territorios pastorales de la Arquidiócesis de México, encabezados por el Emmo. Sr. Cardenal Norberto Rivera Carrera, participarán en la magna peregrinación que se llevará a cabo el próximo 14 de enero y culminará con la Celebración Eucarística en el atrio de la Basílica, a las 12:00 horas. Como cada año, los participantes se congregarán en la ex Glorieta de Peralvillo para luego realizar la caminata en oración comunitaria por el pueblo, en la Calzada de Guadalupe, arribando al Santuario unos minutos previos a la Celebración. Esta peregrinación marca el inicio del año pastoral para la Arquidiócesis, con el mensaje del Emmo. Sr. Cardenal Norberto Rivera Carrera, que continúa las líneas establecidas por el Plan Arquidiocesano, mismo que tiene sus bases en el Sínodo Arquidiocesano y se actualiza año con año en conjunto entre agentes pastorales, sacerdotes y obispos, durante la Asamblea de la Arquidiócesis. 32 Alrededor de 20 mil personas acuden a esta magna concentración de la fe para refrendar su amor a la Madre Morena y, muchos de ellos, para reafirmar su compromiso pastoral, atendiendo los caminos discernidos por la comunidad eclesial. Destaca la presencia del numeroso grupo de jóvenes del Seminario Conciliar. Cada uno de los ocho Territorios Pastorales va encabezado por su Vicario Episcopal y los participantes llevan un distintivo del color que distingue ya a cada Vicaría: I Vicaría: Santa María de Guadalupe, color blanco II Vicaría: Cristo Rey, color Rojo III Vicaría, San Felipe de Jesús, color naranja IV Vicaría; San Miguel Arcángel, color naranja V Vicaría: San Pedro Apóstol, color verde VI Vicaría: San José, color azul VII Vicaría: San Pablo Apóstol, color morado VIII Vicaría: San Juan Bautista, color rosa. DECRETO Año Jubilar Guadalupano P resentamos el facsímil del decreto de Mons. Hipólito Reyes Larios, Obispo de Orizaba, por el cual declara el año 2006 como Año Jubilar Guadalupano en su diócesis. 33 AÑO LITÚRGICO Anuncio de las Celebraciones Móviles del año 2006 Lic. Ángel Roa Hernández Q ueridos hermanos: La gloria del Señor se ha manifestado y se continuará manifestando entre nosotros, hasta el día de su retorno glorioso. En la sucesión de las diversas fiestas y solemnidades el tiempo, recordamos y vivimos los misterios de la salvación. Centro de todo el año litúrgico es el Triduo Pascual del Señor crucificado, sepultado y resucitado, que este año culminará en la Noche santa de Pascua que, con gozo, celebraremos el 16 de abril. Cada domingo, Pascua semanal, la santa Iglesia hará presente este mismo acontecimiento, en el cual Cristo ha vencido al pecado y a la muerte. De la Pascua fluyen, como de su manantial, todos los demás días santos: El Miércoles de Ceniza, comienzo de la Cuaresma, que celebraremos el día primero de marzo. La Ascensión del Señor, que este año será celebrada el día 28 de mayo. El Domingo de Pentecostés, que este año celebraremos el 4 de junio. El primer domingo de Adviento, que celebraremos el día 3 de diciembre. También en las fiestas de la Santísima Virgen María, Madre de Dios, de los Apóstoles, de los santos, y en la Conmemoración de todos los fieles difuntos, la Iglesia peregrina en la tierra, proclama la Pascua de su Señor. A Él, el Cristo glorioso, el que era, el que es y el que vendrá, al que es Señor del tiempo y de la historia, todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos. Amén. Tomado del Calendario Litúrgico Pastoral 2006, Obra Nacional de la Buena Prensa, A. C. 34 ACTIVIDADES DE FEBRERO 2006 MISAS Y PEREGRINACIONES Día 02 04 05 07 08 09 11 12 14 15 Hora 09:00 20:00 07:45 10:00 10:00 14:00 07:00 19:00 10:00 12:00 06:00 13:00 14:00 05:00 06:00 07:45 09:00 10:00 11:00 09:00 12:00 10:00 18:00 16 17 19 21 22 24 25 26 21:00 10:00 10:00 07:00 09:00 11:00 14:00 15:00 13:00 11:00 13:00 10:00 15:00 17:00 10:00 12:00 Eucaristía y Bendición de Candelas Día de la Vida Consagrada Pintores de México Rosas del Tepeyac de San Pedro Huytentan, Puebla Arquidiócesis de Tlalnepantla Diócesis de Tehuacáwn Cabecera Municipal de Naucalpan de Juárez Locatarios Chilpancingo, Chilapa a pie Barrio de Tzocuilac Tecali, Puebla Diócesis de Chilpancingo Parroquia de Santa María de Guadalupe Benito Juárez Tepeaca, Puebla Colonia Cordero Serdán Guadalupe Victoria, Puebla Comunidades Religiosas y Parroquia San Hipólito Xochitengo, Puebla Los Reyes de Juárez Puebla San Nicolás de los Ranchos, Puebla Peregrinación Guadalupana de Quecholac, Puebla Peatones Guadalupanos Siglo XX San Bartolomé, Tesuapan Palmato y Quecholac, Puebla San Pablo de las Tunas, San Antonio Portezuela Santo Tomás Chautla Puebla Arquidiócesis de Puebla San Jerónimo Amanalco, Texococo Santa María de los Reyes Huatlatlauca, Pue. Apostolado de la Oración Social del Sagrado Corazón de Jesús Congreso Internacional de Historia de la Obra Salesiana Adoración Nocturna de Toluca Diócesis de Toluca Colegio Miguel Hidalgo de Puebla Carmelitas de Huejotzingo Universidad Popular Autonoma del Estado de Puebla San Miguel Tecamachulco Guadalupana Benito Juárez Tlaxcala Unidad Habitacional Crisantemo 13 Tianguistas la Guadalupe Colegio Liceo del Valle de Toluca Obras y Servicios Sección 32 Hijas de María Inmaculada de Guadalupe Santa María Tultepecel. Sistema Integral de la Nueva Evangelización, SINE Guardias de Honor de Nuestra Señora de Zapopan, Jalisco Nacional de Motociclistas MISA TELEVISADA Trasmite XHTV Canal 4 22 de enero de 2005 9:00 hrs. AYÚDENOS A QUE ESTE BOLETÍN LLEGUE A MÁS PERSONAS Donativos a la cuenta 00102993104 de Scotiabank Inverlat a nombre de Basílica de Guadalupe, A. R. Informes: Lic. Ángel Roa Tel.: (0155)5577- 6022 ext. 161