The Montgomery County - Montgomery County Public Schools

Transcripción

The Montgomery County - Montgomery County Public Schools
a mi
c a s a ... creo.
Por Sharon Burleson, Clarksburg, WV
Bienvenido a mi casa. Creo, es decir, tal vez sea bienvenido. No estoy segura. Cuando lo llegue a conocer, lo sabré
con certeza. Mi hijo tiene una discapacidad, por lo que necesito ayuda para hacer todas las cosas que él necesita
tener hechas. Así que lo necesito. Él también lo necesita, porque se cansa y se aburre de mí, y a veces le desagrado
así como a veces él me desagrada a mí (por favor, no empiece a juzgarme… recién empezamos. Solo estoy siendo sincera y, aunque él sea
la única razón de mi existencia, hay veces en las que ambos nos agotamos).
Hola.
Su agencia lo envió aquí. Yo llamé para pedir ayuda, pero no tengo elección respecto de quién viene a mi casa y a mi vida. Usted viene
cuando le resulta cómodo, generalmente de lunes a viernes entre las 9 a. m. y las 3 p. m. Estoy sola por las noches y los fines de semana,
cuando mis hijos mayores me reclaman, y piden, y se sienten desairados y ofendidos, y yo creo que no doy más. Usted llama y me dice que
viene el martes al mediodía. Entonces, pongo la pila de correo sin contestar y las facturas sin pagar en el mueble con los tazones de
cereales; subo y bajo las escaleras llevando y trayendo ropa sucia y limpia; meto juguetes y zapatos sin el par en los armarios y debajo de
las camas, y refriego con limpiador para borrar las marcas de dedos en todos los objetos, y luego llama y me dice que tiene que cancelar
debido a una reunión. Sí, seguro, comprendo... sí, está bien, ¿el viernes a la tarde? Bueno, pensaba ir a la biblioteca y quizás dormir una
siesta… ¿qué? Ah, ¿ese es el único día que puede? Seguro, sé que es importante que venga. Y verdaderamente necesito ayuda. Bien. El
viernes a la 1.30 p. m. Aquí estaremos.
A mi marido le molesta que haya gente entrando y saliendo de nuestra casa. Dice que siente como si viviera en una pecera. Dice que
obtener ayuda implica sacrificar nuestra privacidad y espontaneidad. Ya no se puede rascar la barriga mientras camina por el pasillo en
calzoncillos. Ahora, tiene que tener ropa puesta, apretar la barriga y comportarse como corresponde delante de las visitas. Y en verdad
odia cuando usted se va, porque a veces lloro porque me siento fuera de lugar y estúpida y tonta y simplemente equivocada. A veces usted
me hace sentir de esa manera cuando actúa como si desconfiara de lo que sucede cuando no está aquí e intenta hacer que meta la pata
cuando hablamos, para saber si verdaderamente cumplo las metas y los objetivos, o si solo tomo el dinero y falsifico los papeles. A veces,
no es nada que usted diga o haga, es solo que su perfección pone en duda mi capacidad cómo madre.
En ocasiones, cuando usted es genial, me siento amenazada y, por culpa de otros que vinieron antes que usted, me siento juzgada y
criticada, como si se hubiera reunido con los otros y hubieran creado un plan para que yo deba seguir.
No siempre puedo darme cuenta cuándo usted es auténtico, pero mi hijo sí. Así que obsérvelo. Si responde y lo recibe bien, entonces dejo
de lado mis necesidades y cuidados, y le dejo tener todo lo que yo tengo, incluido mi hijo. Tengo que confiar en usted porque él confía y
espera oír sus pasos en la entrada.
¿Qué? ¡Ay, Dios mío! ¡Me volví a olvidar de sus papeles! Espere, sé que están aquí en algún lado. Estuve trabajando con ellos la semana
pasada, justo después de que estallara el calentador de agua y justo antes de que mi marido volviera a casa despedido del trabajo.
Espere… creo que escribí en la parte de atrás cuando llamó el banco sobre el depósito para cubrir el sobregiro. ¡Sí! ¡Los encontré! Justo
detrás de la mantequilla de maní… Espere que los limpie un poco.
Comprenda, antes yo era normal. Solía tener el control de mi vida, mi tiempo, mi casa. Tener un hijo con una discapacidad cambió mi vida
por completo. Cambiaron mis prioridades. Cambió lo que me conformaría. Cambió lo que pediría. Cambió a quienes aceptaría. Todo eso
cambió porque mi hijo necesita cosas, personas e ideas, y financiación. Así que mi vida consiste en reuniones, normas, documentación y
papeles; trabajadores sociales y personas de agencias; políticas y manuales de procedimiento y decisiones administrativas; demoras y
rumores de demoras en los cheques; personas que no aparecen cuando se las necesita, personas que renuncian y personas que aparecen
cuando no se las necesita.
Por favor, no me juzgue. Y yo trataré de no juzgarlo a usted. Verá, a fin de cuentas, si no estoy a la altura de las circunstancias, sigo siendo
su madre. Así que nos tenemos que soportar mutuamente, y estoy dispuesta a intentar sacar lo mejor de eso. Ayúdeme a crecer, ayúdeme
a mejorar. Acépteme como una persona, no como una santa perfecta. En verdad, YO conozco a mi hijo mejor que nadie, así que ayúdeme
a expresar eso y a aprovecharlo. Camine conmigo, no para juzgarme, sino para comprender mi rol en el corazón de mi familia. Deme las
herramientas, las palabras y las personas que, al igual que las piezas de un rompecabezas, se unen para destacar mis fortalezas y
compensar mis defectos.
Por favor, no me exija más de lo que puedo soportar porque, si lo hace, verá lo peor de mí: malhumor, impaciencia, inflexibilidad e histeria.
Así no le sirvo a mi hijo. Todos tenemos límites. Intento reconocer cuándo me estoy acercando al mío y, por lo general, es ahí cuando me
pongo más malhumorada y me quejo. Dese cuenta de que una de mis facetas es la de bruja cansada, que es tan real y aceptable como la
de supermujer que supera obstáculos increíbles. Hay muchos días de sol, pero también hay tormentas… todo es parte de un clima
templado.
De todas formas, hola. Bienvenido a mi casa... creo.
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Hola. Estoy yendo
a
casa
.
Valerie Carter, Fisioterapeuta, sucursal MCITP Down County Site
Hola
Gracias por recibirme en su casa. Tengo muchas ganas de trabajar con usted y con su familia. Yo elegí
esta profesión y me importa el impacto que pueda tener en la vida de su familia. Espero que, a
medida que pasemos más tiempo juntos, cultivemos un sólido respeto y afinidad por el otro. Sé que
ambos queremos lo mejor para su hijo e intentaré actuar con esas intenciones. Si acordamos confiar
mutuamente, seremos un gran equipo.
¿Está listo para empezar?
Adoro trabajar con niños y creo que puedo tener un impacto positivo en sus vidas. En particular, me encanta la
emoción de enseñarles una habilidad nueva y observar cómo se llenan de alegría los rostros de los padres. Sé que el
camino por recorrer puede resultar desafiante a medida que vayamos aprendiendo las fortalezas, las debilidades, los
puntos vulnerables y los límites de cada uno, pero estoy segura de que, si recordamos nuestra meta final, tendremos
éxito. Ambos deseamos que su hijo y su familia alcancen su máximo potencial.
Mi agencia me envió aquí. Hago todo lo posible por trabajar dentro de su estructura y satisfacer, al mismo
tiempo, las necesidades humanas de las familias a las que presto servicios. Cumplo con los horarios lo mejor que puedo,
pero a veces surgen cosas imprevistas. Siempre le avisaré con la mayor anticipación posible en caso de que deba
reprogramar la visita.
Muchas veces me asombra lo “organizados” que parecen usted y su casa. En particular, si pienso en el lío que pude
haber dejado en la mía. Recuerdo un día raro en el que se invirtieron los papeles y una mamá tuvo la oportunidad de ver mi
casa. Me llevó hasta allí para buscar un juego extra de llaves del auto (no pregunte por qué). Cuando abrí la puerta de par
en par, me volví hacia ella con una risita consciente. Créame, después de eso, quedamos en igualdad de condiciones.
Valoro y respeto el rol de experto que desempeña en la vida de su hijo. Tenemos mucho que aprender uno
del otro. Yo le puedo ofrecer educación y capacitación en mi área, y usted me puede ayudar a aplicarlas a su familia.
Mediante la observación del lenguaje corporal y de señales, probaré y descifraré qué funciona y qué no cuando se trata
de su hijo, incluso cuando no se exprese con palabras. Comprendo que usted tiene muchas exigencias en cuanto a su
tiempo y no espero perfección. Por supuesto que yo no soy perfecta.
Me doy cuenta de que posiblemente se sienta abrumado por la cantidad de profesionales con los que interactúa
y que es posible que esté bajo mucha presión. A veces, puede que note su “cara de póquer” y, otras veces, quizás usted
esté completamente relajado.
Espero que confíe en que seré consciente de los roles que cumplimos en la vida de cada uno sin importar las
circunstancias. Si comparto información personal con usted es porque creo que es útil, no porque quiera centrarme
en mí misma.
Si parezco descolocada, discúlpeme. Siempre intentaré darle lo mejor de mí, pero es posible que a veces no
cumpla con las expectativas. Como le puede pasar a usted, cuando tenga demasiadas exigencias cuanto a su tiempo
como para poner en práctica lo que le enseño. Espero que celebremos nuestros éxitos y perdonemos nuestras fallas.
Nos estamos por embarcar en una colaboración inusualmente intensa. La mayoría de las personas nunca
tendrán el tipo de experiencia que estamos por comenzar juntos. Dependemos uno del otro para trabajar como un
equipo en beneficio de su hijo. Crezcamos en nuestros respectivos roles
en honor a su hijo y a su familia.
Hola. Gracias por recibirme en su casa.
Ahora, ¡empecemos! 
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