Cameron queda totalmente marginado en la UE.

Cameron queda totalmente marginado en la UE.

CAMERON QUEDA TOTALMENTE
MARGINADO EN LA UE.
JUNCKER AUPADO A LA
PRESIDENCIA DE LA COMISION
EUROPEA CON EL APOYO DE 26
ESTADOS.
Ramón Lavín
Analista de Funciva.
J
ean-Claude Juncker será, después del refrendo que le dará
con toda probabilidad el pleno del Parlamento Europeo, el
próximo presidente de la Comisión Europea durante los cincos
años venideros. David Cameron a pesar de una agresiva y
maleducada campaña en contra, solo logró el apoyo de un
correligionario de Juncker, el popular Víctor Orban, primer
ministro húngaro, que no le ha votado en represalia por la
campaña que hizo la comisaria luxemburguesa de la Comisión
de Barroso contra el gobierno húngaro por razones políticas.
Todos los demás miembros del Consejo Europeo han dado su
apoyo al ex primer ministro de Luxemburgo, el político más
longevo de la UE.
El nuevo presidente designado de la Comisión Europea,
después de que sea ratificado con el voto del pleno del
Parlamento Europeo el próximo 16 de julio formará su equipo
de comisarios en colaboración con los Estados miembros,
deberán recibir la investidura del Parlamento y entrarán
en funciones el 1 de noviembre de 2014. Para el resto de
nombramientos a designar, la presidencia del Consejo Europeo
y el Alto Representante para la Política Exterior de la UE, los
líderes europeos han decidido volver a reunirse en Bruselas
el 17 de julio, el día siguiente del nombramiento de Juncker.
Juncker, viejo zorro de la política europea, inicia ahora
negociaciones con los grupos políticos del Parlamento
Europeo, los dos más grandes populares y social-demócratas
ya le han dado su apoyo, para definir el programa de gobierno
del ejecutivo comunitario. Además deberá tener en cuenta
la “agenda estratégica” para los próximos cinco años que el
presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ha
pactado con los líderes europeos.
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Con Juncker en la presidencia de la Comisión
Europea se abrirá una fase de tirantez con Reino
Unido, después de la campaña difamatoria que los
medios de comunicación británicos han desplegado
en las últimas semanas. Cameron se ha comprometido
a organizar un referéndum en 2017 sobre la
permanencia de su país en la UE, después de haber
renegociado las condiciones de adhesión a la UE.
Pero nada permite asegurar que el primer británico
esté en el poder después de las elecciones del año que
viene, ni nada permite prever que entretanto vaya a
conseguir cambios importantes en las relaciones de
Reino Unido con la UE. “Creo que el interés de Reino
Unido es reformar la UE, celebrar un referéndum
sobre esta reforma y entonces yo recomendaré que
permanezcamos en la UE, aunque ahora todo esto va
ser más difícil”, dijo Cameron.
El grave pecado de Jean-Claude Juncker para los
británico es su “pedigrí” pro-europeo afirmado y
demostrado durante casi veinte años en el poder de
su país, lo que hace además ser uno de los mejores
conocedores del engranaje comunitario. El tradicional
pragmatismo inglés, apareció cuando después de su
amplia derrota el primer británico afirmó al final
de la reunión, “tenemos que aceptar el resultado y
Reino Unido va a trabajar ahora con el presidente
dela Comisión Europea, pero seamos claros es un día
triste para Europea, pues hay un gran riesgo de que se
debilite el poder de los estados nacionales”. Cameron
se apoya también en la creciente ola anti –europea en
Reino Unido, al contrario del europeísmo del nuevo
presidente de la Comisión Europea. Los últimos
sondeos muestran que casi un 43% de los británicos
está en contra de Juncker.
Solo cedió en esa frase, para poder utilizar los
márgenes de flexibilidad que el Pacto ya reconoce.
Las conclusiones recogen también una frase
significativa: “respetamos el Pacto de Estabilidad y
Crecimiento”, lo que significa aseguró la canciller
alemana, que el Pacto es totalmente válido. Sin
embargo los populares aceptaron una demanda
social-demócrata, el presidente de la Comisión deberá
favorecer el crecimiento. Además se insta a hacer el
mejor uso posible de los fondos estructurales de la
UE, a movilizar la financiación privada y pública,
incluyendo las posibilidades del Banco Europeo de
Inversiones (BEI) y se reconocen como inversiones
prioritarias le financiación de las infraestructuras de
transporte, de energía, de telecomunicaciones, así
como en la eficacia energética, la innovación y la
educación.
Durante los dos días de contactos entre los Jefes de
Estado o de Gobierno de la UE, los líderes socialdemócratas insistieron y han logrado que en las
conclusiones de la reunión se reconozca lo importante
que es hacer “una mejor utilización” del margen de
flexibilidad que permite el Pacto de Estabilidad, que
rige el control de los déficits públicos y de deuda
pública autorizados en la UE. Los socialistas deseaban
que se flexibilizase el Pacto, pero en esto la canciller
alemana, Angela Merkel, se mostró intratable.
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