El futuro de la

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Opinión
El futuro de la MARCA
CATALUNYA en el mundo
Uno de los objetivos estratégicos que se prevén
en el Plan de la Acción Exterior, aprobado el
pasado mes de marzo, es el despliegue de una
estrategia de diplomacia pública que contribuya a proyectar una imagen de Cataluña al mundo coherente y sólida.
La diplomacia pública moderna camina de forma independiente
pero complementa y enriquece la diplomacia tradicional, entendida como las relaciones que se mantienen únicamente entre gobiernos estatales y de gobierno a gobierno. La diplomacia pública
busca respuestas a las preguntas relativas a cómo nos ve el resto
del mundo, cómo se nos percibe y por qué y, sobre todo, si se nos
ve igual a como nos percibimos.
Una nación, una identidad, lo es porque cumple todas las condiciones internas para serlo, porque se diferencia de las otras. Pero también lo es porque las demás la reconocen. Precisamente por ello, la
promoción exterior es fundamental para cualquier nación, y aún
más en un mundo esencialmente global, globalizado, donde la
existencia se ratifica por el reconocimiento de los otros.
“Catalonia, the land of Barcelona” fue el eslogan que el Govern utilizó en la Expo de Shanghai de 2010. Conscientes de la potencia
que tiene la marca Barcelona, se quiso aprovechar para dar a conocer Cataluña, que todavía no cuenta con una marca propia ni un
alto grado de conocimiento y reconocimiento en el exterior.
El Govern de Catalunya, consciente de este déficit, ha iniciado un
trabajo dirigido a consensuar aquellos activos y valores clave que
constituyen la base de la competitividad identitaria de Cataluña y
que debe concluir con la concreción de una Marca Catalunya. Sus
principales atributos se describen en el Plan de la Acción Exterior:
• Una voluntad de autogobierno como expresión de la identidad propia, caracterizada por 650 años de Generalitat, 1.000
años de historia, un sentimiento de identidad propia, el autogobierno, el Estatut d’Autonomia o la mediterraneidad.
• Una tradición empresarial y una economía abierta e innovadora, que se caracteriza por una economía fuertemente internacionalizada (72%), 14.000 empresas catalanas con exportaciones
regulares, 300 multinacionales catalanas, 39 centros de investigación, más de 300 empresas en el ámbito de la biotecnología, 200
hospitales, más de 3.000 empresas extranjeras establecidas en
Cataluña, 6.000 estudiantes internacionales en Cataluña y 4.000
estudiantes catalanes en todo el mundo, 4 puertos y 2 aeropuertos
internacionales y productos singulares como el aceite o el cava.
• Una sociedad civil comprometida y cohesionada, activa y
comprometida, capaz de movilizarse, una política de cooperación al desarrollo pionera, un país de acogida y convivencia de más
de 300 lenguas, 13 confesiones religiosas y 180
nacionalidades, 200 entidades civiles internacionalizadas, una sociedad
defensora de la pluralidad
cultural y lingüística, la
igualdad y la promoción de la paz y los derechos humanos, y comprometida con los retos actuales de seguridad humana como el
medio ambiente, el cambio climático o la inmigración.
• Una cultura universal y singular, que se caracteriza por la relevancia de Barcelona como capital cultural internacional, una
importante producción cultural, científica e industrial con lengua
propia, que es la decimotercera en número de hablantes en la UE,
es oficial fuera de Cataluña y cuenta con el reconocimiento de las
Naciones Unidas y la Unión Latina, con 160 lectorados de catalán
en el mundo y la excelencia y la relevancia cuantitativa y cualitativa de los creadores catalanes, tanto en la tradición como en la
contemporaneidad (Miró, Dalí, Tàpies, Gaudí, Carreras, Caballé,
Ramon Llull, Rodoreda, Monzó, Adrià...).
Para la validación y el consenso de estos valores y activos, el
Govern ha encargado al Patronat Catalunya Món que sea la entidad responsable de liderar este proceso de creación de la Marca
Catalunya, bajo la dirección técnica de un equipo de expertos de
ESADE. Para garantizar su éxito, se ha contado con la colaboración
de aquellos agentes gubernamentales y de la sociedad civil que llevan a cabo acciones de proyección internacional de Cataluña. Así,
el Patronat ha constituido el Comitè Marca Catalunya, que ha trabajado para garantizar que, en la definición de un común denominador, confluyeran todas las sensibilidades y que, en ningún caso,
la Marca Catalunya diluyera sino que fortaleciera marcas ya existentes y fuertemente consolidadas, como Turisme de Catalunya y
Barcelona.
Recientemente ha concluido la primera fase del trabajo, de donde
ha surgido un documento de conclusiones con los ejes que forman
la competitividad identitaria de Cataluña. Ahora se inicia una
segunda fase en la cual hay que diseñar una estrategia que, más
allá de la síntesis de todos los conceptos definidos en una marca o
logo, pretenda lograr la complicidad en el uso de la Marca de todos
aquellos agentes en Cataluña que tienen una dimensión internacional, y trabaje para la gestión y difusión de nuestra imagen en el
exterior. Esta estrategia tiene una importante dimensión comunicativa, puesto que, como también establece el Plan de la Acción
Exterior, el éxito de la iniciativa pasa, necesariamente, por involucrar a la opinión pública tanto internacional como doméstica.
Así pues, es necesario que, bajo el paraguas del Comisionado de
Asuntos exteriores y Cooperación, se cree un Instituto de Diplomacia Pública que asuma el despliegue exitoso de la estrategia. n
Roser Clavell. Consejera de Asuntos Exteriores y Cooperación