De Miami a Junín
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De Miami a Junín
experiencia OPINION De Miami a Junín Por Daniel Oks Para La Nacion Desarrollo urbano y calidad de vida Basados en la eficiencia ambiental que la concentración urbana puede generar, algunos profesionales del rubro no apoyan la descentralización de las grandes ciudades. Pero quienes trabajamos en pos de un valor agregado detrás de cada proyecto tenemos buenos argumentos a favor de propuestas urbanas ambientalmente sustentables. Eso implica, entre otras cosas, ser respetuosos de la flora y la fauna, no arrasar el paisaje, crear una arquitectura eficiente a partir de la generación y el uso de la energía, el agua y la mitigación de la contaminación. También contribuir a una menor alienación del hombre respecto de su entorno natural. Dichas configuraciones pueden darse en el entorno de las ciudades en áreas suburbanas o incluso rurales, aunque los mismos principios pueden observarse en la ciudad. La existencia de las ciudades se explica (parcialmente al menos) por las grandes economías de aglomeración que generan en la provisión de infraestructura; la creación de redes de negocios y redes sociales con información y contactos valiosos, y la proximidad física entre residencias, lugares de trabajo y comercios. Sin embargo, las tendencias recientes sugieren que también hay un límite natural al tamaño eficiente de las urbes –el ritmo de su crecimiento se desacelera después de cierto tamaño. Las que más rápido crecen tienen alrededor de 1 millón de habitantes–. Allí, la supuesta eficiencia económico-ambiental de la concentración urbana se desmerece a la luz de la congestión de tránsito, la contaminación, la dificultad de crear o preservar grandes espacios verdes, y los elevados costos de ampliar la infraestructura urbana a medida que las ciudades crecen. De ahí la tendencia a la urbanización que favorece a ciudades medianas y a la descentralización de las grandes. Los desarrollistas encuentran en dicho proceso una oportunidad para crear nuevas y más sustentables formas de habitar y usar el espacio. Dicho proceso debe ser encausado por un programa de ordenamiento que facilite el uso racional del territorio a través del desarrollo de medios de transporte eficientes; procesos de zonificación; requerimientos ambientales para las actividades y la preservación del entorno natural (tanto en lo paisajístico como en el cuidado de la flora y fauna), apuntando a mejorar la calidad de vida. El autor es economista; ex líder del Banco Mundial La firma International Sales Group participó con un stand en Expoagro, realizado en marzo último Que los argentinos adquieran una propiedad en Miami es frecuente. Lo diferente esta vez fue que los interesados en comprar no necesitaron viajar a esa ciudad, sino a un lugar mucho más cercano: Junín, en la provincia de Buenos Aires, donde se realizó la última edición de Expoagro. Sergio Pintos, director of International Sales for ISG, que vende en forma exclusiva el proyecto Vizcayne (en valores desde 300.000 dólares), comentó: “La muestra fue una experiencia positiva ya que descubrimos un mercado del interior que en general no está en contacto frecuente con las posibilidades de negocio que Miami ofrece actualmente. En nuestro stand en Expoagro atendimos alrededor de 200 personas que se acercaron con interés para conocer las opciones que Miami ofrece en Real Estate. Vizcayne es una obra atractiva por dos factores: la ubicación y el precio. Hasta la fecha concretamos cuatro transacciones y tenemos más de veinte pendientes. Vizcayne está frente a la bahía de Miami, en el Downtown, y a precios que están por debajo del valor de reposición. La mayoría invirtió por primera vez y creemos que esto será el puntapié inicial ya que han descubierto una atractiva forma de diversificar sus portfolios”. El proyecto elegido por los compradores Moderno diseño En la calle más coqueta de Caballito Se construye un edificio sobre la avenida Pedro Goyena que ofrece 12 unidades de primer nivel E n una de las calles más coquetas del barrio de Caballito, en la avenida Pedro Goyena al 800, la firma JT Inmobiliaria comercializa un nuevo edificio que ofrece unidades de 3 dormitorios con cochera. El inmueble, desarrollado en 12 plantas con una unidad por piso de 150 m2, propone un moderno diseño arquitectónico con detalles de primer nivel y está apuntado a un público ABC 1. “El proyecto está sobre la calle a la cual se la llama la Alvear de Caballito, y cuenta con un amplio y vistoso hall de acceso. Además, las unidades tienen pisos de madera y porcelanato, mesadas de mármol, jacuzzi, máster suite, aire por conducto y mobiliario de cocina de primera calidad”, explicó Jorge Toselli, titular de JT. En cuanto a los amenities se destacan: piscina, solárium, parrilla, seguridad con cámaras y guardia central, entre otros. Los valores parten de los 340.000 dólares. Se proponen planes de pago. OPINION Por Mario Gómez Para La Nacion Que no se repita la historia En la ciudad de Buenos Aires se realizan unas 90.000 operaciones de compraventa y 200.000 contratos de alquiler por año. Dado que los contratos tienen una duración de dos años y que además existen niveles de vacancia, podemos concluir que alrededor de 450.000 unidades están afectadas al mercado de alquileres (un 30% del stock de la ciudad que asciende a 1.500.000 unidades). Gran parte de estas unidades corresponde a la producción inmobiliaria de la última década, que asciende a unas 150.000 viviendas, caracterizada por ser pequeñas, en buenas zonas y motorizadas principalmente por inversores que primero invierten en el proyecto y luego persisten como inversores de renta. Según datos de la Fundación de Estudios para el Desarrollo Inmobiliario, en la ciudad la producción y comercialización de inmuebles involucra a más de 20.000 empresas (13,3% del total), empleando a más de 130.000 personas (el 8,2% del empleo), aporta un 14% (8000 millones de dólares) al PBI de la ciudad y tiene un efecto dinamizador sobre toda la economía por su extensa cadena de valor. Estos números deberían ser tenidos en cuenta por los legisladores a la hora de evaluar cualquier proyecto de ley de locaciones urbanas. Es positivo que nuestros dirigentes políticos se ocupen de un tema tan importante como es el acceso a la vivienda. Pero sin perder el foco de que el principal limitante por el que miles de argentinos no logran acceder es la inflación y por cuyas tasas vigentes no hay crédito hipotecario de largo plazo posible ni bancos que quieran prestar ni personas que se animen a tomar prestado. Ante la falta de crédito se diseñaron esquemas de financiación según las posibilidades de la demanda, que cuenta con ahorros y que puede comprometer cierta parte de su ingreso futuro para pagar una cuota. La inversión en ladrillos siempre fue para los argentinos resguardo de los ahorros y permitió generar fuentes de trabajo, riqueza y desarrollo. No olvidemos que cada vez que el Estado intervino en el mercado de alquileres se achicó la oferta de viviendas en locación, aumentaron los precios y, lo peor, cayó la inversión en la construcción. Que no se repita la historia de lapidar lo que está funcionando y volver a experimentar en lo que lleva al fracaso. El autor es director en Desarrollo de Emprendimientos del Instituto de Capacitación de la CIA