Revista Motril Cofrade 2014
Transcripción
Revista Motril Cofrade 2014
MOTRIL COFRADE es una revista multidisciplinar especializada en la religiosidad popular y las tradiciones que viene desarrollando su labor, de manera anual, desde 1994. Entre sus páginas cuenta con numerosas investigaciones, estudios y revisiones de distintos profesionales de diversos ámbitos (historia, cultura, sociología, antropología, musicología, ciencias del deporte, etc. ) que tienen como eje vertebrador las tradiciones y la religiosidad del pueblo. En esta revista se incluyen artículos originales de investigación, artículos de revisión y cartas del editor. Por otra parte, la revista puede incluir determinados artículos, a cargo de ciertos investigadores de reconocido prestigio en su ámbito. En este caso, siempre será por encargo o invitación de los editores. Para los números siguientes se ruega a todos los que deseen intervenir que entreguen sus colaboraciones antes del 31 de diciembre. Peticiones de revistas para interesados de fuera de Motril: Envío de correo electrónico con los datos personales y de entrega, así como indicación de la(s) revista(s) en cuestión. Se cobrarán únicamente los gastos de envío por mensajería. Esta publicación está asociada a la Muy Antigua Archicofradía del Dulce Nombre de Jesús, y Primitiva y Real Hermandad y Cofradía de Nazarenos de la Santa Vera Cruz (Cristo de la Expiración) y María Santísima del Valle de Motril. (Inscrita en el Registro de Entidades Religiosas del Ministerio de Justicia con fecha 16-03-10, nº 7577-SE/C) Edita: Motril Cofrade c/Ciprés, 4 18600 Motril N.I.F.: G-18233825 ISNN 1137 - 5922 Depósito Legal: GR 211-94 Edición anual. Año XXI. Número 21 E-mail: [email protected] Web: www.motrilcofrade.com Dirección: José Luis Bosch Posadas Consejo de Redacción y Asesor: José Luis Bosch Posadas (Director) Dolores García López (Hermana Mayor de la Archicofradía) Eduardo González García (Ldo. en Bellas Artes) Domingo A. López Fernández (Ldo. en Geografía e Historia) José López Lengo (Ldo. en Derecho) Jesús Rodríguez Gálvez (Ldo. en Historia) Colaboración literaria: Bárbara Arredondo Genaro, Antonio Cantero Muñoz, Mª Jesús Carmona Arroyo, Ramón Fuentes Escalzo, Juan Gavala González, Francisco Guardia Martín, José Ramón López de los Mozos, José López Lengo, Emilio Reina Giménez, Manuel Romero Castillo y David Luis Sánchez Latorre. Motril Cofrade MOTRIL COFRADE Inscrita en el Registro de Asociaciones de la Junta de Andalucía con el número 1400, sección 1ª. Inscrita en el Registro de la Propiedad Industrial, nº 283827. Colaboración gráfica: Nacho Abascal, José Luis Bosch Posadas, Salva Calvo, Isabel Cantero Caballero, Cinturón de esparto, Virginia Flores Torres, Francisco J. García Prieto, Antonio Martínez, Luis A. Martínez Gómez, Paula Montánez, Jesús Ropero y Vicente Torres Diseño Gráfico: Francisco Javier Pérez Pérez y Grupo Barataria Impresión: Imprenta Comercial Portada: María Stma. del Valle. Motril Fotografía de Francisco J. García Prieto SUMARIO • Actitudes en la Iglesia..............................................................3 • El Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño................5 • Rosario Spínola y Maestre, motrileña, cofundadora de las Esclavas Concepcionistas del Divino Corazón...11 • El Libro de Memorias de la Parroquia de Albuñuelas del siglo XVII. Estudio de la Mentalidades......................18 • El ensayo de costaleros como entrenamiento para la salida procesional: un ejemplo práctico.............27 • Algunos aspectos de la Semana Santa en la provincia de Guadalajara..............................................34 • Notas históricas de la Cofradía de los Apóstoles de Doña Mencía......................................................................48 • Recordando a unos amigos..................................................59 • Las procesiones vistas por un impresionista: Darío de Regoyos...................................................................64 Aviso Legal Motril Cofrade respeta la opinión de los autores de los artículos y no se responsabiliza de sus opiniones, limitándose a reproducirlas estrictamente.Las fotografías, dibujos y textos son propiedad de sus correspondientes autores o de Motril Cofrade y quedan sujetas a lo que la Ley de Propiedad Intelectual establece para su reproducción y transmisión. 1 Motril Cofrade Bárbara ARREDONDO GENARO Licenciada en Historia y Ciencias de la Música (Musicología) y Licenciada en Historia del Arte, ambas por la Universidad de Granada. En el año 2002 obtiene la Suficiencia Investigadora (DEA) en Historia y Ciencias de la Música por su trabajo Las Bandas de Música en España hasta 1936: El caso granadino. Los Géneros Bandisticos y su utilización como fuentes populares en la obra de Joaquín Turina; en 2004 una beca de investigación del Centro de Historia Contemporánea de Cataluña para la realización de la obra La Música Social en Cataluña en la primera mitad del siglo XX: Coblas, Orfeones y Bandas de Música. El caso de la ciudad condal. La Municipal de Barcelona y Juan Lamote de Grignon. Comenzó sus andanzas musicales como miembro de una banda de música rural tocando el trombón y la trompeta. Mas tarde inició estudios de canto en el Conservatorio Profesional de Música de Granada, habiendo recibido clases magistrales de profesores como la soprano Aurora Suárez, el tenor Francisco Heredia y el tenor mexicano Álvaro Ramírez.Como experiencia musical es miembro del coro de la Orquesta Ciudad de Granada, soprano en el Seminario Permanente de Opera del Departamento de Didáctica de la Expresión Musical de la Universidad de Granada. Así mismo ha formado parte en diversos periodos lectivos del Coro Universitario “Manuel de Falla”, y ha participado en Conciertos de la Peña de la Opera de Málaga. Es cofundadora de La Lyra de Erato, dúo musical dedicado a la impartición de Conciertos Didácticos y Gran Concierto. Actualmente combina su trabajo como profesora de canto y música a nivel privado con el desarrollo de su trayectoria musical y la elaboración de su Tesis Doctoral en el campo de las bandas de música y la música social. Antonio CANTERO MUÑOZ Licenciado en Derecho por la Universidad de Córdoba. Secretario del Juzgado, investigador de la Semana Santa y Religiosidad Popular, en particular la cordobesa y la de Doña Mencía, su pueblo y Trujillo (Cáceres). Autor de los libros: Religiosidad popular y Semana Santa en la Iglesia Dominicana de Doña Mencía, siglos XVI-XVIII. (Córdoba, 2003) y San Pedro Mártir de Verona, Patrón de Doña Mencía (Doña Mencía, 2005). Ponente y conferenciante en diversos congresos nacionales de Semana Santa (Salamanca, Córdoba, Pozoblanco, Aguilar de la Frontera, Puente Genil) y Religiosidad Popular (El Escorial, Trujillo), ha investigado y recuperado los pasos y pregones de la Semana Santa. Ramón FUENTES ESCALZO Licenciado en Ciencias del Deporte por la Universidad de Granada. Diplomado en Educación Física por la Universidad de Granada. Profesor interino de la Junta de Andalucía Juan GAVALA GONZÁLEZ Maestro en Educación Física por la Univesidad de Sevilla, Licenciado en Ciencias de la Actividad Física por la Univesidad de Granada y Doctor por la Universidad Pablo de Olavide. Actualmente imparte clases en esta última Universidad y ha sido costalero durante 15 años. Francisco GUARDIA MARTÍN Licenciado en Geografía e Historia por la UNED. Estudios de tercer ciclo en la Universidad de Málaga. Socio de la Fundación Española de Historia Moderna. Colaborador de El Faro, ha publicado también en Abuxarra, Azucenas, El Matusalén, Qalat y Sel Silvanus. En congresos de la FEHM presentó las comunicaciones “La difícil repoblación del señorío del Cehel” y “No sólo de las armas vive el soldado. Los otros afanes de los militares de la Costa de Granada. El caso de 2 Benito del Campillo”, publicados en las actas correspondientes. Autor en colaboración con Carme Romero i Parcerisas de Comunitats religioses durant la revolució liberal. El cas dels caputxins d’Igualada, presentado en las III Jornades d’Estudis d’Història, en Cervera, y publicado en “El mon rural català a l’època de la revolució liberal”. José Ramón LÓPEZ DE LOS MOZOS JIMÉNEZ Guadalajara 1951. Profesor de enseñanza primaria, ha desarrollado una amplia labor en su faceta de funcionario de la Diputación Provincial de Guadalajara, como creador, organizador y primer director de la Biblioteca de Investigadores Alcarreños, que tan gran servicio ha dado a esta tierra. Cronista Oficial de la villa de Maranchón (Guadalajara). Activo siempre en cualquier empresa cultural que se ha iniciado en Guadalajara, protagonista de encuentros, reuniones, congresos y ciclos de conferencias, su producción literaria e investigadora se ha centrado especialmente en dos áreas: el folclore provincial y la guerra de la Independencia. Como estudioso de temas de arte, también destaca por su minuciosa atención a las estelas funerarias medievales. Es además un gran bibliógrafo, conocedor de todos cuantos libros se han escrito en y sobre Guadalajara. Su producción está repartida en numerosos libros y en múltiples artículos de revistas especializadas, tanto en las de ámbito local (Wad-al-Hayara, especialmente) como nacional (Revista de Folklore), siendo además creador y director de los Cuadernos de Etnología de Guadalajara. (Antonio Herrera Casado. Cronista Provincial de Guadalajara). José LÓPEZ LENGO Licenciado en Derecho por la Universidad de Granada. Jubilado del Cuerpo Superior de la Administración del Estado. Cronista e investigador de la historia y sociedad motrileña. Ha escrito para diversos periódicos y revistas, con predilección en los medios motrileños. (El Faro, Mucho de Motril, Motril en tu mano, Motril Cofrade, El Matusalén). Tertuliano en programas radiofónico y televisivos. Ha pregonado a la Virgen de la Cabeza, Patrona de Motril. Es autor de los libros: Motrileñismos. Léxico azucarero (Motril, 1991), D. Juan Rodríguez Pintor. Maestro de Escuela (inédito), Emilio Díaz Moreu. Marino y Político. Manuel ROMERO CASTILLO Licenciado en Historia. Vocal de Cultos y Formación de la Asociación Parroquial de Ntro. P. Jesús Nazareno y Ntra. Sra. de las Angustias de Albuñuelas. Colaborador de la web “Padul Cofrade” y “Andalucía en los documentos”. Creador de la revista Pasión de Albuñuelas. Tiene numerosas publicaciones sobre historia y religiosidad popular de Albuñuelas y demás poblaciones del Valle de Lecrín y Lanjarón, como: La cofradía del Santísimo Rosario en Albuñuelas: historio y textos; Devocionario a la Santísima Virgen de las Angustias de Albuñuelas; Dos casos de patronazgo documentado, las cofradías de san Sebastián en Albuñuelas y Lanjarón y en prensa: Un apunte de la religiosidad popular en el Valle de Lecrín; Lanjarón: la hermandad de san Sebastián entre 1669-1775; La hermandad del Santísimo Sacramento y Nuestra Señora del Rosario del 11 de octubre de 1778; La advocación de la Virgen de las Angustias en el Valle de Lecrín: imagen, palabra y devoción. Ponente y conferenciante en diversos congresos en Granada, Padul y Puente Genil. David L. SÁNCHEZ LATORRE Ldo. en Ciencias del Deporte por la Universidad de Granada. Diploma de Estudios Avanzados por la Universidad de Granada. Profesor de Educación Física y Jefe de Estudios del IES. Santísima Trinidad de Úbeda y costalero de la Hdad. de la Sentencia. Motril Cofrade Actitudes en la Iglesia A todos los pequeños cofrades tañedores de las campanas de barro que han sido, son y serán, incluidos Valle y Pablo. José López Lengo S on ellos los pequeños cofrades del “Dulce Nombre de Jesús” que en la mañana del Domingo de Resurrección desfilan por las calles de Motril con la imagen de su Titular, El Niño Jesús, expresando con el repiqueteo de sus campanas artesanas el gozo y la alegría por la Resurrección del Señor. La Resurrección es el hecho extraordinario que prueba la divinidad de Jesús y que constituye el fundamento de la fe cristiana. Pues a ellos que viven insertos en una sociedad que a lo largo de la última centuria ha devenido laica, materialista, consumista y relativista, en que los modales y comportamientos se han relajado, y las relaciones sociales son tan directas, informales y desinhibidas que se ha olvidado de la atención y consideración debidas a la superioridad social y jerárquica, dirigimos estas líneas recordatorias de las reglas de urbanidad que los niños de hace setenta y ochenta años estudiábamos en la primera enseñanza y tratábamos de cumplir. De ellas vamos a sintetizar algunas de tema religioso. Cierto que determinadas normas y fórmulas del trato social se han simplificado o han desaparecido, tales como inclinar la cabeza al pasar ante el altar o usar el usted y otros títulos protocolarios, pero nunca se debe pasar ante el altar o el sagrario de largo o tutear al sacerdote y otras autoridades. En el programa general de Urbanidad Para Niños (1927, 28 edición) del Maestro Normal D. Pablo Solano Vitón recomendaba las siguientes reglas de respeto en la iglesia: –Al ir a la iglesia hemos de considerar que vamos a la casa de Dios a tributarle el culto que nos prescribe la Religión. Además del culto supremo de adoración como fin de la Misa, existen otros tres: agradecer todos los bienes que disfrutamos; pedir bienes espirituales y terrenales y pedir perdón por nuestros pecados. –Al entrar en la iglesia hemos de descubrirnos la cabeza, tomar agua bendita, santiguarnos con ella, hacer una genuflexión y dirigirnos sin hacer ruido al punto convenido. Hay muchos que al pasar ante el sagrario hacen una burda contorsión en lugar de arrodillarse y santiguarse correctamente. Se cuenta que estando Felipe II en su dormitorio del palacio de El Escorial, desde donde podía contemplar el altar mayor de la Capilla y oír Misa, una mañana vio pasar rauda una sombra ante el sagrario sin arrodillarse, de la que pensó se trataba de un demonio o de un monaguillo. –En la iglesia debemos permanecer arrodillados generalmente, sin hablar, volver la cabeza, toser o bostezar con estrépito, y si nos sentamos lo haremos sin cruzar las piernas ni recostarnos. Habría que añadir: y sin poner los pies en el “rodilleral”, pues quedaría en él la suciedad de las suelas. Durante la Misa debe adoptarse la postura que indica el ritual propio, como escuchar el Evangelio de pie, arrodillarse en la 3 Motril Cofrade 4 Consagración y en la Bendición con el Santísimo, siempre que las facultades físicas del fiel lo permitan. –Si hemos de desplazarnos de un lugar a otro del templo, debemos doblar la rodilla derecha al pasar por delante del altar si está el Santísimo Sacramento reservado y ambas rodillas si está expuesto. Ante los reyes se dobla, en su caso, la rodilla izquierda. –En la iglesia se han de considerar los misterios de nuestra sacrosanta Religión y muy especialmente en la Misa que es la representación de la vida, pasión y vida de Nuestro Señor Jesucristo. –Los sacerdotes son dignos del mayor respeto y veneración porque son los representantes de Jesucristo en la tierra, los que nos suministran los auxilios de nuestra religión y allanan el camino de la bienaventuranza, principal objeto del hombre en este mundo. –A los Arzobispos y Obispos les corresponde el tratamiento de Usía Ilustrísima. –Los Cardenales tienen el tratamiento de Eminencia. –El Papa tiene el tratamiento de Santidad. Para dirigirnos al Religioso ordenado emplearemos la palabra Padre, y la de Hermano para Fraile sin órdenes mayores. Y, en general, al Sacerdote se le hablará de usted y anteponiendo al nombre el Don. En 1932 se publicó un texto denominado Lecciones de Urbanidad, popular en las escuelas de primera enseñanza de aquellos años, ilustrado con viñetas referentes a las diversas reglas, del que extractamos algunas de las que se han de observar en el templo, tomadas de la revista El Matusalén, nº 47 de junio de 2001: –El niño bien educado debe estar en el templo con profundo recogimiento y respeto, procurando no distraerse ni pensar más que en Dios y en cosas espirituales. –En el templo se debe evitar: Rezar o leer alto de forma que distraiga o moleste a los demás, cruzar los pies estando de rodillas o las piernas estando sentado, correr para tomar asiento antes que otros o hacer ruido acomodando la silla.Se saludará sólo a los conocidos que estén muy cerca y con ligero movimiento de cabeza. Me admira ver a los componentes del Cuerpo Diplomático, español o extranjero, sean cristianos o no, ateos o agnósticos, en los actos religiosos, que mantienen una actitud de respeto y compostura. Jamás los he visto distraídos, hablando entre ellos, con las manos en los bolsillos o recostados cansinamente. Jesús subraya la finalidad del Templo con un texto de Isaías bien conocido por todos (56,7): Mi casa será casa de oración. El autor sagrado de Camino, San Josemaría, comenta en el número 541: Hay una urbanidad de la piedad —Apréndela—. Dan pena esos hombres “piadosos”, que no saben asistir a Misa —aunque la oigan a diario—, ni santiguarse —hacen unos raros garabatos, llenos de precipitación—, ni hincar la rodilla ante el Sagrario —sus genuflexiones ridículas parecen una burla—, ni inclinar reverentemente la cabeza ante una imagen de la Señora. ¡Cuántas veces he visto en Semana Santa a los cofrades enaltecer las imágenes titulares, en tanto que pasan ante el Sagrario sin prestar la menor atención a la sede donde está reservado Jesús en Cuerpo y Alma, sacramentalmente! Tú, pequeño cofrade, observa esas reglas con el talante sencillo, noble y digno que corresponde a un cristiano ejemplar y ejemplarizante. Madrid, noviembre, 2013. Motril Cofrade El Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño Una muestra de la música procesional granadina en la primera mitad del siglo XX (Cádiar, 1861- Zújar,1954). Bárbara Arredondo Genaro E stimados lectores, en esta ocasión me gustaría hacer un poco de justicia y dedicar unas letras a lo más profundo de la música de nuestras tierras. Aquellas músicas con las que nuestros abuelos y aún más antaño, crecieron y se formaron. Aquellas que cuando aún no había ni medios técnicos ni de transporte, iban amenizando nuestras fiestas y procesiones. Hoy les presentamos un ejemplo de todo esto. Un músico de nuestra provincia que no solo crearía una importante cantera musical sino que también nos dejó un importante legado, hoy por desgracia casi perdido, pero que creemos merece la pena recuperar. Justo Castro Pinteño nace en Cádiar, un pequeño pueblo de la Alpujarra Granadina en 1861, según fuentes no contrastadas. En aquellos tiempos una de las salidas laborales mejor pagadas era la carrera castrense y a esta se dedicaría nuestro músico, desconociendo el momento en que se alistó. Sabemos que esto fue así debido al testimonio de D. Jesús Silvestre y a una anotación del Diario Oficial de la Guerra del año 1889 donde se le menciona como músico de primera, a la edad de 28 años1. Según nos cuenta su discípulo, compositor y director de banda, D. Jesús Silvestre Heredia2, el Maestro Pinteño dejaría el ejército por desavenencias con otro brigada de su banda que había obtenido el título de director de la misma. Una vez de vuelta a la vida civil, D. Justo Castro Pinteño se instalaría en su pueblo natal, Cádiar (3) donde fundaría la primera Banda de Música de la localidad. Hay noticias destacadas a cerca de la fama adquirida por esta banda bajo la batuta de nuestro protagonista. La primera noticia sobre este hecho la encontramos en el año de 1910, en una noticia del periódico El Accitano en la cual se alaba la calidad alcanzada por esta formación musical. La banda de Cádiar El miércoles último pasó por esta ciudad de regreso a su país tan notable banda, y se detuvo un día entre nosotros. Su primera visita fue para nuestra Patrona, la Virgen de las Angustias y después saludó y festejó a la autoridad local, al jefe político1 canalejista señor Labella y a otros señores, siendo obsequiado sus individuos. Concurrió galantemente a la velada de la Plaza de la Constitución ejecutando por modo magistral lucido repertorio. El auditorio quedó altamente satisfecho de la audición prodigándole sus aplausos. Nosotros felicitamos a su director don Justo Castro Pinteño por el grado de conocimientos que tiene la banda, por lo limpio de la ejecución, por su armonía, y el buen gusto y afinación con que corresponden todas sus partes. 4 Seis años después, en El Defensor de Granada aparece un artículo titulado “La música de Cádiar”, donde se vuelve a alabar la labor directiva de Castro Pinteño: Anoche nos obsequió con una serenata la notable Banda de música de Cádiar que dirige el competente director Don Justo Castro Pinteño. También se obsequió con serenatas al Gobernador Civil de la provincia y a algunas importantes sociedades granadinas. 5 13 Motril Cofrade “A la Purísima de Jerez”. Castro Pinteño, Justo: Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. Seria desear si para las fiestas del Corpus se contratan algunas bandas de música, se tenga en cuenta esta, tan celebrada en estos días por el público granadino.5 Durante esta primera época y teniendo como base sus composiciones, es muy posible, aunque no confirmado que asistiese como director de banda en Lobres6. A primeros de la década de los veinte el Maestro Justo dejó la localidad alpujarreña7 y se traslada a Jérez del Marquesado, en la comarca de Guadix, al pie de la Alpujarra, donde parece que ejerció como director de su formación bandística entre 1920 y 1925. La actividad de las formaciones a cuyo cargo dirigía el Maestro Justo, debía crecer considerablemente teniendo en cuenta tanto las noticias anteriores, como las que presentamos a continuación. En 1922, existe una anotación en las Actas del Pleno del Ayuntamiento de Zújar8, donde se expresa que en las festividades de Abril de ese año, vino a tocar a esta última localidad, la Banda Municipal de Jerez del Marquesado, dirigida por D. Justo Castro Pinteño, que entonces ya contaba con 62 años de edad. En algún momento entre 1925 y 1927, el maestro Pinteño se trasladaría junto a su familia a la población de Zújar, en la comarca de Baza. Según nos cuenta D. Jesús Silvestre, su mujer se llamaba Carmen y tenían allí un bar en la llamada “cuesta de las campanas”, junto a la plaza 6 14 mayor. Allí había una banda de música de intermitente existencia en la que D. Justo Castro Pinteño, no aparecería nunca como director. Suponemos que debido a su edad, este otorgaría los honores a su hijo el también maestro D. Justo Castro López9, que en 1927 aparece relacionado con la reorganización de la banda de Zújar. ... para que con las instrucciones del señor alcalde se ponga de acuerdo con el profesor de la música que ha de hacerse cargo de la banda y designen el número y clase de instrumentos, que se han de adquirir.10 Sin embargo, parece que el hijo no ostentaba el respeto artístico ni jerárquico de su padre, ya que solo dos años después, D. Justo Castro López sería destituido de su cargo debido a su falta de autoridad sobre los músicos. Estos se rebelaron contra él y contra los mandatos de la Alcaldía negándose a tocar, tal como era su obligación, en la festividad del Santo Ángel Custodio por lo que el Ayuntamiento ordenaría de inmediato la recogida de los instrumentos y uniformes11. Diez años después, en 1940, tras el paso de otros directores por esta formación bandistica, se produce una nueva reorganización de nuevo bajo la batuta de D. Justo Castro López12. Durante la época de la segunda banda de Castro López, este dirigiría la banda y su padre, el Maestro Pinte- Motril Cofrade Banda de Zújar con el Maestro Justo Castro López, años 40. Portada Cuaderno de Marchas de Justo Castro Pinteño. Bombo. ño, se encargaría de la formación de los educandos. Este es testimonio de sus discípulos como D. Jesús Silvestre Heredia, quien por cierto refundaría la Banda de Zújar en 1990 e inició en el mundo de la música a numerosos educandos, entre ellos una servidora. Esta última etapa en la vida de nuestro músico se mantuvo hasta 1953, momento en el que cesó de nuevo la banda. Un año después fallece en Zújar D. Justo Castro Pinteño. Existe la posibilidad según fuentes, no contrastadas, de que D. Justo Castro Pinteño también asistiese como director en el pueblo de Gor. al menos cuatro poblaciones distintas de la provincia granadina. Personalmente recuerdo cuando en la década de 1990 eran interpretadas aún, al menos una parte de ellas, por las bandas de Zújar y Freila bajo la dirección de D. Jesús Silvestre Heredia. Como hemos dicho, a manos de D. Jesús Silvestre llegaron siete cuadernos de distintos instrumentos de la plantilla de D. Justo en los años cuarenta. De aquellos siete originales que contenían un total de 22 marchas del Maestro Justo, D. Jesús arreglo e instrumento para la plantilla de la Banda de Zújar, entonces llamada “Los Hactaranos”, las primeras doce marchas del Cuaderno. Cuando D. Jesús, dejó la dirección de la Banda varios años después, entregó parte de los libros originales a la dirección de la Banda. Los cuales hoy día parecen haberse perdido. Sin embargo, gracias a que D. Jesús Silvestre no entrego sus arreglos además de dos originales a la dirección, hoy podemos recuperar este Cuaderno de Marchas de nuestro compositor granadino. Los originales, aunque no en excelentes condiciones que se conservan en el Archivo del compositor y director D. Jesús Silvestre Heredia son el Cuaderno de Bombo completo con las 22 marchas y solo las doce primeras del Cuaderno de Cornetín 1º. Así se conservan fotocopias de los originales perdidos de los Cuadernos de Cornetín 2º (las doce primeras marchas), Bajo en Do (las 17 primeras marchas), Bombardino 1º (las El Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño S egún recuerda D. Jesús Silvestre, cuando reinició su actividad como director en la Banda de Zújar, en 1990, le vino un convecino, que también había sido discípulo del maestro Pinteño con unos papeles bastante conocidos para él que habían podido recopilar. Eran los restos de un libro procesional del maestro Justo. Solo habían quedado siete libros de particellas del total de la antigua plantilla de 1940. Aquellas marchas estaban escritas a pluma y forradas por unas pastas duras algo más pequeñas de media cuartilla. Este cuaderno con sus composiciones ha sido ejecutado por unas cuatro o cinco generaciones de músicos de 7 15 Motril Cofrade “Marcha sobre motivos de la Norma”, Castro Pinteño, Justo: Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. doce primeras) y Trombón 1º (solo de la 5 a la 12, conservado en mi propio archivo personal). El resto de papeles conservados en el mismo archivo, son las doce marchas instrumentadas en 1990 de Clarinete 1º, 2º y 3º, Saxo alto 1º, Trombón 3º, Flauta, Requinto y Trompa. Así mismo y para ajustarse a la nueva plantilla, se instrumentaron los papeles de Saxo alto 2º y Saxo tenor, instrumentos que no estaban en la plantilla de D. Justo. Así, según las fuentes sabemos que el total de composiciones que contenía el Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño fueron veintidós: Nº 1 Marcha Real. Nº 2 Marcha de Procesión. Nº 3 Oh ¡ Madre mía. Nº 4 Marcha de Procesión. Nº 5 Marcha de Procesión Nº 6 Zaragoza. Marcha Regular. Nº 7 Inspiración. Marcha Regular por J. C. L. Nº 8 Dolores. Marcha Regular. Nº 9 A la Purísima de Jerez. Marcha Regular por Justo Castro Pinteño. Nº 10 A la Virgen de la Cabeza. Marcha de Procesión por J.C.P. Nº 11 Expresiva. Marcha Regular. Nº 12 Redención. Marcha Regular. Nº 13 Marcha de Procesión al Smo. Corpus Cristi. Nº 14 Candelaria. Marcha Regular. Nº 15 La Virgen del Mar. Marcha regular. Nº 16 Venite Adoremus. Marcha regular. La Espichá cervecería 8 Nº 17 La Eucaristía. Marcha. Nº 18 La Sagrada Forma. Marcha. Nº 19 Expresiva. Marcha. Nº 20 Marcha. Sobre motivos de la Norma Nº 21 A la Virgen de Tiscar. Marcha de procesión por J.C.L. Nº 22 Esperanza. Marcha de procesión por J.C.L. Sin embargo, debido a que solo se instrumentaron las doce primeras y a que solo se conserva íntegro el cuaderno de Bombo, serán imposibles restaurar las marchas de la 12 a la 22. Una verdadera pena teniendo en cuenta que entre ellas se encuentra incluso una Marcha compuesta sobre variaciones del tema de Norma, ópera de Bellini. Era propio de fines del siglo XIX, cuando aún no existía la marcha procesional como género musical propiamente dicho, tocar en las procesiones algunas partes escogidas de óperas y sinfonías. Por tanto, podemos decir que de aquellas veintidós marchas del Cuaderno que aquí estudiamos, solo podemos recuperar las doce primeras. Estudio Musical del Cuaderno S e trata de un cuaderno músico-procesional fruto del trabajo compositivo del Maestro Pinteño. Aunque el libro en sí se completó seguramente con posterioridad a la década de 1940, está claro que la mayor parte de las marchas se compusieron mucho antes. En el estudio de las piezas, he podido observar una clara evolución estilística de las mismas así como la existencia de dos autorías distintas: El Maestro Doctor Tercedor, 8 / Motril Motril Cofrade “A la Virgen de la Cabeza”, Castro Pinteño, Justo: Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. Trombón 1º. Pinteño y la de su hijo Justo Castro López. Así mismo el orden de actuación de las mismas no parece ser el cronológico. En todas ellas además existe, sobre todo en las primeras, una clara influencia de las marchas castrenses y un estilo característico que el Maestro Justo mantiene a lo largo de toda su composición. Así mismo no parece haber por su parte una diferenciación clara entre marcha regular y procesional. Sino que las nombra según el paso deseado atendiendo a su formación como músico militar. Compositivamente se distingue la mano del Maestro Pinteño por guardar siempre el mismo esquema melódico y armónico: Marcha tripartita donde la primera parte (siempre en la tonalidad de Si b mayor) se compone de dos o tres temas de corte clásico (ocho compases) con repetición de carácter fuerte. La segunda parte o parte intermedia, siempre son en tonalidad de Mi B mayor, también con cortes melódicos clásicos y de carácter piano. En la mayor parte de ellas utiliza también melodías o escalas en los instrumentos graves de marcial toque. Las composiciones de su hijo Justo Castro López, se distinguen claramente por sus cambios de tonalidad fuera de la lógica de Pinteño y por una clara diferenciación de esquemas melódicos respecto a los de su padre. Aunque solo la numero siete está firmada por Castro López, también parecen de su autoría la 5, la 8, la 21 y la 22. Otra diferencia con respecto al maestro Pinteño es que la 7 y 8 aunque son llamadas “marcha regular”, su sonoridad es claramente cercana a una marcha fúnebre, característica no observada en las marchas de su padre. Así mismo hemos dicho que el orden que sigue el libro poco tiene que ver con el cronológico en la composición de las mismas, ya que las de Castro López aparecen en la parte central del libro a pesar de ser más tardías. El arreglo de la Marcha Real y las número 2, 3, 4 y 6 parecen ser más tempranas y cercanas a su época castrense, seguramente compuestas durante la dirección de la Banda de Cádiar. Así mismo, las número 14 y 15, llamadas Candelaria y Vir- gen del Mar, también podrían ser de esta primera época. Así, la numero 9 dedicada A la Purísima de Jerez, fue compuesta entre 1920 y 1925. La dedicada A la Virgen de la Cabeza, la numero 10, seria compuesta por el Maestro Pinteño entre 1927 y 1930, durante los dos primeros años en que Justo Castro López dirigió la banda de modo fallido. El resto de estilo más evolucionado serían compuestas entre 1940 y 1953. Conclusiones T enemos sin duda ante nosotros un claro ejemplo de patrimonio musical que no podemos dejar caer en el olvido, no solo por ser parte de la historia musical de la provincia, que también, sino porque nos aporta una valiosa información a cerca de cómo era el repertorio musical de las formaciones bandisticas de la provincia. Son un claro ejemplo de una primera época en la composición de música procesional. Era la música que se tocaba y se escuchaba en las procesiones de nuestros pueblos. Composiciones que tenían unas plantillas muy reducidas, y no con todos los instrumentos. Así mismo y teniendo en cuenta que los Maestros solían llevar consigo su legado musical de un pueblo a otro, podemos ver como el Cuaderno nos habla por sí mismo de todos los sitios donde el Maestro Pinteño crearía cantera, pueblos como Cádiar, Lobres, Jerez del Marquesado, Gor, Zújar, Tiscar y casi un siglo después, Freila. Así mismo, y antes de terminar con este estudio, queremos agradecer su labor de archivo y colaboración en este trabajo a D. Jesús Silvestre, por conservar lo poco que queda de estar marchas con tanto cariño. También al actual director de la Banda de Zújar, D. Ramón José García Arredondo por su tiempo en la búsqueda del material original que por desgracia y pesar no pudo encontrar en los archivos de la banda. Y por supuesto a la Revista Motril Cofrade, por llevar a cabo una importante labor de difusión cultural en torno a la Semana Santa y por sacar a la luz este estudio. 9 Motril Cofrade Notas 1 Diario oficial del Ministerio de la Guerra. 14 de diciembre de 1889, Año II, nº 277. Tomo IV, pág. 885. 2 Jesús Silvestre Heredia nació en Mayo de 1935. Desde muy joven fue miembro de la Banda de Música de Baza, y director de las Bandas de Zújar, Freila y Terrassa así como de las orquestas de Música popular “Dandys” y “Oasis”. En el terreno de la composición es autor de numerosas obras para banda, así como de arreglos de obras de autores célebres. Entre sus arreglos figura la instrumentación del Libro de Marchas del Maestro Pinteño. 3 Cádiar, pueblo situado en la Alpujarra granadina. 4 “La música de Cádiar”. El Accitano. Semanario liberal-conservador. Guadix, 15 de Agosto de 1910. Año XX nº 921, pág. 3. 5 “La música de Cádiar”. Defensor de Granada, 14 de Marzo de 1916. 6 Es posible la dirección del Maestro en Lobres debido a los títulos de sus marchas Virgen del Mar y Candelaria, numeradas en el Cuaderno con las número catorce y quince. La Virgen de la Candelaria es la patrona de esta pedanía de Salobreña. 7 Sustituyéndole en sus funciones el nuevo director: D. Francisco Sánchez Ruiz. 8 Acta de Pleno del Ayuntamiento de Zújar de 6 de Mayo de 1922. 9 Actas del Ayuntamiento de Zújar de 18 de Agosto de 1928. 10 Acta de Pleno del Ayuntamiento de Zújar de 3 de diciembre de 1927. 11 Acta de pleno del Ayuntamiento de 7 de octubre de 1930. 12 Acta Capitular de 1 de noviembre de 1940. Particular Sétimo: Reorganización de la Banda de Música. Bibliografía y Fuentes —Acta de Pleno del Ayuntamiento de Zújar de 6 de mayo de 1922. —Acta de Pleno del Ayuntamiento de Zújar de 3 de diciembre de 1927. 10 18 —Actas del Ayuntamiento de Zújar de 18 de agosto de 1928. —Acta de Pleno del Ayuntamiento de 7 de octubre de 1930. —Acta Capitular de 1 de noviembre de 1940. Particular Sétimo: Reorganización de la Banda de Música. —Arredondo Genaro, Bárbara: La Banda de Música de Zújar (Granada). Trabajo de investigación de Archivo. (2000-2001) —Arredondo Genaro, Bárbara Las Bandas de Música en España hasta 1936: El caso granadino. Los Géneros Bandisticos y su utilización como fuentes populares en la obra de Joaquín Turina. Trabajo de investigación tutelado (2002). Tesina. Universidad de Granada. —Castro Pinteño, Justo: Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. Bombo. Archivo de Jesús Silvestre Heredia. (Original). —Castro Pinteño, Justo: Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. Cornetín 1º. Archivo de Jesús Silvestre Heredia. (Original). —Castro Pinteño, Justo: Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. Trombón 1º.Archivo de Bárbara Arredondo. (Fotocopia de original). —Castro Pinteño, Justo: Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. Cornetín 2º. Archivo de Jesús Silvestre Heredia. (Fotocopia del original). —Castro Pinteño, Justo: Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. Bajo en Do. Archivo de Jesús Silvestre Heredia. (Fotocopia del original). —Castro Pinteño, Justo: Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. Bombardino. Archivo de Jesús Silvestre Heredia. (Fotocopia del original). —Diario oficial del Ministerio de la Guerra. 14 de diciembre de 1889, Año II, nº 277. Tomo IV, pág. 885. —“La música de Cádiar”. El Accitano. Semanario liberal-conservador. Guadix, 15 de agosto de 1910. Año XX nº 921, pág. 3. —“La música de Cádiar”. Defensor de Granada, 14 de marzo de 1916. —Silvestre Heredia, Jesús: Instrumentación del Cuaderno de Marchas del Maestro Pinteño. 1990. Papeles de Clarinetes 1º, 2º y 3º, Saxofón Alto y Tenor, Flauta, Requinto, Trompa y Trombón 3º. Archivo de Jesús Silvestre Heredia. Motril Cofrade Rosario Spínola y Maestre, motrileña, cofundadora de las Esclavas Concepcionistas del Divino Corazón Francisco Guardia Martín E n 1845 Motril era cabeza de provincia y distrito marítimo, dependiente del tercio de Málaga, uno de los tres que en esa fecha componían el departamento de Cádiz. Su jurisdicción abarcaba los distritos de Nerja, Torrox, Almuñécar y Salobreña. Componíase la plana mayor de esta provincia de un comandante, un segundo comandante y un capitán de puerto, más el correspondiente personal subalterno y administrativo. Existían además en los distintos distritos unos cabos de mar, popularmente conocidos como “cabos de matrícula” o más abreviadamente “cabos matrícula” que representaban en ellos al comandante. El 15 de noviembre de 1845 una Real Orden destinaba a esta provincia, en calidad de Segundo Comandante, al capitán de fragata don Juan Spínola y Osorno, descendiente de una vieja familia de militares y marinos. En realidad la estirpe de los Spínola era oriunda de Génova y, en un tiempo en que aquella república italiana mantenía estrechos lazos con la Corona de Castilla, muchos de sus vástagos habían venido a España, sirviendo lealmente unos a sus reyes en la milicia y dedicándose otros con aprovechamiento al comercio. Así el padre de don Juan, don Marcelo Spínola Tribucio, nacido en Génova el 1754, ingresó muy joven como guardiamarina en el departamento de Cádiz; había contraído matrimonio con doña María Micaela Rosario Osorno y Gerbaut y en 1829 ascendió a teniente general de la Real Armada. Don Juan, cuyo nombre completo en el bautismo fue el de Juan Nepomuceno, Josef María, Francisco de Paula, Ramón, Félix de Cantalicio, Luis, Joaquín, de la Santísima Trinidad, Antonio, Simón de Roxas, había nacido en la Isla de León el 28 de mayo de 1779. Ingresó en la Armada y aunque un biógrafo de su hijo Marcelo afirma que fue “un marino en tierra […] más preocupado de su escalafón que de las hazañas navales”, lo cierto es que no se vio del todo libre de escaramuzas marítimas y de viajes a tierras americanas . Casado con su prima doña Antonia María Maestre y Osorno, nacieron del matrimonio ocho hijos de los que sobrevivieron cuatro. En el momento de la incorporación a su nuevo destino don Juan Spínola llega acompañado de su esposa y de sus hijos Soledad, Marcelo y Rafael. En Motril les nacerá el 31 de octubre de 1848 otra hija a la que ponen por nombre Rosario en memoria de su abuela paterna. La estancia de esta motrileñita en su pueblo natal es breve. Los sucesivos destinos del padre la llevarán en escasos años a Alicante, Cádiz, Huelva y Sanlúcar de Barrameda. Pronto los tres hijos mayores de don Juan y doña Antonia se preparan para el futuro. Soledad opta por el matrimonio que era la “salida” normal para una mujer en la época, Rafael elige la milicia dedicando a la Infantería de 11 Motril Cofrade Rosario Spínola. Retratos de juventud. Marina los pocos años que la vida le permitió, y Marcelo estudia Leyes por complacer a los padres si bien consagrará escaso tiempo a la abogacía pues enseguida comienza los estudios para sacerdote. La más pequeña, Rosario, permanece siempre junto a los padres. Como miembro de una familia aristocrática aunque de menguados recursos económicos —don Juan es marqués de Spínola— recibe en el seno del hogar una esmerada educación que incluye clases de piano, pintura y matemáticas. José María Javierre nos ha dejado de ella este retrato: “Es una niña pequeña, mimada, flaca y bajita, pegada a su hermano Marcelo a quien adora; él la ha enseñado a escribir y está siempre contándole cosas; Rosarillo se impacienta cuando las vacaciones de su hermano tardan tanto en llegar”. Aparte de su hermano tiene otros preceptores. Y diariamente acompaña a su madre a misa y a los distintos cultos religiosos. 1864 es un año importante en la historia de los Spínola. El 21 de mayo Marcelo es ordenado sacerdote. Tres días más tarde Rafael cae gravemente herido en aquella guerra sin sentido que fue la de Santo Domingo. El 3 de junio tienen lugar la primera misa de Marcelo y el fallecimiento de su hermano que había sido evacuado a Cuba, aunque 12 esta última noticia no la conocería la familia hasta un mes más tarde. El 27 de enero de 1868 muere don Juan después de una penosa enfermedad. Marcelo, que por entonces es capellán de la iglesia de la Merced de Sanlúcar de Barrameda y había renunciado en su hermano a los derechos sobre el marquesado, se ve obligado a iniciar el expediente de sucesión en el título por complacer a la madre. Al mismo tiempo se convierte en cabeza de una familia con la economía muy quebrantada por lo exiguo de las pensiones de viudedad. La salud de doña Antonia fue siempre delicada por lo que Rosario se volcó en su asistencia. La familia comienza un peregrinaje por distintas ciudades a causa de los sucesivos destinos de Marcelo que en marzo de 1871 es nombrado ecónomo de la parroquia de San Lorenzo, de Sevilla, donde conoce a sor Ángela de Cruz, actualmente en los altares, a la que no dudará en pedir consejo cuando llega el momento de establecer nuevas congregaciones. En la ciudad del Betis encuentra la joven una amistad que ejercerá gran influencia en su vida. Es el caso que vivían allí los marqueses de la Puebla de Obando, falleció el marqués y su viuda doña Celia Méndez y Delgado experimenta un gran vacío y siente la necesidad de dar un giro a Motril Cofrade De izquierda a derecha: Rosario y su hermano D. Marcelo y D. Marcelo con Rosario y su madre. su existencia volcándose en una actividad útil al servicio de Dios. Piensa en ingresar en alguna congregación religiosa pero en ninguna encuentra lo que busca. Alguien había hablado a Celia de la aceptación que el cura de San Lorenzo había adquirido como confesor en Sevilla. Se informa concienzudamente y acude a hablar con él. Desde ese momento asume Marcelo su dirección espiritual. Al mismo tiempo es el comienzo de una estrecha amistad entre la marquesa y la hermana del sacerdote. Precisamente por influjo de Celia vuelve Rosario a tomar a su hermano como director espiritual. Sucedió que desde que Marcelo se ordenara sacerdote, había empezado la joven a confesarse con él, pero pasado un tiempo le dijo un día: “Marcelo: yo no me voy a confesar contigo más”, a lo que él sólo contestó: “Bueno”. Muchos años más tarde, siendo una anciana y preguntada por otras monjas sobre los motivos de aquel cambió dijo sonriendo: “Pues cosas de muchacha…, me daba vergüenza decirle algunas cosas” Fue un paso difícil pero fructífero. Rosario recordaría toda su vida aquel 21 de agosto de 1876. Poco después y como consecuencia de unos ejercicios ella y Celia solicitan de Marcelo unas normas con las que organizarse y progresar en la vida espiritual. Él les redacta unos apuntes que titula “Reglas de vida para las novicias de un Instituto que está en la mente de Dios”. Rosario firma en alguna ocasión como “María del Rosario de San Marcelo”. La preocupación de Marcelo por las niñas desvalidas (recordemos que en la época son constantes la desnutrición y mortalidad a edades tempranas que dejaban una secuela de huérfanos y una multitud de chiquillos que aun teniendo a sus padres vivían básicamente en la calle, y la inexistencia de algo parecido a la seguridad social) le lleva a buscar un medio con que paliar su situación. Así con la colaboración de varias mujeres, entre ellas sus dos hermanas y Celia Méndez, establece el Colegio del Corazón de Jesús en la calle Cantabria, donde acoge a doce niñas internas que con medio centenar de externas constituyen el alumnado. Quizá fuera esta experiencia la que iluminó la mente de Celia haciéndole ver que en la educación de niñas y jóvenes tenía un esperanzador campo de apostolado. Nunca sabremos la parte que tuvo Rosario en los logros de su hermano con quien tan unida estuvo. Podemos 13 Motril Cofrade De izquierda a derecha: Rosario como Madre María de San Marcelo. En la paz del claustro. Tiempo de trabajo. suponer que más de una vez lo aconsejaría aunque a él correspondía tomar las decisiones. Uno de los mayores éxitos de don Marcelo desde el punto de vista humano fue la fundación en 1899, siendo arzobispo de Sevilla, del periódico El Correo de Andalucía. Pero volvamos atrás. En 1879 es nombrado Marcelo para una canonjía y se tiene que mudar a vivir cerca de la parroquia de la Magdalena en la misma Sevilla, en cuya catedral es consagrado el 6 de febrero de 1881 como obispo titular de Milo y auxiliar de Sevilla. Cuatro años más tarde tiene que dejar la capital andaluza por haber sido nombrado obispo de Coria. En esta ciudad cacereña no le faltan quehaceres a Rosario. Tienen como residencia el palacio episcopal que se cae de puro viejo y es ella la encargada de mantenerlo lo más decoroso posible, más con el trabajo que con el dinero que es escaso. El clima es desapacible y el ambiente muy distinto al sevillano; pero una visita viene a alegrarla aquellos días: la de Celia que desea consultar con don Marcelo los últimos detalles para la fundación de una congregación o instituto dedicado a la enseñanza de las niñas que se llamaría Esclavas Concepcionistas del Divino Corazón. 14 En Coria se había visto obligado el obispo a reprender la conducta reprobable de ciertos eclesiásticos, ganándose su inquina. Cuando apareció Celia creyeron encontrar la ocasión de vengarse dando circulación a murmuraciones y maledicencias que entristecieron la estancia del prelado en aquella diócesis. Por su parte Rosario permanecía pendiente de todo lo relacionado con la fundación y en sus conversaciones se refería a un próximo futuro cuando fuera monja. A pesar de todos los contratiempos la fundación salió adelante y el 26 de julio de 1885 tuvo lugar una solemne función en la catedral coriana durante la cual comparecieron las futuras esclavas acompañadas de diecinueve niñas que habían de ser las primeras alumnas. Celia toma el hábito el 25 de octubre en la capilla de San Benito del mismo templo, junto con otras cinco postulantas. Rosario es madrina de todas pero ha decidido dedicarse al cuidado de su hermano y su madre mientras vivan aunque su relación con la nueva congregación es constante: visita a las monjas, algunas veces va a comer con ellas acompañada de su madre, y otras son las esclavas las que visitan en el palacio episcopal a doña Antonia y Rosario que se preocupan de todas sus necesidades. Motril Cofrade Transatlántico Reina Victoria Eugenia en el puerto de Cádiz. Desde aquí y en ese mismo barco salieron las esclavas par sus primeras fundaciones en Ámérica. Rosario Spínola en los años 30, vestida de seglar para pasar desapercibida durante la República. Ya no es General de la orden. La profesión de Marcelo es semejante a la de su padre militar en que está sujeta a traslados. En 1886 es nombrado obispo de Málaga y mientras llegan las bulas pasa la familia a vivir a Sevilla donde doña Antonia cae enferma. Sevilla, mes de agosto, enfermedad y las incomodidades de quien está de paso… un purgatorio para quienes tienen poco que purgar. Málaga supone para la familia un oasis de sosiego espiritual aunque el nuevo obispo no pare en su constante actividad y Rosario tenga que multiplicarse para tener todo a punto en un palacio episcopal que a diferencia del coriano mantiene un programa saturado de recepciones y visitas. Apartada en sus habitaciones del bullicio, el desgastado reloj biológico de doña Antonia no da más de sí y fallece el 8 de abril de 1890 siendo enterrada en el cementerio de San Miguel. Tras la muerte de su madre dispone Rosario de más tiempo libre para acompañar a la comunidad que se ha instalado en Málaga buscando la dirección espiritual de su fundador. Cuando el obispo se ausenta de la capital ella pasa a vivir con las monjas como una más. Así se llega a febrero de 1896 en que don Marcelo es designado arzobispo de Sevilla: nuevo traslado y allá le siguen las monjitas que fundan un colegio que aún permanece en la calle Virgen de los Buenos Libros. ¡Qué bella advocación mariana! Entre un grupo de señoras sevillanas había germinado la idea de una asociación para el fomento de la predicación en vista del desapego hacia la Iglesia que se percibía en algunos sectores sociales. Don Marcelo se mostró receptivo a esta idea y así nació en 1903 la Congregación de la Santísima Trinidad. Su objetivo era promover las misiones parroquiales y se estableció una junta de mujeres encargadas de procurar los recursos económicos y orar por el buen resultado de las misiones. Al año siguiente se integró Rosario en dicha junta. Creado don Marcelo cardenal por Su Santidad Pío X en el consistorio de 11 de diciembre de 1905 apenas tiene tiempo de desempeñar su cardenalato pues fallece el 19 de enero de 1906. Rosario se convierte en albacea de su testamento, un legado en verdad más espiritual que material pues en la caja del purpurado sólo había cincuenta duros. El báculo, la cruz pectoral y el anillo fueron entregados a las sedes que gobernó a lo largo de su vida: Coria, Málaga y Sevilla. La biblioteca en la que se acumulaban libros del legado familiar y los que el prelado había ido adquiriendo hubo de ser vendida a los jesuitas para pagar las deudas y ella se reservó sólo los papeles personales. Si bien no hay constancia documental dice la tradición que una vez terminado el entierro pasó Rosario a residir 15 Motril Cofrade 16 con las esclavas aunque con continuas salidas a Palacio hasta que todos los trámites concluyeron. Consideró entonces que había llegado el momento de cumplir su vocación y tras solicitar el ingreso fue admitida el 6 de marzo de aquel 1906; el 6 de abril recibe el hábito cambiando su nombre por el de María de San Marcelo y seis meses después, “En virtud de un breve pontificio en que se le dispensa año y medio de noviciado” efectúa los primeros votos ante la fundadora. El 19 de febrero de 1908 tiene lugar la profesión perpetua. Por entonces la salud de Celia Méndez es delicada. Le preocupa el porvenir de la congregación pero confía en la capacidad de Rosario para sacarla adelante. “A ti te dejo la cruz toda entera” le advierte. Han transcurrido poco más de cuatro meses cuando fallece la fundadora. Hay que nombrar nueva superiora general y nadie tiene dudas: resulta elegida Rosario Spínola-María de San Marcelo. Todas la consideran cofundadora y depositaria del legado espiritual de don Marcelo. Al frente de las esclavas permanece dieciocho años y puede decirse que fue una etapa dinámica. Es el tiempo de la expansión de la congregación por tierras americanas: después de una planificación minuciosa el 7 de septiembre de 1913 partieron del puerto de Cádiz a bordo del transatlántico Reina Victoria Eugenia en dirección al Nuevo Mundo las monjitas que habían de formar allí las primeras comunidades. Un grupo llevaba como destino Brasil, y otro desembarcó en Argentina. También durante su generalato se efectuaron fundaciones en Sanlúcar la Mayor, Aracena, Cazalla de la Sierra y Madrid. En otro orden de cosas se preocupó de fomentar publicaciones sobre la historia de la congregación: biografías de los fundadores, edición de una selección de la correspondencia entre don Marcelo Spínola y Celia Méndez, un tomo de pláticas y un libro con pensamientos de la Madre Fundadora. Tuvo también la dicha de vivir la incoación del proceso de canonización de su hermano. Terminado su mandato en diciembre de 1926 pasó gozosamente a un segundo plano como una más, querida y respetada por todas. Las más jóvenes siempre le estaban preguntando para que contara cosas sobre los fundadores a los que tan bien había conocido. Con la proclamación de la República el 14 de abril de 1931 comenzó una era de zozobras e inquietudes para la comunidad. La prensa y el boca a boca traían noticias increíbles y aterradoras sobre la persecución religiosa desatada por las izquierdas. Los días 11 y 12 de mayo elementos según las autoridades incontrolados, pero perfectamente organizados en la realidad, queman en Madrid distintas iglesias, conventos y colegios religiosos ; ni siquiera los cadáveres de las monjas fueron respetados pues hubo conventos donde los sacaron de sus tumbas para exponerlos a la curiosidad pública en la calle. El valor de las obras de arte, libros y documentos perdidos en aquella aciaga jornada es incalculable . El mismo día 11 en Sevilla elementos republicanos incendian el colegio de los jesuitas en la plaza de Villasís, que era el mejor centro educativo de aquella ciudad. Le siguen otros edificios como los conventos de Mínimas y de los Paules, la residencia de los Capuchinos, la iglesia del Buen Suceso y la capilla de San José. Los incendios del palacio arzobispal y otros conventos quedaron en conato por la intervención de buena gente que los sofocó. También la guardia civil logró evitar nuevos actos de barbarie. Las pobres monjitas están aterrorizadas esperando que un día les toque a ellas. Aunque no han hecho otra cosa que el bien a manos llenas, saben que el odio no precisa motivos y que unas simples consignas pueden entigrecer las conciencias. María Lourdes Díaz-Trechuelo y López de Spínola, sobrina biznieta de Rosario, nos cuenta así las tribulaciones de su tía: En la primera ola de persecución religiosa de la República las monjas, asustadas por los acontecimientos del 11 de mayo, desalojaron más de una vez el convento buscando refugio en casa de familiares y amigos. A la nuestra vino varias veces tía Rosario, que debía tener por entonces alrededor de ochenta años y estaba muy delicada de salud. Para mí era un festejo tenerla en casa. La acompañaban Madre Consuelo y Hermana San Rafael, que eran quienes la cuidaban. Ella se quedaba en mi cuarto, y yo pasaba a dormir en una salita, con un colchón en el suelo. A los diez años, todo aquello me parecía una aventura apasionante. Los años de la guerra supusieron sin embargo un respiro para la comunidad, a pesar de estar sujeta a las privaciones propias de la época. El rápido triunfo en Sevilla de Queipo de Llano garantizaba la seguridad a quienes de Motril Cofrade Tiempo de oración. El entierro de Rosario en la casa de Sevilla. manera amplia podríamos llamar “gentes de Iglesia”. Las monjas se centraron de nuevo en su tarea educativa. Al final del conflicto bélico la salud de Rosario era precaria. Rodeada del cariño de sus compañeras fallece en Sevilla el 9 de noviembre de 1944. En la mañana del 18 se celebra en la iglesia de las esclavas un solemne funeral por su eterno descanso, al que asisten delegaciones del cabildo catedralicio, clero local, ayuntamiento y una nutrida representación de familiares encabezados por el marqués de Spínola. Sus restos fueron enterrados en la misma iglesia de la comunidad, al lado del Evangelio y a los pies del altar del Sagrado Corazón de Jesús. Esta es a grandes rasgos la historia de una motrileña que contribuyó poderosamente a la fundación de la congregación de Esclavas Concepcionistas del Divino Co- razón de Jesús aunque siempre rehuyó el protagonismo para transmutarse en la sombra de su hermano el cardenal Spínola, beato hoy y con el proceso de canonización muy avanzado, siendo ella la primera convencida de que había vivido con un santo. P. S. Tengo que mostrar mi agradecimiento a la superiora de las concepcionistas de Sevilla, Hermana Concha Montoto, por toda la información facilitada así como por enseñarme el pequeño museo, donde se conservan recuerdos de los fundadores y la iglesia con el sepulcro de la Madre María de San Marcelo, durante una visita a Sevilla en noviembre de 2011. También a la Hermana Catalina Medina, de la Secretaría General de Madrid, por las noticias y fotografías aportadas. Sin su ayuda este artículo no existiría y si algún error hay en él es sólo atribuible a quien lo firma. Notas y bibliografía 1 Sobre la carrera militar de don Juan y su ascendencia traté con alguna amplitud en un artículo dedicado al cardenal Spínola, que en varias entregas apareció en el año 2004, a partir del 9 de julio, en el periódico motrileño EL FARO, por entonces semanal. 2 Don Marcelo fue una persona de vida espartana alejada de lujos y superfluidades. Incluso en lo preciso como la alimentación o el vestido gastaba lo estrictamente imprescindible como tras su muerte acreditaron quienes le habían conocido. Todavía se conservan como una reliquia las ropas que usaba, primorosamente zurcidas por Rosario para disimular los estragos del tiempo. Lo que lo perdía era su amor al prójimo, de manera que no desdeñaba endeudarse para ayudar a los demás. 3 En la Casa Profesa de los Jesuitas ardió la que era considerada segunda biblioteca de España en importancia: más de 80.000 volúmenes entre los cuales se encontraban irrepetibles incunables y manuscritos. 4 Además de cuadros de Van Dick, Zurbarán y otros maestros universales se perdió para siempre en el incendio del Colegio de la Inmaculada y San Pedro Javier, en el antiguo paseo de Areneros, la magna Historia Eclesiástica de España que estaba escribiendo el padre García Villada. 5 DÍAZ-TRECHUELO Y LÓPEZ DE SPÍNOLA, M.L., A la mitad del camino, Rialp, Madrid, 1997, p. 28. 6 Fue beatificado por Juan Pablo II el 29 de marzo de 1987, en Roma. 17 18 Motril Cofrade Manuel Romero Castillo Motril Cofrade El Libro de Memorias de la Parroquia de Albuñuelas del siglo XVII. Estudio de la Mentalidades. Introducción L a Historia de la Mentalidades sigue siendo un campo poco explorado donde conocer la parte más sensible de la historia, aquella que deja una huella diferente a la guerra, los ciclos económicos, los privilegios sociales, que han centrado el interés de los historiadores a lo largo de los siglos. Al ser un campo demasiado joven tiene algunas carencias, la primera, a la que hay que enfrentarse es a una falta de bibliografía, sobre todo porque se han estudiado excesivamente algunos temas y se han obviado otros. Tengo que reconocer que no existe una bibliografía específica sobre el presente tema pues siempre se encuentra enlazado con otras mandas pías y estadios sobre la muerte. El presente artículo persigue rellenar parte de ese hueco y generar un peldaño más en el arduo camino de llegar al conocimiento profundo de la mentalidad. La parroquia de Albuñuelas ha generado numerosos registros1 durante el desempeño de sus funciones. Uno de estos registros es el Libro de Memorias. Cronológicamente ocupa una posición privilegiada para estudiar el universo socioreligioso y mental del siglo XVII en la localidad. Al analizar el libro de Memorias nos damos cuenta, en primer lugar, de la desigual recopilación de datos, habida cuenta de las múltiples “manos” que intervienen, es decir, cada memoria se fijó en el libro por una persona diferente, aparecen consignadas para que tengan valor legal, por ello, las referencias de cada memoria van desde la más exhaustiva hasta la más breve2. En segundo lugar, su estado de conservación es relativo, ha sufrido varias manipulaciones, encuadernaciones, humedad, etc., por ello hay memorias que no se han podido transcribir debido a su deterioro3. En tercer lugar, observamos la amplísima nómina de devociones a las que se establecen fiestas, unas muy conocidas, S. Francisco o S. Sebastián, Sta. Inés, otras no tanto, S. Amaro Confesor. El archivo parroquial4 es uno de los más completos del Valle5, presenta pocos silencios y ha conservado moderadamente bien su documentación. El S. XVII comenzó siendo trágico para España, “metida” de lleno en la modernidad cuando los Austrias intentaban reforzar a la “potencia España”, que era dueña de una buena parte del mundo conocido. El reinado de Felipe II no se verá exento de guerras que convulsionarán a la Monarquía hispánica. Los enfrentamientos religiosos en Europa, y el Concilio de Trento serán hechos que marcarán la historia y ofrecerán a la postre un “nuevo” sistema de prácticas cultuales, se potenciaran devociones como el Santísimo Sacramento, el Rosario y las Benditas Ánimas. Aproximación a los “libros de memorias” ¿Q ué son?, ¿a qué intencionalidad obedece su creación?, ¿son libros desgajados o poseen unidad temática?, son preguntas que debemos hacernos para situarlos correctamente. Sonia Serna realiza una aproximación a su definición, “estos libros de memorias fueron simples registros y, no tienen una función puramente litúrgica”6, no se inscriben dentro de los libros sacramentales o los sacramentables, sino más bien dentro de la esfera de gobierno7, también pueden inscribirse bajo el término “colecturía”8. En cuanto a la intencionalidad que poseen Sonia Serna ve en ellos un fin ulterior, “el cometido que tuvieron es igualmente destacable, puesto que los fundadores de memorias seguían requiriendo las oraciones, misas, aniversarios o sufragios de la comunidad eclesiástica o civil. En este sentido, un aspecto altamente interesante es poder verificar, a través de estos libros, la continuidad de las memorias recogidas en los obituarios, lo cual nos llevará a descubrir si verdaderamente se estaban respetando las últimas voluntades de los fundadores, además de comprobar cuánto podían dar de sí las rentas asignadas para el cumplimiento de las memorias”9; son, por tanto, una garantía para quien testa y una masa monetaria suficiente para sostener a la persona que realiza la memoria. No podemos olvidar que a lo largo del año hay suficientes memorias para decir y que algunas duraron de cuarenta años y más. Respecto a la tercera cuestión, al examinar su contenido encontramos una unidad temática, cumplir la memoria impuesta, y cobrar una renta, pero los libros suelen ser algo complejos; hay bastantes veces en que no encuentras la información en el lugar que deben ocupar pues quien realiza las anotaciones no ha tenido el suficiente cuidado para ir memoria por memoria sino que ha dejado espacios para ir 19 Motril Cofrade insertando nuevas misas, zona de novenarios, o procesiones. Estos libros también permiten “reconstruir la trayectoria post mortem de las disposiciones religiosas de cualquier personaje”10, hay veces en que se ha perdido algún documento del testador, pero gracias a los libros de Memorias se comprueba, por sus anotaciones, si realizó mandas forzosas, las misas y las devociones, cuánto les asignó, etc. Otro aspecto que podemos examinar es el tipo de fiesta. Se observa como “la fiesta” que establece cada testador es una memoria perpetua. Esta última etiqueta que se le pone a la memoria, aunque la realidad se expresa mediante un cauce económico, es decir, la memoria se cumplirá pulcramente en tanto en cuanto haya dinero, cuando la dote o bienes que se le asignasen hayan consumido, la memoria dejará de cumplirse. El tipo de fiesta que más solicitan los testadores es una víspera con su respectiva misa cantada11, es la unidad básica; luego se pueden ir añadiendo más elementos, como el responso sobre la sepultura del testador o una misa mayor12 o una procesión13. Pero estos dos últimos casos son excepcionales y únicamente se realizan cuando la persona que lo pide es socialmente muy relevante. Es muy significativa la diferencia entre una persona eclesiástica y un lego. El primero, se preocupa también de dejar algo importante para su comunidad, así es en el caso del Licenciado León de Pomareda, beneficiado de este lugar, que establece su memoria con misa cantada con su responso y credo14, las dos son poco habituales, generalmente las misas son rezadas, únicamente en momentos especiales, grandes celebraciones litúrgicas, se canta la misa, con ayuda de varios miembros y no digamos el credo, una oración en latín cuyo contenido no se entendía muy bien. Otro caso curioso lo protagonizó el Maestro Luis de Quiroz, beneficiado de Dúrcal 15, aboga por repartir entre todas las iglesias del Valle y el convento de Albuñuelas su dinero y el culto, esto parece estar únicamente al alcance un eclesiástico, pues posee los medios materiales y la visión de conjunto de signo eclesial. Generalmente los legos piensan ante todo en su persona, el eclesiástico piensa también en la comunidad. Las advocaciones Podemos extraer una nómina de las advocaciones más requeridas por los fieles. Encontramos a los intermediado- 20 res divinos más frecuentes, Cristo, la Virgen, y los santos. Partiendo de las devociones que cada fiel ha estimado más conveniente y oportuno, y siempre aplicado a la salvación de su alma, comprobamos que las advocaciones que más repercusión tienen son aquellas dedicadas a la Virgen María. Se hace un recorrido por su vida: cuando nació (la Natividad, celebrada el día 8 de septiembre), al ser visitada por el arcángel Gabriel (la Anunciación, celebrada el día 25 de marzo), cuando dijo que sí (la Encarnación, celebrada el mismo día), al ir a ver a su prima Isabel (la V, celebrada el día 31 de mayo), al ir al templo a presentar al niño recién nacido y entregar la ofrenda de las tórtolas (la Purificación, celebrada el día 2 de febrero), y cuando se durmió y fue llevada al cielo en cuerpo y alma (la Asunción, celebrada el día 15 de agosto). Y como culmen, la tradición española de la Inmaculada Concepción (8 de diciembre). En la Constitución del Rosario de la localidad 1731 el punto 7º incluye las fiestas que había en este siglo XV, básicamente son cuatro18, pero en el cuadro contamos hasta siete, aparte de la celebración del Dulce Nombre de María. ¿Por qué este incremento?, ¿Qué intencionalidad existía? En primer lugar, Trento potenció y fortaleció la figura de María mediante una praxis religiosa, que fue asumida por el Barroco, la imagen de María, era necesaria, se difundió como abogada, intercesora. El arte cristiano potenció la figura de la Virgen, reinventó su iconografía para que fuese más atrayente y pudiera conectar más fácilmente con el fiel. El fiel iletrado va repasando el texto bíblico por medio de imágenes. Por ello, María se representa con “diferentes nombres” como pieza clave en la historia de la salvación. La Virgen, es corredentora, es abogada de gracia, por ello se acude a ella en la hora de la muerte. También encontramos la advocación más difundida por el Valle, el Rosario19 y una que particularmente no tuvo mucho calado y que desapareció, el Dulce Nombre de María, es bastante inusual verla recogida; aparece más en el siglo XIX que en el XVII. Las advocaciones relacionadas con Jesucristo están muy vinculadas a temas con regusto pasionista y también permiten ir repasando el texto bíblico al presentar algunas de las principales escenas, Santísimo, Corpus Christi, Pascua, Pentecostés, Ascensión, etc., todas se relacionan con las cofradías del Santísimo Sacramento, que promueven estas fiestas20. Motril Cofrade En cuanto a los santos, encontramos algunos muy conocidos y difundidos, por ejemplo, S. José (19 de marzo), posee el sobrenombre de “patrón de la buena muerte”21 , o S. Francisco (4 de octubre), tildado de seráfico. Ambos se encuentran al consultar los inventarios o al ver las representaciones22 que han quedado en la localidad estudiada. De otros, apenas tenemos información, como es el caso de S. Amaro Confesor, también se da el caso de los muy poco mencionados, como S. Agustín (día 28 de agosto). Los legados económicos N o cabe duda que sin una parte material de la que devengar el servicio prestado, víspera, misa cantada, sermón y procesión, no sería posible que el beneficiado, el cura y el cuerpo de seguidores, sacristán, acólito/s y organista, atendiesen los deseos del testador. Como se dijo al principio, la información recogida es muy desigual, sin embargo, en algunas memorias consta que se extraía una renta de la hacienda, o se ponía en venta un trozo de tierra, la extensión va desde la más pequeña suerte al más grande olivar. Cada legado es una muestra particular y única, que debemos inscribir dentro de las coordenadas que marca la sociedad católica. El fiel que deja una memoria perpetua tiene una posición socioeconómica cómoda en medio de la sociedad en gran medida de subsistencia. Ello se aprecia en la limosna que otorgan y en el tiempo en que se realizó, es decir, cada memoria posee un plazo, un promedio de entre setenta y ochenta años en los que puntualmente se fue realizando. Sin la dotación económica la iglesia no podría funcionar pues casi siempre los eclesiásticos de menor rango, todos los que no poseen grandes cargos, tuvieron que subsistir, mientras obispos, canónigos, curiales, etc., tuvieron dinero suficiente para invertir en lujo, ostentación y vicios. El dinero que recibe la Iglesia es para costear y mantener al personal que la atiende; para tener un culto digno; para la catedral, la cercana de Granada, en menor medida, y las lejanas de Santiago de Compostela y del Vaticano y, para el Estado. Para que el legado fuese puntualmente pagado se buscan las garantías necesarias en una sociedad rural cerrada. Por ello, se acude a los parientes o personas de confianza como hace por ejemplo Gregorio Manrique: dejó estipulados 28 FIESTAS DE LA VIRGEN MARÍA.- Encarnación de Nuestra Señora: 10 • Asunción de Nuestra Señora16: 8 • Limpia Concepción de María: 3 • Dulde Nombre de María: 1 • Purificación de Nuestra Señora: 1 • Nuestra Señora del Rosario: 3 • Natividad de Nuestra Señora: 3 • Visitación de Nuestra Señora: 1 / FIESTAS DE DIOS Y DE JESUCRISTO.- Corpus Christi: 1 • Santísimo Sacramento: 1 • Ascencsión de Nuestro Señor: 1 • Pascua de Pentecostes17: 4 / FIESTAS DE SANTOS Y SANTAS.- Santa Inés: 1 • San José: 3 • San Amaro Confesor: 1 • San Francisco: 3 • San Miguel Arcángel: 2 • San Agustín: 1 / OTRAS DEVOCIONES.- Por las Ánimas del Purgatorio: 1 ducados para la fiesta de la octava de Ntra. Sra. del Rosario y que los continuasen pagando sus herederos, Lucia Quesada y Cristóbal Ruiz23. Era la garantía para que el alma de Gregorio recibiera las gracias perpetuas que una víspera, misa cantada y responso sobre su sepultura le iban a reportar. Visión hacia el más allá N o existe ninguna duda sobre la intencionalidad que tenía cada persona al costear su memoria: el eterno descanso del cuerpo (en el cementerio), y del alma (por las misas y gracias espirituales), se trataba de pedir por el alma del finado, que podía estar purgando la pena; al proponer un recuerdo constante el alma, salía antes del purgatorio. Era una idea grabada a fuego en la mente, en el purgatorio y el tiempo se alargaba o acortaba dependiendo de las misas que hubiera dejado en el testamento, de si pertenecía o no a alguna institución confraternal que rogase por su ánima24, en definitiva, cuando tras la muerte el individuo seguía “vivo” en la conciencia de la sociedad/la Iglesia se accedía más rápidamente al paraíso, pero, si era olvidado 21 Motril Cofrade y no recibía las gracias estarías eternamente condenado a sufrir sin ayuda. Quien dejó la memoria estipuló la dotación económica, la advocación divina a quien se iba a recurrir, el sitio y la vigilancia25. La religiosidad popular S e debe hacer un alto en el camino para analizar varias advocaciones propias de las confraternidades, el Santísimo, el Rosario y las Ánimas, forman parte del día a día de la vida rural encuadrada dentro de la religión oficial. De hecho, las advocaciones de la Virgen tienen auge en gran medida porque la cofradía del Rosario las fomentaba e iban calando en los fieles que aprendían a “amar” a María más intensamente, a tenerla por protectora frente a todas las calamidades que iban a afrontar durante su vida y a tenerla como abogada a la hora de su muerte. La del Santísimo se centraba en dar auge a todas aquellas fiestas en que Jesucristo era el protagonista, invención de la Cruz, Corpus, Pascua, etc. Los intermediadores entre el hombre y Dios, santos y santas y arcángeles, tienden una red para unir el mundo terrestre con el divino. Esta religiosidad originó que la sociedad acudiera a los intercesores divinos para diversas causas. La protección divina a la comunidad: el voto A parte de los particulares, la comunidad, representada en el Concejo puede impetrar la protección de la divinidad, primeramente de S. Sebastián y S. Fabián y posteriormente de la Virgen. En el primer caso tienen el “mejor” protector contra la epidemia que podría acabar con la población, la peste de 1583, la enfermedad pandémica más extendida durante el siglo XVII, que diezmaba a las poblaciones provocando graves pérdidas demográficas que se recuperaban lentamente. En prevención se acudió al intercesor divino especializado en la terrible enfermedad, y para que surtiese efecto la súplica, se dijo una “misa cantada y procesión desde la Ermita antes de la misa mayor celebrada en la iglesia parroquial y se llevasen los codales de la cofradía encendidos y la cruz26, fue parte del voto que el Concejo promovió estando algunos lugares de la costa de Motril27 tocados por 22 la peste pidiendo que se librase de ella la población por medio de estos santos”28. El ente responsable de la paz social y de guiar la vida pública, el Concejo, actúa como garante de la protección que los pobladores van a recibir al estar bajo su autoridad. Prueba de ello es el segundo caso, se acude a la Virgen ante la necesidad de agua, el año fue seco, por ello se vuelve a ampliar el voto, “se celebrarían las nueve fiestas de la Virgen a partir del mes de mayo suplicando a Nuestra Señora”29, suplicándole por la acuciante necesidad. Conclusión E l mundo religioso en el siglo XVII se presenta como una amalgama entre fe, riqueza y poder. La fe es un mecanismo articulador de la conciencia y se expresa con un aporte económico que realiza cada testador en el afán por conseguir un lugar en el paraíso. El dominio de Dios se pone en venta, se cuantifica y se traduce en bulas y gracias espirituales. Hay otra idea paralela que atrapa a cada persona, al morir debía pasar por el purgatorio antes de ir al paraíso, hay que valerse de todos los medios a su alcance para estar el menor tiempo posible en el lugar de tormento que la propia Iglesia se encarga de difundir y de grabar en las conciencias. Por ello, se recurre a las advocaciones que desde la infancia estuvieron relacionadas con la vida de cada persona. La onomástica, el patrón o el intercesor que cada familia considera más poderoso, quien haya realizado algún milagro, etc., cada advocación es sopesada pues debe ser eficaz para el propósito que persigue quien la tiene, la salvación. Sin el “caballero don dinero” nada se puede hacer en la sociedad cuasi paupérrima del siglo XVII. El dinero otorga posición social, por ello quien posea suficiente masa monetaria tendrá un papel protagonista en una sociedad donde muy poca gente dirige el destino de la mayoría. Así, crear una memoria es síntoma de disfrutar de una condición social firme, la persona que le hace es tenida por miembro eminente de la sociedad rural. A la hora de consignar las memorias se indicaba su ascendencia social añadiendo un signo distintivo, el don o doña, muy poca gente seglar lo poseía. Por otro lado, existe la separación en sectores, los eclesiásticos y los legos. Anexo 1ª) Licenciado León de Pomareda, beneficiado de este lugar establece dos memorias, una, el día de la Encarnación de Nuestra Señora, y otra en la octava del Santísimo Sacramento con misa cantada con su responso y credo. Se cumplió desde 1609 hasta 163030. 2ª) Catalina López, viuda de Mateo Moreno, una misa rezada perpetuamente a S. Francisco en su octava. Se cumplió desde 1616 hasta 163531. 3ª) Justo López de Soto dejó 40 ducados de réditos e hizo dos memorias con su vísperas, misa cantada y responso sobre su sepultura. Una, el día del Espíritu Santo, y otra, el día de la Asunción de Nuestra Señora. Se cumplió desde 1616 hasta 168432. 4ª) Licenciado Francisco Fernández de Piedraita, beneficiado de este lugar, dejó una memoria en la octava del día de S. Miguel arcángel con su vísperas, misa cantada y responso sobre su sepultura. Se cumplió desde 1600 hasta 164833. 5Dª María de Salas, dejó dos memorias, una, el día de la Limpia Concepción de María, y otra, el día de la Anunciación de Nuestra Señora, dejó de bienes cinco suertes para pagar la limosnas de 12 reales, pone la cera el beneficiado en el altar. Se cumplió desde 1583 hasta 168534. 6ª) Francisca de Haces, mujer de Juan Vidal, deja una memoria, el día de la Natividad de Nuestra Señora; dejó una suerte en Otívar, terminó de Almuñécar. Se cumplió desde 1600 hasta 168435. 7ª) El Concejo de Albuñuelas hizo en 1586 promesa y voto perpetuo para que se hiciese una fiesta a S. Sebastián y a S. Fabián con una misa cantada y procesión desde la Ermita antes de la misa mayor celebrada en la iglesia parroquial y se llevasen los codales de la cofradía encendidos y la cruz. Se hizo voto estando algunos lugares de la costa de Motril tocados por la peste pidiendo que se librase de ella la población por medio de estos santos, el Concejo dejó 12 reales de limosna; según el acuerdo de Cabildo se celebrarían las nueve fiestas de la Virgen a partir del mes de mayo suplicando a Nuestra Señora la necesidad de agua, se dio 86 reales de limosna para la misa cantada y responso en acción de gracias. Se cumplió desde 1600 hasta 168536. 8ª) Dª. María de Perea, viuda de Justo de Molina, tiene dotada la fiesta de la Invención de la cruz que se celebra a tres del mes de mayo con víspera, misa cantada y procesión desde la iglesia hasta la placetilla del Barrio Alto. Otorga una limosna de 18 reales. Se cumplió desde 1622 hasta 168437. 9ª) Juan López de Urquiza el 9 de mayo de 1623 establece la fiesta de la Limpia Concepción con víspera y misa cantada durante su octava, con un responso sobre su sepultura. Deja 24 ducados y que la cofradía del Santísimo asista al acto. Se cumplió desde 1624 hasta 168438. 10ª) Gracia Vidal, mujer de Pedro de Mingorance, estableció una memoria la víspera de la fiesta de la Asunción de Nuestra Señora por su alma, la de sus padres y su marido39. 11ª) Diego Alonso, establece la octava a S. Francisco con una misa cantada y dejó 22 ducados y 12 reales de una haza40. 12ª) Diego Hernández Moncana e Isabel de Velasco, establecen la memoria para una fiesta perpetua en la octava a S. Francisco41. 13ª) Juan Moreno y María Rodríguez establecen fiesta de la Anunciación de la Virgen, con víspera y misa cantada, un día después de la fiesta y un responso sobre su sepultura común; el beneficiado pone la cera en el altar; de limosna dejan 10 reales. Se cumplió desde 1605 hasta 168442. 14ª) Justo de Portillo, deja 14 ducados a S. Amaro Confesor por su día celebrado en mayo, con una misa cantada y su víspera. Se cumplió desde 1606 hasta 165243. 15ª) Beatriz de Raya, establece una fiesta perpetua con una misa cantada con su víspera en la octava de la Anunciación de Nuestra Señora y un responso sobre su sepultura; el beneficiado pone la cera en el altar. Se cumplió desde 1607 hasta 165244. 16ª) Gregorio Manrique, dejó 28 ducados para la fiesta de la octava de Nuestra Señora del Rosario y que continuarán pagando sus herederos, Lucia Quesada y Cristóbal Ruiz. Se cumplió desde 1607 hasta 164045. 17ª) Catalina de Pinilla establece una víspera y misa cantada el día de la limpia Concepción por sus ánimas. Se cumplió desde 1607 hasta 164846. 18ª) Francisco Barrero dejó 16 ducados para la fiesta de Nuestra Señora de la Asunción con víspera, misa cantada y un responso sobre su sepultura. Se cumplió desde 1611 hasta 164847. Motril Cofrade Todas aspiran a la salvación. Las memorias de misas dan buena cuenta de ellos, pero parece evidente que los eclesiásticos se preocuparon también de engrandecer y solemnizar el culto en su iglesia parroquial a lo largo de todo el año litúrgico. 23 Motril Cofrade 24 19ª) Caterina de Aranda, dejó 14 ducados de los réditos de su hacienda establece una fiesta para el día de S. José, por ser patrón de su marido Diego Martín Recalde, con víspera, misa cantada y un responso sobre su sepultura. Se cumplió desde 1610 hasta 168548. 20ª) Licenciado Diego de Molina de Rueda, beneficiado de este lugar, establece una fiesta perpetua el día de la Encarnación de Nuestra Señora y día de S. José; dejó un ducado de limosna para la víspera y misa cantada. Se cumplió desde 1614 hasta 168549. 2ª) Toribia Díaz, establece una fiesta perpetua el día de Nuestra Señora de la Asunción, víspera y misa cantada. Se cumplió desde 1613 hasta 167450. 22ª) Pedro de Chávez por su testamento de 8 de abril de 1617 dejó 20 ducados para la misa cantada en la octava del día del arcángel S. Miguel. Se cumplió desde 1617 hasta 168451. 23ª) Maestro Luis de Quiroz, beneficiado de Dúrcal, establece unas fiestas perpetuas, el día de Sta. Inés y en la octava de la Purificación de Nuestra Señora, para que se digan en las iglesias del Valle y en el convento franciscano de Albuñuelas. Se cumplió desde 1628 hasta 166552. 24ª) Mariana, mujer de Justo García de Roca, establece una fiesta perpetua el día de la Natividad de Nuestra Señora, el 8 de septiembre. Se cumplió desde 1624 hasta 168453. 25ª) Alonso Díaz, establece una fiesta perpetua el día de Nuestra Señora del Rosario, otorga de limosna un ducado. Se cumplió desde 1629 hasta 167854. 26ª) Gabriela de Vílchez, mujer de Salvador de Espinosa, establece una fiesta perpetua el día de la Anunciación de Nuestra Señora, el 25 de marzo. La dotó sobre media suerte que estaba por encima de la “Pileta”. Se cumplió desde 1630 hasta 168555. 27ª) Andrés González establece una fiesta perpetua el día del Espíritu Santo; con víspera y misa cantada el día de Pascua de Pentecostés; un ducado de limosna. Se cumplió desde 1630 hasta 166056. 28ª) Constanza Ramírez, establece una fiesta perpetua para la octava de la Anunciación; dejó 12 reales de limosna sobre un majuelo en el “Camino de Granada”. Se cumplió desde 1631 hasta 168457. 29ª) Mariana de Urquiza establece una fiesta perpetua el día de la Encarnación de Nuestra Señora, y dos misas, una, día del Espíritu Santo y otra por las Ánimas del Purgatorio siendo patrón el beneficiado . Se cumplió desde 1630 hasta 168458. 30ª) Dª. Ana Belmonte establece una fiesta perpetua con vísperas y misas cantadas el día de la Asunción de Nuestra Señora, y el día de S. Agustín o su octava; dejó 11 reales de limosna de su hacienda. Se cumplió desde 1634 hasta 168459. 31ª) Cristóbal del Castillo establece una fiesta perpetua el día de la Natividad de Nuestra Señora (8 de septiembre) con víspera y misa cantada; un ducado de limosna de su hacienda; patrón el beneficiado. Se cumplió desde 1633 hasta 168460. 32ª) Francisca Ballesteros establece una fiesta perpetua el día de la Anunciación Nuestra Señora; dejó 20 ducados de su hacienda. Se cumplió desde 1635 hasta 168562. 33ª) Quiteria Martínez, establece una fiesta perpetua el día de la Ascensión de Nuestro Señor y Asunción de Nuestra Señora, día de S. José; dejó 60 ducados y se paguen de cada una un ducado por sus herederos. Se cumplió desde 1637 hasta 169963. 34ª) Licenciado D. Manuel de Hermosilla, beneficiado, establece una fiesta perpetua el día de la Asunción de Nuestra Señora (15 de agosto); dejó 20 ducados de su hacienda. Se cumplió desde 1639 hasta 168464. 35ª) Juana Jiménez, viuda de Justo de Raya, establece una fiesta perpetua el día de S. Francisco. Se cumplió desde 1639 hasta 168465. pañe por ser durante muchos años Hermana Mayor. Una víspera y misa cantada al Dulce Nombre de María que se ha de fundar en la cofradía del Rosario, otra fiesta a Nuestra Señora del Santo Rosario, sobre su hacienda la “hoya de detrás de la iglesia” que dejó a Dª. María de Espinosa su sobrina, mujer de D. Salvador de Torres; otra día de la Asunción, con misa mayor y la funda sobre un alcance que hace a la cofradía del Santísimo; deja seis ducados para que se cumpla. Se cumplió desde 1682 hasta 168468. Notas 1 Se entiende por tal toda anotación habida cuenta del desempeño de una tarea que realiza cualquier miembro del ente eclesiástico, pero únicamente, el cura, el beneficiado y el capellán, realizan las anotaciones, además de los escribanos eclesiásticos. 2 Ello depende del tiempo, de la minuciosidad con la que trabaje el registrador de los datos y sobre todo conecta con el nivel intelectual de quien lo hace. Hay páginas indescifrables, con una letra pésima, de muy difícil lectura y comprensión, otras, tienen bella grafía, frases lógicamente construidas e intenta anotar el máximo de detalles. 3 Hay volúmenes afectados por la humedad, los que menos, otros por la plaga del papel. El libro que se estudia presenta partes afectados por uno y otro factor. Aparte de los agentes que le afectan directamente al papel hay que hablar de los procesos históricos que sucedieron en la localidad, la llegada de los franceses a la zona y el terremoto de 1884, los dos hechos hicieron que peligrase la documentación parroquial, pero se salvó, por la precaución de los frailes franciscanos en guardarla celosamente de los invasores franceses. Y a pesar de que la casa del párroco se vio afectada provocando incluso la muerte y la de su familia el archivo no sufrió demasiado. 4 La importancia de los archivos parroquiales para la historia local y general está sobradamente probada, así como su interés en distintos campos de investigación: historia eclesiástica, demografía, historia del arte, economía, estudios sociales e historia de las mentalidades. Fernández Catón ve en ellos una fuente imprescindible para el estudio de muchas realidades hasta ahora olvidadas; la historia y la misma iglesia, creadoras a lo largo de los siglos de esa fuente imprescindible, nos urgen a que cuidemos este patrimonio. De ahí la necesidad de que la iglesia tome conciencia de esto y acuda, cuando todavía hay tiempo, a remediar los males que sobre él pueden venir, en PONS ALÓS, Vicente, “El archivo parroquial de Ayora: fondos manuscritos”, p. 273, en la página web: http://rua.ua.es/ dspace/bitstream/10045/7180/1/HM_02_15.pdf 5 Si observamos en el de Melegís, o el de Dúrcal, comprobamos 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 Motril Cofrade 36ª) D. Ruiz García de León y su mujer, Ana de Palomares, establece una fiesta perpetua el día del Corpus Cristi. Se cumplió desde 1658 hasta 168566. 37ª) Dª. María Melguizo y Guzmán, establece una fiesta perpetua el día de la Nuestra Señora de la Encarnación; dejó 20 ducados. Se cumplió desde 1660 hasta 168567. 38ª) Dª. Aldonza de Rueda y Guzmán, establece una fiesta perpetua el día de la Visitación de Nuestra Señora que funda para la cofradía del Rosario, a la que pide que acom- que faltan volúmenes, en el segundo archivo únicamente han quedado los libros sacramentales, desapareciendo todo registro de las instituciones confraternales, visitas o mandatos, etc. SERNA SERNA, Sonia, “Los testimonios escritos y la configuración de la memoria de un canónigo burgalés: una propuesta metodológica”, EDAD MEDIA. Rev. Hist., 12 (2011), p. 272. Al formar parte de los medios para llevar un control, en este caso sobre las memorias, que se deben realizar. Dependiendo del modo en que se clasifiquen en base a su temática estarán en un sitio u otro. Por ejemplo en la parroquia de San Blas, Bodonal de la Sierra (Badajoz), los inscriben dentro de Colecturía, Libro índice de aniversarios, fundaciones y memorias. SERNA SERNA, Sonia, op. cit., p. 272. SERNA SERNA, Sonia, Ibidem, p. 272. Justo López de Soto… dos memorias con sus vísperas, misa cantada y responso sobre su sepultura, fols. 4v./5r.-5v.; Juan López de Urquiza, fols. 19v.-20r.; Diego Alonso, fols. 23r./24r.; Juan Moreno y María Rodríguez, fols.27r.-27v.; Justo de Portillo, fols.30r./31r.; Beatriz de Raya, fols.32r./33v.; Catalina de Pinilla, fols.35r./36v.; Francisco Barrero, fols.37r./38r.; Caterina de Aranda, fols.39r./40r.; Licenciado Diego de Molina de Rueda, fols.41r./42r.; Toribia Díaz, fols.49r.-49v.; Pedro de Chávez, fols. 60r.-60v.; Andrés González, fols.77r.-77v.; Constanza Ramírez, fols. 79r.-79v.; Dª. Ana Belmonte, fols. 81.-81v.; Cristóbal del Castillo y Dª. Aldonza de Rueda y Guzmán, en las demás anotaciones no aparece la especificación de lo que van a hacer, pero todos se sobreentiende, tendrán misa cantada. Archivo Parroquial de Albuñuelas, (A. P. Alb) El Concejo de Albuñuelas la hizo en 1586, fols. 16r./18r. Dª. María de Perea, víspera, misa cantada y procesión, fols. 19r.-19v. Ibidem, fol. 4r. Ibidem, fols.62r./63r. También aparece mencionada como: la Anunciación de Nuestra Señora. Aparece con otra denominación: Espíritu Santo. También se ordena, que en dicha Cofradía aya cada año quatro aniversarios por los difuntos, en los días inmediatos des- 25 Motril Cofrade 19 20 21 22 23 24 25 26 27 26 pués de las quatro festividades de la Purificación, Anunciación, Asumpción, y Natividad de la Virgen, a que deben asistir los cofrades no impedidos y se les dé noticia, poniendo cédulas, o de otro modo. Documento XII. Regla que regirá el ordenamiento de la Cofradía del Santo Rosario, fols. 1v./2r., en ROMERO CASTILLO, Manuel, La vida en una localidad rural andaluza de la Edad Moderna: Albuñuelas cofradías y religiosidad, Ed. CSV, Granada, 2008, p. 210. Buena prueba de ello es que en cada iglesia encontramos su sagrada imagen. Aparecen recogidas en la regla de Albuñuelas, en el Capítulo 16 de lo que la dicha Cofadría y cofadres de ella están obligados a hacer los santos días del Juebes y Viernes Santos y Capítulo 17 que habla de quando el Santísimo Sacramento saliere a comulgar a algún hermano, en ROMERO CASTILLO, Manuel, op. cit., pp. 240-241. Por ello se le dedica una oración que se reza, actualmente, tras el rezo del rosario. “San José glorioso, padre bondadoso, esposo afable y custodio de Dios, ayúdanos a bien morir, que cuando me acueste tenga una muerte santa y una vida digna. Amén”. En el Altar Mayor de la parroquial encontramos la imagen de S. José (proveniente de la antigua iglesia) y en una de las repisas la de S. Francisco, también hay otra más pequeña en la Ermita de S. Sebastián en el Barrio Bajo y varios cuadros que representan al santo recibiendo los estigmas. Ibidem, fols. 34r.-v. La cofradía del Santísimo, Rosario y Benditas Ánimas poseen capítulos dedicados a rogar por el alma de la persona, además, si se cumplen las prácticas que recogen en su regla se ganan las indulgencias. Hay que cerciorarse que las memorias se digan, pues de ello depende que el tránsito por el purgatorio, así, se establece un vínculo con la comunidad que lo acogió en vida y que tras la muerte se va a preocupar de mantener “viva” su memoria. Se espera que las futuras generaciones hagan lo mismo. A. P. Alb., Libro de memorias de la parroquia de Albuñuelas, fols. 16r./18r. De esta época es el templo del Carmen, construido en 1583 como Ermita de San Roque para conmemorar a las víctimas de la epidemia de peste sufrida por la población de Motril en ese año. Se levantó sobre un pequeño promontorio elevado artificialmente en forma cuadrangular, cuyo centro lo ocupa una cruz de piedra. Este promontorio es la tumba colectiva de las casi 500 víctimas de la epidemia, MEDINA VÍLCHEZ, Gabriel “La Iglesia de la Virgen del Carmen”, en la página web: http://coralarmiz.com/Motril/iglesias_de_motril.htm 28 Ibidem. 29 Ibidem. 30 A. P. Alb., Libro de Memorias de la parroquia de Albuñuelas, fol. 4r. 31 Ilegible. 32 Ibidem, fols. 4v/5r.-v. 33 Ibidem, fols. 6r.-v./7v. 34 Ibidem, fols. 9r./11r. 35 Ibidem, fols. 12r./15r. 36 Ibidem, fols. 16r./18r. 37 Ibidem, fols. 19r.-v. 38 Ibidem, fols. 19v.-20r. 39 Ibidem, fols. 21r./22v. 40 Ibidem, fols. 23r./24r. 41 Ibidem, fols. 26r./28v. 42 Ibidem, fols. 27r .-v. 43 Ibidem, fols. 30r./31r. 44 Ibidem, fols. 32r./33v. 45 Ibidem, fols. 34r.-v. 46 Ibidem, fols.35r./36v. 47 Ibidem, fols.37r./38r. 48 49 50 51 52 53 54 55 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67 68 Ibidem, fols. 39r./40r. Ibidem, fols. 41r./42r. Ibidem, fols. 49r.-v. Ibidem, fols. 60r.-v. Ibidem, fols. 62r./63r. Ibidem, fols. 72r./73r. Ibidem, fols. 74r.-v. Ibidem, fols. 75r./76r. Ibidem, fols. 77r.-v. Ibidem, fols. 79r.-v. Ibidem, fols. 80r.-v. Ibidem, fols. 81.-v. Ilegible. Roto. Ibidem, fols. 86r.-v. Ibidem, fols. 87r.-v. Ibidem, fols. 88r.-v. Ibidem, fols. 89r.-v. Ibidem, fols. 102r./103r. Roto. Roto. Bibliografía —Aznar Gil, F.R., La administración de los bienes temporales de la Iglesia. Legislación universal y particular española, Salamanca, 1984, pp. 293-303. —Medina Vílchez, Gabriel “La Iglesia de la Virgen del Carmen”, en la página web: http://coralarmiz.com/Motril/iglesias_de_ motril.htm —Morin, Edgar, El Hombre y la Muerte. Editorial Kairós. Barcelona, 1994. —Pons Alós, Vicente, “El archivo parroquial de Ayora: fondos manuscritos”, pp. 273-319, en la página web: http://rua.ua.es/ dspace/bitstream/10045/7180/1/HM_02_15.pdf —Romero Castillo, Manuel, La vida en una localidad rural andaluza de la Edad Moderna: Albuñuelas cofradías y religiosidad, Ed. CSV, Granada, 2008. —Sancho Capdevila, D., El archivo parroquial y su ordenación. Estudio y normas prácticas para ordenar, catalogar y conservar los archivos parroquiales, Anuario Eclesiástico, Barcelona, 1926. —Serna Serna, Sonia, “Los testimonios escritos y la configuración de la memoria de un canónigo burgalés: una propuesta metodológica”, EDAD MEDIA. Rev. Hist., 12 (2011), Universidad de Valladolid, Valladolid, 2011, pp. 257-280. Motril Cofrade El ensayo de costaleros como entrenamiento para la salida procesional: un ejemplo práctico David Luis Sánchez Latorre, Ramón Fuentes Escalzo y Juan Gavala González 1. Introducción P ara la mayoría de los autores (Albornoz y Baena,1998; Albornoz y Suárez, 2003; Rodríguez Asuero, 2005; Gomar, 2005; Lorenzo, 2005 y Escribano, 2008) el trabajo del costalero es bastante duro. Alguno de ellos lo compara con el esfuerzo de un deportista de alto nivel por lo que necesitarían una buena condición física. Algunos de estos autores han evaluado el esfuerzo del costalero considerando la frecuencia cardiaca por minuto (ppm) como un índice de referencia del esfuerzo, de este modo Rodríguez (2001) afirma que el pulso medio por minuto de un costalero suele estar entre las 80 y las 100 ppm., En cambio, Sánchez Latorre (2002) y Gomar (2005) la sitúan entre las 110 y las 140/150 ppm. Otros, en cambio, han tomado como referencia el peso que soportan los costaleros, destacamos los estudios de Rodríguez (2001), Altemir (2002), Albornoz y Suárez (2003) y Pardo (2005) los cuales cifran el peso medio que soportan los costaleros de Córdoba y Sevilla en unos 4070 kg, con un peso medio por costalero de unos 27 kg. Tirado et al. (2003) en su estudio de costaleros de distintos municipios de estas dos provincias anteriores y de la de Cádiz, afirman que el peso medio que soporta cada costalero es de unos 28 kg. Por otro lado, Guillén del Castillo y Pérez (2000) en un estudio sobre los costaleros de Córdoba tasan la carga soportada entre los 27,5 y los 41,48 kg. Estos mismos autores, más tarde y en la misma ciudad afirman que el peso que llevan estos cargadores oscila entre los 28 y los 70 kg., con una media de 41,48 kg/costalero. (Guillén del Castillo y Pérez, 2003). Algo menor es el peso (30-35 kg.) que dicen que soportan los costaleros de Badajoz (Silva de Lima, 2006) o los de la Hermandad de la Macarena de Sevilla (Escribano, 2008) o los del paso del Señor de la Sentencia de Úbeda, unos 25 kg. (Sánchez Latorre, 2002). Por tanto, parece que el aprovechamiento de los ensayos debe ser algo primordial. Sin embargo, esta creencia desaparece rápidamente al ahondar en la bibliografía existente: Castellano (2003) Mellado (2003) y Sánchez Latorre (2002) afirman que los ensayos no se corresponden con la estación de penitencia ni en tiempo de esfuerzo (chicotás) ni en el de descanso (“con el paso arriao”) ni en el número de levantás ni mucho menos en la carga. Por lo 27 Motril Cofrade LA PLANIFICACIÓN DE LOS ENSAYOS Duración, peso y recuperación Valores medios del Cuestionario 10 9 8 7 6 5 4 3 2 1 1 Duración (min.) Duración chicotá (min.) 2 3 4 Peso por costalero (kg) Recuperación (min) Cuestionario LA IGUALÁ P. IZQ. FIJADOR IZQ. CORRIENTE FIJADOR DCH. P. DCH. DIFERENCIAS Medina 151,5+1 E. Poza 151 Juanma 150,5+1,5 Fidel 150,5+1 Sito 151+1 -9 Iván Poza 152 Juan A. 154,5 F.Reyez 150,5+1,5 Luis F. 154 José Tello 155 J.L.Sánchez 154,5 Dani 152 Gerva 153+1 Alfonso 154 Agulllo 155? Chapu153,5+1 D. Suárez 154+0,5 A. Resa 153+1,5 -6 0 Grego 159,5 Migue 158+1 Pedro 156,5+3 Tello 158+1 J.L.Latorre 160,5 Jesús 160 F. Madrid 156,5+3 Lizana 156+3 Sergio 156+4 Felipe 157+2,5 Francis 149,5 Leandro 148 Montesinos 148 Tetes 148 Esteban 149,5 -11,5 Juanma 145+1 Cortijo 145+1 P. Moro 146+1 14 Bienvenido 147,5 Jesús B. 145,5+1 Ginés 140+4 M. Jurado 145 Peseta 141,5+3 -15,5 A. Cruz 149 Ramón 146+1 F. J. Molina 145,5+1 Popi 145,5 28 Juan 145 Ardoy 140,5+4 5 6 7 8 9 1 Plan. Ensayo 2 Estado forma 3 Marchas 4 Descansos 5 Inf. física 6 Calentamiento 7 Estiramientos 8 Posturas 9 Inf. previa 2. Puesta en marcha 2.1. La Planificación de los ensayos C omo hemos dicho anteriormente, el trabajo físico de un costalero es comparado con el de un deportista. Al igual que ocurre en muchos deportes, sobretodo los de equipo por tener muchas características comunes con una cuadrilla de costaleros, la planificación de los ensayos y el trabajo previo a la competición (salida procesional), lo consideramos un aspecto muy importante dentro de nuestra hermandad. Dentro de nuestra planificación para la cuadrilla de costaleros, señalamos cuatro puntos importantes en el transcurso de los ensayos y que evidentemente también influirán en el día de la estación de penitencia: • la duración del ensayo. • el peso por costalero. • la duración de las chicotás. • la recuperación entre las mismas y en general en cada ensayo. Estas variables surgen de los estudios citados anteriormente y nos sirven de referencia para la optimización de los ensayos. Toda planificación, requiere una evaluación. Así proponemos un cuestionario que después de cada ensayo rellena cada costalero anónimamente. En el se recogen datos que hacen flexible la planificación y valoran los resultados obtenidos. Está información es de mucha importancia para el cuerpo de capataces y los preparadores físicos. Con los datos obtenidos se realizada un diagrama de barras para ver que variables debemos mejorar. Con esta encuesta sabemos de primera mano lo que demandan nuestros costaleros, al tiempo que nos sirven para ver en qué variables debemos incidir. En este caso, el estado de forma del costalero, las marchas y el descanso son los factores que obtienen una puntuación menor, a pesar de que sobrepasa el 7, pero en las que debemos centrarnos de cara al futuro ensayo, sin descuidar las otras. A continuación, vamos a describir algunas propuestas para mejorar estas variables que queremos aumentar o mejorar. Motril Cofrade que son muchos los autores (Albornoz y Baena, 1998; Altemir, 2002; Sánchez Latorre, 2002; Albornoz y Suárez, 2003; Moreno, 2003; Ramírez, 2003; Castellano, 2003; Cañizares, 2003, Viso, 2003; Rodríguez Asuero, 2005; Gomar, 2005; Lorenzo, 2005; Quesada, 2005) que recomiendan la realización de un entrenamiento o preparación física planificada, paralela a los ensayos, que esté orientada para aumentar su rendimiento bajo las trabajaderas, disminuyendo la aparición de la fatiga y las temidas lesiones, de tal modo que los costaleros puedan realizar un trabajo mayor tanto cualitativa como cuantitativamente. Sin embargo, ninguno de los estudios anteriores ofrece la “receta mágica” de cómo mejorar el “rendimiento” de la cuadrilla el día de la Estación de Penitencia. Entiéndase por “rendimiento” la mejora en el andar de los pasos y la disminución de la probabilidad de lesión por parte de algún costalero. Y es por ello que nos decidimos a realizar una “planificación y estructuración de los ensayos de la cuadrilla de Ntra. Sra. de las Penas (Hdad. de la Sentencia de Úbeda). Sabemos de antemano que el mundo del costalero por su idiosincrasia y tradición hacen que todo sea algo más difícil, “todos los inicios de cualquier ámbito son difíciles, pero se llega a superarlos al entender su sencillo razonamiento, en cuanto a su utilidad y sus ventajas”. Así, hemos pasado de ser unos “locos” estamos inmersos en una concienciación de la importancia del tema. Hoy día son multitud de hermandades las que no pasan de largo este tema y valoran una planificación física para que sus costaleros vayan con las máximas garantías de éxito en cuanto a su preparación y prevención. El estado de forma Cada costalero es “único y diferente”. Así las pautas de entrenamiento o de mejora de la salud de forma individualizada aportada en cada ensayo sirven de poco de cara a mejorar el estado de forma de la cuadrilla. Por tanto, nos planteamos cómo podemos aumentar la capacidad de los hombres, y de las propuestas que se barajaron, nos quedamos con dos: 1. Distribución de los costaleros en el paso de palio: Poniendo un símil deportivo, nuestra plantilla es la que es y con estos costaleros tenemos que jugar. Así debemos buscar la mejor ubicación para cada costalero en cada palo 2. La organización de los tramos del recorrido C/ Romero Civantos, 1 • MOTRIL • 958 60 80 50 • [email protected] www.maxibebe.org 29 Motril Cofrade ORGANIZACIÓN DE TRAMOS Y LAS MARCHAS Organización de las marchas Organización de tramos FI= Fijador izquierda / FD= Fijador derecha / C= Corriente LA PLANILLA DE CONTROL DE LA PLANIFICACIÓN Estudio estación de penitencia del paso de palio de Mª Stma de las Penas 30 Por las particularidades que tenemos en la cuadrilla. El año 2012 era la primera salida procesional de la Virgen de las Penas (nuestro paso de palio) y la disparidad en las características de los costaleros (altura, veteranía-inexperiencia, etc.) este punto se nos hizo muy difícil a lo largo de la planificación, de cada ensayo, etc. Y después de mil y una probatura llegamos a la solución idónea en cuanto a una distribución correcta y cómoda para la cuadrilla de costaleros aunque, esta solución llegó en fechas muy cercanas a la Semana Santa. Al final organizamos la parihuela con la distribución del grafico siguiendo los consejos de la Física en relación a la carga de pasos y las características individuales de los costaleros. 2.3. La organización de los tramos del recorrido Otro de los puntos importantes dentro de nuestra planificación, fue la organización de los tramos del recorrido. Aspecto de vital importancia ya que necesitábamos repartir el esfuerzo en función de las características físicas de cada costalero y las características del entorno. Para la cuadrilla, todos los puntos son importantes y si queremos que el grupo esté confiado y seguro de sus posibilidades debemos tener planificados todos los aspectos que nos puedan dar el mayor rendimiento. Los costaleros valoraron positivamente este punto cuando se expuso y cada uno “sintió” la importancia que tenía dentro del paso y dentro de la cuadrilla de costaleros en su conjunto. De este modo distribuimos las zonas del recorrido y cada costalero llevaba su organización de los relevos y de sus zonas. y durante un periodo de tiempo tan largo, esta variable pasase desapercibida. Por tanto, se planifica el descanso de cada costalero en cada tramo (ver gráfico anterior). Para optimizar aun más el esfuerzo, se relacionan esos descansos con la zona por donde se camina. Así, hay tramos donde el agua de la calle provoca que el corriente se quede colgado del paso (ver grafico anterior). Se aprovecha esta situación para que entre en otra trabajadera o descanse. Se trata de economizar esfuerzos físicos y planificar hasta el último detalle para que el paso “rinda” al máximo. Motril Cofrade 2.2. La igualá: La distribución de los costaleros en el paso de palio 2.4. La Planilla de control de la planificación Para controlar todo lo planificado, saber si se están cumpliendo las cosas correctamente (esfuerzos apropiados o no de la cuadrilla), posibles dudas de algunos datos (relevos, etc.) y como forma de ayuda y consulta externa a lo largo de la estación de penitencia, existe una persona que recoge todos los datos del paso de palio a lo largo de toda la estación de penitencia. Las Marchas La organización de las marchas era otra variable que debíamos controlar. Así el esfuerzo se hace más llevadero Así pues, se realizó una planificación de las marchas para los ensayos y otra para la estación de penitencia, en función de los tramos del recorrido y de los relevos de los costaleros, haciendo hincapié en el tiempo de cada una de ellas y en el tiempo que se descansaría entre ellas (cuando el paso está “arriao”). Los descansos Consideramos que dentro de cualquier planificación física y de un entrenamiento, el descanso y la recuperación son primordiales para conseguir óptimos resultados. No podía ser de otra forma, que durante un esfuerzo de tal calibre 31 Motril Cofrade 2.5. El ejemplo práctico de la Semana Santa 2013 Analizando todo lo llevado a cabo hasta ahora, teniendo la Semana Santa 2012 como punto de inflexión y sabiendo qué es lo que hemos mejorado y qué es lo que debemos mejorar, afrontamos el 2013 con nuevos retos y manteniendo lo que ha dado buenos resultados dentro de la cuadrilla de costaleros. Los ensayos como entrenamiento previo a la estación de penitencia, son parte clave e incondicional dentro de una cuadrilla de costaleros y así nos lo han demostrado tanto los costaleros como los datos recogidos. Estos ensayos deben cuidar todo lo comentado anteriormente: la duración, peso por costalero, recuperación y duración de las chicotas. Consideramos que una planificación nos ayuda a mejorar el rendimiento del paso y la salud de nuestros costaleros. Hablamos también de la existencia de un entrenador personal del costalero. En esta Semana Santa, existió una preparación personalizada de la actividad física que debe hacerse previamente al inicio de los ensayos, ajustándose a las características de cada costalero y teniendo en cuenta el esfuerzo que al final desarrolla un costalero dentro de un paso. El costalero, se sentirá mucho más seguro, tanto físicamente como psíquicamente, repercutirá directamente en su salud, previniendo lesiones y mejorando de algún modo, más aspectos para llevar una vida más longeva y de mayor calidad en relación a la salud. Todo ello unido debe trascender en una mejora del paso, donde nuestra cuadrilla de costaleros se sentirá más preparada, el movimiento del mismo será más puro, el peso será más liviano y la recuperación física al terminar cada ensayo y en la correspondiente estación de penitencia, será mucha más rápida y segura. 3. PROSPECTIVA DE FUTURO E n la actualidad seguimos estudiando los datos obtenidos en la estación de penitencia de la madrugá del Viernes Santo de 2013 con el paso de palio de Mª Santísima de las Penas de la Hermandad Franciscana y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Señor en su Sentencia de Úbeda (Jaén) y que los presentamos al lector para que conozca que lo planificado se lleva a cabo y sirve de base para el trabajo de la inminente Cuaresma de 2014. TIEMPOS Y DIVISIÓN DEL TRABAJO Datos Cuaresma 2014 32 • Duración total de la Estación de Penitencia: 5 horas • Nª de chicotás: 32 • Nº de marchas: 28 • Peso del palio: 960 kg • Nª de costaleros: 30 • Peso por costalero: 32 kg • Tiempos totales 2013: • Tiempo total de chicotá: 2 horas y 38 minutos (57%) •Tiempo total arriá: 2 horas y 1 minuto (43%) Con estos tiempos de chicotá podemos afrontar una planificación de los ensayos para la Semana Santa 2014, pensando que la duración de la chicota será entre un 1520% superior al del descanso en cada uno de los ensayos. A partir de aquí, y teniendo en cuenta la división establecida por tramos, exponemos los siguientes datos con los que estamos trabajando para esta Cuaresma. Los datos expuestos ratifican la importancia de la preparación de los ensayos, de la estructura de la planificación y en definitiva la relevancia del trabajo realizado para preparar con éxito la Semana Santa 2014. Motril Cofrade Datos generales 2013 Bibliografía —Albornoz, M., Baena, M. (1998). Aspectos físicos del trabajo del costalero. Prevención de lesiones” En I Jornadas cofradieras “cera y costal”. Córdoba: Hdad. Sagrado Descendimiento. —Albornoz, M. y Suárez, C. (2003). Ergonomía en el trabajo del costalero. En Actas del I Congreso Nacional del Costalero. Las Ciencias de la Salud y de la Actividad Física como fundamento. Córdoba: Diputación de Córdoba. —Altemir, M. (2002). Manual de prevención del costalero. Sevilla: Área de Cultura y Fiestas Mayores del Excmo. Ayto. de Sevilla. —Cañizares, J.M. (2003). Algunas reflexiones sobre la preparación física aplicada a las personas que llevan costal. En Actas del I Congreso Nacional del Costalero. Las Ciencias de la Salud y de la Actividad Física como fundamento. Córdoba: Diputación de Córdoba. —Castellano, M.J. (2003). Recuperación del costalero. En Actas del I Congreso Nacional del Costalero. Las Ciencias de la Salud y de la Actividad Física como fundamento. Córdoba: Diputación de Córdoba. —Escribano, A. (2008). El estudio fisiológico del esfuerzo y alimentación del costalero. Ponencia organizada por la Hermandad de la Esperanza Macarena. (paper). —Gomar, R. (2005). Aspectos físicos en el costalero. En Bajo la trabajadera. Huelva: Imprenta Beltrán. —Guillén, M. y Pérez, J.A. (2000). Determinación del esfuerzo realizado desde el punto de vista físico, por los costaleros/as de la Semana Santa de Córdoba y su posible repercusión en la salud de los jóvenes menores de 25 años. Actas del II congreso Internacional de Educación Física. Educación Física y Salud. (pp. 523-540). Jerez de la Frontera. (Cádiz). —Mellado, F.J. (2003). Los portadores de los pasos en l Semana Santa de Córdoba durante el siglo XX. De los faeneros a los hermanos costaleros. Aproximación a la técnica y entrenamiento. En Actas del I Congreso Nacional del Costalero. Las Cien- cias de la Salud y de la Actividad Física como fundamento. Córdoba: Diputación de Córdoba. —Moreno, J.A. (2003). Planificación y acondicionamiento físico del costalero (I). En Actas del I Congreso Nacional del Costalero. Las Ciencias de la Salud y de la Actividad Física como fundamento. Córdoba: Diputación de Córdoba. —Pardo, V.P. (2005). Algunas características del portador de tronos en Semana Santa de la provincia de Córdoba (España). En Revista Internacional de Medicina y Ciencias del Deporte. Volumen 5, número 17, pp.13-29. Marzo 2005. Edición digital en http://cdeporte.rediris.es/revista /revista17 /artportadores4. htm. Consulta 07/01/2008. —Quesada, C.M. (2005). Fisiología del esfuerzo en el costalero. En Bajo la trabajadera. Huelva: Imprenta Beltrán. —Ramírez, M.J. (2003). Planificación y acondicionamiento físico del costalero (II). En Actas del I Congreso Nacional del Costalero. Las Ciencias de la Salud y de la Actividad Física como fundamento. Córdoba: Diputación de Córdoba. —Rodríguez Asuero, F.M. (2005). Bajo la trabajadera. Huelva: Imprenta Beltrán. —Rodríguez, O. (2001). Consejos básicos de prevención de lesiones para costaleros. www.iespana.es/moronpenitente/principal .htm (visita 15/12/2002) —Sánchez Latorre, D. (2002). La actividad física de los costaleros. Un estudio real. Úbeda (Jaén). Ed.: El Olivo S.L. —Silva de Lima (2006). En www.hoy.es. Consulta el 07/01/2008. —Tirado, Á., Sánchez, MªD., Riego, MªP. y Pardo, V.P. (2003). El perfil del costalero. En Actas del I Congreso Nacional del Costalero. Las Ciencias de la Salud y de la Actividad Física como fundamento. Córdoba: Diputación de Córdoba. —Viso, J.F. (2003). Conclusiones generales. En Actas del I Congreso Nacional del Costalero. Las Ciencias de la Salud y de la Actividad Física como fundamento. Córdoba: Diputación de Córdoba. González-Carrillo de Albornoz AGENCIA DE SEGUROS SL Calle Victoria,3-18600 Motril-Tlf./Fax: 958 824 085 33 34 Motril Cofrade José Ramón López de los Mozos L as fiestas de Carnaval dan paso al tiempo que ocupa la Semana Santa con sus rituales: bendiciones y ceremonias, entre las que destacan, las tradicionales procesiones, que también se hicieron en el mundo clásico. Es decir, la conmemoración de la muerte y resurrección de Jesucristo, que ocupa el tiempo pascual, periodo religioso por excelencia, eclesiástico, festividad sin apenas contenido lúdico, en el que hay una gran participación social y cuyo antecedente podría encontrarse en la Pascua judía. En los siglos XIV y XV este tiempo de dolor comenzaba el sábado de Pasión, anterior al Domingo de Ramos, con procesiones que discurrían en el interior de los templos en los que se instalaba el “monumeLas fiestas de Carnaval dan paso al tiempo que ocupa la Semana Santa con sus rituales: bendiciones y ceremonias, entre las que destacan, las tradicionales procesiones, que también se hicieron en el mundo clásico. Es decir, la conmemoración de la muerte y resurrección de Jesucristo, que ocupa el tiempo pascual, pnto” de Jueves Santo y en los que el Viernes Santo tenía lugar el sermón de la Pasión, que en algunos lugares se completaba con una escenificación de la crucifixión de Cristo y su posterior entierro. Terminaba el Domingo de Resurrección con un nuevo sermón y, según señala el profesor Ladero Quesada, posiblemente también con la teatralización del “misterio” de la caída del sudario blanco que recubría la losa del sepulcro de Cristo, ya abierto y vacío1. Parece ser que las primeras procesiones en la calle vieron la luz, al menos en los países mediterráneos, en el siglo XV, gracias al culto que franciscanos y dominicos profesaron hacia la Vera Cruz y la Sangre de Cristo, respectivamente. El mismo Ladero Quesada, citando a Juan José Capel Sánchez —La vida lúdica en la Murcia bajomedieval 2—, indica que una procesión es un “desfile organizado de personas, de una clara significación religiosa, que marchan con solemnidad y que pretenden manifestar una idea ritual común a todos los participantes. Para poder cumplir con este fin ha de ir presidido por imágenes, reliquias y símbolos relacionados con la entidad objeto de veneración”, modelo este de procesión religiosa que tanto influyó en otro tipo de cortejos: políticos y cívicos. Con la llegada de la Primavera y como recoge el Arcepreste de Hita en su Libro de Buen Amor refiriéndose a la alegría posterior al Domingo de Resurrección, cambiará Motril Cofrade Algunos aspectos de la Semana Santa en la provincia de Guadalajara el sentir popular y surgirán los cortejos que anuncian las numerosas uniones matrimoniales posteriores. Tiempo litúrgico que comienza con el domingo de Cuasimodo, es decir, el segundo domingo de Pascua y que se corresponde con el despertar de la vida latente: Día de Quasimodo, iglesias e altares vi llenos de alegrías, de bodas e cantares: todos avíen gran fiesta, fazíen grandes yantares, andan de boda en boda clérigos e juglares. (Libro de Buen Amor, estrofa 1.315) Festejos que se repetían el lunes y martes siguientes a la Pascua de Pentecostés, siete semanas después de la Resurrección. LA RELIGIOSIDAD EN LA CALLE C omo ya hemos visto, tras los días alegres y bullangueros del Carnaval —días carnales por excelencia— se inicia la Cuaresma con el Miércoles de Ceniza —un recordatorio de que polvo eres y en polvo te has de convertir—, cuya última semana es la Semana Santa. Son estos siete días de recogimiento —¿o lo fueron otrora con mayor notoriedad?— una especie de “libro abierto” con el que enseñar a las gentes poco ilustradas el camino que Cristo, Dios hecho Hombre, tuvo que recorrer para alcanzar el perdón de los pecados cometidos por la Humanidad. Viene, o mejor, venía a ser, un equivalente a las escenas que, en muchas iglesias románicas, sirvieron al hombre iletrado para conocer el Evangelio. Durante la Semana Santa de Guadalajara, los diferentes “pasos” tratan de epatar al creyente que las contempla y lo sitúan, con su teatralidad manierista, en el lugar de aquel Cristo, para que se puedan sentir más directamente sus mismos padecimientos: desde la alegría de la entrada en Jerusalén, acompañado por las gentes que lo aclamaban con palmas y ramos de olivo, actualmente representada por la popular procesión “de la borriquilla”, hasta la nueva alegría que significa el Domingo de Resurrección, recuperado no hace mucho en la Guadalajara capitalina, aunque no en el resto de la provincia donde siempre se ha celebrado de una manera sencilla de todos esperada. 35 Motril Cofrade La procesión de este domingo de gozo sale de la iglesia y se bifurca en dos: una parte, la de los hombres, con Jesús —a veces sustituido por el Niño Jesús “de la bola” o “de Praga”— y otra, la de las mujeres, que acompañan a la Virgen, generalmente una Dolorosa o en su defecto, una Soledad, hasta que ambas procesiones se encuentran, y el Hijo y la Madre —a la que las mujeres cambian su vestido de luto por otro de regocijo— se abrazan, prosiguiendo la procesión, mientras los cánticos mujeriles llenan la mañana soleada y fresca de la recién inaugurada primavera (21 de marzo). Cánticos como estos de Pareja, que transcribimos conservando su grafía original, cuya procesión “del encuentro” y posterior quema del “judas” se declararon Fiesta de Interés Turístico Provincial el pasado año 2013: Venid mujeres piadosas /con ilusión y alegría; / pasearemos triunfante / a la Princesa María. Acercaos compañeras, / acercaros al altar; / que aquí está la Capitana / que venimos a buscar. Coged mozos la bandera, / el estandarte y la cruz; / las mujeres a María / y los hombres a Jesús. Levántate Virgen Pura / de esa mesa de nogal; / que ha resucitado tu Hijo / y los vamos a buscar. Levántate de ahí, Paloma, / relicario cristalino; / no es digno que esté en el suelo, / quien tan alta ya ha subido. Levanta, Paloma blanca, / y marcha en vuelo de amor; / al encuentro de tu Hijo, /que al fin ya resucitó. Tomemos agua bendita, / que es salud del alma y cuerpo / y con ello llenaremos / a María de contento. Ya se levanta la Virgen / ya se levanta la aurora; / ya se levanta la Virgen, / camine la gente toda. Vayan los hombres al lado de Jesús, / su Capitán; / que a la Princesa María / sus hijas escoltarán. Ya sale la Palomita / de su lindo palomar; / ya sale la Palomita / a Jesucristo a buscar. Capitana valerosa, / que del Paraíso sale; / sale en busca de su Hijo / desde el Viernes por la tarde. Va pidiendo una limosna / que dice es razón darle; / si me dais / yo os daré una riqueza más grande. Le busca de templo en templo, / le busca de valle en valle; / y le ha venido a encontrar / en la morada más grande. De que le ví tan pequeño correr / más que el cielo el aire; le pregunté de quien era / me respondió como un ángel. 36 Soy Hijo del Padre Eterno / ya la Virgen es mi madre / y yo me llamo Jesús, / que nací para salvarte. En el Cielo hay un castillo / labrado de maravillas, / que lo labra el Padre Eterno / para la Virgen María. Donde va la Virgen pura / tan triste y tan de mañana; / sale en busca de su Hijo, / que está en espera de un alma. Estas puertas son de pino / y los quicios de nogal; / aquí está la Capitana, / que logramos encontrar. Virgen de la Soledad / no nos preocupa la cera; / que en la casa donde habitas / ha surgido una colmena. La Virgen es la colmena / y Jesucristo el panal; / y los ángeles abejas / que miel vienen a labrar. Virgen de la Soledad / que en tu casa estás metida / con libros de oro en las manos / más de cien hojas tenía. Las unas eran de gracia / y las otras de alegría / y las otras de esperanza / que en Vos pongo Madre mía. Por allí viene Jesús, / aquí traemos su Madre, / hágase la gente a un lado / que desean saludarse. (En este momento comienza a divisarse la imagen de Jesús). Miradle por donde viene / el Redentor de las almas;/ miradle por donde viene, /trae bandera desplegada. ¡Qué bonita está la Virgen / con cinta filigranada! / Se la pusimos las mozas / con amor esta mañana. (Aquí tiene lugar el “encuentro”, se realiza el “saludo” y se unen las andas). De rodillas por la tierra, / de rodillas por el suelo; / hagamos la reverencia / a la Reina de los cielos. De rodillas por el suelo, / de rodillas por la tierra; / a la Reina de los cielos / hagamos la reverencia. Con María de rodillas / ante el Hijo de su Amor; / que ha cumplido la promesa / de su gran resurrección. (Las mujeres quitan el velo de luto a la Virgen y los sustituyen por uno blanco), Quitadle el velo de luto / y ponedle el de color; / cantemos con alegría, / que ha resucitado Dios. Quitadle el manto de luto / y ponedle el de alegría, / que Jesús el Nazareno / se ha encontrado con María (De ahí el nombre de la calle). Regina celi letare / aleluyas han cantado; / Motril Cofrade alegraos Virgen Pura / que tu Hijo ha resucitado3. Oh, qué mañana de Pascua, / Oh, qué mañana de flores; Oh que mañana de Pascua / ha amanecido señores. Oh, qué mañana de Pascua / tan hermosa y tan florida; / hasta las aves del campo /dan las glorias a María. Oh qué mañana de Pascua / sale el sol entre las ramas, del enebro que cubría / a la Virgen Soberana. El Viernes en el sepulcro / María a Jesús dejó; / hoy triunfante de la muerte / en sus brazos le estrechó. El Viernes en el sepulcro María / a Jesús dejó; / hoy triunfante de la muerte / resucitado le vió. Le damos felices pascuas / al señor cura el primero; / nos enseña la doctrina / y nos dice lo que es bueno. Le damos felices pascuas / al alcalde del lugar, / a la señora Justicia / y a todos en general. Ya nos vamos a la iglesia / todo el mundo en procesión; acógenos con tu mano, / Virgen de la Concepción. Oh, qué agrio está el limón; / oh qué dulce la mañana; / oh, que claro sale el sol / la mañanita de pascua. Una pera y un limón / han nacido esta mañana; / bendigamos Dios del Cielo / y la Virgen soberana. Un pajarito ha venido / las aleluyas cantando; / nos ha traído la nueva / que Cristo ha resucitado. Pues Cristo ha resucitado, / pues Cristo resucitó; / aleluyas le cantemos, / aleluyas canto yo. Un pajarito ha venido / y nos ha traído la nueva; / que Cristo ha resucitado, / Creador del Cielo y Tierra. Ese niño chiquitín / más rubio que las candelas / y a su Madre le decimos / que somos pobres doncellas. Repiquen ya las campanas / avance la procesión; / caminemos todos juntos / hasta el templo en oración. (Una vez que la procesión ha llegado a la iglesia se celebra la misa y tras ella, tiene lugar la quema del “judas”)4. Y junto a las anteriores procesiones, algunas otras de gran atractivo como la “de los Armaos” del Viernes Santo seguntino, que indudablemente dejará huella en la mente del espectador cuando en el silencio sepulcral de la noche escuchen la figurada conversación entre Jesús y el portero del edificio (que es el asilo P. Saturnino Sánchez Novoa): ¡Quién es! ¡Jesús el Nazareno, Procesión de los Armaos, Sigüenza (Fotografía: Paula Montívely y Salva Calvo). 37 Motril Cofrade De arriba abajo: Cristo Yacente del Santo Sepulcro (Fotografía: Paula Montívely y Salva Calvo) y en la Semana Santa de 1952. racterísticas, de todos conocidas, como por ejemplo las de Bercianos de Aliste, en tierra zamorana, por sus atractivas vestimentas; en Cartagena y la propia Murcia, por los maravillosos “pasos” de Salcillo, o las de toda Andalucía, por todas sus imágenes de la Virgen, máxima expresión del arte escultórico que, casi siempre, caminan durante toda la noche a ritmo de trompeta, tambor y saeta, como sincera oración10. PROCESIONES DE SEMANA SANTA EN GUADALAJARA el rey de los judíos! ¡Qué pase! 38 Saca el paso la Cofradía de la Vera Cruz y Santo Entierro, que cuenta con más de medio centenar de cofrades de carga, vestidos con coraza y fajín rojo y armados con picas a modo de soldadesca, encargados del Santo Entierro, mientras otro grupo, de riguroso negro, con calzón corto, chaquetilla y faja, acompaña a la Dolorosa5. Gran semejanza con la anterior guarda la procesión “de los Coraceros” de Milmarcos6, aunque no conviene olvidar algunas otras, también llamativas, como las “del Silencio”, que tienen lugar en Albalate de Zorita, El Casar, Tendilla7, Trillo o Yunquera de Henares; la “de los Faroles” de Atienza8, o la del Cristo de la Cruz Acuestas, de Jadraque9. Las procesiones de Guadalajara capital son sencillas y nada, o muy poco, tienen que ver con las de otras zonas, donde se definen por unas señas de identidad propias, ca- L as procesiones que en la actualidad recorren las calles de Guadalajara durante la Semana Santa no son muy antiguas; su historia es breve dado que la mayor parte de las cofradías que se encargan de ellas son posteriores a la pasada Guerra Civil del 36-3911. Anteriormente solo existieron dos que aun siguen vivas: la de la Virgen de la Soledad es la más antigua y siempre se ha dicho que data de 1469, aunque no se conserva documento alguno que lo demuestre, si bien, en su primer Libro de Actas, se hace alusión a una “reconstitución” o vuelta a la actividad de la misma en 1682 y, mucho después, en 1817, tras la ocupación de la ciudad por las tropas francesas durante gran parte de la Guerra de la Independencia; la otra más antigua es la de Nuestra Señora de los Dolores, que viene del siglo XVII. Hoy las cofradías vienen a estar unidas a las distintas iglesias de Guadalajara. Así, relacionadas con la iglesia concatedral de Santa María hay dos: la Cofradía del Cristo Yacente del Santo Sepulcro Motril Cofrade De izquierda a derecha: Nuestra Señora de los Dolores (Fotografía: Paula Montívely y Salva Calvo) y San Juan con la Virgen (Fotografía de Nacho Abascal y Jesús Ropero). fue fundada tras la Guerra Civil como Hermandad de Caballeros Cruzados Excombatientes del Santo Sepulcro. Su imagen, el Yacente, fue realizada por el imaginero Fernando de la Cruz y sus cofrades visten hábito negro y capa roja con la cruz de los caballeros cruzados bordada. No llevan capirote12. La segunda es la de Nuestra Señora de los Dolores, cuyo origen parece encontrarse en la Esclavitud de Nuestra Señora, que como ya hemos señalado, fue fundada en el siglo XVII por grupos artesanos con carácter asistencial. Hasta mediados de los años treinta del siglo pasado su culto consistió, principalmente, en recordar los dolores de Nuestra Señora durante el mes de septiembre13. Su imagen, que es moderna tras haber sido destruida la anterior, sale en la procesión del Silencio vestida de terciopelo negro bordado en oro y sus cofrades con capuchón negro y túnica blanca con los emblemas de la Pasión del Señor. Esta cofradía también se encarga de sacar la imagen del Calvario consistente en una sencilla cruz con las imágenes de San Juan y la Virgen, de notable antigüedad, que se conserva el resto del año en el convento de carmelitas de San José. En la iglesia de San Ginés tiene su sede la Hermandad del Santísimo Cristo del Amor y de la Paz, fundada en 1956 cuyo paso representa a Cristo Muerto en la Cruz coronando un monte de claveles rojos. Sus cofrades visten túnica blanca, capuchón, manguitos y cíngulo rojos —símbolos del amor y de la paz— y desfilan cargando una cruz de madera, los hombres con un crucifijo al cuello y las mujeres con escapulario14. La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno se haya establecida en la iglesia de San Nicolás el Real. Se pudo formar gracias a la concesión papal otorgada por Pío XII, como agregada a la archicofradía de igual nombre de los capuchinos de Madrid. Su imagen, el Nazareno, es la del “Cristo de Medinaceli”, fue tallada en 1946 por Cruz Conde en el momento en que se creó la Esclavitud de Nuestro Padre Jesús y se saca procesionalmente el Viernes Santo, así como el Cristo Crucificado15. Sus cofrades visten túnica y capuchón morados. También radica en San Nicolás la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad, cuya imagen primitiva se custodiaba 39 Motril Cofrade Cristo del Amor y de la Paz (Fotografía: Nacho Abascal y Jesús Ropero). en la ermita de su nombre (al comienzo del Paseo “de las Cruces”) incendiada en el 36. Desde entonces, los treinta y siete hermanos supervivientes impulsaron el crecimiento de la hermandad y de la Asociación de Esclavas de Nuestra Señora de la Soledad, que fue creada en 1859. Su imagen es obra de José Martínez Duches (1941)16. En Santiago Apóstol se ubica la Cofradía de Nuestra Señora la Virgen de la Esperanza (“La Macarena”), cuya creación fue aprobada por el cardenal Plá y Deniel y su imagen, debida a Sixto Alberti, que es una réplica de la “Esperanza Macarena” de Sevilla, fue costeada por el Colegio de Agentes Comerciales de Guadalajara, de la que es Patrona. Comenzó a desfilar todos los miércoles de 1954, hasta 1968 en que, debido a unas obras en la iglesia, dejó de hacerlo, volviendo a cobrar nuevos bríos en 1987, contando con el apoyo de la Cofradía de la Pasión del Señor 17. Durante su procesión, que llegaba hasta la Prisión Central, solía soltarse un preso.Visten capuchón verde, túnica y capa crema y cíngulo verde y oro. 40 En la misma iglesia tiene su sede la Cofradía de la Pasión del Señor, fundada en 1945. Su imagen —Nuestro Padre Jesús con la Cruz a Cuestas— fue encargada al tallista Higueras y pagada mediante suscripción popular18. Tras la crisis de los años setenta, también se constituyó la Cofradía de Esclavas de Nuestra Señora de la Piedad, cuyo paso —que es el único que sacan íntegramente las mujeres— representa a la Virgen con Jesús muerto entre sus brazos, acompañada por dos ángeles. Dicho paso se custodia en el santuario de la Virgen de la Antigua. Sus cofrades visten túnica morada, capuchón blanco (con una cruz bordada en la parte delantera), guantes blancos y cíngulo dorado. Esta misma cofradía saca otro paso más: el del Cristo de la Expiración o de la Agonía, talla del siglo XVII, procedente de la capilla del cementerio. Pero no solo son las procesiones las manifestaciones más destacadas de la Semana Santa alcarreña, que también —desde hace no demasiados años— forman parte de ella las “Pasiones vivientes”. Motril Cofrade PASIONES VIVIENTES Y OTRAS REPRESENTACIONES L as pasiones vivientes, los vía crucis y tantas otras manifestaciones populares tienen como objeto, a través de su “re-presentación”, recordar, padecer, sufrir, “re-vivir” —aunque siempre de una manera aproximada, con el alma y el corazón— en las propias carnes, en las entrañas, aquel auténtico camino pasional que Nuestro Señor Jesucristo, como Hombre, tuvo que soportar hasta su muerte en la cruz para lograr ese otro camino, ascensional, que lo conduciría hasta el Padre. Una forma, la más clarificadora, de enseñar al hombre iletrado de tiempos pasados, por medio de la comparación. De ahí la proliferación que, desde hace unos cuarenta años hasta hoy, han venido alcanzando las “pasiones vivientes” de tantas localidades alcarreñas: Fuentelencina, donde se realiza al atardecer del Jueves Santo; Hiendelaencina, la más antigua de todas, que tiene lugar el Viernes Santo, haga sol o nieve (como ha sucedido en más de una ocasión)19, y Albalate de Zorita, cuyas escenas —puesto que se trata de representaciones estáticas de gran belleza, a modo de fotogramas de los hechos más significativos— llenan el anochecer del Sábado Santo. Otras dos representaciones más se quedaron por el camino, las de Marchamalo y Chiloeches. En Trillo las escenificaciones se hacen a lo largo del Domingo de Ramos, con la Entrada de Jesús en Jerusalén y su aclamación por el pueblo; el Miércoles Santo, con las representaciones de la Última cena, la Oración del huerto, la Traición de Judas, el Prendimiento y el Juicio de Jesús, y el Viernes Santo, con un vía crucis final que recorre las calles del pueblo. Pero estos vía crucis no son los únicos que discurren por las calles de nuestros pueblos. En Atienza, -—donde en la tarde del Jueves Santo tienen lugar los oficios— se rezan y conmemoran los pasos del Calvario el Viernes por la mañana, a los que sigue la adoración de las Santas Espinas en la iglesia de la Santísima Trinidad (la otra fecha en que se adoran es el 6 de mayo), ya que por la tarde sale la procesión del Santo Entierro, más conocida como la “del Silencio”. El Domingo de Pascua, o sea de Resurrección, se escenifica el encuentro de Jesús resucitado con su Madre (para terminar con la tradicional subasta de roscas). En Almonacid de Zorita, el vía crucis del Viernes Santo corre a cargo de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús, que cuenta con la participación de la de Nuestra Señora de los Dolores en la organización de la procesión “del Silencio”. En Mondéjar la procesión y el vía crucis se hacen a las siete de la mañana. La Semana Santa de Budia despierta cada año mayor interés gracias a la participación de los llamados “Soldados de Cristo”, una hermandad recientemente recuperada, Nuestro Padre Jesús Nazareno 41 Motril Cofrade De izquierda a derecha: Virgen de la Soledad (Nacho Abascal, y Jesús Ropero) y Virgen de la Esperanza Macarena (Nacho Abascal) que dejó de existir por los años sesenta (se disolvió en 1962) y cuyos orígenes parecen establecerse en el siglo XV, aunque por el desarrollo de sus actividades, vestimenta y armamento parezca muy posterior. El cometido de esta hermandad es muy amplio: cuatro soldados van a buscar al abad a su casa, para escoltarlo a la iglesia, donde se celebrará la misa del Jueves Santo. El resto de la soldadesca, en dos filas, forma guardia a la entrada del templo mientras los fieles entran. En el presbiterio oyen misa y cuando tiene lugar la Consagración, rinden las lanzas, doblando una rodilla sumisamente. Posteriormente hacen guardia junto al “monumento” y, doce de ellos, a imitación de los Apóstoles, participan en el Lavatorio. Algunas veces han celebrado una representación simbólica del Triunfo de Cristo sobre el Mal, en la que los hermanos forman un círculo en cuyo centro se sitúa el abad, que eleva la Cruz al tiempo que los soldados alzan sus alabardas. El Viernes Santo acompañan también al abad durante las catorce estaciones del vía crucis y en la procesión del Santo Sepulcro son cuatro de ellos los que cargan con la imagen, otro con la cruz (la que actualmente se conserva es una réplica de la original que se supone de hacia 1500 y pesa cerca de setenta kilos), y el resto acompaña en perfecta alineación. 42 El Sábado Santo tiene lugar la Vigilia Pascual con la bendición del agua y el fuego, y el Domingo de Resurrección, después de la misa, en la procesión “del Encuentro” van escoltado la custodia que, bajo palio, es acompañada también por la Justicia y autoridades y se “encuentra” con la procesión que forman las mujeres que arropan a la Virgen, a la que en el momento en que se produce el “encuentro” le quitan el velo negro y, todos juntos, regresar entre cánticos de alegría al templo parroquial 20. Nuestro admirado Antonio Aragonés Subero indica que estos “Soldados de Cristo” comenzaban su cometido el Domingo de Ramos con una merienda en la que establecían el orden de los servicios de Semana Santa, que dedicaban íntegramente a la piedad. Como soldadesca deben acatar las órdenes de un capitán elegido por los propios soldados, cuyo cargo dura de cuatro a ocho años, que les pasa revista de vestimenta y aseo, así como a las de un teniente que nombra el capitán, como ayudante. Parece ser que cuando alguno de estos soldados fallecía, su cargo podía ser heredado por un hijo, aunque este punto no está suficientemente aclarado. En la actualidad visten traje negro de pana con sombrero a juego y, en bandolera, una cinta ancha roja con la imagen del Sagrado Corazón de Jesús y, como arma, una Motril Cofrade pica o alabarda de grandes dimensiones. Relacionada con esta soldadesca el mismo Aragonés trascribió la siguiente letra, perteneciente a una cancioncilla que entonaba la chiquillería en aquella fecha concreta: Tan-ta-ran-tan, el báculo del Obispo El Cura y el Sacristán. Tan-ta.ran-tan, con los Soldados de Cristo La Virgen llorando está. Tan-ta-ran-tan…21. Curiosas son las quemas de los distintos “judas” que tienen lugar en nuestra provincia, generalmente coincidentes con el Domingo de Resurrección. DOMINGO DE RESURRECCIÓN: LOS JUDAS C on la quema, apaleamiento o lapidación, o mediante disparos de escopeta “mueren” los “judas”, muñecos, especie de espantapájaros, de llamativa vestimenta, que los mozos de los pueblos construían para celebrar un tanto carnavalescamente el final de la Semana Santa, generalmente en el momento en que la Virgen y su Hijo se abrazan en la procesión del Domingo de Resurrección. Dicen los que saben que tan estrafalaria figura representa o se inspira en el apóstol traidor que, después de haber vendido a Cristo por treinta dineros, se ahorcó. Es posible que estemos ante una cristianización de un hecho muy anterior en el tiempo, quizá emparentado con antiguos cultos dendrolátricos, en los que el árbol en que se colgó también fue el que propició el Pecado Original. Aunque no hay que olvidar que tampoco deja de estar emparentado con ese otro árbol, el “mayo”, que recuerda el cambio del mundo hiemal a la resurrección de la naturaleza. La muerte del “judas” como representación de la muerte del invierno y el nacimiento de la primavera, dando lugar a ese ciclo del eterno retorno22. Pero a ello hay que añadir algunos aderezos más como, por ejemplo, las claras connotaciones sexuales con que en algunos casos se acompaña: descomunales y elefantiásicos genitales representados por hortalizas: nabos, zanahorias, patatas... Además de carteles soeces colgando del cuello e insultos procaces y obscenidades que gritan los mozos, los quintos de antaño, y en algunos casos las mujeres, como es el caso de Cogolludo23, donde son las encargadas de mantear al “pelele”, pues tal es la denominación que en dicha localidad recibe. “Pelele” que los mozos quieren robarles a toda costa, en cuyo caso va derecho al “pilón” o le cuelgan letreros y atributos impúdicos. Pelele, traidor, Nadie te queremos. Pelele, canalla, Hoy te quemaremos. Arriba: Pasión Viviente de Hiendelaencina (Cartel anunciador 2013) Abajo: Los Soldados de Cristo de Budía (Fotografía: Antonio Martínez) 43 Motril Cofrade Virgen de la Piedad (2011). 44 En muchos lugares se juzga al “judas”, se le condena a muerte y se le ajusticia. Y tras esa exposición a la vergüenza pública por las calles del pueblo, a veces a lomos de una borriquilla (que solía llevarse más palos de la chiquillería que el propio “judas”), como sucedía en Berninches, se leía su testamento (Testamento de Judas)24, como hace años se hacía en Fuentelahiguera —donde hoy se le cuelgan carteles del cuello y se le ahorca— tras arder pendiente de una rama al finalizar la misa mayor25. Son testamentos de poca calidad literaria, pero de gran interés etnográfico, porque en ellos se deja constancia de los pecadillos de andar por casa de los mozos, los quintos, sobre los que recaía el peso de la sociedad rural, que no dejaban de ser también los pecadillos del propio pueblo. Por eso se inmolaba al “judas” en una especie de rito de purificación a través del fuego. Unas llamas que devoran todo lo “malo” del lugar —lo peor desechable— contenido y representado en el “judas” que, tras morir ante la burla general, da lugar —como se ha dicho más arriba— a una nueva vida recién estrenada, hasta que se cumpla otro año, otro nuevo ciclo vital. Estamos por tanto, según algunos, ante un personaje expiatorio, y también, según otros, ante una inversión paródica de la pasión de Cristo. Pero esto ya es mucho decir. En fin, serían muchas las ideas que se han venido desarrollando acerca del significado o del contenido de estos personajes de tela rellenos de paja. El caso es que en la provincia de Guadalajara aun quedan lugares, no muchos por desgracia, donde se mantenía hasta hace poco y, en algunos casos Carretera de Almería, Km 1 • MOTRIL • 958 82 34 13 • 626 48 24 60 • fax 958 82 08 05 En Pinilla nació el Judas, por Vallorente pasó, y por su mala cabeza, en Peralejos murió. Sacecorbo, Peñalva de la Sierra (donde los mozos robaban las ropas tendidas y olvidadas de recoger por las que sus dueñas tenían que pagar un rescate -que se empleaba en una merienda- para poderlas recuperar, porque de lo contrario servirían para vestir el “judas”), Palazuelos, Cifuentes y Cogolludo27. ALGUNOS ASPECTOS ANTROPOLÓGICOS SOBRE LAS PROCESIONES Motril Cofrade todavía se mantiene, la costumbre de confeccionar “judas” y darles su merecido: Ablanque, Bocígano (donde los mozos hacen dos “judas” tras cuya quema persiguen a la vecindad con ramas y palos encendidos), Cifuentes, Cogollor (donde son confeccionados por la chiquillería), Escariche (con sentencias al cuello), Huertahernando, Luzón, Maranchón, Megina, Moranchel (con “judas” y “judesa”), Navalpotro, Pareja, Peralejos de las Truchas (con motivo de la celebración de la romería de la Virgen de Ribagorda), Saelices de la Sal, Santa María del Espino (también con “judas” y “judesa”, a los que se dispara con escopetas), Zaorejas (donde su expresión sexual es máxima) o en Zarzuela de Jadraque26. En Sigüenza, donde cada barrio confecciona su “judas”, compiten en estruendo, ya que entre la paja de su relleno hay multitud de petardos y correpiés que revientan mientras arden. Se sacan el Domingo de Resurrección y, tras su quema, tiene lugar un pantagruélico desayuno a base de sardinas fritas o chocolate, según gustos. Curiosamente, por la fecha, que es el 28 de octubre, recorre las calles de El Cubillo de Uceda un personaje, ahora varios, semejantes al tradicional “judas” que se conoce por el “sansimón”, de gran atractivo. Una fiesta, esta del “judas”, de gran contenido simbólico que habría que mantener en su pureza originaria. Al menos en esa “pureza” que conservaban cuando nuestro recordado amigo y maestro S. García Sanz recopiló seis ejemplos pertenecientes a las serranías de Atienza y Tamajón, a los antiguos partidos de Cifuentes y Sigüenza, a parte de los de Cogolludo y Brihuega y al Señorío de Molina, puesto que ni en la Campiña ni en la Alcarria Baja se celebraban estas manifestaciones folklóricas, algunos de los cuales ya hemos citado: Peralejos de las Truchas A demás de todo lo anterior, la Semana Santa, sus procesiones especialmente, contienen algunos elementos culturales, antropológicos, que pretendemos analizar brevemente. En primer lugar habría que tener en cuenta que el “tiempo” de Semana Santa —es decir, el que media entre el Domingo de Ramos y el de Resurrección— es, o ha sido hasta hace relativamente poco, un “tiempo especial”, casi latente, en el que se suspendían ciertas actividades: las emisoras de radio emitían música sacra o clásica, la comida no era la de todos los días y ciertos comportamientos sociales se suprimían o aminoraban: contar chistes, reírse a carcajadas, permanecer en determinados establecimientos, por ejemplo, en los bares… Igualmente es un periodo en el que quienes permanecen en Guadalajara salen a la calle y la recorren en todas direcciones. Unas veces para cumplir con el rezo de las “siete estaciones” del Jueves Santo y, a través de esos recorridos y también del que siguen las propias procesiones, puede tenerse una idea de la configuración urbana de la ciudad, de la evolución que han ido siguiendo sus calles y barrios a lo largo del tiempo, su progreso o decadencia, puesto que representan su unidad, localizada en el centro, al tiempo que su diversidad, que radica en los distintos barrios. Itinerarios que como señala María Cátedra, a quien seguimos en nuestra exposición, “afirman el poder central”28. Además, en las procesiones desfila un amplio espectro social, desde los niños vestidos de nazareno que acompañan a sus padres, y los jóvenes, sobre todo en los vía 45 Motril Cofrade 46 crucis nocturnos, hasta las mujeres que, dejando a un lado las tradicionales mantillas prefieren vestirse de capuchino, denotando con ello cierta tendencia a la “igualdad” con los hombres. Aspectos sociales que también quedan de manifiesto en algunas procesiones de las que, como grupo, son benefactores o corren a su cargo, por ejemplo: la de la Virgen de la Esperanza, directamente relacionada con los Agentes Comerciales o la de Nuestra Señora de la Piedad que sacan exclusivamente las mujeres, radicadas ambas en la iglesia de Santiago. Pero también queda clara la participación de otros niveles sociales: militares, políticos, clero… Hay patente también una doble vertiente vital, pues la muerte y la alegría se suceden en este tiempo de acusada religiosidad. Cristo padece y sufre hasta morir, con lo que las gentes lloran y sufren con Él cargando cruces pesadas, arrastrando cadenas, llevando los pies descalzos, lacerándose el cuerpo con cilicios, etc., pero después resucita y aquellas lágrimas de dolor se convierten en verdadera explosión de alegría como demuestran tantas procesiones “del Encuentro”, donde lo masculino —los hombres que acompañan a Jesús— y lo femenino —las mujeres que van con María— se unen tras el abrazo de Madre e Hijo y tras cambiarle a la Virgen su vestido de luto por otro que denota alegría. Se vuelve al tiempo cotidiano: se ríe, se canta, se bebe vino en las tabernas y la música varía su temática y ya es de todo tipo. Las tinieblas se rasgan y nace la luz. Mientras que en la naturaleza, esa de la que todos participamos, muere el invierno y nace la primavera. Un re-nacimiento cíclico que aparece tras la anterior purificación. Pero como en toda manifestación humana hay también periodos de mayor participación, de mayor impulso a la Semana Santa, y otros, en cambio, más laicizados, en que la “redención” por el dolor se sustituye por esa otra “redención” (entre comillas, según María Cátedra) por el turismo, pues no en vano son muchas las “semanas santas” que han alcanzado la declaración de Interés Turístico Regional. Finalmente podríamos hablar de la importancia de las procesiones como formas de “peregrinaje”, contempladas desde un doble punto de vista: como recorrido físico entre un lugar y otro, con lo que ello puede entrañar de rapidez o lentitud, de mayor o menor dificultad o de más o menos dolor (si se llevan cadenas o pesadas cruces), o vistas como “recorrido” religioso interior. Es decir, lo tangible terrenal y/o lo inmaterial y espiritual. A veces ambos recorridos se aúnan y el camino en la tierra sirve para lograr esa elevación espiritual que acerca a Dios al “peregrino”. En fin, serían muchos los aspectos que podrían estudiarse en una procesión, pero sirvan estas notas para que cada lector añada de su cosecha las que estime más oportunas y complete su propio abanico de ideas. 1 LADERO QUESADA, Miguel Ángel, Las fiestas en la cultura medieval, Barcelona, Random House Mondadori, S. A., 2004, p. 49. 2 Murcia, 2000. 3 Regina coeli, laetare, alleluia... Es el himno de felicitación que se canta a la Virgen por la resurrección de su hijo. Sustituye al Angelus durante el tiempo pascual. 4 Varias canciones de este tipo pueden encontrarse en LIZARAZU DE MESA, María Asunción, Cancionero Popular Tradicional de Guadalajara, Guadalajara, Diputación de Guadalajara y Caja de Guadalajara. Obra Cultural, 1995, III tomos. 5) ORTEGO GIL, Pedro, “La Cofradía del Santo Sepulcro en Sigüenza”, Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 25 (1993), pp. 9-82. Idem. Historia de la Cofradía de la Vera Cruz de Sigüenza, Madrid, Bornova, 2008. 6 MIGUEL HERNÁNDEZ, José María, Milmarcos. Crónica de la Villa, Getafe, El Autor, 1993. 7 CASADO ROBLEDO, María Jesús, “Rituales de Cuaresma y Semana Santa en Tendilla (El ayer y el hoy de la Cuaresma y la Semana Santa en la villa de Tendilla)”, Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 41 (2009), pp. 147-157. 8 GISMERA VELASCO, Tomás, “La Virgen de los Dolores de Atienza y su Rosario de Faroles”, Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 37 (2005), pp. 385-399. 9 BRIS GALLEGO, José María, El libro de Jadraque, Guadalajara, El Autor/Aache, 2010, pp. 114-126; DÍEZ DÍAZ, Teresa, “El Cristo de la Cruz Acuestas de Jadraque”, XII Encuentro de Historiadores del Valle del Henares. Alcalá de Henares 25-28 Noviembre 2010. Libro de Actas, Alcalá de Henares, Institución de Estudios Complutenses, Diputación de Guadalajara y Centro de Estudios Seguntinos, 2010, pp. 741-756. 10 SÁNCHEZ, María Ángeles, Fiestas populares. España Día a día, 2.ª ed., Madrid, Maeva, 1998. 11 LÓPEZ ESCAMILLA, Carmen, “Cofradías y Hermandades en la ciudad de Guadalajara”, Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 27 (1995), pp. 241-260; OLIVIER LÓPEZ MERLO, Felipe M.ª, “La Semana Santa en Guadalajara y su provincia”, Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 20 (1991, 4.º), pp. 101-110. 12 “Reseña histórica. Cofradía del Cristo Yacente del Santo Sepulcro”, Semana Santa Guadalajara 2000, Guadalajara, Ayuntamiento de Guadalajara y Junta de Cofradías, 2000. (Programa Oficial) web: www.cristoyacentegu.com 13 “Breve reseña histórica de la Cofradía de Ntra. Sra. de los Dolores”, Semana Santa Guadalajara 2009, Guadalajara, Ayuntamiento de Guadalajara y Junta de Cofradías, 2009 (Programa Oficial). www.vsoledadguada.es 14 MARTÍNEZ FERNÁNDEZ, Miguel Ángel, Amor y Paz. Cincuenta años de Hermandad, Guadalajara, Hermandad del Santísi- mo Cristo del Amor y de la Paz, 2012. 15 LÓPEZ DE LOS MOZOS, José Ramón, Cofradía Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno (Iglesias de San Nicolás el Real). Crónica de 1946 a 2006. Notas acerca de su fundación y evolución hasta el momento actual, Guadalajara, Cofradía Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno, 2006 (LX Aniversario de la fundación de la Cofradía). 16 “Breve reseña histórica de la imagen de Nuestra Señora de la Soledad”, Semana Santa Guadalajara 1999, Guadalajara, Ayuntamiento de Guadalajara y Junta de Cofradías, 1999. 17 “Ilustre y fervorosa Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Ntro. Padre Jesús de la Salud y Mª Stma. de la Esperanza Macarena”, Semana Santa Guadalajara 2003, Guadalajara, Ayuntamiento de Guadalajara y Junta de Cofradías, 2003 (Programa Oficial). 18 “Breve reseña histórica de la Cofradía de la Pasión del Señor”, Semana Santa Guadalajara 2011, Guadalajara, Ayuntamiento de Guadalajara y Junta de Cofradías, 2011 (Programa Oficial), www.cofradialapasionguadalajara.es 19 VACAS MORENO, Pedro y VACAS GÓMEZ, Merche, Pasión Viviente de Hiendelaencina, Guadalajara, Ayuntamiento de Hiendelaencina, 202. 20 “La Hermandad de los Soldados de Cristo de Budia”, Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 34 (2002), pp. 179-192. 21 ARAGONÉS SUBERO, Antonio, Danzas, rondas y música popular de Guadalajara, 2.ª ed., Guadalajara, Institución Provincial de Cultura “Marqués de Santillana”. Diputación de Guadalajara, 1986, p. 205. 22 BRISSET MARTÍN, Demetrio E., “Imagen y símbolo en el personaje ritual de Judas”, Gazeta de Antropología, 2000, 16, artículo 16. http:/hdl.handle.net/10481/7500 23 PÉREZ ARRIBAS, Juan Luis, Cogolludo, su historia, arte y costumbres, Guadalajara, El Autor/Aache, 1999, p. 391 (“El pelele”). 24 LÓPEZ DE LOS MOZOS, José Ramón, “La sentencia del ahornado (Berninches)”, Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 17 (1991, 1.º), pp. 103-106. 25 LÓPEZ DE LOS MOZOS, José Ramón, “Dos ejemplos de censura popular en Fuentelahiguera de Albatages: El Testamento de Semana Santa”, Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 16 (1990, 4.º), pp. 49-78. 26 LÓPEZ DE LOS MOZOS, José Ramón, Guadalajara, Fiesta y Tradición, Guadalajara, Nueva Alcarria, 2005, pp. 164-181. 27 GARCÍA SANZ, Sinforiano, “La quema del Judas en la provincia de Guadalajara”, Revista de Dialectología y Tradiciones Populares, Tomo IV, (Madrid, C.S.I.C., 1948), pp. 619-625. 28 CÁTEDRA TOMÁS, María, “Símbolos y ritos de paso”, en FERRERO I GANDIA, Raquel (coord.), Conversaciones antropológicas, Valencia, Museu Valencià d’Etnologia (Diputació de València) y Universitat de València, 2013, pp. 51-53. Motril Cofrade Notas 47 48 Motril Cofrade Motril Cofrade Notas históricas de la Cofradía de los Apóstoles de doña Mencia Antonio Cantero Muñoz E l presente trabajo tiene por objeto reflejar los datos más relevantes, sobre la presencia de las figuras bíblicas de los Apóstoles, en las celebraciones pasionistas de la localidad cordobesa de Doña Mencía. Y hemos de tener presente que su Semana Santa, siempre se ha caracterizado con la presencia de distintas figuras bíblicas con sus martirios y rostrillos en los desfiles procesionales, pues uno de los rasgos que la han identificado a lo largo de los siglos han sido las escenificaciones de la Pasión, en las que su presencia es inexcusable. La primera cuestión que debemos plantear es desde cuando tenemos certeza de su existencia. Podemos afirmar que desde mediados del siglo XVII1. Esta afirmación se basa que desde esa fecha está acreditada la presencia de los Evangelistas, y si tenemos en cuenta que Apóstoles y Evangelistas formaba parte de una misa cuadrilla, de las trece que componían la cofradía del Nazareno durante el siglo XIX, podemos deducir que la presencia de Evangelistas, presupone la coetánea de otras figuras bíblicas como la de los Apóstoles. Y además del desfile procesional en la cofradía del Nazareno, participaban en el Sermón del Paso, donde se escenificaba todo el Misterios de la Redención, con especial referencia al Sacrificio de Isaac2. En este momento no disponemos de la documentación originaria de la cofradía de Jesús Nazareno fechada a partir de 1711, que no se vio afectada por el incendio de la parroquia en 1932, al estar custodiada por la familiar Vergara, de la que actualmente desconocemos su paradero, pero que contiene importantes datos referentes a las figuras bíblicas de los Apóstoles durante el siglo XVIII y primera mitad del XIX3. Es importante un testimonio fechado en 1882, donde el párroco don José Delgado Monroy describe de forma un tanto sintética como era la cofradía de Jesús Nazareno, que estaba estructura en 13 cuadrillas , y una de las cuales estaba formada por figuras bíblicas, entre las que se incluían los Apóstoles, Evangelistas, Virtudes y soldados romanos4. De lo expuesto hasta ahora, es fácil deducir que frente a la normativa dictada por los titulares de la silla de Osio desde mediados del siglo XVIII, que prohibía la presencia de figuras bíblicas en las celebraciones pasionistas, no tuvo aplicación en Doña Mencía. Las razones que lo explican son tres fundamentalmente: 1.-La singularidad del convento parroquia de Nuestra Señora de Consolación hasta el año 1835, en que tuvo lugar la exclaustración de los dominicos. 2.-Desde principios del Siglo XIX hasta 1882 la cofradía del Nazareno, y por tanto las figuras bíblicas que formaban parte de la misma, estuvo dirigida por la familia Muñoz Reinoso, cáciques locales que muchas veces también ostentaban los cargos más importantes en el Ayuntamiento. Este hecho, unido a la distancia que existía con Córdoba, permitió el mantenimiento de tradicones más seculares sorteando esas normas. 3.-A partir del siglo XIX, las cofradías y hermandades y asociaciones relacionadas con ellas, como serían las “corporaciones” de figuras bíblicas, van a ser una de las propuestas de la Iglesia, como alternativa de solidaridad cristiana frente al movimiento obrero o partidos políticos laicos o anticlericales5. Además en los momentos en que la sociedad se “descristianiza” y se vuelve anticlerical (Sexenio Revolucionario 1868-1874, Trienio Bolchevique 1918-1921 o Segunda República 1931-1936) las autoridades eclesiásticas potencian todo tipo de manifestaciones de religiosidad popular, con la intencionalidad de que la gente vuelva a asistir masivamente a los religiosos, siendo lo “popular” el camino más fácil para conseguir “la recristianización” de la sociedad. Disponemos de un elocuente testimonio documental, en concreto el Libro de Actas de la Cuadrilla de los Apóstoles, que nos permite tener una idea aproximada de como era su funcionamiento interno, que pienso sería parecido en las demás cuadrillas que formaban la cofradía de Jesús Nazareno, y nos hace saber de su participación en distintos actos a lo largo de la Semana Santa6. El Libro de Actas señala que el 12 de abril de 1877, se establecen las condiciones que han de cumplirse para forma parte de esta cuadrilla. Destaca la obligación de salir en las procesiones y la distinción entre apóstoles y los pretendientes, que sustituían a los primeros cuando fuera preciso, debiendo estar las ropas siempre disponibles para quienes participaban en los desfiles procesionales7. 49 Motril Cofrade Viernes Santo de 1961. La obligación de pagar las misas por los cuadrilleros difuntos, responde al contexto histórico del momento, pues por esas fechas los modelos de gestión pública no se hacen cargo de las necesidades más básicas de asistencia social. Incluso cuando fue suspendida la cofradía de Jesús Nazareno por fray Ceferino González en 1879, siguieron funcionando las cuadrillas con ese fin: casa de Dn Domingo Arjona, donde a la sazón estaban reunidos más de cuarenta hermanos para formar las cuentas y liquidación de los gastos ocurridos durante el año por razón de entierros, cuya costumbre seguía todavía no obstante estar disuelta la Cofradía. Lo expuesto explica la regulación detallada de la anterior cuestión, conforme a las condiciones “que constan ante un Juzgado Municipal para ayudar a la función de difuntos cuarquiera (sic) de los hermanos que pertenezcan a dicho Libro a fabor de dicha compañía, que en ella caben los Apóstoles, ayudantes, trompeteros, resadores de el año presente de 1880”: –Condición Primera: Al fallecer un hermano de dicha Compañía, siendo anterior dicho fallecimiento al 29 de abril o sea día de San Pedro Mártir, hay derecho forzoso Lavatorio. al Apóstol San Pedro cada hermano la cantidad de cuatro reales; y el hermano que no satisfaga dicha cantidad para el día treinta de dicho mes será expulsada de dicha Cofradía y no tendrá derecho a colocarse en sitio alguno que forme en la fila de compañeros. –Condición Segunda: Si algún hermano llegara a fallecer desde el día Viernes Santo hasta el día San Pedro Mártir, no tendrá derecho de pedir el Apóstol San Pedro hasta el Domingo de Pascua de Resurrección del año venidero; y así mismo seguirá esta base consecutivamente para los demás años posteriores a éste; este derecho que se insinúa en esta condición es el de pedir pago alguno a los hermanos existentes en dicha compañía –Condición tercera: Los derechos o pagos que el Apóstol San Pedro reciba de los hermanos existentes por algún fallecimiento, tendrá obligación precisa de entregarlos a la esposa o herederos forzosos del finado. –Condición cuarta: El hermano que durante las procesiones llegar a salir a ellas embriagado, el primer ayudante Trifón Muñoz o en su defecto cualquiera que el delegue, tendrá derecho a expulsarlo de la procesión, y que se coloque en su sitio, el que le pertenezca por escala rigurosa. Y para ello tiene por obligación salir en todas las funciones el primer SERVICIO TÉCNICO OFICIAL 50 958 60 40 60 • C/ Ernesto Mira, 3 • MOTRIL • [email protected] Motril Cofrade Mañana de Viernes Santo. 51 Motril Cofrade pretendiente con uniforme nuevo con las insignias, y a falta orgullosa de dicho hermano será expulsado de la cofradía La referencia de que las condiciones constan ante el Juzgado Municipal y el que al final del acta se hace constar que el hermano mayor de la cofradía de Jesús Nazareno es don Francisco Muñoz Reinoso, responde a su interés a que se refleje ese dato, pues por entonces disputada el cargo de hermano mayor al marqués de la Paniega8. Las condiciones anteriores vuelven a regular las misas de ánima de los cuadrilleros difuntos y las cuotas a pagar, y reflejan la importancia que en Doña Mencía siempre han tenido las fiestas patronales en honor de San Pedro Mártir de Verona, por ser el 29 de abril el día que servía de referencia para comprobar el cumplimiento de las anteriores reglas9. Lo estipulado en la quinta condición, refleja que en las festividades religiosas de Semana Santa la dimensión festiva y lúdica que nada tenía que ver con lo religioso, y que servían de válvula de escape en la rígida sociedad de la época. Ese divorcio entre lo religioso y profano se refleja en el oficio remitido por el párroco al obispo y que está fechado el 24 de abril de 1881, que informa sobre el cumplimiento pascual, que solo alcanzó ese año a 200 personas, número muy escaso si tenemos presente que la cofradía de Jesús Nazareno estaba formada por ese mismo número de personas10. Esta misma idea se refleja en la comunicación remitida a la cuadrilla de los Apóstoles por el mismo párroco el 22 de abril de 1889, y que reitera la idea expuesta. Entonces se encomendó a Francisco Santana Tapia que cuidara de que los Apóstoles, ayudantes, rezadores y trompeteros Desayuno del Viernes Santo, después de la Procesión de Jesús (1961). 52 Motril Cofrade En el monumento. Viernes Santo, detrás de Jesús (Fotografía: Vicente Torres). cumplieran con su obligación de confesar y comulgar en la mañana del Jueves Santo, cuestión que solo podría ser excusada en caso de enfermedad o estar fuera de la localidad, pues en caso contrario dejarían de serlo perdiendo todos sus derechos11. Un dato destacable es que formaban parte de esta cuadrilla los pregoneros, que con su canto narraban de forma didáctica una escena de la Pasión representada por las figuras bíblicas, siendo acompañados por los trompeteros, que como dice Gregorio Sánchez Mohedano nos describe Juan Valera en su novela Juanita la Larga12: Cuando los Evangelistas van escribiendo en unas tablillas lo que pasa y unos judíos tunantes vienen por detrás haciendo muchas muecas y contorsiones y les roban los estilos. Los evangelistas, resignados y tristes, abren entonces los brazos y se ponen en cruz. Las trompetas resuenan otra vez para dar el pasillo por terminado. de la cofradía de Jesús Nazareno, tras el conflicto suscitado entre el hermano mayor Francisco Muñoz Reinoso y el marqués de la Paniega: El 9 de marzo de 1885 se reunió la cuadrilla en casa de Domingo Arjona Mesa, adoptándose una serie de decisiones entre las que se incluye jubilar a Manuel Sánchez Vera y Mateo Gómez Pérez-Vico, pero no solo por la edad de ambos, sino también por oponerse a la nueva constitución Ygualmente convinieron que se había de respetar a cada uno de ellos en el derecho de ocupar los puestos del Apostolado conforme su respectiva antigüedad, según en el orden que se colocaran a continuación de la presente acta. Asimismo convinieron que el hermano que le falte en los días de Semana Santa a cualquiera cofrade de esta cuadrilla que la componen los apóstoles, resadores, ayudantes y trompeteros quedara expulsado de esta honrada cuadrilla como igualmente si le falta a cualquiera cofrade sea de la cuadrilla que fuese sufrirá igual perjuicio de expulsión. También convienen que los resadores estarán numerados por la antigüedad que les corresponda y cada uno de estos entraran por su orden numérico a echar la negación e años consecutivos en la inteligencia que si cualquiera que le corresponda el año de su turno no se presenta a la hora competente de ejecutar esta operación o se lo cediera a otro se entenderá que no volverá a llegarle hasta que le toque otra vez por turno a no ser por enfermedad que le impide el poder ocuparse de ellos. El primer numero de los referidos resadores éste está a cargo el 958 821 026 Carretera de Almería, Km 1 18600 MOTRIL (Granada) www.hidauto.es • [email protected] 53 Motril Cofrade Mañana de Viernes Santo (Fotografía: Vicente Torres). dirigir los cantos en la carrera de las procesiones o cuando salgan de cada de los hermanos mayores o suban al Calvario, y si se necesitan dos coros los compañeros obedecerán su mandato y ninguno podrá negarse a hacerlo y si se negase quedará incurso en las reglas anteriores que llevamos convenidas; y los cantos se llevarán también por orden de números en la forma de la negación, entendiéndose que cuando el primero ceda el canto a favor de otro lo será al segundo este al tercero y así sucesivamente, respetando siempre al derecho al primero con respecto a la vendición Del mismo modo los ayudantes estarán obligados a obedecer al primero en sus mandatos como los resadores; teniendo también la facultad de la bendición sin interrupción de ninguna clase, con la circunstancia que Manuel Jiménez será el preferido como primero por convenio unánime de todos sus compañeros y de los demás que compone las cofradías que como tal lo han nombrado. Que con respecto a los Apóstoles han de salir y asistir a todas las Procesiones del Jueves y Viernes Santo los doce que corresponden; y si alguno no le conviniere quedará obligado a prestar su ropa al pretendiente que le corresponda; y por lo que hace al que se jubile estará obligado a vender el credo y diadema al pretendiente que valla a ocupar su sitio, cuyo precio será de siete reales También se conviene que al trompetero se le ha de abonar a su familia por su fallecimiento la misma cuota que a los demás sin pagar por ello ninguna cantidad de los que los demás ingresen; obligándose a tocar la trompeta siempre que sea necesario por costumbres antiguas como siempre se viene haciendo, o sea en la noche del Miércoles, en los día de Jueves y Viernes Santo y demás procesiones que ocurran, así como cuando fallezca alguno de los hermanos que componen esta cofradía; y si en algún caso no pudiera o estuviera ausente tendrá que poner otro en su lugar para que haga sus veces. 6€ 8,50€ PLATOS COMBINADOS MENÚ DIARIO Plaza Vega y Mar (junto a Pabellón de Deportes) MOTRIL • 958 602 873 54 Restaurante • Cafetería • Cervecería • Comidas de empresa • Copas • Heladería • Pizzería • Cumpleaños Conforme a las anteriores condiciones y del examen de otros testimonios recogidos en el libro de actas, resulta que era habitual la subida a la ermita del Calvario el Miércoles Santo. Una de las razones que lo explica deriva del hecho de que Domingo Arjona, que desempeño el cargo de cuadrillero de los Apóstoles, y había sido mayordomo de la ermita entre 1859 a 187913. En los años sucesivos, los Apóstoles participaban en la procesión del Cristo de la Columna, Jesús Nazareno y Santo Sepulcro, y se continuaban representado escenas de la Pasión, en la que intervenía los Apóstoles14. También queda constancia de la presencia de los Apóstoles en los desfiles procesionales a comienzos del siglo XX, como nos hace saber el diario El Defensor de Córdoba en su edición de 9 de abril de 1915, al describir el orden seguido por la procesión de Jesús Nazareno: Motril Cofrade Ygualmente se ha deliberado que todos los hermanos que en lo sucesivo entren a incorporarse a esta Cofradía han de abonar diez reales como cuota de entrada y por cada uno que fallezca cuatro reales; y el que así no lo cumpliere no será acreedor a la antigüedad ni tendrá derecho a exigir cantidad alguna por su óbito; entendiéndose que ocuparan sus números respectivos por el orden de las fechas en que se verifiquen el pago de su entrada todo lo cual ha sido convenido por unanimidad de todos los cofrades. A las seis se organiza la procesión del modo siguiente: guión de Jesús, San Juan, María Magdalena, soldados romanos, pasionarios, Jesús Nazareno, Dimas y Gestas, Apóstoles, nazarenos penitentes, la Santa Verónica, Virgen de los Dolores, Clero, Ayuntamiento, banda municipal y muchos devoto. El incendio de la parroquia de Nuestra Señora de Consolación el 14 de septiembre de 1932, supuso un duro quebranto para las manifestaciones de religiosidad popular en Doña Mencía. Sin embargo, pronto tuvo lugar el renacer Jueves Santo, ante el monumento (Vicente Torres). 55 Motril Cofrade del movimiento cofrade, que se iba a articular sobre tres pivotes fundamentales: el patronazgo de las familias de más señalada posición social con las imágenes de la Virgen de los Dolores y Nuestro Padre Jesús Nazareno; grupos humanos unidos en la devoción a imágenes, como el de socios del Casino al Santo Sepulcro, y otro también numeroso en torno a la nueva imagen del Cristo de la Expiración; por último tres esfuerzos personales, Manuel Ortiz Alférez fomentando el culto a San Juan Evangelista, Luis Amores Lucena, con una nueva imagen del título de la Columna, por último Lorenzo Cantero Urbano que volvió a dar vida a las figuras bíblicas de los Apóstoles. Al finalizar la Guerra Civil, se intentó reorganizar la antigua cuadrilla de Apóstoles como una cofradía independiente, pero en 1940 no salieron más que cuatro o cinco apóstoles y en años sucesivos ocurrió igual. Gracias al esfuerzo y tesón de Lorenzo Cantero Urbano, en razón del cumplimiento de una promesa por curación de una grave enfermedad que sufría su esposa, a partir 1951 salió completa aunque ya no fueran acompañados por los evangelistas, y desempeñó hasta su fallecimiento en 1996 el cargo de hermano mayor, dándole un marcado carácter familiar15. Por esa época habían dejado de participar en unas antiguas ceremonias, como nos hacía saber su hermano mayor: En la noche del Jueves Santo los Apóstoles buscaban afanosamente a Jesús. Después de recorrer las calles del pueblo entraban en la iglesia donde le hallaban humillado y escarnecido. Entonces, muy compungidos por los sufrimientos de su Maestro salían a la plaza y se abrazaban emocionados. Disponemos de un elocuente testimonio fechado el 30 de agosto de 1957, relativo a la visita ad límina de la parroquia de Nuestra Señora de Consolación el 30 de agosto de 1957, que nos hacen saber de las cofradías que existían en la localidad, entre la que incluye a la de los Apóstoles, y por tanto sin formar parte del Nazareno16: Existen en la Parroquia y feligresía asociaciones religiosas, Corazón de Jesús, Hijas de María, Nuestra Señora de la Fe, de la Medalla Milagrosa, de la Virgen de Fátima, María Auxi- liadora, Cristo de la Expiración, San Juan Evangelista. Hay además las siguientes Cofradías = Nuestro Padre Jesús Nazareno, Apóstoles y Evangelistas, de la Virgen de los Dolores y Santo Sepulcro y Jesús Amarrado a la Columna y Conferencias de San Vicente [...] Las asociaciones religiosas se instruyen en los ejercicios cuaresmales y confiesan y comulgan el Jueves Santo. Desde entonces han participado en la procesión del Jueves Santo, acompañando al Cristo de la Columna y a la Virgen de los Dolores, y en la madrugada del Viernes Santo con Nuestro Padre Jesús Nazareno, dejándolo de hacer con el Santo Sepulcro. En la actualidad también acompaña a la cofradía de Nuestro Padre Jesús en su oración en el Huerto de los Olivos desde su fundación en 1997, y participa en el acto del Prendimiento que tiene lugar al final de esa procesión, en la que el Apostol San Pedro corta la oreja a la figura bíblica de Malco, mientras se canta el pregón que narra esa escena17. En el año 2000 celebró el cincuentenario de su fundación con los siguientes actos: mesa redonda que analizó el origen de esta cofradía, así como la existencia de otras similares en las localidades cordobesas de Baena y Puente Genil; exposición de hábitos, martirios, manuscritos y fotografías de la cofradía; por último una charla que explicó la Pasión de Jesucristo desde un punto de vista médico. Hasta el año 2002 esta cofradía desfilaba junto a la imagen del Cristo de la Columna, pero desde el año 2003 lo hace dentro del tramo que ocupa la cofradía de Nuestra Señora de los Dolores conforme a un acuerdo fechado el 5 de abril del 200318. En todas las procesiones en las que participa la cofradía de los Apóstoles, todos los mencianos evocamos nostálgicamente a Lorenzo Cantero Urbano, que forma parte de la memoria histórica de la Semana Santa de Doña Mencía, el cual supo trasmitir como nadie a toda su familia, y especialmente a todos sus hijos, ese buen hacer semanasantero, pues con su esfuerzo y tesón dio esplendor en unos momentos difíciles a las figuras bíblicas de los Doce Apóstoles, que todos los años, con esos rostros llenos de hieratismo y seriedad dan el máximo esplendor a todos los desfiles procesionales en los que participan. edades 56 1 CANTERO MUÑOZ A.: “Religiosidad Popular y Semana Santa en la Iglesia Dominicana de Doña Mencía, Siglos XVIXVII”. Doña Mencía 2003 pp 179-180. Se trata del testamento de Francisco García, otorgado el 12 de diciembre de 1675, donde manifiesta que es Evangelista: “mando a la cofradía de Jesus Naçareno desta Villa los recaudos con los que salgo el biernes Santo al ser ebangelista, que son un rrostro y un atril, porque asi es mi boluntad, lo qual se le entregue luego que yo fallezca al Hermano Mayor que fuere desta Cofradía, menos una túnica morada que es con la que me an de enterrar”. 2 CANTERO MUÑOZ. A.: “Historia de la Semana Santa de Doña Mencía 1800-2005” Doña Mencia 2008, pp.255-270. Sermón de Pasión predicado en 1863 por el pbro Eduardo Muñoz Reynoso. He transcrito de forma íntegra el Sermón que desde antaño se predicaba en el interior de la Iglesia Dominicana antes de la procesión, donde se narraba el Misterio de la Redención. Además de las figuras bíblicas, participaban varias imágenes con San Juan, la Magdalena, y la Verónica. Esta última imagen era Santa Juana de Aza y en Semana Santa se convertía en la Verónica. Este acto se ha conocido como “Sermón de la Madruga”, y existió hasta la década de los años 60 del siglo XX. 3 En el periódico local que se editó en Doña Mencía con el título de Guía, correspondiente al año 1959, se refleja como un miembro de la familia Vergara exhibe la citada documentación a quien le formula una serie de preguntas sobre la cofradía de Jesús Nazareno. El que redacta este trabajo, vio ese libro con un dato relativo a un menciano que por entonces representaba la figura bíblica de San Pedro Apóstol. 4 Archivo General Obispado Córdoba. Despacho Ordinario. Doña Mencia. 1882: “La Cofradía en este último periodo estaba distribuida en Cuadrillas, y cada cuadrillero era depositario de un fondo común de los individuos que la componían, mediante a que cada uno daba una cuota señalada todos los años con el objeto de costearle el entierro el hermano que falleciese. Ninguno otro tenía intervención en estos fondos más que los mismos interesados que anualmente pedían cuentas a sus respectivos cuadrilleros formando su liquidación. En este estado venía funcionando la Cofradía, asistiendo a las procesiones de Semana Santa contando con un número de más de doscientos individuos, en su mayor parte llamados hermanos de Cruz, por llevar túnica morada y cruz al hombro. Había un número de doce además figurando el Apostolado llevando cada cual el instrumento que representaba su martirio. También había cuatro destinados a salir figurando los Evangelistas, otros siete las Virtudes y finalmente una escolta de soldados romanos”. 5 AGUDO TORRICO, J.: Hermandades y tiempos rituales: viejos y nuevos significados. En Religión y Cultura. Tomo 1, pá- gina 366. 6 Archivo Cofradía de los Apóstoles. Libro de Actas. ARANDA DONCEL, J.: La Pasión de Córdoba pp. 162 y 170-171. 7 1ª.- Los Apóstoles están obligados a salir todos los años en la Hermandad. 2º.-El Apóstol que haga tres faltas sin motivo alguno que acredite su imposibilidad de asistir a la hermandad será expulsado de ella. 3º.-En el caso de faltar alguno de dichos Apóstoles esta obligado a reemplazarlo uno de los pretendientes por escala rigurosa. 4ª.-Ningún Apóstol por no salir un año podrá disponer de su vestuario para nadie, a no ser para el pretendiente que le corresponda. 5ª.-Están obligados los referidos Apóstoles a pagar las misas cuando corresponda, quedando imposible de este cargo el que hace cabeza de ellos llamado San Pedro. 8 CANTERO MUÑOZ, A.: “Historia de la Semana Santa de Doña Mencía 1800-2005” Córdoba 2008 pp. 103-152. 9 CANTERO MUÑOZ, A.: San Pedro Mártir Patrón de Doña Mencía. Baena 2005 pp. 251-252. 10 Archivo General Obispado Córdoba. Despacho Ordinario. Doña Mencía. 1881.”Nota de las personas que han cumplido en el presente año con el precepto pascual, asi como tambien de ciertos datos referentes a las Ymagenes que han salido en las procesiones de la Semana Santa. Con respecto a o primero paso a decir a VE Rma que poco más de doscientas personas han cumplido con el referido precepto en la forma siguiente. Hombres veinte y seis incluso cuatro individuos del Ayuntamiento y sirvientes de la Parroquia; sobre siento setenta mugeres, inclusas las dos Congregaciones de la Purísima Concepción y Sagrado Corazón de Jesús; y además de los niños y niñas que han estado capaces de las Escuelas”. 11 “En virtud a que las procesiones de Semana Santa son actos religiosos por los cuales se manifiesta el gran misterio de la Pasión y muerte de Nuestro Divino Salvador, es evidente que todos los que toman parte en la manifestación de estos actos deber ser verdaderamente católicos y cumplir como tales los deberes de buen cristiano con la mayor exactitud y puntualidad. Por tanto para que los que toman parte en las dichas Procesiones como Apóstoles, ayudantes, rezadores, cumplan con los deberes anteriormente indicados, queda hecho cargo el cuadrillero Francisco Santana Tapia de hacer cumplir a los individuos de su cuadrilla la obligación de confesar y comulgar en la mañana del Jueves Santo, el cual advertirá todos que si no existe una causa verdaderamente justa sería estar enfermo o fuera de la población, dejará de cumplirse con lo preceptuado se considera como que ha hecho dimisión de su cargo y que renuncia voluntariamente a cuantos derechos tengan anteriormente adquiridos. a fin de que se cumpla con precepto de la Santa Madre y como rector y cura propio de la Parroquia doy Motril Cofrade Notas 57 Motril Cofrade 58 esta disposición tomada de las que el Exmo e Yltmo Sor Obispo me tiene encomendadas”. 12 SANCHEZ MOHEDANO, G.: Don Juan Valera y Doña Mencía. Córdoba 2001 (2ª edición) p. 117. 13 AGOC. DO. DM. 1885. Carta remitida por Domingo Arjona al obispo solicitando se le nombrase nuevamente mayordomo de la ermita, estando fechada el 13 de mayo de 1885: “Domingo Arjona Mesa, natural y vecino de la Villa de D ª Mencía, con la debida consideración y respeto, expone a VEY: que por espacio de veinte años, desde 1859 hasta el año 1879, estuvo cuidando de la Hermita de Nuestro Padre Jesús del Calvario, extramuros de esta referida Villa, y a su costa reedifico dicha Hermita que estaba arruinada, con el mobiliario que hoy en ella existe, y también algunas cosas de las que hoy no existen, como es el esterado; además compuso el camino para ir a ella, e hizo otros varios gastos para el culto de la misma como se comprueba por el documento que se acompaña. Ahora bien, todos estos sacrificios los hizo con sumo gusto por redundar en beneficio de la Yglesia y del culto religioso; pero ocurrió que, por ignorancia de buena fe jamás había solicitado de la autoridad eclesiástica un título que en caso dado diera acreditar que obraba como Mayordomo de la referida Hermita; y aprovechando uno de sus convecinos la ocasión de estar ausente, el exponente en cumplimiento del cargo que ostenta, solicito del muy digno antecesor de VEY que se le concediera el título de Mayordomo, nombramiento que obtuvo sin dificultad porque, tanto el Excmo y Rvdo. Señor Obispo como el Señor Cura de esta Parroquia ignoraban los antecedentes que lleva hecho mérito. En vista de lo sucedido, se resigno a no interponer reclamación alguna por escrito, conformándose con que esta había sido la voluntad de Dios; pero hoy no puede menos que dirigirse a VEY movido por el digusto que experimenta al ver los deterioros que se observan tanto en el edificio como en el mobiliario plantas adyecentes a dicha Hermita; por cuanto su devoción no se ha debilitado. Suplica a VEY, se digne concederle el nombramiento de Mayordomo de repetida Hermita, gracia que espero obtener de la rectitud y bondad de VEY cuya vida Dios guarde muchos años. 14 JIMENEZ URBANO, J.: El Bermejino nº 89 abril 1987. Se trata de una magnífica entrevista realizada al pregonero Antonio Buitrago Jimenez. : “Cuando llegábamos a la Iglesia nos parábamos todos en el pórtico, entrando San Pedro, y el hermano mayor de los cuadrilleros daba con el báculo unos golpecitos en el suelo. San Pedro se abría de brazos y en donde quiera que el otro daba un golpecito, acudía a él, en busca de ver que era aquello, hasta que llegaban a la nave en que estaba Jesús Nazareno; entonces, el del báculo daba un golpe seco en el suelo y San Pedro se abría de brazos como pasmado de haberlo visto y se daba media vuelta y se iba muy ligero, muy ligero, para la calle, y se iban todos como que ya habían encontrado al Señor. Y durante este acto ¿se decían versos o pregones? No. Todo eso era callando. Después, cuando los Apóstoles veían al Señor, iban desfilando delante de Él, y sentándose en los escaños. Luego entraban los hermanos de cruz, con la cruz a cuestas y el capillo tapado, y el del báculo, cada vez que pasaba un hermano le daba con el cordón en la cara. Y así sucesivamente iban desfilando los hermanos de cruz, pocos o muchos o los que fueran, y se sentaban, y entonces era cuando el cura se subía al púlpito y decía el Sermón de Muerte”. 15 C. SANCHEZ, R. ROLDAN, R. URBANO: La Semana Santa menciana a través de los hermanos mayores de las cofradías. En Guía marzo 1959. 16 AGOC. DO. DM. 1957. 17 Cuadrilla de Pregoneros de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, María Sta de la Amargura y Hermanos de Cruz. Libro de Pregones de la Semana Santa de Doña Mencía. Doña Mencía 2010. p. 73: “Un sayoncillo brioso que pariente era de Malco, a quien San Pedro en el huerto una oreja le ha cortado”. 18 Archivo Cofradía Virgen de los Dolores: “Reunidos de una parte don Manuel Lorenzo Cantero Caballero, en nombre y representación de la hermandad de los Apóstoles, de la que es su hermano mayor. De otra parte don Ángel Francisco Urbano Rosa, en nombre y representación de la cofradía de Ntra. Sra de los Dolores, de la que es su hermano mayor exponen: I Que desde la Semana Santa del presente año, la hermandad de los Apóstoles hará su estación de penitencia, en la tarde-noche de cada Jueves Santo, dentro del tramo procesional correspondiente a la cofradía de Ntra. Sra de los Dolores. II Que la hermandad de los Apóstoles se ubicará, dentro de las filas de Ntra. Sra de los Dolores, delante de las mujeres que acompañan a la Virgen ataviadas con mantillas y detrás e los hermanos de filas, cuando la anchura de la calle lo permita en fila de a dos. III Que únicamente por motivos justificados y con la previa aprobación de las juntas de gobierno de ambas cofradías se podrá variar el lugar de ubicación indicado para la hermandad de los Apóstoles, permaneciendo en todo caso integrados dentro del tramo procesional de la cofradía de Ntra. Sra de los Dolores”. Elisa Álvarez Ocete M otrileña por muchas generaciones familiares, al menos paternas, y maestra de profesión a la que muchos paisanos le deben ser buenos profesionales en diversas facetas: arquitectos, ingenieros, médicos, abogados… maestros. Cursó sus estudios en la escuela de las RR.MM. Nazarenas, siendo su maestra la muy recordada Sta. María Terrón Feixas, en el Colegio Stmo. Rosario, posteriormente en la Academia de “Doña Trini” y por último en el Instituto Julio Rodríguez, perteneciendo a la primera promoción de bachillerato. En todos los centros donde estudió fue buena alumna, compañera y amiga. Se quedó huérfana a los cuatro años por el triste accidente fortuitamente ocurrido en la Fábrica Azucarera Ntra. Srta. del Pilar dode trabajaba su padre don José Álvarez Esparrell. Su madre embarazada tuvo un hijo póstumo “Pepito”. En unión de su familia paterna deciden que se traslade a Sevilla a casa de su tía Elisa (q.e.p.d) donde es acogida como una hija más a estudiar Magisterio en la Normal de Sevilla. Fue la mejor y más feliz época de su vida, que siempre recordó con felicidad. De su estancia allí vino su sabiduría sobre la Semana Santa. Fue miembro de la Junta de Gobierno de la Archicofradía del Dulce Nombre de Jesús, Santa Vera Cruz y Virgen del Valle de Motril, en la que prestó ayuda incondicional siempre que le fue requerida, con tanta ilusión y empeño como demostraba en su pasión cofrade de poder procesionar, primero al Cristo y luego a la Virgen. Su primer trabajo como Maestra fue en el Colegio San Agustín. Consiguió la oposiciones y trabajó en la Escuela Hogar hasta que le dieron su propiedad definitiva en Guadiaro (Cádiz). Allí se integró perfectamente y fue muy querida por su labor educativa, llegando a desempeñar los cargos de Jefa de Estudios y Directora, obteniendo el voto de Gracia y siendo muy querida como compañera y por alumnos y padres de alumnos. Posteriormente consiguió en el concurso de traslados que le adjudicaran plaza en el Colegio Virgen de la Cabeza de Motril, impartiendo enseñanza en los distintos niveles de la EGB en Lengua Española y Francés, luego en la LOGSE en los distintos ciclos. Muy querida y apreciada pos su compañeros, alumnos, madres y padres y por todas sus amistades y cofrades; con nuestro carácter motrileño de algunos algo vocingleros pero con tanta preocupación y cariño por sus alumnos que es de agradecer. Asistió a algunos cursos en la escuela de Artes y Oficios; era tan polifacética que podía conversar de todos los Motril Cofrade Recordando a unos amigos temas y tan “buena maestra” hasta en las labores del hogar. Su vida fue una continua dedicación al cuidado de su abuela materna, primero, y a su madre, de la que nunca se separó, incluso sacrificando todos sus ratos de ocio. Se que estás en el Cielo pero no dudes que te necesitamos y te extrañamos por la excelente persona que fuiste en todas las facetas humanas. Gregorio Ruiz Chamorro (1) E l día 14 de mayo de 2013 fallecía en nuestra ciudad Gregorio Ruiz Chamorro, conocido comerciante y agente jubilado de banca al que la historia hoy en día reconoce su gran trayectoria en pro de la cultura local. Por esta causa, en el mes de agosto, la corporación municipal le brindaba su particular homenaje al otorgar su nombre al parque que se ubica en la Huerta de San Francisco, y hoy, de igual modo, queremos recordar su figura por estos hechos y por esa especial vinculación que tuvo durante los últimos años de su vida con la hermandad del Dulce Nombre de Jesús y Vera Cruz. Curiosamente no se le 59 Motril Cofrade 60 ha conocido ligazón con ninguna cofradía motrileña y su única participación externa en un acto de fe lo verificaba todos los años el día del Corpus Christi llevando sobre sus hombros a Jesús Sacramentado. En cualquier caso hay que reconocer que fue un gran valedor de la Revista Motril Cofrade y parte activa de los actos que se promovían en su nombre durante los sucesivos cursos cofrades. Hombre activo, dialogante y emprendedor, Gregorio Ruiz ha sido una figura clave de la historia local desde el mismo momento en que llegó a Motril en 1952 para desempeñar su puesto en la agencia del Banco Español de Crédito. Precisamente aquí, en una ciudad provinciana anclada en el pasado, echó sus raíces y constituyó su familia; fue Motril su segunda patria y, como bien llegó a decir, se reconocía como un motrileño nacido en Guadix. Tras su llegada una de las cosas que más le llamó la atención fue la falta de cultura de una sociedad que basaba su categoría en el número de marjales que poseían las familias. Fue ésta una tarea que se planteó cambiar y a fe que puso las bases para ello junto a un numeroso grupo de motrileños surgidos de los cursillos de cristiandad. Entre otros colaboraron en esta empresa personas de la talla de Francisco Álvarez de Cienfuegos, Pepe Martín, Antonio Montero Barranco o José Carrasco, entre otros, siendo uno de sus primeros proyectos la construcción de viviendas para personas necesitadas. A comienzos de los años sesenta Gregorio Ruiz fue el principal valedor de la campaña “Motrileños, contamos contigo” que se llevó a cabo a través de Radio Juventud y el Semanario El Faro y que en sus bases planteaba remover las conciencias de los motrileños para solucionar los graves problemas que acuciaban a numerosas familias de la localidad. El activo grupo de personas que formaban por aquel entonces Acción Católica fundan en 1966 la Asociación para Fomento de la Cultura, institución clave que presidieron conjuntamente el Rector de la Universidad Central de Madrid, D. Enrique Gutiérrez Ríos y el granadino Julio Rodríguez Martínez. La Asociación dio pronto sus frutos promoviendo la construcción del Instituto Laboral, llamado en aquel entonces “de los pobres”, y la creación del Colegio Menor y el Centro de la Universidad Nacional a Distancia, entre otras actuaciones. Gregorio Ruiz Chamorro desarrolló paralelamente una gran labor en instituciones de todo tipo, entre ellas la Asociación de Padres de Alumnos del Colegio Santísimo Rosario y la del Instituto Julio Rodríguez, reconocida ésta última como Asociación Modélica de España. Igualmente, junto a otro grupo de padres, deciden crear una institución que salvaguarde y vele por el futuro de jóvenes con discapacidad. Las bases para su constitución la encuentran en el legado testamentario de un preclaro bienhechor motrileño, Luis Pastor, que será el germen de la fundación Aprosmo. Entre otras funciones Gregorio Ruiz desempeñó a lo largo de su vida la gerencia de la Asociación para Fomento de la Cultura, la del Semanario El Faro y la presidencia de la Comunidad de Antiguos Riegos de la vega, labor que ha compaginado sabiamente con la promoción de actividades culturales, siempre llevando a gala las siglas de la institución que ayudó a fundar. A nivel personal hay que destacar que está en posesión de la Cruz de Alfonso X el Antonio Sánchez García(2) C orría el año 2000, comienzo de un nuevo milenio, con todo lo que eso significó para todos y que suponía dar un paso importante no sólo en el calendario sino también en nuestras propias vidas. Yo, un joven sacerdote de 27 años, venido de tierras cercanas, soy natural de Salobreña, iniciaba su andadura pastoral en unos pueblos pequeños pero encantadores de la Alpujarra baja granadina y cercanos a la costa: Gualchos, Lújar y Rubite. Comenzar algo nuevo siempre es un reto; unido a la expectación y cierto temor por enfrentarme a lo que será, a partir de ese momento, el proyecto y la misión de mi vida: Anunciar el amor y la cercanía de Dios a los hombres que el Señor fuera poniendo en mi camino. En esta tarea el sacerdote sabe que no puede caminar solo. El mismo Jesucristo al comienzo de su ministerio público quiso ser ayudado por hombres de su tiempo para que, estando con Él, luego fueran a anunciar el Evangelio. Hombres como eran unieron sus vidas a Dios para que movidos por la gracia del Espíritu Santo llevaran esta Buena Noticia a todas las gentes. A mí también el Señor me fue regalando personas que me acompañaran en mis primeros pasos como sacerdote. Una de esas personas fue Antonio Sánchez. Desde entonces se empezó a fraguar una relación de amistad que ha permanecido inalterable hasta su muerte y que sigue continuando con su esposa Mari. Porque no se puede hablar de Antonio sin su esposa ni de ella sin Motril Cofrade Sabio, concedida por el Ministerio de Educación y Ciencia por su dedicación a la promoción de actividades culturales. No queremos concluir la trayectoria vital de Gregorio Ruiz Chamorro sin traer a la palestra las consideraciones que sobre su propia existencia dejaba por escrito en la entrevista que el veterano periodista Francisco Fermín le dedicó en el semanario El Faro del día 3 de agosto de 1991. Tras analizar las circunstancias de la ciudad y su proyección futura, Gregorio Ruiz Chamorro señalaba que desde su llegada a Motril había una serie de actuaciones que le habían colmado de felicidad. La primera de ellas y mas primordial fue el constituir su familia y el haber podido dar formación a sus seis hijos. En segundo lugar su participación en la construcción del Instituto Julio Rodríguez, el primero que tuvo la ciudad, y la constitución de la Asociación para Fomento de la Cultura. Finalmente hacía resaltar la fundación de Aprosmo, proyectos todos que tuvieron “significado especial en momentos de mi vida pero que han colmado de satisfacciones mis inquietudes sociales y culturales”. Toda una vida plena, pues, que la ciudad ha sabido agradecerle públicamente con el homenaje que hará perpetuar su nombre para la posteridad. Antonio. Los dos han formado un tándem que han sido un ejemplo de fidelidad, compromiso y entrega a Dios y a su Iglesia. Cada uno con sus dones y carismas han enriquecido la labor del otro y todo en beneficio de aquellos que más lo han necesitado. La primera riqueza que quisiera destacar en Antonio ha sido su paternidad ejercida con los niños de APROSMO. Ellos no han podido ser padres biológicos pero el Señor los ha bendecido con una familia mayor a la que poder atender y cuidar. Los niños que acuden a este centro no han sido un trabajo al que asistía para obtener un salario con el poder vivir sino la razón por la que cada mañana se levantaba y luchaba para hacer felices a cada uno de ellos. Recuerdo la cantidad de fotos que me enseñaba y en las que aparecía lavándolos, cambiándoles el pañal, dándoles de comer o simplemente pasando un buen rato con ellos. Se divertía con sus cosas, se reía de sus comentarios, siempre tan ingeniosos, como niños inocentes y limpios de corazón, o de cómo se preocupaba por el ambiente de sus propias familias. En esto es donde se percibe que el trabajo no es solamente de 8 a 14 h, sino que es una vocación y una vocación por los más pequeños. Y no solamente los niños han sido una pasión para él sino que también ha sabido ganarse el afecto, la cercanía y el respeto de los jóvenes. Muchas son las convivencias en las que ha participado y me ha ayudado a mí y a otros sacerdotes en su otra pasión que es la cocina. Un campamento tiene mucha complejidad. No se trata simplemente 61 Motril Cofrade 62 de llevarte a unos chavales unos días de descanso para desconectar de la rutina diaria y pasártelo bien. Se necesita un equipo de colaboradores serios y eficaces que echen una mano en diversas tareas logísticas para que todo se lleve a cabo con normalidad. Y una de esas tareas es la comida que hay que prepara para alimentar a cada uno de ellos. Si uno está bien alimentado todo funciona mejor y todo lo que tiene que llevar adelante se hace con más alegría. Recuerdo la cantidad de veces que los chavales, y nosotros mismos, nos pasábamos por la cocina atraídos por el agradable olor de todo lo que preparaba. Él se sacrificaba unas horas de baño para meterse entre fogones y así poder tener lista la comida a su tiempo. Cada día era un menú de cinco estrellas a pie de playa. Todos y cada uno de los chavales han sabido agradecerle, de una u otra manera, esta dedicación a ellos en sus días de vacaciones y todos han sentido la tristeza de su pérdida. Justamente su muerte se produjo en vísperas de participar en el campamento que la parroquia de la Virgen de las Angustias preparaba, como cada verano, en su casa de Calahonda. Su otra pasión, además de los chavales y la cocina, ha sido la imaginería. El arte siempre ha sido un medio para encontrarse con Dios. Las grandes obras de todos los tiempos han sido una preciosa catequesis que ha ayudado a mucha gente a vivir el misterio de Cristo, de la Santísima Virgen y de los Santos. Antonio era un enamorado de las piezas de arte bien hechas y que mostraran el realismo y dramatismo de la pasión, muerte y resurrección de Nuestro Señor Jesucristo y de María su Madre. Pero también de cualquier aspecto de la vida de Cristo. De todos es conocido con que esmero montaba el Belén por Navidades, el embellecimiento con que ayudaba a vestir las imágenes de Semana Santa de diversos templos en los que ha colaborado o los altares para el día del Corpus. En todas las parroquias a las que he servido él siempre ha ayudado en hacer posible que esta belleza que trasmiten las imágenes se ponga de manifiesto. Invitó a un joven que, junto con su esposa, renovaron el rostrillo y las vestiduras de la Virgen de los Dolores de Gualchos y de Moclín respectivamente. Mejoró la presencia de algunas imágenes de Cristo crucificado y de lo poco que quedaba del rostro original de San Antón, también en la villa de Moclín, y que hoy día se puede contemplar en la sacristía de dicha parroquia. Sin olvidar el altar que le pedí que preparara para el día del Corpus en la parroquia de Nª Sª de los Remedios de Puerto Lope y que ayudó a motivar y mejorar, año tras año, este tipo de expresiones de fe. Pero sin duda alguna lo que más hay que subrayar de Antonio es su generosidad para dar y para darse. Colaboraba en todo lo que se le pedía y él podía servir de ayuda. Inestimable y silenciosa ha sido su colaboración en el ropero de Cáritas de la parroquia de la Encarnación. Antes he dicho que un sacerdote no podría llevar adelante su labor si no fuera por la colaboración de su grey. El libro de los hechos de los apóstoles nos recuerdan como nacieron los diáconos: “Es necesario elegir a varios de nuestros hermanos que se dediquen a la caridad para que nosotros podamos dedicarnos a la predicación del Evangelio”. La caridad nace del encentro con Jesucristo. Sin Éste, la caridad, se convierte en pura filantropía, que está muy bien pero que para que sea verdadera caridad tiene que nacer del amor de Dios que ama a cada ser humano por lo que es: su hijo. Antonio esto lo sabía muy bien y siempre ha estado cerca de los más necesitados. Su cercanía y simpatía eran su carta de presentación allí donde estaba y su primera obra de caridad. Luego le acompañaba todo aquello que estaba en su mano y que hacía real y concreto ese amor aprendido del mismo Señor en los ratos de oración que dedicaba en su vida y que al mismo tiempo alimentaba con la Eucaristía. El rezo del Santo Rosario y su amor a la Virgen también era otra fuente de inspiración y de fortaleza en su entrega a los demás. El Señor lo llamó para Él el día que la Iglesia celebra a Nª Sª la Virgen del Carmen y a orillas del mar lo mismo que lo hizo con sus apóstoles. Seguro que San Pedro y compañía se lo estarán pasando pipa con sus chistes que siempre tenía alguno para contar y que hacía de nuestros encuentros una jornada inolvidable. Desde aquí quiero agradecer a la Cofradía y, en especial a su Hermano Mayor, esta oportunidad que se me ha dado para rendirle este humilde y sencillo homenaje a este gran hombre y que ha sido un regalo de Dios para mi vida y mi ministerio. Mi querido Antonio, nos vemos en el cielo. Motril Cofrade Francisco Guindos Clares (3) Joaquín Robles Pérez E ecordamos a Joaquín Robles Pérez, cuya muerte al final de una larga enfermedad nos dejó a sus amigos con una tristeza que dificulta aceptar esta terrible partida física y que provocó un espacio vacío en todos los que le tratamos personalmente y disfrutamos con su trato humano, entrañable, sincero, humilde y profundamente cristiano. Pero, como él mismo podría decirnos de estar aún entre nosotros, no hay que temer la muerte del cuerpo sino a la del alma; porque al encuentro de la muerte vamos todos, pero en cada uno ha de seguir martillando día a día el valor de una vida útil, noble y de servicio al prójimo por amor a Dios. El Papa Francisco, en una de sus homilías de los miércoles, invitó a los fieles a “no tener miedo de ser santos” ya que todos están “llamados a la santidad”, que no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en dejar que Dios obre en la vida de cada uno con su Espíritu y en confiar en su acción que lleva a vivir en la caridad y a realizar todo con alegría y humildad. “Déjense contagiar por la santidad de Dios”, sintetizó el Papa. Precisamente este fue el afán y el ejemplo de nuestro querido amigo Joaquín; su lucha diaria por ser santo sacando adelante a su familia, en su trabajo y en el trato con los que hemos tenido la suerte de ser sus amigos. Descanse en paz. l 23 de Agosto pasado nos dejaba de manera inesperada D. Francisco (Paco) Guindos como cariñosamente le llamábamos sus compañeros y amigos. Aunque natural de Fiñana (Almería) siempre se consideró motrileño de adopción y comprometido con los problemas de esta tierra. Llegó a Motril el año 1969 y durante más de treinta años ejerció como Maestro en el C.P. Cardenal Belluga de esta localidad donde conoció de primera mano todas las vicisitudes por las que tuvo que atravesar este Centro. Realmente fue MAESTRO en muchas de sus múltiples facetas. Compañero y amigo de sus amigos, siempre estuvo en el lugar y en el momento que se le necesitaba, como: Catequista, Cofrade, Maestro, Compañero… y no digamos como Esposo, Padre y Abuelo. Creyente convencido de su fe, nunca la ocultó y daba testimonio de ella con valentía, sin estridencias, sólo cuando era necesario, y lo mismo en el aspecto social y humano. Como Maestro, fue un excelente profesional muy querido por sus alumnos. De trato exquisito, exigía de ellos el mismo respeto que él mismo les dispensaba. Para quienes tuvimos la suerte de compartir profesión y amistad con él, permanecerá siempre en nuestro recuerdo. Muy involucrado en nuestra Semana Santa. Fue Hermano Mayor de la Archicofradía de la Santa Vera Cruz, Mª Santísima del Valle y El Dulce Nombre de Jesús, colaborando activamente en el mayor esplendor de nuestra Semana Mayor. Dale Señor el descanso eterno y brille para él la Luz Perpetua. Descanse en paz Amén. Por la Misericordia de Dios el alma de D. Francisco Guindos Clares descanse en paz. Amén Por la Misericordia de Dios el alma de D. Francisco Guindos Clares descanse en paz. Amén R Notas (1) Domingo A. López Fernández (2) Francisco José Mingorance Rodríguez (3) José Antonio Palomares Sánchez 63 Motril Cofrade Las procesiones vistas por un impresionista: Darío de Regoyos María Jesús Carmona Arroyo Emilio Reina Giménez D arío de Regoyos, Ribadesella1857-Barcelona1913. Estudió en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Desde su juventud rechazó los formalismos que le limitasen su libre manera de entender el arte y por ello se sintió atraído por el Impresionismo, corriente de moda, surgida en Francia a finales del siglo XIX. Le interesó sobre todo el paisaje realista al aire libre y su gran “maestro” fué la Naturaleza, pero en sus cuadros siempre encontramos personas o animales. Al pintar al aire libre, sus cuadros son de formato pequeño. El uso de la espátula, por la rapidez que le ofrece al pintar le permitía captar impresiones instantaneas de la naturaleza, como las salidas y puestas de Sol, los nocturnos, los días nublados, los vendavales ,la atmósfera en general, etc ya que los efectos de la luz que era lo que le interesaba. A lo largo de su vida usó diferentes técnicas: el puntillismo, el aguafuerte, xilografía, acuarela, pastel Tuvo una época en la que su pintura reflejaba temas costumbristas de la España de su tiempo, como las corridas de toros, motivos religiosos, insistiendo mas adelante en su aspecto mas tenebrista dando lugar a su colección de cuadros para el libro titulado “La España negra” de la que aquí incluimos “Ávila. Procesión de San Vicente”, “Madrugada del Viernes Santo en Orduña” y “Viernes Santo en Castilla”. 64